Al llegar a la casa, ambos descendieron en el balcón y Vegeta sacó una
llave. Al entrar a la recámara vieron todo lleno de globos de corazones y
arreglos florarles.
-¿Tú hiciste eso, Vegeta? -pero Gokú obtuvo su respuesta al ver al príncipe con una vena palpitándole la sien.
-Hola Vegeta -salió Bulma desde una puerta y con Trunks -¿Recuerdas que te dije que le daría a Gokú una sorpresa de tu parte? -Vegeta la ve con cara de "¿Cuándo me dijiste eso?", pero Bulma le golpea el hombro disimuladamente.
-A.Ah sí, no lo recordaba -le toma la mano a Kakarotto -ES cierto, todo esto es para ti. Yo le pedí a Bulma que me ayudara (pero creo que exageró la nota), peor con lo de hace rato lo olvidé -lo sienta en la cama.
-Bueno Vegeta, nosotros nos retiramos, esperamos sinceramente que disfrutes este día -Bulma y Trunks salieron por la puerta principal.
-Que lindo, gracias Vegeta -Vegeta se volteó a ver a Gokú, quien jugaba con uno de los globos.
-Pero más lindo eres tú -dijo el príncipe y s e inclinó frente a él -Odio admitirlo, pero Cell tuvo razón en lo que te dijo -Gokú hizo a un lado el globo, con el que jugaba.
-¿Eh? -puso su típica cara de no entiendo.
-¡Ay Kakarotto! -le dijo Vegeta suavemente y sonriéndole le revolvió el cabello.
-No te entendí -le dijo, peor a toda respuesta Vegeta lo besó y cuando de nuevo iba a besarlo, Gokú se puso un globo delante de la cara.
-¡Kakarotto! -dijo Vegeta y Gokú reía- ¿Ah sí? -Vegeta se subió a la cama y se hincó en ella de rodillas, rodeando a Gokú y le comenzó a hacer cosquillas, cosa que hizo a Gokú atacarse de risa y caer de espaldas sobre el colchón -Ah, con que eres cosquilludo -Vegeta siguió haciéndole cosquillas, pero de repente paró y Gokú pudo respirar y vio a Vegeta con el semblante serio.
-¿Qué ocurre? -se preocupó.
-Nada -de nuevo acarició la mejilla de Gokú -Que hermoso eres Kakarotto -ahora se puso encima de él y lo besó, mientras deslizaba las manos sobre su pecho, encima del traje de entrenamiento -¿tienes miedo? -le preguntó.
-No -dijo Gokú muy suave y cerrando los ojos se dejó llevar.
Vegeta separo sus labios de la boca de Gokú y lo besó con delicadeza en el cuello. Gokú subió los brazos y abrazó a Vegeta. Permanecieron abrazados por unos diez minutos. Tiempo después, Vegeta se giró hacia su lado de la cama y abrió el cajón de la cómoda.
-¿Sabes Kakarotto?. Ustedes los terrícolas le entregan un anillo a su pareja, para pedirles que se queden con ustedes -mientras hablaba, sacó una caja de terciopelo y se puso detrás de Gokú -Pero nosotros los saiyas les entregamos un collar especial -Abrió la caja y sacó su contenido. Éste era un collar con un zafiro, con un diamante y en el centro tenía el símbolo de la realeza de los saiyas -No sé por qué nunca se lo di a Bulma, talvez sentía que ella no era digna de ser mi pareja y no lo digo en mala fe -rodeó el cuello de Gokú con la cadena del collar.
-Vegeta- al tener el collar en el cuello; Gokú lo miró asombrado, la cadena del collar era de oro puro (digo para quienes quieran saberlo).
-Con eso te demuestro que quiero que seas mi pareja para toda la vida. Aunque no creo que podamos casarnos -Gokú se quedó con cara de what y Vegeta rió de buena gana - Créeme que me gustaría casarme contigo -lo abrazó -Bueno, ¿quieres salir a cenar? .Vamos al centro comercial -Gokú asintió y se puso de pie -Ok -salieron los dos juntos.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.- .-
En dicho centro comercial (Akiko y yo salimos en todas nuestras historias. Bueno soy yo quien las escribo y ella es quien me pide salir. Si alguien de ustedes quieren aparecer en alguna sólo dígamelo), se encontraba una chica bastante extraña, dando vueltas como trompo chillador, por toda la plaza sin saber a donde ir.
-Dios. Que aburrido es estar sola -deambulaba por una librería cuando de pronto vio un libro llamado "Los Nameks y su estilo de vida" -¡Wuaw! -dijo y sacó el libro del estante y fue a la caja más próxima para pagarlo -Bueno, tan siquiera ya tengo algo con que entretenerme -de repente ve a Gokú cargado de un montón de regalos.
-Ven Kakarotto, entremos en ésta tienda para ver si te compro otro regalo -Vegeta lo jaló del brazo.
-Pero con lo que me has comprado ha sido más que suficiente -Gokú quería impedir que Vegeta se gastara todo su dinero.
-Vamos adentro -Vegeta dejó todos los paquetes en la paquetería de la tienda y empujó a Gokú dentro de esta.
-Ay, yo quiero un novio así (todas queremos un novio así) -Dijo la chica al observarlos.
-A ver, ven acá te compraré más ropa. No es justo que siempre tengas puesto lo mismo (bueno en algo se tiene que parecer a Milk) ¿no te da comezón? -Vegeta estaba viendo un poco de ropa.
-No, por que siempre lo lavo -Dijo Gokú y vegeta le aventó un poco de ropa.
-Anda, ve a probarte eso -lo lleva los probadores, mientras la chica misteriosa los seguía.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.- .
Continuará. ¿Quién será la chica misteriosa? ¿Será Akiko o seré yo?
Un punto al que adivine.
Seguimos en el centro comercial.
-¿Tú hiciste eso, Vegeta? -pero Gokú obtuvo su respuesta al ver al príncipe con una vena palpitándole la sien.
-Hola Vegeta -salió Bulma desde una puerta y con Trunks -¿Recuerdas que te dije que le daría a Gokú una sorpresa de tu parte? -Vegeta la ve con cara de "¿Cuándo me dijiste eso?", pero Bulma le golpea el hombro disimuladamente.
-A.Ah sí, no lo recordaba -le toma la mano a Kakarotto -ES cierto, todo esto es para ti. Yo le pedí a Bulma que me ayudara (pero creo que exageró la nota), peor con lo de hace rato lo olvidé -lo sienta en la cama.
-Bueno Vegeta, nosotros nos retiramos, esperamos sinceramente que disfrutes este día -Bulma y Trunks salieron por la puerta principal.
-Que lindo, gracias Vegeta -Vegeta se volteó a ver a Gokú, quien jugaba con uno de los globos.
-Pero más lindo eres tú -dijo el príncipe y s e inclinó frente a él -Odio admitirlo, pero Cell tuvo razón en lo que te dijo -Gokú hizo a un lado el globo, con el que jugaba.
-¿Eh? -puso su típica cara de no entiendo.
-¡Ay Kakarotto! -le dijo Vegeta suavemente y sonriéndole le revolvió el cabello.
-No te entendí -le dijo, peor a toda respuesta Vegeta lo besó y cuando de nuevo iba a besarlo, Gokú se puso un globo delante de la cara.
-¡Kakarotto! -dijo Vegeta y Gokú reía- ¿Ah sí? -Vegeta se subió a la cama y se hincó en ella de rodillas, rodeando a Gokú y le comenzó a hacer cosquillas, cosa que hizo a Gokú atacarse de risa y caer de espaldas sobre el colchón -Ah, con que eres cosquilludo -Vegeta siguió haciéndole cosquillas, pero de repente paró y Gokú pudo respirar y vio a Vegeta con el semblante serio.
-¿Qué ocurre? -se preocupó.
-Nada -de nuevo acarició la mejilla de Gokú -Que hermoso eres Kakarotto -ahora se puso encima de él y lo besó, mientras deslizaba las manos sobre su pecho, encima del traje de entrenamiento -¿tienes miedo? -le preguntó.
-No -dijo Gokú muy suave y cerrando los ojos se dejó llevar.
Vegeta separo sus labios de la boca de Gokú y lo besó con delicadeza en el cuello. Gokú subió los brazos y abrazó a Vegeta. Permanecieron abrazados por unos diez minutos. Tiempo después, Vegeta se giró hacia su lado de la cama y abrió el cajón de la cómoda.
-¿Sabes Kakarotto?. Ustedes los terrícolas le entregan un anillo a su pareja, para pedirles que se queden con ustedes -mientras hablaba, sacó una caja de terciopelo y se puso detrás de Gokú -Pero nosotros los saiyas les entregamos un collar especial -Abrió la caja y sacó su contenido. Éste era un collar con un zafiro, con un diamante y en el centro tenía el símbolo de la realeza de los saiyas -No sé por qué nunca se lo di a Bulma, talvez sentía que ella no era digna de ser mi pareja y no lo digo en mala fe -rodeó el cuello de Gokú con la cadena del collar.
-Vegeta- al tener el collar en el cuello; Gokú lo miró asombrado, la cadena del collar era de oro puro (digo para quienes quieran saberlo).
-Con eso te demuestro que quiero que seas mi pareja para toda la vida. Aunque no creo que podamos casarnos -Gokú se quedó con cara de what y Vegeta rió de buena gana - Créeme que me gustaría casarme contigo -lo abrazó -Bueno, ¿quieres salir a cenar? .Vamos al centro comercial -Gokú asintió y se puso de pie -Ok -salieron los dos juntos.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.- .-
En dicho centro comercial (Akiko y yo salimos en todas nuestras historias. Bueno soy yo quien las escribo y ella es quien me pide salir. Si alguien de ustedes quieren aparecer en alguna sólo dígamelo), se encontraba una chica bastante extraña, dando vueltas como trompo chillador, por toda la plaza sin saber a donde ir.
-Dios. Que aburrido es estar sola -deambulaba por una librería cuando de pronto vio un libro llamado "Los Nameks y su estilo de vida" -¡Wuaw! -dijo y sacó el libro del estante y fue a la caja más próxima para pagarlo -Bueno, tan siquiera ya tengo algo con que entretenerme -de repente ve a Gokú cargado de un montón de regalos.
-Ven Kakarotto, entremos en ésta tienda para ver si te compro otro regalo -Vegeta lo jaló del brazo.
-Pero con lo que me has comprado ha sido más que suficiente -Gokú quería impedir que Vegeta se gastara todo su dinero.
-Vamos adentro -Vegeta dejó todos los paquetes en la paquetería de la tienda y empujó a Gokú dentro de esta.
-Ay, yo quiero un novio así (todas queremos un novio así) -Dijo la chica al observarlos.
-A ver, ven acá te compraré más ropa. No es justo que siempre tengas puesto lo mismo (bueno en algo se tiene que parecer a Milk) ¿no te da comezón? -Vegeta estaba viendo un poco de ropa.
-No, por que siempre lo lavo -Dijo Gokú y vegeta le aventó un poco de ropa.
-Anda, ve a probarte eso -lo lleva los probadores, mientras la chica misteriosa los seguía.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.- .
Continuará. ¿Quién será la chica misteriosa? ¿Será Akiko o seré yo?
Un punto al que adivine.
Seguimos en el centro comercial.
