*^* Pequeños fallos sin importancia ¬_¬ aiiis siempre hay algo q se me
queda por ahiiii!!! Q RABIA!! . Y se me olvidó poner a quien le estaba
contando Daniel lo que había pasado con Adrienne!! O_O Bueno, por si las
dudas se lo está contando a Karen. Luego ella habla así q supongo q se
entiende.
*^*Disclaimer: blablablablablabla ~NO SOY JKR~ yo creo q ya está bastante claro, pero son las normas n_n yo solo soy una fan q escribe fanfic (obviamente! :P)
*^*Este capitulo se titula como la canción de Simple Plan, Meet you there (todos a buscar en kazaa o similares!!) porque aparte de ser preciosa, va a tener mucho que ver!! Cuando sea os pondré la letra en inglés y traducida, para los q no controlen el inglés. ¿OK? Espero que este capitulo os guste! A mi me encanta! Mucho amor en el ambiente!! n_n Y para que veais es bastante mas larguito! Asi q mereció la pena esperar. Sorry, no contesto reviews!! :(
XIV: Meet you there
Los párpados intentaban caer sobre los azules ojos de Adrienne, pero ella se resistía a dejarse vencer por el cansancio. Miraba ausente las letras y las fotos del artículo "Sean Yaler: él nuevo sex-symbol del Quidditch". Dejó caer la revista al suelo y apagó la luz.
La noche no fue una buena parte del día para Adrienne. A pesar de estar terriblemente cansada, se despertaba continuamente, y había tenido varias pesadillas con dementores. No era de extrañar, debido a que hacía tan solo 24 horas tenía en alma partida. A la mañana siguiente le despertaron muy temprano y tuvo la impresión de que no había dormido nada. Un medimago le trajo un vaso de leche y unas galletas, las más insípidas y secas que había. Adrienne no tardó en quejarse cuando volvieron para llevarse la bandeja.
-¡Yo no tengo problemas de estómago para que me deis una comida tan mala! Es más tengo hambre...
-Adrienne, cállate. Siempre tienes que estar dando la nota.
-¡Pero es que es verdad mamá! Seguro que para comer me dan puré y pescado hervido. ¡Voy a vomitar!
-Discúlpela.
El medimago salió de la sala mientras escuchaba divertido como Delia Moore regañaba a su hija. Después de unos minutos de silencio dijo:
-Voy a ir a la cafetería a por algo para desayunar.
-¿Me traerás un bollo?
-Bueno, ya veré. Tu pórtate bien y no hagas tonterías.
-¡Máma! Ya sabes que yo siempre me porto bien.
-Más quisieras.
Adrienne aprovechó que su madre hubiera salido de la habitación para sacar la carta de Dick de la mesilla y leerla de nuevo. Esta vez se esforzaría en no distraerse pensando en él. Se centraría en su carta en la cual seguramente tendría varias cosas que decirle:
"Querida Adrienne,
Sé que estarás furiosa y que no querrás saber nada de mi pero por favor, quiero que leas estas palabras. No quiero que la rompas sin haberlas leído, porque entonces comprenderás muchas cosas. Antes de nada, espero que te encuentres bien y que no tardemos en reunirnos pronto.
Bien, lo primero es por qué me lié con Miranda Bessaine. Mira, lo nuestro se estaba enfriando y me pareció buena idea "hacerte enfadar" para que te dieras cuenta de que yo te importo. Y tu me importas a mí, Adrienne. Más de lo que piensas. Yo te quiero y cuando me he enterado de lo que te ha pasado me he sentido culpable. De no ser por mi estúpida idea de enrollarme con Miranda tu no te habrías ido a los terrenos y bueno, no sé que ha ocurrido exactamente, no me han dado muchos detalles. La cuestión es que si yo no te hubiera hecho daño a ti no te habrían atacado los dementores. Me siento horriblemente Adrienne. Estoy muy triste. Cada vez que pienso en ti me siento culpable. Espero que algún día llegues a perdonarme, por haberme ido con Bessaine, por haberte hecho daño y por haber hecho que los dementores te atacaran.
Otra cosa por la que estarás furiosa conmigo: el colgante. Esto que te voy a contar ahora es muy importante, así que espero que nunca salga de entre tu y yo. Nadie lo sabe, pero yo soy adoptado. Mi madre es un miembro de la familia Black, Casandra Black y mi padre es Lucius Malfoy. Pero claro, ellos no tienen ni idea de qué pasó con aquel hijo bastardo. Me dieron en un orfanato, pero para ellos tuvieron que dar sus datos, para que si algún día yo quería saber quienes eran mis padres biológicos pudiera mirarlo allí. La rosa de tu colgante es el símbolo de la familia Black. Solo se queda en plata en manos de un miembro de la familia Black. Si no es de cristal. Por eso no sé por qué cuando tu lo llevas es de plata, porque tu eres de familia muggle. Te preguntarás porque a Miranda le funciona también: ella tiene algo de sangre. Y se lo di a ella porque había sido una estupidez quitártelo para averiguar algo de lo que prefiero no saber, ya que yo voy a seguir siendo un "Morans" por mucho que diga tu colgante que yo soy un "Black".
Esto es todo. No sé si querrás más explicaciones. Aunque no sé para que. Seguramente no me querrás volver a ver. Pero yo espero que me contestes porque te quiero Adrienne. Y no quiero que echemos a perder todo lo nuestro por una tontería. Ojalá algún día me perdones. Te quiero.
Muchos besos,
Dick"
Adrienne suspiró mientras lanzaba el pergamino en el fondo de su maleta. Sus ojos se posaron en el otro papel que había llegado anoche. La carta de Daniel. Supuso que no sería nada importante, que ya se lo contaría cuando fuera a visitarle. Dejó las dos cartas en la maleta justo cuando su madre volvía con un bollo de la cafetería.
-Toma. ¡Y no se te ocurra volver a dejarme en ridículo delante del sanador!
-¡Pero si se estaba riendo!
-De nosotras Adrienne.
-¡¡KAREN!! ¡¡DANIEL!!
Karen penetró en la habitación suavemente. Parecía algo cohibida. Daniel entró sin mirar a nadie directamente a los ojos.
-¿Qué os pasa? ¿No me saludáis?
Al instante Karen se lanzó abrazando a Adrienne.
-No sé pensaba que igual te hacía daño...
-¡Estoy perfectamente!
-Adrienne... –le dijo su madre en un tono severo.
-Bueno vale, tengo que tomar cuatro tipos diferentes de pociones al día y una hora de tratamiento, pero me encuentro fenomenal. ¡Daniel!
-Hola –musitó el aludido sin ganas- Me alegro de que ya estés bien.
-Nadie lo diría.
Daniel suspiró en modo de respuesta. El ambiente se puso tan tenso que parecía que se pudiese cortar con unas tijeras.
-Hemos venido con Hermione y con Malfoy –dijo Karen queriendo aflojar un poco la situación- Están fuera porque les han dicho que las visitas de dos en dos.
-Iré a hablar con ellos –dijo Delia Moore.
Salió de la habitación cerrando la puerta tras de sí.
-¿Y qué pasó? –dijo Karen- ¿Qué ocurrió para que acabaras así?
-Bueno, parece que fue hace años, pero solo fue hace dos noches. Algunas cosas no las recuerdo apenas, de otras no tengo la menor idea... Veréis, pillé a Dick liándose con Miransa Bessaine y me entró la llorera así que salí a los terrenos y encontré un pasadizo que llegaba a una casa donde estaba Harry Potter, secuestrado por tres mortífagos: El padre de Malfoy, Victor Krum y un chico que no sé quien era. Me parece que era algo así como el ex novio de Hermione. Bueno, entonces el padre de Malfoy me echó la maldición imperius pero me resistí y empezó a lanzarme desmaius y enervate hasta que me dejara controlar por la maldición. Luego hay un espacio en blanco. Y me despierto rodeada por veinte dementores. Una chica me salvó y luego vino Malfoy. Me dejó en el hall. Desde entonces ya no recuerdo más. Bueno si, he estado entre la vida y la muerte.
-¿De verdad? ¿Y qué hay?
-Nada. Es como estar vacío. No hay límites, todo es negro, excepto unos puntitos de luz que parecían copos de nieve. Y había dos velos. Uno blanco y uno negro. Y yo tenía que elegir.
-¿Y cual cogiste?
-El blanco. La muerte me quería engañar, ya que miré detrás de ambos y apuntaban cosas opuestas. El blanco, que era vida, me enseñó la muerte y el negro, que era muerte, me mostraba la vida.
-Yo me habría quedado allí.
-Lo dudo. También podría haberlo hecho, pero habría acabado muerta igualmente.
-¿De qué?
-De indecisión.
-Vaya, Adri, es muy interesante. Podría escribir un libro con los secretos del más allá.
Adrienne le lanzó una mirada furtiva a Daniel aprovechando que miraba unas de las muchas "Corazón de Bruja" antiguas.
-¿Qué le pasa? –le susurró Adrienne a Karen.
-No lo sé. Lleva sin hablar desde que te ingresaron. Está mas raro aún si cabe.
-Daniel –le llamó Adrienne.
-¿Um?
-Quería darte las gracias por salvarme y eso... te debo una.
-¿Cómo lo has sabido?
-Los sanadores me dijeron que un chico de Hogwarts me trajo. Les pregunté cómo era y me dieron tu descripción. Gracias.
-De nada.
Daniel volvió los ojos a su revista bajó la mirada de Adrienne.
-Déjalo –le aconsejó Karen- Ya le conoces. Bueno, voy a hacer pasar a Malfoy y a hermione. Querrán verte.
Adrienne volvió a abrazar a su amiga y quiso que Daniel se girara en su camino hacia la puerta para que la abrazara también, pero sabía que aquello era imposible.
* * *
Los cinco días siguientes de la vida de Adrienne Moore fueron de lo más aburridos. Pasaba en la maldita cama del hospital todo el día. Apenas le dejaban pasear por algún pasillo para estirar las piernas. Echaba de menos todo y cada una de las horas muertas que estaba en la sala Moonlight las pasaba añorando lo que no tenía. Finalmente llegó el día en que volvería a Hogwarts. Quería reunirse con Dick para hablar con él y también quería ver a Daniel para preguntarle por qué estaba tan raro. Cuando estaba guardando sus cosas en la maleta que tenía olvidada bajo la cama, encontró las dos cartas. Releyó la de Dick. Había una cosa a la cual no le había dado mayor importancia pero ahora se preguntaba por qué.
-Mamá –llamó Adrienne- El colgante de la rosa que me dio la abuela... ¿tiene algo que ver con la familia Black?
-¿Con los Black? ¡Qué tonterías dices hija!
-Es que mi ex novio dice que la rosa negra es el símbolo de los Black...
-¡¿CÓMO QUE TU EX NOVIO?! ¿Y cómo es que no me dices nada?
-¡Porque sabía que te pondrías histérica!
-¿Y quien es? ¿Qué sabrá?
-Mira, su madre era de la familia Black, aunque nunca lo reconoció como un hijo. Sus padres lo abandonaron en cuanto nació. Lo adoptó una familia muggle.
-¿Y cuanto has salido con él?
-Un mes. Quizás menos. Me puso los cuernos la misma noche que me atacaron.
-¡Ni se te ocurra volver a verle!
-Bueno mamá –dijo Adrienne sonriendo- Ese no es el tema. Te estaba preguntando por mi colgante.
-No es nada hija.
-¡Mamá estoy segura!
-Mira ni tu padre ni yo tenemos nada que ver con la magia ¡Es absurdo!
-¿Cómo sabes que los Black son una familia de magos?
-Bueno... yo...
-¡Sabía que sabías algo! ¡Vamos mamá cuéntamelo!
-Toda la culpa la tiene tu abuela, por darte el maldito colgante. Al final te tendré que contar la historia... pero no me hace la mínima gracia.
-¿Pero por qué? ¿Qué pasa?
-Calla y escucha. Tu abuela era prima de los Black de Grimmauld Place, aunque se llevaba muchos años con la señora Black. Bueno, ella se casó con Edgar Kamin, mi padre, un honorable mago de sangre limpia, pero ella no le quería así que se escapó. Me tuvieron a mi, que soy una squib.
-¡mamá! ¿Y cómo no me lo dijiste?
-Una squib era una deshonra en la familia así que tu abuela se deshizo por completo de ella y comenzó una nueva vida como muggle. Como yo soy squib no me es difícil, así que ahora soy prácticamente una muggle. Luego me casé con tu padre, Scott Moore, muggle, no tenía ni idea de que existía la magia. Y te tuvimos a ti. Todos pensábamos que serías muggle, pero tu abuela te caló enseguida. Y por eso te dio el colgante antes de morir, para que supiera de donde vienes.
-¿Y por qué has tardado 15 años en decírmelo?
-No lo he creído necesario...
-Quince años ocultándome quien soy, haciéndome vivir una farsa. ¿Sabes cuantas veces he oído la frase "sangre-sucia" si pasaba por delante de un grupito chismoso? ¡Pero claro a ti eso te da igual! ¡Mientras tu puedas vivir tu estúpida vida muggle en paz!
-¡Adrienne Caroline Moore! ¡No me subas la voz!
-¡Haré lo que me de la gana! ¡Cómo tu has hecho conmigo!
-¿Sabes por qué no te lo dije nunca? ¡Porque sabía que te pondrías así! Eres demasiado infantil para comprender lo mal que me siento cuando hablas de magia. ¿Te crees que a mi no me gustaría tener tus poderes?
-Eres una egoísta. Solo piensas en como te sientes tu...
La puerta se abrió y apareció un señor de unos cuarenta años, rubio y de ojos azules, que se estaba quedando algo calvo.
-Delia, Adrienne, calmaos ya.
El señor Moore era el que acostumbraba a poner paz entre las dos partes femeninas. Adrienne y su madre eran calcos, ambas de pelo negro, liso y brillante y los ojos del más intenso azul. Incluso eran iguales en la manera de pensar y por ello siempre acababan discutiendo. Adrienne cogió su maleta con brusquedad y siguió a su padre fuera de la habitación. Habían preparado un traslador para que volviera a Hogwarts. Abrazó a su padre y le dirigió a su madre una mirada fría.
-Pórtate bien Adrienne, que nos conocemos –le dijo su padre.
-Yo siempre me porto bien papá.
-Ve a decirle algo a tu madre, que sino se va a poner muy triste.
-Lo dudo mucho. No le importo.
-Adrienne, sabes que sí.
Finalmente Adrienne fue hacia su madre y se reconciliaron. En el fondo ella tampoco quería marcharse al colegio enfadada. Tomó la taza entre sus manos y se despidió con la mano de sus padres mientras desaparecía en el torbellino de colores rumbo a Hogwarts.
* * *
Draco Malfoy salía de la clase de Pociones totalmente estresado. Su trabajo lo mantenía demasiado ocupado y además Hermione no quería saber nada de él. Parecía que después de la noche de los dementores por fin ellos dos serían algo más que compañeros de trabajo, pero se equivocaba. Hermione estaba aún si cabe más fría. Le evitaba a toda costa. Draco no era muy paciente y había decidido hacer una cosa, tal vez la más loca de su vida. Y tenía que hacerla ya. De otro modo se volvería atrás. Cerró la puerta de su despacho y tomó un puñado de polvos flu.
* * *
Adrienne aterrizó en el vestíbulo. Toda la gente que se encontraba allí la miró extrañados, y luego todos se le echaron encima esperando que les contara algo. Muchos rumores circulaban por Hogwarts.
-¡Me han dicho que acabaste con todos los dementores!
-¡Me dijeron que habías muerto!
-¿Es verdad que mataste a Krum?
-¿Te echaron un Avada Kedavra y sobreviste? ¿Cómo Harry Potter?
Algunos le estrechaban la mano, gente que no conocía de nada. Adrienne solo quería salir de entre la multitud. Y al parecer alguien escuchó su petición interior, porque tiró de ella y le pasó un brazo por los hombros, bajo la protesta general. La llevó al pasillo más oscuro y la metió en un armario que Adrienne conocía bien: el mismo donde ella se había escondido cuando el chico que la estaba agarrando en aquel momento y Miranda Bessaine se estaban liando.
-¿Qué quieres? –exclamó Adrienne enfadada lanzando la maleta en la oscuridad– ¿Ahora si tienes ganas de verm...
Dick no la dejó continuar y le puso sus labios en la boca. Adrienne lo quería apartar pero él la abrazaba muy fuerte. Finalmente Adrienne le pegó una patada en la entrepierna, lo cual hizo que Dick soltara a Adrienne para agarrarse la dolorida parte de su cuerpo. Adrienne buscó a tientas su maleta por el suelo y cuando la encontró intentó salir del armario. Pero estaba cerrado. Comenzó a golpear las puertas.
-¡Eres idiota!
-¡Solo quiero hablar contigo!
-¡Ya veo! ¿Y la escenita del beso?
-Para hacerte recordar que sientes algo por mi.
-Si, ¡asco!
-Sabes que no, Adrienne. Todavía guardas mi carta.
Adrienne se quedó en silencio.
-Ábreme la puerta –le ordenó- No quiero estar aquí contigo y no tengo varita. -Si estás dispuesta a volver conmigo te estaré esperando. -¡Que me abras la puerta! -Alohomora
Las puertas del armario finalmente se abrieron y Adrienne salió con la sangre hirviendo. Subió a la Torre Gryffindor.
-Bosque nevado.
Pero la señora gorda no le hizo caso.
-¡Mierda! Han debido cambiar la contraseña.
Adrienne se sentó en el suelo apoyada contra la pared, a esperar a que entrara alguien. A esas horas mucha gente entraba volviendo de las clases. Eran las seis. Justin Lons, un alumnos muy guapo de sexto y buscador del equipo de Gryffindor fue el primero en llegar.
-¡Adrienne! ¿Qué haces aquí? ¿Qué tal estás?
-Desde que he llegado no dejan de sucederme desgracias... han cambiado la contraseña mientras estaba en San Mungo.
-Yo te abro: Espejo de plata.
La señora Gorda les dejó pasar y en cuanto Adrienne entró en la sala común ocurrió lo mismo que en el vestíbulo. Finalmente, algo cohibida, se puso a contar la historia, mientras la mayoría escuchaban atentos, y otros se quejaban del alboroto porque tenían que estudiar. Cuando por fin terminó, volvieron a acosarle con preguntas así que decidió subir a su habitación a deshacer su maleta. Su habitación estaba desierta. Era como un refugio de entre toda la multitud ansiosa. Iba guardando las cosas que sus padres le habían traído en el armario canturreando una cancioncilla y pensando en Dick. ¿Volvería con él? Tal vez estaba siendo demasiado dura... ya le había pedido perdón varias veces... y de verdad parecía arrepentido... En el fondo de su maleta encontró los dos pergaminos enrollados uno al lado del otro. Aún no había leído la carta de Daniel. ¿Por eso estaría tan raro? La desenvolvió y al instante comenzaron a sonar los acordes de una canción que le encantaba, "Meet you there" de Simple Plan.
"Querida Adrienne,
En realidad no sé muy bien por qué te escribo esta carta. En primer lugar, recupérate pronto. Lo que pasó anoche me ha hecho pensar mucho en lo que siento hacia ti. Yo te salvé de los dementores y pude crear un patronus corpóreo gracias a ti. Tu haces despertar en mi sentimientos que nadie antes había logrado. Ya sabes que yo soy muy borde, pero tu siempre estás ahí poniéndome una sonrisa. Pero cuando te encontré inconsciente no vi tu sonrisa, solo tu cara sin sentimiento. Creí que habías muerto. Y me di cuenta de que debía dejarte claro mis sentimientos. Si hubieras muerto me habría enfadado mucho conmigo mismo, por haber sido tan cobarde.
Recuerdo como si fuera ayer aquel día de tercero, que yo estaba en la biblioteca, escondido tras una estantería y me descubriste allí cuando chocaste conmigo y te caíste. Salí huyendo ¿te acuerdas? Te tenía miedo. Pero luego en la sala común viniste a donde mí y te disculpaste por si te había hecho daño. Desde entonces somos amigos. Pero tu me gustas desde antes. En primero era demasiado pequeña para saber que sentía, pero en segundo comencé a sobresaltarme si te veía cerca y en tercero fue cuando descubrí que te amaba. Y no lo quise admitir. Me pasé todo cuarto curso intentando decirte lo que sentía, pero no me atreví. Y ahora en quinto primero te pasas babeando por Alex montero y luego te echas de novio a Dick Morans. Yo no tengo nada que ellos tengan, así que sé que yo nunca seré tu novio. Pero espero que sepas que siempre me podrás tener como amigo.
Besos,
Daniel
PD: Escucha atentamente la canción. Sé que te encanta, pero tienes que analizar la letra. En cuanto vuelvas a Hogwarts reúnete conmigo. Si me conoces lo suficiente sabrás donde. Puedes volver a escuchar la canción si enrollas el pergamino y lo vuelves a desenrollar"
Adrienne se dio cuenta de lo que había hecho. Había herido profundamente a Daniel. Miró su reloj. Aún estaba a tiempo. Enrolló el pergamino y lo desenrolló.
Now you're gone
I wonder why you left me here
I think about it on and on and on and on and on again
I know you're never coming back
I hope that you can hear me
I'm waiting to hear from you
Until I do
You're gone away
I'm left alone
A part of me is gone
And I'm not moving on
So wait for me
I know the day will come
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
I wish I could have told you
The things I kept inside
But now I guess it's just too late
So many things remind me of you
I hope that you can hear me
I miss you
This is goodbye
One last time
You're gone away
Im left alone.
A part of me is gone
And im not moving on
So wait for me
I know the day will come
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
I'll meet you theeeeerrrrrrreeeeeeeeeee...
And where I go you'll be there with me
Forever you'll be right here with me
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
No matter where life takes me
I'll meet you there
And even if i need you
Ill meet you there
Ill meet you there
Ill meet you there
(N/A: Traducción)
Ahora te has ido
Me pregunto porqué me dejaste aquí
Pienso en ello una y otra y otra y otra y otra y otra vez
Sé que nunca vas a volver
Espero que puedas oírme
Estoy esperando a oír de ti
Hasta que lo haga
Tu te has ido lejos
Me has dejado solo
Una parte de mi se ha ido
Y no estoy avanzando
Por eso espérame
Sé que el día llegará
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
Ojalá te hubiera dicho
Las cosas que me guardé dentro
Pero adivino que ya es demasiado tarde
Tantas cosas me recuerdan a ti
Te echo de menos
Esto es adiós
Una ultima vez
Tu te has ido lejos
Me has dejado solo
Una parte de mi se ha ido
Y no estoy avanzando
Por eso espérame
Sé que el día llegará
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo alliiiiiiiiiiiii
Y donde quiera que vaya estarás conmigo
Para siempre tu vas a estarás aquí conmigo
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo allí
Adrienne salió corriendo de la sala común. Pasaban de las siete. Y Daniel llevaría esperándole allí mucho tiempo. Apretaba con todas sus fuerzas el pergamino en su mano. Nadie conocía aquel atajo. Solo Daniel y ella. Tiró del brazo de la armadura y unos escalones aparecieron ante ella. Luego salió por la ventana. Efectivamente Daniel estaba allí, en el tejado, sentado mientras el aire frío de diciembre le azotaba el cabello castaño. Adrienne caminó hasta ponerse a su lado.
-Siento haberte hecho esperar tanto. ¿Podrás perdonarme?
*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^* Wajajajajaja!!! Cada vez soy peor!! :P :P ¿Qué dirá Adrienne? ¿Qué hará Daniel? ¿Qué pasará con Dick? ¿a dónde demonios ha ido Malfoy? Todo esto y mucha más en el próximo y por desgracia, ultimo capitulo! :( :( se que todos mis fans se pondrán tristes pero esto es lo que hay. Os recuerdo que si quereis que os dedique el fic me dejais una review, porque va ir dedicado a todos los q me dejen review. Se que mucha más gente lo lee (ay! esos remolones del foroooo!!) pero esq no los voy a poder recordar a todos! Entonces hay ley: si hay review hay dedicatoria... :P
Bueno, espero no tardar mucho con el siguente pero ya habeis visto que este es bastante largo!! :D :D jejeje no os quejareis! Aunq claro la canción abulta lo suyo. (siento ahberla espaciado tanto pero sino quedaba todo como en un parrafo :s) Parece más dedicada a alguien que se ha muerto, pero os recuerdo que Daniel se sentía como si Adrienne hubiera muerto, porque aunque sabe que se va a recuperar, tiene muy reciente todo lo sucedido :(
Se que aunq todos ansiais saber que ocurre entre Malfoy y hermi eso os lo dejo para el siguente capitulo! Q sino este iba a ser eterno y me ibais a matar de lo que tardaría!
Muchismos besos a todos!!
**MIKITA_WOOD** **AINHOA**
PD: Para enviar una review seguir la felcha y pulsar GO (para los despistados :P)
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V
*^*Disclaimer: blablablablablabla ~NO SOY JKR~ yo creo q ya está bastante claro, pero son las normas n_n yo solo soy una fan q escribe fanfic (obviamente! :P)
*^*Este capitulo se titula como la canción de Simple Plan, Meet you there (todos a buscar en kazaa o similares!!) porque aparte de ser preciosa, va a tener mucho que ver!! Cuando sea os pondré la letra en inglés y traducida, para los q no controlen el inglés. ¿OK? Espero que este capitulo os guste! A mi me encanta! Mucho amor en el ambiente!! n_n Y para que veais es bastante mas larguito! Asi q mereció la pena esperar. Sorry, no contesto reviews!! :(
XIV: Meet you there
Los párpados intentaban caer sobre los azules ojos de Adrienne, pero ella se resistía a dejarse vencer por el cansancio. Miraba ausente las letras y las fotos del artículo "Sean Yaler: él nuevo sex-symbol del Quidditch". Dejó caer la revista al suelo y apagó la luz.
La noche no fue una buena parte del día para Adrienne. A pesar de estar terriblemente cansada, se despertaba continuamente, y había tenido varias pesadillas con dementores. No era de extrañar, debido a que hacía tan solo 24 horas tenía en alma partida. A la mañana siguiente le despertaron muy temprano y tuvo la impresión de que no había dormido nada. Un medimago le trajo un vaso de leche y unas galletas, las más insípidas y secas que había. Adrienne no tardó en quejarse cuando volvieron para llevarse la bandeja.
-¡Yo no tengo problemas de estómago para que me deis una comida tan mala! Es más tengo hambre...
-Adrienne, cállate. Siempre tienes que estar dando la nota.
-¡Pero es que es verdad mamá! Seguro que para comer me dan puré y pescado hervido. ¡Voy a vomitar!
-Discúlpela.
El medimago salió de la sala mientras escuchaba divertido como Delia Moore regañaba a su hija. Después de unos minutos de silencio dijo:
-Voy a ir a la cafetería a por algo para desayunar.
-¿Me traerás un bollo?
-Bueno, ya veré. Tu pórtate bien y no hagas tonterías.
-¡Máma! Ya sabes que yo siempre me porto bien.
-Más quisieras.
Adrienne aprovechó que su madre hubiera salido de la habitación para sacar la carta de Dick de la mesilla y leerla de nuevo. Esta vez se esforzaría en no distraerse pensando en él. Se centraría en su carta en la cual seguramente tendría varias cosas que decirle:
"Querida Adrienne,
Sé que estarás furiosa y que no querrás saber nada de mi pero por favor, quiero que leas estas palabras. No quiero que la rompas sin haberlas leído, porque entonces comprenderás muchas cosas. Antes de nada, espero que te encuentres bien y que no tardemos en reunirnos pronto.
Bien, lo primero es por qué me lié con Miranda Bessaine. Mira, lo nuestro se estaba enfriando y me pareció buena idea "hacerte enfadar" para que te dieras cuenta de que yo te importo. Y tu me importas a mí, Adrienne. Más de lo que piensas. Yo te quiero y cuando me he enterado de lo que te ha pasado me he sentido culpable. De no ser por mi estúpida idea de enrollarme con Miranda tu no te habrías ido a los terrenos y bueno, no sé que ha ocurrido exactamente, no me han dado muchos detalles. La cuestión es que si yo no te hubiera hecho daño a ti no te habrían atacado los dementores. Me siento horriblemente Adrienne. Estoy muy triste. Cada vez que pienso en ti me siento culpable. Espero que algún día llegues a perdonarme, por haberme ido con Bessaine, por haberte hecho daño y por haber hecho que los dementores te atacaran.
Otra cosa por la que estarás furiosa conmigo: el colgante. Esto que te voy a contar ahora es muy importante, así que espero que nunca salga de entre tu y yo. Nadie lo sabe, pero yo soy adoptado. Mi madre es un miembro de la familia Black, Casandra Black y mi padre es Lucius Malfoy. Pero claro, ellos no tienen ni idea de qué pasó con aquel hijo bastardo. Me dieron en un orfanato, pero para ellos tuvieron que dar sus datos, para que si algún día yo quería saber quienes eran mis padres biológicos pudiera mirarlo allí. La rosa de tu colgante es el símbolo de la familia Black. Solo se queda en plata en manos de un miembro de la familia Black. Si no es de cristal. Por eso no sé por qué cuando tu lo llevas es de plata, porque tu eres de familia muggle. Te preguntarás porque a Miranda le funciona también: ella tiene algo de sangre. Y se lo di a ella porque había sido una estupidez quitártelo para averiguar algo de lo que prefiero no saber, ya que yo voy a seguir siendo un "Morans" por mucho que diga tu colgante que yo soy un "Black".
Esto es todo. No sé si querrás más explicaciones. Aunque no sé para que. Seguramente no me querrás volver a ver. Pero yo espero que me contestes porque te quiero Adrienne. Y no quiero que echemos a perder todo lo nuestro por una tontería. Ojalá algún día me perdones. Te quiero.
Muchos besos,
Dick"
Adrienne suspiró mientras lanzaba el pergamino en el fondo de su maleta. Sus ojos se posaron en el otro papel que había llegado anoche. La carta de Daniel. Supuso que no sería nada importante, que ya se lo contaría cuando fuera a visitarle. Dejó las dos cartas en la maleta justo cuando su madre volvía con un bollo de la cafetería.
-Toma. ¡Y no se te ocurra volver a dejarme en ridículo delante del sanador!
-¡Pero si se estaba riendo!
-De nosotras Adrienne.
-¡¡KAREN!! ¡¡DANIEL!!
Karen penetró en la habitación suavemente. Parecía algo cohibida. Daniel entró sin mirar a nadie directamente a los ojos.
-¿Qué os pasa? ¿No me saludáis?
Al instante Karen se lanzó abrazando a Adrienne.
-No sé pensaba que igual te hacía daño...
-¡Estoy perfectamente!
-Adrienne... –le dijo su madre en un tono severo.
-Bueno vale, tengo que tomar cuatro tipos diferentes de pociones al día y una hora de tratamiento, pero me encuentro fenomenal. ¡Daniel!
-Hola –musitó el aludido sin ganas- Me alegro de que ya estés bien.
-Nadie lo diría.
Daniel suspiró en modo de respuesta. El ambiente se puso tan tenso que parecía que se pudiese cortar con unas tijeras.
-Hemos venido con Hermione y con Malfoy –dijo Karen queriendo aflojar un poco la situación- Están fuera porque les han dicho que las visitas de dos en dos.
-Iré a hablar con ellos –dijo Delia Moore.
Salió de la habitación cerrando la puerta tras de sí.
-¿Y qué pasó? –dijo Karen- ¿Qué ocurrió para que acabaras así?
-Bueno, parece que fue hace años, pero solo fue hace dos noches. Algunas cosas no las recuerdo apenas, de otras no tengo la menor idea... Veréis, pillé a Dick liándose con Miransa Bessaine y me entró la llorera así que salí a los terrenos y encontré un pasadizo que llegaba a una casa donde estaba Harry Potter, secuestrado por tres mortífagos: El padre de Malfoy, Victor Krum y un chico que no sé quien era. Me parece que era algo así como el ex novio de Hermione. Bueno, entonces el padre de Malfoy me echó la maldición imperius pero me resistí y empezó a lanzarme desmaius y enervate hasta que me dejara controlar por la maldición. Luego hay un espacio en blanco. Y me despierto rodeada por veinte dementores. Una chica me salvó y luego vino Malfoy. Me dejó en el hall. Desde entonces ya no recuerdo más. Bueno si, he estado entre la vida y la muerte.
-¿De verdad? ¿Y qué hay?
-Nada. Es como estar vacío. No hay límites, todo es negro, excepto unos puntitos de luz que parecían copos de nieve. Y había dos velos. Uno blanco y uno negro. Y yo tenía que elegir.
-¿Y cual cogiste?
-El blanco. La muerte me quería engañar, ya que miré detrás de ambos y apuntaban cosas opuestas. El blanco, que era vida, me enseñó la muerte y el negro, que era muerte, me mostraba la vida.
-Yo me habría quedado allí.
-Lo dudo. También podría haberlo hecho, pero habría acabado muerta igualmente.
-¿De qué?
-De indecisión.
-Vaya, Adri, es muy interesante. Podría escribir un libro con los secretos del más allá.
Adrienne le lanzó una mirada furtiva a Daniel aprovechando que miraba unas de las muchas "Corazón de Bruja" antiguas.
-¿Qué le pasa? –le susurró Adrienne a Karen.
-No lo sé. Lleva sin hablar desde que te ingresaron. Está mas raro aún si cabe.
-Daniel –le llamó Adrienne.
-¿Um?
-Quería darte las gracias por salvarme y eso... te debo una.
-¿Cómo lo has sabido?
-Los sanadores me dijeron que un chico de Hogwarts me trajo. Les pregunté cómo era y me dieron tu descripción. Gracias.
-De nada.
Daniel volvió los ojos a su revista bajó la mirada de Adrienne.
-Déjalo –le aconsejó Karen- Ya le conoces. Bueno, voy a hacer pasar a Malfoy y a hermione. Querrán verte.
Adrienne volvió a abrazar a su amiga y quiso que Daniel se girara en su camino hacia la puerta para que la abrazara también, pero sabía que aquello era imposible.
* * *
Los cinco días siguientes de la vida de Adrienne Moore fueron de lo más aburridos. Pasaba en la maldita cama del hospital todo el día. Apenas le dejaban pasear por algún pasillo para estirar las piernas. Echaba de menos todo y cada una de las horas muertas que estaba en la sala Moonlight las pasaba añorando lo que no tenía. Finalmente llegó el día en que volvería a Hogwarts. Quería reunirse con Dick para hablar con él y también quería ver a Daniel para preguntarle por qué estaba tan raro. Cuando estaba guardando sus cosas en la maleta que tenía olvidada bajo la cama, encontró las dos cartas. Releyó la de Dick. Había una cosa a la cual no le había dado mayor importancia pero ahora se preguntaba por qué.
-Mamá –llamó Adrienne- El colgante de la rosa que me dio la abuela... ¿tiene algo que ver con la familia Black?
-¿Con los Black? ¡Qué tonterías dices hija!
-Es que mi ex novio dice que la rosa negra es el símbolo de los Black...
-¡¿CÓMO QUE TU EX NOVIO?! ¿Y cómo es que no me dices nada?
-¡Porque sabía que te pondrías histérica!
-¿Y quien es? ¿Qué sabrá?
-Mira, su madre era de la familia Black, aunque nunca lo reconoció como un hijo. Sus padres lo abandonaron en cuanto nació. Lo adoptó una familia muggle.
-¿Y cuanto has salido con él?
-Un mes. Quizás menos. Me puso los cuernos la misma noche que me atacaron.
-¡Ni se te ocurra volver a verle!
-Bueno mamá –dijo Adrienne sonriendo- Ese no es el tema. Te estaba preguntando por mi colgante.
-No es nada hija.
-¡Mamá estoy segura!
-Mira ni tu padre ni yo tenemos nada que ver con la magia ¡Es absurdo!
-¿Cómo sabes que los Black son una familia de magos?
-Bueno... yo...
-¡Sabía que sabías algo! ¡Vamos mamá cuéntamelo!
-Toda la culpa la tiene tu abuela, por darte el maldito colgante. Al final te tendré que contar la historia... pero no me hace la mínima gracia.
-¿Pero por qué? ¿Qué pasa?
-Calla y escucha. Tu abuela era prima de los Black de Grimmauld Place, aunque se llevaba muchos años con la señora Black. Bueno, ella se casó con Edgar Kamin, mi padre, un honorable mago de sangre limpia, pero ella no le quería así que se escapó. Me tuvieron a mi, que soy una squib.
-¡mamá! ¿Y cómo no me lo dijiste?
-Una squib era una deshonra en la familia así que tu abuela se deshizo por completo de ella y comenzó una nueva vida como muggle. Como yo soy squib no me es difícil, así que ahora soy prácticamente una muggle. Luego me casé con tu padre, Scott Moore, muggle, no tenía ni idea de que existía la magia. Y te tuvimos a ti. Todos pensábamos que serías muggle, pero tu abuela te caló enseguida. Y por eso te dio el colgante antes de morir, para que supiera de donde vienes.
-¿Y por qué has tardado 15 años en decírmelo?
-No lo he creído necesario...
-Quince años ocultándome quien soy, haciéndome vivir una farsa. ¿Sabes cuantas veces he oído la frase "sangre-sucia" si pasaba por delante de un grupito chismoso? ¡Pero claro a ti eso te da igual! ¡Mientras tu puedas vivir tu estúpida vida muggle en paz!
-¡Adrienne Caroline Moore! ¡No me subas la voz!
-¡Haré lo que me de la gana! ¡Cómo tu has hecho conmigo!
-¿Sabes por qué no te lo dije nunca? ¡Porque sabía que te pondrías así! Eres demasiado infantil para comprender lo mal que me siento cuando hablas de magia. ¿Te crees que a mi no me gustaría tener tus poderes?
-Eres una egoísta. Solo piensas en como te sientes tu...
La puerta se abrió y apareció un señor de unos cuarenta años, rubio y de ojos azules, que se estaba quedando algo calvo.
-Delia, Adrienne, calmaos ya.
El señor Moore era el que acostumbraba a poner paz entre las dos partes femeninas. Adrienne y su madre eran calcos, ambas de pelo negro, liso y brillante y los ojos del más intenso azul. Incluso eran iguales en la manera de pensar y por ello siempre acababan discutiendo. Adrienne cogió su maleta con brusquedad y siguió a su padre fuera de la habitación. Habían preparado un traslador para que volviera a Hogwarts. Abrazó a su padre y le dirigió a su madre una mirada fría.
-Pórtate bien Adrienne, que nos conocemos –le dijo su padre.
-Yo siempre me porto bien papá.
-Ve a decirle algo a tu madre, que sino se va a poner muy triste.
-Lo dudo mucho. No le importo.
-Adrienne, sabes que sí.
Finalmente Adrienne fue hacia su madre y se reconciliaron. En el fondo ella tampoco quería marcharse al colegio enfadada. Tomó la taza entre sus manos y se despidió con la mano de sus padres mientras desaparecía en el torbellino de colores rumbo a Hogwarts.
* * *
Draco Malfoy salía de la clase de Pociones totalmente estresado. Su trabajo lo mantenía demasiado ocupado y además Hermione no quería saber nada de él. Parecía que después de la noche de los dementores por fin ellos dos serían algo más que compañeros de trabajo, pero se equivocaba. Hermione estaba aún si cabe más fría. Le evitaba a toda costa. Draco no era muy paciente y había decidido hacer una cosa, tal vez la más loca de su vida. Y tenía que hacerla ya. De otro modo se volvería atrás. Cerró la puerta de su despacho y tomó un puñado de polvos flu.
* * *
Adrienne aterrizó en el vestíbulo. Toda la gente que se encontraba allí la miró extrañados, y luego todos se le echaron encima esperando que les contara algo. Muchos rumores circulaban por Hogwarts.
-¡Me han dicho que acabaste con todos los dementores!
-¡Me dijeron que habías muerto!
-¿Es verdad que mataste a Krum?
-¿Te echaron un Avada Kedavra y sobreviste? ¿Cómo Harry Potter?
Algunos le estrechaban la mano, gente que no conocía de nada. Adrienne solo quería salir de entre la multitud. Y al parecer alguien escuchó su petición interior, porque tiró de ella y le pasó un brazo por los hombros, bajo la protesta general. La llevó al pasillo más oscuro y la metió en un armario que Adrienne conocía bien: el mismo donde ella se había escondido cuando el chico que la estaba agarrando en aquel momento y Miranda Bessaine se estaban liando.
-¿Qué quieres? –exclamó Adrienne enfadada lanzando la maleta en la oscuridad– ¿Ahora si tienes ganas de verm...
Dick no la dejó continuar y le puso sus labios en la boca. Adrienne lo quería apartar pero él la abrazaba muy fuerte. Finalmente Adrienne le pegó una patada en la entrepierna, lo cual hizo que Dick soltara a Adrienne para agarrarse la dolorida parte de su cuerpo. Adrienne buscó a tientas su maleta por el suelo y cuando la encontró intentó salir del armario. Pero estaba cerrado. Comenzó a golpear las puertas.
-¡Eres idiota!
-¡Solo quiero hablar contigo!
-¡Ya veo! ¿Y la escenita del beso?
-Para hacerte recordar que sientes algo por mi.
-Si, ¡asco!
-Sabes que no, Adrienne. Todavía guardas mi carta.
Adrienne se quedó en silencio.
-Ábreme la puerta –le ordenó- No quiero estar aquí contigo y no tengo varita. -Si estás dispuesta a volver conmigo te estaré esperando. -¡Que me abras la puerta! -Alohomora
Las puertas del armario finalmente se abrieron y Adrienne salió con la sangre hirviendo. Subió a la Torre Gryffindor.
-Bosque nevado.
Pero la señora gorda no le hizo caso.
-¡Mierda! Han debido cambiar la contraseña.
Adrienne se sentó en el suelo apoyada contra la pared, a esperar a que entrara alguien. A esas horas mucha gente entraba volviendo de las clases. Eran las seis. Justin Lons, un alumnos muy guapo de sexto y buscador del equipo de Gryffindor fue el primero en llegar.
-¡Adrienne! ¿Qué haces aquí? ¿Qué tal estás?
-Desde que he llegado no dejan de sucederme desgracias... han cambiado la contraseña mientras estaba en San Mungo.
-Yo te abro: Espejo de plata.
La señora Gorda les dejó pasar y en cuanto Adrienne entró en la sala común ocurrió lo mismo que en el vestíbulo. Finalmente, algo cohibida, se puso a contar la historia, mientras la mayoría escuchaban atentos, y otros se quejaban del alboroto porque tenían que estudiar. Cuando por fin terminó, volvieron a acosarle con preguntas así que decidió subir a su habitación a deshacer su maleta. Su habitación estaba desierta. Era como un refugio de entre toda la multitud ansiosa. Iba guardando las cosas que sus padres le habían traído en el armario canturreando una cancioncilla y pensando en Dick. ¿Volvería con él? Tal vez estaba siendo demasiado dura... ya le había pedido perdón varias veces... y de verdad parecía arrepentido... En el fondo de su maleta encontró los dos pergaminos enrollados uno al lado del otro. Aún no había leído la carta de Daniel. ¿Por eso estaría tan raro? La desenvolvió y al instante comenzaron a sonar los acordes de una canción que le encantaba, "Meet you there" de Simple Plan.
"Querida Adrienne,
En realidad no sé muy bien por qué te escribo esta carta. En primer lugar, recupérate pronto. Lo que pasó anoche me ha hecho pensar mucho en lo que siento hacia ti. Yo te salvé de los dementores y pude crear un patronus corpóreo gracias a ti. Tu haces despertar en mi sentimientos que nadie antes había logrado. Ya sabes que yo soy muy borde, pero tu siempre estás ahí poniéndome una sonrisa. Pero cuando te encontré inconsciente no vi tu sonrisa, solo tu cara sin sentimiento. Creí que habías muerto. Y me di cuenta de que debía dejarte claro mis sentimientos. Si hubieras muerto me habría enfadado mucho conmigo mismo, por haber sido tan cobarde.
Recuerdo como si fuera ayer aquel día de tercero, que yo estaba en la biblioteca, escondido tras una estantería y me descubriste allí cuando chocaste conmigo y te caíste. Salí huyendo ¿te acuerdas? Te tenía miedo. Pero luego en la sala común viniste a donde mí y te disculpaste por si te había hecho daño. Desde entonces somos amigos. Pero tu me gustas desde antes. En primero era demasiado pequeña para saber que sentía, pero en segundo comencé a sobresaltarme si te veía cerca y en tercero fue cuando descubrí que te amaba. Y no lo quise admitir. Me pasé todo cuarto curso intentando decirte lo que sentía, pero no me atreví. Y ahora en quinto primero te pasas babeando por Alex montero y luego te echas de novio a Dick Morans. Yo no tengo nada que ellos tengan, así que sé que yo nunca seré tu novio. Pero espero que sepas que siempre me podrás tener como amigo.
Besos,
Daniel
PD: Escucha atentamente la canción. Sé que te encanta, pero tienes que analizar la letra. En cuanto vuelvas a Hogwarts reúnete conmigo. Si me conoces lo suficiente sabrás donde. Puedes volver a escuchar la canción si enrollas el pergamino y lo vuelves a desenrollar"
Adrienne se dio cuenta de lo que había hecho. Había herido profundamente a Daniel. Miró su reloj. Aún estaba a tiempo. Enrolló el pergamino y lo desenrolló.
Now you're gone
I wonder why you left me here
I think about it on and on and on and on and on again
I know you're never coming back
I hope that you can hear me
I'm waiting to hear from you
Until I do
You're gone away
I'm left alone
A part of me is gone
And I'm not moving on
So wait for me
I know the day will come
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
I wish I could have told you
The things I kept inside
But now I guess it's just too late
So many things remind me of you
I hope that you can hear me
I miss you
This is goodbye
One last time
You're gone away
Im left alone.
A part of me is gone
And im not moving on
So wait for me
I know the day will come
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
I'll meet you theeeeerrrrrrreeeeeeeeeee...
And where I go you'll be there with me
Forever you'll be right here with me
I'll meet you there
No matter where life takes me to
I'll meet you there
And even if I need you here
I'll meet you there
No matter where life takes me
I'll meet you there
And even if i need you
Ill meet you there
Ill meet you there
Ill meet you there
(N/A: Traducción)
Ahora te has ido
Me pregunto porqué me dejaste aquí
Pienso en ello una y otra y otra y otra y otra y otra vez
Sé que nunca vas a volver
Espero que puedas oírme
Estoy esperando a oír de ti
Hasta que lo haga
Tu te has ido lejos
Me has dejado solo
Una parte de mi se ha ido
Y no estoy avanzando
Por eso espérame
Sé que el día llegará
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
Ojalá te hubiera dicho
Las cosas que me guardé dentro
Pero adivino que ya es demasiado tarde
Tantas cosas me recuerdan a ti
Te echo de menos
Esto es adiós
Una ultima vez
Tu te has ido lejos
Me has dejado solo
Una parte de mi se ha ido
Y no estoy avanzando
Por eso espérame
Sé que el día llegará
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo alliiiiiiiiiiiii
Y donde quiera que vaya estarás conmigo
Para siempre tu vas a estarás aquí conmigo
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito aquí
Me reuniré contigo allí
No importa donde me lleve la vida
Me reuniré contigo allí
E incluso si te necesito
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo allí
Me reuniré contigo allí
Adrienne salió corriendo de la sala común. Pasaban de las siete. Y Daniel llevaría esperándole allí mucho tiempo. Apretaba con todas sus fuerzas el pergamino en su mano. Nadie conocía aquel atajo. Solo Daniel y ella. Tiró del brazo de la armadura y unos escalones aparecieron ante ella. Luego salió por la ventana. Efectivamente Daniel estaba allí, en el tejado, sentado mientras el aire frío de diciembre le azotaba el cabello castaño. Adrienne caminó hasta ponerse a su lado.
-Siento haberte hecho esperar tanto. ¿Podrás perdonarme?
*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^* Wajajajajaja!!! Cada vez soy peor!! :P :P ¿Qué dirá Adrienne? ¿Qué hará Daniel? ¿Qué pasará con Dick? ¿a dónde demonios ha ido Malfoy? Todo esto y mucha más en el próximo y por desgracia, ultimo capitulo! :( :( se que todos mis fans se pondrán tristes pero esto es lo que hay. Os recuerdo que si quereis que os dedique el fic me dejais una review, porque va ir dedicado a todos los q me dejen review. Se que mucha más gente lo lee (ay! esos remolones del foroooo!!) pero esq no los voy a poder recordar a todos! Entonces hay ley: si hay review hay dedicatoria... :P
Bueno, espero no tardar mucho con el siguente pero ya habeis visto que este es bastante largo!! :D :D jejeje no os quejareis! Aunq claro la canción abulta lo suyo. (siento ahberla espaciado tanto pero sino quedaba todo como en un parrafo :s) Parece más dedicada a alguien que se ha muerto, pero os recuerdo que Daniel se sentía como si Adrienne hubiera muerto, porque aunque sabe que se va a recuperar, tiene muy reciente todo lo sucedido :(
Se que aunq todos ansiais saber que ocurre entre Malfoy y hermi eso os lo dejo para el siguente capitulo! Q sino este iba a ser eterno y me ibais a matar de lo que tardaría!
Muchismos besos a todos!!
**MIKITA_WOOD** **AINHOA**
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