Recuerdos dolorosos
Kurama no dejo de abrazar a hiei, no podía siquiera pensar que si no hacia nada a tiempo hiei no lo recordaría nunca más.
Por su mente paso que si le recordaba todo también tendría que decirle sobre yukina, y de mukuro, en realidad el pasado de hiei era muy oscuro para un solo ser.
Nadie nunca podría haberse imaginado que el, alguien que solo aparentaba que era frío había sufrido tanto.
Se aparto de hiei lentamente por sus ojos seguían corriendo lágrimas, hiei no podía ver eso así que con una simple palabra lo calmo.
-no tienes porque llorar, si recordándote te hago feliz eso haré-dijo mientras ayudaba a que kurama se levantara del suelo.
-muy bien empecemos por ¿que recuerdas?
-bueno a mi hermana, a Yusuke, al imbecil de Kuwabara, a la torpe de Botan, al diminuto de Koenma, a ogri.
-en resumen recuerdas a todos menos a mí-
-eso creo
-bien, mi nombre es kurama
-kurama
-muy bien, doy mitad Youko
-mitad Youko
-tengo 15 años
-15 años
-como veras soy pelirrojo de ojos verdes
-mmm
-bueno y soy hijo de una humana
-eres ¿hijo de una humana y eres Youko?
-mira yo era un legendario ladrón, un día me intentaron atrapar así que huí, y tome el cuerpo del niño que iba a nacer dentro de esa humana y como vez aquí estoy.
-es lo mas raro, irónico e ilógico que haya escuchado en todo mi vida
-acostúmbrate
-bien y que más
-bueno te conocí cuando intentábamos robar los tesoros sagrados del mas aya
-y lo logramos
-*-*U si...
-y que paso
-hurameshi nos derroto
-a ya recuerdo, cuando secuestre a la habladora
-si keiko
-a y también recuerdo a un...
-lobo
-exacto
-que intentaba
-atacar lo que mas amaba
-y que yo estaba ahí
-si tu estabas ahí pero el lobo intento atacarte a ti
-si pero...
-yo me puse como escudo para protegerte
-muy bien
-ah, me duele, ah me duele-el recordar a kurama le trajo recuerdos dolorosos a hiei de cómo estuvo a punto de dejar que lo mataran, y como no fue capas de decirle todo frente a frente.
-hiei?
-¡que pare, es dolor es muy intenso!-decía hiei mientras apretaba su pecho señal de que su corazón estaba recordando algo doloroso
-hiei tienes que recordarme, por favor-gritaba kurama mientras veía como hiei gritaba de dolor a la situación
-Hiei...se que nunca te lo he dicho pero...últimamente te e agarrado cariño, no se porque...pero a tu lado me siento feliz...tu mirada me reanima...en un día gris...yo...no soportaría perderte...preferiría morir a tener que perderte...seria mi eterno dolor...por favor...intenta recordarme...
-kurama...¡tu...eres mi dolor!
-¿que?
-si...el recordarme es lo que me causa este dolor intenso, eres mi dolor kurama, fui un tonto al no haber expresado, todo lo que siento, como tu me sent. Atraído, esas miradas que me dabas eran suficientes para poder curar este corazón herido, pero no para recordarte...
-por que nunca me lo dijiste
-No lo hice...porque...acuérdate soy el niño prohibido quien podria amarme...quien seria tan estupido como para poder arriesgar su vida por mi...
-Yo...
-no ya no...
-no te necesito no te puedes ir
-mi corazón ya no lo puede aguantar kurama, con solo habértelo dicho me siento feliz
-no dejare que te vallas
-perdóname...kurama
Kurama al escuchar las palabras no hizo mas que romper en llanto, no lo podía creer hiei lo había dicho, pero ya era muy tarde para el pobre y dulce corazón del pequeño hiei.
Hiei se aferro a su pecho, callo de rodillas, en su rostro se podía ver dolor, que al parecer no tenia fin, seguía gimiendo de dolor, era casi inexpiable.
Supongo que nadie podria soportar tanta angustia, dolor, al parecer todos los deseos y temores de hiei estaban a punto de estallas en aquel corazón tan frágil.
Los ojos de hiei empezaron a tornarse totalmente rojos, se levanto como una bestia, daba gemidos de dolor cada instante el dolor lo estaba controlando.
Kurama le rogaba que fuera aquel hiei el dulce, el que lo recordaba aquel hiei que siente aquel hiei a quien amaba...
Hiei no hizo más que darle una mirada de odio a kurama que no lo pudo ver así, kurama intento lo único que se le ocurrió, ya que no quería dañarlo.
Tal vez un abrazo podía expresar, que si, que si había un mañana, que la esperanza solo hay que buscarla, y con eso tal vez regresaría el pequeño y dulce hiei...
Hiei tenia los ojos enardecidos de odio, ¿hacia quien? ¿Hacia que? No lo podía explicar no era demasiado hasta para un youkai.
Kurama abrazo a hiei intentando transmitirle todo lo que sentía, todo lo bueno que hay en la vida, lo bueno del humano.
Hiei hizo mueca de desagrado hacia el abrazo, y empujó a kurama lejos, ni el mismo podía explicar a donde iba y por que.
En los ojos de kurama las lagrimas ya empeñaban a correr como ríos hacia en suelo, tal vez ya era demasiado tarde, no el no podía detenerlo.
Cuando intento pararse una mano le ofreció ayuda era Máx., con un extraño espejo en las manos, en el reflejo estaba la imagen de hiei como era dulce.
-ven, no podemos dejar que muera
-pero...
-lo se, ahora no puede responder a nada aunque uno lo intente, el dolor que el ocultaba muy adentro de el lo esta posesionando.
-¿habrá modo de regresarlo?
-lo hay
-cual es
- mira este espejo guarda la ternura y amor de una persona, y al parecer tu apareces en el de hiei, veras en el espejo hay dos partes el dolor y el amor, la imagen de hiei esta en amor y la tuya en el dolor.
-que puedo hacer para que el no sufra
-el espejo del lado del dolor esta roto
-y debo repararlo
-exacto, solo así te recordara
-vamos no hay tiempo
Kurama y Máx. Corrieron hasta encontrar rastros de hiei, pero al parecer el cuerpo ya no podía aguantar mas, por que empezaba a dejar sangre por la calle.
************************************************************ Espero que les haya gustado, y para los fans de hiei como "perdón" hasta a mi dolio escribirlo
Kurama no dejo de abrazar a hiei, no podía siquiera pensar que si no hacia nada a tiempo hiei no lo recordaría nunca más.
Por su mente paso que si le recordaba todo también tendría que decirle sobre yukina, y de mukuro, en realidad el pasado de hiei era muy oscuro para un solo ser.
Nadie nunca podría haberse imaginado que el, alguien que solo aparentaba que era frío había sufrido tanto.
Se aparto de hiei lentamente por sus ojos seguían corriendo lágrimas, hiei no podía ver eso así que con una simple palabra lo calmo.
-no tienes porque llorar, si recordándote te hago feliz eso haré-dijo mientras ayudaba a que kurama se levantara del suelo.
-muy bien empecemos por ¿que recuerdas?
-bueno a mi hermana, a Yusuke, al imbecil de Kuwabara, a la torpe de Botan, al diminuto de Koenma, a ogri.
-en resumen recuerdas a todos menos a mí-
-eso creo
-bien, mi nombre es kurama
-kurama
-muy bien, doy mitad Youko
-mitad Youko
-tengo 15 años
-15 años
-como veras soy pelirrojo de ojos verdes
-mmm
-bueno y soy hijo de una humana
-eres ¿hijo de una humana y eres Youko?
-mira yo era un legendario ladrón, un día me intentaron atrapar así que huí, y tome el cuerpo del niño que iba a nacer dentro de esa humana y como vez aquí estoy.
-es lo mas raro, irónico e ilógico que haya escuchado en todo mi vida
-acostúmbrate
-bien y que más
-bueno te conocí cuando intentábamos robar los tesoros sagrados del mas aya
-y lo logramos
-*-*U si...
-y que paso
-hurameshi nos derroto
-a ya recuerdo, cuando secuestre a la habladora
-si keiko
-a y también recuerdo a un...
-lobo
-exacto
-que intentaba
-atacar lo que mas amaba
-y que yo estaba ahí
-si tu estabas ahí pero el lobo intento atacarte a ti
-si pero...
-yo me puse como escudo para protegerte
-muy bien
-ah, me duele, ah me duele-el recordar a kurama le trajo recuerdos dolorosos a hiei de cómo estuvo a punto de dejar que lo mataran, y como no fue capas de decirle todo frente a frente.
-hiei?
-¡que pare, es dolor es muy intenso!-decía hiei mientras apretaba su pecho señal de que su corazón estaba recordando algo doloroso
-hiei tienes que recordarme, por favor-gritaba kurama mientras veía como hiei gritaba de dolor a la situación
-Hiei...se que nunca te lo he dicho pero...últimamente te e agarrado cariño, no se porque...pero a tu lado me siento feliz...tu mirada me reanima...en un día gris...yo...no soportaría perderte...preferiría morir a tener que perderte...seria mi eterno dolor...por favor...intenta recordarme...
-kurama...¡tu...eres mi dolor!
-¿que?
-si...el recordarme es lo que me causa este dolor intenso, eres mi dolor kurama, fui un tonto al no haber expresado, todo lo que siento, como tu me sent. Atraído, esas miradas que me dabas eran suficientes para poder curar este corazón herido, pero no para recordarte...
-por que nunca me lo dijiste
-No lo hice...porque...acuérdate soy el niño prohibido quien podria amarme...quien seria tan estupido como para poder arriesgar su vida por mi...
-Yo...
-no ya no...
-no te necesito no te puedes ir
-mi corazón ya no lo puede aguantar kurama, con solo habértelo dicho me siento feliz
-no dejare que te vallas
-perdóname...kurama
Kurama al escuchar las palabras no hizo mas que romper en llanto, no lo podía creer hiei lo había dicho, pero ya era muy tarde para el pobre y dulce corazón del pequeño hiei.
Hiei se aferro a su pecho, callo de rodillas, en su rostro se podía ver dolor, que al parecer no tenia fin, seguía gimiendo de dolor, era casi inexpiable.
Supongo que nadie podria soportar tanta angustia, dolor, al parecer todos los deseos y temores de hiei estaban a punto de estallas en aquel corazón tan frágil.
Los ojos de hiei empezaron a tornarse totalmente rojos, se levanto como una bestia, daba gemidos de dolor cada instante el dolor lo estaba controlando.
Kurama le rogaba que fuera aquel hiei el dulce, el que lo recordaba aquel hiei que siente aquel hiei a quien amaba...
Hiei no hizo más que darle una mirada de odio a kurama que no lo pudo ver así, kurama intento lo único que se le ocurrió, ya que no quería dañarlo.
Tal vez un abrazo podía expresar, que si, que si había un mañana, que la esperanza solo hay que buscarla, y con eso tal vez regresaría el pequeño y dulce hiei...
Hiei tenia los ojos enardecidos de odio, ¿hacia quien? ¿Hacia que? No lo podía explicar no era demasiado hasta para un youkai.
Kurama abrazo a hiei intentando transmitirle todo lo que sentía, todo lo bueno que hay en la vida, lo bueno del humano.
Hiei hizo mueca de desagrado hacia el abrazo, y empujó a kurama lejos, ni el mismo podía explicar a donde iba y por que.
En los ojos de kurama las lagrimas ya empeñaban a correr como ríos hacia en suelo, tal vez ya era demasiado tarde, no el no podía detenerlo.
Cuando intento pararse una mano le ofreció ayuda era Máx., con un extraño espejo en las manos, en el reflejo estaba la imagen de hiei como era dulce.
-ven, no podemos dejar que muera
-pero...
-lo se, ahora no puede responder a nada aunque uno lo intente, el dolor que el ocultaba muy adentro de el lo esta posesionando.
-¿habrá modo de regresarlo?
-lo hay
-cual es
- mira este espejo guarda la ternura y amor de una persona, y al parecer tu apareces en el de hiei, veras en el espejo hay dos partes el dolor y el amor, la imagen de hiei esta en amor y la tuya en el dolor.
-que puedo hacer para que el no sufra
-el espejo del lado del dolor esta roto
-y debo repararlo
-exacto, solo así te recordara
-vamos no hay tiempo
Kurama y Máx. Corrieron hasta encontrar rastros de hiei, pero al parecer el cuerpo ya no podía aguantar mas, por que empezaba a dejar sangre por la calle.
************************************************************ Espero que les haya gustado, y para los fans de hiei como "perdón" hasta a mi dolio escribirlo
