CAPITULO VI "VIDA MUGGLE"
No podía pensar claramente, escuchaba una respiración muy cerca de ella y no veía nada, sin duda alguna era un delincuente y había mas en su casa porque adentro había escuchado a sus amigas gritar, que tonta había sido al abrir y no fijarse primero en quien era.
¿Qué les pensaban hacer? Tres chicas indefensas a merced de delincuentes profesionales. Tenia mucho miedo, la persona que la sujetaba le dio un beso juguetón en la mejilla, ¡que le pasaba a ese depravado! No iba a permitir que se propasaran con ella. Sin pensarlo dos veces soltó un codazo con todas sus fuerzas en lo que reconoció era el abdomen del asaltante, él cual soltó un quejido y se oyó como cayo al suelo, Lily no se detuvo a ver como caía, sino que corrió a su casa, de la puerta de su casa vio como salía un chico, el chico se le hacia muy conocido y detrás de él salía otro chico y sus dos amigas riendo animadamente.
¿Qué pasaba ahí?
-Lily –la saludo Sirius alegremente, traía a Susan tomada de la mano- ¡Feliz Navidad!
-¿Y James? –pregunto Remus, que venia detrás de Sirius.
-¿James? –pregunto Lily, volteo para atrás y vio que donde debía estar el delincuente estaba tirado un muchacho con el pelo revuelto- ¡James! –Lily corrió hacia él.
-Hola –saludo James, levantándose y sobándose el estomago- No sabía que eras tan fuerte.
-Lo siento –se disculpo Lily apenada- pensé… escuche a Susan y a Bella gritar y…
-Grite porque Sirius me asusto por detrás –dijo Susan.
-Y yo grite porque el grito de Susan me asusto mucho –explico Bella riéndose.
-¿Qué paso aquí? –pregunto Sirius riéndose al ver a su mejor amigo sobándose el abdomen.
-Yo tuve la culpa –dijo James, después de explicar lo ocurrido a sus amigos- no debí taparte los ojos.
-Ahora puedes decir que has sufrido por una chica, James –rió Sirius.
-Lo siento James –se disculpo Lily muy apenada- no quise golpearte.
-No importa –contesto James con una sonrisa, no me lastimaste.
-Si claro, –sonrió Remus- Lily, él haría lo que fuera por ti.
-Cállate Remus –mando James.
-¿Y que hacen aquí? –pregunto Bella.
-Mi dulce amor –dijo Sirius mirando a Susan, quien se recostó en su hombro- me dijo que vendrían a ver a Lily, así que nosotros decidimos venir aquí para sorprenderlas.
-¿Cómo vinieron? –preguntó Lily.
-En mi nueva moto –contesto Sirius con orgullo- aunque es muggle le hice algunas pequeñas modificaciones.
-Ya me imagino –dijo Susan sonriendo, conocía a Sirius y de seguro había convertido una inocente moto en una maquina mortal- ¿Y Peter?
-Se fue de vacaciones a Escocia –explico Remus- prometió escribir.
Se escucho el timbre y James se levanto a abrir la puerta, se encontró con un muchacho con poco cuello, pelo rubio y ojos pequeños y graciosos.
-¿Esta Petunia? –pregunto el chico de mal modo.
James no supo que decir –Creo… creo que si –contesto James abriendo la puerta para que el chico pasara.
-Buenas tardes, Vernon –saludo Lily al verlo entrar- enseguida voy por Petunia.
-Gracias –se oyó que murmuro el chico de mal modo.
-¿Eres algo de Lily? –pregunto James tratando de hacer platica.
-Soy el novio de su hermana –contesto Vernon cortantemente.
-Y también un antipático –murmuro Sirius, que recibió un codazo de Remus- Es la verdad –se quejo Sirius.
Petunia bajo con un abrigo puesto, fulmino a todos con la mirada y ella y Vernon se marcharon sin decir adiós.
-Dios los cría y ellos se juntan –suspiro Sirius, a lo que todos esbozaron una sonrisa.
-¿Y que quieren hacer? –pregunto Lily, tratando de olvidar la mirada de Petunia, esperaba que sus amigos no se hubieran ofendido.
-Enséñanos como pasan un día los muggles –pidió Bella.
-Buena idea –la apoyo Remus.
-Bueno –acepto Lily- ¿quieren ir de compras?
Una hora más tarde se dirigían al centro comercial de la ciudad, antes habían ido a Gringotts a cambiar su dinero mágico por dinero muggle, el plan era ver una película, comer, comprar algunos regalos, y haber que más se les ocurría.
El viaje resulto muy tranquilo salvo que Bella, Sirius, James y Remus se sorprendían por cosas tan simples, que apenaban a Lily y a Susan.
Llegaron al Centro Comercial, que estaba adornado magníficamente aunque a pesar de ello los chicos no se sorprendieron, eso no era nada comparado con Hogwarts.
Compraron los boletos para una película romántica a petición de Susan y Lily y esperaron a que empezara comiendo un helado mientras las chicas les explicaban lo que era el cine.
-¡Esta muy oscuro! –se quejo James al entrar a la sala y tropezar.
-SHH –se escucho en la sala.
-Prueben esto –pidió Remus, cuando ya estaban sentados- sabe muy bien.
-Yo quiero –pidió Sirius, tomo la bolsa que Remus le extendía- es verdad ¿Qué es?
-Palomitas acaramilizadas –contesto Remus.
-Acarameladas –aclaro Susan tomando de la bolsa que Sirius le ofrecía.
-SHH –volvió a decir la gente.
Susan miro molesta a ver quienes eran los que los habían callado y se encontró con la hermana de Lily y su novio. Sirius también volteo y sonrió picaramente.
Lily miraba la película, estaba sentada junto a James, que comía alegremente de una bolsa de palomitas de mantequilla.
-¿Quieres? –ofreció James.
-No, gracias –contesto Lily sonriéndole.
James la miro, se veía preciosa, le tomo la mano y Lily también lo miro, sus miradas se encontraron, James no pudo evitar pasarle una mano por la mejilla, Lily lo miraba fijamente con sus ojos esmeralda y James se inclino un poco y comenzó a acercar su rostro al de Lily, ambos cerraron los ojos…
Abrieron los ojos, un puñado de palomitas les habían caído en la cabeza interrumpiendo el beso que habían estado a punto de darse.
James volteo y vio a Sirius aventándole palomitas al ¿novio de la hermana de Lily? Si, sin duda era él, y a su lado estaba la hermana de Lily, también Susan les aventaba palomitas, Remus trataba de calmarlos y Bella los miraba divertidos, hasta que a ella también le cayeron palomitas y también entro a la guerra.
Lily comenzó a reír y James la imito, aunque se sentía frustrado, había perdido otra oportunidad. Muy pronto Lily y James, junto con otras personas se habían integrado a la guerra de comida, la película fue interrumpida y algunos empleados entraron a pedirles a los chicos, a Petunia y a Vernon que salieran de la sala.
Petunia y Vernon se marcharon furiosos, no sin que antes Petunia le gritara a Lily que era un fenómeno, pero a Lily no le importo en lo más mínimo, James había tratado de besarla, no era un sueño, ¡James había intentado besarla!
Estaban muy cansados, tanto Sirius como Remus y James traían varios paquetes cargando cada uno, y las chicas seguían viendo tiendas y probándose cosas, desde zapatos hasta ropa muggle. Ni Sirius ni Remus entendían porque Bella y Susan compraban ropa muggle, si ni siquiera eran muggles.
-Mi amor –pido Sirius hablándole a la puerta del probador en donde Susan se estaba cambiando- ya por favor, ¿para que quieres todo esto? No eres muggle, ya.
-¿Cómo que para que lo quiero? Pues para ponérmelo –contesto Susan saliendo del probador con una blusa café claro y una minifalda café oscuro- me dicen que no es la época para esta ropa pero… ¿Cómo me veo?
-¡Susan! –Exclamo Sirius, levantándose y tomando un vestido largo para tapar a Susan- ponte algo más de ropa.
-¿Qué tiene de malo? –pregunto Susan apartando con el brazo el vestido que Sirius le había puesto encima- a mi me gusta.
Unos chicos que iban pasando vieron Susan y le chiflaron.
-Lo ves –se quejo Sirius.
-¿Tan mal me veo? –pregunto Susan decepcionada.
-No, no es eso, te ves muy bien, francamente te ves preciosa, pero… -Sirius sabia lo que le molestaba, Susan se veía demasiado bien y le habría encantado ese conjunto si Susan solo lo usara para él.
-Siendo así, creo que lo comprare –dijo Susan terminantemente y volvió a meterse al probador para cambiarse.
-Bella, ¿para que necesitas tantos zapatos? –se quejaba Remus.
-¿Estos se me ven bien? –pregunto Bella levantándose y dando un par de pasos.
-Si, se te ven bien pero…
-¡Que bien! Me los llevo. –exclamo Bella, acto seguido comenzó a mirar otros pares de zapatos, Remus suspiro resignado.
-¿Lily, para quien son tantos regalos? –pregunto James que ya venia cargando 3 cajas y 4 bolsas.
-Pues ya llevo para mi mamá, para mi papá, para Susan, Bella, mi hermana, pero aun faltan algunos –contesto Lily distraídamente mirando unos perfumes- además también quiero comprar algo para mí.
-Recuérdame no salir de compras contigo –sollozo James.
Después de dos horas más de compras fueron a comer hamburguesas, las chicas solo se habían detenido porque habían visto que los chicos ya no podían cargar ni un paquete mas, los chicos no habían comprado casi nada, los tres se dejaron caer en las sillas mientras las chicas pedían la comida.
-Ya no quiero cargar nada –se quejo James- ¿Vieron todo lo que compro Lily?
-¿Viste todos los zapatos que compro Bella? –se quejo Remus.
-Eso no es nada ¿no vieron toda la ropa que compro Susan? No entiendo ni para que la quiere, ella no es muggle –se quejo Sirius- además algunas de esas prendas son escandalosas y reveladoras.
-¡Ah, si! La vi con una falda que le llegaba hasta aquí –dijo James señalándose el muslo- se veía muy bien.
-Si, yo también la vi –confirmo Remus- se veía muy bien, eres afortunado Sirius.
-Oigan, ese no es el punto –se quejo Sirius- ¿Qué no ven que si se pone eso va a llamar la atención de todos los hombres?
-Pues entonces tendrás competencia –dijo James sonriendo.
Salieron de comer y regresaron a la casa de Lily, en donde las chicas se mostraron y compararon lo que habían comprado mientras los chicos inspeccionaban la televisión y la video casetera. Finalmente comenzó a nevar y todos se sentaron en el sillón a ver una película de terror, esta vez las guerras de comida quedaron prohibidas.
Sirius y Susan estaban abrazados, ambos estaban asustados y ya no querían ver nada, constantemente saltaban de sus asientos cuando pasaba algún momento especialmente terrorífico. Bella encontraba la película sumamente interesante y Remus no entendía porque, el estaba un poco asustado y no pudo resistir abrazar a Bella en la parte en donde los inocentes jóvenes empezaban a morir uno a uno. Lily también estaba asustada y James le pasó un brazo por los hombros de forma casual, mientras ella se sentía reconfortada, tener a sus amigos ahí había sido su mejor regalo de Navidad.
Ya había oscurecido y era momento de irse, Lily salio a despedirlos a la puerta.
-Fue muy divertido ir de compras a ese lugar muggle, Lily –dijo Susan- espero que volvamos a ir. –Le dio un abrazo- nos vemos en Hogwarts.
-Hasta Luego pelirroja, comprenderás que no te puedo abrazar con todo esto –Sirius estaba cargando los paquetes de Susan, le susurro- prométeme que no volverán a ir de compras o que al menos no tendré que ir con ustedes.
-Me divertí mucho, Lily –se despidió Bella dándole un abrazo- la próxima vez compraremos mas cosas.
-No por favor –pido Remus, lleno de paquetes- Feliz Navidad Lily.
Los cuatro se alejaron y empezaron a guardar los paquetes en una caja que traía la moto en la parte de atrás, curiosamente todos los paquetes entraban y la caja parecía no estar ni la mitad de llena.
-¿Te divertiste? –pregunto Lily a James mientras le acomodaba la bufanda.
-Claro –contesto James sonriente- espero que nos vuelvas a invitar.
-Cuando quieras –sonrió Lily- pero la próxima vez toca la puerta y no te escondas.
-Lo prometo –dijo James sobándose el abdomen- te voy a extrañar.
-Solo son dos semanas.
-Ya lo se, pero estoy tan acostumbrado a ti, que sin ti me siento vació.
-También te voy a extrañar –dijo Lily dándole un abrazo y un beso en la mejilla- promete que te portaras bien.
-Yo siempre me porto bien –dijo James besándole la mano, luego le miro la mano y le deslizo un anillo en el dedo anular de la mano derecha- tu regalo de navidad –explico James.
-Gracias James –dijo Lily, el anillo era de plata y tenia una piedrita blanca en forma de corazón- Aquí esta el tuyo –dijo Lily extendiéndole un paquete, es una colonia, te gustara.
Se dieron un ultimo abrazo y James subió a la moto, en donde los 5 cabían muy bien, Lily los miro irse hasta que se perdieron en el cielo, luego miro el anillo, sonrió y entro a su casa, se lo había pasado muy bien, había sido el mejor día de su vida y ni siquiera ver a su hermana con su fría mirada se lo pudo arruinar.
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HOLA!!!
Un nuevo capitulo, espero que les haya gustado, aunque creo que me salí un poco del contexto de la magia, pero se me hizo curioso imaginar como seria si los chicos pasaran un día muggle, se que pudo haber sido mas divertido, pero bueno, asi quedo finalmente ^-^
PORFAS ME DEJAN SU VALIOSA OPINION, CLARO SI SE PUEDE n.n
Ahora si les debo los adelantos, nos vemos.
Portense mal ^-^ ¿o bien? ¬_¬ NO, mejor mal ^-^
