Harry Potter es propiedad de J. K. Potter.
Muchas gracias por los reviews, les garantizo que la historia llegará al final.
Capitulo 6 La Huida.
En la mansión Ryddle un gran número de motífagos se habían reunidos, desde hacía días Voldemort los estaba llamando, algo grande ocurría y en cuanto a Henry las cosas no habían cambiado mucho, con la excepción de que ahora Voldemort lo instruía.
-Eres un mago y Yo te enseñaré a serlo-
-El poder es lo que rige al mundo-
-Elimina lo que estorbe-.
Era el tipo de cosas que Voldemort le decía y maldiciones lo que trataba de enseñarle. Pero como Henry era muy poco diestro recibía los castigos personalmente de la mano de Voldemort.
Había sentido tantas veces el dolor que ya era parte de él, y su único aliado en ese infierno era Snape ya que siempre que abría los ojos él estaba ahí, también le ayudaba algo con los encantamientos básicos pero parecía que nada le salía bien.. Ya estaba resignado a morir en ese lugar.
Cierta tarde Snape estaba mas pálido de lo normal, estaba sentado en un rincón con los ojos cerrados, parecía que meditaba.
Voldemort entró, Snape se dirigió hacia él, le susurró algo al oído, el rostro de Voldemort cambió por completo, le dijo algo a Snape y éste se levantó la manga de l brazo izquierdo mostrándole la marca tenebrosa, Henry no la alcanzó a distinguir muy bien, pero en cuanto Voldemort la tocó esta empezó a brillar intensamente. A Henry le sorprendió ver la cara de dolor en el inexpresivo rostro de Snape.
Voldemort salió del cuarto y Severus se dirigió hacia Henry.
-Nos vamos- le dijo.
Henry no comprendió , pero Snape lo tomó del brazo y jaló de él.
-No te separes de Mí-
Todos se encontraban reunidos en la sala, incluido el señor Rubio, Henry no aguantó su ira y se abalanzó sobre él. Pero Snape lo sujetó fuertemente.
-Lo odio- susurró para si, entonces Voldemort habló.
-¡Vienen para acá!, los de la orden vienen a Atacarnos, tenemos que movernos a nuestro escondite secundario-
-¿Y porque no los combatimos?- preguntó uno de los mortífagos. -Somos más poderosos ahora que usted está con nosotros-
Voldemort rió -Tienes razón- dijo sarcásticamente.
Snape palideció aún más.
-Pero hoy no- dijo, -hay algo muy importante que no puedo dejar pasar y un combate con los aurores nos debilitaría, prepárense salimos mañana por la mañana.-
En eso la puerta principal de la mansión se abrió y el hombre pequeño al que todos llamaban Wormtail entró con otros mortífagos, llevaban a un hombre desmayado, su cabello era largo y negro.
Henry oyó como Snape dijo ahogadamente
-Black-.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++ FLASH BACK
La mansión Ryddle era tétrica inclusive en el día y por esa razón, las personas que vivían a sus alrededores nunca se acercaban, en sus alrededores una sombra se movía.
Era un perro grande y negro que eludía a los guardias uno por uno, cuando estuvo lo suficientemente cerca de la casa el perro se transformó en un hombre: SIRIUS BLACK.
Después de descubrir como atravesar el cerco mágico que rodeaba a la mansión entrar a la casa no podía ser tan difícil. La entrada estaba cerca, solo entraría, eliminaría a unos cuantos mortífagos y sacaría al chico de ahí, no había nada que lo detuviera, pero entonces un hombre bajito salió d la casa. Sirius lo reconoció de inmediato.
-Wormtail, maldito traidor-
Se volvió a transformar en perro y siguió al maldito, primero con la mirada y luego cuando más lejos llegó a pie.
Iba solo, nada le impediría exterminarlo, se acercó lo mas que pudo, se colocó a sus espaldas, regresó a ser humano y le tocó la espalda con su varita.
Wormtail volteó , su rostro jamás se había vuelto tan pálido.
-Bla... Bla.. Black- dijo titubearte, hubiera gritado si Sirius no le hubiera hecho la señal de que se callara o acabaría mas rápido con él.
-Hola Peter-
-Tu no me matarías- dijo asustado. -Harry me dejó ir, el no quería que tu me mataras-
Sirius rió
-Harry no esta aquí, además no creo que se moleste, no después de lo que hiciste-.
Wormtail quedó sin palabras, Black lo tenía acorralado, la varita le apuntaba directo y empezó a reír.
Sirius quedo perplejo, pero toda duda se desvaneció cuando sintió un fuerte golpe en su cabeza, cayó al suelo y vio a otros dos mortífagos detrás suyo. Su varita había caído muy lejos.
-Maldito Wormtail, debí suponerlo, siempre andas con tus guardaespaldas-
Wormtail rió y le dio una patada dejándolo inconciente.
FIN DEL FLASH BACK ++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Henry oyó decir ahogadamente a Snape.
-BLACK-.
Voldemort los miró fijamente, los mortífagos lanzaron a Sirius frente a su maestro.
-¡Enverate!-
Sirius recuperó el conocimiento, estaba en un problema muy grave, nadie sabía que estaba ahí, miró a Snape.
-Genial- pensó -Todo lo que necesito-
Snape estaba furioso, todo su plan se venía abajo, sabía que atacar la mansión era imposible y muy riesgoso, además de que nadie podía aparecerse o desaparecerse si no era mortífago. Asi que le dijo a Voldemort que Dumbledore había descubierto una forma de entrar y que estaba a punto de atacarlos. Se trasladarían a su segundo cuartel y ahí los detendrían, todo era perfecto, pero ahora.
-Black, Black, Black, la oveja negra de la familia- dijo Voldemort y todos los presentes rieron
-Pensaste que podrías atacarnos tu solo o todos tus aliados están afuera esperándonos.-
Sirius sabia que si decía que venía solo lo aniquilarían de inmediato, así que guardo silencio.
-Te enviaremos como advertencia a Dumbledore, ¡Snape acaba con este intruso!-
Snape estaba paralizado, pero oyó en su mente como Voldemort le decía: "Ahora veremos donde esta tu lealtad".
Snape le susurró a Henry -Recuerda lo que hemos practicado y no tengas miedo-.
Se acercó a Sirius y lo apuntó con su varita.
-¡ATRÉVETE SNIVELLUS!-Gritó Sirius
-AVADA-
Sirius cerró los ojos
-KEDAVRA-
Un rayo verde atravesó la habitación.
Sirius abrió los ojos, justo a su lado un mortífago se desplomaba. Todos se quedaron inmóviles a la cual Sirius aprovechó para tomar la varita del mago caído.
-¡Traidor!- gritó Voldemort, -Maten al traidor-
Snape se lanzó sobre Henry, el cual comprendió de inmediato lo que sucedía.
Maldiciones volaron por todo el lugar, el trío se defendía lo mejor que podía, era una suerte que Henry tuviera buenos reflejos ya que lograba esquivar la maldiciones. Los tres lograron saltar por una ventana., Sirius cayó justo cerca de su varita, soltó la del mortífago y tomó la suya.
Snape tomó a Henry de los hombros.
-¡CORRE!- le gritó
Henry obedeció, salio corriendo tropezándose justo enfrente de Sirius, se incorporó y siguió su huida hacia los árboles cercanos. Sirius y Snape se pegaron espalda a espalda. Los mortifagos ya los rodeaban.
-Va a ser un horror morir a tu lado- dijo Sirius con su característico humor.
- lo mismo digo, estúpido Black, ¿ al menos viene alguien en nuestro apoyo?-
Por los gruñidos que salieron de la boca de Sirius supo que no era así.
Empezó la lucha, varios mortifagos caían inconscientes pero eran demasiados para ellos.
Una maldición le dio directo a Sirius el cual salio varios metro hacia atrás, no había sido mortal ya que todavía respiraba. Snape como pudo levantó Sirius y lo llevó hasta es bosque que rodeaba la mansión.
-Maldición Black, y todavía te salvo, debo estar volviéndome loco.-
Llegó hasta un claro, en donde ya no pudo avanzar más, los motífagos le dieron alcance y a la cabeza de ellos iba Voldemort.
La marca tenebrosa le escocía el brazo el dolor era terrible, asi que soltó a Sirius.
-No te queda salida Traidor- gritó Voldemort
Snape sabía que tenía razón.
-¡CRUCIO!-
El cuerpo de Snape se retorcía de dolor y a eso añadido el ardor en su brazo, sentía que moría.
Voldemort se acercó.
-Ya no necesitarás esto- dijo y con la mano que no sujetaba la varita tocó la marca del brazo de Snape, el cual se convulsionó aún más, la marca empezó a desaparecer pero en su lugar una mancha negra apareció y no solo en su lugar sino que esta se empezaba a esparcir por el resto de su brazo y torso.
Los mortífagos reían a carcajadas.
-¡EXPELIARMUS!- se oyó de entra las risas y Voldemort junto a su varita salieron volando hacia los árboles.
-¿qué!- gritó y vio como a la orilla del claro Henry le apuntaba directamente hacia él.
Uno de los mortífagos le lanzó una maldición asesina a Henry el cual no podía moverse debido al esfuerzo realizado, estaba listo para reunirse con sus padres.
Pero Sirius que había recobrado el conocimiento saltó para quitarlo del camino, la maldición golpeó la punta del zapato de Sirius haciendo que este saliera disparado.
Voldemort recuperó su varita mataría a ambos, fue hasta ellos y los apuntó.
Henry vio directo sus ojos y por primera vez no sintió miedo, sino otra cosa, algo mucho mas poderoso, ODIO.
Lo último que vio fue una gran luz blanca que lo cubría del todo, perdió el conocimiento.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++-.
Abrió los ojos, la luz del día se los lastimaba, pensó que todo había sido un sueño ya que su cuerpo no le dolía, pero pronto supo que no era así.
Su cuerpo estaba vendado, estaba seguro que seguía en la mansión, pero al observar mejor notó que no era así. El lugar parecía mas bien una enfermería, había varias camas y las estanterías estaban llenas de frascos los cuales supuso que eran jarabes. Miró a su alrededor y a unas camas de distancia yacía una figura familiar: Snape.
No traía camisa, pero todo su brazo y parte de su torso estaba vendado, al parecer estaba dormido. En ese momento recordó lo que había sucedido, trató de incorporarse pero su cuerpo no le respondía.
La puerta se abrió y en lugar de Voldemort un hombre muy viejo de barbas largas y cabellos plateados entró, venia vestido de colores muy llamativos y unas gafas de media luna decoraban sus brillantes ojos azules, se acercó lentamente a Henry.
-Hola, yo soy Albus Dumbledore-
Muchas gracias por los reviews, les garantizo que la historia llegará al final.
Capitulo 6 La Huida.
En la mansión Ryddle un gran número de motífagos se habían reunidos, desde hacía días Voldemort los estaba llamando, algo grande ocurría y en cuanto a Henry las cosas no habían cambiado mucho, con la excepción de que ahora Voldemort lo instruía.
-Eres un mago y Yo te enseñaré a serlo-
-El poder es lo que rige al mundo-
-Elimina lo que estorbe-.
Era el tipo de cosas que Voldemort le decía y maldiciones lo que trataba de enseñarle. Pero como Henry era muy poco diestro recibía los castigos personalmente de la mano de Voldemort.
Había sentido tantas veces el dolor que ya era parte de él, y su único aliado en ese infierno era Snape ya que siempre que abría los ojos él estaba ahí, también le ayudaba algo con los encantamientos básicos pero parecía que nada le salía bien.. Ya estaba resignado a morir en ese lugar.
Cierta tarde Snape estaba mas pálido de lo normal, estaba sentado en un rincón con los ojos cerrados, parecía que meditaba.
Voldemort entró, Snape se dirigió hacia él, le susurró algo al oído, el rostro de Voldemort cambió por completo, le dijo algo a Snape y éste se levantó la manga de l brazo izquierdo mostrándole la marca tenebrosa, Henry no la alcanzó a distinguir muy bien, pero en cuanto Voldemort la tocó esta empezó a brillar intensamente. A Henry le sorprendió ver la cara de dolor en el inexpresivo rostro de Snape.
Voldemort salió del cuarto y Severus se dirigió hacia Henry.
-Nos vamos- le dijo.
Henry no comprendió , pero Snape lo tomó del brazo y jaló de él.
-No te separes de Mí-
Todos se encontraban reunidos en la sala, incluido el señor Rubio, Henry no aguantó su ira y se abalanzó sobre él. Pero Snape lo sujetó fuertemente.
-Lo odio- susurró para si, entonces Voldemort habló.
-¡Vienen para acá!, los de la orden vienen a Atacarnos, tenemos que movernos a nuestro escondite secundario-
-¿Y porque no los combatimos?- preguntó uno de los mortífagos. -Somos más poderosos ahora que usted está con nosotros-
Voldemort rió -Tienes razón- dijo sarcásticamente.
Snape palideció aún más.
-Pero hoy no- dijo, -hay algo muy importante que no puedo dejar pasar y un combate con los aurores nos debilitaría, prepárense salimos mañana por la mañana.-
En eso la puerta principal de la mansión se abrió y el hombre pequeño al que todos llamaban Wormtail entró con otros mortífagos, llevaban a un hombre desmayado, su cabello era largo y negro.
Henry oyó como Snape dijo ahogadamente
-Black-.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++ FLASH BACK
La mansión Ryddle era tétrica inclusive en el día y por esa razón, las personas que vivían a sus alrededores nunca se acercaban, en sus alrededores una sombra se movía.
Era un perro grande y negro que eludía a los guardias uno por uno, cuando estuvo lo suficientemente cerca de la casa el perro se transformó en un hombre: SIRIUS BLACK.
Después de descubrir como atravesar el cerco mágico que rodeaba a la mansión entrar a la casa no podía ser tan difícil. La entrada estaba cerca, solo entraría, eliminaría a unos cuantos mortífagos y sacaría al chico de ahí, no había nada que lo detuviera, pero entonces un hombre bajito salió d la casa. Sirius lo reconoció de inmediato.
-Wormtail, maldito traidor-
Se volvió a transformar en perro y siguió al maldito, primero con la mirada y luego cuando más lejos llegó a pie.
Iba solo, nada le impediría exterminarlo, se acercó lo mas que pudo, se colocó a sus espaldas, regresó a ser humano y le tocó la espalda con su varita.
Wormtail volteó , su rostro jamás se había vuelto tan pálido.
-Bla... Bla.. Black- dijo titubearte, hubiera gritado si Sirius no le hubiera hecho la señal de que se callara o acabaría mas rápido con él.
-Hola Peter-
-Tu no me matarías- dijo asustado. -Harry me dejó ir, el no quería que tu me mataras-
Sirius rió
-Harry no esta aquí, además no creo que se moleste, no después de lo que hiciste-.
Wormtail quedó sin palabras, Black lo tenía acorralado, la varita le apuntaba directo y empezó a reír.
Sirius quedo perplejo, pero toda duda se desvaneció cuando sintió un fuerte golpe en su cabeza, cayó al suelo y vio a otros dos mortífagos detrás suyo. Su varita había caído muy lejos.
-Maldito Wormtail, debí suponerlo, siempre andas con tus guardaespaldas-
Wormtail rió y le dio una patada dejándolo inconciente.
FIN DEL FLASH BACK ++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Henry oyó decir ahogadamente a Snape.
-BLACK-.
Voldemort los miró fijamente, los mortífagos lanzaron a Sirius frente a su maestro.
-¡Enverate!-
Sirius recuperó el conocimiento, estaba en un problema muy grave, nadie sabía que estaba ahí, miró a Snape.
-Genial- pensó -Todo lo que necesito-
Snape estaba furioso, todo su plan se venía abajo, sabía que atacar la mansión era imposible y muy riesgoso, además de que nadie podía aparecerse o desaparecerse si no era mortífago. Asi que le dijo a Voldemort que Dumbledore había descubierto una forma de entrar y que estaba a punto de atacarlos. Se trasladarían a su segundo cuartel y ahí los detendrían, todo era perfecto, pero ahora.
-Black, Black, Black, la oveja negra de la familia- dijo Voldemort y todos los presentes rieron
-Pensaste que podrías atacarnos tu solo o todos tus aliados están afuera esperándonos.-
Sirius sabia que si decía que venía solo lo aniquilarían de inmediato, así que guardo silencio.
-Te enviaremos como advertencia a Dumbledore, ¡Snape acaba con este intruso!-
Snape estaba paralizado, pero oyó en su mente como Voldemort le decía: "Ahora veremos donde esta tu lealtad".
Snape le susurró a Henry -Recuerda lo que hemos practicado y no tengas miedo-.
Se acercó a Sirius y lo apuntó con su varita.
-¡ATRÉVETE SNIVELLUS!-Gritó Sirius
-AVADA-
Sirius cerró los ojos
-KEDAVRA-
Un rayo verde atravesó la habitación.
Sirius abrió los ojos, justo a su lado un mortífago se desplomaba. Todos se quedaron inmóviles a la cual Sirius aprovechó para tomar la varita del mago caído.
-¡Traidor!- gritó Voldemort, -Maten al traidor-
Snape se lanzó sobre Henry, el cual comprendió de inmediato lo que sucedía.
Maldiciones volaron por todo el lugar, el trío se defendía lo mejor que podía, era una suerte que Henry tuviera buenos reflejos ya que lograba esquivar la maldiciones. Los tres lograron saltar por una ventana., Sirius cayó justo cerca de su varita, soltó la del mortífago y tomó la suya.
Snape tomó a Henry de los hombros.
-¡CORRE!- le gritó
Henry obedeció, salio corriendo tropezándose justo enfrente de Sirius, se incorporó y siguió su huida hacia los árboles cercanos. Sirius y Snape se pegaron espalda a espalda. Los mortifagos ya los rodeaban.
-Va a ser un horror morir a tu lado- dijo Sirius con su característico humor.
- lo mismo digo, estúpido Black, ¿ al menos viene alguien en nuestro apoyo?-
Por los gruñidos que salieron de la boca de Sirius supo que no era así.
Empezó la lucha, varios mortifagos caían inconscientes pero eran demasiados para ellos.
Una maldición le dio directo a Sirius el cual salio varios metro hacia atrás, no había sido mortal ya que todavía respiraba. Snape como pudo levantó Sirius y lo llevó hasta es bosque que rodeaba la mansión.
-Maldición Black, y todavía te salvo, debo estar volviéndome loco.-
Llegó hasta un claro, en donde ya no pudo avanzar más, los motífagos le dieron alcance y a la cabeza de ellos iba Voldemort.
La marca tenebrosa le escocía el brazo el dolor era terrible, asi que soltó a Sirius.
-No te queda salida Traidor- gritó Voldemort
Snape sabía que tenía razón.
-¡CRUCIO!-
El cuerpo de Snape se retorcía de dolor y a eso añadido el ardor en su brazo, sentía que moría.
Voldemort se acercó.
-Ya no necesitarás esto- dijo y con la mano que no sujetaba la varita tocó la marca del brazo de Snape, el cual se convulsionó aún más, la marca empezó a desaparecer pero en su lugar una mancha negra apareció y no solo en su lugar sino que esta se empezaba a esparcir por el resto de su brazo y torso.
Los mortífagos reían a carcajadas.
-¡EXPELIARMUS!- se oyó de entra las risas y Voldemort junto a su varita salieron volando hacia los árboles.
-¿qué!- gritó y vio como a la orilla del claro Henry le apuntaba directamente hacia él.
Uno de los mortífagos le lanzó una maldición asesina a Henry el cual no podía moverse debido al esfuerzo realizado, estaba listo para reunirse con sus padres.
Pero Sirius que había recobrado el conocimiento saltó para quitarlo del camino, la maldición golpeó la punta del zapato de Sirius haciendo que este saliera disparado.
Voldemort recuperó su varita mataría a ambos, fue hasta ellos y los apuntó.
Henry vio directo sus ojos y por primera vez no sintió miedo, sino otra cosa, algo mucho mas poderoso, ODIO.
Lo último que vio fue una gran luz blanca que lo cubría del todo, perdió el conocimiento.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++-.
Abrió los ojos, la luz del día se los lastimaba, pensó que todo había sido un sueño ya que su cuerpo no le dolía, pero pronto supo que no era así.
Su cuerpo estaba vendado, estaba seguro que seguía en la mansión, pero al observar mejor notó que no era así. El lugar parecía mas bien una enfermería, había varias camas y las estanterías estaban llenas de frascos los cuales supuso que eran jarabes. Miró a su alrededor y a unas camas de distancia yacía una figura familiar: Snape.
No traía camisa, pero todo su brazo y parte de su torso estaba vendado, al parecer estaba dormido. En ese momento recordó lo que había sucedido, trató de incorporarse pero su cuerpo no le respondía.
La puerta se abrió y en lugar de Voldemort un hombre muy viejo de barbas largas y cabellos plateados entró, venia vestido de colores muy llamativos y unas gafas de media luna decoraban sus brillantes ojos azules, se acercó lentamente a Henry.
-Hola, yo soy Albus Dumbledore-
