Escapology

Autora: Cha-Cha-Chica

Traductoras: Alima21

Capítulo 10

YO Y EL SEÑOR DIABLILLO

Severus observó como su joven pareja reaccionaba ante las noticias. Primero sus ojos se abrieron y su respiración se transformó en irregulares jadeos, antes que la impresión eventualmente se apoderara de todo su cuerpo y cayera bruscamente en el piso lujosamente alfombrado. El hombre hizo una mueca y con sumo cuidado colocó a su hija, porque así era como la veía, en la cama recientemente desocupada, asegurándose de rodearla con murallas de almohadas para evitar cualquier posibilidad de que resultase herida. Luego se giró hacia el tembloroso joven en el piso y se agachó a su nivel.

-Harry- tanteó suavemente, estirando una elegante mano para cubrir la mejilla del Gryffindor-. Harry, amor, tú eres más fuerte que esto.

El joven sacudió la cabeza como única respuesta, lágrimas silenciosas cayendo de sus ojos. Snape suspiró.

-Potter- exigió-. Insisto en que dejes de compadecerte.......si no por mí, o por ti mismo, por tu.....no..... por *nuestra* hija.

Los enrojecidos ojos esmeralda se alzaron lentamente. Harry dejó escapar un tembloroso suspiro.

-No......no puedo.......

-Ridículo.

-Sev....

Snape frunció el ceño y obligó a su pareja a prestarle atención.

-A lo largo de tu vida has sobrevivido a muchas más cosas de las que nadie podría comprender. Temerle a Lucius Malfoy- Harry se estremeció pero Severus no se inmuto en lo más mínimo- y a la sola mención del hombre es ridículo. ¡*Especialmente* cuando la reunión se va a efectuar en Hogwarts, bajo la supervisión del mismísimo Albus!

El Niño-Que-Vivió sorbió ruidosamente.

-Pero......¿y.....y si quiere quitarme a mi hija?- preguntó, permitiendo que nuevos sollozos escaparan de sus labios.

El maestro de pociones se suavizó.

-No hay ninguna posibilidad de que eso ocurra. En primer lugar, porque yo nunca lo permitiría. Además, tu y yo sabemos que Malfoy senior sólo fue un 'devoto' Mortífago por dos razones- el joven emitió otro pequeño sollozo y esperó la extrapolación de Severus-. Los deseos de poder fue la primera, y es más que conocido que........el miedo a su esposa fue la segunda.

A pesar de si mismo, Harry resopló, lo que hizo que Snape sonriera.

-Es completamente cierto- declaró-. Narcisa definitivamente era quien llevaba los pantalones en esa relación y, en vista de que ella definitivamente era partidaria del Señor Oscuro, Lucius no pudo hacer otra cosa que seguirlo y probarle a ella su lealtad. Y, como estoy seguro de que ya estarás consciente, los Malfoy y los Snapes se parecen en que ninguno de nosotros nos probamos a pequeña escala.

Tragando, Harry asintió lentamente.

-¿Y por eso se convirtió en la mano derecha de Lord Voldemort? ¿Sólo para 'probarse a si mismo' ante su esposa?

Sonriendo tristemente, el hombre más viejo asintió.

-Desafortunadamente. Sin embargo, Lucius nunca fue adicto a hacer reverencias ante otro....

-Veo el punto, Sev. Después de la pérdida de Voldemort, él tiene muchas más ventajas colocándose en el lado de la luz.....pero aún queda un hecho, me odia......y si quiere a Callie.....-estaba temblando una vez más.

Snape suspiró y cambió de posición, para poder acoger al Gryffindor en su abrazo.

-Primero tendría que enfrentarse a Albus y a mí. Sin mencionar a tus dos secuaces y el resto de tu club de fans.

El joven puso los ojos en blanco

-Muy gracioso, Severus.

-Eso creo.

Una pequeña, genuina sonrisa subió a los labios de Harry, y se permitió sonreír débilmente. Severus tenía razón. Estaba reaccionando excesivamente. Podría manejar cualquier cosa que el señor Malfoy tuviera guardada. Después de un momento, salió del abrazo y miró a su pareja, avergonzado.

-Lo lamento. Debo parecer un cretino......

Severus asintió, sus ojos brillando con alegría.

-No voy a negarlo- le contestó con ironía-. Sin embargo, todavía eres *mi* cretino.

Harry lo golpeó en el brazo, fingiéndose indignado.

Snape sonrió, y en silenció se alabó por haber tenido éxito en reparar la confianza del joven. Después de todo, sólo Merlín sabía cuanto la necesitaban ambos.

~*~

-¡Es absolutamente absurdo!- rugió el aristocrático rubio a todos los ocupantes de la habitación.

Dumbledore sacudió lentamente la cabeza, con una tranquilidad irritante.

-Si no moderas el tono de tu voz.....

Lucius miró con furia al anciano mago.

-Soy el abuelo biológico de la niña.....

-Y *yo* soy su padre biológico- bufó Harry, interrumpiéndolo-. Por lo que a mi concierne, usted no tiene ningún derecho, sólo porque da la casualidad de que es el padre del chico con quien estaba durmiendo.

-Y yo podría argumentar que tu no tienes derecho sólo porque da la casualidad que olvidaste el encantamiento anticonceptivo- espetó Lucius, usando su propia lógica contra él.

El Gryffindor miró furioso, dándose cuenta de que no tenía un argumento válido contra eso, excepto el hecho de que desconocía que existían algunos magos raros, con la habilidad de concebir y llevar un niño. Permaneció en silencio echando humo mientras Lucius se volvía hacia el Director.

-¿Dónde está mi nieta?- espetó-. Exijo......

Esta vez fue el maestro de pociones quien lo interrumpió.

-No tienes derecho a exigir tal cosa, Lucius. Lo sabes bien.

En lugar de estallar, como había estado propenso a hacer, Lucius se limitó a sonreír a su compañero Slytherin.

-Severus- dijo con voz cansina-. Me estaba preguntando cuánto tiempo te tomaría para que pusieras tus dos knut- ante el ceño fruncido de Snape, el hombre continuó-. Ya que empezaste las primeras etapas en el proceso de adopción de mi nieta.......

Dumbledore arqueó una ceja, mientras Harry balbuceaba ante la revelación. Severus frunció el ceño más profundamente.

-Como es lógico, Malfoy, no tengo ni idea de lo que estás hablando.

-Vamos- Lucius rió entre dientes, de la más maliciosa manera imaginable-. No *mientas*, Profesor.

-Te puedo asegurar que no he hecho eso ni nada parecido.

Lucius rió, arisco.

-¿Entonces qué es esto?- metió la mano en su túnica y extrajo una hoja de pergamino doblada; el sello del Ministerio de la Magia se veía a una milla de distancia. Sin otra palabra pasó el papel al maestro de pociones, quien permaneció completamente estoico, excepto por la sorpresa en sus ojos.

-Severus....- Albus habló un momento después, señalando el documento. Segundos después, el papel estaba en sus manos.

El silencio reinó en la oficina por los siguientes minutos, hasta que Albus apartó la hoja de papel y levantó la vista hacia el rubio.

-¿Cómo conseguiste esto, Lucius? Es confidencial.....

El señor Malfoy dejó escapar una risa condescendiente.

-La verdad, Director, es que fue bastante simple- prácticamente ronroneó-. Después que el periodista estableció contacto conmigo con sus, como lo diríamos, *sospechas*- ante esto sonrió-acerca de la paternidad del bebé......sencillamente contacté al Departamento de Asuntos Familiares del Ministerio y les expliqué mi situación. Naturalmente, luego de una inspección apropiada, se vieron obligados a permitirme recuperar el documento que ahora sostiene.

Severus lo miró con furia. Lucius había embaucado al Ministerio para que le entregaran una copia del certificado de nacimiento de la hija de Harry. Esto debía haber ocurrido unos días antes de esta reunión. Antes de que se hiciera público lo que estaba pasando; antes que los estudiantes de Hogwarts fueran informados de la última adición al clan Potter. No había manera de que ese cretino de Anderson pudiera saberlo, a menos que.....

El hombre rubio observaba mientras los engranajes en la cabeza de Snape giraban, esperando que las acusaciones (las cuales no eran más que simples presunciones, que nadie podría probar) comenzaran.

-Él espió en mi casa- masculló fieramente el maestro de pociones, más para si mismo que para los demás ocupantes de la habitación-. Ese reportero......espió en mi Mansión.

Harry, quien se había encaminado hacia el escritorio de Dumbledore para inspeccionar el certificado de nacimiento, frunció el ceño.

-¿Un espía como Rita Skeeter?- preguntó, imaginándose al periodista, en su forma de animago, revoloteando alrededor de su nuevo hogar. Apretó los puños a sus lados con disgusto.

-No lo ubicaría más allá de los reporteros de El Profeta- replicó Severus, mordazmente. Regresó su atención hacia el hombre rubio-. Y a cambio de informarte, solicitó una copia del certificado de nacimiento- Suspirando tristemente, miró a su joven pareja-. El Profeta sin duda sacará provecho de esta información.

Harry se limitó a asentir, preguntándose que más había 'sospechado' ese reportero acerca de Severus y sus Navidades y si algo respecto a esto podría ser publicado en los medios. Sólo Merlín sabía las consecuencias que sobrevendrían si eso llegaba a ocurrir. Apenas estuvo consciente, mientras se revolcaba en sus preocupados pensamientos, de que Lucius había comenzado a hablar nuevamente.

-....y como soy el único sobreviviente de la familia paterna.....-Harry objetó eso, pero aún así permaneció en silencio-....exijo acceso a la niña.

-Es una lástima, señor Malfoy- se encontró replicando el Gryffindor-. Es innecesario decir que yo tengo una reclamación de custodia más segura.

El hombre rubio se burló.

-Todavía eres un niño, *señor* Potter- miró con malicia al maestro de pociones-. Estoy seguro de que Severus estaría de acuerdo.

Ambos hombres decidieron ignorar el puntillazo, que sólo parecía validar los miedos de Harry de que su relación fuera descubierta. Dumbledore, por su parte, sacudió la cabeza y se levantó de su asiento, indicando el final de la conversación formal.

-Lucius- comenzó, estrechando los ojos ante el rubio- Aún cuando entiendo tu deseo de reunirte con tu nieta, debes saber que esa decisión descansa en las manos de Harry. Si él lo acepta y cuando llegue el momento adecuado, esto se hará, pero bajo mis términos, así como bajo los de *SU* padre. Y sobre ese asunto de su edad- el anciano mago pareció encogerse de hombros- cumplirá dieciocho años en unos meses, convirtiéndose en un adulto legal. Y, hasta entonces, va a recibir el apoyo de todos los que estamos en Hogwarts- con un movimiento de su varita, la puerta se abrió de par en par- . Que tenga buen día, señor Malfoy.

Y con eso, la conversación se dio por concluida definitivamente. El rubio frunció el ceño a los otros tres, antes de dar vuelta sobre sus talones y salir como una tromba de la habitación, su capa ondulando detrás de él, dejando a sus espaldas la estela de un incómodo silencio.

-Ahora, Severus- comenzó Albus lentamente- ¿Te importaría explicar que significa todo esto?- preguntó levantando el certificado de nacimiento, donde se establecía que Severus Snape había dado los primeros pasos hacia la adopción legal de Callisto Orinda Potter, aunque todavía no se había hecho oficial.

El aludido repitió mentalmente su respuesta inicial. *No, no lo haré. Métete es tus propios asuntos, viejo tonto entrometido*, pero en voz alta, aceptó

-Por supuesto, Director.

-Aunque, antes que empiece....- lo interrumpió Harry, jugueteando con algunas chucherías de los estantes de Dumbledore. Evitó mirar a su pareja y trató de buscar en la mirada aparentemente omnisciente del Director, mientras su mente gritaba ante las repercusiones que podrían ocurrir si Dumbledore descubría la verdad respecto a Severus y a él-....me preguntaba si podría ir a chequear al Callie.....

El Director lo contempló con comprensión.

-Por supuesto- contestó. Harry sonrió agradecido y se giró para partir. Albus observó mientras el Gryffindor caminaba hacia la puerta antes de continuar-. Tráela contigo de vuelta. Creo que tenemos mucho que discutir....

~*~

-....Y, luego de asegurarme que Potter y su niña estaban instalados en su cuarto, inadvertidamente me referí a Callisto como si fuera mía- estaba explicando Snape, cuando Harry regresó a la oficina, con su hija gorjeando en sus brazos-. En ese momento me di cuenta de mi error, y empecé a salir, sin embargo...- el maestro de pociones lanzó una mirada en dirección al Gryffindor- Potter me detuvo y me preguntó sobre mi más bien freudiano desliz y me sentí impulsado a contestar con honestidad.

Los ojos azules de Albus estaban brillando nuevamente, la irritación de los otros dos no tenía fin.

-Ya veo- murmuró, antes de tomar un caramelo de limón y hacerlo estallar en su boca-. Aunque ese detalle por si solo no originaría esa reacción automática.

Severus asintió

-Quizás mi decisión de lograr una relación estable entre la niña y yo también tuvo algo que ver.

-O- se encontró Harry agregando, mientras se sentaba al lado de su pareja- tu oferta para que Callie y yo vivamos contigo después de graduarme.

El maestro de pociones cerró los ojos, esperando reprimir la frustración que burbujeaba en su interior, mientras el Director abría los ojos ligeramente.

-¿Así que es eso, Severus?

Los ojos de obsidiana de abrieron con cansancio, y él asintió en respuesta.

Harry se estremeció, como si sintiera que accidentalmente había develado su secreto. De hecho, eso era lo que había hecho. La urgencia de gritar "no hay nada entre nosotros" casi lo rebasó, antes de darse cuenta que de alguna forma eso sería equivalente a vivar las llamas de un fuego ya bastante ardiente. El Gryffindor evitó mirar a Severus, , sabiendo que el hombre estaría menos que complacido con su desliz. Miró a Dumbledore.

-Aunque.....yo lo impulse a eso....Quiero decir, me pasé una gran parte de las vacaciones de Navidad quejándome de no tener adónde vivir y no saber qué iba a hacer.....el Profesor Snape sólo actúo en base a los pensamientos que puse en su cabeza. De hecho.....

Una marchita mano lo indicó que era tiempo de que dejara de hablar. Albus le sonrió, claramente divertido.

-Creo que ya entendí, Harry.

-Lo siento, señor- el chico se ruborizó ligeramente.

-Está bien- replicó el viejo mago, girando su atención hacia el maestro de pociones-. Debes estar consciente de que tienes que hacer una elección, Severus......al igual que Harry- declaró con seriedad-. Está adopción, a diferencia de la inscripción oficial, requiere que ambos den su consentimiento por escrito. Igualmente, si desean suspender la adopción, aplica la misma solicitud formal- clavó sus dedos sobre su escritorio-. Es una decisión importante y no debe ser tomada a la ligera.

Harry asintió, mientras su mente murmuraba cosas como "declarar lo obvio"

-Me gustaría....- comenzó indeciso, mirando a Severus por el rabillo del ojo-. Pues, estaría más que feliz si Severus aceptara- miró de nuevo a Dumbledore-. Especialmente después de la reciente demostración que nos dio el señor Malfoy.....si....si algo me ocurriera....sería bueno que Callisto tuviera otro padre....uno que se preocupara por ella, que no permitiera que tuviera ningún problema.....- se calló al darse cuenta de que estaba divagando-. Claro, si el Profesor Snape estuviera de acuerdo con los principales aspectos de su papel.

-De hecho- Albus estaba, una vez más, obviamente divertido. Se giró hacia el otro hombre-. ¿Y tú estás de acuerdo, Severus?

De nuevo, el maestro de pociones asintió tranquilamente.

-Creo que ya Potter dijo todo lo necesario.

Prácticamente radiante, Dumbledore se reclinó sobre su asiento.

-Muy bien....solicitaré que elaboren los documentos requeridos esta misma tarde. Felicitaciones, Severus- recibió un sencillo asentimiento como reconocimiento y apreciación-. Ahora, sobre el tema de donde se quedará la joven Callisto durante las horas de clase.....

Harry lanzó un silencioso suspiro de alivio. La conversación nuevamente había estado demasiado cerca como para sentirse tranquilo, esta vez por su propia culpa. Sabía que uno de esos días los atraparían.

Sin embargo, ese no había sido el día, y daba gracias por ello.

~*~

-¡Harry!- llamó Hermione cuando entraba sin prisa al aula de Historia de la Magia, la tercera clase que le tocaba ese día-. ¿Dónde estuviste toda la mañana? ¡Estaba enferma de preocupación! ¡Te perdiste la clase doble de Transformaciones! ¿Tienes idea de cuánto trabajo te exigirá para recuperarla?

Él sonrió, sacudiendo la cabeza con el fin de tranquilizarla.

-Estaba con Dumbledore- le dijo, a modo de explicación, Ante su mirada curiosa, suspiró y corrió la mano por su cabello-. El señor Malfoy descubrió......

Hermione jadeó y lo abrazó.

-Oh, no...¿Está todo bien? La bebé.......

-Callisto está bien. Rehusé permitir que Malfoy se le acercara. Se quedó con algunos de los profesores que no tenían clases mientras Sev y yo discutíamos con él- el joven se alejó de su abrazo-. También estábamos decidiendo donde colocarla mientras estoy en clases.

La joven puso los ojos en blanco.

-De veras, Harry- lo regañó ligeramente-. Lo haces sonar como si ella fuera alguna clase de objeto....'colocarla' en algún lugar....Honestamente......- el se rió y ella suspiró-. Entonces, ¿qué harás eventualmente?

-Bueno, durante el tiempo que Severus no esté dando clases, él se va a ocupar de ella....- Harry se encogió de hombros-. Ya sabes, teniéndola en sus aposentos, vigilándola mientras revisa ensayos y todo eso....

Hermione asintió.

-¿Y cuando él esté enseñando y tú todavía estés en clases?

-Madame Pomfray dijo que podía cuidarla en la enfermería- frunció ligeramente el ceño-. Sigue un poco molesta conmigo. Por no haberle contado, quiero decir- se encogió de hombros-. Es comprensible, pero, en realidad, si hubiera.....

La joven levantó una mano silenciándolo

-Lo sabemos, Harry. Sabemos todo.

Él asintió antes de arrugar su nariz confuso, mirando alrededor del salón.

-Mione- le preguntó-. ¿Dónde está Ron?

-Oh- movió la mano en el aire en un gesto despectivo- Está con McGonagall-. De alguna forma, transformó su nariz en un hocico de perro....ella está tratando de resolver el problema....Por supuesto, el *cómo* lo hizo es algo que nunca se sabrá.....*supuestamente* estábamos transformando objetos inanimados en.....- de repente se calló, antes de decir:- No me estás prestando la más mínima atención, ¿verdad?

Harry, quien reía disimuladamente, comenzó a reír más alto ante la imagen mental de su mejor amigo con un hocico de perro; luego sacudió la cabeza

-Lo siento, Mione, pero es que es tan divertido....

Ella puso los ojos en blanco, mientras el Profesor Bins aclaraba su garganta transparente en su dirección. La chica enrojeció y regresó a su trabajo, mientras el profesor fantasma hablaba de la Legislación de 1894, sobre algo referente a los Duendes.

Harry no prestó atención. Estaba demasiado ocupado cavilando sobre todo lo que había ocurrido esa mañana. Sabía que Lucius no se rendiría tan fácilmente, y ese pensamiento, que usualmente hubiera provocado que las dudas y miedos lo consumieran, sólo lo llevó a la siguiente revelación. Severus Snape iba a adoptar a su hija. El Gryffindor sonrió ante esto. Sabía que Callisto estaría segura fuera del alcance de Lucius una vez que los documentos fueran procesados.

Sólo esperaba que eso ocurriera más bien pronto. Sabía que las cosas entre él y Severus estaban ocurriendo demasiado rápido......pero no le importaba. De hecho, era más bien reconfortante, y para nada desalentador o abrumador; tal como él una vez había asumido.

Suspirando internamente, se obligo a si mismo a tomar algunas notas del discurso de Binns. Mientras se levantaba y recogía sus libros al final de la lección, sus pensamientos fueron una vez más hacia Severus y su hija.

Su familia.

~*~

El almuerzo y las siguientes clases transcurrieron sin incidentes, y antes que el joven padre se diera cuenta, estaba saliendo del Gran Comedor rumbo a la Torre Gryffindor, luego de darse un atracón de comida durante la cena.

Severus una vez más se apropió de su hija durante la comida, asegurándole que se encargaría de cambiarla y alimentarla, antes de acostarla para dormir. Harry había protestado, argumentando que tales deberes eran su responsabilidad, pero el hombre maduro había fruncido el ceño ante eso.

Aparentemente, al tiempo que asumía el papel del segundo padre, el maestro de pociones había elegido compartir casi todos los aspectos del cuidado de la pequeña. Además, le recordó al Gryffindor que sus amigos y él todavía debían tener una conversación apropiada para explicar algunos de los temas más intrincados sobre la relación de ambos y la existencia de la joven Callisto.

Harry admitió que Severus tenía razón y le agradeció feliz, antes de salir apresuradamente del Gran Comedor con Ron y Hermione.

-Miren, por qué no vamos a mis habitaciones.....todavía no las han visto.....y aún tengo más cosas que contarles- les propuso mientras caminaba a su lado a grandes zancadas.

El pelirrojo gruñó

-Harry, compañero, no te lo tomes a mal ni nada de eso......pero todavía estoy intentando ajustarme a ciertas cosas....

-¡Ron!- Hermione frunció el ceño, cruzando los brazos sobre el pecho-. Es obvio que esto es importante para Harry....

El Niño-Que-Vivió sacudió la cabeza.

-No, tranquilo, entiendo que necesites más tiempo para.....er.....procesar todo lo de ayer- hizo una pausa-. Son muchas cosas, lo sé.....

-Tonterías- insistió la joven, aferrando el brazo de Ron y enganchando su brazo libre en el de Harry-. Además, todavía no he podido conocer a tu hija, Harry- pensó en el día anterior, cuando había visto por primera vez a la bebé en brazos de su amigo-. Bueno, no de manera apropiada, en todo caso.

El moreno le sonrió satisfecho, y comenzó a hablar sobre su hija de la forma en que sólo un padre orgulloso podría hacerlo. Sus dos amigos sonreían y asentían ante su apasionada manera de hablar; sin embargo, cada uno se alegro secretamente cuando se detuvieron frente a un tapiz ubicado cerca de la cumbre de la Torre Gryffindor, mientras el joven suspendía su paternal parloteo para dar la contraseña.

Harry hizo pasar a sus amigos a su habitación, indicándoles con un gesto que se acomodaran frente al fuego, mientras entraba en la habitación de Callisto. Ella no estaba todavía en su cuna, lo que quería decir que seguía bajo el cuidado de Severus. El Gryffindor regreso a su réplica de la sala común y miró a Hermione.

-Disculpa, Hermione....pero Sev todavía tiene a Callie- se encogió de hombros mientras se hundía en una silla frente a sus amigos-. Supongo que tendrás que esperar un poco para conocerla.

La joven le sonrió cálidamente.

-Me las arreglaré, estoy segura.

Harry asintió, mientras Ron sacudía la cabeza, todavía tratando de asimilar todas las bombas que su mejor amigo le había lanzado el día anterior.

-Harry- comenzó-, no quiero que suene como que no deseo estar aquí....pero, antes dijiste que tenías algo que decirnos....

-Ah....sí...eso....- el Niño-Que-Vivió pareció retorcerse en su asiento-. Bien......yo pensé que podría explicar.....er....todo un poco más claramente....y.....bien....esperaba que al hacer esto, podrían tener.....- lucho por encontrar la forma correcta de expresarse-....umm, nueva información algo más......comprensible.

El siguiente par de horas transcurrieron con la descripción de sus emociones y los eventos del año pasado.

-....así que.....er.....eventualmente me di cuenta que había caído por él.......estaba de cabeza por el 'cretino grasiento', si pueden creerlo- bufó ligeramente ante lo ridículo que sonaba ese pensamiento, antes de reponerse y retomar la conversación una vez más-. Al principio él me rechazó totalmente.....pero....después de pasar un tiempo juntos, bueno, cada cosa.....- el chico se encogió de hombros-. Pasamos por muchas cosas.....y, para no alargar una historia que es más bien corta, decidimos intentar establecer una relación seria.

Hermione abrió la boca, pero una mano de Harry la silenció.

-Ya discutimos todo ese asunto de Profesor/Estudiante y esa es la principal razón por la que vamos a esperar a que me haya graduado antes de empezar cualquier cosa- un nuevo encogimiento de hombros-. Además, probablemente estaremos mucho más cómodos cuando Callie y yo nos mudemos a su Mansión....

-¿Qué?- interpuso Ron.

Harry suprimió una sonrisa

-Bueno, es apenas lógico......en vista de que él ha aplicado para convertirse en el segundo padre de Callisto. Legalmente, quiero decir.

Al joven pelirrojo le cayó la quijada, y como era obvio, al menos para el muchacho de cabello oscuro, su compañera luchaba por evitar hacer lo mismo.

-N...no se que decir a eso- comenzó Hermione, su ceño se frunció mientras su cerebro parecía conectarse-. ¿Estás seguro de que eso es lo que quieres?- Harry la miró ceñudo y ella suspiró-. Lo lamento....es sólo que.....lo que estás diciendo....implica importantes decisiones.....-levantó la mano, al darse cuenta que ya su amigo había reflexionado sobre eso-. Bueno, mientras tú seas feliz, Harry, seré feliz por ti- terminó, dándole un codazo a Ron, quien murmuró incongruencias.

El más joven de los Weasley luchaba por explicar cuánto lo estaban perturbando las nuevas noticias de su compañero de Gryffindor; sin embargo, todo lo que pudo hacer fue preguntar:

-¿Esto quiere decir que tendremos que pasar más tiempo con Snape?

Continuara..........

Pequeñas brujas y magos, ya llegamos al capítulo diez y recibimos la visita de papá Malfoy y la semana próxima viene otra visita. Adivinen quién. Ah, y échense una pasadita por nuestra nueva traducción (de la misma autora que Escapology) Se llama afterglow. Un beso enorme y hasta el viernes.

Ana Rickman: Pues ya sabes cómo se enteró Lucius, es que esos condenados periodistas son de lo peor. Por supuesto que el rubio quiso llegar avasallando, pero lo único que logró es que la adopción se pusiera en camino, habrá que agradecerle jeje. Ron, pues el pobre está haciendo lo que puede y Hermi sensata como siempre, las reacciones del resto como que no le importaron mucho a la escritora. Sobre las chimeneas.....sorry, prometieron portarse bien en el colegio, habrá que esperar a la graduación. Besotes y te esperamos el viernes.

Margarita6: Gracias por seguir leyendo. Esperamos te haya gustado el capítulo. Besos y hasta el viernes.

Chiquinkira: Que bueno que lo aceptaras (la aceptación es el primer paso para la solución del problema jeje) Lástima, pero Lucius no se fue cantando tango precisamente, más bien entonaba un himno de guerra ¿no lo escuchaste? A ver que hace ahora, es que es tan malo. Besitos y nos vemos el viernes.

Azalea: Por supuesto que el viejito sospechaba, pero como es tan pícaro y de alma celestina, se hace de la vista 'casi' gorda. Lucius no se llevó a Callie, Sevie no lo permitiría y cuando Sevie se empeña.....ya todo el mundo mágico lo debe saber (¿imaginas la cantidad de lechuzas que han debido salir de Hogwarts después de la confesión de la otra noche?) Sobre Sirius, lo único que te podemos decir es ¡Por Merlín, la que se va a armar!. Besossss y no te olvides de nuestra cita. Viernes.

Velia: Pues Sevie asumió definitivamente a su nueva familia, con papeles y todo. Mira que le costó pero al fin Harry lo consiguió. Tienes razón, Lucius no pudo con Sevie, además que Albus lo ayudó bastante. Que bueno que te siga gustando la historia y aquí tienes la actualización. Besos y hasta el domingo.

Kaco Malfoy de Snape: Pues la autora es muy mala y nosotras también jaja. ¿Cómo pudiste olvidar que el rubio buen mozo estaba por ahí rondando? Y llegó reclamando, ¿cuando no?, al fin y al cabo un Malfoy siempre es un Malfoy, y los Malfoys nunca cambian (es parte de su encanto) No tienes que agradecernos por las respuestas. Siempre que quieras saber algo, pregunta, pregunta. Besitos y te esperamos el viernes

BeaYita Moony Snape: antes que nada ¡¡Bienvenida a nuestras traducciones!! Gracias por tu opinión de la historia y la traducción, acostumbramos actualizar cada viernes. Por cierto, ¿tan mal está la traducción de la Orden del Fénix? Nosotras la leímos en inglés pero todavía no hemos adquirido la traducción. Besos y ojalá nos sigas visitando.

Txiri: Jejeje, parece que tu pregunta sobre Sev ha quedado bastante clara con este capítulo, lo demás tendrás que esperar para saberlo. Harry y Sev hacen una bonita y compenetrada pareja. Besitos y hasta el viernes.