Disclaimer: Harry Potter pertenece a Rowling y Final Fantasy pertenece a Squaresoft... no son mías.. lo único mío es la historia y la idea original para este fic...
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Autor: Reiko Noriko®
Serie: Ff8 y Harry Potter.
Título: My own blood
Capitulo: Köln the way to my family
Pareja: Seifer x Squall , Draco x Harry
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- Nos vemos Draco... cuídate.. Y no te alejes de la mansión... puedes solo pasar en escoba por los terrenos... nos comunicaremos pronto... - Lucius se despidió de su hijo y tomó un puñado de polvos Flu.
- Adiós padre... - Draco miró como las llamas verdes ocultaban a su padre... su mamá había pasado antes
- Draco... - la voz de su padrino le llegó de pronto... - volveremos el día en que tengas que ir al callejón Diagon... escucha.. solo si tienes algo muy urgente que decirnos comunícate con nosotros.. estaremos en la mansión de Francia... y además... te prometo que después veremos esa poción que dices esta bien??.- le sonrió a su padrino... estaba un poco decepcionado porque estaría solo...
- Sí...
- Y Draco... no salgas de la mansión no me importa que tan grande seas... es peligroso...
- No lo haré...
- Muy bien... cuídate mucho Draco... - Severus sonrió y se dejó envolver por las llamas verdes.- Mansión Malfoy de Francia.- y desapareció entre las llamas.
Draco dio vuelta... estaba solo, en la gran mansión. Y peor aún ya era demasiado tarde como para dar un paseo en escoba, se dirigió a su habitación, después de todo tenía que dormir, miró su cama con algo de pesar, nunca le había agradado estar solo. - bueno mañana será otro día.
***
El sol le daba en la cara y abrió los ojos poco a poco era su primer día solo en la mansión. No había nada divertido que hacer... tampoco podía decirle a ninguno de sus "amigos" que vinieran.... ohh decepción... no quería ver a ninguno de ellos... -si tan solo pudiera ver a Potter.....- se reprimió por estar pensando en eso... que demonios le pasaba??Potter??? Un chico?? No... no debía... pero... nah! Que más daba... había aceptado ya hace bastante tiempo que le gustaban los chicos... y Potter... bueno... eso era algo que no le había dicho a nadie..
Suspiró le habían dicho que no se alejara de los limites de la mansión..... pero también le habían dicho que no se comunicarían hasta dentro de unas semanas... la pregunta ahora era ¿debería obedecer las ordenes de su padre y padrino y quedarse en casa como el niño bueno que era? O... ¿ debería ir a visitar a Potter hasta su casa, teniendo muy en cuenta de que ellos nunca lo sabrían?
Al parecer la respuesta era lógica......
Miró sus ropas, no podía ir así, debería cambiarse por ropas Muggles... recordó que tenía algunas y abrió su enorme armario... quería estar seguro de que podía usarlas... nunca se las había probado..
Después de mucho rato se dio cuenta de que le venían bien... ahora... como combinar esos pantalones con las camisas?? Veamos... el negro combina con todo... y él no quería llamar mucho la atención... así que escogió una camisa gris de manga larga... - muy bien! Listo! Murmuró Draco viéndose en el espejo ahora... ¿ como demonios llegó hasta allá?? Podría ir por medio de polvos flu...- pero recordaba que una vez había escuchado que muchos de los muggles no tenían chimenea...-.Podría ir en escoba... - y entonces recordó el alboroto que ocurrió en segundo porque habían visto volar a Wesley y a Potter en un auto... - o bien podría ir al callejón Diagón... si... ahí me dirán como puedo llegar hasta allá!.- Draco se miró una vez más... estaba perfecto... se veía bien... no podía negarlo... bajó de nuevo hasta el despacho de su padre... tomó un puñado de polvos flu... - callejón Diagón! - y de inmediato se vio envuelto en una serie de colores... había viajado tanto en polvos flu que incluso ya estaba acostumbrado... llegó hasta el callejón Diagón... limpió poco su ropa, recordaba que la conexión con el mundo muggle se encontraba en el caldero chorreante... - oh genial Draco! Sales de tu casa y sin dinero!- se dio un golpe en la cabeza con la mano, giró sobre sus talones y se dirigió a Gringorts busco entre sus ropas la pequeña llave, perdería un poco de tiempo pero no importaba.
- Buenas tardes caballero... puedo servirle en algo?.- un gnomo lo saludó en la entrada.
- Si, cámara 456 por favor aquí está la llave.
- Muy bien... sígame... - después de anotar algo en un enorme libro Draco se adentró en los oscuros pasadizos... Oh... como odiaba esos malditos carros! Lo mareaban demasiado con tantas vueltas que daban.- aquí estamos... caballero ahora haga su retiro... - Draco lo miró, abrió su cámara, estaba repleta de galeones, casi hasta el techo, tomó una pequeña cantidad (aproximadamente unos 100) y los colocó en una bolsa.
- Muy bien... ahora debo ir a cambiarlos por dinero muggle, llévame hasta el centro de cambio por favor. - se adentró una vez más en el pequeño carro y se dejó conducir hasta la superficie, ahí el gnomo lo guió hasta un cuarto que arriba tenía el nombre de "cambios de moneda".
- Su destino caballero.- el gnomo le dejó solo, Draco entro, necesitaba dinero muggle.
- Buenas tardes, cambio para dinero muggle?
- Si, quiero cambiar esto.- Draco arrojó la bolsa en el escritorio del gnomo que lo atendía este solo contó los galeones y le devolvió a Draco un fajo de billetes de diferentes nominaciones.
- Aquí tiene... gracias por su visita.- Draco inclinó la cabeza y salió del banco... ahora si tenia que encontrar el modo de llegar hasta la casa de Potter
Se dirigió hasta el caldero chorreante, esperaba que no muchos lo vieran o tendría que dar una muy buena explicación a su padre...
Ya en el lugar pasó sin siquiera saludar al barman y fue directo hasta la pared de atrás, tomó su varita y dio unos cuantos golpes en el ladrillo que se veía más gastado. Por unos instantes se abrió un agujero negro, y Draco pasó a través de él. Miró a su alrededor, ya no estaba aquella calle llena de brujos, ahora estaba en una transitada calle llena de muggles
- Muy bien... y ahora que hago?- Recordaba que una vez escuchó una conversación en la que Potter les mencionaba a esa sangre sucia y a el pobretón que la estación de ............ ¿cómo había dicho? -Vad... Dad... Pag...Pad.. Padding. Si eso era! Paddington! Eso fue lo que escuchó! Se dirigió hasta el subterráneo, ya había estado antes en el mundo muggle, era por eso que sabía algo de él. Ja! Nunca nadie se había enterado que él junto con Crabbe y Goyle se habían escapado hasta el mundo muggle en su verano del tercer año. Eso si que había sido divertido!
Con cuidado bajó las escaleras, había una multitud de gente, se dirigió hasta la taquilla, no sabía muy bien manejar el dinero muggle.
- Son 6 euros.- le anunció la maquina que vendía los boletos, miró los billetes y metió el de la nominación más pequeña - 10 euros- y enseguida le regresó su cambio
"Muy bien Draco! Lo estas haciendo bien!" Draco pensaba esto mientras se metía a los vagones, contó las estaciones señaladas en el cartel, eran pocas... sin embargo... después de ahí no tenía idea de que podría hacer.
Llegó hasta la estación de Padding y subió a la superficie miró los diferentes destinos de los trenes que se encontraba allí, ninguno le era familiar... - perfecto Malfoy, ahora es el momento de demostrar que tan apuesto eres! - Draco miró a un grupo de chicas, dio un respiro y se acercó a ellas.
- hola, disculpen... ustedes saben como llego a Privet Drive??? .- las chicas le miraron por un segundo, estaban todas embobadas, Draco les sonrió y pudo ver el sonrojo en todos los rostros?
- Er... yo no...
- No saben??? Bueno... entonces gracias.- Draco dio la vuelta y fingió como que iba a caminar.
- No! espera! S..si. sabemos! Pero está muy lejos de aquí.
- De verdad?.- Draco le sonrió a la chica y vio como todas le dirigían una mirada de celos.- podrías decirme???.
- Nosotras vamos para allá!.- otra de la chicas tomó la iniciativa. Las otras la miraron con cara de sorpresa, era obvio que estaba mintiendo
- Que bien! Entonces me permiten acompáñalas?.- Draco las miró y sonrió al pensar en la cara de asco que pondría su padre si se enterara que le coqueteó a una muggle... y peor si eran 5 muggles.....
- Claro!.- gritaron todas al unísono
- Bien entonces vamos?.- Draco se puso un poco pálido cuando dos de las chicas se engancharon en cada uno de sus brazos.- Draco se dirigió hasta el tren y compró 6 boletos... y que pensaría su padre si supiera que viajó con muggles?
El viaje fue un poco largo, y mientras tanto las chicas no dejaban de hablar y de tratar de llamar su atención y cuando al fin llegaron. Él les sonrió de una manera angelical y les dio las gracias, las chicas le preguntaron por su... teléfono? Que era eso? De cualquier forma les dijo que era extranjero y solo estaba aquí para visitar a su mejor amigo de sorpresa, las chicas dijeron que estaba bien y le entregaron un montón de papelitos con mucho números y nombres.. Draco les dio las gracias, y las dejó en el tren
Ahora a buscar la casa! Draco se repetía esto mientras veía las largas calles de casas casi iguales, tomó mucho aire y caminó entre ella buscando el número 4 cuando ya casi se estaba dando por vencido diviso algo que le cambió la manera de pensar: el número 10! Ya debería de estar cerca... siguió su camino y se encontró con el número... 8! Perfecto ya le faltaba poco! Y de pronto llegó a la casa con el número 4, se fijó en ella, era muy común, demasiado, la miró por un momento y se dirigió hasta la puerta.
****
Lucius caminó por la enorme mansión Malfoy de Francia, llevaban apenas unas horas allí cuidando de Teodore y él ya quería matarlo, no le gustaba mucho ese lugar, a pesar de que era la más hermosa de todas las propiedades Malfoy, la mansión le traía demasiado recuerdos malos, y muchos de ellos relacionados con su queridísimo cuñado... pero no importaba, ahora lo único bueno era que la mansión recobraría un poco de su encanto al ser el escenario para la muerte de ése......
- Lucius! .- Severus se le acercó y le puso una mano en el hombro,.- estas bien?
- Si.. es solo.. este lugar...
- Lo sé... pero ahora tu sabes que no vale la pena pensar en eso... ven... vamos a dar una vuelta.. tengo algo que te va animar. .- Lucius miró a Severus. Había sido como un hermano pequeño para él desde que estaban en Howarts
- Pero... y Teodore????
- Esta con Narcisa... ya le di la poción... y tardará al menos dos días en hacer efecto. Ahora vamos...
Salieron de los terrenos de la mansión, se habían cambiado a la ropa muggle no querían llamar la atención caminaron entre todo tipo de muggles, algunos que intentaban venderles algo, Lucius tenía cara de asco, muchos de los muggles se le acercaban y le rozaban, Severus simplemente los ignoraba.
- Que es eso que me iba a animar???
- Oh... son unas cosas que tengo que comprar... para pociones, pero no están en esta cuidad y tenemos que ir al Messie d´la court para llegar, allí hay un transportador. Y Lucius quita esa cara, los muggles son aceptables mientras no hables con ellos
Llegarón al lugar, era un bar con aspecto muy sombrio, y en una esquina muy oculto estaba el simbolo de los mortfagos, severus pasó hasta la barra y le dijo unas palabras al barman, mientras tanto Lucius se entretenía con una cerveza de mantequilla y observando el estanque llenos de pirañas..
- bien Lucius, acompañame, está por aqui.- severus le indicó una de las mesas, se sentaron, y le pasó el salero, ahora será, uno, dos.. tres…- quedaron absorvidos en el remolino de colores y después de unos instantes se encontraban en lugar muy parecido, pero ahora estaban en la parte de atras, como un tipo bodega..- llegamos, esta en la otra calle
- Que diablos esta en la otra calle ?
- Oh... espera y lo verás.- caminaron, al menos las calles de este citio estaban más despejadas, dieron la vuelta y se adentraron en algo que parecía una iglesia.- este es el lugar Lucius, el mercado negro más grande de objetos magicos en toda Europa..- los ojos de lucius centellaron ligeramente mientras observaba a todos los brujos y brujas que caminaban, llendo de local en local
- Oh... Severus.. como es que conoces de este lugar ????
- cuando estabamos aqui, hace 15 años entré por casualidad, tu sabes, estaba buscando…
- si… pero es algo que realmente no quiero recordar… te mencioné que no he conseguido un buen regalo para Draco ??.- Severus sonrió, sabía lo mucho que le gustaba a Lucius ver magia oscura, no por nada era el mejor mortifago.
*****
- Seifer! Espérate! No corras! Seifer! .- Fujin y Rajin corrían atrás de Seifer, este estaba riéndose mientras cruzaba a toda velocidad la ciudad, no sabía porque pero le gustaba ese lugar, incluso había pensado en quedarse por unos meses.
- Pero que lentos se han vuelto! Una carrera hasta la plaza! Quien llegue al último paga los chocolates!
- Chocolates??? Seifer! Espera! .
Los tres salieron corriendo hasta llegar a un pequeño bar, era un lugar apartado, pequeño, sin embargo muy concurrido, estaba al lado de lo que parecía una vieja iglesia abandonada y era en donde habían empezado a trabajar, claro, Seifer como mesero y Fujin y Rajin como cocineros llegaron hasta el lugar y entraron, a estas horas siempre estaba desierto.
- Que bueno que ya llegaron chicos! Me complace que sean así de puntuales, ahora chicos, tenemos mucho trabajo.- el dueño del lugar les dio los uniformes.
- Seifer te veo muy relajado, que es lo que te pasa ahora?
- No sé, me gusta este lugar, espero que todo salga bien... no les gustaria quedarse por unos días en esta ciudad???
- Vaya... es la primera que te gusta desde que estuvimos en Dollet.
- Sí... y bien.. que dicen?
- Claro! Seif, haremos lo que sea para que estés feliz.
- Gracias chicos!...
- Pero que tiernos s han vuelto! PÓNGANSE A TRABAJAR! .- todos dieron un brinco y se pusieron a trabaja, el señor D' Gilegnt era buena persona pero un poco neurótico.
**********
Harry estaba sentado en el sofá, estaba exhausto, toda la mañana había estado haciendo quehaceres para sus tíos, se sentía un poco molesto, no le gustaba estar lejos de Hogwarts y peor, sus tíos se habían encargado de hacerle la vida imposible, y eso que solo llevaba dos días en casa de sus tíos, ahora extrañaba ver a algún mago o bruja, se sonrojó... -quieres ver a Malfoy.. - una voz le dijo en su cabeza, y si, era cierto, extrañaba a su rubio.
Recordaba cuando ellos comenzaron a ser pareja, y todo fue por iniciativa de Draco, un día en el colegio, en uno de los desiertos pasillos se le había acercado y sin decirle nada le besó, después de confesarle de que le gustaba mucho. Oh, Draco podía ser muy persuasivo, después de ese encuentro se habían visto en varias partes, y el mapa del merodeador había ayudado bastante..
Aspiró le encantaría ver a Draco en esos momentos, miró su ropa, no estaba vestido como para verlo, se burlaría de él al ver el estado de sus ropas, y además de que estaba todo despeinado y con la cara sucia de estar la casa.
Sonó el timbre, no tenía ganas de abrir la puerta así que desapareció por las escaleras pero quedando en un ángulo en donde podía ver quien era la persona que tocaba la puerta espero unos segundos en lo que su tía abría.
- buenas tardes señora,
- buenas tardes,
- soy amigo de Harry, se encuentra él?.- Petunia miró al chico de pies a cabeza, era muy educado, y por lo que podía observar vestía ropas muy finas y costosas, además de que sus rasgos eran de gente adinerada.
- Ah... claro, pasa....- Harry casi se cae de las escaleras, Draco??? Que estaba haciendo ahí??? De repente reaccionó, no debía verlo en ese estado! Se metió corriendo a su recamara justo en el instante en que su tía lo llamaba.
- Harry! Ven! Un amigo te busca! .- Harry se cambió la ropa en tiempo record, con una toalla se limpió la cara y trató de peinarse un poco.
Cuando bajó Draco estaba cómodamente sentado, y al parecer teniendo una conversación muy amena con su tía Petunia.
- .... y dime, de dónde lo conoces???.- Harry sudó una gran gota! Por favor que no dijera del colegio!
- Un día lo conocí, estaba paseando en el parque y me encontré con él, desde ese día nos hicimos amigos.- Draco le sonrió a Petunia que quedó muy satisfecha con esa respuesta.
- Ah... ya veo, y dime... eres francés? Tu acento se escucha como si fueras de allá.
- Si, mi familia tiene propiedades en Francia y yo crecí allí - a tía petunia le brillaron los ojos, ahora su adorado sobrino tenía un amigo rico.
- Ejem!....- Harry carraspeó para hacerse notar, ahora estaba diez veces más presentable que antes, con mucho cuidado caminó hasta donde estaba Draco sentado y le dio la mano. Draco le miro dándole a entender que su tía no le agradaba en nada.
- Harry, querido, esta chico ha venido a visitarte, parece que es un buen amigo tuyo.
- Si tía, nos conocemos bien, ahora con tu permiso... - Harry le hizo una seña a Draco indicándole que le siguiera si quería quedar fuera del alcance de Petunia.
- Ah! Er.. Draco... se va a quedar para la comida?
- No señora, no quiero causar molestias... - y siguió a Harry escaleras arriba.
Harry espero a que Draco entrara y cerró la puerta con seguro.
- Draco, que gusto verte! .- Harry lo abrazó muy fuerte.- créeme ya te extrañaba, pero que haces aquí?
- Quería verte....
- Alguien sabe que viniste??.- Draco sonrió
- No, mis padres y padrino están en Francia, y yo estaba solo en casa, así que no me resistí a la tentación de venir, ellos no llegarán hasta antes de ir al callejón Diagon, así que... tenemos tiempo... - Draco rodeó la cintura de Harry y le besó el cuello.
- Draco espera, no puedes quedarte aquí, es el infierno estar solo unas horas con mis tíos, créeme yo no los soporto, y tu no estás acostumbrado al mundo muggle, y si ellos descubren quien eres entonces no van a...
- Tranquilo, entonces ven conmigo a la mansión, hay espacio suficiente y estaremos solos, sin nadie más, y además, no voy a aceptar un no por respuesta, Harry... vamos....- Harry se soltó del abrazo de Draco - no voy a hacerte nada... que tu no quieras.... - Harry se ruborizó, nunca habían pasado más allá de los besos y las caricias.
- Draco... y que se supone que les voy a decir a mis tíos, ellos nunca van a dejar que me vaya, además... que va a decir tu padre?
- No dirá nada, yo voy a convencerlo, no le va a gustar pero se persuadirlo, y si se niega, nos vamos a casa de unos tíos que estoy seguro que nos aceptaran...
- Bueno... esta bien... ahora solo hay que inventar algo para mis tíos... estarán felices de que me vaya, y a dos días de haber llegado! Eso lo tomaran muy bien. además parece que le agradaste a Petunia
- Te refieres a la cosa esa... estas seguro de que no es mitad monstruo?
- Si eso piensas de ella espera a que veas a mi tío y primo, te aseguro que nunca has visto alguien tan gordo.- ambos se rieron, sin embargo en ese momento tocaron la puerta.
- Harry, espero no interrumpirte... er.. Draco, lo siento pero debo insistir en que te quedes a comer, no vamos a dejar que un amigo de nuestro sobrino se vaya con el estómago vació.- a Harry se le cayó la mandíbula hasta el piso.
- Oh... bueno, en ese caso, creo que debo de aceptar su muy cordial invitación...
- Que bien, le comunicaré a mi esposo, estará encantado, bueno... se les ofrece algo? Un refresco o unas galletas? Están cómodos?
- Si, gracias señora - tía petunia se retiró dándole una última mirada a Draco.
- Jejejejeje
- Que?
- Ella NUNCA es así, creo que debiste de haberle agradado mucho.
Bueno, entonces, comienza a empacar, Harry, hoy mismo nos vamos.....
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Notas de Reiko Noriko® : gracias por leer este capitúlo me da gusto que les guste la idea, y además prometo actualizar más pronto.
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Autor: Reiko Noriko®
Serie: Ff8 y Harry Potter.
Título: My own blood
Capitulo: Köln the way to my family
Pareja: Seifer x Squall , Draco x Harry
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- Nos vemos Draco... cuídate.. Y no te alejes de la mansión... puedes solo pasar en escoba por los terrenos... nos comunicaremos pronto... - Lucius se despidió de su hijo y tomó un puñado de polvos Flu.
- Adiós padre... - Draco miró como las llamas verdes ocultaban a su padre... su mamá había pasado antes
- Draco... - la voz de su padrino le llegó de pronto... - volveremos el día en que tengas que ir al callejón Diagon... escucha.. solo si tienes algo muy urgente que decirnos comunícate con nosotros.. estaremos en la mansión de Francia... y además... te prometo que después veremos esa poción que dices esta bien??.- le sonrió a su padrino... estaba un poco decepcionado porque estaría solo...
- Sí...
- Y Draco... no salgas de la mansión no me importa que tan grande seas... es peligroso...
- No lo haré...
- Muy bien... cuídate mucho Draco... - Severus sonrió y se dejó envolver por las llamas verdes.- Mansión Malfoy de Francia.- y desapareció entre las llamas.
Draco dio vuelta... estaba solo, en la gran mansión. Y peor aún ya era demasiado tarde como para dar un paseo en escoba, se dirigió a su habitación, después de todo tenía que dormir, miró su cama con algo de pesar, nunca le había agradado estar solo. - bueno mañana será otro día.
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El sol le daba en la cara y abrió los ojos poco a poco era su primer día solo en la mansión. No había nada divertido que hacer... tampoco podía decirle a ninguno de sus "amigos" que vinieran.... ohh decepción... no quería ver a ninguno de ellos... -si tan solo pudiera ver a Potter.....- se reprimió por estar pensando en eso... que demonios le pasaba??Potter??? Un chico?? No... no debía... pero... nah! Que más daba... había aceptado ya hace bastante tiempo que le gustaban los chicos... y Potter... bueno... eso era algo que no le había dicho a nadie..
Suspiró le habían dicho que no se alejara de los limites de la mansión..... pero también le habían dicho que no se comunicarían hasta dentro de unas semanas... la pregunta ahora era ¿debería obedecer las ordenes de su padre y padrino y quedarse en casa como el niño bueno que era? O... ¿ debería ir a visitar a Potter hasta su casa, teniendo muy en cuenta de que ellos nunca lo sabrían?
Al parecer la respuesta era lógica......
Miró sus ropas, no podía ir así, debería cambiarse por ropas Muggles... recordó que tenía algunas y abrió su enorme armario... quería estar seguro de que podía usarlas... nunca se las había probado..
Después de mucho rato se dio cuenta de que le venían bien... ahora... como combinar esos pantalones con las camisas?? Veamos... el negro combina con todo... y él no quería llamar mucho la atención... así que escogió una camisa gris de manga larga... - muy bien! Listo! Murmuró Draco viéndose en el espejo ahora... ¿ como demonios llegó hasta allá?? Podría ir por medio de polvos flu...- pero recordaba que una vez había escuchado que muchos de los muggles no tenían chimenea...-.Podría ir en escoba... - y entonces recordó el alboroto que ocurrió en segundo porque habían visto volar a Wesley y a Potter en un auto... - o bien podría ir al callejón Diagón... si... ahí me dirán como puedo llegar hasta allá!.- Draco se miró una vez más... estaba perfecto... se veía bien... no podía negarlo... bajó de nuevo hasta el despacho de su padre... tomó un puñado de polvos flu... - callejón Diagón! - y de inmediato se vio envuelto en una serie de colores... había viajado tanto en polvos flu que incluso ya estaba acostumbrado... llegó hasta el callejón Diagón... limpió poco su ropa, recordaba que la conexión con el mundo muggle se encontraba en el caldero chorreante... - oh genial Draco! Sales de tu casa y sin dinero!- se dio un golpe en la cabeza con la mano, giró sobre sus talones y se dirigió a Gringorts busco entre sus ropas la pequeña llave, perdería un poco de tiempo pero no importaba.
- Buenas tardes caballero... puedo servirle en algo?.- un gnomo lo saludó en la entrada.
- Si, cámara 456 por favor aquí está la llave.
- Muy bien... sígame... - después de anotar algo en un enorme libro Draco se adentró en los oscuros pasadizos... Oh... como odiaba esos malditos carros! Lo mareaban demasiado con tantas vueltas que daban.- aquí estamos... caballero ahora haga su retiro... - Draco lo miró, abrió su cámara, estaba repleta de galeones, casi hasta el techo, tomó una pequeña cantidad (aproximadamente unos 100) y los colocó en una bolsa.
- Muy bien... ahora debo ir a cambiarlos por dinero muggle, llévame hasta el centro de cambio por favor. - se adentró una vez más en el pequeño carro y se dejó conducir hasta la superficie, ahí el gnomo lo guió hasta un cuarto que arriba tenía el nombre de "cambios de moneda".
- Su destino caballero.- el gnomo le dejó solo, Draco entro, necesitaba dinero muggle.
- Buenas tardes, cambio para dinero muggle?
- Si, quiero cambiar esto.- Draco arrojó la bolsa en el escritorio del gnomo que lo atendía este solo contó los galeones y le devolvió a Draco un fajo de billetes de diferentes nominaciones.
- Aquí tiene... gracias por su visita.- Draco inclinó la cabeza y salió del banco... ahora si tenia que encontrar el modo de llegar hasta la casa de Potter
Se dirigió hasta el caldero chorreante, esperaba que no muchos lo vieran o tendría que dar una muy buena explicación a su padre...
Ya en el lugar pasó sin siquiera saludar al barman y fue directo hasta la pared de atrás, tomó su varita y dio unos cuantos golpes en el ladrillo que se veía más gastado. Por unos instantes se abrió un agujero negro, y Draco pasó a través de él. Miró a su alrededor, ya no estaba aquella calle llena de brujos, ahora estaba en una transitada calle llena de muggles
- Muy bien... y ahora que hago?- Recordaba que una vez escuchó una conversación en la que Potter les mencionaba a esa sangre sucia y a el pobretón que la estación de ............ ¿cómo había dicho? -Vad... Dad... Pag...Pad.. Padding. Si eso era! Paddington! Eso fue lo que escuchó! Se dirigió hasta el subterráneo, ya había estado antes en el mundo muggle, era por eso que sabía algo de él. Ja! Nunca nadie se había enterado que él junto con Crabbe y Goyle se habían escapado hasta el mundo muggle en su verano del tercer año. Eso si que había sido divertido!
Con cuidado bajó las escaleras, había una multitud de gente, se dirigió hasta la taquilla, no sabía muy bien manejar el dinero muggle.
- Son 6 euros.- le anunció la maquina que vendía los boletos, miró los billetes y metió el de la nominación más pequeña - 10 euros- y enseguida le regresó su cambio
"Muy bien Draco! Lo estas haciendo bien!" Draco pensaba esto mientras se metía a los vagones, contó las estaciones señaladas en el cartel, eran pocas... sin embargo... después de ahí no tenía idea de que podría hacer.
Llegó hasta la estación de Padding y subió a la superficie miró los diferentes destinos de los trenes que se encontraba allí, ninguno le era familiar... - perfecto Malfoy, ahora es el momento de demostrar que tan apuesto eres! - Draco miró a un grupo de chicas, dio un respiro y se acercó a ellas.
- hola, disculpen... ustedes saben como llego a Privet Drive??? .- las chicas le miraron por un segundo, estaban todas embobadas, Draco les sonrió y pudo ver el sonrojo en todos los rostros?
- Er... yo no...
- No saben??? Bueno... entonces gracias.- Draco dio la vuelta y fingió como que iba a caminar.
- No! espera! S..si. sabemos! Pero está muy lejos de aquí.
- De verdad?.- Draco le sonrió a la chica y vio como todas le dirigían una mirada de celos.- podrías decirme???.
- Nosotras vamos para allá!.- otra de la chicas tomó la iniciativa. Las otras la miraron con cara de sorpresa, era obvio que estaba mintiendo
- Que bien! Entonces me permiten acompáñalas?.- Draco las miró y sonrió al pensar en la cara de asco que pondría su padre si se enterara que le coqueteó a una muggle... y peor si eran 5 muggles.....
- Claro!.- gritaron todas al unísono
- Bien entonces vamos?.- Draco se puso un poco pálido cuando dos de las chicas se engancharon en cada uno de sus brazos.- Draco se dirigió hasta el tren y compró 6 boletos... y que pensaría su padre si supiera que viajó con muggles?
El viaje fue un poco largo, y mientras tanto las chicas no dejaban de hablar y de tratar de llamar su atención y cuando al fin llegaron. Él les sonrió de una manera angelical y les dio las gracias, las chicas le preguntaron por su... teléfono? Que era eso? De cualquier forma les dijo que era extranjero y solo estaba aquí para visitar a su mejor amigo de sorpresa, las chicas dijeron que estaba bien y le entregaron un montón de papelitos con mucho números y nombres.. Draco les dio las gracias, y las dejó en el tren
Ahora a buscar la casa! Draco se repetía esto mientras veía las largas calles de casas casi iguales, tomó mucho aire y caminó entre ella buscando el número 4 cuando ya casi se estaba dando por vencido diviso algo que le cambió la manera de pensar: el número 10! Ya debería de estar cerca... siguió su camino y se encontró con el número... 8! Perfecto ya le faltaba poco! Y de pronto llegó a la casa con el número 4, se fijó en ella, era muy común, demasiado, la miró por un momento y se dirigió hasta la puerta.
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Lucius caminó por la enorme mansión Malfoy de Francia, llevaban apenas unas horas allí cuidando de Teodore y él ya quería matarlo, no le gustaba mucho ese lugar, a pesar de que era la más hermosa de todas las propiedades Malfoy, la mansión le traía demasiado recuerdos malos, y muchos de ellos relacionados con su queridísimo cuñado... pero no importaba, ahora lo único bueno era que la mansión recobraría un poco de su encanto al ser el escenario para la muerte de ése......
- Lucius! .- Severus se le acercó y le puso una mano en el hombro,.- estas bien?
- Si.. es solo.. este lugar...
- Lo sé... pero ahora tu sabes que no vale la pena pensar en eso... ven... vamos a dar una vuelta.. tengo algo que te va animar. .- Lucius miró a Severus. Había sido como un hermano pequeño para él desde que estaban en Howarts
- Pero... y Teodore????
- Esta con Narcisa... ya le di la poción... y tardará al menos dos días en hacer efecto. Ahora vamos...
Salieron de los terrenos de la mansión, se habían cambiado a la ropa muggle no querían llamar la atención caminaron entre todo tipo de muggles, algunos que intentaban venderles algo, Lucius tenía cara de asco, muchos de los muggles se le acercaban y le rozaban, Severus simplemente los ignoraba.
- Que es eso que me iba a animar???
- Oh... son unas cosas que tengo que comprar... para pociones, pero no están en esta cuidad y tenemos que ir al Messie d´la court para llegar, allí hay un transportador. Y Lucius quita esa cara, los muggles son aceptables mientras no hables con ellos
Llegarón al lugar, era un bar con aspecto muy sombrio, y en una esquina muy oculto estaba el simbolo de los mortfagos, severus pasó hasta la barra y le dijo unas palabras al barman, mientras tanto Lucius se entretenía con una cerveza de mantequilla y observando el estanque llenos de pirañas..
- bien Lucius, acompañame, está por aqui.- severus le indicó una de las mesas, se sentaron, y le pasó el salero, ahora será, uno, dos.. tres…- quedaron absorvidos en el remolino de colores y después de unos instantes se encontraban en lugar muy parecido, pero ahora estaban en la parte de atras, como un tipo bodega..- llegamos, esta en la otra calle
- Que diablos esta en la otra calle ?
- Oh... espera y lo verás.- caminaron, al menos las calles de este citio estaban más despejadas, dieron la vuelta y se adentraron en algo que parecía una iglesia.- este es el lugar Lucius, el mercado negro más grande de objetos magicos en toda Europa..- los ojos de lucius centellaron ligeramente mientras observaba a todos los brujos y brujas que caminaban, llendo de local en local
- Oh... Severus.. como es que conoces de este lugar ????
- cuando estabamos aqui, hace 15 años entré por casualidad, tu sabes, estaba buscando…
- si… pero es algo que realmente no quiero recordar… te mencioné que no he conseguido un buen regalo para Draco ??.- Severus sonrió, sabía lo mucho que le gustaba a Lucius ver magia oscura, no por nada era el mejor mortifago.
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- Seifer! Espérate! No corras! Seifer! .- Fujin y Rajin corrían atrás de Seifer, este estaba riéndose mientras cruzaba a toda velocidad la ciudad, no sabía porque pero le gustaba ese lugar, incluso había pensado en quedarse por unos meses.
- Pero que lentos se han vuelto! Una carrera hasta la plaza! Quien llegue al último paga los chocolates!
- Chocolates??? Seifer! Espera! .
Los tres salieron corriendo hasta llegar a un pequeño bar, era un lugar apartado, pequeño, sin embargo muy concurrido, estaba al lado de lo que parecía una vieja iglesia abandonada y era en donde habían empezado a trabajar, claro, Seifer como mesero y Fujin y Rajin como cocineros llegaron hasta el lugar y entraron, a estas horas siempre estaba desierto.
- Que bueno que ya llegaron chicos! Me complace que sean así de puntuales, ahora chicos, tenemos mucho trabajo.- el dueño del lugar les dio los uniformes.
- Seifer te veo muy relajado, que es lo que te pasa ahora?
- No sé, me gusta este lugar, espero que todo salga bien... no les gustaria quedarse por unos días en esta ciudad???
- Vaya... es la primera que te gusta desde que estuvimos en Dollet.
- Sí... y bien.. que dicen?
- Claro! Seif, haremos lo que sea para que estés feliz.
- Gracias chicos!...
- Pero que tiernos s han vuelto! PÓNGANSE A TRABAJAR! .- todos dieron un brinco y se pusieron a trabaja, el señor D' Gilegnt era buena persona pero un poco neurótico.
**********
Harry estaba sentado en el sofá, estaba exhausto, toda la mañana había estado haciendo quehaceres para sus tíos, se sentía un poco molesto, no le gustaba estar lejos de Hogwarts y peor, sus tíos se habían encargado de hacerle la vida imposible, y eso que solo llevaba dos días en casa de sus tíos, ahora extrañaba ver a algún mago o bruja, se sonrojó... -quieres ver a Malfoy.. - una voz le dijo en su cabeza, y si, era cierto, extrañaba a su rubio.
Recordaba cuando ellos comenzaron a ser pareja, y todo fue por iniciativa de Draco, un día en el colegio, en uno de los desiertos pasillos se le había acercado y sin decirle nada le besó, después de confesarle de que le gustaba mucho. Oh, Draco podía ser muy persuasivo, después de ese encuentro se habían visto en varias partes, y el mapa del merodeador había ayudado bastante..
Aspiró le encantaría ver a Draco en esos momentos, miró su ropa, no estaba vestido como para verlo, se burlaría de él al ver el estado de sus ropas, y además de que estaba todo despeinado y con la cara sucia de estar la casa.
Sonó el timbre, no tenía ganas de abrir la puerta así que desapareció por las escaleras pero quedando en un ángulo en donde podía ver quien era la persona que tocaba la puerta espero unos segundos en lo que su tía abría.
- buenas tardes señora,
- buenas tardes,
- soy amigo de Harry, se encuentra él?.- Petunia miró al chico de pies a cabeza, era muy educado, y por lo que podía observar vestía ropas muy finas y costosas, además de que sus rasgos eran de gente adinerada.
- Ah... claro, pasa....- Harry casi se cae de las escaleras, Draco??? Que estaba haciendo ahí??? De repente reaccionó, no debía verlo en ese estado! Se metió corriendo a su recamara justo en el instante en que su tía lo llamaba.
- Harry! Ven! Un amigo te busca! .- Harry se cambió la ropa en tiempo record, con una toalla se limpió la cara y trató de peinarse un poco.
Cuando bajó Draco estaba cómodamente sentado, y al parecer teniendo una conversación muy amena con su tía Petunia.
- .... y dime, de dónde lo conoces???.- Harry sudó una gran gota! Por favor que no dijera del colegio!
- Un día lo conocí, estaba paseando en el parque y me encontré con él, desde ese día nos hicimos amigos.- Draco le sonrió a Petunia que quedó muy satisfecha con esa respuesta.
- Ah... ya veo, y dime... eres francés? Tu acento se escucha como si fueras de allá.
- Si, mi familia tiene propiedades en Francia y yo crecí allí - a tía petunia le brillaron los ojos, ahora su adorado sobrino tenía un amigo rico.
- Ejem!....- Harry carraspeó para hacerse notar, ahora estaba diez veces más presentable que antes, con mucho cuidado caminó hasta donde estaba Draco sentado y le dio la mano. Draco le miro dándole a entender que su tía no le agradaba en nada.
- Harry, querido, esta chico ha venido a visitarte, parece que es un buen amigo tuyo.
- Si tía, nos conocemos bien, ahora con tu permiso... - Harry le hizo una seña a Draco indicándole que le siguiera si quería quedar fuera del alcance de Petunia.
- Ah! Er.. Draco... se va a quedar para la comida?
- No señora, no quiero causar molestias... - y siguió a Harry escaleras arriba.
Harry espero a que Draco entrara y cerró la puerta con seguro.
- Draco, que gusto verte! .- Harry lo abrazó muy fuerte.- créeme ya te extrañaba, pero que haces aquí?
- Quería verte....
- Alguien sabe que viniste??.- Draco sonrió
- No, mis padres y padrino están en Francia, y yo estaba solo en casa, así que no me resistí a la tentación de venir, ellos no llegarán hasta antes de ir al callejón Diagon, así que... tenemos tiempo... - Draco rodeó la cintura de Harry y le besó el cuello.
- Draco espera, no puedes quedarte aquí, es el infierno estar solo unas horas con mis tíos, créeme yo no los soporto, y tu no estás acostumbrado al mundo muggle, y si ellos descubren quien eres entonces no van a...
- Tranquilo, entonces ven conmigo a la mansión, hay espacio suficiente y estaremos solos, sin nadie más, y además, no voy a aceptar un no por respuesta, Harry... vamos....- Harry se soltó del abrazo de Draco - no voy a hacerte nada... que tu no quieras.... - Harry se ruborizó, nunca habían pasado más allá de los besos y las caricias.
- Draco... y que se supone que les voy a decir a mis tíos, ellos nunca van a dejar que me vaya, además... que va a decir tu padre?
- No dirá nada, yo voy a convencerlo, no le va a gustar pero se persuadirlo, y si se niega, nos vamos a casa de unos tíos que estoy seguro que nos aceptaran...
- Bueno... esta bien... ahora solo hay que inventar algo para mis tíos... estarán felices de que me vaya, y a dos días de haber llegado! Eso lo tomaran muy bien. además parece que le agradaste a Petunia
- Te refieres a la cosa esa... estas seguro de que no es mitad monstruo?
- Si eso piensas de ella espera a que veas a mi tío y primo, te aseguro que nunca has visto alguien tan gordo.- ambos se rieron, sin embargo en ese momento tocaron la puerta.
- Harry, espero no interrumpirte... er.. Draco, lo siento pero debo insistir en que te quedes a comer, no vamos a dejar que un amigo de nuestro sobrino se vaya con el estómago vació.- a Harry se le cayó la mandíbula hasta el piso.
- Oh... bueno, en ese caso, creo que debo de aceptar su muy cordial invitación...
- Que bien, le comunicaré a mi esposo, estará encantado, bueno... se les ofrece algo? Un refresco o unas galletas? Están cómodos?
- Si, gracias señora - tía petunia se retiró dándole una última mirada a Draco.
- Jejejejeje
- Que?
- Ella NUNCA es así, creo que debiste de haberle agradado mucho.
Bueno, entonces, comienza a empacar, Harry, hoy mismo nos vamos.....
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Notas de Reiko Noriko® : gracias por leer este capitúlo me da gusto que les guste la idea, y además prometo actualizar más pronto.