Hikari Asakura: ¡¡¡¡¡¡hola


Disculpen la demora, es que con esto de fin de año y las vacaciones se me a hecho difícil terminar este capitulo, pero aquí estoy de nuevo.

Disfrútenlo.

CAPITULO OCHO "Media noche en el lago sagrado"

Tenía los ojos abiertos al máximo. Que espectáculo todo aquello.

Las mujeres bailaban alrededor de una hoguera que crepitaba silenciosa y constante en el centro del círculo. Vestían ropas apaches y los hombres estaban con el pecho descubierto y pintado con extraños símbolos.

-Fantástico-murmuro maravillado Manta-dicen que esos cuatro hombres de las esquinas representan a los espíritus sagrados del oso, el lobo, la serpiente y el águila.

-Ellos son los cuatro vientos...

-¡¡Silver!!

-Hola a todos...Hao.

-Hola-sonrió y dirigió su mirada a la hoguera y luego al público.

-Veo que les agradó.

-¡¡Claro!!-exclamaron todos.

-Es la manera de darle la bienvenida a Yoh y a sus amigos.

-Gracias...

Hao seguía mirando al publico cuando vio algo que le llamo la atención o más bien lo alarmó.

-Es él...Dorian ¿Qué hará aquí?-pero él no fue el único que lo diviso a lo lejos.

-Joven Hao...

-Dime Ryu.

-Creo que debe saber algo...eh, Doña Anna conoce a ese tal Dorian...

-¿Cómo?

-Sí...se conocen desde hace tiempo y yo diría que a ese maldito le gusta doña Anna y es algo que me preocupa.

-Podría hacerle daño-se dijo Hao-eh...espera aquí Ryu, si ese tipo esta aquí es porque Anna tambien lo esta-se levanto del suelo seguido con la mirada de Ryu-a demás...no tiene permitía la entrada a territorio apache.

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-¿Qué quieres ahora? No necesito guardaespaldas...

-Lo se, pero...quería seguirte, me siento incomodo cada vez que te dejo...

-Bien, pero no necesito que me vigiles...¿podrías entender eso?

-Creo...

-Dorian...¿Por qué no me dices de una buena vez que quieres de mi?...ya somos amigos ¿no? ¿No es eso lo que querías?

-Para comenzar sí...

-¿Qué quieres decir con eso?

-Anna...Annita, tu sabes que yo te quiero a ti, desde que te conocí en ese sótano...eso es lo que quiero...no entiendo porque te me resistes.

-Ya, lograste un beso ¿no?

-Sí, pero un solo beso no explica lo que se siente...un beso puede ser el inicio o el termino de algunas cosas.

-No te entiendo...

-Pronto lo sabrás-se acercó a ella y la beso nuevamente, pero solo fue un roce de labios ya que Anna corrió la cara.

-No me rechaces...

-No te he dado permiso para besarme.

-Entonces...¿puedo?

-No.

-Vez que si me rechazas.

-Dorian, a mi tu no me gustas...no siento nada por ti...el beso anterior fue solo un error-le dijo y callo pensando-"eso creo"

-No se porque, pero tengo la mínima idea de que no estas segura Annita.

-Déjame si...quiero estar sola.

-Asakura no te merece, él no te dará nada...en cambio yo te puedo llenar de lo más preciado que te puede dar un hombre...el amor, cosa que Asakura jamás te dará-Anna lo miro con tristeza y rabia-la verdad duele, esa es la verdad...él no te quiere.

-Es mentira...-murmuró.

-No, no lo es-miro hacia un lado y luego a ella-ya debo irme...-se le acercó robándole un beso-nos veremos.

-¿Por qué? ¿Por qué lo haces?-pensó la itako sentándose a la orilla del lago, la celebración estaba a unos pasos de ella, pero se ocultaba gracias al tumulto de personas que observaba los bailes y rituales que se estaban llevando a cabo-¿tendrá razón?...¿Yoh no me quiere? Si me quisiera me habría buscado...si me quisiera sabría que yo estoy aquí...no estaría divirtiéndose con esos sus amigos-se dijo con rabia-no debí haber venido...solo me estoy haciendo más daño.

-¿Anna?-la chica volteo a la mención de su nombre

-Ah, eres tu Hao.

-¿No estas viendo el ritual de iniciación?

-No quiero que Yoh me vea-le dijo, en su vos se noto algo de rabia.

-¿Estas molesta?

-No.

-Creí haber escuchado a alguien más...

-No había nadie aquí, a parte de mi claro...

-¿Sí?

-Sí-afirmo levantándose del suelo-ya es hora de que te vallas, te extrañaran.

-No lo creo...a excepción de Yoh...el te extraña Anna-la chica se sorprendió-te extraña más de lo que te imaginas-volteo y se fue.

-Mi vida hasta ahora se esta convirtiendo en un horror, un problema...no debí haber venido, quizás alejarme de todo esto me haga bien. Pero quiero el bien de mi hijo y si...y si esta vida no es buena para él...

Camino hacia el círculo en el que mucha gente cantaba sin parar, les divertía y asombraba ver tantas cosas que ni en sueños habrían imaginado, era en cierta manera como regresar atrás en el tiempo y vivir una noche como cualquier otra junto a los apaches y su líder religioso....el shaman.

Para Anna lo que estaba presenciando era algo magnifico, fuera de otro mundo, quizás ahora veía las cosas de otra manera. Una mujer pasó por su lado y la golpeo, Anna retrocedió un poco y se sorprendió al ver quien era.

-Abuela...abuela Kino.

-¿Anna?-la miró con extrañeza, pasaron así una frente a la otra por unos pocos minutos hasta que la anciana se le acerco y la abrazó con ternura-por dios muchacha ¿Dónde has estado?

-Perdida abuela...-quería llorar, pero no era el momento.

-Pero ya estas aquí...niña...-la miro fijamente-¿Qué es lo que te ha pasado?

-No lo sé...en realidad si lo sé...

-Dime...

-Yo...yo estoy embarazada Abuela Kino, tengo seis meses de embarazo, es por eso que estaba escondida.

-Dios Anna...-murmuro la anciana-¿es Yoh el padre?

-Sí.

-Y me imagino que fue para decirle esta noticia que has venido hasta aquí.

-Eso pensaba.

-No pensaras huir de nuevo.

-Estoy muy confundida abuela Kino.

-Eres una muchacha muy madura para tu edad, pero debes pensar ahora con el corazón y no con esa cabecita fria que tienes Anna...de muchas decisiones depende la vida de ese pequeño que esperas.

-Lo se abuela...pero por favor, no le diga a Yoh de mi...no le diga que estoy aquí.

-No lo haré...aun...

-¿Por qué lo dice?

-Porque presiento que dentro de muy poco ustedes se encontraran y tendrán que arreglar sus cosas solos...

Anna suspiro y volteo para irse, dejando a la abuela de Yoh solitaria en medio de la muchedumbre.

-Por mas que intentes separarlos no te funcionara Dorian...es más que amor lo que une a mi nieto con Anna.

-Sabías palabras, pero no todo es como parece ¿no?

-No...

-En fin...yo me puedo encargar de esto y de muchas más cosas.

-Prepárate entonces...si no te quieres rendir, porque Yoh jamás dejara que te apoderes del trono y mucho menos de Anna.

-Eso estará por verse-le dijo duramente, pero no atacó, la abuela Kino inspiraba demasiado respeto como para enfrentarse a ella sobre todo ante los ojos del shaman king.

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-Tamao, Tamao, Tamao...-se decía la chica mientras se dirigia hacia el circulo donde la esperaban sus amigos-increible de ti esto...nunca pense que podia llegar a tener tanto talento, quizás solo tenia miedo de llegar a ser una shaman consolidada...-sonrio calamadamente, pero alguien la detuvo en su camino.

-Era solo cuestion de que te decidieras a entrenar más...

-¿Qué?-miro hacia un arbol y se encontro con Anna-¡señorota Anna!-se avalanzo sobre ella y la abrazo-que gusto, que gusto...

-Tambien estoy feliz de verte Tamao.

-Que cambiada esta y su ropa...y...

-¿Qué?

-Disculpe señorita Anna, pero....creo que ha engordado o...

-No Tamao, no he engordado...es solo que dentro de poco vendrá al mundo mi primer hijo.

-¡¡Valla!!...felicidades...el papá es el joven Yoh ¿no?

-Sí...Tamao ¿Cómo lo supiste? Digo...con esta ropa se nota poco.

-Es por que con la brisa que golpea, el vestido se le ciñe al cuerpo y se le nota...-le dijo alegremente-esta es una gran noticia.

-Sí, pero tu comprenderás que Yoh aun no lo puede saber...confío en ti Tamao.

-Claro que puede confiar en mi...me dolió mucho el regresar a la pensión y saber que ya no estaba...Pirika me contó lo sucedido, ella tambien esta muy triste, dice que perdió una amiga querida y que no fue capaz de defenderla...

-Ella no tiene la culpa...ni los demás...fui yo...

-Tambien el joven Yoh...

-Eso creo...

-Pero bueno, me imagino que esta por aquí cerca...alojada digo.

-Sí, en una posada junto con Ryu y Hao...

-¿Con el joven Hao?

-Sí, sabes si lo aprendes a entender puede ser un gran amigo.

-Es cierto...además esta muy cambiado.

-Bueno Tamao, es mejor que vallas con ello-dijo mirando hacia el gentío-se pueden preocupar.

-Cuando ira usted...

-Cuando este lista.

-Se que hará lo correcto señorita Anna.

-Yo tambien.

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Hao llevaba un buen rato mirando a unas chicas bailar. Le traía muchos recuerdos, muchos gratos recuerdos de lo que había sido su antigua vida en ese mismo lugar. Algunas veces añoraba eso, pero temía interesarse nuevamente en el poder.

Una chica se le acercó y comenzó a bailarle, muchas veces le había pasado eso.

-Nena...no quieres venir a bailarme a mi posada-la chica lo miro asustada y se fue. Sí, tambien eso ocurría cuando les decía algo así. Se rió disimuladamente.

-¿De que te ríes Hao?-pregunto Manta al muchacho.

-Que algunas reacciones nunca cambian-Manta lo miro extrañado, pero no le hizo mucho caso. Volteo hacia la hoguera cuando vio algo que lo dejo pensativo.

-Hao...esa no es Anna.

-¿Quién?

-Ella...-apuntó a una chica que los miraba seriamente. Cuando Manta volteo hacia Hao, este ya había desaparecido-le diré a Yoh.


-Quiero enseñarte algo Anna.

-¿Qué?

-En el lago...cuando la luna de media noche se refleja en las aguas.

-Debe de ser muy lindo-caminaron ambos hacia las orillas del lago.

-Y lo es...no tanto como tu claro, pero lo es-Anna se sonrojo.

-No quieras enamorarme Dorian, ya fue suficiente.

-No lo es-la miro fijamente-mira Anna...la luna pareciera que se posara en las aguas.

-Es verdad, pero no me cambies el tema...

-Es como un gran espejo...¿Anna?

-¿Sí?

-¿Te han besado bajo la luna?

-No...sí...Yoh, una vez.

-Pero cuando la luna pareciera soltar polvillos plateados-el la hizo mirar hacia el lago.

Miles de pequeñas motas de luz plateada rondaban en la superficie del lago, se movían de un lado a otro, subiendo y bajando, iluminando el sector como trocitos de plata engalanando a los peses que saltaban para atraparlas.

-Luciérnagas Anna...miles de ellas, son como estrellas que saludan a su amor...la luna...-miro a la chica que estaba impresionada por el espectáculo-te amo Anna...yo soy como esas luciérnagas que quieren alcanzar a la luna y tu eres ella...inalcanzable...déjame estar contigo Anna.

Ella lo miró, ni siquiera Yoh le había dicho cosas así. Dorian se acercó a ella y la besó, su beso le supo dulce a Anna, tan dulce como la miel, le devolvió el beso con pasión, pasión que no pensó volver a sentir.

¿Cómo podía estar así con él? Sabiendo sus intenciones, no podía gustarle...no podía estar sintiendo algo por él...o ¿si?

-¡¡Sepárenlos!!-fue solo un grito que hizo que ambos se separaran, estaban rodeados. Pero aquellos que los rodeaban eran personas muy conocidas para Anna, entre ellos, más que molesto estaba Yoh.

-Yoh...

Quiero agradecer a todos los que me escribieron reviews e insisto en mis disculpas, pero tratare de subir más rapido, aunque por ahora se me dificulta, por el hecho de las vacaciones y que a mis familiares se les ocurra ir a sectores con playa completamente alejadas de la civilización...¡¡dios como extraño el computador!!

Ahora por suerte encontré un civer en el pueblo, pero ya pronto nos iremos y tendré mayor oportunidad de subir los capítulos más rápido.

Ya no halló la hora de llegar a mi casa y ver shaman king, es un suplicio...pero anoche me soñé algo súper, será mi próximo fanfic...solo debo organizarme un poquito.

Bien ahora me despido y gracias nuevamente por todo su apoyo.

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