Capitulo VII: Pasado

"Este es el octavo día, desde que el Macross

causara una devastación terrible sobre la ciudad

de Ontario. Hace ya más de una semana que

miles de personas salen a manifestar a las calles

pidiendo que el SDF-1 abandone definitivamente

la Tierra"

(Nancy Clark reportando para ABC News)

El capitán Gloval había recibido la inevitable noticia pocas horas atrás, tendrían que abandonar la Tierra, su hogar, y volver al espacio exterior sin la posibilidad de dejar a los miles de civiles que tenían a bordo. Le hubiese gustado tirar las ordenes a la basura y amenazar a los altos mandos de la Tierra para que albergaran a los civiles, pero temía que si lo intentaba morirían más vidas inocentes y aunque le pareciera un poco inhumano, setenta mil civiles no valían lo suficiente como para poner en riesgo otra ciudad con varios millones.

Gloval alejó la carpeta con las ordenes y le sorprendió encontrar el nombre Karpov en la lista de faltas disciplinarias. El reporte decía que el Capitán Karpov, lo habían ascendido después de la muerte de Fokker, había violado la orden de mantenerse alejado de la ciudad y que había causado grandes destrozos.

Pero a Bruno no le sorprendía el hecho de que alguien hubiese violado ordenes directas, siempre había alguien para hacerlo, lo que realmente le sorprendía era que Ivan lo hubiese hecho.

Había conocido al Capitán por muchos años e incluso había servido bajo su mando en el Kenosha y estaba seguro que Ivan jamas habría violado una orden directa.

Andrea – dijo el capitán por su teléfono personal – quiero que me mande el expediente completo del Capitán Karpov. Si señor, se lo enviaré en unos minutos. Y una cosa mas... quiero un café – aunque en ese momento hubiese preferido una buena botella de vodka, amaba el alcohol de los Rusos, país que había tenido el agrado de visitar con regularidad. Si señor.

En menos de diez minutos Andrea entró en la oficina del Capitán Gloval con un grueso expediente entre sus manos y la tasa de café sobre él.

Aquí esta el expediente que pidió, señor. Y el café, negro come le gusta. Muchas gracias Andrea, ya puedes retirarte.

La joven muchacha dio media vuelta y se fue tan rápido como había llegado.

Una vez solo Bruno comenzó a leer el expediente de Ivan. Las primeras hojas no mostraban nada extraño, nacido en el seno de una familia militar, la madre había muerto en un accidente de transito y el padre había sido derribado en una misión en su helicóptero. Ivan se unió a la Fuerza Aérea y se graduó con una de las notas más altas, demostrando una gran habilidad como piloto.

No tardó mucho para llegar a la acción. Su bautismo de fuego había sido sobre territorio Chino en una pequeña incursión de bombardeo a la capital de China, lo que le valió el titulo de Héroe de la Unión Soviética por su alto grado de valor.

Siguió ojeando las paginas del expediente, pero una le llamó la atención especialmente. Era un reporte psiquiátrico que marcaba un par de fechas. 1977, fecha en que murió la madre, y 1993 al 94.

La primer hoja describía la crisis emocional que sufrió con la perdida de su madre, pero toda información referida a la segunda fecha estaba marcada con un grueso marcador negro, lo que volvía su lectura algo imposible.

Bruno no lograba entender el por qué de la falta de información. Calculó que alrededor de esa fecha Ivan había desempeñado sus primeras misiones en la Guerra contra China.

Buscó entre los papeles restante y descubrió que cualquier referencia del periodo que comprendida de 1993 a 1994 estaba totalmente en blanco. En toda su carrera jamas había encontrado un documento que presentara un periodo en blanco tan largo.

Bruno levantó el teléfono y presionó el botón de marcado rápido.

Andrea, quiero una conexión segura con las oficinas centrales de Moscú – Hay un par de asuntos que quiero discutir con unos amigos; le falto agregar.

Sergey Nikolevko esperó que los rotores terminaran de girar antes de bajar a la cubierta del Prometheus, donde un oficial lo esperaba para guiarlo a la oficina del capitán Gloval.

Era la primera vez que veía al Macross y a pesar de haberlo visto en fotografías un millón de veces, ninguna se le podía comparar como verlo en persona. Era más grande de lo que hubiese esperado.

Tardaron apenas diez minutos en llegar al jeep que los esperaba en las puertas del portaaviones, y unos cuantos minutos más para llegar a destino.

Sergey golpeó la puerta y la voz de Gloval le dio permiso para entrar.

La oficina era muy amplia, ostentaba el gigantesco símbolo de la UN Spacy pintado en el suelo y una decoración impecable, seguramente elegida cuidadosamente por el capitán mismo.

Es un placer volver a verte Bruno. No recuerdo cuando fue la última vez – dijo Sergey mientras dejaba el expediente, que había traído desde Moscú, sobre el escritorio. Si mal no recuerdo fue en el 2008, después de la bomba en San Petesburgo. Si, estas en lo cierto. Parece que pasó mucho tiempo.

Gloval afirmó con la cabeza mientras sacaba su pipa y la encendía.

Te traje lo que me pediste – prosiguió Sergey – no fue nada fácil sacarlo del Kremlin. Todo el periodo del 93 al 94 esta como secreto y tuve que usar varios favores para sacarlos.

Estuve leyendo todo el expediente en el vuelo y créeme que es algo muy interesante.

¿Que descubriste? En el 93, el Comandante Karpov... Ahora es Capitán – lo corrigió Gloval. Muy bien, el Capitán Karpov fue enviado a la frontera con China y después de varias brillantes misiones se le otorgó el mando de su propio escuadrón.

En uno de nuestros primeros ataque logramos capturar el pueblo de Paicheng, donde descubrimos un aeródromo militar que había sido abandonado sin que ninguno de sus explosivos fueran detonados.

Lo primero que hizo el General Narmov fue enviar un escuadrón al aeródromo para que lanzara más ataques contra la ciudad de Pekín.

Y me imagino que el escuadrón que enviaron fue el del Capitán Karpov. Exacto. Llegó a principios de julio con un escuadrón compuesto de nueve hombres.

Tres días después de su llegada, los Chinos iniciaron un contraataque que retomó todo el territorio perdido y capturó una buena parte del territorio Ruso, incluso sitiaron Vladivostok.

¿Y que paso con Karpov? Lo capturaron los Chinos, fue prisionero de guerra por seis meses y fue el único sobreviviente. Lo encontramos cuando atacamos un pequeño poblado al norte de Pekín. Lo habían torturado física y psicológicamente, pero después de un mes de recuperación se reintegró al ejercito. La recuperación fue demasiado rápida y algunos pensaron que algo andaba mal, pero eran pocos y nadie con la presión suficiente para hacer continuar los estudios.

Desde el primer día en el frente Karpov se mostró más hostil que de costumbre con los civiles del territorio capturado, incluso llego a atacar a un joven que lo "miró mal", según sus palabras.

A pasar de lo raro que parezca nadie tomó la más mínima represaría, después de todo a quien le importaba un chino, y tampoco se lo relacionó con su captura.

Tardaron casi un mes y medio antes de que alguien sospechara algo y solo después de que violara varias ordenes directas y pusiera en riesgo su vida repetidamente. Incluso se reportó que disparó contra varios prisioneros de guerra, matándolos a todos.

Hubo un detalle que me llamó la atención – dijo mientras se acomodaba en el sillón – después de su rehabilitación él dibujó en su avión un gran cuervo negro, idéntico al de la foto que me enviaste.

Entonces es grave, pero no entiendo que fue lo que causó este cambio. Desde que trabaja bajo mí mando siempre fue un soldado modelo y hubiese muerto antes de violar una orden sin una apropiada justificación. Pero la historia no termina ahí, después de que se descubriera su conducta fue internado en uno de los mejores hospitales psiquiátricos de Moscú, bajo atenta supervisión de personas muy importantes.

Se le asignaron los mejores médicos, pero no hubo ninguna mejoría en los primeros meses, solo después de que conoció a una de las enfermeras su conducta cambió radicalmente, incluso pudo sostener algunas charlas con civiles capturados.

Esta enfermera se llamaba Natasha Romanov y a los pocos meses se casaron, teniendo un hijo, Pietro Karpov.

Después de unos meses de estudio el informe psiquiátrico llegó a la conclusión de que Karpov utiliza a otras personas como frenos a la ira que había quedado en su interior después de ser capturado y torturado. Cuando conoció a la señorita Romanov ella funcionó como freno y de esa manera el Capitán pudo frenar su odio.

Pero no me explico porque Ivan no perdió los estribos cuando murió su mujer en 2008. No hay ningún reporte de una falta de conducta de su parte. Eso solo significa que existía otro freno, uno lo suficientemente poderoso como para pararlo y contenerlo. Espera un minuto – Gloval dejo de hablar por unos segundos y trato de recordar algo que pudiese servirle - ¡Cómo no me di cuenta! Era Fokker. ¿De que estas hablando? – Pregunto Sergey intrigado. Ivan conoció a Roy Fokker en el 2002, tuvo seis años para crear una gran amistad con él. Cuando murió su esposa, Fokker funcionó como un nuevo freno lo que no permitió que su ira se desbocara.

Hace no menos de un mes que el Teniente Comandante Fokker murió luego de un ataque enemigo. El freno desapareció y reapareció la ira contenida en los últimos cuatro años.

Eso lo explica todo. Creo que lo mejor que podrías hacer es retirarlo lo más pronto posible y enviarlo a la Tierra, no hay otro remedio. No puedo hacer eso, la moral del Macross esta por el piso no solo perdimos a Fokker, murieron muchos de los mejores soldados que teníamos y si lo retirara ahora terminaría de clavar la daga en el corazón de los pilotos. Él es un símbolo de profesionalismo y de confianza para los demás, simplemente no puedo retirarlo. Pero puede llegar a ser peligroso, Bruno. Si todo lo que me contaste es cierto, él solo guiara su ira contra los extraterrestres y jamas contra alguno de sus colegas, él solo encierra peligro para sí mismo. Entiendo tú idea, pero creo que podemos intentar controlarlo creando otro freno. ¿A quien tenes en mente? – Preguntó Gloval mientras vaciaba su pipa. Hay un joven ingeniero en la Tierra que esta deseoso de entrar en el Macross. Él trabajó en gran parte del desarrollo de las Valkyries, nos puede ser muy útil para informarnos sobre Karpov. ¿Para cuando va a estar en la nave?

Ivan estaba recostado en su silla mientras repasaba la lista de bajas que el Macross había sufrido después de la batalla de Ontario. Le sorprendió que el nombre de Hayao Kakizake apareciera ahí, era una pena. Un gran soldado con un gran sentido del humor y de compañerismo.

Estaba seguro que Ichijo estaría pasando por un muy mal momento, nunca es fácil perder por primera vez a un subordinado. Menos aun después de perder a un gran amigo, tendría que hablar con él más tarde.

Tiró la lista sobre la mesa y se paró para estirar las piernas. Había estado trabajando para reparar su avión hacía ya mucho tiempo y ahora más que nada necesitaba distraerse.

Se dirigió a la puerta y al abrirla se encontró con un joven de pelo rubio, extrañamente parecido a Roy, que vestía el uniforme de ingeniero y traía unos cuantos papeles en la mano.

¿Capitán Karpov? – Preguntó el joven. Si, soy yo, ¿Qué desea? Soy el Técnico en Jefe David Schnider, señor. Recibí ordenes para trabajar con usted, señor. ¿Trabajar con migo? ¿Qué conocimientos tiene? Trabaje dos años en el desarrollo de las Valkyries junto con el señor Chris Takotoku. Fui uno de los encargados del diseño del avión convertible y lo conozco a la perfección tanto técnica como teóricamente.

Ivan se mantuvo en silencio unos minutos mientras revisaba en su memoria. Aun recordaba aquellos lejanos días cuando había empezado a trabajar para Takotoku y el resto del grupo de desarrollo, y creía haber escuchado un par de veces el nombre de este tipo Schnider.

Muy bien David, bienvenido a bordo. Adelante, hay un par de cosas que quiero discutir con vos. Si, señor – respondió mientras seguía al Capitán Karpov al interior del hangar, exclusivamente reservado para él. Lo primero que quiero que hagas es arreglar mí avión, sufrí algunos daños sobre Ontario y no tengo muchas energías como para repararlos.

Antes de que empieces quiero que me cuentes que tal esta la situación en la Tierra, ya que mí estadía fue mas corta de lo que hubiese deseado.

¿Cómo supo que venía de la Tierra, señor? Primero, no me digas más "señor", estamos entre soldados ahora y te autorizo a saltarte el protocolo.

Segundo, no por nada soy Capitán, tengo mucho tiempo de interactuar con los pilotos, técnicos y soldados de la nave, conozco a todo el mundo.

No ha pasado mucho desde que el Macross desapareció, solo algunos rumores entre los soldados.

Más tarde preguntaría sobre los rumores que, infundados o no, siempre eran interesantes fuentes de información cuando se sabía separar la verdad del resto.

Bueno, es hora de que te pongas a trabajar y me muestres que es lo que podes hacer. Entendido.

Se había dado cuenta desde el principio. ¿Acaso creían que sería tan estúpido para caer dos veces en lo mismo? No, esta vez no, pero después de todo le había venido muy bien; ahora tenía alguien a quien podía moldear de cero para que lo apoyara.

Gracias Bruno, siempre fuiste muy atento.