EPILOGO: Por la eternidad

El viento frío entro por la ventana de la habitación, moviendo los largos cabellos dorados de la reina de los Galadrim. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos azules al escuchar las palabras del elfo frente a ella, pareciera como si su destino fuera la soledad. Su esposo le había informado que partiría rumbo a Valinor, hacía años ya que su gente había comenzó a emigrar rumbo a las tierras imperecederas. Los hombres y sus pueblos empezaban a invadir los grandes bosques y los pueblos de elfos que aún vivían en la Tierra Media habían menguado considerablemente.

"Galadriel.....debo partir con lo que queda de nuestra gente, puedes venir si lo deseas pero sé que aún hay algo que te retiene en estas tierras"- dijo suavemente el elfo de cabellos plateados a la que por tantos siglos fue su compañera.

"ya nada queda para mi en estas tierras...solo la soledad"- respondió melancólicamente la reina noldor. Hacía mas de un siglo que sabía de la muerte de su amado Haldir en batalla durante la guerra del anillo, su recuerdo es el que la mantenía recorriendo los bosques de Lorién a pesar de que su gente había marchado una centuria atrás.

"sé porque te quedas......siempre lo supe y mi egoísmo evitó que hiciera lo que era correcto"- dijo Celeborn levantándose y acercándose al balcón donde el aire aún soplaba.

"¿A que te refieres?"- preguntó Galadriel desde su lugar sin comprender el significado de las palabras de su esposo.

"hace 3100 años lo sabía.....supe de tu amor hacia Haldir pero temía vivir solo, temía dejarte ir porque siempre te he amado y siempre voy a hacerlo. Te doy las gracias por lo que hiciste por nosotros.....pero es hora de que busques tu felicidad"- Celeborn volteó a ver a Galadriel quien lo miraba con un gesto de sorpresa – "perdóname"- agregó con las lágrimas escurriendo por su rostro.

"no tengo nada que perdonarte....pero ya no hay felicidad para mi, amigo mío"- dijo Galadriel poniéndose de pie y caminando hacia donde Celeborn estaba.

"la vida es mas compleja de lo que a simple vista parece ser....he escuchado que los elfos aún moran en el bosque verde comandados por el rey Legolas, deberías ir un tiempo a verlo"- Celeborn sonrió dulcemente y Galadriel lo imitó.

"si......eso haré"- dijo con desición Galadriel

"Namarië hermana mía. Te esperaré en Valinor con nuestra gente, sé feliz"- se despidió Celeborn besando la mejilla de la que fue su esposa y salió de la estancia.

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El rey Legolas estaba sentado en su trono, su pueblo había mermado con el paso de los años. Del antiguo esplendor de los primeros nacidos poco quedaba ya, con el correr de los años las historias de antiguas batallas y de las alianzas entre hombres y elfos se limitaban a simples cuentos de ancianos a niños.

Ya nada quedaba en esta tierra para los seres mas hermosos que algunas vez la pisaron, su futuro aguardaba del otro lado del mar. Los que fueron sus compañeros en la mas grandiosa de todas las guerras libradas hacia tiempo que habían partido al sueño eterno, ahora solo el enano Gimli acompañaba al último rey de los elfos. Juntos viajarían por las aguas una última vez.

El rey salió de sus pensamientos cuando las grandes puertas de plata se abrieron, majestuosa entró la mas grandiosa reina elfica que alguna vez pisara Arda.

"aiya dama Galadriel"- dijo Legolas con una reverencia.

"aiya rey Legolas"- respondió la reina con una sonrisa.

"¿ a que debo el honor de su visita?"- se atrevió a preguntar el elfo rubio.

"he venido a preguntar sobre alguien...."- Galadriel guardo silencio un momento pero al notar que Legolas esperaba que continuara agregó –"he escuchado hace mucho tiempo ya que mi guerrero Haldir murió durante la batalla del abismo de Helm en Rohan. He venido a preguntarte si es eso cierto"- finalizó la reina

Legolas no pudo evitar un gesto de sorpresa al conocer el motivo que había traído a la reina hasta su morada pero aún recordaba las palabras que Haldir le dirigiera hacia muchos años ya sobre su gran amor. Podía sentir el gran dolor que pesaba en el corazón de la noldor, así que decidió no hacerla esperar mas.

"Él fue herido pero no murió"- respondió por fin Legolas

Galadriel casi cae al suelo desvanecida de la impresión, su corazón latía con rapidez y emoción. El amor de su vida estaba vivo, debía encontrarlo cuanto antes – "dime oh gran rey, donde esta él ahora? Acaso ha navegado a Valinor? Dime porque si es así he de embarcarme cuanto antes"- la urgencia en la voz de la reina provocó una sonrisa en Legolas pero por respeto a los sentimientos de la reina se apresuró a responder – "no, mi señora....él esta aún en Arda, la última vez que lo vi fue hace un par de años en lo que alguna vez fue Imladris"- continuó el rey.

"debo partir de inmediato"- dijo Galadriel apresurada, con la felicidad visible en su blanco rostro pero se detuvo y se volvió a preguntarle al elfo rubio – "sabes...si acaso....él se ha casado?"- preguntó lentamente la reina

Legolas no pudo menos que sonreír ante tal pregunta – "no, mi señora. Él nunca se casó"- Galadriel sonrió y salió deprisa del salón, sin detenerse a escuchar que Legolas le decía- "nos veremos pronto en Valinor, dama blanca"

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Haldir miraba por un gran balcón el sol ocultarse tras las montañas. Imladris hacía mucho tiempo ya que había sido abandonada por sus habitantes, con la partida de Elrond  los elfos que aún permanecían se fueron también. Elladan y Elrohir le habían pedido que partiera con ellos rumbo a las tierras imperecederas hacía casi 50 años pero él se había negado, no podía obligar a su corazón a desprenderse de esa habitación donde hacia tantos siglos ya su alma rebosara de dicha entre los brazos de su único y gran amor.

Muchas veces se preguntó como es que aún vivía y no había muerto de tristeza y soledad, siempre obtenía la misma respuesta. La esperanza, si la esperanza de que algún día ella volvería....pero con el pasar de los siglos su alma iba apagándose. Haldir se levantó y dio media vuelta para recostarse en la cama pero lo que vio lo dejo helado. Ahí de pie estaba Galadriel, Haldir no podía creer lo que sus ojos le mostraban. Pensó que era una visión pero deshecho el pensamiento cuando ella se arrojó a sus brazos envuelta en llanto.

"Haldir!!! Te amo!!!"- sollozó ella entre sus brazos

"eres tu? En verdad eres tú?"- preguntó él aún sin creérselo

"soy yo  mi elfo guerrero....creí que habías muerto en la guerra del anillo"- dijo ella ocultando su rostro en el pecho de su amante.

"no, aquí estoy. Llevó siglos aguardándote"- dijo él dedicándole una sonrisa como las de antaño.

"ahora estamos juntos y nunca mas nos separaremos"- dijo Galadriel besando a Haldir. Él la levanto y la llevó a la cama, esa cama que hacía tantos siglos ya había presenciado su demostraciones de amor y una vez mas lo presenció.

Galadriel abrió lentamente los ojos suplicando a Erú porque no hubiera sido un sueño, como tantas otras veces. Pero no, él estaba ahí a su lado, descansando entre sus brazos.

"quisiera parar el tiempo con tus ojos viéndome, con las ganas de quedarme así abrazándote, mi elfo guerrero"- susurró ella a Haldir. Él abrió los ojos como escuchando sus palabras.

"no necesitas hacerlo, tenemos la eternidad por delante"- sonrió él besándola.

FIN

NOTAS:

MIL GRACIAS ALEJANDRA!!!!!!!!!! Sin ti no habría podido terminar este fic. Se agradece en verdad y que decir de yashi y uki que me animan con mis fics. GRACIAS!