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EN EL CAPÍTULO ANTERIOR...

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- Shinichi... no te vayas... por favor -pedía Ran acariciando la cabeza del niño que tenía entre sus brazos- No me dejes sola otra vez... -repetía sin dejar de llorar.

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- ¡Apártese! -le gritó una enfermera arrancándole a Conan de sus brazos- Sáquenla de aquí inmediatamente -le ordenó a otra enfermera bastante más joven que ella, de unos treinta años, que sujetaba una bandeja con material quirúrjico.

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La enfermera cogió a Ran, que luchaba por quedarse junto a Conan, y la sacó de la habitación, entregándosela a una joven, Kazuha, que acababa de llegar con Heiji.

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- ¿Qué ha pasado? -preguntó el detective de Osaka asomándose por la ventanilla de la puerta de la habitación de Conan.

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- No lo sé, no lo sé... -dijo Ran abrazándose a Kazuha.

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Los médicos mientras luchaban por salvarle la vida a Shinichi...

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CAPÍTULO 7:

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Varias horas después pudieron volver a entrar en el cuarto, acababan de traer a Conan de la sala de operaciones, pues habían tenido que operarlo otra vez por un problema cardiovascular, una de las arterias se había obstruído a causa de la coagulación de la sangre que causaba uno de los medicamentos que le estaban suministrando. A Ran le dieron un calmante que la hizo dormir todo el día siguiente a la operación, pues estaba muy cansada. Cuando se despertó, ya en su casa, pidió regresar al hospital. Hablaron con el doctor Fujiyama, que les dijo que tendrían que seguir esperando pues continuaba en coma.

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Al día siguiente, cuando llegaron Kazuha y Heiji a la habitación del pequeño, Ran estaba dormida, tumbada junto a Conan. La veían tan tranquila que tardaron un poco en despertarla.

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- ¿Desde cuando lleváis aquí? -preguntó bostezando cuando sintió que su amiga de Osaka le tocaba el hombro.

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- Desde hace un par de minutos -mintió Kazuha- ¿Cómo está?

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- Nada -dijo Ran desanimada controlando la voz para que no se le quebrara. Cada vez perdía más las esperanzas.

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- ¿Y tú? -quiso saber Kazuha, interesándose por ella, algo que Ran agradeció con la mirada aunque no contestó.

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- Ven, vamos a desayunar algo a la cafetería, Heiji se quedará con Conan.

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Las dos chicas salieron y los dejaron solos. El detective de Osaka se sentó en el sillón junto a Conan, que continuaba inmóvil, a hojear una revista para pasar un poco el tiempo.

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- Kudo, despiértate de una vez, tu chica te está esperando. Además sino... ¿Con quién me compararán a mi? ¿Con el paleto ese de Kojiro Sutomu? Cada vez que lo veo... tú eres como yo por eso me caes tan... -dijo en voz alta, aunque luego se sintió ridículo.

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Heiji notó algo que se movía en el lecho y lenvantó la vista de la revista, Conan estaba mirándolo con una sonrisa maliciosa en los labios como cuando está a punto de resolver el misterio que llevará al verdadero asesino a la cárcel.

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- ¿Así que con Sutomu, eh? -le dijo sonriendo el pequeño detective.

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- ¿Qué haces despierto? Quiero decir, ¿cómo estás despierto? -preguntó Heiji poniéndose en pie casi de un salto.

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- Llevaba despierto un rato, desde antes poco de que llegárais -le informó cruzando los brazos sobre la cabeza, hizo una mueca de dolor por la postura forzada.

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- ¿Y cómo no nos avisaste? -quiso saber incrédulo apartando la revista a un lado. Ahora estaba aún más sorprendido.

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- Estaba pensando -contestó simplemente sin darle importancia.

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- Esto es genial, iré a avisar a Mouri -dijo dirigiéndose hacia la puerta, que en esos momentos se abría bruscamente y golpeaba a Heiji fuertemente y lo lanzaba al suelo sin remedio...

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En el umbral aparecieron los padres de Shinichi, Yusaku y Yukiko, venían llenos de bolsas repletas de otras bolsas a su vez. Se quedaron asustados al ver a Heiji tirando en el suelo, frotándose la nariz, al darse cuenta de lo que había pasado se disculparon por haber entrado así.

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- ¡Shinichi, hijo! -dijo Yukiko abalanzándose sobre Conan, que se alegraba de verlos allí- Me alegra tanto de que ya estés bien, ayer nos llamó Agasa y nos dijo que estabas en el hospital, menudo susto nos llevamos, intentamos venir en el momento pero estaban todas las plazas del avión ocupadas, con esto de la Navidad todo el mundo quiere volver con la familia... teníamos dos pasajes reservados para la semana que viene para así poder pasar las Navidades contigo pero claro, no íbamos a dejarte solo en este estado una semana más... y dime, ¿cómo te encuentras? -preguntó finalmente, después de volver a tomar aire para recuperar la respiración normal.

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- Ya estoy mejor -dijo sonriendo, celebrando que Agasa no les hubiera dado todos los detalles de lo ocurrido- Papá, ¿qué tal tu novela? ¿Has acabado ya?

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- Casi está, cuando la tenga serás el primero en leerla -le contestó aceptando su brusco cambio de tema- A tu madre no le gusta demasiado pero nunca le hago caso en esas cosas, siempre le ve errores -comentó rascándose la cabeza.

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Heiji mientras había ido en busca de Ran y Kazuha, que estaban desayunando en la cafetería. No les dijo nada, simplemente que subieran. Sonreía tontamente y Kazuha supo que algo había pasado. Una vez en el pasillo dejaron que Ran, bastante decaída y sin la energía que la caracterizaba, encaminara la vuelta a la habitación, ya delante de la puerta oyó voces en el interior, su corazón le dio un vuelco. Abrió la puerta de par en par, pero despacio.

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- Hola Ran -saludó Yukiko al reconocerla. Se acercó a ella, que no dejaba de mirar hacia la cama.

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- Bueno, nosotros vamos a comer algo que con el desfase horario... -sugirió Yusaku frotándose la barriga y saliendo de la habitación, llevándose a su mujer con él, que intentaba permanecer en la habitación el mayor tiempo posible.

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Ran continuaba inmóvil frente a la puerta. Heiji se le acercó y la empujó hacia el interior del cuarto, cerrándole la puerta. En ese momento pudo ver por fin, después de tanto sufrimiento, los ojos de Shinichi abiertos, ahora se daba cuenta, eran los de él, nunca debía de haber dudado. Estaba recostado en la cama, devolviéndole la mirada dulcemente, aguardando. Parecía que el tiempo se había detenido para ellos, podía oír la respiración de Shinichi a pesar del monótono ruído de las máquinas y del leve barullo del pasillo aunque lo que sin duda más notaba era su corazón, al galope en su pecho, intentando salir. Y ahora... él levantaba su mano para que se acercara, Ran corrió, pero la coordinación de sus piernas falló por la emoción que la embriagaba y tropezó y apunto estuvo de caer, pero la cama la retuvo. Se abrazó a Conan. No, pensó, a Shinichi, y notó de nuevo el calor de su cuerpo y de su corazón, ahora sí que se sentía segura de nuevo, de esa forma, abrazada a su ser amado. Las lágrimas resvalaban nuevamente por su rostro pero ahora no eran de tristeza sino de alivio y de alegría, no cesaban de caer pero ya nada le importaba.

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- Ran yo... -comenzó Conan sin dejar de abrazarla, se sentía raro rodenado el cuerpo de ella con unos brazos tan pequeños- No sabes lo mucho que siento que lo hayas pasado tan mal no...

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- Shhhh... -le dijo Ran apartándose un poco y mirándolo a los ojos fijamente.

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- No. Quiero explicártelo -pidió- Sé que debería de habértelo dicho hace mucho pero... no quería ponerte en peligro, esa sería la última cosa que desearía en este mundo. Tienes todo el derecho a enfadarte pero no dejaré que te vayas sin que sepas toda la verdad -fue entonces cuando le contó todo lo ocurrido con la organización y el APTX 4869, sacando ciertas cosas para no alarmarla demasiado. Esperaba una reacción de sorpresa o enfado pero no ocurrió nada de eso sino que se quedaron en silencio- ¿Ran? -ahora^ella lloraba de nuevo (no está demasiado llorona¿? xDD)]. Aguardaba su respuesta.

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Ella por fin se secó las lágrimas y pudo hablar, aunque el sonido que salió de su garganta poco se parecía a la voz normal que tenía siempre.

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- Ya lo sabía, lo sabía todo. El profesor me lo contó; te oí hablar con Hattori por teléfono y supe que todo este tiempo habías sido tú.

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- ¿Lo sabías? -se asombró Shinichi dentro del cuerpo de un niño de seis años.

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Ella asintió. Aunque su bocas no podían decirlo sus corazones hablaban por sí solos y se sintieron más unidos que nunca... y permanecieron así para siempre.

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Días después Shinichi volvió a casa, todo estaba como antes, excepto por el tamaño de su cuerpo, ahora su padre también estaba ayudándolo, y Heiji desde Osaka... finalmente unos meses después encontraron a la Oraganización y Shinichi y Haibara volvieron a ser los de antes...

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FIN

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NOTAS: Lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé, lo sé... el final es una auténtica mier** pero lo siento, cuando lo acabé estaba medio enferma y no fui capaz de mejorarlo... y ahora, meses depués, no me sentía con ganas de retomarlo y hacer un final decente... T_T Os dejo que me peguéis si no os gusta (aunque espero que no lo pongais en práctica xDD). Además el chapter me salió muy cortito porque el anterior era la unión de varios... pero en fin -_-U

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De toas formas espero vuestros comentarios (que me temo que esta vez van a ser más negativos que otra cosa, pero weno, eso siempre es constructivo ^.^UUUUU) así que dejad R/R o sino escribidme a: akima_chan@hotmail.com diciendo qué os ha parecido el fic en general o este chap en particular... ^___^

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Felices vacaciones de Semana Santa --- Descansar, dormir y divertíos mucho!!! ^__________________^

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¡¡¡Y con esto y un bizcocho... hasta el próximo fic-ocho!!! Jajaja, vaya rima más malaaaaaaaaaaaaaa!!!!!! xDDDDDDD

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INFORMACIÓN: ¡¡¡VOY A SUBIR UN NUEVO FIC!!! SE TITULA ' E l m i s t e r i o d e l a I s l a S h i k k u ' y este es un breve resumen: Shinichi, Ran, Heiji, Kazuha y Shiho van de 'vacaciones' a la Isla Shikku. Ran no sabe por qué Shinichi y esa extraña científica se llevan tan bien, piensa incluso que hay algo más entre ellos, y está enfadada con el detective. Por otro lado Kazuha intentará ayudarla, mientras que Heiji... pronto aparecerá ante ellos algo inesperado, uniendo sus destinos!!! Espero que lo leais!!!!!!!!! ^________________^

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¡¡¡Dedico este fic a: Erika Kazuha y Yumiko Minamino!!! Por ser las primeras personas que leyeron mi primer fic de Conan ¡¡Un saludo wapísimas!! Y muchas gracias al resto de gente que se molestó en leerlo... sobre todo a Sonia (¡¡mucho ánimo apíxima!!) Por cierto, otra dedicatoria que casi se me olvida y sería imperdonable... DEDICO ESTE FIC (x tercera vez xDD) A MIS 'AMADOS' PROFESORES POR SUS ABURRIDAS EXPLICACIONES, QUE ME PERMITIERON VOLAR MI IMAGINACIÓN TANTAS VECES, Y ASÍ SE ME OCURRIÓ ESTE FIC Y LOS OTROS DOS (sobre todo el último, el de la Isla Shikku xDD) ¡¡¡GRACIAS PROFES!!! xDDDDD

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Uuuunnnnn ssssssaaaaaaaaalllllllluuuuuuudddddeeeeetttttteeeeeeeeeee ddddddeeeeee Táigrïn Dido xDDDDDDDDD

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