CAPÍTULO 2 - Reacción realista

Ambos recorrieron los pasillos fríos y húmedos del hospital hasta llegar a la salida, mientras caminaban Ark miraba a Tails, dándose cuenta de que algo le pasaba, pero como no lo conocía todavía, no se atrevió a preguntarle nada. Tails caminaba con los ojos entrecerrados, mirando al suelo mientras la cabeza le daba mil vueltas, hasta que. "Em. perdona, Miles, ya estamos fuera." Tails levantó la cabeza, "¿Eh?... Oh sí. ¿donde está tu vehículo?" Ark esbozó una ligera sonrisa, "mi madre me está esperando en el coche, ¿vamos?" Claro que su madre le estaba esperando en el coche, no se había parado a pensarlo pero si era aún más joven que él, no podía conducir un vehículo de alta cilindrada, pero sin pensarlo dijo que si, que si le podía llevar a casa, iba a conocer a la madre de alguien que todavía era desconocido para él, Ark, y su madre. "Por cierto, mi madre se llama Mina, ¡también quería conocerte, cerebrito!" al terminar la frase mostró una amplia sonrisa; Tails se quedó pensando, esa actitud le recordaba mucho a Sonic. "Oh. bien." Tails seguía andando con Ark hacía el coche, cuando llegaron, las puertas de aquel Zoak plateado se abrieron, un coche muy moderno, y muy caro, eso le vino a la mente sin pensarlo ya que él poseía altos conocimientos en mecánica. De aquel coche impresionante, salió una zorra cuyo pelaje era blanco como la nieve, con un vestido marrón, y una melena pelirroja ondeando al viento, se quitó sus gafas de sol, y sus ojos violetas miraron a Tails. "Oh cielo, ¿Quién es este amiguito tuyo?" dijo Mina sonriendo, "Es Miles Prower, ¿recuerdas? El mecánico tan famoso, lo he reconocido por sus dos colas" En ese instante, Mina abrió los ojos y empezó a reír, "¡Y le has encontrado en el hospital!" Poco a poco se acercó y con sus delicadas manos le acarició el flequillo a Tails con mucha suavidad, y dijo, "¡Que suerte tenemos! Pero. ¿Qué hacías aquí solo en el hospital?" En ese mismo instante el alma de Tails se volvió oscura, empezó a pensar que demonios hacía ahí hablando con unos desconocidos, sus sentidos empezaron a enloquecer, tal vez el virus ya hacía algo de efecto, o tal vez no, simplemente, se le pasaron demasiadas preguntas por la cabeza y empezó a soltar unas lagrimas que brillaban con la luz del sol, y le iban recorriendo la cara. "Cielo." dijo Mina "¿te ocurre algo?" "Si, ¿que te sucede?, antes también te he visto llorar en el hospital." dijo Ark. Justo al terminar de pronunciar esas palabras Tails levantó la cabeza y miro a Ark y a Mina, y sin decirles nada, agitó sus colas y salió volando, dejando tras de sí un haz de lágrimas. "¡Espera! ¡Miles!..." pero Tails ya había desaparecido. "Ark, hijo mío, ¿Qué le sucede al muchacho?" "Pues no lo sé la verdad, no lo sé."

Mientras Tails iba volando, empezó a pensar en todos sus amigos, en Sonic, Knuckles, Light, Amy, Rouge, Kilik, Julie Sue, Sally. en sus compañeros de clase, Cream, Van, Alexia, María, Speed. Y no sabía que hacer, estaba completamente confundido. se había olvidado del zorrito y su madre por completo, recordó que le buscaban por sus dotes de mecánico, pero ya le daba igual, sabía que iba a morir, pero en cierto modo pensó que su comportamiento hacia ellos no le importaba demasiado, aunque si que importaba para Sonic, que era como su hermano mayor, y, estaba claro que Sonic había sufrido un ataque de pánico, que era normal, ya que, una noticia así dejaría K.O. a cualquiera. Así que, no podía estar llorando siempre, esbozó una ligera sonrisa, y, dirigiéndose hacía su casa murmuró, "Lo siento Sonic. amigos, ya voy, os lo explicaré todo." y volando más rápido, difuminó una nube baja muy cercana a él, mientras se desvanecía en la lejanía.