¡¡Hola a todos!! Intente escribir rápido, espero que les guste, saludos,
como siempre a los que me dejan esos Reviews que tanto me gustan: a Jenny
Potter Back Malfoy Weasley; Eleanor Black en este capitulo esta la venganza
que reclamas mas o menos); Marie Ann, Lamister; Josie; Lucia; Blair 84;
dani-chan-sf.
Saludos especiales a Carlita Heart (a la tercera va la vencida); Thurisaz7
y Lily McGonagall.
Les aviso, el próximo capitulo será el ultimo. Pero ya escribiré otros
Fics. Lo siento, pero la vida es así, tal vez escriba uno en el que salga
la hija de Emily y Sirius ¿Qué les parece? ¿Quién me adivina como se
llamaría la hija de Sirius y Emily? Bueno, LEAN!
Capitulo 14: Bienvenidos a la orden.
Con la vuelta de Lily, volvió el buen humor para los merodeadores y las merodeadoras, sobre todo para James que abandono su estado melancólico para sumirse en una alegría frenética. Andaba de aquí para allá, y como había hecho Sirius con Emily, mimaba y cuidaba a Lily cuanto podía. Lupin y Niky, por su parte también parecían acaramelados y encantados todo el día, la muchacha se pasaba mucho tiempo estudiando para convertirse en animaga, y Remus la ayudaba cuanto podía. Emily y Sirius continuaban con su buen humor habitual, gastándose bromas y pegándose el lote por todas las aulas vacías que encontraban. Un día, Lily salía de la biblioteca y se dirigía a la guarida de la gárgola, donde probablemente estarían James y los otros merodeadores, toco la nariz a la gárgola y bajo por el ascensor. Cuando entro vio a Sirius y Emily durmiendo la siesta abrazados en su sillón habitual, y a James que estaba tumbado en otro sillón jugueteando con la Snich que le había regalado ella.
-Hola-saludo James sonriente en tono bajito para no despertar a Sirius y Emily.
-Joder con estos dos- dijo Lily devolviéndole la sonrisa a James-se pasan el día, o durmiendo o peleando o besándose.
-Se quieren mucho-dijo James mirándoles dormir- quien se lo iba a decir a Sirius... ¡Sirius Black enamorado! Me lo dicen a principio de curso y no me lo creo, pero Emily es perfecta para el.
-Son tal para cual- concluyo Lily.
-Y tu deberías descansar mas ¡acabas de despertarte de un coma de dos meses!- regaño James
Lily se acerco a James le dio un breve beso en la boca y se acomodo junto a el en el sofá, James la rodeo con el brazo.
-Es que no puedo dormir por el día, no se...no me entra sueño...-dijo Lily
-¿Por qué no le dices a la señora Pomfrey que te recete algo?-sugirió James preocupándose por Lily.
-¿Por qué no me cuentas un cuento? Quizá así consiga dormir...-dijo la chica mirando picaramente a James.
-Vale...un cuento....mmm...-dijo James devolviéndole la sonrisa y mirando al techo pensativo mientras se revolvía el pelo-....pero túmbate bien...
Lily abrazo a James con los dos brazos y apoyo su cabeza en el pecho de chico.
-Y cierra los ojos-dijo James, Lily obedeció y cerro los ojos, el chico comenzó ha acariciar la cabellera pelirroja de Lily- vale, comienzo el cuento-dijo James- erase una vez una princesa, que vivía en un palacio, la princesa era muy guapa, tenia una preciosa melena pelirroja, una sonrisa encantadora, y unos preciosos ojos verdes que dejaban embobados a todos los príncipes que iban a visitarla. Cuando la princesa era pequeña, un hada la hecho un hechizo que decía que solo se podría enamorar de un príncipe que le dijera dos palabras mágicas. Cuando la preciosa princesa se hizo mayor muchos príncipes fueron a visitarla, pero ninguno le gustaba y ninguno le dijo las palabras, además la princesa era un poco cabezota...
-¡La princesa no era cabezota!- interrumpió Lily en tono de broma
-¿Quién esta contando el cuento?-pregunto James
-Tu-dijo Lily con sonsonete.
-Pues en mi cuento la princesa era cabezota, encantadora, pero cabezota- inquirió James- ¿Vale?
-Vale-acepto Lily.
-Bueno, pues continuo-dijo James- la encantadora, pero cabezota princesa, no aceptaba a ninguno de los pretendientes que venían a su palacio a pedirle matrimonio. Pero un día, llego al palacio un príncipe, que se enamoro perdidamente de la princesa, y se propuso firmemente, que aunque fuera lo ultimo que hiciera en el mundo, acabaría casándose con esa princesita pelirroja.
-¿Cómo era el príncipe?-pregunto Lily
-¿Cómo vas a dormirte si no dejas de interrumpirme?-dijo James dando a la muchacha un beso en los labios y sonriéndola.
-Solo quiero saber como era el príncipe-dijo Lily tiernamente- ¿era guapo, y de pelo negro y despeinado?
-Si, más o menos- sonrió James- cierra los ojos, continuo... ¿por donde me había quedado?
-Un guapo príncipe había llegado al palacio se había hecho el propósito de casarse con la princesa pelirroja- aclaro Lily
-Si..eso...-dijo James revolviéndose el pelo-el joven príncipe, se había enamorado, por primera vez en su vida de aquella princesita pelirroja, pero ella, lo odiaba y eso ponía muy triste al príncipe. Entonces el escudero del príncipe, viendo lo triste que estaba este por el rechazo de la princesa, fue a pedir ayuda a la doncella de la princesa, la doncella y el escudero intentaron ayudar al príncipe a que la princesa se enamorara de el, pero la princesa no aceptaba al príncipe porque este no averiguaba las dos palabras. Finalmente la doncella y el escudero se enamoraron y dejaron de ayudar al príncipe por que estaban más ocupados dándose el lote por todo el palacio-dijo James mirando a Sirius y Emily que dormían profundamente- pero el príncipe no se rindió, entonces la princesa se dio cuenta que de lo de las palabras mágicas era una chorrada decidió aceptar al príncipe, pero entonces un malvado dragón rapto a la princesa, pero el príncipe la rescato, y le dijo las dos palabras mágicas y entonces la princesa le planto un beso en la boca, y vivieron felices para siempre. Fin. ¿Estas dormida?
-No-dijo Lily y luego en tono de broma dijo-el cuento es muy bonito pero me parece que ya me lo habían contado ¿es basado en hechos reales?
-¿Cómo lo sabes?-dijo James fingiendo sorpresa y acurrucándose al lado de la chica.
-Dime...-dijo Lily en un susurro- el beso que le dio la princesa al príncipe al final del cuento ¿era como este?- dijo dándole un beso.
Cuando pararon de besarse:
-No se si era exactamente como este-dijo James bromeando-me lo podrías dar otra vez para comprobarlo?
Lily volvió a besarle.
-Si, era como este-concluyo James.- no me lo puedo creer...
-¿el que no te puedes creer?-pregunto Lily
-Pues estar aquí contigo, y que me beses, y poder abrazarte...antes me odiabas, y cuando dejaste de odiarme te secuestraron, y cuando te liberamos del secuestro caíste en coma...me ha costado mucho que estés aquí conmigo...pero merece la pena.
-He sido muy mala contigo-dijo Lily abrazándole mas fuerte- lo siento.
-¿yo te gustaba?-pregunto James- digo antes de ser merodeadora y todo eso...
-Si- dijo Lily- pero me dabas un poquito de miedo.
-¿miedo? ¿Porque?
-Pues porque eras un merodeador, y tenias fama de conquistador y de bromista...
-¡Tu eres peor que yo!¡hiciste levitar a todo el colegio!-protesto James
-Porque eres una mala influencia-bromeo Lily
-¿ya no te doy miedo?-dijo James
-solo un poquito-bromeo la muchacha.
Estuvieron un rato mas besándose, bromeando y charlando en susurros hasta que entraron riendo escandalosamente Lupin y Niky.
-Shhhhhhhhhhh-dijeron al unísono James y Lily
-¿Qué pasa?-pregunto Niky
-Que vais a despertar a Emily y Sirius- dijo James
-Joder, se pasan el día durmiendo-dijo Lupin.
Pero Emily ya se había despertado y se enderezo para charlar con sus amigos procurando no despertar a Sirius que continuaba dormido.
-Ya he decidido en que animal me voy a convertir- dijo Niky contenta agarrada de la mano de Remus.
-¿en cual?-pregunto Emily interesada, con voz de dormida mientras se frotaba los ojos.
-En una ardilla-dijo Niky.
-Genial-dijo James-las ardillas son muy ágiles, nos vendrá bien un animago pequeño y ágil para vigilar desde los árboles.
-Peter es pequeño-dijo Emily
-Si bueno...Peter...no es...-dudo Lupin-...yo me fío más de Niky-concluyo sonriendo a la muchacha y pasándole un brazo por los hombros.
-¿Bajamos a comer?-propuso Niky a todos sonriendo a Lupin y besándole brevemente en los labios.
-de acuerdo-dijo James ayudando a Lily a levantarse del sofá tirandole de los brazos- me muero de hambre.
-Ir bajando vosotros-dijo Emily- yo voy a despertar a este- dijo la chica señalando a Sirius que dormía profundamente.
Todos salieron por la gárgola menos Emily que se armo de paciencia y se dispuso a despertar a Sirius.
-Sirius-dijo susurrando- Sirius despierta que tenemos que bajar a comer.
-mmmmmmm- respondió el chico.
Emily se tumbo encima del muchacho.
-Vamos ¡Despierta!- le dijo a la oreja
Sirius, que empezaba a despertarse, coloco sus brazos alrededor de la cintura de Emily.
-mmmmmmmm- volvió a decir.
-Venga, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta-dijo Emily dándole besitos por la oreja.
A Sirius que ya estaba despierto pero continuaba con los ojos cerrados se le dibujo una sonrisilla en la cara.
-No quiero despertar-dijo Sirius- estoy teniendo un sueño precioso.
-¿de verdad?-pregunto Emily mientras que le continuaba besando por la oreja y el cuello- ¿Qué sueñas?
-Pues estoy soñando...-dijo Sirius aun con los ojos cerrados-...que tengo a la chica más bonita del mundo tumbada encima de mí.
Cuando por fin comieron todos (incluidos Sirius y Emily) y como tenían una hora libre porque no tenían pociones decidieron ir a ver a Dumbledore, ya que el les había dicho que cuando despertaran Lily y Emily quería hablar con ellos. A la salida del gran comedor se encontraron con Malfoy y Snape:
-¿Qué tal estas Evans?-rió Malfoy-¿te duelen los huesecitos?
James se tiro en plancha a golpear a Malfoy y Sirius hizo lo mismo con Snape, que aunque no había abierto la boca también se había reído.
-¡Basta James!-dijo Lily- déjale, no merece la pena, te castigaran.
-¡Cabron!-decía James a Malfoy mientras golpeaba a Malfoy- yo te voy a dar a ti dolor de huesos...
-¡Para! ¡James!-decía Lily tirando de la túnica del muchacho.
Emily trataba también de frenar a Sirius.
-¡Sirius ya vale!-decía la chica intentando separarles.
-le estoy dando lo que se merece- decía Sirius.
Finalmente con ayuda de Lupin y Niky, lograron separarles antes de que los viera ningún profesor.
-¡Como vuelvas a tocar un pelo a Emily te parto la boca a ti y todo Slytherin que se me plante delante!-gritaba Sirius a Snape y Malfoy mientras se alejaban de los Slytherin.
-Pegándoos no vais a solucionar nada- dijo Lily sacudiéndole la túnica a James cuando ya iban por otro pasillo, lejos de los Slytherin.
-Eso es cierto- dijo Lupin- esto es más serio que una simple pelea de colegio...
-Además, a vosotros no os hicieron nada, fue a nosotras- dijo Emily.
-Somos nosotras las que tenemos que vengarnos- dijo Lily reflexionando- Emily, he olvidado una cosa en el gran comedor ¿me acompañas?
-Si-dijo Emily.
Pero Lily y Emily no fueron al gran comedor, sino que se dirigieron al pasillo donde habían dejado a Snape y a Malfoy. Cuando llegaron a ese pasillo los dos Slytherin estaban allí, recogiendo sus cosas que se habían quedado desparramadas por el suelo a causa de la pelea, y se habían quedado solos, todo el corredor estaba vacío, únicamente estaban allí Snape, Malfoy, Emily y Lily. Las dos muchachas se dirigieron con paso firme a los dos Slytherin que las miraban asustados, y Lily apunto con su varita directamente al cuello de Malfoy, y Emily al de Snape.
-¿Qué...que...que es lo que queréis?-dijo Malfoy con miedo.
-Vaya, vaya, Malfoy-dijo Lily sonriendo- ya veo que no eres tan valiente cuando no tienes a treinta guarda espaldas enmascarados.
-Hemos venido a demostraros que a nosotras no nos hace falta que nos defienda nadie-dijo Emily apretando su varita contra el cuello de Snape que parecía estar apunto de mearse encima- somos muy capaces de defendernos nosotras solitas y no necesitamos matones.
-Aunque tengamos sangre muggle- dijo Lily apretando también su varita contra el cuello de Malfoy y mirándole seria y desafiante- de lo que estamos muy orgullosas, somos mucho mejores brujas que vosotros, y vosotros lo sabéis, por eso estáis tan asustados.
-Podríamos haceros la maldición cruciatus, como hicisteis vosotros- dijo Emily y ante esto Snape y Malfoy se mearon (literalmente) del miedo- joder que cerdos que sois.-dijo la chica mirando con asco a los Slytherins.
-Pero tranquilos meoncetes-dijo Lily- no os haremos esa maldición por que no somos tan despreciables como vosotros.
-Queremos batirnos en duelo-dijo Emily desafiante- dos contra dos, un duelo justo. No estaréis atados, como estábamos nosotras, y tendréis vuestras varitas...¿os atrevéis?
Los dos Slytherins negaron asustados.
-¿no os atrevéis?- dijo Lily burlona- mira que eres cobarde Malfoy ¿no te atreves a batirte en duelo con dos sangres sucias?
Malfoy, que estaba a punto de llorar volvió a negar con la cabeza.
-Bueno-susurro Emily a Snape- pues entonces nos vamos, pero tener cuidadito con lo que hacéis, no vaya a ser que cambiemos de opinión y de repente nos apetezca haceros la maldición cruciatus...
-Mirar para atrás cuando vayáis solitos por los corredores-dijo Lily- con nosotras no se juega, nos secuestrasteis un vez, pero te aseguro que a partir de hoy lo vais ha pasar francamente mal...pienso putearos muchísimo.
-Os habéis metido con dos merodeadoras.-dijo Emily-preparaos para ser blanco de todas las bromas del mundo.
-Lo que queda de sexto y séptimo entero...-dijo Lily- vais a ser nuestro objetivo.
-Os dijimos que esto no iba a quedar así-concluyo Emily.
-Bueno, hasta luego meoncetes- dijo Lily
-¡Ah! Y por cierto....¡Transformarum niñarum!- dijo Emily, y Snape y Malfoy quedaron vestidos y maquillados como mujeres a causa del hechizo que acababa de pronunciar, Emily les miro y les dijo sonriente- el vestido os lo podéis quitar pero el maquillaje es imposible quitarlo en cinco días, seguro que les encanta a vuestros compañeros los magos matones...
-Ahora os serán útiles esas mascaras que llevabais el otro día- dijeron las chicas mientras se alejaban riendo y dejaban atrás a Snape y Malfoy, meados encima, con vestidos llenos de lazos rosas, trenzas en el pelo y maquillados como mujeres.
Las chicas se alejaron riendo por el pasillo:
-¿y ese hechizo?-pregunto Lily entre risas a Emily refiriéndose al hechizo de transformarum niñarum.
-Me lo enseño Sirius-dijo Emily riéndose- esta empeñado en que me convierta en una experta bromista.
Las dos muchachas alcanzaron a sus amigos que las estaban esperando para ir al despacho de Dumbledore.
-¿Qué se te había olvidado?-pregunto James a Lily.
-¿Qué?-pregunto Lily despistada
-Habéis ido al gran comedor porque se te había olvidado algo, ¿Qué era?- pregunto James sonriendo y sospechando.
-Se nos había olvidado la venganza -dijo Lily poniendo cara de mala.
Llegaron al despacho de Dumbledore y dijeron la contraseña "chicles explosivos", subieron y llamaron a la puerta.
-Adelante -oyeron que decía Dumbledore desde dentro.
James, Lily, Sirius, Lupin, Emily y Niky, entraron al despacho de Dumbledore y se quedaron de pie.
-Ya me preguntaba cuando vendríais a verme-dijo Dumbledore mirando a los seis muchachos y sonriendo- me alegro de verlas sanas señoritas- dijo a Emily y Lily- pero sentaros, sentaros...
Dumbledore hizo aparecer seis sillas y el se sentó en su escritorio.
-Bueno-dijo Dumbledore- antes de todo ¿tenéis algo que preguntar?
-¿Por qué no están expulsados Malfoy ni Snape?-pregunto rápidamente James.
- Veras, cuando la profesora McGonagall y yo entramos en el laberinto de los Slytherin, solo pillamos dentro a dos alumnos, Avery, y Nott, que por supuesto, has sido expulsados, pero contra los demás alumnos no podemos hacer nada, ya que Avery y Nott no han delatado a nadie y el profesor Daken tampoco...no tenemos pruebas para expulsar a nadie mas...y no podemos expulsar a todos los Slytherin...-explico Dumbledore.
-¡Pero Emily y Lily vieron allí abajo a Malfoy! ¿Eso no es una prueba?- protesto Sirius.
-Le vieron enmascarado y con la voz distorsionada, aunque ellas aseguren que era el, si el lo niega no se puede hacer nada...el podrá decir que le acusan por que le tienen manía.
-No es justo-dijo Lupin- ellas siguen en peligro.
-No en este colegio-dijo Dumbledore- los Slytherin serán minuciosamente vigilados para que esto no vuelva a pasar. Pase lo que pase, yo quiero deciros, Emily, Lily, que yo os creo. Por eso voy ha hacer todo lo que este en mi mano para protegeros a vosotras y a todos los hijos de muggles.
-Muchas gracias profesor-dijo Lily.
-significa mucho para nosotras que usted nos crea-dijo Emily.
-Si aunque no nos crea el ministerio-dijo Lily.
Dumbledore las sonrió y dijo:
-¿alguna otra pregunta?
-¿Qué ha sucedido con Daken?-pregunto Niky
-Ha sido enviado a Azcaban-explico Dumbledore-por utilizar las maldiciones imperdonables.
Todos quedaron en silencio un momento, hasta que Lily se lanzo a preguntar lo que todos estaban deseando saber:
-¿bajo las ordenes de quien actuaba Daken? ¿Quien es el señor tenebroso?
-Por eso precisamente quería hablar con vosotros-dijo Dumbledore suspirando- ¿os suena el nombre de Lord Voldemorth?
-Si-dijo Niky- lo leí en el profeta, pero el ministerio dice que no es peligroso...
-El ministerio se equivoca-dijo Dumbledore- si es peligroso, y mucho, es un brujo oscuro muy poderoso, busca seguidores para conseguir el poder y cumplir lo que el considera su misión...
-La limpieza de sangre-susurro Emily mientras Sirius la agarraba de la mano y la apretaba-quiere matar a todos los que procedemos de muggles.
-Así es-confirmo Dumbledore.
-¿Pero por que?-dijo James indignado-¿Por qué quiere hacer eso? ¿Como podemos defendernos?
-Les he llamado por eso, por la defensa- dijo Dumbledore- viendo la actitud del ministerio, yo estoy organizando un grupo de defensa, servirá para luchar contra los magos oscuros, como el profesor Daken...se acercan tiempos difíciles.
-Ya lo decía yo...-dijo Sirius.
-Yo me apunto-dijo James- yo quiero luchar contra la gente que es capaz de torturar por ideas tan estupidas...
-Aun no pueden unirse-dijo Dumbledore- son muy jóvenes, tendrían que acabar el colegio y estudiar la carrera de aurores, seria muy duro y peligroso...Se llama la orden del fénix.
-¿Por qué nos ha elegido a nosotros?-dijo Lupin-¿a los merodeadores para formar parte de la orden del fénix? Se supone que somos revoltosos y siempre estamos castigados...
-Si, pero son valientes-dijo Dumbledore- astutos y buenísimos magos y brujas, se quieren muchísimo y harían lo que fuera por ayudarse, eso quedo demostrado por como se sacrificaron y arriesgaron para salvar a Emily y Lily, y como ellas resistieron valientemente y aguantaron el dolor sin asustarse. La gente que pertenezca a la orden deberá ser así, valiente, sacrificada, lo que nos espera es muy difícil...y muy duro. Necesitamos mantenernos unidos. Necesitamos defendernos. Necesitamos gente como vosotros. ¿Qué me decís?
-Yo digo que si- dijo James poniéndose de pie.
-y yo-dijo Lily levantándose y agarrando la mano de James
-Y yo- dijo Sirius
-Yo también- dijo Emily
-y yo-dijo Lupin
-Pues yo también- dijo Niky.
Dumbledore les miro complacido.
-No seréis de la orden hasta que no salgáis del colegio, pero podéis ayudarla ya, ¿estáis dispuestos ha hacer un juramento de fidelidad a la orden?
Todos afirmaron con la cabeza.
-No será fácil-dijo Dumbledore- ni divertido...
-Lo haremos- dijo James mirando a sus amigos que asentían y daban su aprobación.
-Muy bien- dijo Dumbledore- Se levanto y le arranco seis plumas a Fawkes y se las dio a los seis amigos.
-Poneros de pie- dijo Dumbledore- agarrar la pluma con la mano derecha.
Todos lo hicieron.
-La orden del fénix-dijo Dumbledore mientras su pluma escribía lo que el decía sobre un pergamino-acepta como futuros miembros a los jóvenes aquí presentes, que aceptan las condiciones de secreto, fidelidad y sacrificio que se requieren. James Potter ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo James seriamente y agarrado a Lily con una mano y a su pluma con la otra.
-Lilian Evans-continuo Dumbledore-¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Lily muy seria
-Sirius Black, ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Sirius
-Emily Katherina Salander, ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Emily
-Remus Lupin ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Lupin
-Niky Blumber ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Niky
Las plumas que los chicos tenían en la mano se convirtieron en plumas de oro en las que estaba escrito: miembro de la orden del Fénix y el nombre de cada uno. Después todos firmaron el pergamino de Dumbledore con cada una de las plumas.
-Bienvenidos a la orden, futuros miembros-dijo Dumbledore mientras el pergamino se sellaba con una lacra dorada en forma de fénix.
Capitulo 14: Bienvenidos a la orden.
Con la vuelta de Lily, volvió el buen humor para los merodeadores y las merodeadoras, sobre todo para James que abandono su estado melancólico para sumirse en una alegría frenética. Andaba de aquí para allá, y como había hecho Sirius con Emily, mimaba y cuidaba a Lily cuanto podía. Lupin y Niky, por su parte también parecían acaramelados y encantados todo el día, la muchacha se pasaba mucho tiempo estudiando para convertirse en animaga, y Remus la ayudaba cuanto podía. Emily y Sirius continuaban con su buen humor habitual, gastándose bromas y pegándose el lote por todas las aulas vacías que encontraban. Un día, Lily salía de la biblioteca y se dirigía a la guarida de la gárgola, donde probablemente estarían James y los otros merodeadores, toco la nariz a la gárgola y bajo por el ascensor. Cuando entro vio a Sirius y Emily durmiendo la siesta abrazados en su sillón habitual, y a James que estaba tumbado en otro sillón jugueteando con la Snich que le había regalado ella.
-Hola-saludo James sonriente en tono bajito para no despertar a Sirius y Emily.
-Joder con estos dos- dijo Lily devolviéndole la sonrisa a James-se pasan el día, o durmiendo o peleando o besándose.
-Se quieren mucho-dijo James mirándoles dormir- quien se lo iba a decir a Sirius... ¡Sirius Black enamorado! Me lo dicen a principio de curso y no me lo creo, pero Emily es perfecta para el.
-Son tal para cual- concluyo Lily.
-Y tu deberías descansar mas ¡acabas de despertarte de un coma de dos meses!- regaño James
Lily se acerco a James le dio un breve beso en la boca y se acomodo junto a el en el sofá, James la rodeo con el brazo.
-Es que no puedo dormir por el día, no se...no me entra sueño...-dijo Lily
-¿Por qué no le dices a la señora Pomfrey que te recete algo?-sugirió James preocupándose por Lily.
-¿Por qué no me cuentas un cuento? Quizá así consiga dormir...-dijo la chica mirando picaramente a James.
-Vale...un cuento....mmm...-dijo James devolviéndole la sonrisa y mirando al techo pensativo mientras se revolvía el pelo-....pero túmbate bien...
Lily abrazo a James con los dos brazos y apoyo su cabeza en el pecho de chico.
-Y cierra los ojos-dijo James, Lily obedeció y cerro los ojos, el chico comenzó ha acariciar la cabellera pelirroja de Lily- vale, comienzo el cuento-dijo James- erase una vez una princesa, que vivía en un palacio, la princesa era muy guapa, tenia una preciosa melena pelirroja, una sonrisa encantadora, y unos preciosos ojos verdes que dejaban embobados a todos los príncipes que iban a visitarla. Cuando la princesa era pequeña, un hada la hecho un hechizo que decía que solo se podría enamorar de un príncipe que le dijera dos palabras mágicas. Cuando la preciosa princesa se hizo mayor muchos príncipes fueron a visitarla, pero ninguno le gustaba y ninguno le dijo las palabras, además la princesa era un poco cabezota...
-¡La princesa no era cabezota!- interrumpió Lily en tono de broma
-¿Quién esta contando el cuento?-pregunto James
-Tu-dijo Lily con sonsonete.
-Pues en mi cuento la princesa era cabezota, encantadora, pero cabezota- inquirió James- ¿Vale?
-Vale-acepto Lily.
-Bueno, pues continuo-dijo James- la encantadora, pero cabezota princesa, no aceptaba a ninguno de los pretendientes que venían a su palacio a pedirle matrimonio. Pero un día, llego al palacio un príncipe, que se enamoro perdidamente de la princesa, y se propuso firmemente, que aunque fuera lo ultimo que hiciera en el mundo, acabaría casándose con esa princesita pelirroja.
-¿Cómo era el príncipe?-pregunto Lily
-¿Cómo vas a dormirte si no dejas de interrumpirme?-dijo James dando a la muchacha un beso en los labios y sonriéndola.
-Solo quiero saber como era el príncipe-dijo Lily tiernamente- ¿era guapo, y de pelo negro y despeinado?
-Si, más o menos- sonrió James- cierra los ojos, continuo... ¿por donde me había quedado?
-Un guapo príncipe había llegado al palacio se había hecho el propósito de casarse con la princesa pelirroja- aclaro Lily
-Si..eso...-dijo James revolviéndose el pelo-el joven príncipe, se había enamorado, por primera vez en su vida de aquella princesita pelirroja, pero ella, lo odiaba y eso ponía muy triste al príncipe. Entonces el escudero del príncipe, viendo lo triste que estaba este por el rechazo de la princesa, fue a pedir ayuda a la doncella de la princesa, la doncella y el escudero intentaron ayudar al príncipe a que la princesa se enamorara de el, pero la princesa no aceptaba al príncipe porque este no averiguaba las dos palabras. Finalmente la doncella y el escudero se enamoraron y dejaron de ayudar al príncipe por que estaban más ocupados dándose el lote por todo el palacio-dijo James mirando a Sirius y Emily que dormían profundamente- pero el príncipe no se rindió, entonces la princesa se dio cuenta que de lo de las palabras mágicas era una chorrada decidió aceptar al príncipe, pero entonces un malvado dragón rapto a la princesa, pero el príncipe la rescato, y le dijo las dos palabras mágicas y entonces la princesa le planto un beso en la boca, y vivieron felices para siempre. Fin. ¿Estas dormida?
-No-dijo Lily y luego en tono de broma dijo-el cuento es muy bonito pero me parece que ya me lo habían contado ¿es basado en hechos reales?
-¿Cómo lo sabes?-dijo James fingiendo sorpresa y acurrucándose al lado de la chica.
-Dime...-dijo Lily en un susurro- el beso que le dio la princesa al príncipe al final del cuento ¿era como este?- dijo dándole un beso.
Cuando pararon de besarse:
-No se si era exactamente como este-dijo James bromeando-me lo podrías dar otra vez para comprobarlo?
Lily volvió a besarle.
-Si, era como este-concluyo James.- no me lo puedo creer...
-¿el que no te puedes creer?-pregunto Lily
-Pues estar aquí contigo, y que me beses, y poder abrazarte...antes me odiabas, y cuando dejaste de odiarme te secuestraron, y cuando te liberamos del secuestro caíste en coma...me ha costado mucho que estés aquí conmigo...pero merece la pena.
-He sido muy mala contigo-dijo Lily abrazándole mas fuerte- lo siento.
-¿yo te gustaba?-pregunto James- digo antes de ser merodeadora y todo eso...
-Si- dijo Lily- pero me dabas un poquito de miedo.
-¿miedo? ¿Porque?
-Pues porque eras un merodeador, y tenias fama de conquistador y de bromista...
-¡Tu eres peor que yo!¡hiciste levitar a todo el colegio!-protesto James
-Porque eres una mala influencia-bromeo Lily
-¿ya no te doy miedo?-dijo James
-solo un poquito-bromeo la muchacha.
Estuvieron un rato mas besándose, bromeando y charlando en susurros hasta que entraron riendo escandalosamente Lupin y Niky.
-Shhhhhhhhhhh-dijeron al unísono James y Lily
-¿Qué pasa?-pregunto Niky
-Que vais a despertar a Emily y Sirius- dijo James
-Joder, se pasan el día durmiendo-dijo Lupin.
Pero Emily ya se había despertado y se enderezo para charlar con sus amigos procurando no despertar a Sirius que continuaba dormido.
-Ya he decidido en que animal me voy a convertir- dijo Niky contenta agarrada de la mano de Remus.
-¿en cual?-pregunto Emily interesada, con voz de dormida mientras se frotaba los ojos.
-En una ardilla-dijo Niky.
-Genial-dijo James-las ardillas son muy ágiles, nos vendrá bien un animago pequeño y ágil para vigilar desde los árboles.
-Peter es pequeño-dijo Emily
-Si bueno...Peter...no es...-dudo Lupin-...yo me fío más de Niky-concluyo sonriendo a la muchacha y pasándole un brazo por los hombros.
-¿Bajamos a comer?-propuso Niky a todos sonriendo a Lupin y besándole brevemente en los labios.
-de acuerdo-dijo James ayudando a Lily a levantarse del sofá tirandole de los brazos- me muero de hambre.
-Ir bajando vosotros-dijo Emily- yo voy a despertar a este- dijo la chica señalando a Sirius que dormía profundamente.
Todos salieron por la gárgola menos Emily que se armo de paciencia y se dispuso a despertar a Sirius.
-Sirius-dijo susurrando- Sirius despierta que tenemos que bajar a comer.
-mmmmmmm- respondió el chico.
Emily se tumbo encima del muchacho.
-Vamos ¡Despierta!- le dijo a la oreja
Sirius, que empezaba a despertarse, coloco sus brazos alrededor de la cintura de Emily.
-mmmmmmmm- volvió a decir.
-Venga, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta, despierta-dijo Emily dándole besitos por la oreja.
A Sirius que ya estaba despierto pero continuaba con los ojos cerrados se le dibujo una sonrisilla en la cara.
-No quiero despertar-dijo Sirius- estoy teniendo un sueño precioso.
-¿de verdad?-pregunto Emily mientras que le continuaba besando por la oreja y el cuello- ¿Qué sueñas?
-Pues estoy soñando...-dijo Sirius aun con los ojos cerrados-...que tengo a la chica más bonita del mundo tumbada encima de mí.
Cuando por fin comieron todos (incluidos Sirius y Emily) y como tenían una hora libre porque no tenían pociones decidieron ir a ver a Dumbledore, ya que el les había dicho que cuando despertaran Lily y Emily quería hablar con ellos. A la salida del gran comedor se encontraron con Malfoy y Snape:
-¿Qué tal estas Evans?-rió Malfoy-¿te duelen los huesecitos?
James se tiro en plancha a golpear a Malfoy y Sirius hizo lo mismo con Snape, que aunque no había abierto la boca también se había reído.
-¡Basta James!-dijo Lily- déjale, no merece la pena, te castigaran.
-¡Cabron!-decía James a Malfoy mientras golpeaba a Malfoy- yo te voy a dar a ti dolor de huesos...
-¡Para! ¡James!-decía Lily tirando de la túnica del muchacho.
Emily trataba también de frenar a Sirius.
-¡Sirius ya vale!-decía la chica intentando separarles.
-le estoy dando lo que se merece- decía Sirius.
Finalmente con ayuda de Lupin y Niky, lograron separarles antes de que los viera ningún profesor.
-¡Como vuelvas a tocar un pelo a Emily te parto la boca a ti y todo Slytherin que se me plante delante!-gritaba Sirius a Snape y Malfoy mientras se alejaban de los Slytherin.
-Pegándoos no vais a solucionar nada- dijo Lily sacudiéndole la túnica a James cuando ya iban por otro pasillo, lejos de los Slytherin.
-Eso es cierto- dijo Lupin- esto es más serio que una simple pelea de colegio...
-Además, a vosotros no os hicieron nada, fue a nosotras- dijo Emily.
-Somos nosotras las que tenemos que vengarnos- dijo Lily reflexionando- Emily, he olvidado una cosa en el gran comedor ¿me acompañas?
-Si-dijo Emily.
Pero Lily y Emily no fueron al gran comedor, sino que se dirigieron al pasillo donde habían dejado a Snape y a Malfoy. Cuando llegaron a ese pasillo los dos Slytherin estaban allí, recogiendo sus cosas que se habían quedado desparramadas por el suelo a causa de la pelea, y se habían quedado solos, todo el corredor estaba vacío, únicamente estaban allí Snape, Malfoy, Emily y Lily. Las dos muchachas se dirigieron con paso firme a los dos Slytherin que las miraban asustados, y Lily apunto con su varita directamente al cuello de Malfoy, y Emily al de Snape.
-¿Qué...que...que es lo que queréis?-dijo Malfoy con miedo.
-Vaya, vaya, Malfoy-dijo Lily sonriendo- ya veo que no eres tan valiente cuando no tienes a treinta guarda espaldas enmascarados.
-Hemos venido a demostraros que a nosotras no nos hace falta que nos defienda nadie-dijo Emily apretando su varita contra el cuello de Snape que parecía estar apunto de mearse encima- somos muy capaces de defendernos nosotras solitas y no necesitamos matones.
-Aunque tengamos sangre muggle- dijo Lily apretando también su varita contra el cuello de Malfoy y mirándole seria y desafiante- de lo que estamos muy orgullosas, somos mucho mejores brujas que vosotros, y vosotros lo sabéis, por eso estáis tan asustados.
-Podríamos haceros la maldición cruciatus, como hicisteis vosotros- dijo Emily y ante esto Snape y Malfoy se mearon (literalmente) del miedo- joder que cerdos que sois.-dijo la chica mirando con asco a los Slytherins.
-Pero tranquilos meoncetes-dijo Lily- no os haremos esa maldición por que no somos tan despreciables como vosotros.
-Queremos batirnos en duelo-dijo Emily desafiante- dos contra dos, un duelo justo. No estaréis atados, como estábamos nosotras, y tendréis vuestras varitas...¿os atrevéis?
Los dos Slytherins negaron asustados.
-¿no os atrevéis?- dijo Lily burlona- mira que eres cobarde Malfoy ¿no te atreves a batirte en duelo con dos sangres sucias?
Malfoy, que estaba a punto de llorar volvió a negar con la cabeza.
-Bueno-susurro Emily a Snape- pues entonces nos vamos, pero tener cuidadito con lo que hacéis, no vaya a ser que cambiemos de opinión y de repente nos apetezca haceros la maldición cruciatus...
-Mirar para atrás cuando vayáis solitos por los corredores-dijo Lily- con nosotras no se juega, nos secuestrasteis un vez, pero te aseguro que a partir de hoy lo vais ha pasar francamente mal...pienso putearos muchísimo.
-Os habéis metido con dos merodeadoras.-dijo Emily-preparaos para ser blanco de todas las bromas del mundo.
-Lo que queda de sexto y séptimo entero...-dijo Lily- vais a ser nuestro objetivo.
-Os dijimos que esto no iba a quedar así-concluyo Emily.
-Bueno, hasta luego meoncetes- dijo Lily
-¡Ah! Y por cierto....¡Transformarum niñarum!- dijo Emily, y Snape y Malfoy quedaron vestidos y maquillados como mujeres a causa del hechizo que acababa de pronunciar, Emily les miro y les dijo sonriente- el vestido os lo podéis quitar pero el maquillaje es imposible quitarlo en cinco días, seguro que les encanta a vuestros compañeros los magos matones...
-Ahora os serán útiles esas mascaras que llevabais el otro día- dijeron las chicas mientras se alejaban riendo y dejaban atrás a Snape y Malfoy, meados encima, con vestidos llenos de lazos rosas, trenzas en el pelo y maquillados como mujeres.
Las chicas se alejaron riendo por el pasillo:
-¿y ese hechizo?-pregunto Lily entre risas a Emily refiriéndose al hechizo de transformarum niñarum.
-Me lo enseño Sirius-dijo Emily riéndose- esta empeñado en que me convierta en una experta bromista.
Las dos muchachas alcanzaron a sus amigos que las estaban esperando para ir al despacho de Dumbledore.
-¿Qué se te había olvidado?-pregunto James a Lily.
-¿Qué?-pregunto Lily despistada
-Habéis ido al gran comedor porque se te había olvidado algo, ¿Qué era?- pregunto James sonriendo y sospechando.
-Se nos había olvidado la venganza -dijo Lily poniendo cara de mala.
Llegaron al despacho de Dumbledore y dijeron la contraseña "chicles explosivos", subieron y llamaron a la puerta.
-Adelante -oyeron que decía Dumbledore desde dentro.
James, Lily, Sirius, Lupin, Emily y Niky, entraron al despacho de Dumbledore y se quedaron de pie.
-Ya me preguntaba cuando vendríais a verme-dijo Dumbledore mirando a los seis muchachos y sonriendo- me alegro de verlas sanas señoritas- dijo a Emily y Lily- pero sentaros, sentaros...
Dumbledore hizo aparecer seis sillas y el se sentó en su escritorio.
-Bueno-dijo Dumbledore- antes de todo ¿tenéis algo que preguntar?
-¿Por qué no están expulsados Malfoy ni Snape?-pregunto rápidamente James.
- Veras, cuando la profesora McGonagall y yo entramos en el laberinto de los Slytherin, solo pillamos dentro a dos alumnos, Avery, y Nott, que por supuesto, has sido expulsados, pero contra los demás alumnos no podemos hacer nada, ya que Avery y Nott no han delatado a nadie y el profesor Daken tampoco...no tenemos pruebas para expulsar a nadie mas...y no podemos expulsar a todos los Slytherin...-explico Dumbledore.
-¡Pero Emily y Lily vieron allí abajo a Malfoy! ¿Eso no es una prueba?- protesto Sirius.
-Le vieron enmascarado y con la voz distorsionada, aunque ellas aseguren que era el, si el lo niega no se puede hacer nada...el podrá decir que le acusan por que le tienen manía.
-No es justo-dijo Lupin- ellas siguen en peligro.
-No en este colegio-dijo Dumbledore- los Slytherin serán minuciosamente vigilados para que esto no vuelva a pasar. Pase lo que pase, yo quiero deciros, Emily, Lily, que yo os creo. Por eso voy ha hacer todo lo que este en mi mano para protegeros a vosotras y a todos los hijos de muggles.
-Muchas gracias profesor-dijo Lily.
-significa mucho para nosotras que usted nos crea-dijo Emily.
-Si aunque no nos crea el ministerio-dijo Lily.
Dumbledore las sonrió y dijo:
-¿alguna otra pregunta?
-¿Qué ha sucedido con Daken?-pregunto Niky
-Ha sido enviado a Azcaban-explico Dumbledore-por utilizar las maldiciones imperdonables.
Todos quedaron en silencio un momento, hasta que Lily se lanzo a preguntar lo que todos estaban deseando saber:
-¿bajo las ordenes de quien actuaba Daken? ¿Quien es el señor tenebroso?
-Por eso precisamente quería hablar con vosotros-dijo Dumbledore suspirando- ¿os suena el nombre de Lord Voldemorth?
-Si-dijo Niky- lo leí en el profeta, pero el ministerio dice que no es peligroso...
-El ministerio se equivoca-dijo Dumbledore- si es peligroso, y mucho, es un brujo oscuro muy poderoso, busca seguidores para conseguir el poder y cumplir lo que el considera su misión...
-La limpieza de sangre-susurro Emily mientras Sirius la agarraba de la mano y la apretaba-quiere matar a todos los que procedemos de muggles.
-Así es-confirmo Dumbledore.
-¿Pero por que?-dijo James indignado-¿Por qué quiere hacer eso? ¿Como podemos defendernos?
-Les he llamado por eso, por la defensa- dijo Dumbledore- viendo la actitud del ministerio, yo estoy organizando un grupo de defensa, servirá para luchar contra los magos oscuros, como el profesor Daken...se acercan tiempos difíciles.
-Ya lo decía yo...-dijo Sirius.
-Yo me apunto-dijo James- yo quiero luchar contra la gente que es capaz de torturar por ideas tan estupidas...
-Aun no pueden unirse-dijo Dumbledore- son muy jóvenes, tendrían que acabar el colegio y estudiar la carrera de aurores, seria muy duro y peligroso...Se llama la orden del fénix.
-¿Por qué nos ha elegido a nosotros?-dijo Lupin-¿a los merodeadores para formar parte de la orden del fénix? Se supone que somos revoltosos y siempre estamos castigados...
-Si, pero son valientes-dijo Dumbledore- astutos y buenísimos magos y brujas, se quieren muchísimo y harían lo que fuera por ayudarse, eso quedo demostrado por como se sacrificaron y arriesgaron para salvar a Emily y Lily, y como ellas resistieron valientemente y aguantaron el dolor sin asustarse. La gente que pertenezca a la orden deberá ser así, valiente, sacrificada, lo que nos espera es muy difícil...y muy duro. Necesitamos mantenernos unidos. Necesitamos defendernos. Necesitamos gente como vosotros. ¿Qué me decís?
-Yo digo que si- dijo James poniéndose de pie.
-y yo-dijo Lily levantándose y agarrando la mano de James
-Y yo- dijo Sirius
-Yo también- dijo Emily
-y yo-dijo Lupin
-Pues yo también- dijo Niky.
Dumbledore les miro complacido.
-No seréis de la orden hasta que no salgáis del colegio, pero podéis ayudarla ya, ¿estáis dispuestos ha hacer un juramento de fidelidad a la orden?
Todos afirmaron con la cabeza.
-No será fácil-dijo Dumbledore- ni divertido...
-Lo haremos- dijo James mirando a sus amigos que asentían y daban su aprobación.
-Muy bien- dijo Dumbledore- Se levanto y le arranco seis plumas a Fawkes y se las dio a los seis amigos.
-Poneros de pie- dijo Dumbledore- agarrar la pluma con la mano derecha.
Todos lo hicieron.
-La orden del fénix-dijo Dumbledore mientras su pluma escribía lo que el decía sobre un pergamino-acepta como futuros miembros a los jóvenes aquí presentes, que aceptan las condiciones de secreto, fidelidad y sacrificio que se requieren. James Potter ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo James seriamente y agarrado a Lily con una mano y a su pluma con la otra.
-Lilian Evans-continuo Dumbledore-¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Lily muy seria
-Sirius Black, ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Sirius
-Emily Katherina Salander, ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Emily
-Remus Lupin ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Lupin
-Niky Blumber ¿quieres pertenecer a la orden del fénix y aceptas las misiones y condiciones que esta suponga y juras fidelidad?
-Si, quiero acepto y juro- dijo Niky
Las plumas que los chicos tenían en la mano se convirtieron en plumas de oro en las que estaba escrito: miembro de la orden del Fénix y el nombre de cada uno. Después todos firmaron el pergamino de Dumbledore con cada una de las plumas.
-Bienvenidos a la orden, futuros miembros-dijo Dumbledore mientras el pergamino se sellaba con una lacra dorada en forma de fénix.
