Típico: Algunos personajes pertenecen a J. K. Rowling, y el resto son míos.
Summary: Después de la caída de Voldemort, las familias de mortífagos se han convertido en mafias que se matan entre ellos para tener el poder absoluto. Este fic contendrá acción, romance, sexo, magia, fiestas…
Nenuf@r: Jaja que vaga, yo tuve que cambiar lo de los reviews, no sabía que los tenía antes para que no me pusiesen anónimos jaja, pero me lo dijeron y lo también. Juas me alegro de que te haya parecido bien el capítulo, jeje yo también tenía ganas de juntarles ya :-p y no se sabe como va a acabar, bueno yo sí, pero no lo voy a decir jaja, pero Syla "está" con él, por eso Draco y Nod le guardarán el secreto, que tierno amor secreto jaja y a Harry con una vampiresa?? Jaja no me pegan mucho, pero ya verás que hago. Jajaja no te preocupes por lo de la frasecita esa jaja, yo también lo digo a veces jaja, y es que es verdad. Ey me alegro mazo de que ahora te guste más. Tríos???? Jaja ostia tía no lo creas, el otro día pensé en hacer uno, jaja alomejor lo hago en otra historia, hay que probar cosas nuevas jeje. Ah el rapsusklei es un rapero, mc es maestro de ceremonias. Juas mi vieja también dice cosas así. Al final no sé si iré a la casa perdida, pero me iré por la noche por ahí y a ver si el amigo de un colega está bueno jaja que dice que me lo quiere presentar ;-) Bueno nena, besazos y tú también a pasarlo bien.
Alici@ M@lfoy: Buenas, bueno, juntos no están… en el capítulo anterior sí, pero tienes que leer este jeje. Espero que también te moles este capítulo. Saludos!!!
lily(): Hola, me alegro de que te esté gustando el fic. Sí muy bien que están juntos, pero hay que seguir leyendo para ver las complicaciones. Aquí tienes la continuación, espero que te agrade.
Iraty Rowling: Mmm Nod es demasiado interesante para dejar de salir en mi historia jeje, así que no te preocupes nuestro vampirillo volverá a aparecer. Ups, me pase con el sexo?? Juas no pasa nada jeje, unos capítulos tienen más y otros menos… jeje. Bueno, ya ves!! Es que hay un montón de coincidencias tía jaja, familia dice… jaja quien sabe!!! En fin, espero que te mole este capítulo que estabas esperando con ansias jeje. Un besazo!! Y a ver si continúas el tuyo, que me está pareciendo interesante!!!
Silence-messiah: No pasa nada jeje, ahora lo has dejado, ya estoy feliz jejeje. Waow muchas gracias tía jeje, esas cosas me animan a seguir escribiendo, a ver si consigo seguir mejorando!! Te cae bien Syla??? Me alegro jeje, es mi viva imagen jaja, aunque ya me gustaría a mí tratar con Nod, Harry, Draco… jaja. Bueno disfruta el capítulo!!!
EL CÍRCULO DE LAS MAFIAS
11. La cena
Syla y Draco se despidieron con un beso prolongado, como si ambos pensasen que sería el último, luego la chica salió de la casa y fue a ver a su padre.
Llegó a la mansión y unos guardias que habían apostados en la puerta la dejaron entrar sin inconvenientes. Syla recorrió el amplio vestíbulo y se encaminó a la sala de reuniones, donde suponía que su padre estaría, abrió sin llamar y se sorprendió de que estaban la mayoría de los miembros del Círculo.
Su padre la miró ligeramente enfadado al no haber llamado a la puerta, la chica entró en silencio y se sentó en un sillón que estaba detrás de la mesa en la que se encontraban todos los hombres hablando del altercado ocurrido la noche anterior en el Dark.
- ¡Debemos tomar medidas! –gritó un hombre de pelo blanco, con un bigote abundante y cejas pobladas.
- No creo que la mejor opción sea actuar –dijo Sigor mientras se tocaba el mentón.
- ¿Y dejar que entren en nuestros locales y ataquen a nuestra gente? –preguntó indignado un señor con una cicatriz que cruzaba por su ojo. Los hombres comenzaron a murmurar exaltados.
- Caballeros por favor –se impuso delicadamente Ville- sé que estáis indignados –al ver las cabezas que se movían afirmativamente añadió- de hecho, yo también, pero esto debemos pensarlo con calma, ya sabéis que la Orden no tiene reparo a la hora de realizar juegos sucios.
- ¿Y qué propones? –preguntó el hombre de pelo canoso que había hablado primero.
- Propongo que hablemos con Harry Potter –un murmullo recorrió toda la mesa. Ville se giró hacia el sillón en donde estaba su hija- ¿sigue en la casa?
La chica asintió y se dio por concluida la reunión, los miembros fueron abandonando la sala dejando solos a padre e hija. La chica se levantó del sillón y se acercó a la mesa para sentarse en el sitio que había quedado libre al lado de su padre.
- Esta noche vendréis a cenar a casa –Syla asintió obedientemente mientras se levantaba y se dirigía hacia la puerta para ir a su habitación y ponerse algo de ropa suya- ¿sabes algo de Draco? –Syla se paró en la puerta y sintió como el corazón le daba un vuelvo ante la mención del rubio.
- Está en casa de Nod, le avisaré para que venga también –cuando iba a salir su padre volvió a hablar, esta vez con una voz menos imperativa.
- ¿Estás bien Syla?
- Sí –contestó la chica secamente mientras salía y cerraba tras ella la puerta.
Syla caminó por los pasillos de su casa hasta llegar a su cuarto, al que ya hacía tiempo que no entraba. Abrió la puerta y sonrió al ver que todo continuaba en orden, como ella lo había dejado antes de marcharse.
Se fue al vestidor y se puso unos pantalones algo más estrechos que los que le había dejado Harry, pero al fin y al cabo seguían siendo de varias tallas mayor. También se cambió la camiseta por otra ceñida al cuerpo de color negro y con algunas letras estampadas en la parte del pecho.
Syla salió de su cuarto y se fue hacia la lechucería, garabateó una nota diciéndole a Draco que viniese y otra a Harry en la que le indicaba el lugar y hora para quedar antes de cenar. Se quedó mirando como una lechuza negra salía hacia la morada de Nod y otra pardusca se dirigía hacia la nueva casa de Harry.
La chica volvió a su cuarto, se fue al cuarto de baño y se miró en el espejo, el pelo azul le caía por la cara, sacó un bote de tinte mágico y preparó la mezcla para aplicarlo a su cabello, esperó el minuto que decía en las instrucciones y se enjuagó la poción.
Alguien llamó a la puerta, Syla salió del baño y fue hacia ella, quitó el pestillo y se encontró a su amigo Henry.
- Hola Syla –dijo el joven mirándola de arriba abajo- vaya has vuelto al morado –sonrió mientras miraba el cabello de Syla. Henry pasó a la habitación y se sentó en un silloncito que había, Syla hizo lo mismo- ya me han contado tu "proeza" con Potter.
- No es ninguna proeza –contestó furiosa.
- Vale vale lo siento –hubo una pausa incómoda- bueno, nosotros aún seguimos vigilando a los miembros de la Orden, últimamente están más activos, después de la entrada en el Dark se han reunido varias veces en lo que va de día. Creemos que están preparando un golpe fuerte contra nosotros.
- Es posible –dijo Syla sacando un cigarrillo y algo para mezclar- ¿van a venir todos a cenar?
- Sí, será una "cena" familiar –Henry rió mientras miraba a Syla liar el porro- lo han disfrazado como una fiesta para evitar levantar sospechas…
- Es una locura, ¿y si atacan cuando estemos todos? –le cortó Syla.
- Lo han pensado, pero por lo que hemos estado vigilando, aún no tienen demasiadas fuerzas ni ningún plan, van a esperar, Tim escuchó una conversación que tuvo Granger con Lupin, si no hubiese sido por la chica, vendrían hoy.
- Al menos tienen a alguien inteligente, meterse en esta casa hoy sería un suicidio para ellos –Henry asintió mientras un humo envolvía a Syla.
- ¿Qué tal salió de Lupin? –dijo el chico suavemente.
- Desobedecí a mi padre –hizo una pausa- pero al final creo que ha salido mejor de lo que nadie pensaba, Harry está de nuestra parte…
Henry y Syla estuvieron fumando durante un rato, la hora de la cena se estaba acercando, por la casa había mucho movimiento, elfos domésticos por doquier llevando platos, vasos, otros arreglando el comedor para la ocasión, buscando sillas, más mesas y se oía el jaleo de algunos magos dando órdenes, esa noche sería importante para el desarrollo del plan contra la Orden.
La gente empezó a llegar, miembros del Círculo venían acompañados de sus mujeres e hijos, se les dejó pasar al enorme comedor, y se fueron repartiendo por las mesas, había una, que estaba en el centro, era la que presidiría Sigor y en la que estarían los miembros más importantes.
Syla se vistió con un traje morado, ceñido y largo, abierto con una raja en el lado derecho, que subía desde el suelo hasta el muslo. La chica iba muy elegante y se dejó el pelo suelto, cayendo por su espalda con forma de rizos elaborados.
Henry y Syla esperaron en el vestíbulo e iban recibiendo a la gente, pronto vinieron Tim y los gemelos españoles, también llegó Nod con Draco, Syla se acercó al vampiro y le dio un abrazo mientras él alababa el vestido y lo bien que le quedaba, como de costumbre, Nod iba pulcramente vestido con un traje a su medida de color negro y con una capa color rojo sangre.
Syla y Draco cruzaron una breve mirada antes de que un joven moreno y con actitud nerviosa cruzó la entrada.
- Hola Harry –dijo Syla acercándose al chico- sígueme, mi padre te está esperando.
Harry cogió la mano que le tendía Syla y la siguió hasta el comedor, Sigor se levantó de la mesa del centro y se acercó sonriendo a Harry.
- Bienvenido señor Potter –estrecharon las manos- después de la cena tendremos que intercambiar unas palabras, mientras tanto sigue a Syla que os indicará dónde comeréis vosotros.
Harry siguió obedientemente a Syla hasta la mesa más cercana de la del centro. Cuando llegaron, ya estaban sentado Tim, Henry, los gemelos, Draco, Antón, Nod y algún joven más.
Draco miró con los ojos entornados a Harry, pero en su cara había una sonrisa algo sarcástica, los demás observaron evaluadoramente a Harry y en algunos de ellos no había muestras de aprobación, al fin y al cabo los padres de algunos habían sido mortífagos. El señor Sigor por el contrario, nunca había hecho nada por lord Voldemort, siempre había actuado sin jefe y no siempre había estado de acuerdo con las cosas que hacía el Señor Oscuro.
- ¡Qué agradable sorpresa Potter! –Draco escupió las palabras con odio- vuelves a ser el centro de atención ¿lo echabas de menos? –la gente que entraba en el comedor señalaba o miraba a Harry y cuchicheaban entre ellos.
- Cállate Malfoy –dijo cansado Harry mientras tomaba asiento al lado de Syla.
- Ten cuidado con lo que dices Potter –dijo el rubio amenazadoramente y con una voz que hizo que los que estaban sentados con ellos se estremeciesen- ahora las cosas son diferentes.
- Bueno –comenzó Syla para cortar la respuesta de Harry- ¿qué tal estáis todos? Hacía tiempo que no nos veíamos.
Los demás empezaron a hablar y a reír animadamente, mientras aparecía comida delante de sus platos. Syla miró significativamente a Draco para que tuviese cuidado con lo que decía y el joven únicamente la sonrió de manera seductora y se concentró en su plato.
Se sirvió un segundo plato para dejar paso posteriormente a unos postres exquisitos, los ojos grises de Draco se encontraron en varias ocasiones con los marrones de Syla, cosa que no pasó desapercibida para Harry.
Nod y Antón habían congeniado muy bien y hablaban animadamente mientras los demás terminaban el postre. Cuando Sigor se cercioró de que todos habían acabado, hizo llamar a los hombres y mujeres del Círculo y las demás les hizo pasar a un salón para que pudiesen bailar y divertirse mientras tanto.
Harry se levantó y caminó junto a Syla en silencio, con expresión contrariada en su rostro.
- ¿Qué te pasa? –preguntó Syla al verle la cara.
- No, la pregunta es ¿qué te pasa a ti con Malfoy? –escupió esas palabras como si le quemase la garganta al pronunciar el apellido de Draco. Syla se quedó callada.
- N-no pasa nada Harry –dijo con tono tranquilizador- no sé por qué lo dices.
- Ah no –empezó a utilizar un tono irónico- sabes, no estoy ciego –y dicho eso adelantó el paso y caminó a una distancia más o menos larga de Syla.
- Creo que no está contento –dijo Antón que venía al lado de Nod- por cierto, ese Harry es mejor chico que Draco.
- No exactamente –contrarió Nod- son diferentes, pero eso no quiere decir que uno sea mejor chico que el otro –Syla no contestó, observó a Harry que estaba hablando con Henry.
- No es bueno hablar de la gente cuando no están presentes –una voz que arrastraba las palabras les hizo sobresaltarse.
- Tampoco es bueno escuchar conversaciones ajenas –Syla fulminó con la mirada a Draco, el cual sonrió de medio lado.
- ¿Problemas con el novio? –preguntó recalcando con sorna la palabra novio. Nod y Antón se miraron y decidieron alejarse un poco.
- No es mi novio –contestó de malos modos- y a ti no te importa en absoluto lo que pase.
- Claro que no –dijo acercándose peligrosamente por la espalda- porque sé que luego vendrás a mí.
Syla se paró de golpe, haciendo que Draco casi tropezase con ella, se giró y le dio un guantazo. El sonido del golpe quedó amortiguado por el ruido que hacían las personas al entrar en la sala de reuniones.
Draco se frotó el lado golpeado y vio la mirada reprobatoria de Nod, a lo que se encogió de hombros y entró él también en la sala. Fueron tomando todos asientos, y el señor Sigor se fue hacia el frente, para que todo el mundo pudiese verlo y escucharlo.
- Bienvenidos –dijo cordialmente- bueno, todos sabréis por qué estamos aquí reunidos –hizo una breve pausa- tenemos que hacer un plan y tenemos como invitado de honor a Harry Potter –un murmullo recorrió la sala- acércate muchacho –Harry se levantó de su asiento y se puso al lado de Sigor- ¿quieres hablar? –Harry asintió y se aclaró la garganta.
- Existen muchas leyendas sobre la Orden del Fénix, muchos mitos, cuentos… que la gente se empeña en negar, pero no son mentiras –un murmullo afirmativo recorrió la sala- vosotros, habréis sufrido en vuestras propias carnes lo que hace realmente la Orden, son unos hipócritas que ante el mundo mágico se muestran como los defensores y siempre mediante la justicia y la paz –hubo otro murmullo- eso es mentira, son iguales a cualquier asesino, entran en las casas, torturan y se llevan prisioneros, y los hijos están delante, luego les borran la memoria y todo arreglado –hizo una pausa para que todos asimilasen lo que acababa de decir, algunos estaban asombrados, otros ya lo sabían- creo que hay que atacarles con sus propios métodos.
- El muchacho tiene razón –interrumpió Sigor- capturaremos al líder: Remus Lupin y le traeremos a la Mansión –se hizo el silencio- como son tan estúpidos vendrán a rescatarle, pero les estaremos esperando preparados, y la guerra empezará –la gente estalló en aplausos y en gritos amortiguados- ahora señores y señoras, ¡vayan a divertirse!
La gente salió en tropel hacia el salón, en donde les recibieron las mujeres e hijos, pronto se creó un ambiente muy agradable, todos charlaban y reían.
Syla se alegró al ver a una chica más o menos de su edad con un pelo color negro y lacio que caía hasta los hombros, tenía la piel cetrina y unos ojos inusualmente negros.
- Syla –exclamó la chica nada más verla, corrieron y se dieron un abrazo- ¿qué tal estás primita?
- Muy bien –dijo apartándose para mirar a la hija del hermano de su madre- estás preciosa Stacy.
- No más que tú –dijo sonriendo y guiñándole un ojo- es guapo el chico Potter.
- Ven, te lo presentaré.
Syla agarró la mano de su prima y tiró de ella mientras sorteaban a algunos adultos que bailaban y se encaminaban hacia donde estaba Harry hablando con Henry, parecía que los dos se habían caído bastante bien.
- Harry –dijo intentando sonar natural, el chico la miró, pero en su cara no había muestras del enfado anterior- esta es mi prima Stacy Snape.
- Encantada Harry –dijo la chica dándole la mano a un boquiabierto joven- sí, ya sé que no te cae muy bien mi padre, pero en eso coincidimos –Harry y Stacy rieron a la vez.
La prima se fue presentando al resto de los jóvenes, a los gemelos españoles, a Henry, a Tim, al que se le quedó mirando de arriba a abajo.
- Snape –sonó una voz un poco cruel y la chica al reconocerla se dio la vuelta azorada- cuánto tiempo sin verte –dijo Draco ensanchando su sonrisa al ver los mofletes colorados de la joven.
- ¿Ya os conocíais? –preguntó Syla.
- Pasé un verano en casa de Snape y tuve el placer de conocer a su hija.
- Seguro –musitó Harry sarcásticamente.
- ¿Algún problema Potter? –dijo Draco mirándole con odio.
- Creo que el soportar tu presencia es un grave problema –dijo mordazmente. Las cejas de Draco se alzaron.
- Pues yo creo que te tendrás que ir acostumbrando Pipipote –Harry no oía ese nombre desde el quinto curso de Hogwarts- al fin y al cabo yo vivo aquí –Harry miró con ojos como platos a Syla.
- Mi padre es su tutor –dijo ella como toda respuesta. Draco sonrió con autosuficiencia.
- ¿Alguien quiere bailar? –interrumpió Stacy mirando a Harry. El chico miró a Syla que le sonrió y le hizo un además con la cabeza para que bailase con ella. Harry se puso rojo porque no sabía bailar, pero antes de poder contestar los brazos de Stacy le empujaron a la zona de baile, y comenzaron a guiar al patoso Harry por toda la sala.
Los demás chicos se fueron a buscar pareja y pronto estaban todos riendo y bailando por todo el salón. Syla y Draco se quedaron solos, y Harry les miraba disimuladamente de vez en cuando.
- Déjale en paz, ¿quieres? –dijo Syla molesta.
- No he hecho nada –Syla se giró para contestar a Draco, pero la cara angelical que tenía en esos momentos la dejó sin habla- ¿quieres bailar? –sonrió seductoramente y se acercó a Syla mientras la agarraba de la cintura y la atraía con delicadeza hacia él.
La llevó al centro y comenzó a moverse con ella al ritmo de la música lenta, pegando su cuerpo al de ella y haciendo que Syla respirase con dificultad ante la proximidad de su boca al cuello de la joven.
- Draco –dijo con un susurro.
- Dime –se miraron a los ojos.
- Eres irresistible –Draco sonrió misteriosamente.
- Ya lo sé preciosa –Syla le miró con los ojos muy abierto peor en su boca había una sonrisa, y le dio un golpe juguetón en el hombro.
- No sabía que estuviste con mi prima –dijo mordazmente.
- Oh bueno –levantó una ceja y sonrió- digamos que lo único que hice fue desvelarle el mundo del sexo a tu querida primita.
- Eres un bruto –dijo en tono cortante.
- Y tu un bombón –Syla se perdió en los labios de Draco, rojos, medio abiertos, tan apetecibles, tan deseados, levantó la mirada y una tormenta de cielo gris se apoderó de ella, mientras perdía el control y caía en aquellos ojos fríos y grisáceos. Los labios de los dos chicos se acercaron peligrosamente.
- Ey Syla –les interrumpió Stacy- no sabía que bailases tan bien.
Syla la miró y sonrió falsamente, luego se giró hacia Draco y tragó con dificultad. Cerró los ojos mientras se dejaba llevar por Draco y los volvió a abrir para girar la cabeza y mirar a Harry, que sonreía a Stacy mientras hablaban animadamente y había logrado bailar con algo más de gracia.
- Me he dejado llevar –la voz de Draco la sacó de sus pensamientos.
- Ya –susurró- yo también.
Dejaron de bailar y se separaron lentamente, luego fueron hacia el balcón donde había estado la primera noche que Draco apareció en su vida y se sentaron en la barandilla de mármol, con los pies suspendidos a varios metros del suelo.
- Stacy ha dejado asombrado a Potter –le confesó Draco mientras la miraba de reojo.
- Lo sé, y me alegro.
- ¿Por qué? –preguntó esperanzado el rubio.
- Porque Harry se merece algo mejor que yo -Draco se movió bruscamente hacia Syla.
- Eres tonta –dijo mientras cerraba las distancias y sellaba los labios de la chica con los suyos.
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Buff jaja al fin lo he acabado, ais llevaba un huevo de tiempo con este fic.
Pensé que ya no lo iba a acabar, bueno, al menos aquí s descubro cosillas de la Orden del Fénix, a que no os lo esperabais??? Pues yo si :-P jaja.
Bueno, que os parece Stacy? Es una chica curiosa, no se parece mucho a su padre, digamos que es lo contrario, ella es alegre, risueña, amistosa… mientras que Snape… en fin jeje todos sabemos cómo es.
Espero que os haya gustado aunque sea un poquillo este capítulo.
Gracias por leer.
Y dejar reviews!!!!!!!!! Please pleaseeeee.
