Harry Potter es propiedad de J. K. Rowling
Capítulo 3 Así Comenzó
Valle de Godrick 15 años atrás
-Oh vamos Lily, una vez más, ¿SI..?
-¡James!, ya duérmete- le repuso Lily
-Solo una vez más-.
-Está bien, pero te duermes enseguida-
Siempre era así, los Potter eran una de las familias mágicas mas queridas y en cuanto a ellos se refería, Lily siempre reprochaba a su marido por las locuras que planeaba hacer, pero James tenía algo que siempre lograba que Lily cediera.
James acariciaba el abdomen de su mujer, se acercó lentamente hacia el y le susurró.
-Un mes más- y siguió acariciándolo
-James- dijo Lily -¿Seguro que no deseas saber si es niño o niña?-
-¡Por supuesto que no!- le contestó algo indignado -Lily, sabes que si es sorpresa es mucho mejor-
-Esta bien, yo solo lo decía por el nombre-
-No te preocupes, si es niña se llamará Jamie- contestó orgulloso pero Lily puso cara de pocos amigos.
Solo bromeaba cariño, si es niña se llamará como tu: Lily Anne-
James volteó para ver la expresión de su esposa, la cual parecía que algo le daba risa.
Si se parece a mi se llamará James, pero si se parece a ti, se llamará Harry, siempre me ha gustado ese nombre-
Los dos sonrieron y se durmieron.
Justo a la media noche Lily se levantó, le dolía fuertemente el abdomen, movió a James para que se despertara.
-James, James, algo no está bien- dijo
James inmediatamente se despertó-
-Me duele, ¡ay!-
-¡Cálmate Lily, vamos al hospital, ¿Puedes aparecerte?.-
Lily negó con la cabeza. Para poderse aparecer se necesitaba una gran concentración y Lily no disponía de ella, todo le dolía
-James, ayúdame, vamos al hospital mas cercano-
James no lo pensó dos veces, cogió a Lily, se puso su capa de invisibilidad y en poco tiempo ambos se encontraban volando sobre la cuidad.
-Lily, háblame, no te rindas-
James divisó un hospital muggle y bajó rápidamente, se quitó su capa sin importarle que alguien los pudiera ver, corrió hacia adentro con Lily en brazos.
-Necesita Ayuda- gritó
E inmediatamente varias enfermeras corrieron a socorrerla
-No se preocupe señor?- -Potter- contestó
no se preocupe señor Potter, su esposa se pondrá bien-
Mientras esto ocurría, en una de las oficinas de las planta alta
-Lo sentimos mucho señor Jenkins, sabemos que fue una imprudencia de nuestra parte, será compensado-
-¡NO!- gritó el señor Jenkins
Robert Jenkins era un señor de complexión mediana, su cabello era negro y lacio y sus ojos de un color verde oscuro.
-No, usted no entiende, a mi esposa le diagnosticaron que nunca tendría hijos, pero cuando salió embarazada, nunca la había visto tan feliz-
-Quiero que quede bien claro Dr. Sawyer, amo a mi esposa y si un patán como usted le va a robar su felicidad, acabaré con todo tu carrera, y sabe que puedo hacerlo-.
En los ojos del Dr. Sawyer se percibía temor. -Pero no sabe lo que dice- dijo este.
-Es un bebé, será difícil conseguir uno y más que se parezca a ustedes-
los dos se miraron fijamente por unos instantes.
Tocaron a la puerta.
-Adelante-
Era una enfermera Dr. Sawyer, hay una emergencia en partos, y usted es el único Disponible- -Voy enseguida- contestó mirando a la enfermera - y en cuanto a usted señor Jenkins haré lo que pueda-.
Abajo en la recepción, las enfermeras llenaban de preguntas a James
¿quién es su médico de cabecera? ¿Tiene alguna cita para un hospital? ¿En donde Viven? ¿Teléfono de algún Familiar?
Pero James no sabía que responder
No lo se, lo único que sé es que el bebé debería nacer dentro de un mes, ¿Qué le pasa a mi Lily?, ¿estará bien?-
James salió de inmediato del hospital, era una suerte que su lechuza lo hubiera seguido, la llamó y mandó mensajes para Sirius, Remus, Peter y los papás de Lily, que no tardaron mas de una en llegar.
-¿Cómo esta Lily?- preguntaron
pero James estaba hecho un manojo de nervios hacia casi una hora que no sabía nada de Lily.
En el quirófano el Dr. Sawyer y una enfermera atendían el parto.
Lily estaba casi inconsciente, la habían anestesiado para aliviar su dolor, así que tuvieron que practicarle una cesárea y cual fue su sorpresa, al ver que en lugar de un niño había dos, y gemelos.
El Dr. Sawyer sabía que esta era su oportunidad, los padres no sabían nada acerca del bebé que esperaba, pero había un inconveniente, la enfermera.
-Susy- dijo Sawyer -¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí?-
Minutos más tarde Susy la enfermera salió del cuarto con un bulto, al parecer eran los trapos sucios.
-Señor Potter, Felicidades, es un varón, y muy sano-
James no cabía de felicidad y que decir de los demás.
-Si gusta pasar a verlo-
En la habitación Lily abrazaba a su pequeño retoño
-Es idéntico a ti- dijo
-Tienes razón cariño, pero sus ojos, son idénticos a los tuyos, verde esmeralda-
++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Unos pisos más arriba
-¿Robert?- preguntaba la voz de una mujer muy bella, su tez era clara y de cabello negro azabache con dos grandes ojos azules.
-Aquí estoy Trish-
-¿Dónde esta mi bebé, quiero verlo-
-No te preocupes amor, hubo algunas complicaciones, pero ya esta mejor, seguro que lo traen en cualquier momento-.
Robert miró hacia la puerta, deseaba con todo su corazón que se abriera y su bebé entrará. De pronto, Susy la enfermera entro con un bulto en sus brazos.
-oh, mire, aquí esta su bebé- la enfermera se lo entregó a Trish.
-Es hermoso- suspiró- y mira tiene tus ojos, son verdes-
-¿Cómo lo llamarás cariño?- preguntó Robert con curiosidad.
Se llamará Henry.
Capítulo 3 Así Comenzó
Valle de Godrick 15 años atrás
-Oh vamos Lily, una vez más, ¿SI..?
-¡James!, ya duérmete- le repuso Lily
-Solo una vez más-.
-Está bien, pero te duermes enseguida-
Siempre era así, los Potter eran una de las familias mágicas mas queridas y en cuanto a ellos se refería, Lily siempre reprochaba a su marido por las locuras que planeaba hacer, pero James tenía algo que siempre lograba que Lily cediera.
James acariciaba el abdomen de su mujer, se acercó lentamente hacia el y le susurró.
-Un mes más- y siguió acariciándolo
-James- dijo Lily -¿Seguro que no deseas saber si es niño o niña?-
-¡Por supuesto que no!- le contestó algo indignado -Lily, sabes que si es sorpresa es mucho mejor-
-Esta bien, yo solo lo decía por el nombre-
-No te preocupes, si es niña se llamará Jamie- contestó orgulloso pero Lily puso cara de pocos amigos.
Solo bromeaba cariño, si es niña se llamará como tu: Lily Anne-
James volteó para ver la expresión de su esposa, la cual parecía que algo le daba risa.
Si se parece a mi se llamará James, pero si se parece a ti, se llamará Harry, siempre me ha gustado ese nombre-
Los dos sonrieron y se durmieron.
Justo a la media noche Lily se levantó, le dolía fuertemente el abdomen, movió a James para que se despertara.
-James, James, algo no está bien- dijo
James inmediatamente se despertó-
-Me duele, ¡ay!-
-¡Cálmate Lily, vamos al hospital, ¿Puedes aparecerte?.-
Lily negó con la cabeza. Para poderse aparecer se necesitaba una gran concentración y Lily no disponía de ella, todo le dolía
-James, ayúdame, vamos al hospital mas cercano-
James no lo pensó dos veces, cogió a Lily, se puso su capa de invisibilidad y en poco tiempo ambos se encontraban volando sobre la cuidad.
-Lily, háblame, no te rindas-
James divisó un hospital muggle y bajó rápidamente, se quitó su capa sin importarle que alguien los pudiera ver, corrió hacia adentro con Lily en brazos.
-Necesita Ayuda- gritó
E inmediatamente varias enfermeras corrieron a socorrerla
-No se preocupe señor?- -Potter- contestó
no se preocupe señor Potter, su esposa se pondrá bien-
Mientras esto ocurría, en una de las oficinas de las planta alta
-Lo sentimos mucho señor Jenkins, sabemos que fue una imprudencia de nuestra parte, será compensado-
-¡NO!- gritó el señor Jenkins
Robert Jenkins era un señor de complexión mediana, su cabello era negro y lacio y sus ojos de un color verde oscuro.
-No, usted no entiende, a mi esposa le diagnosticaron que nunca tendría hijos, pero cuando salió embarazada, nunca la había visto tan feliz-
-Quiero que quede bien claro Dr. Sawyer, amo a mi esposa y si un patán como usted le va a robar su felicidad, acabaré con todo tu carrera, y sabe que puedo hacerlo-.
En los ojos del Dr. Sawyer se percibía temor. -Pero no sabe lo que dice- dijo este.
-Es un bebé, será difícil conseguir uno y más que se parezca a ustedes-
los dos se miraron fijamente por unos instantes.
Tocaron a la puerta.
-Adelante-
Era una enfermera Dr. Sawyer, hay una emergencia en partos, y usted es el único Disponible- -Voy enseguida- contestó mirando a la enfermera - y en cuanto a usted señor Jenkins haré lo que pueda-.
Abajo en la recepción, las enfermeras llenaban de preguntas a James
¿quién es su médico de cabecera? ¿Tiene alguna cita para un hospital? ¿En donde Viven? ¿Teléfono de algún Familiar?
Pero James no sabía que responder
No lo se, lo único que sé es que el bebé debería nacer dentro de un mes, ¿Qué le pasa a mi Lily?, ¿estará bien?-
James salió de inmediato del hospital, era una suerte que su lechuza lo hubiera seguido, la llamó y mandó mensajes para Sirius, Remus, Peter y los papás de Lily, que no tardaron mas de una en llegar.
-¿Cómo esta Lily?- preguntaron
pero James estaba hecho un manojo de nervios hacia casi una hora que no sabía nada de Lily.
En el quirófano el Dr. Sawyer y una enfermera atendían el parto.
Lily estaba casi inconsciente, la habían anestesiado para aliviar su dolor, así que tuvieron que practicarle una cesárea y cual fue su sorpresa, al ver que en lugar de un niño había dos, y gemelos.
El Dr. Sawyer sabía que esta era su oportunidad, los padres no sabían nada acerca del bebé que esperaba, pero había un inconveniente, la enfermera.
-Susy- dijo Sawyer -¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí?-
Minutos más tarde Susy la enfermera salió del cuarto con un bulto, al parecer eran los trapos sucios.
-Señor Potter, Felicidades, es un varón, y muy sano-
James no cabía de felicidad y que decir de los demás.
-Si gusta pasar a verlo-
En la habitación Lily abrazaba a su pequeño retoño
-Es idéntico a ti- dijo
-Tienes razón cariño, pero sus ojos, son idénticos a los tuyos, verde esmeralda-
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Unos pisos más arriba
-¿Robert?- preguntaba la voz de una mujer muy bella, su tez era clara y de cabello negro azabache con dos grandes ojos azules.
-Aquí estoy Trish-
-¿Dónde esta mi bebé, quiero verlo-
-No te preocupes amor, hubo algunas complicaciones, pero ya esta mejor, seguro que lo traen en cualquier momento-.
Robert miró hacia la puerta, deseaba con todo su corazón que se abriera y su bebé entrará. De pronto, Susy la enfermera entro con un bulto en sus brazos.
-oh, mire, aquí esta su bebé- la enfermera se lo entregó a Trish.
-Es hermoso- suspiró- y mira tiene tus ojos, son verdes-
-¿Cómo lo llamarás cariño?- preguntó Robert con curiosidad.
Se llamará Henry.