Capítulo 11. El que no te deja con ninguna intriga

Que no, que es broma, aunque sería un buen título jeje. Bueno, va, ahí tenéis el capítulo con el título de verdad.

CAPITULO 11. EN EL QUE HARRY Y RON SE HARTAN A COMER PASTELES

- ¡Dennis! ¿Estás por aquí? – preguntó Harry.

- Entremos al baño, quizás esté allí. – dijo Ron.

Ron estaba a punto de entrar en el baño cuando Harry le detuvo.

- Vaya ideas que tienes, Ron. ¿Cómo vamos a entrar al lavabo? ¿Y si está qué le vas a decir, eh?

- No sé, le preguntaré donde está su hermano.

- ¿Qué pasa? ¿Qué ya no te basta con acompañarme a mi al lavabo que también quieres hacerle compañía a Dennis? Anda, volvamos con los otros – dijo Harry volviendo a cerrar la puerta.

- ¿Entonces cuando hablaremos con Colin?- preguntó Ron.

- No se tampoco corre tanta prisa, supongo que antes de la próxima reunión ya le habremos visto.

Cuando salían por el retrato de la mujer gorda se cruzaron con Dennis Creevey.

- Hola chicos!

- Hola Dennis, oye cuando veas a tu hermano dile que queremos hablar con él – dijo Harry.

- Vaya, el famoso Harry Potter quiere hablar con Colin, jo ¡qué suerte tiene!

- Sí claro tu hermano tiene mucha suerte… - dijo Ron - bueno dile a Colin que lo  buscamos, ¡Hasta luego!

- ¡Adiós Harry! ¡Descuida le daré a Colin tu recado! - dijo mientras les decía adiós con la mano.

Harry y Ron se dirigieron hacia el patio.

- Jo, Dennis no puede negar que es hermano de Colin, es igual de rarito que el – dijo Ron.

- No entiendo porqué Dean quiere que Colin sea el nuevo miembro, no es que me caiga mal, pero me estará haciendo fotos todo el día.

- Venga ya, no te quejes, no todo el mundo tiene un club de fans como tu.

- No te pases Ron. Oye, tenemos dos horas libres, ¿qué te parece si buscamos a Hermione y vamos a visitar a Hagrid?

- ¿A Hermione? Hmmm  creo que será mejor que no, con lo rara que está últimamente igual nos acaba sacando los ojos por algún comentario que hagamos.

- Sí, quizá tengas razón, pero a Hagrid sí que podemos ir a verlo ¿no?

Hagrid no estaba en su cabaña, pero en la puerta había una nota para ellos dos,

Hermione, Harry, Ron:

Si me venís a visitar (cosa que últimamente ya no hacéis tan a menudo) he ido al Callejón Diagon a comprar unas cosas, estaré de vuelta al anochecer.

- Perfecto, Hagrid no está. ¿Qué hacemos durante estas dos horas que nos quedan libres? –preguntó Ron.

- Podríamos ir a hacer deberes - dijo Harry.

- ¿Estás de broma? No tengo ganas de hacer deberes ya los haremos después.

- ¡Ya lo tengo! Vayamos a visitar a Dobby, seguro que nos dará pasteles. Además debo agradecerle que siempre me ordene mi baúl.

- En serio te envidio Harry, no solo tienes un club de fans sino que encima un elfo te ordena tu baúl.

- Pero yo no se lo pedí. Es él que quiere agradecerme el haberlo liberado de los Malfoy.

- Si yo fuera un elfo domestico de los Malfoy y me liberaras seguramente tampoco dejaría de agradecértelo nunca. Oye, ¿crees que cuando Malfoy era pequeño era Dobby quien le leía los cuentos de Ripley?

- Ahora cuando le veamos se lo preguntas.

Llegaron a las cocinas y se encontraron con Dobby que estaba avivando el fuego de la chimenea.

- Hola Harry Potter y amigo - dijo Dobby.

- Hola Dobby, como te va todo? - le preguntó Harry.

Antes de que pudiera decir nada más un par de elfos domésticos se habían acercado con una bandeja llena de pasteles y una jarra de zumo de calabaza.

- Gracias. Sois muy amables - dijeron los dos amigos

Los elfos domésticos hicieron una reverencia y se apartaron.

- A Dobby le va todo muy bien. Harry Potter es muy amable por preocuparse por mi.

- De nada, te hemos venido a ver porque quiero agradecerte que ordenes mi baúl, pero en serio no es necesario, no te molestes.

- No es molestia para Dobby, señor, Dobby lo hace encantado, para Dobby es un honor el ordenar el baúl del gran Harry Potter.

- Pues si me lo sigues ordenando el domingo cuando vaya a Hogsmeade te traeré un regalo.

Los ojos de Dobby se llenaron de lágrimas.

- No hace falta Harry Potter, Dobby es feliz con poder ordenar su baúl.

- Si tú insistes en ordenar mi baúl  yo insisto en comprarte un regalo en Hogsmeade. Y antes de que puedas negarte, te dejamos, que dentro de media hora tenemos clase.

- Oye Dobby, ¿nos podemos llevar estos pasteles que han sobrado?-dijo Ron que hasta el momento había estado muy ocupado comiendo pasteles y bebiendo zumo.

- Claro, amigo de Harry Potter. Esto es para vosotros.

Harry y Ron se despidieron de Dobby y se dirigieron a la torre de Gryffindor a buscar sus libros para las clases de la tarde.

En la sala común estaban Ginny y Hermione.

- Buenas tardes chicos, ¿no os parece que hace una tarde estupenda?

- Ginny... está lloviendo y después de clase tenemos entrenamiento así que la tarde estupenda  lo será para ti - dijo Ron.

- Si, hace un tiempo horrible - dijo Hermione - dan ganas de llorar. Aunque últimamente muchas cosas dan ganas de llorar - añadió sin voz.

- Perdona, Hermione, ¿que has dicho? - preguntó Harry.

- Como si te importasen mis sentimientos - dijo con voz entrecortada.

- ¿Te encuentras bien? – Preguntó Harry extrañado - Ginny, ¿porque me miras tan fijamente?

- Ehhh... no te miraba a ti estaba mirando eso de allí- dijo la pelirroja.

- ¿A Neville?-dijo Ron.

Ginny se puso  roja.

- Hermione - dijo Ron - ¿tienes hecha ya la redacción sobre Herbología? Es que me faltan ocho centímetros para acabarla y ya no se que más poner.

- ¡Pídesela a Harry!- y se fue sin mediar palabra.

En el aula de pociones Harry y Ron estaban sentados detrás de Hermione y Neville. Cuando Malfoy entró en el aula se acercó a ellos.

- Potter, Weasley, ya está aquí vuestro ídolo. -dijo Malfoy con sorna.

- Más  quisieras tú, Malfoy. - dijo Hermione.

- Tú calla sangre sucia, ellos saben a que me refiero.

- Ah... te refieres a nuestra admiración por ti - dijo Ron - es que verás, ya has pasado de moda. La moda de esta semana es Neville.

Harry se levantó y dijo:

- ¡Te queremos Neville!- y le lanzó un beso.

Hermione se quedó perpleja. En ese momento entró Snape.

- Cinco puntos menos para Gryffindor por usar el aula de pociones como bar de citas.

- A mi no me molesta - dijo Neville sonrojado - nunca había estado de moda.

- Otros 5 puntos menos para Gryffindor por estar orgullosos de semejante tontería.

Snape se dirigió a su mesa, Malfoy miró desafiantemente a Ron, y éste le lanzó un beso y le guiñó un ojo, Hermione se giró a tiempo de verlo y se quedó más perpleja de lo que ya estaba.

- ¿A que ha venido eso? - les preguntó Hermione.

- Cosas de chicos... - dijo Ron.

- ... no lo entenderías - siguió Harry.

Snape reclamó la atención de los alumnos y el resto clase transcurrió sin incidentes.

Al acabar la clase Hermione Harry y Ron se despidieron. Harry y Ron tenían que ir a cambiarse de ropa para ir a entrenar.

- En serio Harry odio entrenar cuando llueve, espero que mañana durante el partido no llueva.

- Pues imagínate lo que me gusta a mí: se me empañan las gafas y no veo nada, creo que al final me tendré que poner lentes de contacto.

- ¿El qué?

- Las usan algunos muggles que necesitan gafas, se ponen en el ojo, no se como explicártelo. Vamos a cenar, anda.

- Hoy toca hígado. Yo no voy a cenar hoy, no tengo mucha hambre, cuando hemos ido a ver a Dobby me hinchado a comer pasteles, además aun tengo unos cuantos en mi mochila, ¿Por qué no nos los comemos en nuestra habitación?

- Hmmm… pasteles en un lado, hígado en el otro, creo que prefiero tu menú, Ron.

En el vestíbulo se encontraron con Colin.

- ¡Eh Harry! Mi hermano me ha dicho que me buscabais, ¿qué queréis?

- Ah si… Verás, acércate - y le susurró al oído lo que era el club de medianoche.

- ¡VAYA! ¡¿En serio queréis que yo pertenezca al club?! Cuando se lo explique a Dennis no se lo creerá.

- Shhh no grites Colin. Además no se lo puedes decir a nadie, ni siquiera a Dennis, es un secreto. ¿Entendido? - dijo Harry.

- Wow, comparto un secreto con Harry Potter, contad conmigo para el club - les dijo guiñando un ojo.

- Está bien, mira, la próxima reunión será el domingo a media noche en la lechucería, sobretodo procura que nadie te pille y recuerda: es un secreto no se lo puedes decir ni siquiera a Dennis.

- Entendido, - dijo Colin con cara de felicidad - ahora iba al comedor ¿queréis venir conmigo y me explicáis todos los detalles?

- Hoy no cenaremos - dijo Ron - no tenemos hambre. Los detalles te los daremos el domingo.

- Venga hasta el domingo Colin.-dijo Harry.

- ¡Adiós chicos! ¡Nos vemos el domingo!

Harry y Ron se dirigieron a su habitación.

A la mañana siguiente todos se despertaron pronto, unos por los nervios de enfrentarse a Slytherin y otros por la emoción de ver como Gryffindor derrotaba a Slytherin.

Desde los vestuarios se podían oír los gritos de la gente en las gradas.

Fred y George bromeaban con Angelina, para quitar tensión al momento y Harry y Ron estaban sentados apartados de los otros.

- Buff creo que ayer por la noche comí demasiados pasteles, cuando me suba a la escoba la voy a doblar –dijo Harry.

- No bromees con este tema - dijo Ron – tenemos que ganar y bajarle los humos a ese cretino de Malfoy. ¿Tienes en mente las tácticas que llevamos entrenando hace semanas?

- Más o menos, pero también tengo una táctica pensada que seguro que no falla – dijo Harry sonriendo.

- Ya es hora chicos - dijo Angelina - salgamos a dejar en ridículo a esos bordes de Slytherin.

Harry se dirigía hacia fuera cuando Ron lo detuvo.

- Harry, necesito hablar contigo. Tengo que quitarme este peso de encima.

- Claro que sí. Suéltalo.

- Es que no sé por donde empezar. Es todo muy complicado.

- Por el principio sería una buena opción.

- Yo… verás… eres mi mejor amigo y siento que si te digo lo que quiero decirte y tú no lo comprendes ya nada será como antes.

- Ron, no te entiendo.

- Yo te quiero decir que… ¡Que estoy enamorado de...! Estoy enamorado de... No... es igual, olvida lo que te he dicho, no tiene importancia.

- ¿Que no tiene importancia? ¡Ron estás enamorado! ¿De quién se trata?

- No puedo decírtelo, aún no estoy preparado.

- ¡Venga ya! Sólo es un nombre

- No me presiones, cuando este listo para decirlo serás el primero en saberlo - Ron cambió por completo la expresión en su cara - ¡Venga, salgamos al campo! ¡Nos están esperando!

Y se fue corriendo, Harry lo siguió aunque las palabras de su amigo le dejaron algo preocupado.

Ueeee, fin del capitulo 11. Ahora no os podéis quejar de que os dejamos con una intriga, ¿no? Además no hay ninguna puerta por en medio… ;)

El próximo capitulo será el del partido de Quidditch y seguramente el próximo será el de la visita a Hogsmeade y las cosas ya se aclararán un poco… o no…

¡Hasta pronto! Y ya sabéis, Submit review ;)

La frase de película  de hoy es. ET… Teléfono mi caaaaaasa xD

Pd: muuuuuuuuuuuchas gracias por las reviews de estos días :) nos animan a continuar. Gracias.