Título: Criatura de Sombras
Autor: Darth Sakura
Disclaimer: no son míos, pero también de miles fanáticos mas...
Resumen: una criatura de sombras refleja su obsesión por una luz color esmeralda.
Nota de Autora: ¿Quién lo iba a pensar? Esto pasa por estudiar tanto historia _ y se que es poco pero ag...asi es la insipiración
0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0
Tu siempre te has considerado una criatura de las sombras.
Temor al día, al calor y a todo aquello que se refleja en el.
Amistad, simpatía, regocijo, afecto...
Amor.
Viniendo de una familia que siempre ha estado en las sombras, de sombras naciste y en sombras viviste. Aquellas oscuras criaturas a las que tu llamaste padres te enseñaron a usar esas tinieblas para tu propia protección, escondiendo aquellos temibles e infieles sentimientos que siempre, dijeron, traicionaban al hombre.
Y la noche se convirtió en tu hogar.
Lunas fueron las que pasaron cuando te acostumbraste a tu nuevo hogar, y por algunas lunas mas estuviste satisfecho.
Hasta aquel día...
Fue una luna creciente cuando viste una pizca de lo que era la luz, esa luz irradiaba un fervor que nunca habías sentido, tu fría piel percibió un extraño sentimiento que recorrió toda tu oscuridad e inundo tus pensamientos.
Esa luz tenia un color hermoso...un color único... un color esmeralda.
Y olvidaste todo aquello que esas oscuras criaturas te habían dicho, olvidaste la protección que las sombras que habían proporcionado durante tantos años, olvidaste toda lección que habías tenido, olvidaste lo traicioneros que pueden ser los sentimientos y te esforzaste en alcanzar esa luz...y hacerla tuya.
Pero claro viendo del mundo que provienes, aquello que no conoce, asustó a esa luz y se alejó de ti con frialdad e indiferencia. Esa luz prefirió juntarse con otras igual a el en ves de unirse a aquellos que se esconden entre sombras y su luz se vuelva opaca. Y por fin pudiste sentir lo que las sombras te habían protegido con tanta insistencia, y te dejaste envolver por segunda y ultima vez en esa oscuridad.
Siempre temiendo...siempre esperando.
Aun así, sigues observando aquella luz esmeralda, como es que brilla con ese vigor único envuelto en coraje, lealtad... y amor.
Ciclos lunares brotaron en que sentiste celos de aquella luz, por aquello que se le era permitido sentir, hacer...ser...
Ciclos en los que trataste que tu propia oscuridad opacara aquella luz que una vez quisiste, queriéndola convertir en tu igual.
Y otros más los pasaron cuando esos celos se convirtieron en tu anhelo, y de anhelo algo que no te atreves decir ni pensar. No digamos lo que las otras oscuras criaturas vayan a decir al respecto.
Pero sabias que estaba muy dentro de ti, en aquel preciado rincón, donde la oscuridad no puede atravesar, el único lugar donde la inocencia y esperanza todavía dominan.
Muchas veces has pensado si era que eras una criatura de sombras lo que alejo a aquella luz esmeralda de ti, o sino simplemente fueron las sombras las que la asustaron antes de que tu te pudieras presenciar en su luz.
Y otras muchas veces cuando te has dado cuenta que aquella luz te observa de una manera extraña, una mirada en tonos verdosos que nunca había sido reflejada en la cara de cada criatura de sombras que has conocido en tus grandes tinieblas. Aquellos tonos confundiéndote a ti y a tu protección.
Pero aun así sigues esperando.
Quizás, en ciclos lunares futuros, será cuando por fin dejaras esa oscuridad que te da protección, pues es tanto lo que guardas en aquel rincón de tu ser y tanto lo que quieres ser parte de aquella gema preciosa que desequilibra tu noche que lo dejarías todo simplemente para sentir aquella pizca de calor una vez mas...
Pero quizás, es tan fuerte lo que has dejado que esa oscuridad te domine que no podrás acercarte a esa luz, y tu futuro se te será arrebatado, de nuevo, por aquellas otras criaturas que nunca entenderán, nunca sentirán.
Pero nada impide que en ese rincón, ilusiones en plateado reflejen una luz esmeralda, en un brillo irradiante, junto una criatura... una criatura de sombra.