N/A: Bien, ya biene el segundo cap. Este cap contiene Spoilers del 5º libro, así que si alguien no lo ha leido, puede saltarselo. Bueno, hos dejos con el cap!

LA VIDA DE HARRY

CAPITULO 2: EL BESO Y LA MUERTE

Cayó de golpe en el suelo duro. Era una habitacion muy espaciosa, llena de cosas fascinantes. Habia un monton de cojines a un lado, como si los acabara de usar alguien. Estaba decorado con cosas navideñas. Pese a que la sala era muy grande, solo habian dos personas en aquella aula. Un chico, Harry, y una chica, la china de la foto, estaban mirandose bajo el muerdago. Dudley se hacercó cauteloso a ellos.

- Realmente me gustas, Harry.-decia la chica.

Dudley se quedó quieto. La cara de Harry enrojeció. Dudley se fijó en un detalle. Ella estaba llorando. El chico corrió a duras penas (por las grasas que le sobraban) hacia la pareja. Se metió entre Harry y ella y empezó a hacer señas y a gritarle a su primo.

- Harry! Que hacemos aquí? Porfavor sacame de aquí.

Pero el muchacho no parecia verlo, pues seguia mirando empanado a su compañera. Dudley intentó poner una mano en su hombro, pero solo traspasó a su primo. Se apartó asombrado. Justo un segundo despues, la chica se tiró a los brazos de Harry aun llorando. Harry la miró sorprendido. Le acarició un poco la cabeza, le dio unas palmaditas en la espalda y la separó un poco. Estaban muy cerca. Dudley observó como su primo tenia una extraña mirada, como de ansia, ambicion. Como un deseo que tenia desde hacia ya tiempo y que estaba a punto de cumplir. Era esa la chica que le gustaba? Porfin acortaron distancias y, con un lento movimiento, Harry la besó. Dudley los miró sorprendido. Se dio cuenta repentinamente que Harry estaba raro. Lo recordaba mas alto y mas mayor. Ahí debia tener unos... 15 años de edad. Pero como era posible que rejuveneciera? Y no podia tocarlo. Era como una imagen, un recuerdo... Un recuerdo? Si, talvez era eso. Esa escena era un recuerdo de Harry. Pero...se podian guardar los recuerdos en una massa plateada?

En ese momento se separaron. Harry estaba muy rojo y ella tambien, aunque no se le notaba tanto.

- Bu-bueno...-murmuró Harry.

Se quedaron en silencio, mirandose. Parecian muy nerviosos.

- Cho...yo...- intentó decir Harry.

Así que se llamaba Cho. Era un nombre extraño.

Harry hizo el gesto de irse, pero ella lo cogió de la muñeca. Él se giró. Ella aun lloraba. Despues, Cho abrió la boca como si fuera a decirle algo, pero lo dejó marchar. Harry cerró la puerta antes de que Dudley pudiera seguirle y se quedó allí, encerrado. Volvió a mirar a la chica china. Se habia sentado con las manos en la cara, llorando. Solo fue un murmullo, pero Dudley pudo entenderlo perfectamente:

- Lo siento, Cedric...

Todo oscureció. Se vio envuelto por una massa de colores y texturas, y pronto, todo se aclaró. Dudley miró donde estaba. Otro recuerdo. Estaba encima de unas escaleras. Harry y otro chico, uno que salia en una fotografia, aunque no sabia cual de los tres era (Dean, Neville o Seamus) estaban encima de las escaleras tambien, este ultimo cayendose. Algo de cristal acababa de caer al suelo. Ellos lo miraban horrorizados. Del objeto de cristal salia una mujer de gafas extrañas, diciendo algo, pero no pudo oirlo. Pronto la mujer se esbaneció.

- Lo fiento Garry...-dijo el chico gordito, como si tuviera un problema en la boca.

- No importa...- dijo su primo.- ahora...

- Dubbledore!!

-Que?

- Ef Dubbledore!

Dudley se giró y observó el rostro viejo y barbudo de un brujo, que salió disparado hacia abajo. Por primera vez, Dudley se fijo en lo que estaba pasando unos metros bajo ellos.

Abajo, todo eran hechizos. El hombre de barba blanca ya tenia muchas personas atadas. Solo ese tal Sirius y una mujer luchaban.

- Vamos, puedes hacerlo mejor!- gritó el hombre, mofandose.

La mujer lanzó otro hechizo, el cual le dio de pleno en el pecho. El hombre empezó a caer hacia atrás. Vio la cara de horror de su primo. Así habia muerto ese hombre? Finalmente, cayó tras un velo que habia tras él. Harry se levantó al instante, gritando confuso. Se olvidó de todo y corrió hacia él.

- ¡SIRIUS! ¡SIRIUS!

Dudley vio como su primo seguia gritando ese nombre. Repentinamente, un hombre de rostro cansado (que ya habia visto dos veces) lo cogia y le impedia el paso. Dudley no oía lo que decian. Se hacercó a ellos, pero en vez de escucharlos, se quedó mirando el velo. Tenia un movimiento alentador...

Se hacercó aún mas. Iba a tocarlo, queria hacerlo. Y si miraba detrás? Veria ese cadaver? El cadaver del hombre llamado Sirius? Tenia el velo a tocar. Intentó cogerlo, pero sus manos lo atravesaron. Dio la vuelta y miró tras el velo. No habia absolutamente nada, lo que le extrañó. El hombre se habia volatilizado.

Repentinamente oyó un grito y un bufido. Miró hacia atrás. Todos insistian a su primo que volviera abajo, pero él empezaba ya a subir por las escaleras, tras la mujer que habia matado a Sirius.

Dudley empezó a seguirlos. Sus fofas piernas no podian mas y llegó arriba de milagro. Cuando llegó a una sala donde habian cerebros por el suelo y cuatro personas mas, Harry ya habia cerrado la puerta del otro lado. Vio como la mejor amiga de Harry, esa tal Hermione, estaba en el suelo inconsciente. Una chica peliroja se sostenia el tobillo y parecia acabar ed despertar de un largo sueño. Otra chica se ponia ya en pie. Era rubia, con rabanos a modo de pendientes, un collar de tapones de corcho y la varita tras la oreja. Tenia unos ojos grandes que daban miedo. Por ultimo, se fijó en Ron, que se intentaba desliar de un cerecbro que tenia al cuello. Cuando porfin lo consiguió soltó una risita estupida.

- Mira tengo moratones, ha, ha, ha.- dijo, con voz ahogada.

- Ron, callate.- le espetó la peliroja.

Ron se levantó.

- Donde habra ido Harry?- comentó la chica rubia.

- Ni idea.

- Ginny, Luna, mirad!-dijo Ron, señalando a su amiga.

Las dos miraron a Hermione y luego al pelirojo.

- Es Hermione! Que guapa está, eh?- dijo, y soltó otra carcajada.

Las dos chicas lo miraron sorprendidas, y la rubia rió un poco, pero la otra le echó una mirada como diciendo "no es el mejor momento para bromas"

Todo se volvió otra vez de color. La habitacion se difuminó a sus pies y se sitnió como si volara. Dudley fue arrastrado por otra corriente.