Capítulo 5 – El Len Tao-gumi
"Dormitorios confortables y baños termales"... Naomi miró con suspicacia a Len, y luego de vuelta al cartel. ¿Qué clase de plan tenía en mente ese pervertido? Si pensaba que ella, Naomi Igarashi iba a hacer algo con él, y a un día de conocerlo, estaba bastante errado. El muchacho siguió la mirada de la joven hacia el cartel... sinceramente nunca le había prestado atención a ese viejo madero. Luego de leer lo que éste rezaba, vio la expresión recelosa de su compañera y le cayó la ficha. Realmente no iba a pensar que él... su rostro se enrojeció de incomodidad, pero su expresión, siempre controlada, era inescrutable. No le aclaró nada al respecto, pues lo mas probable es que fueran imaginaciones suyas.
- Vamos- le dijo – y recuerda, estamos enamorados-
- ¿Qué?- ella lo miró con incredulidad- ¿estás loco? No pienso entrar a esa pensión contigo-
- ¿Y ahora que te pasa?-
- Todavía me lo preguntas, pervertido?-
- ¿A quien le dices pervertido?- se alteró él, y su cuernito creció unos centímetros.
-¿Ves a alguien mas parado en la calle?, por supuesto que es a ti. ¿Qué pretendes al traerme a este lugar y esperar que parezca enamorada?... estás equivocado si piensas que voy a ir a un hotel contigo, me gustaron los regalos pero...-
- Cállate de una vez, no es lo que piensas- no le prestó atención a la cara de descreimiento que le dirigió la chica, con una ceja levantada – Aquí viven mis... amigos, y necesito que te comportes. No deben saber nada de lo sucedido (Hoto-Hoto podría humillarme eternamente si se entera en que condiciones me casé) ¿está claro?- preguntó con un tono que no daba lugar a objeciones.
- Ehh... por que no quieres decirles?-
El no contestó, y empezó a caminar hacia la entrada, seguido de Naomi que avanzaba tras su espalda. Len golpeó la puerta de entrada, y unos minutos después salió Yoh con un delantal blanco y un plumero en la mano... se lo veía bastante demacrado.
- Hola Len! ¿qué te trae de visita?- preguntó sonriente el dueño de casa.
- De seguro viene quedarse a almorzar... no se me escapa que todos aparecen a la misma hora...- La fantasmal voz de Anna surgió de entre las sombras detrás de Yoh – Pero, supongo que ya sabes que debes pagar lo que consumes, tu no tiene problemas de dinero. Una ráfaga helada sacudió a los otros tres mientras Anna intervenía en la conversación. Reponiéndose rápidamente, Yoh, invitó a pasar a Len, y luego vio que alguien venía detrás.
- Hola! no te había visto. Bienvenida, pasa a nuestra casa. Anna le dirigió una mirada recelosa, por ocupar tiempo de su todavía prometido.
-¿Y quien eres tú?- preguntó la Itako mientras entraban al comedor
- Me llamo Naomi Igarashi y soy...-
- Ayyy! Pero que bonnnnita! Ya estoy enamorado!!- La estridente voz de Ryu la interrumpió y la tomó por sorpresa cuando él le agarró las manos en gesto reverente – Y dime preciosa quien eres? ¿qué hace una muchacha tan bonita como tu en el vecindario?-
- Es mi esposa. ¬.¬ - dijo hoscamente Len, echándole una mirada poco amigable a Ryu, que la seguía tomando de las manos. El aludido la soltó inmediatamente y quedó pegado a la pared, con el rostro desencajado por la sorpresa. Y no fue el único. Horo Horo, Manta, Chocolove y Tamao, que volvían de la cocina se quedaron inmóviles en el marco de la puerta.
- Bueno pues, felicitaciones muchachos Jijijijijjijiji- Yoh, tan despreocupado como siempre, fue el primero en romper el mutismo.
- No puede ser!!!!!!!- Horo Horo reaccionó con efecto tardío- es imposible que el cuernito se haya casado, es tan antipático que no puedo creer que una mujer lo aguante!! (además... yo todavía ni siquiera conseguí novia...) Y, ¿Como hizo para casarse de un día para el otro? Debe ser una mentira para llamar la atención...- ante el inacabable y desconfiado discurso de Horo, Len no pudo contenerse y se le paró enfrente.
- ¿Qué te sucede cabeza de escoba? ¿Tienes algo que decir al respecto?-
- Claro que si imbécil, ¿que es este cuento de la esposa? Ni siquiera sabíamos que tenías una novia, y somos tus amigos!!-
- No tengo ninguna obligación de contarles sobre mi vida personal, así que cállate-
- No, cállate tu!-
- ¿Qué? ¿Quieres pelear?-
Pruébame si quieres-
En ese momento los dos ya tenían sus armas en mano como de costumbre, e Yoh intervino indirectamente...
Como ves, Naomi, ellos dos son muy buenos amigos y se quieren mucho ^_^
¿Qué dijiste?- exclamaron los dos al unísono - ¡Yo no lo quiero!
Ante el asentimiento de Naomi a Yoh, y ver que él le hablaba de su "hermosa amistad", ambos decidieron dejar el pleito para otro momento... decididamente Yoh les quitaba las ganas de reñir...
Y dinos Len, ¿cómo se conocieron? ¿Cuándo sucedió todo?- preguntó Manta, ya recuperado de la sorpresa.
Por un instante Len dudó. Se le había pasado por alto pensar una explicación convincente para cuando llegaran. Por suerte, Naomi fue en su auxilio. "Recuerda que estamos enamorados..." las palabras de Len sonaron en su cabeza, y se lanzó a salvar la situación.
- Bueno... en realidad es una historia muy simple, ¿No amor?- dijo rodeando el brazo de Len con los suyos y apoyando la cabeza en su hombro- Len se puso como un tomate y no reaccionó. Al ver esto, Naomi le propinó un disimulado codazo en las costillas y prosiguió. –Estábamos prometidos desde niños- bueno, eso no era faltar a la verdad...- hace dos años nuestros padres nos presentaron oficialmente y bueno... nos enamoramos a primera vista, no me fue difícil ya que es tan apuesto... ^_^-
- Ya entiendo por que se casó con ella...- murmuró Horo Horo- esa mujer le da de comer a su gran orgullo... y claro, eso debe gustarle...Ouch!- se calló súbitamente al sentir el tremendo pellizcón que Anna le propinó en el costado.
- No interrumpas, recuerda que estás aquí abusando de todo sin pagar, y que puedo correrte cuando lo desee. Prosigue por favor, esto es tan romántico... ¿Qué les pasa? ¿Por que me miran así?- se interrumpió la Itako al ver las caras de asombro de los presentes...
- Bueno, estuvimos saliendo estos dos años, y finalmente nos casamos ayer por la mañana, lamento mucho que no estuvieran avisados... es que Len es tan tímido que prefirió venir a saludarlos hoy especialmente en vez de orquestar una gran fiesta... espero que lo comprendan, no lo hizo con mala intención- Terminó todo con una sonrisa confirmatoria, y sospechosamente, dejó a todos contentos.
"Decididamente hay que darle crédito por esto..." pensó Len sin salir de su asombro. En dos minutos y con total naturalidad, se había enfrentado a esas personas que no conocía y relatado una convincente historia de compromiso... De repente, algo lo interrumpió de sus cavilaciones. –¿Qué demonios es ese olor?- preguntó a nadie en particular.
- Yoh...- habló calmadamente la Itako – Tu eras el encargado de vigilar la comida ¿verdad?- El mencionado asintió, con lágrimas corriendo por su rostro– Pues bien, entonces ve a sacarla, y mas te vale que se pueda comer-
- Sí, Annita...-
Estaban todos sentados a la mesa, con actitud decepcionada. Sobre la superficie había un sospechoso revuelto de pescado y verduras, 80% carbonizado que los aguardaba. Ryu quiso hacerse el valiente, alegando que no estaba tan mal, y casi termina atragantado con un trozo de zanahoria chamuscada. Manta se atrevió a sugerir que quizá sería conveniente encargar comida hecha, lo cual fue un gran error, ya que Anna aceptó y lo hizo llamar a uno de los negocios mas caros, y obviamente, él pagaría por todos.
Una hora mas tarde, se encontraban almorzando un delicioso arroz con langosta y un muy poco barato caldo de pollo, para hacerle frente al frío.
- Y dime Anna- preguntó Naomi – entiendo que Yoh y tu han estado comprometidos por largo tiempo... ¿tienen pensado casarse pronto?- La pregunta tomó a la itako por sorpresa, y se sonrojó levemente.
- Ay no... pobre de Yoh- le susurró manta a Horo Horo – lo que le va a esperar al pobrecito jejeje...-
- ¿Qué dijiste, enano cabezón?- preguntó Anna con cara de muy pocos amigos.
- Nada Anna, en serio- se atajó Manta agitando los brazos.
- Mas te vale-
Todos siguieron comiendo en abundancia, charlando animadamente, incluso luego de almorzar. Al ver que Tamao procedía a levantar los platos, Naomi se levantó a ayudarla, para luego lavar todo.
- Tengo que decir Len, que me sorprendiste mucho con todo esto- le comentó Yoh. –Nunca pensé verte casado antes que todos nosotros jijijiji... pero bueno, felicitaciones parece que ustedes dos se quieren mucho.
- Eso es obvio tonto, sinó no se hubieran casado- lo secundó Horo Horo – te la tenías escondidita ¿eh?- se volteó hacia Len- aunque te entiendo, quizás tenías miedo de que se enamore de mi...-
- Nunca tendría miedo de que un tontito me sacara a mi mujer...- lo miró de reojo esperando su reacción. Otra vez pelea... Naomi escuchaba todo el alboroto desde la cocina, y tenía que admitirlo, no conocía ese lado chiquilín de Len, y tampoco se hubiera imaginado que así serían sus amigos... decididamente había mucho de Len que ella no sospechaba.
- Y dime Len- preguntó Yoh acabada la discusión- ¿que piensas hacer ahora?-
- Había pensado en volver un tiempo a china, para que Naomi se familiarice con la otra casa... y luego volver aquí... supongo que dentro de dos meses.-
- Me parece bien... – respondió Yoh.
El resto de la tarde, se la pasaron conversando como de costumbre, y un poco después, las mujeres se quedaron en el comedor mientras los chicos entraban a las aguas termales.
Naomi escuchaba a la maravillada Tamao hablar de cómo le gustaría que fuera su casamiento, la fiesta, el hombre ideal... y las advertencias de Anna de cómo conseguir un esposo sumiso y obediente, la obligación de ellos mantenerlas y atender sus necesidades, y no dejarse amedrentar con sus dictaminaciones. "Lo que le falta a una le sobra a la otra" pensaba divertida, mientras tenía después de mucho tiempo una conversación con chicas de su edad.
Caída la noche los muchachos ya estaban cambiados, habían hablado, reñido y descansado lo suficiente, y Len decidió que ya era tiempo de volver. Se dirigió al comedor y sólo encontró a Tamao zurciendo unas medias de Horo Horo. "Hay que tener estómago" pensó para sí. Al preguntarle por las demás, supo que Anna estaba en su habitación viendo una telenovela, y que, al ver a Naomi muy cansada, le había dado una habitación para que se recueste mientras él terminaba. Decidido a no molestar a Anna mientras miraba su televisión (podía ser fatal), emprendió la búsqueda de su esposa por las habitaciones. Al final, la encontró luego de un rato, dormida sobre la colcha de un futón. Su mirada se suavizó al mirarla... decididamente no iba a despertarla. Seguramente la noche anterior no había dormido mucho por todo el trajín de la boda, y era consciente de que la había hecho despertar muy temprano para ser un fin de semana. La había llevado con sus amigos, y a pesar de no conocerlos se había desenvuelto bien, salvando las papas del fuego cuando él no supo que decir respecto a su casamiento y además, le había caído bien a Anna...
Tratando de no hacer ruido ni despertarla, la abrigó y la cargó en sus brazos, dirigiéndose al recibidor. Salió sin despedirse, ellos ya sabían que se marcharía, y además, seguramente armarían tanto escándalo que despertarían a Naomi. Como lo sospechaba, la limosina lo esperaba afuera, era increíble la capacidad de leer su mente que tenía el zombie que conducía. Subió al auto y la acomodó entre sus brazos, apartándole suavemente el cabello de la cara. Debía admitir que había sido un día algo agitado, y que ella no lo había echo tan mal. Sacó de su bolsillo una bolsita con un talismán de templo que Tamao le había dado para su esposa antes de marcharse. Aprovechando la luz de la avenida, se fijó de que se trataba. "Talismán de la fertilidad" rezaba el saquito. Se sorprendió al ver artefacto. Decididamente él no iba a darle esa cosa a ella... lo único que le faltaba es que lo tildara de pervertido como esa mañana, además, se dijo, el no iba a necesitar de una chuchería como esa perpetuar su linaje. La volvió a guardar en su sitio justo cuando la limosina aparcaba en la cochera del edificio. Miró a Naomi, seguía profundamente dormida... y lo había agarrado de la mano. La retiró con suavidad y la tomó en brazos de nuevo, subiéndola a su alcoba. Una vez allí, el tema iba a ser como acostarla, iba a tener que colocarle el camisón, no podía meterla en las sábanas con la ropa del día. Respirando hondo, se dedicó a la tarea con rapidez, agradeciendo la profunda oscuridad de la habitación, y sus grandes habilidades de orientación. Una vez terminada la tarea, la arropó hasta la barbilla y dejó su ropa sobre la cómoda. Con una última mirada atrás dejo la habitación de su esposa para introducirse en la suya, debía admitirlo, no la había pasado tan mal...
Continuará...
Hola! Acá esta el capitulo 5, tal como prometí... me parece que fue algo extenso, pero bueno, mejor dar de mas que mezquinar. Gracias a Aome; Meli-chan; Kikis Tao; Zoe Orimoto y Korishiteru por los reviews, es lindo que se acuerden de una... AH! Una cosita... respecto a la actitud de Len... bueno, es Len!... y súmenle que lo obligan a casarse con alguien que no conoce... aunque parezca mentira, el capitulo 4 es recién el dia despues de la boda, por lo que todavía no hay tanta confianza por parte de él, ya saben que es medio cerrado a la socialización. Paciencia que todo llega gradualmente, para el próximo capítulo (o el otro, depende como vaya quedando) les aseguro que la cosa se va a poner mucho mas interesante ^_^
Bueno, nos vemos la próxima cuídense mucho
Vale-chan
