Escapology
Autora: Cha-Cha-Chica
Advertencia: NO SIGAS LEYENDO A MENOS QUE PUEDAS TOLERAR EL SLASH Y MPREG
Oye, ahí, si todavía sigues por aquí, bienvenido a mi fic.
Disclaimer: Sí, todo es mío....Alan Rickman es mi esclavo de amor y Jasón Isaacs es mi juguete favorito. lol. Sinceramente, si fuera dueña de algo ¿estaría haciendo esto por diversión y no por dinero? Creo que no.
N/A. Este es mi primer intento de fic Slash y un poquito de Mpreg (dijo poquito por la cantidad de tiempo que le dedico a eso) SS/HP, aunque puede pasar un tiempo para que estos dos se junten. En algún momento aumentará hasta ser un fic R. No les diré más. Por favor, léanlo y dejen review.
Capítulo 1
QUE PECULIAR.
Severus Snape acechaba a través de los pasillos de la casa familiar, con el ceño fruncido. Era la primera vez que había decidido ir a visitar la finca heredada de sus parientes y el maldito chico Potter se le había unido. Ordenes de Dumbledore. El maestro de pociones resopló. El viejo tonto. Voldemort había sido derrotado apenas unas semanas antes del asueto navideño, así que era definitivamente seguro que Potter se quedara dondequiera que quisiera. Había elegido la escuela, y el Director se había negado. Otro bufido escapó de Severus. Potter se veía definitivamente aterrado ante la idea de ser alejado de allí.
Sin embargo, no era esto lo que apelaba al lado oscuro del sentido del humor de Snape, o mejor, a su cinismo interno. Era la noción de que él y Potter, de alguna manera, se había convertido en neutrales uno con el otro durante los meses que precedieron a la batalla final. De hecho, a la sazón, Severus consideraba al chico como alguna clase de confidente, y había pensado que él lo había estado viendo con la misma luz, debido al constante tiempo compartido analizando los planes de la batalla y las tácticas del enemigo y cosas así. Obviamente, pensaba, no era lo que revelaban las súplicas frenéticas del chico para que lo enviaran a cualquier lugar, el que fuera, excepto con Snape...., no era lo que esperaba.
Sin embargo, el viejo ladino lo había obligado. Partiría de Hogwarts y pasaría el asueto de Navidad con Severus. Ninguno de ellos pudo descifrar POR QUÉ. Era el chico que se rehusó a morir al final del año escolar. Faltaban apenas cinco meses para la graduación. Casi era un adulto legal. Esto, simplemente, no era lógico.
Así que aquí estaban, ambos quedándose en la Mansión Snape.
Con un mínimo de conversación, el profesor de pociones le había mostrado a Harry los alrededores de la finca y luego lo condujo a una habitación de huéspedes y le indicó lo que debía hacer si deseaba llamar a un elfo doméstico o al propio Severus. Eso había sucedido cuatro días antes. El muchacho había permanecido desde entonces en su habitación saliendo solamente para comer cada cierto tiempo.
Snape suspiró. No culpaba al muchacho por querer permanecer recluido. Apenas hacía un mes que había perdido a sus amigos y profesores a manos de Voldemort y sus Mortífagos. La chica Weasley había sido la primera en perecer, luego el tal Finch de Hufflepuff. La casa de Severus también había sufrido pérdidas, principalmente los Mortífagos de séptimo, pero nada lo había sacudido más que la pérdida de Draco Malfoy. Él había sido uno de los pocos Slytherins del lado de la 'luz'.
Sacudió los pensamientos de su cabeza, y se detuvo al escuchar un gemido. Se giró y frunció el ceño en dirección de la habitación de Potter. Pasaron unos segundos antes que otro gemido amortiguado viniera de detrás de la puerta. Frunció el ceño más profundamente. Si el muchacho estaba auto-complaciéndose en SU habitación…….sus pensamientos se detuvieron nuevamente al escuchar un grito salir de la habitación.
Se acercó velozmente a la puerta y esperó a que algo, lo que fuera, le diera algo de base para irrumpir dentro del recinto. Otro gemido le indicó que Potter estaba experimentando dolor y no placer, y Snape no supo si sentirse aliviado o preocupado.
Golpeó en la madera.
-¿Potter?- llamó-. ¿Está todo….bien ahí?
Hubo un momento de duda y luego:
-Ahh...sí…..estoy, urghh….- otra pausa- Todo está bien- Como si esto no fuera suficientemente convincente, su respuesta fue aderezada con otra corta exclamación de dolor.
-Potter- trató nuevamente Snape- No dudaré en echar abajo la puerta.
Un gemido del interior de la habitación siguió a esta declaración, entonces se escuchó la voz del chico, sonando tremendamente frustrada y bordeando el pánico.
-Diablos, Severus. Es...toy...bien.
Ante el uso de su primer nombre Snape se puso alerta. Potter solo lo había usado en momentos de verdadera camaradería. Cuando estaban completamente serios y se habrían uno al otro. Además su tono......que significaba todo esto? Tenía que entrar
-¿Harry?- preguntó al tiempo que abría la puerta.
La vista que lo recibió lo dejó paralizado.
Ahí estaba pot…..Harry, retorciéndose de dolor sobre la cama, la sangre empapando la parte baja de su cuerpo, con todo y pantalones, filtrándose hacia las sábanas. Estaba sin camisa y sujetándose el abdomen. Saliendo de su estupor, Severus corrió al lado del joven. Miró sus ojos, que estaban atados por el dolor y el terror.
-Sev...-siseó Harry- Te dije…..
-Es evidente que estás de cualquier forma menos bien, Harry.
El salvador del mundo mágico gritó una vez más por el dolor, antes de clavar sus ojos en los de su profesor, las lágrimas a punto de escapar.
-Detente- le rogó- Aléjate.
Severus, pensando que el quebrado hombre ante él sufría algún tipo de encantamiento que le había salido mal o algo similar, movió su varita:
-Finite Incantatum
Sus ojos se abrieron completamente mientras el encantamiento desaparecía.
Había tenido razón. Harry estaba bajo un hechizo. Un encantamiento para ocultar, precisamente.
Al menos ahora sabía de dónde venía toda esa sangre. Tragó fuerte.
Harry Poter, El-Chico-Que-Vivió, estaba en ese momento derrumbado sobre la cama, en la agonía de dar a luz. Luchando por guardar la impresión que inundaba su pecho, se obligó a si mismo a ayudar al muchacho. No le hizo ninguna pregunta personal, pero formuló las respuestas en su mente.
Ahora tenía más sentido el extraño comportamiento de Harry. Su alejamiento de todos. El modo en que frenéticamente imploró a Dumbledore que lo dejara solo en Navidad. El modo en que se había aterrado durante la batalla final, mientras un rayo caía cerca de él.....obviamente quería evitar que el resto del mundo lo descubriera.
Luego que otra contracción hubo pasado, Severus se encontró mirando directamente en los ojos de Harry
-¿Alguien lo sabe?
El joven sacudió la cabeza, las lágrimas tratando de escapar.
-Na....nadie. Y….yo creo que esto es anormal.
-No…..no puedo decir que sea común...- el hombre mayor sacudió la cabeza tristemente- Pero a veces ocurre.
-He leído los malditos libros, ¿vale? He investigado. No es normal.....-Un corto, cínico bufido salió de sus labios- Pero bueno, nunca he sido capaz de ser 'normal'. ¿Qué podía esperar?
Snape tragó nuevamente, comenzando a formular su respuesta, pero fue detenido por otro aullido de dolor que salió por la boca de su alumno. Hizo una mueca, dándose cuenta que el proceso iba demasiado adelantado para tener tiempo de aparecerse. Parecía que la única oportunidad que tenían Harry y su hijo estaba en sus manos.
Esta no era una situación prometedora. Pero, ¿acaso alguno de ellos tenía otra elección?
Continuará....
N/T: ¿Qué os ha parecido? ¿Os gusta? Dejar reviews convuestra opinión, por favor...
Autora: Cha-Cha-Chica
Advertencia: NO SIGAS LEYENDO A MENOS QUE PUEDAS TOLERAR EL SLASH Y MPREG
Oye, ahí, si todavía sigues por aquí, bienvenido a mi fic.
Disclaimer: Sí, todo es mío....Alan Rickman es mi esclavo de amor y Jasón Isaacs es mi juguete favorito. lol. Sinceramente, si fuera dueña de algo ¿estaría haciendo esto por diversión y no por dinero? Creo que no.
N/A. Este es mi primer intento de fic Slash y un poquito de Mpreg (dijo poquito por la cantidad de tiempo que le dedico a eso) SS/HP, aunque puede pasar un tiempo para que estos dos se junten. En algún momento aumentará hasta ser un fic R. No les diré más. Por favor, léanlo y dejen review.
Capítulo 1
QUE PECULIAR.
Severus Snape acechaba a través de los pasillos de la casa familiar, con el ceño fruncido. Era la primera vez que había decidido ir a visitar la finca heredada de sus parientes y el maldito chico Potter se le había unido. Ordenes de Dumbledore. El maestro de pociones resopló. El viejo tonto. Voldemort había sido derrotado apenas unas semanas antes del asueto navideño, así que era definitivamente seguro que Potter se quedara dondequiera que quisiera. Había elegido la escuela, y el Director se había negado. Otro bufido escapó de Severus. Potter se veía definitivamente aterrado ante la idea de ser alejado de allí.
Sin embargo, no era esto lo que apelaba al lado oscuro del sentido del humor de Snape, o mejor, a su cinismo interno. Era la noción de que él y Potter, de alguna manera, se había convertido en neutrales uno con el otro durante los meses que precedieron a la batalla final. De hecho, a la sazón, Severus consideraba al chico como alguna clase de confidente, y había pensado que él lo había estado viendo con la misma luz, debido al constante tiempo compartido analizando los planes de la batalla y las tácticas del enemigo y cosas así. Obviamente, pensaba, no era lo que revelaban las súplicas frenéticas del chico para que lo enviaran a cualquier lugar, el que fuera, excepto con Snape...., no era lo que esperaba.
Sin embargo, el viejo ladino lo había obligado. Partiría de Hogwarts y pasaría el asueto de Navidad con Severus. Ninguno de ellos pudo descifrar POR QUÉ. Era el chico que se rehusó a morir al final del año escolar. Faltaban apenas cinco meses para la graduación. Casi era un adulto legal. Esto, simplemente, no era lógico.
Así que aquí estaban, ambos quedándose en la Mansión Snape.
Con un mínimo de conversación, el profesor de pociones le había mostrado a Harry los alrededores de la finca y luego lo condujo a una habitación de huéspedes y le indicó lo que debía hacer si deseaba llamar a un elfo doméstico o al propio Severus. Eso había sucedido cuatro días antes. El muchacho había permanecido desde entonces en su habitación saliendo solamente para comer cada cierto tiempo.
Snape suspiró. No culpaba al muchacho por querer permanecer recluido. Apenas hacía un mes que había perdido a sus amigos y profesores a manos de Voldemort y sus Mortífagos. La chica Weasley había sido la primera en perecer, luego el tal Finch de Hufflepuff. La casa de Severus también había sufrido pérdidas, principalmente los Mortífagos de séptimo, pero nada lo había sacudido más que la pérdida de Draco Malfoy. Él había sido uno de los pocos Slytherins del lado de la 'luz'.
Sacudió los pensamientos de su cabeza, y se detuvo al escuchar un gemido. Se giró y frunció el ceño en dirección de la habitación de Potter. Pasaron unos segundos antes que otro gemido amortiguado viniera de detrás de la puerta. Frunció el ceño más profundamente. Si el muchacho estaba auto-complaciéndose en SU habitación…….sus pensamientos se detuvieron nuevamente al escuchar un grito salir de la habitación.
Se acercó velozmente a la puerta y esperó a que algo, lo que fuera, le diera algo de base para irrumpir dentro del recinto. Otro gemido le indicó que Potter estaba experimentando dolor y no placer, y Snape no supo si sentirse aliviado o preocupado.
Golpeó en la madera.
-¿Potter?- llamó-. ¿Está todo….bien ahí?
Hubo un momento de duda y luego:
-Ahh...sí…..estoy, urghh….- otra pausa- Todo está bien- Como si esto no fuera suficientemente convincente, su respuesta fue aderezada con otra corta exclamación de dolor.
-Potter- trató nuevamente Snape- No dudaré en echar abajo la puerta.
Un gemido del interior de la habitación siguió a esta declaración, entonces se escuchó la voz del chico, sonando tremendamente frustrada y bordeando el pánico.
-Diablos, Severus. Es...toy...bien.
Ante el uso de su primer nombre Snape se puso alerta. Potter solo lo había usado en momentos de verdadera camaradería. Cuando estaban completamente serios y se habrían uno al otro. Además su tono......que significaba todo esto? Tenía que entrar
-¿Harry?- preguntó al tiempo que abría la puerta.
La vista que lo recibió lo dejó paralizado.
Ahí estaba pot…..Harry, retorciéndose de dolor sobre la cama, la sangre empapando la parte baja de su cuerpo, con todo y pantalones, filtrándose hacia las sábanas. Estaba sin camisa y sujetándose el abdomen. Saliendo de su estupor, Severus corrió al lado del joven. Miró sus ojos, que estaban atados por el dolor y el terror.
-Sev...-siseó Harry- Te dije…..
-Es evidente que estás de cualquier forma menos bien, Harry.
El salvador del mundo mágico gritó una vez más por el dolor, antes de clavar sus ojos en los de su profesor, las lágrimas a punto de escapar.
-Detente- le rogó- Aléjate.
Severus, pensando que el quebrado hombre ante él sufría algún tipo de encantamiento que le había salido mal o algo similar, movió su varita:
-Finite Incantatum
Sus ojos se abrieron completamente mientras el encantamiento desaparecía.
Había tenido razón. Harry estaba bajo un hechizo. Un encantamiento para ocultar, precisamente.
Al menos ahora sabía de dónde venía toda esa sangre. Tragó fuerte.
Harry Poter, El-Chico-Que-Vivió, estaba en ese momento derrumbado sobre la cama, en la agonía de dar a luz. Luchando por guardar la impresión que inundaba su pecho, se obligó a si mismo a ayudar al muchacho. No le hizo ninguna pregunta personal, pero formuló las respuestas en su mente.
Ahora tenía más sentido el extraño comportamiento de Harry. Su alejamiento de todos. El modo en que frenéticamente imploró a Dumbledore que lo dejara solo en Navidad. El modo en que se había aterrado durante la batalla final, mientras un rayo caía cerca de él.....obviamente quería evitar que el resto del mundo lo descubriera.
Luego que otra contracción hubo pasado, Severus se encontró mirando directamente en los ojos de Harry
-¿Alguien lo sabe?
El joven sacudió la cabeza, las lágrimas tratando de escapar.
-Na....nadie. Y….yo creo que esto es anormal.
-No…..no puedo decir que sea común...- el hombre mayor sacudió la cabeza tristemente- Pero a veces ocurre.
-He leído los malditos libros, ¿vale? He investigado. No es normal.....-Un corto, cínico bufido salió de sus labios- Pero bueno, nunca he sido capaz de ser 'normal'. ¿Qué podía esperar?
Snape tragó nuevamente, comenzando a formular su respuesta, pero fue detenido por otro aullido de dolor que salió por la boca de su alumno. Hizo una mueca, dándose cuenta que el proceso iba demasiado adelantado para tener tiempo de aparecerse. Parecía que la única oportunidad que tenían Harry y su hijo estaba en sus manos.
Esta no era una situación prometedora. Pero, ¿acaso alguno de ellos tenía otra elección?
Continuará....
N/T: ¿Qué os ha parecido? ¿Os gusta? Dejar reviews convuestra opinión, por favor...