Macross*:

La Leyenda del Cuervo

Capitán del UNS Macross 4 Bruno Correia

Prologo

Simplemente es imposible que a uno le caiga bien Ivan Karpov por la primera impresión. Cualquiera que no lo conozca dirá que es arrogante, megalómano y demasiado estricto, la verdad es esa y personalmente me sucedió eso cuando lo conocí hace ya veintiséis años. Me habían asignado como capitán del Macross 4 pero nunca me imaginé que tendría que compartir el mando con un Almirante, menos con uno como él. Debo admitir que los primeros meses fueron difíciles, nunca me terminaba de acostumbras, pero a medida que uno lo conoce descubre muchas cosas.
Así fue que un día me pidió que escribiera su biografía y así fue como empezó a narrarme todo en detalle, es increíble su memoria, recuerda cada frase, cada palabra.
Fue difícil pero creo que logré un buen resultado del que el Almirante estaría orgulloso.

El Cuervo

Parte I: La guerra planificada.

Capitulo I: Visitas no deseadas

"Hoy después de diez años de reconstrucción

el Gobierno Unido de la Tierra ha decidido

mostrar al mundo con orgullo el mayor logro que

ha hecho el hombre desde la invención de la rueda.

Hoy será el día que marcara el punto de partida

para una nueva era, en la que el ser humano

conquistará el espacio.

(Almirante Giskard Reventlov en un comunicado a la población de la Tierra)

Salió de su habitación mientras se ponía el uniforme de vuelo con la gran insignia del gigantesco portaaviones CVS 101 Prometheus al que había sido asignado como Teniente Comandante y donde había recibido el mando del escuadrón VF-5 Ghost, hacía casi un año. Era su cuarto día en la isla y recién se estaba dando cuenta de cuanto la extrañaba. Mientras Ivan disfrutaba del panorama, en especial del Macross, se preparaba para dar el primer vuelo acrobático de las Valkyrie Figthers, este iba a ser llevado a cabo por los pilotos del Escuadrón Acrobático de la Fuerza Aérea Japonesa, y por algún azar del destino había recibido una invitación la noche anterior por parte de uno de sus integrantes, quizás borracho.

Ya había caminado un largo trecho cuando llegó al hangar donde el escuadrón se preparaba.

Linda fiesta la de ayer, ¿no? – Dijo Roy desde la puerta. Tenes razón fue una gran fiesta, en especial cuando te pusiste borracho – se burló Ivan mientras entraba. No estaba borracho, solo fingía – respondió con tono burlón mientras le alcanzaba el casco a su amigo. No me mientas, solo tuviste suerte de que Claudia te encontrara y te sacara del lugar.

Pero cambiando de tema, aun no puedo entender como él casanovas de Roy Fokker decidió quedarse solo con una muchacha – comentó Ivan tratando infructuosamente de ahogar la carcajada

Parece ser que alguien se olvidó de quien tiene la culpa de eso, fuiste el mayor instigador de todo eso – contraatacó Roy – Dejá ya las bromas y te recomiendo que te apures a salir, que la gente espera. Como digas.

Mientras Roy se alejaba, Ivan subió a la cabina y se aseguró que todos los indicadores tuviesen las lecturas correctas. Una vez terminados los chequeos, encendió los propulsores, llevó al caza a la pista e inmediatamente aceleró al máximo. La potencia del arranque lo aplastó contra el asiento haciéndole sentir lo que solo un piloto de combate podía sentir. Ivan jamas tomaba como rutina un vuelo y nunca se aburriría de despegar y sentir la fuerza G mientras hacía un giro brusco o llegaba a velocidades extremas.

Una vez que salió de su trance, Ivan echó una mirada afuera de su cabina. El espectáculo era hermoso y el Macross le pareció más agradable con su nueva pintura azul.

Mientras se deslumbraba con el paisaje, el comandante comenzó a dar las indicaciones.

Quiero que el Comandante Karpov y el Teniente Gregory hagan el vuelo de baja altura, y esperemos que el Comandante no estrelle su avión esta vez – dijo mientras todo el escuadrón reía a carcajadas. Obviamente aquella invitación había servido para poder recordarle aquel patético accidente que había ocurrido un par de meses atrás. Son incorregibles – respondió Ivan mientras rompía la formación y se preparaba. Aun no podía entender por qué siempre le recordaban ese accidente, uno donde había sido el avión el que falló.

Ivan con el segundo avión y Gregory con el cuarto comenzaron a descender hacía el público levantando vuelo a pocos metros del suelo. Cuando se disponían a pasar a un par de metros el uno del otro apareció un pequeño avión rojo y blanco que los obligó a abrirse peligrosamente arruinando la maniobra, los dejó en un completo ridículo frente al publico y por si esto fuera poco el imbécil casi los mata a todos.

Tratando de alejar al pequeño avión y los reciente sucesos de su cabeza Ivan, junto con el resto del escuadrón, se disponía a terminar su acto cuando la misma chatarra voladora los hizo quedar en ridículo por segunda ves. Esta fue la gota que derramó el vaso.

¿Quién diablos es ese imbécil? – Dijo Ivan tratando de no perder la calma. No lo sé, tendremos que averiguar en el puente el número de su invitación – respondió el comandante tratando de calmar a su invitado.

Después del incidente los acróbatas aterrizaron en la pista que corría paralela al Macross.

Ivan dejó la Valkyrie que había tomado prestado del Escuadrón Japonés y después de despedirse de todos los pilotos se encaminó al puerto donde lo esperaba el bote que lo llevaría de regreso al Prometheus.

La pista de vuelo del Prometheus estaba muy agitada ese día debido a las múltiples operaciones de lanzamiento. Un fugaz sentimiento de envidia se cruzó por la mente de Ivan mientras recordaba que Roy tenía a todo su escuadrón en tierra pero el sentimiento desapareció cuando recordó cuanto amaba al mar y la fresca brisa del viento, nada podía cambiar eso.

Buscó por toda la pista su Valkyrie pero no estaba por ninguna parte. Totalmente indignado trató de encontrar al hombre responsable de este retraso, su aparición ante el público sería en menos de 30 minutos y su avión no estaría listo a tiempo.

Finalmente encontró a Steve Dicken, su segundo

¿Sabes que sucede con mí avión Steve? No esta en la pista y me estoy retrasando. ¿No te avisaron? No harás la demostración con el Ghost 001, tenes que llevar a un pasajero y por eso es que hay un VF-1D esperándote en la cubierta. ¿Cuándo paso eso? Ayer por la noche. Esto es insultante, por qué no se me avisan de estos cambios. – Dijo Ivan molesto - Nos vemos luego Steve.

Salió como un rayo para la cubierta donde encontró al VF-1D listo para despegar. Cuando se acercó una bella joven vestida con uniforme de vuelo naranja y con el casco en la mano lo estaba esperando.

Buenos días señorita, soy el Teniente Comandante Ivan Karpov espero me disculpe por el retraso – dijo cuando llegó a su lado – nadie me informó sobre el cambio de planes. No hay problema. Soy Katy Portman, es un placer conocerlo. ¿Katy Portman? ¿No es usted la periodista sensacionalista? – la interrogó Ivan No me gusta mucho el titulo, pero creo que lo tendré que soportar. Por cierto, se me ha pedido que haga una nota desde el interior de una aeronave de combate.

No se nota muy feliz por eso, Comandante – dijo cuando notó la cara que puso Ivan

No es nada, no suelo volar con civiles y menos con periodistas, pero supongo que ordenes son ordenes.

Mientras Katy subía al asiento trasero Ivan comenzaba todos los chequeos previos para el despegue y en menos de cinco minutos la catapulta del Prometheus los lanzaba de la cubierta.

Habían pasado casi quince minutos del lanzamiento e Ivan estaba sorprendido de que la reportera no le hubiese hecho ninguna pregunta pero sus esperanzas se casi enseguida.

Dígame Comandante ¿Cuál es el grandioso secreto que la UN ha estado guardando estos últimos años? ¿No puede esperar a que comience la demostración para averiguarlo? – Respondió Ivan visiblemente irritado. Si eso es lo que quiere, esperare.

Ivan estaba feliz de poder sacársela de encima, no soportaba a los reporteros en lo más mínimo y a pesar de haber vivido muchos años en el mundo capitalista no lograba acostumbrarse a la idea de la liberta de prensa. Finalmente todo estaba en calma pero es muy sabido que la calma precede a la tormenta.

Hey, comandante ¿Qué se supone que esta haciendo el Macross? – Dijo mientras tocaba el hombro de Ivan - Eso no estaba en el cronograma de la fiesta.

Ivan miró con intriga al Macross y sintió un escalofrío como nunca antes. La parte frontal, el cañón principal, se estaba abriendo en dos y un terrible destello se estaba haciendo visible en esa área. Tardó un par de segundos en darse cuanta de que era lo que estaba pasando.

¡El cañón principal, van a disparar el cañón principal! – Dijo tratando, insatisfactoriamente, de no elevar el tono de voz y de mantener la calma.

A pesar de que nunca se presenció al Macross disparando, todos los que estaban en el proyecto siempre tenían alguna idea de cómo operaban los sistemas y un amigo suyo que trabajaba en ingeniería le comentó como era, teóricamente, la secuencia de disparo y cuan devastadora se suponía que esta podía ser.

Un rayo de luz, como ningún hombre había visto jamas, cortó limpiamente la isla e hizo que el agua se evaporara inmediatamente. Era lo más increíble que presenció en toda su vida pero se sentía un poco sorprendido de que la isla no se hubiese desintegrado por completo.

Ivan abrió un enlace con el puente del Macross con la esperanza de echarle un poco de luz a la situación

Aquí VF-1D 098, soy el Teniente Comandante Ivan Karpov, alguien me podría decir que fue lo que pasó, cambio - la pantalla al frente de su consola se encendió y la primer oficial del Macross le dio la última respuesta que hubiese esperado. Nuestro ataque destruyó dos naves, posiblemente extraterrestres y detectamos la presencia de fuerzas alienígenas, posiblemente hostiles, en el sector 4-1-2. Su escuadrón ya esta en el aire y se dirigen hacía la zona, encuéntrese con ellos en las coordenadas indicadas. Negativo Delta Uno, tengo a una civil conmigo y no puedo entrar en el combate, voy a aterrizar cerca de los refugios para dejarla. Entendido VF-1D 098, cambio y fuera.

Ivan sabía que sin su caza estaba en una verdadera desventaja frente a cualquier enemigo y prefirió dejar a su acompañante e ir a buscar su avión al Prometheus, pero la muchacha no tenía la misma idea.

¿Cómo se le ocurre que me va a dejar en un refugio? Es la historia del siglo y quiere que me la pierda, de ningún modo – dijo visiblemente molesta. Discúlpeme, pero esto no es una simple batalla aérea. Estamos hablando de fuerzas extraterrestres de las que no sabemos nada. Usted no tiene ni la más mínima idea de la magnitud del combate que nos espera. No se preocupe por mí, no me asusto fácilmente algunos compañeros incluso dicen que soy de piedra – dijo con un dejo de altanería. ¿Con qué no se asusta fácilmente?, Le voy a dar una ligera demostración de lo que estoy hablando.

Sin decir nada más Ivan comenzó a maniobrar su Valkyrie en un descenso que los llevaba directamente contra la ciudad.

¿Cree que con esto me asustara? Sé perfectamente que se elevara en el último segundo -dijo con aire de confianza. Pero no fue así.

El avión estaba cada vez más cerca del suelo, hasta el punto que Katy comenzó a asustarse de verdad, pero cuando miró hacía un costado se quedo sin aliento. Parecía como si una de las turbinas se hubiese salido y hubiese quedado colgando. Pronto el terror pudo más que ella.

¡¡Comandante!! Sé esta saliendo una de las turbinas – gritó, pero no obtuvo mas que una sonrisa por respuesta. Estaba desesperada, no podía hacer otra cosa más que gritar frenéticamente esperando que el Comandante hiciera algo.

De golpe todo se obscureció y la cabina quedó sumida en una obscuridad total. Katy cerró los ojos tratando de tranquilizarse pero una pregunta acabó con cualquier esperanza de calma: ¿Sería esta la muerte?

Después de unos segundos de espera se atrevió a abrir sus ojos y quedó sorprendida con lo que vio. Había una pantalla de cristal líquido justo frente a ella y un par más pequeñas a cada uno de sus lados. La pantalla del frente le daba una clara visión del exterior pero a pesar de que buscó por todos lados no encontró ninguna forma de tener contacto con este más que por esa pantalla.

Tocó cada perilla, palanca y botón que encontró en la pequeña cabina hasta que la cara de Ivan apareció en una de las pantallas pequeñas.

Conque era de piedra, me doy cuanta de que está aterrada – dijo mientras esbozaba una gran sonrisa. Esto no me resulta gracioso, exijo que me explique que es lo que esta pasando. Lo que usted acaba de ver es uno de los secretos más altos que el gobierno ha tenido. Hace poco menos de un mes se reveló al mundo el nombre verdadero de esta aeronave pero nunca se dijo lo que significaba. Las siglas VF significan Variable Fighter esto significa que este avión tiene la capacidad de reconfigurar su estado.

Este avión tiene la capacidad de convertirse en un robot de combate altamente sofisticado.

El proyecto esta activo desde el 2002 pero los aviones estuvieron totalmente terminados hace poco menos de un año.

¿Por qué se mantuvo esto en secreto? ¿Y para qué construyeron un avión con esta capacidad? Eso es algo que no puedo responderle, lo que puedo decirle es que tuvimos nuestros motivos para hacerlo. ¿Hay algo más que el gobierno le este ocultando al público? – Preguntó enojada, no con el hombre que tenía enfrente sino con el gobierno que él representaba. La forma de locomoción de este avión no es el combustible estándar del pasado, ahora utilizamos procesos de combustión nuclear – al oír estas palabras Katy abrió los ojos como platos. ¡Quiere decir que estamos volando en una bomba nuclear! Mire, no tengo tiempo ni ganas de explicarle como funciona todo, así que conténtese con saber que es perfectamente segura y que apenas hemos tenido accidentes en los últimos meses. ¡¡¡Déjeme en el refugio. Déjeme en el refugio!!! ¡¿Cómo puedo confiar en eso?!

Ivan quiso responder pero antes de que pudiera decir algo, la reportera se puso blanca y pronto se dio cuenta porque. Frente a su Battroid estaba parado una máquina como nunca había visto jamas, dos piernas sostenían a una esfera metálica que en el centro tenía un visor rojo con forma de ojo.

Instintivamente Ivan alzó la ametralladora GU-11 de su Valkyrie y abrió fuego contra la extraña máquina, esta se incendió y cayó al piso explotando casi de inmediato. Ivan no lograba entender como no se había dado cuenta de al llegada del enemigo, pero eso podía quedar para después, primero tenía que dejar a la mujer, no le hubiese gustado quedar envuelto en un combate con un civil abordo. Para evitarlo, Ivan decidió esconderse en un pequeño callejón entre dos edificios.

Ya habían pasado quince minutos desde su primer encuentro con los extraterrestres y todavía no lograba dejar a la civil. La ciudad estaba totalmente rodeada por los "huevos con patas" como ella los había bautizado.

Esto es lo que el gobierno no quería que supiéramos ¿no? Que derecho tenían de escondernos la verdad ¿Por qué no se nos dijo que los alienígenas eran belicosos? – Dijo Katy por el intercomunicador, visiblemente afectada por los recientes sucesos. Si se hubiese sabido toda la verdad habríamos tenido un pánico total a escala mundial. Si mal no recuerdo hace ya muchos años en Estados Unidos, en un programa de radio se realizó una obra teatral sobre la llegada de invasores marcianos. Eso causó pánico en toda la población, ¿Qué cree que hubiese pasado si decíamos la verdad sobre los extraterrestres? Como ve teníamos nuestras razones.

Katy no respondió, esta vez el militar tenía razón.

Después de cientos de intentos frustrados, Ivan logró pedir ayuda a su escuadrón, que no tardó mucho en llegar.

La cara de Steve apareció en la pantalla de Ivan y su voz pronto se escuchó en los parlantes de su casco.

Veo que té estas divirtiendo – Dijo mientras dejaba escapar una carcajada. Si tú definición de la diversión abarca estar encerrado con una reportera en el campo de combate, esto debe ser muy divertido.

Cuatro Battroids aterrizaron en la calle mientras Ivan salía del pequeño callejón en el que estuvo escondido.

Bien muchachos vamos al Prometheus, donde nos reorganizaremos para atacar – dijo Ivan por el intercomunicador.

Antes de que el primer piloto en despegar pudiese separarse cinco metros del suelo, una ráfaga de ametralladora lo alcanzó convirtiendo su avión en una bola de fuego que cayó a pocos metros de Ivan. Para empeorar las cosas el Macross les estaba ordenando volver lo más rápido posible, porque en pocos minutos despegaría y era imperativo que lo cubrieran.

Debemos salir de aquí Ivan, quedarnos sería suicida – dijo Steve. Vallanse, yo los cubro – respondió Ivan. Pero... No puedes quedarte, de seguro morirás. Dije que se fueran – ordenó Ivan por el intercomunicador – yo estaré bien.

Antes de que Steve y el resto del escuadrón despegaran Ivan se internó en la ciudad y distrajo a los extraterrestres con su ametralladora. La idea funcionó y todos pudieron escapar a salvo, todos menos él.

El rostro de Katy apareció en una de las pantallas, visiblemente alterado.

¿Por qué se van? ¿Por qué nos dejan? Exijo que me saque de... – antes de que pudiera decir más Ivan apagó el monitor.

A lo lejos pudo divisar al Macross que comenzaba a ascender en el cielo, desapareciendo en las nubes poco después. Sus esperanzas de sobrevivir se acabaron con la última bala que quedaba en el cargador, solo le quedaba salir volando, pero eso era casi un suicidio.

Cambió a la configuración de GERWALK y cuando tuvo suficiente velocidad a la de Caza. Cuando la calle estaba por acabarse comenzó a ganar altura, pero las balas alienígenas no se hicieron esperar, como una cortina de fuego llenaban casi todo el espacio que quedaba en el aire haciendo que esquivarlas se volviese todavía más difícil.

Justo cuando Ivan creyó que el peligro había pasado apareció una nueva lluvia de balas que lo tomó totalmente por sorpresa, esta ves no tuvo tanta suerte y fue alcanzado varias veces. El avión comenzó a perder altitud y un rápido vistazo le mostró el motivo, una de las turbinas estaba en llamas mientras la otra estaba perdiendo refrigerante muy rápidamente, lo que causaría que se incendiase en poco tiempo.

A pocos metros del suelo Ivan decidió hacer un último esfuerzo para salvarse, cambió la configuración a GERWALK y cerró el escudo térmico que servía para proteger a la cabina durante un reingreso, esta vez tendría una utilidad un poco diferente.

La Valkyrie impactó contra el suelo muy violentamente, pero no explotó.

En el interior Ivan tenía el brazo roto y en más de una ocasión casi perdió el conocimiento, pero logró mantenerse consciente y evaluar los daños. Todo el tablero de control titilaba con luces rojas: presión, combustible y cientos de otras alarmas estaban encendidas, pero la que más asustó a Ivan era la que advertía fuego en los motores. En pocos segundos el fuego se extendería al resto de la nave y si esta no explotaba, él y la reportera morirían calcinados. Cerró los ojos mientras esperaba la inminente explosión cuando todas las alarmas de fuego se apagaron repentinamente. Ivan no lograba entender como todo el fuego se había apagado.

Sin tardar un segundo decidió que debían escapar del avión, era muy peligroso quedarse por que nunca sabrían si podía estallar. El escudo que protegía a la cabina se abrió lentamente... En ese momento Ivan logró entender como se habían apagado el fuego, estaban en el... ESPACIO EXTERIOR.