Fallen Angel Stately
[Majestuoso Ángel Caído]
Por: Thuringwethil
*~ Prologo ~*
¡Demonios!- Musitó con estruendo la pelirroja al girar en la esquina del pasillo desolado, que en aquellos momentos tenía como único habitante a ella: la alumna pecosa Virginia Weasley, que hace pocos instantes atrás acababa de salir de una de las tantas escenas en la que era ignorada absolutamente después de tramar un plan que parecía infalible para que el chico de sus sueños: Harry Potter, cayera en sus encantos. ¿Por qué tenía que ser siempre igual? Hundirse en los ojos esmeraldas del niño que vivió…Ojalá así fuera, ese era el horrible problema, el bendito problema de que no era un niño, era todo un muchacho de 17 años de edad, con su cabello siempre alborotado de un negro pizarra… y ojos como un sapo en escabeche ¿Eso no le recordaba a algo?, Si, le recordaba al estupido poema que se le ocurrió hacerle hace cinco San Valentín y no solo hacérselo, pagarle 2 sickles a un gnomo ridículamente vestido de cupido para que se lo cantara a Harry. Que degradante fue aquella situación, aun recordaba las miradas de todos y la mirada de avergonzado de Harry, por no mencionar el comentario del estupido de Malfoy… pero eso ya había quedado en el pasado o eso quería creer. Y ese amor de niña había sucedido desde la primera vez que lo vio cuando él iba a su primer año y conoció a su hermano Ron y a los gemelos. Pero ese amor de niña había pasado a convertirse en un amor adolescente y es que son muy diferentes los amores infantiles a los adolescentes. En los de niña solo sueñas en agarrarle la mano y decirle que lo quieres, mientras se piensa que estas en una portada de corazones rosados y cupidos alrededor, pero en el de adolescente la realidad baja como un agua de balde tan fría que podría congelar al más débil y es que actúa un factor importante que a veces se pasa por alto, pero está ahí martilleando y esperando el momento preciso para atacar y dejarte sin defensa alguna: las hormonas y cuando estas actúan no hay nada ni nadie que las pueda controlar, en el caso de Ginny al sumergirse en las profundidades abismales de los ojos verde esmeralda del niño que vivió, sentía como rápidamente su boca se secaba, mientras balbuceaba palabras desprendidas de frases incoherentes hasta para ella misma, al tiempo que sus pecosas mejillas se teñían de un color tan rojo que se fundían con su cabello y solo este momento descontrolado llegaba a su fin cuando el muchacho de sus sueños ignorando por completo a la chica se retiraba del lugar en que se había su cuerpo encontrado con esta.- ¡Demonios!- Volvió a decir mientras pateaba una armadura que nada le había hecho pero se encontró en el momento malo en el lugar equivocado. Al lanzar la patada contra la armadura sintió un dolor tan terrible que le produjo un calambre inaguantable en el pie. ¡¿Por qué su suerte tenía que ser tan endiabladamente maldita?! Mientras maldecía cayó sentada de dolor al suelo agarrando con sus pálidas manos el zapato que contenía su pié magullado.
Ya nada puede ser peor- Y no había terminado de hablar cuando apareció el demonio en persona y tropezando con su costosa túnica cayó justo sobre la pierna de la pelirroja que crujió, para colmo esta se había mordido los labios para no reírse al ver al chico precipitándose al suelo. ¡Mala idea! Al muchacho caer con todo su peso sobre la rodilla de ella, la pelirroja sintió que algo se desgarraba en su interior. Lanzó un grito blasfemito que acompañado con el estruendo que había provocado la caída del rubio retumbó ocasionado un sonido ensordecedor en aquel pasillo. Sentía su labio sangrar, se lo había mordido al sentir el peso acompañado del dolor.
-Weasley. ¿Tan poco te quieren tus compañeras de habitación que tienes que dormir aquí?, aunque esto es mejor que en tu casa… Aunque – Masculló pensativamente con ironía - Podrías colocar un aviso "Hogar de la pobretona" o algo así… Te aseguro que si lo hubiera visto preferiría irme por otro lugar con tal de no toparme contigo. ¿Sabes? Hay personas que si tienen vida y no se pueden estar dando el lujo de…
-No estaba durmiendo aquí grandísimo animal – Mascullando fúrica sintiendo como su pierna cada vez intensificaba su dolor a grados absolutamente irresistibles – Pero seguramente sería una cama más cómoda y digna que la que los dementores te están preparando en la cárcel de Azkaban junto a tu papi. – Acentuando la ironía, dejando que sus palabras parecieran más lanzas que simples frases. – Y por cierto sino te molesta ¿¡PODRIAS QUITARTE DE UNA MALDITA VEZ DE ENCIMA DE MI PIERNA?! – y entonces sucedió.
-Ginny ¿estas bien? – Así es, lo único que podía terminar de amargar la mañana que había sido para la Weasley un desastre, se presentaba en aquellos momentos. Harry en primer plano observando la escena con la sonrisa a flor de piel intentando no reírse de la situación en los que habían sido presentes sus oídos y sus ojos.
"Genial, absolutamente genial, cuando quiero llamar su atención de buenas maneras, a el le importa más si va a llover, que mis esfuerzos por captar por unos segundos su atención. Pero cuando estoy en la situación más degradante de mi corta pero activa vida, EL está ahí en primer plano, casi con rosetas de maíz y pompones, observando toda la situación. Típico de hombres llegan cuando el único encanto de la situación que representas es que pareces el bufón de la corte en uno de sus más patéticos actos y es que cuando te arreglas, te maquillas, te vistes con esa prenda que descubriste que le encantaba, te pones el perfume que vuelve loco a cualquier mago según la revista Corazón de Bruja y tienes la sonrisa más encantadora del planeta, el mundo entero parece conspirar para que termines llena de barro, que el maquillaje se escurra debido a una tormenta y que lo atropelles haciéndolo caer y llenarse ambos de comida, manchando su precioso traje y estropeando la oportunidad de que por fin reparara en que no eres una más del montón. Y tan solo puedes desear que el momento se olvide, pero al contrario la mirada que recibes de "Chica tonta" te lo recuerda por el resto de tus días.
-Ay… - Gimió la pelirroja de dolor, el rubio se había levantado sin ningún cuidado (excepto con su túnica nueva), en lo que llego Harry Potter a presenciar la escena más de cerca.
-Malfoy
-Potter
Y lanzándose miradas asesinas de rivalidad y odio, el niño que vivió y el heredero a la fortuna Malfoy se enfrascaron en un combate de miradas punzantes que duraron una eternidad para Ginny. ¿Era posible que no se hubieran dado cuenta de su presencia?
- ¡Ayyyyyyy! - volvió a gemir la pelirroja, esto pareció sacar a los chicos del constante duelo visual que mantenían desde hace unos pocos minutos.
- Eso Weasley hazte la victima para que así alo mejor Potter se digne a tenerte lastima - y como dice el refrán "El vaso llega a un punto que se derrama" estás palabras crearon una reacción de odio tan profundo que casi hacen reincorporar a la pelirroja en el acto y mirándolo con sus ojos avellanas le dijo – Para lastima te tengo a ti, el día que necesite la lastima de alguien iré por todo Hogwarts creyéndome la mejor, sabiendo que mi vida está comandada, que mis padres son la peor blasfemia de este mundo y venderían su dignidad a cambió de un poquito de reputación, aunque sea de parte del lado oscuro, iría por todo Hogwarts riéndome de personas que tienen un futuro diferente al de pudrirse en una celda mugrienta, siendo absorbidos por los dementores, olvidando quien soy gracias a su poder destructivo. – Hizo una pausa para agarrar aire y lo miro con ironía – Aunque siendo tu, yo desearía olvidar quien soy. – Sabía que había ido muy lejos, el rostro pálido de Malfoy estaba rígido, su sonrisa de superioridad se había ido desdibujando al ir escuchando las palabras hirientes de la pelirroja y sus ojos inyectados en frialdad se sumergían como glaciares letales en los ojos de esta.
- Vamos Ginny, te llevaré a la enfermería, no creo que estés bien con esa pierna asi – mirando de reojo como la chica agarraba con sus manos su rodilla, mientras no apartaba la mirada del rubio. Así que acercándose a la chica, haciendo uso de su fuerza que había mejorado gracias a cada entrenamiento de Quidditch, levanto a la pelirroja con mucho cuidado por las caderas, elevándola por encima del suelo y con una increíble fuerza coloco a la pelirroja sobre sus hombros. Mientras por su parte la pelirroja solo deseaba seguir diciéndole sus verdades al rubio, pero decidió dejar la discusión hasta ahí, por ahora y Dedicándole una ultima mirada de odio al chico y siendo esta correspondida por unos ojos como gemas de plata que centelleaban en las sombras del rincón. Un escalofrío le recorrió la espalda en aquel preciso momento sin poderlo evitar, aunque justo en ese momento Harry, por su parte, había colocado sus manos sobre los muslos de la pelirroja para asegurarla e impedir que se cayera.
"Eso fue por Harry, por Harry" pensó para sí cuando el escalofrío hizo que sus mejillas se sonrojaran como siempre que acontecía cada vez que algo la avergonzaba o intimidaba. "Por Harry"... "Por Harry" pero su mente la comenzó a contradecir cuando después de un trecho a hombros de "su" Harry, solo se recordaba de la mirada letal del rubio y la disputa que había tenido con él. Esa situación la había dejado con ganas de más. Era como un sabor agridulce en sus labios, que hacía que su paladar le pidiera más.
-Eso fue gracioso – La voz de Harry la despertó de sus pensamientos – Se lo voy a recordar por el resto de sus días.
"Bueno después de todo no resultó tan mala la mañana" y nuevamente los ojos plateados volvían a ocupar sus pensamientos. ¿Qué demonios le pasaba? estaba a solas con Harry que al parecer se preocupaba por el estado de su pierna y se había preocupado de "ayudarla" en aquella situación, ¿no era eso lo que siempre había querido? De pronto, se dio cuenta de que en aquellos momentos ni ella misma sabía lo que quería.
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N/A: Esto es un pequeño proyecto, se puede explotar a fondo si es bien recibido, mi primera Comedia y mi primera Ginny rebelde, ¿por algo tiene 5 hermanos mayores, no? Este fanfic será diferente a todos los demás que he escrito. El titulo está inspirado en una canción de Lacuna Coil (excelente grupo) de nombre: Stately Lover. Y como se darán cuenta está digerido a mi chico favorito: Draco Malfoy.
Dedicado este fan fic y el prologo en especial, a:
Mariana A.: Por ayudarme con el prologo en una hora muy aburrida de clases y por todo lo demás que ya le he mencionado en varias ocasiones.
Todas las sugerencias y críticas serán bien acogidas
"Cualquier sacrificio para satisfacer al lector, ya que gracias a ellos, la vida de nosotros tiene sentido
"Estoy sumida en las sombras de las tristezas y odios de este mundo corrompido"
"Que la sombra y la oscuridad no se ciernan sobre tu vida"