Los personajes, Jazmine y Melina me pertenecen todos los demás son
propiedad de la millonarisima JK Rowling, y la Warner yo solo hago esto por
diversión, y por sufrimiento.
Es el complemento del Fic. Duele verte. Espero que les guste, y no es necesario leer el otro para entender este, sin embargo espero verlos en ambos. De antemano gracias por leer. Y si quieres dejarme un review te lo agradeceré mucho.
En algún lugar del corazón.
Los ecos de las risas provenientes del comedor se filtraban hasta el salón en el que un chico de cabello negro alborotado y de ojos verdes platicaba animadamente con sus mejores amigos Ron Weasley y Hermione Granger, la reunión se había alargado y no sin motivos, pues por fin después de muchos intentos fallidos y caminos sin salida pudieron regresar a Sirius del velo de la muerte y justo a tiempo, pues dos semanas después comenzaban las clases en Hogwarts colegio de magia y hechicería y por primera ves Sirius lo acompañaría junto con Tonks y Remus Lupin.
Un hombre alto y delgado de pelo negro largo entro en el salón, sus profundos ojos azules observaron todo con detenimiento, como si fuera la primera vez, pero era aun mas importante, los veía con la segunda oportunidad otorgada, con la ayuda del oráculo de Delfos y gracias a la fe de Melina que nunca descanso hasta conseguirlo.......si tan solo pudiera darle las gracias.
El hombre de mirada penetrante fijo su vista en el trío, sonriendo abiertamente y sin dejar de notar la conexión que existía entre el pelirrojo y la castaña, se prometió mentalmente preguntárselo a Harry cuando estuvieran solos.
-Harry ¿puedes venir un momento? –quisiera hablarte.
-si claro. Y con una vaga señal se alejo de sus dos amigos.
Harry camino hasta un pequeño cuarto al lado del salón en el que Sirius entro, el cabello de su padrino relucía con la luz de los candelabros y sonreía, aunque lucia casado y mas delgado de lo que lo había visto nunca, sus ojos reflejaban esperanza y gratitud.
-Harry, hable con Dumbledore y Fudge la noticia de mi rescate llego hasta el ministerio en cuestión de minutos, y habiendo sido testigos de una de las apariciones de colagusano, mi nombre ha quedado limpio y todos mis bienes me has sido completamente restablecidos, solo harán un juicio para hacerlo oficial, ante los ojos de todos, pero es seguro que no habrá problemas, añidio al ver la expresión en los ojos del chico.
-¿volverás a Azkaban?
-no, claro que no, dijo mientras reía atronadoramente.
Harry sonrió ante las buenas noticias, pero mas que nada ante la risa de Sirius, creyó que nunca mas la escucharía y el hacerlo le causaba una profunda alegría, solo comparada con el hecho de haber recuperado a su padrino, después de todo el sufrimiento y el sentimiento tan profundo de perdida, pero ahora estaban juntos y estaba dispuesto a todo para protegerlo y evitar que algo así volviera a sucederle a cualquiera de las personas que amaba.
Sirius se acerco a Harry hasta quedar justo frente a él, y posando sus manos sobre los hombros del chico mientras aun sonreía prosiguió.
-Lo que te quiero decir es que ya no tendrás que volver a Privet Drive, ahora podremos establecernos en mi antigua casa, -Las cosas mejoraran. Le dijo con toda la fe que fue posible.
-Pero yo........... necesito volver con mis tíos, aunque solo sea unos pocos días, Dumbledore me dijo...............de pronto lo recordó, Sirius no estaba enterado de la profecía..........aun.
-Si, Harry lo se, pero eso lo arreglaremos a su debido tiempo, además ahora lo mas importante es que estamos juntos, y juntos lucharemos.
Harry no respondió, pero dentro de su corazón se prometió hacer todo lo posible para que Sirius no se arriesgara, no soportaría volver a perderlo.
-Además Harry quiero agradecerte el que te arriesgaras para salvarme......pero te prohíbo que lo vuelvas a hacer, compréndelo Harry, lo mas importante para mi y para todos es tu seguridad.
-Harry lo miraba sorprendido, Sirius lo estaba reprendiendo por rescatarlo, pero veía en su rostro que la alegría lo inundaba por momentos, aunque tratara de evitarlo.
Cuando regreso al salón observo que Hermione lucia sonrojada y Ron parecía agitado y nervioso, aunque cuando Harry les pregunto ambos contestaron atropelladamente que no era nada, el chico sonrió, pues ya sabia lo que sucedía, pero le parecía divertido el que sus amigos trataran de ocultárselo, de sobra esta decir que sin éxito.
Harry sonreía sin razón aparente, pero en su interior lo sabia, por fin podría dejar a sus tíos y a privet drive y viviría en su mundo, el mundo de la magia y con personas que realmente lo querían.
Mientras tanto lejos, muy lejos de ahí
horas antes.
-¿pero la dejaras ir así como así?
-no así como así, pero ella es la tutora legal de Gallen y no podemos hacer nada por evitar que se vaya, a menos que ella se niegue y no lo hará.
-pero papá, mamá ¿para que quieren que se quede?, solo es un estorbo, además todos estaremos mejor sin ella.
-Lo sabemos Pansy, pero el señor tenebroso no ha dado su aprobación y tememos importunarlo.
-pero si solo es una sangre mezclada, no creo que el Lord se ocupe de ella.
-talvez, pero aun así.....
unos sonidos de golpes en la puerta cortaron la conversación, que tenia lugar en la enorme mansión de aspecto impecable, aunque algunos objetos que parecían inofensivos hubieran bastado para someter a juicio a los habitantes.
-estúpida mujer. De la garganta de un hombre alto y rubio de mirada azul y ojos fríos salió esta expresión, odiaba todo lo que tuviera que ver con muggles y ella lo sabia, talvez se estuviera vanagloriando de hacerlo enfurecer, después de todo no debía olvidar quien era.
Un ser pequeño y de orejas puntiagudas vestido con un harapo sucio y zurcido un sin fin de veces se apresuro a abrir la puerta, antes de que su amo lo castigara, como estaba seguro sucedería.
Ante él una mujer joven y muy bella con cabello negro rizado y sonrisa franca le saludo, ante el asombro del elfo domestico que había conocido pocos magos educados, a excepción de la señorita Sullivan, pero nunca la olvidaría, ella también era una Sullivan
-Hola Mirky, ¿se encuentra el señor?, espero que si.
El elfo se inclino un par de veces ante el bochorno de la mujer e hizo una reverencia hasta casi tocar el piso con la frente, y con una vocecita chillona y extremadamente amable la condujo hasta la habitación en los que segundos antes se llevara acabo la discusión.
-¡valla, valla!, ¿qué tenemos aquí? –Caroline Melina Sullivan Gilicc . –que gusto volver a verte. Le dijo el hombre con expresión fría y con voz que notaba franco rechazo.
-me gustaría decir lo mismo Richard, pero ya ves, nunca he sabido fingir.
El hombre frunció los labios y de su rostro se borro toda señal de gusto falso dando paso a una mirada gélida y rencorosa.
-y ¿qué te trae por aquí?
-mira Richard, no vengo en plan social, solo quiero recoger a mi sobrina, que como ya debes saber ahora esta bajo mi cuidado, y espero que no haya problema en eso.
-no, claro que no, a menos de que Jazmine se niegue a ir contigo no veo porque habría problema.
El hombre volteo hacia la imponente escalera por donde unos minutos antes hubiere desaparecido su esposa, esperaba que hubiera podido convencer a la mocosa de quedarse, o podrían sufrir la ira del señor tenebroso.
En la habitación la mujer completamente furiosa miraba a la joven de cabello liso negro y ojos azules brillantes que cruzada de brazos la miraba sin dejarse amedrentar por la furia de su tía y además junto a ella estaba una chica de cabello rubio y rostro anguloso que la miraba sin ocultar su disgusto, no quería que la joven se quedara, nunca se llevaron bien aunque fueran primas, y francamente esperaba nunca mas verla, cosa menos posible, pues ambas estudiaban en Hogwarts, aunque en casas distintas.
-Vamos Pansy, dile a Gallen que te gustaría que se quedara, anda cariño.
-mamá tu sabes lo que pienso.
-esta bien tía, de cualquier manera ya lo decidí, me voy con Melina, creo que estaré mejor con ella.
-Mirky, al sonido de su voz el feo elfo domestico apareció haciendo una reverencia al ver a la mujer y a la chica rubia.
-si, señorita Gallen me llamo.
-Si Mirky, puedes ayudarme con mi maleta por favor, no tarda en llegar mi tía, y quiero estar lista.
-señorita, su tía ya llego, la espera en la sala.
-perfecto, enseguida bajo.
Y tomando la boina posada en la cama bajo, mas feliz que los últimos quince años, ¡por fin se iría!.
Sin poder contenerse un minuto mas bajo corriendo la escalera que la separaba de la libertad.
En el salón sentada y con el seño fruncido observo a la mujer, su cabello negro cuidadosamente rizado, y ojos azules tan parecidos a los suyos, pero fue la mirada la que la convenció, cristalina y franca, tan diferente a la de sus tíos maternos, al momento que sus ojos se cruzaron supo que su vida cambiaria, aunque era la primera ve que veía a esa mujer supo que era su familia, la única que le quedaba y el saber que por fin alguien la rescataría de esa pesadilla le gano completamente su afecto.
-¿Jazmine? La mujer se puso de pie, expectante, no se le había ocurrido pensar que talvez la chica no quisiera ir con ella.
-¿Melina? ¿tía Melina?
La chica prácticamente se arrojo a los brazos de la agradablemente sorprendida mujer, que no esperaba ese recibimiento.
-Eres tan parecida a tu padre. La mujer la separo un poco mientras la miraba.
-¿quieres ir....conmigo.....a vivir?
-claro que quiero, y añidio en su oído, solo para que ella escuchara. –podríamos irnos ya, porque si es un sueño no quiero despertar.
-Claro que podemos.
-Bien Richard , pues creo que esto es todo, nos vamos, y no te molestes en escribir, porque no voy a contestarte.
-Lista Jazmine.
-claro, bueno ...... Mirky gracias, creo que eres al único que voy a extrañar. Le dijo volviéndose hasta el elfo que sonreía tímidamente y miraba a la joven con gratitud y mas apenado que nunca, sabia que esto le costaría un terrible castigo, pero por la señorita Gallen valía la pena.
-Adiós señorita Gallen, que le vaya bien, le dijo mientras depositaba las maletas a los pies de la joven.
Por fin cruzaron el jardín, la verja, y salieron, las esperaba un pequeño automóvil en la puerta, al que la chica subió maravillada, nunca había viajado en un vehículo muggle, de hecho conocía tan poco de ellos, pero eso cambiaria, miro hacia el camino que quedaba detrás, en su pasado.
Jazmine sonreía sin razón aparente, aunque tenia tantas cosas que festejar, por fin podría dejar a sus tíos y su odiosa y refinada mansión llena de reglas y viviría en otro mundo, un mundo donde lo mágico y lo muggle no estaban en guerra constante y lo mas importante con personas que realmente la querían.
RRRRRRR EEEEEEE VVVVVV IIIIIIIII EEEEEEE WWWWW
Hey, tú, si tú que estas leyendo, déjame un mensaje, con solo tres palabras me harás muy feliz, además no te cuesta nada. Se aceptan quejas sugerencias y todo lo que me quieras mandar (menos virus) así que no te reprimas y dime tu opinión.
Gracias y recuerda déjame un Review.
Es el complemento del Fic. Duele verte. Espero que les guste, y no es necesario leer el otro para entender este, sin embargo espero verlos en ambos. De antemano gracias por leer. Y si quieres dejarme un review te lo agradeceré mucho.
En algún lugar del corazón.
Los ecos de las risas provenientes del comedor se filtraban hasta el salón en el que un chico de cabello negro alborotado y de ojos verdes platicaba animadamente con sus mejores amigos Ron Weasley y Hermione Granger, la reunión se había alargado y no sin motivos, pues por fin después de muchos intentos fallidos y caminos sin salida pudieron regresar a Sirius del velo de la muerte y justo a tiempo, pues dos semanas después comenzaban las clases en Hogwarts colegio de magia y hechicería y por primera ves Sirius lo acompañaría junto con Tonks y Remus Lupin.
Un hombre alto y delgado de pelo negro largo entro en el salón, sus profundos ojos azules observaron todo con detenimiento, como si fuera la primera vez, pero era aun mas importante, los veía con la segunda oportunidad otorgada, con la ayuda del oráculo de Delfos y gracias a la fe de Melina que nunca descanso hasta conseguirlo.......si tan solo pudiera darle las gracias.
El hombre de mirada penetrante fijo su vista en el trío, sonriendo abiertamente y sin dejar de notar la conexión que existía entre el pelirrojo y la castaña, se prometió mentalmente preguntárselo a Harry cuando estuvieran solos.
-Harry ¿puedes venir un momento? –quisiera hablarte.
-si claro. Y con una vaga señal se alejo de sus dos amigos.
Harry camino hasta un pequeño cuarto al lado del salón en el que Sirius entro, el cabello de su padrino relucía con la luz de los candelabros y sonreía, aunque lucia casado y mas delgado de lo que lo había visto nunca, sus ojos reflejaban esperanza y gratitud.
-Harry, hable con Dumbledore y Fudge la noticia de mi rescate llego hasta el ministerio en cuestión de minutos, y habiendo sido testigos de una de las apariciones de colagusano, mi nombre ha quedado limpio y todos mis bienes me has sido completamente restablecidos, solo harán un juicio para hacerlo oficial, ante los ojos de todos, pero es seguro que no habrá problemas, añidio al ver la expresión en los ojos del chico.
-¿volverás a Azkaban?
-no, claro que no, dijo mientras reía atronadoramente.
Harry sonrió ante las buenas noticias, pero mas que nada ante la risa de Sirius, creyó que nunca mas la escucharía y el hacerlo le causaba una profunda alegría, solo comparada con el hecho de haber recuperado a su padrino, después de todo el sufrimiento y el sentimiento tan profundo de perdida, pero ahora estaban juntos y estaba dispuesto a todo para protegerlo y evitar que algo así volviera a sucederle a cualquiera de las personas que amaba.
Sirius se acerco a Harry hasta quedar justo frente a él, y posando sus manos sobre los hombros del chico mientras aun sonreía prosiguió.
-Lo que te quiero decir es que ya no tendrás que volver a Privet Drive, ahora podremos establecernos en mi antigua casa, -Las cosas mejoraran. Le dijo con toda la fe que fue posible.
-Pero yo........... necesito volver con mis tíos, aunque solo sea unos pocos días, Dumbledore me dijo...............de pronto lo recordó, Sirius no estaba enterado de la profecía..........aun.
-Si, Harry lo se, pero eso lo arreglaremos a su debido tiempo, además ahora lo mas importante es que estamos juntos, y juntos lucharemos.
Harry no respondió, pero dentro de su corazón se prometió hacer todo lo posible para que Sirius no se arriesgara, no soportaría volver a perderlo.
-Además Harry quiero agradecerte el que te arriesgaras para salvarme......pero te prohíbo que lo vuelvas a hacer, compréndelo Harry, lo mas importante para mi y para todos es tu seguridad.
-Harry lo miraba sorprendido, Sirius lo estaba reprendiendo por rescatarlo, pero veía en su rostro que la alegría lo inundaba por momentos, aunque tratara de evitarlo.
Cuando regreso al salón observo que Hermione lucia sonrojada y Ron parecía agitado y nervioso, aunque cuando Harry les pregunto ambos contestaron atropelladamente que no era nada, el chico sonrió, pues ya sabia lo que sucedía, pero le parecía divertido el que sus amigos trataran de ocultárselo, de sobra esta decir que sin éxito.
Harry sonreía sin razón aparente, pero en su interior lo sabia, por fin podría dejar a sus tíos y a privet drive y viviría en su mundo, el mundo de la magia y con personas que realmente lo querían.
Mientras tanto lejos, muy lejos de ahí
horas antes.
-¿pero la dejaras ir así como así?
-no así como así, pero ella es la tutora legal de Gallen y no podemos hacer nada por evitar que se vaya, a menos que ella se niegue y no lo hará.
-pero papá, mamá ¿para que quieren que se quede?, solo es un estorbo, además todos estaremos mejor sin ella.
-Lo sabemos Pansy, pero el señor tenebroso no ha dado su aprobación y tememos importunarlo.
-pero si solo es una sangre mezclada, no creo que el Lord se ocupe de ella.
-talvez, pero aun así.....
unos sonidos de golpes en la puerta cortaron la conversación, que tenia lugar en la enorme mansión de aspecto impecable, aunque algunos objetos que parecían inofensivos hubieran bastado para someter a juicio a los habitantes.
-estúpida mujer. De la garganta de un hombre alto y rubio de mirada azul y ojos fríos salió esta expresión, odiaba todo lo que tuviera que ver con muggles y ella lo sabia, talvez se estuviera vanagloriando de hacerlo enfurecer, después de todo no debía olvidar quien era.
Un ser pequeño y de orejas puntiagudas vestido con un harapo sucio y zurcido un sin fin de veces se apresuro a abrir la puerta, antes de que su amo lo castigara, como estaba seguro sucedería.
Ante él una mujer joven y muy bella con cabello negro rizado y sonrisa franca le saludo, ante el asombro del elfo domestico que había conocido pocos magos educados, a excepción de la señorita Sullivan, pero nunca la olvidaría, ella también era una Sullivan
-Hola Mirky, ¿se encuentra el señor?, espero que si.
El elfo se inclino un par de veces ante el bochorno de la mujer e hizo una reverencia hasta casi tocar el piso con la frente, y con una vocecita chillona y extremadamente amable la condujo hasta la habitación en los que segundos antes se llevara acabo la discusión.
-¡valla, valla!, ¿qué tenemos aquí? –Caroline Melina Sullivan Gilicc . –que gusto volver a verte. Le dijo el hombre con expresión fría y con voz que notaba franco rechazo.
-me gustaría decir lo mismo Richard, pero ya ves, nunca he sabido fingir.
El hombre frunció los labios y de su rostro se borro toda señal de gusto falso dando paso a una mirada gélida y rencorosa.
-y ¿qué te trae por aquí?
-mira Richard, no vengo en plan social, solo quiero recoger a mi sobrina, que como ya debes saber ahora esta bajo mi cuidado, y espero que no haya problema en eso.
-no, claro que no, a menos de que Jazmine se niegue a ir contigo no veo porque habría problema.
El hombre volteo hacia la imponente escalera por donde unos minutos antes hubiere desaparecido su esposa, esperaba que hubiera podido convencer a la mocosa de quedarse, o podrían sufrir la ira del señor tenebroso.
En la habitación la mujer completamente furiosa miraba a la joven de cabello liso negro y ojos azules brillantes que cruzada de brazos la miraba sin dejarse amedrentar por la furia de su tía y además junto a ella estaba una chica de cabello rubio y rostro anguloso que la miraba sin ocultar su disgusto, no quería que la joven se quedara, nunca se llevaron bien aunque fueran primas, y francamente esperaba nunca mas verla, cosa menos posible, pues ambas estudiaban en Hogwarts, aunque en casas distintas.
-Vamos Pansy, dile a Gallen que te gustaría que se quedara, anda cariño.
-mamá tu sabes lo que pienso.
-esta bien tía, de cualquier manera ya lo decidí, me voy con Melina, creo que estaré mejor con ella.
-Mirky, al sonido de su voz el feo elfo domestico apareció haciendo una reverencia al ver a la mujer y a la chica rubia.
-si, señorita Gallen me llamo.
-Si Mirky, puedes ayudarme con mi maleta por favor, no tarda en llegar mi tía, y quiero estar lista.
-señorita, su tía ya llego, la espera en la sala.
-perfecto, enseguida bajo.
Y tomando la boina posada en la cama bajo, mas feliz que los últimos quince años, ¡por fin se iría!.
Sin poder contenerse un minuto mas bajo corriendo la escalera que la separaba de la libertad.
En el salón sentada y con el seño fruncido observo a la mujer, su cabello negro cuidadosamente rizado, y ojos azules tan parecidos a los suyos, pero fue la mirada la que la convenció, cristalina y franca, tan diferente a la de sus tíos maternos, al momento que sus ojos se cruzaron supo que su vida cambiaria, aunque era la primera ve que veía a esa mujer supo que era su familia, la única que le quedaba y el saber que por fin alguien la rescataría de esa pesadilla le gano completamente su afecto.
-¿Jazmine? La mujer se puso de pie, expectante, no se le había ocurrido pensar que talvez la chica no quisiera ir con ella.
-¿Melina? ¿tía Melina?
La chica prácticamente se arrojo a los brazos de la agradablemente sorprendida mujer, que no esperaba ese recibimiento.
-Eres tan parecida a tu padre. La mujer la separo un poco mientras la miraba.
-¿quieres ir....conmigo.....a vivir?
-claro que quiero, y añidio en su oído, solo para que ella escuchara. –podríamos irnos ya, porque si es un sueño no quiero despertar.
-Claro que podemos.
-Bien Richard , pues creo que esto es todo, nos vamos, y no te molestes en escribir, porque no voy a contestarte.
-Lista Jazmine.
-claro, bueno ...... Mirky gracias, creo que eres al único que voy a extrañar. Le dijo volviéndose hasta el elfo que sonreía tímidamente y miraba a la joven con gratitud y mas apenado que nunca, sabia que esto le costaría un terrible castigo, pero por la señorita Gallen valía la pena.
-Adiós señorita Gallen, que le vaya bien, le dijo mientras depositaba las maletas a los pies de la joven.
Por fin cruzaron el jardín, la verja, y salieron, las esperaba un pequeño automóvil en la puerta, al que la chica subió maravillada, nunca había viajado en un vehículo muggle, de hecho conocía tan poco de ellos, pero eso cambiaria, miro hacia el camino que quedaba detrás, en su pasado.
Jazmine sonreía sin razón aparente, aunque tenia tantas cosas que festejar, por fin podría dejar a sus tíos y su odiosa y refinada mansión llena de reglas y viviría en otro mundo, un mundo donde lo mágico y lo muggle no estaban en guerra constante y lo mas importante con personas que realmente la querían.
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Hey, tú, si tú que estas leyendo, déjame un mensaje, con solo tres palabras me harás muy feliz, además no te cuesta nada. Se aceptan quejas sugerencias y todo lo que me quieras mandar (menos virus) así que no te reprimas y dime tu opinión.
Gracias y recuerda déjame un Review.