Hola!!! Ya he vuelto. Antes que nada perdón, perdón, perdón, perdón por haber tardado tanto en actualizar. Lo que pasa es que sufrí un pequeño bloqueo y no sabía como continuar la historia. Quiero agradecer a todos los que leen este fic, y decir que ninguno de los personajes es mío (ojalá) sino de J.K Rowling y el que inventó a las Embrujadas, así que nadie me denuncie. Bueno, no sé que más decir, excepto que perdón otra vez!! Os dejo con el capítulo.

Capítulo 5- Después de la batalla

Severus Snape paseaba impaciente de un lado a otro en la enfermería. Cuando habían llegado, la enfermera se había mostrado muy alterada al ver el estado en el que se encontraban los dos hermanos Black. A Sirius le habían dado una serie de pociones y ahora descansaba en una camilla, todavía inconsciente, con Prue dormida a su lado. Pero Portia había sido más difícil de curar; había perdido mucha sangre y aunque con pociones y hechizos habían sanado sus heridas, no sabían cuánto tardaría en reponerse. Había estado cerca de morir. Y eso era lo que tan alterado tenía al profesor de pociones. No sabía por qué, pero la idea de que a Portia le hubiese pasado algo le enfurecía y asustaba al mismo tiempo. Lo peor era que constantemente intentaba repetirse a sí mismo que a él no debería importarle tanto, que no debería estar tan alterado, pero él sabía que aquellos intentos eran inútiles.

La enfermera ya le había dicho varias veces que si seguía montando tanto jaleo lo echaría de allí, así que Severus Snape respiró hondo y se acercó a la cama en la que la morena descansaba. Se sentó en el borde de la cama y en silencio la observó durante mucho rato. Su aspecto era beatífico, casi irreal, y él se dio cuenta de que no le gustaba. A él le gustaba la Portia que con su suavidad y amabilidad intentaba no enfadarse nunca, que corría de un lado a otro intentando "salvar el mundo", no aquella que dormía en una cama, pálida, y con las manos frías como témpanos de hielo. Casi instintivamente le tomó una mano e, inclinándose ligeramente le susurró al oído:

-Descansa, tienes que recuperar fuerzas. Tenemos una promesa que cumplir- por último le dio un tímido beso en la mano y soltándola suavemente salió de la enfermería. Cuando la túnica ondeante de Severus Snape hubo desaparecido tras la puerta, la cabeza morena de Prue se levantó, observó a su hermana, que dormía plácidamente, y una sonrisa asomó a su rostro.

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Prue, Phoebe, Piper y Paige se encontraban horas después en el despacho de Dumbledore, reunidas con el propio director y otros miembros de la orden, evaluando lo ocurrido.

-Lo que ha ocurrido es algo terrible- decía McGonagall

-¿Terrible?- exclamaba Paige- Es nefasto!! La fuente de todo mal se ha fusionado con Hitler a lo mágico.

-Y eso que vosotros no visteis su poder. Una de sus bolas de energía fue capaz de romper el escudo de Portia.

-¿Y eso es malo?- preguntó Arthur.

-Bueno, hasta ahora ningún demonio lo había conseguido.

-Debemos mantener la calma- abogó Dumbledore- Hay muchas cosas en las que pensar. Aunque la nueva situación nos haya tomado por sorpresa, tenemos que decidir el camino a seguir. Por suerte tanto Sirius como Portia han salido vivos de esta. Sin embargo, me preocupa la situación de Draco Malfoy, su padre me ha enviado una carta "ofendido" de nuestro comportamiento, lo ha sacado del colegio para "llevarlo a otro sitio mejor". Ahora que está en manos de Voldemort, temo lo que le puedan hacer.

-Deberíamos ir a buscarlo- sugirió Snape.

-Estoy de acuerdo- dijo Paige.

-No podemos hacer algo así- negó el director- No sin pensarlo bien antes. No arriesgaré más vidas en vano.

-Pero...

-El profesor Dumbledore tiene razón

-¡¡Prue!!

-Lo siento Paige, pero yo opino igual- dijo Piper- Nunca nos hemos encontrado en una situación así. Tenemos que pensar bien lo que vamos a hacer.

-Si lo piensan demasiado- masculló Severus dándose la vuelta en dirección a la salida- Tal vez para cuando decidan actuar ya sea demasiado tarde- y salió del despacho furioso, dejando a todos los presentes sorprendidos de su comportamiento.

**********

Sirius Black había despertado en la enfermería con todo el cuerpo dolorido. Al principio no recordaba donde estaba, pero poco a poco imágenes fueron llegando a su cabeza, los mortífagos, los demonios... El golpe había sido fuerte, tenía que reconocerlo. Giró la cabeza hacia un lado, suspirando, y vio a Portia. Su hermana estaba dormida en la cama de al lado. Preocupado por su estado se levantó con dificultad y caminó hasta ella. Acarició su rostro y su hermana se estremeció.

-Severus...

¿Qué? ¿Por qué Portia había mencionado a ese grasoso? ¿Qué era lo que estaba pasando? Y en ese momento, en la enfermería entró la persona a la que menos le habría gustado encontrarse.

-¡TU!

-Ah, Black, has despertado- dijo simulando indiferencia.

-¿Qué demonios haces aquí?

-Venía a preguntarle a Poppy la lista de pociones que necesita- mintió.

-No te creo.

-Allá tú, Black

-¿Se puede saber qué está pasando aquí?- preguntó enfadada la enfermera al ver a los dos hombres a punto de empezar una de sus famosas discusiones. Severus maldijo su interrupción, ahora Black le preguntaría a la enfermera y ella le diría que ya habían hablado antes de las pociones. Solo quería ver como seguía Portia (N/A: no me había dado cuenta? y ahora tendría que soportar al energúmeno de Black. Pero justo entonces Prue abrió entró por la puerta.

-Sirius, ya estás despierto ^^. ¿Cómo te encuentras?- el animago pareció dudar entre ir a hablar con la hermana Halliwell o seguir allí discutiendo con Snape. Se decidió por la segunda opción. Prue, intuyendo algo, se lo llevó dela enfermería para "tomar el aire".

Una vez Snape se encontró solo en la enfermería, se acercó de puntillas a la cama de Portia. Se situó a su lado y después de dudar le acarició el rostro. La joven, al igual que unos minutos antes, se estremeció. El hombre se sorprendió cuando la mano de ella se unió a la suya y poco a poco abrió los ojos. No pudo evitar una sonrisa.

-Hola...

-Hola. ¿Cómo estás?

-Me duele la cabeza.

Los dos permanecieron en silencio durante un rato, sin hablar, siquiera sin mirarse a los ojos, pero inconscientemente, mantuvieron sus manos unidas.

-¿Se sabe algo de Draco?- preguntó finalmente Portia.

-Su padre lo ha sacado del colegio- ella torció la cara con un gesto torvo.

-Ni se te ocurra volver a dejar de hablar- Portia lo miró sorpendida- tu hermana Paige me contó lo que pasó en el Ministerio- la joven lo observó durante unos instantes, como evaluándolo.

-Tranquilo- dijo finalmente- No pensaba hacerlo. ¿Qué ha pensado Albus para sacar a Draco de dondequiera que esté?

-Cree que es mejor esperar.

-¿Qué?- Severus intentó en vano contener a su amiga, que al escuchar la noticia se había levantado de golpe, pese a la mueca de dolor que mostraba su cara- No podéis hacer eso. Dejarlo en manos de su padre es entregárselo a Voldemort.

-Portia, tranquila ¡Escúchame!- gritó al ver que ella no dejaba de forcejear- He dicho que Albus cree que es lo mejor, no que sea lo que vayamos a hacer.

-¿Qué quieres decir?

-No creerás que vamos a perdernos la oportunidad de visitar a los Malfoy en su casita veraniega- dijo Paige apareciendo por la puerta con Phoebe.

-Chicas.

-¿Cómo estas?- preguntó la mayor de las presentes.

-Bien. ¿Qué querías decir Paige?

-Que vamos a ir a buscar a Draco. Tu y yo hemos visto las cosas que ese animal le ha hecho, y no voy a permitir que esté con él más tiempo del necesario.

-¿Cuándo salimos?

-¿Salimos?- dijo Paige- No, no señorita. Tu has estado a punto de palmarla ayer. No estás lista para otra juerga.

-Pero lo estaré.

-¿Cómo?

-Paige puede curarme.

-¿Qué? ¿Estás loca? El que sea mitad luz blanca no significa que pueda curar. Lo máximo que he conseguido es utilizar los poderes de Leo o de mi padre. Y Leo todavía no ha regresado.

-Yo creo que puedes hacerlo Paige. Sólo tienes que concentrarte.

-¿Para qué?- Prue acababa de llegar con Sirius. Portia vio como sus hermanas le indicaban con un gesto que no dijera nada.

-Para estar lista para otro ataque. Cuanto antes me cure mejor ¿no?

-¿Sabéis? El hecho de que precisamente las tres personas que se oponían a la decisión respecto a Draco estén aquí con la persona que estaría dispuesta a ir a buscarlo aunque fuera en muletas no me da demasiada tranquilidad.

-Snape, creo que sobras aquí- masculló Sirius- Esta es una reunión familiar- el profesor de pociones le habría pegado allí mismo, pero no quería dar un espectáculo, o mostrar sus sentimientos. Así que se dirigió a la salida.

-¡Espera!- pido Portia- Sirius, no hagas eso. No conviertas esto en otra discusión por unas rencillas infantiles. Prue tiene razón, Severus está aquí porque planeamos ir a buscar a Draco. No me importa lo que digáis, pero sé que si no lo sacamos de allí no durará mucho. Ya nos hemos retrasado demasiado con todo el asunto de la pelea de ayer. Prue... no pongas esa cara. Sé que no estás de acuerdo, pero vamos a hacerlo de todas formas, solo que nos sería más fácil contigo a nuestro lado, y tú también Sirius. ^^ ¿Qué voy a hacer yo sin mis dos hermanos mayores?

Los dos aludidos se miraron como dudando durante unos instantes, pero finalmente cedieron y decidieron unirse al plan.

-Bien- dijo Phoebe, mientras Paige arrastraba a Snape para que se volviera a unir al grupo- Tenemos que planearlo bien. Hemos averiguado que Draco está todavía en la mansión Malfoy. Tenemos que rescatarlo antes de que lo lleven al fuerte de Voldemort. Vamos a necesitar muchas pociones y nuestros poderes de ataque al máximo, además de unas cuantas armas menos... mágicas.

-Tal vez os vendría bien el poder de explosión.

-¡¡¡Piper!!!

-Bueno, si mis hermanas preparan una fiesta, qué menos que unirme a ellas.

**********

Bueno, aquí lo dejo por hoy. Ya sé que ha sido muy corto, pero es que todavía no he decidido como continuarlo, pero me pareció que no estaba bien tardar tanto en actualizar. Para que veais que no me he olvidado de esta historia!! La verdad es que no me gusta mucho como me ha quedado este capítulo, pero prometo que me esforzaré para el próximo, y lo haré más largo. Lo último, si queréis que me anime e inspire para el próximo capi: REVIEWS PLEASE.

Por cierto, si a alguien le apetece pasarse, he subido nueva historia: Ángeles entre nosotros. Si le echáis un vistazo y me dejáis un review me haréis muy feliz.

BSS