Capítulo 26: "Una Slytherin enamorada"
Después de la discusión entre Rogue y Cole, ella dejó de hablarle a su mejor amigo, casi no dormía y por lo tanto debajo de los ojos se le notaban ojeras. La chica encontró otro mejor amigo, Mike, y empezaron a hacerse inseparables. Esto, Cole lo notó y se sentía horrible. Una tarde la wera y el chico de cabello negro azabache (y no es Harry), estaban caminando por los alrededores del castillo, y Rogue le contaba sobre Cole.
-A veces creo que tiene razón… todo cambió desde que ellos murieron-
-Oye Turner, debiste hacer frente a sus muertes desde que ellos se fueron-le dijo Mike-Ellos murieron, pero tú sigues viva! Disfrútala!!-
Mientras ellos conversaban, un espía 'involuntario' los observaba a lo lejos y sentía algo extraño. Una mezcla de coraje, enojo y tristeza; en palabras coloquiales: celos. Los Slytherins se detuvieron debajo de un cerezo y el chico de cabello negro hizo lo que Cole hacía unas semanas no había podido hacer: tomó a Rogue de la cintura y la besó.
El espía se sentía morir, su corazón se partió en miles de pedacitos. Sin pensarlo corrió lo más lejos que pudo, hacia los calabozos, se metió en un pasillo sin salida, y se sentó en un rincón a llorar. Llorar de desesperación… llorar de tristeza… llorar de coraje… llorar… sólo llorar para desahogarse.
-Te amaba Rogue… me traicionaste… y con… con él…!!-decía una y otra vez el Slytherin en cuestión.
Cierto Gryffindor, moreno, de cabello negro azabache y de resplandecientes ojos verde pasaba por allí y lo vio a lo lejos, se acercó a él y se agachó.
-¿Estás bien?-
-¿Qué quieres Potter? ¡Lárgate!-
-Tranquilo Cole… sólo te vi aquí y quisiera ayudar… si es que puedo-aclaró.
-Perdón Harry, estoy muy enojado…-dijo Cole.-Gracias por intentar ayudarme, pero si tan sólo pudieras borrar de mi cabeza lo que acabo de ver…-
-Puedo intentarlo…-dijo Harry poniendo sus manos en cada lado de la cabeza de Cole-…no te haré daño, relájate.-
El castaño de ojos miel, se relajó un poco, Harry cerró los ojos tratando de escudriñar los pensamientos de su amigo, y ahí vislumbró lo que acababa de suceder, y el motivo de su dolor: Mike besando a Rogue. Se separó rápidamente como si algo lo hubiera golpeado y sacado de la cabeza del Slytherin. Cole lo vio con cara de asustado y preguntó:
-¿Lo viste?-
-Sí… estás lleno de dolor, de rabia… me asusté… tienes una mente muy fuerte-dijo Harry.
-¿Cómo puede ser posible?-Cole se exaltó.
-Para un heredero todo es posible-Harry sonrió, acababa de confesarle que era uno de los herederos de los 4 grandes de Hogwarts, y no se arrepentía.
-Tú!!!…-gritó Cole.-Pero bueno era de esperarse…-
-Salgamos de aquí…-dijo el Gryffindor-… no es bueno que te encierres, además Angel nos está buscando.-
-Para, para, para… ¿Quién es Angel? O_o-
-Larga historia, pero vamos que Malfoy está impaciente-
Cole se quedó intentado atar cabos, los cuales no daban pie con bola. Salieron ambos del corredor y fueron a encontrarse con Draco. Cole al verlo, se imagino quién era Angel, pero mejor que ellos se lo resolvieran.
-¿Qué hay Blackwood?-
-Nada Gryffindor… ¿Qué onda Cole?-
-O_o Tú eres Angel… Blackwood… o Draco Malfoy??-
-Ambos-dijeron Harry y Draco, éste último añadió:-Soy la reencarnación de Angel Blackwood, mano derecha de Gryffindor, y éste Gryffindor es la reencarnación y heredero de Godric Gryffindor-
-Demasiado para asimilar, ¿no?-dijo Harry al verle la cara de interrogación a Cole.
-Sí, me cuesta un poco de trabajo-dijo Cole.
-Sólo te vamos a pedir una cosa-dijo Draco-No se lo digas a nadie, éste será nuestro secreto…-
-Claro, cuenten conmigo-respondió Cole.
-Y bien, ¿qué querías decirnos Blackwood?-preguntó Harry.
-Bueno, pues… acabo de ver a Mike y a Rogue en una situación no muy grata…-
-Ni me lo recuerdes-dijo Cole.
-Esto te va interesar McKey… yo estaba cerca de donde tú estabas escondido, cuando saliste corriendo pasaste por un lado mío cuando, pero no te diste cuenta… el caso es que yo me quedé observando y Rogue le dio un santo porrazo, debiste haberla visto estaba hecha una furia, y salió corriendo no sé a dónde…-
-Maldito Mike!!! Lo empiezo a odiar, ¿ustedes no?-dijo Cole.-Pero bueno ¿de qué me sirve saberlo?-
-Esto quiere decir que puedes recuperarla,-dijo Harry-es verdad que pasa mucho más tiempo con Mike, pero ¿quién la conoce desde que nació?-Cole miró a Harry y Draco también lo vio como diciendo: "CÁLLATE!!"-Oops! Lo siento ^^', Draco me contó lo que sientes por Rogue, no te enojes con él, es que pensó que tú y yo estamos en las mismas…-
-¿A qué te refieres?-preguntó Cole.
-Tú no le quieres decir a Rogue que la amas y yo no le quiero ni puedo decirle a Hermione que AÚN la amo.-dijo Harry-Pero bueno, eso es aparte… creo que debes decirle a Rogue lo que sientes, porque tal vez, y sólo tal vez, ella sienta lo mismo por ti.-
-Pero ¿y si no?-
-Cole… ¬¬ ¿por qué crees que le dio esa cachetada a Mike?-dijo Draco suponiendo lo obvio.
-Está bien… mejor perderla sabiéndolo, que perderla sin que lo sepa-
-Eso es viejo… así me gusta…-dijo Draco.
Durante una semana Cole, Mike y Rogue no se vieron a la cara, pero parecía que a todos les preocupaba excepto a Mike Ridley. El fin de semana Cole envió a Draco con una carta para Rogue, la cual estaba en su habitación sin querer salir. Draco subió al dormitorio de las chicas, como buen prefecto que era, y tocó a la puerta: -Knock, knock, knock!-
-¿Quién?-
-Soy yo Turner, Draco Malfoy-
-¿Qué quieres?-
-Hablar contigo, ¿puedo entrar?-Rogue lo pensó unos segundos y luego respondió.
-Sí, pasa…-el rubio entró con cuidado pensando que había alguien más-…no te preocupes estoy sola, ¿qué se te ofrece?-la chica se secó unas cuantas lágrimas.
-¿Estás llorando?-dijo Draco sentándose en la cama.
-No, no… sólo me entró una basurita en los ojos…-
-Bueno…-dijo Draco no convencido-…tengo una carta de Cole…-el rubio sacó en sobre y se lo entregó.
-¿Cómo está él, Draco?-
-Bien, un poco… como decirlo… DOLIDO???, pero será mejor que lo leas tú misma, yo ya cumplí con mi parte, nos vemos… y Rogue…-la chica volteó-…deja de llorar.-
-Gracias Draco-el chico sonrió y salió del cuarto.
La chica se quedó observando el sobre, decidiendo si lo abría o no. Después de unos minutos se decidió abrirlo, y leyó:
"Querida Rogue:
Siempre has sido mi mejor amiga, casi una hermana para mí. Desde que éramos pequeños convivimos, jugábamos y nos vimos crecer. Ahora con mis 16 años encima me doy cuenta que no podrías ser mi hermana porque el sentimiento que me une a ti es más fuerte que una amistad o una hermandad. Te quiero Rogue.
Hemos pasado por buenos y malos momentos, uno de ellos fue la muerte de tío Paul y tía Angela. Mientras estuvieron en el hospital, después del accidente, me hicieron prometer que te sacaría de Canadá y te traería a Londres conmigo y mi familia. Tú no sabías nada, pero mi salida de Canadá era definitiva, a mi padre le ofrecieron trabajo aquí y tenía que irme de ese lugar que me vio nacer, crecer y enamorarme… tenía que tomar otro rumbo, pero se los prometí y te traje conmigo.
Cuando llegamos aquí y entramos a Hogwarts tu vista se fijó en Malfoy, me sentí desplazado. Te empeñaste en separarlo de su novia y no te dabas cuenta del dolor que le causabas a mi alma. Que irónico! Pensé que podría olvidarte con alguien más, pero me engañé a mi mismo..... que error!
Podría hacer más larga esta carta, pero sólo te quitaría tiempo. Espero que me perdones por no darte la cara, pero estoy muy lastimado porque te vi con Mike. Cuídate preciosa.
Cole."
Al terminar de leer la carta, Rogue tenía los ojos nublados por las lágrimas. Cómo pudo ser tan cruel, tan dura y tan fría con él; él que siempre estuvo allí cuando lo necesitó… él que secó sus lágrimas hasta hacía dos años… él a quién quería y añoraba con el paso del tiempo… él que le confesaba cuánto significaba ella en su vida. Sin pensarlo, salió de su cuarto y de topó con Draco y con Harry en la sala común. Ambos la observaron.
-¿Qué haces en la sala común de Slytherin?-le preguntó a Harry.
-Es que como no hay nadie me colé, además Draco quería hablar conmigo.-
-¿Qué pasa, Rogue?-preguntó Draco al verla con los ojos rojos-¿Sucede algo malo?-
-No, no… Draco, ¿Dónde está Cole?-
-N-no lo sé…-mintió Draco, y desvió la mirada hacia Harry.
-Por favor Malfoy, sé que sabes!! Dímelo!!-
-Cálmate Rogue-dijo Harry levantándose y yendo hacia ella. La tomó de las manos con fuerza, tomó aire y dijo:-No deberíamos decírtelo, pero te ves alterada… está en la Torre de Astronomía.-
-Gracias Harry-dijo ella y le dio un beso en la mejilla.
-Ni lo menciones-contestó él.-Vete ya-
La chica salió corriendo de la sala común, pasó por corredores, salones y puertas. Sus pensamientos sólo estaban con él. Por fin llegó a la Torre de Astronomía, se detuvo frente a la puerta, se arregló un poco la túnica y entró con cuidado. Y ahí estaba él, frente a la ventana que estaba abierta de par en par, sintiendo el fresco de la noche golpeando su cara. Sus ojos miel estaban fijos en el firmamento y su cabello castaño se movía por el viento.
Ella se acercó sigilosamente y se detuvo tras él. Pasó sus manos por su pecho y se recargó en su espalda, él se sobresaltó por el contacto tibio que sintió y respiró profundamente percibiendo su delicioso olor a vainilla.
-¿Qué haces aquí?-preguntó él volteándose de frente a ella.
-Estaba buscándote, necesito decirte algo…-
-Te escucho, Rogue… siempre lo hago-dijo él.
-Tienes razón Cole, me volví dura y fría, y no me di cuenta de cuánto daño te hice…-comenzó, y soltó unas cuantas lágrimas.-Me dolió demasiado que mis padres murieran y no lo quería aceptar, pensé que me habían dejado sola, pero estabas tú y tu familia, que es casi la mía…-
-Rogue, ya… ya no hables… olvídalo todo…-
-No, déjame terminar… cuando vinimos a Londres me prometí olvidar Canadá porque me dolía recordarla, conocí a Draco y pensé que podría olvidarme de todo, pero que equivocada estuve…-tomó aire y continuó:-… y ahí estabas tú para hacerme entrar en razón y no te hice caso. Hasta hace unas semanas me doy cuenta de lo que tú significas para mí. Viví cegada por el dolor y no me di cuenta de lo que había alrededor, perdóname… snif…-la wera ojiverde rompió en llanto.-Perdóname Cole… snif… ='( yo… yo…-
-Ya Rogue déjalo, no lo digas-dijo él abrazándola y acariciando el cabello rubio de la chica.-No importa nada de lo que pasó… sólo importa que te diste cuenta que estabas equivocada…-
-¿Cole…?-Rogue levantó la vista y se secó las lágrimas.
Estaba tan cerca de sus labios eran tan sólo unos cuántos centímetros. Sus ojos verde y sus ojos miel se encontraron y parecían no querer dejar de verse; estaban como conectados, hasta parecía que echaban chispas por los ojos, se acercaron y se fundieron en un beso.
Ambos se sentían igual, el corazón latiendo a mil por hora, el pulso acelerando, y el tiempo disminuyendo. Lentamente Cole abrazó a Rogue por la cintura y ella pasó sus brazos por el cuello de éste, jugando con su cabello. No había por qué separarse, pero el aire hizo falta y tuvieron que hacerlo. No se dijeron nada; ambos sonrieron y se abrazaron con fuerza. Comprendieron que su destino era estar juntos, como uno sólo.
