CASA PARA OCHO
Notas de antes de comenzar:
Ari: ok, me disculpo por la demora. Estuve un poco bloqueada y no sabía qué hacer con este cap, pero creo que lo arreglé bastante bien ^^
Cris: este capítulo quedó genial!! En serio, se divertirán mucho leyendo!!
Capítulo 17: Secretos tras la puerta.
El partido estaba por comenzar. Y Takeru no la veía llegar.
No tenía claro porque la había invitado en primer lugar… más que mal, le había roto el corazón y ella actuaba como si nunca hubiese pasado nada. No le gustaba su comportamiento. No ignorando los hechos.
La verdad… las cosas habían estado un poco complicadas en casa.
Sora y Taichi parecían más ariscos que de costumbre… porque, lamentablemente, se había hecho una costumbre. Ahora incluso salían a fiestas juntos, pero aún así Taichi se veía amargado. Antes era tan animado… pero desde que descubrió lo de Yamato, no parecía confiar mucho en los demás, en especial en él y Mimi, porque Taichi sabía que ellos sabían…
A Sora seguía sin entenderla. Mimi mencionó algunas veces que su amiga estaba frustrada por algo, y Jou contó que sus notas habían bajado mucho en el regreso a clases. Pero Sora no decía nada al respecto. Si ni Mimi ni Jou no lograban hacerla hablar de sus problemas, ¿sería Takeru capaz?
Lanzó un suspiro.
Jou a principios de mes tuvo una gran discusión con su novia por teléfono, y aunque trataba de esconderlo, se mostraba molesto y poco atento cuando estaban todos juntos. Yamato habló con él y pareció que la situación se arregló, pero aún así… ¿sería tan fácil mantener una relación a larga distancia como parecía? Si Mimi viviera lejos…
Aunque claro, primero Mimi tendría que ser su pareja.
Estaba pensando en tonterías…
Y además de todo eso, Hikari y Koushirou llevaban peleados desde que volvieron de vacaciones. Quiso hablar con Hikari sobre eso, pero la chica podía ser hasta más terca que su hermano. Koushirou le explicó lo ocurrido a ellos junto con contarle toda la historia a Jou, porque los había descubierto, y desatado también, la pelea…
Curioso era que ambos, el pelirrojo y Hikari, estaban ahora en las gradas esperando ver el juego de Takeru.
Yamato iba a venir, pero a última hora anuncio que tenía trabajo que hacer. Taichi se negó a venir… porque creyó que Yamato iría.
Y ahora faltaba Mimi.
Al cabo de un rato, una cabellera de color rojo intenso, más intenso que el del Izumi, asomó por la entrada del gimnasio. La Tachikawa se había vuelto a teñir pocos días después de regresar a casa, como alguna clase de renovación, por el comienzo de la segunda parte del año. Fue bastante chocante, al principio, tener que volver a acostumbrarse a otro color de pelo, pero algo le decía que tarde o temprano, la chica haría otro cambio, y había que estar preparado.
Ella llegó… y Takeru se puso tenso. ¿Cómo podría jugar ahora con ella mirándolo? Lo pondría nervioso, no quería decepcionarla… ella nunca lo había visto jugar… era bueno, pero… ¿suficientemente bueno?
-¡equipo, atención!
El capitán lo estaba llamando. Un minuto y el partido comenzaría.
Cinco minutos después…
… ¡Takeru maldijo que Mimi viniera! ¡Por muchos ánimos que le diera le traía mala suerte!
Argh…
Trató de concentrarse en el balón… pensar en los pocos pero grandes jugadores japoneses que lo habían entusiasmado a jugar baloncesto en primer lugar, en aquellos jugadores de la NBA…
Sí, Vincent Carter, Rukawa Kaede… los grandes, los fuertes… no más Mimi, no más Mimi…
Le quitó el balón al equipo contrario y fue corriendo con la mirada fija en la canasta… nadie lo detenía, su jugada era sola, no podían contra él…
Se detuvo, tomó el balón con la mano izquierda, pegó un saltó… el balón soltó sus dedos rumbo a la cesta…
-¡bien hecho, Takeru!
Escuchó su voz… giró su vista aún en el aire… ella le regalaba su mejor sonrisa…
Y cayó.
El día se veía aburrido. Hacía demasiado tiempo que no tenía una tarde sin tareas o trabajos, o que tuviera que estudiar para un examen…
Pero el día era aburrido.
Jou no quiso volver a casa tras su última clase, pues según le había contado Koushirou, ese día era el partido de Takeru y casi todos irían a verlo. Excepto Taichi, Sora y el mismo…
A Sora no la había visto en todo el día. Nada de extrañar, tampoco… tenía la impresión que ella lo evitaba a propósito. Se preguntó por qué… No recordaba haberle hecho nada, salvo por esa conversación con Kenia…
Detuvo un momento su paso por las calles.
Kenia…
Kenia le había contado muchas cosas sobre Sora. cosas que estaba seguro Sora no le había contado a nadie…
Sintió ganas de golpearse a sí mismo por mantenerse al margen del asunto como le había pedido su amiga. Debería hacer algo al respecto, sabía que había algo malo con Sora…
Si tan solo supiera qué…
Al girar su vista Jou dio con la vidriera de una tienda deportiva.
¿No era ese el lugar donde…?
-¿hay algo en que lo pueda atender…? – escuchó una voz conocida.
-¡Taichi!
El chico de revoltoso pelo castaño estaba enfrente de él, y al parecer, acababa de notar que era su amigo con quien hablaba.
-¡Jou, hola! – sonrió. - ¿qué haces aquí?
-pues, llegué por coincidencia. – reconoció el chico de anteojos. – vaya, hace tiempo que no venía a verte al trabajo, Taichi. ¿Cómo va todo?
-un poco lento… los miércoles son aburridos.
-ya lo creo…
Jou entró al lugar siguiendo a su amigo. Habían dos vendedores más, pero sólo uno de ellos estaba atendiendo a un cliente.
-pensé que los miércoles no trabajabas… - recordó, mientras se ajustaba los lentes.
-eh, así es normalmente, pero no tenía nada que hacer hoy, y el dinero nunca está de más…
-¿por eso no fuiste al partido de Takeru?
Taichi hizo un gesto extraño, las facciones de su cara se tensaron.
-si, por eso.
-ah…
Tres posibles compradores entraron de una sola vez y Taichi tuvo que dejar a Jou a solas.
El Kido miró a su alrededor buscando algo que le llamara la atención, pero su vista simplemente volvió a Taichi…
Recordó lo ocurrido un mes atrás…
El desastre que había sido descubrir a Koushirou y Hikari en una situación tan embarazosa… el pelirrojo fue el encargado de explicarle todo, pero fue la chica quien le rogó no decirle nada a nadie, en especial a su hermano…
Se preguntó como reaccionaría Taichi a todo eso.
Lo secretos eran malos… Sora tenía secretos, y la estaban comiendo por dentro… también pudo notar que algo extraño había ocurrido entre Mimi y Takeru, y entre Taichi y Yamato… y nadie decía nada.
¡Era molesto! ¿Cómo es que ninguno confiaba lo suficiente en los demás para no esconderse tras una puerta de esa manera?
Taichi despidió a los clientes y volvió con su amigo.
-¿sabes, Jou? Realmente me alegro que me hayas venido a ver, necesitaba hablar contigo… - comentó muy serio el moreno.
La seriedad sorprendió un poco a Jou. Parecía un tema delicado.
-dime.
-bueno… - el Yagami bajó la vista. – quería saber que es exactamente lo que hay entre Sora y tú…
-¿qué?
-sé que Sora esconde algo, le he preguntado varias veces cuando hemos estado solos, y sé que parece pasarla muy bien en las fiestas a las que vamos, yo no la paso mal tampoco, pero…
Jou se echó para atrás, cerró los ojos con frustración y pidió 'tiempo fuera' con las manos.
-¿de qué estás hablando? ¡No ha pasado nada entre Sora y yo!
Taichi parpadeó.
-¿no? pero… pero si Sora…
Jou se dejó llevar por el propio enojo en su voz.
-¿de donde sacaste semejante idea?
El hermano de Hikari pareció avergonzarse de repente.
-um, bueno…
-hey, Yagami. ¡Hay clientes!
Los otros dos vendedores llamaron a Taichi y este tuvo la salida perfecta del problema. Jou no dejó de mirarlo todo el rato, preguntándose por qué diablos él pensaba eso… ¡Sora ni siquiera le dirigía la palabra! ¿Cómo iba a haber "algo" entre ellos?
Si Umiko se enterara…
Jou lanzó un bufido. Si Umiko se enterara tendría una excusa para seguir discutiendo con él. Y eso era algo que Jou no estaba dispuesto a cederle. No más excusas… ella aún tenía que pedir disculpas por el fiasco de las vacaciones. Hum…
En medio de esos complicados pensamientos, el Yagami volvió.
-lo siento, Jou. - dijo de inmediato. – no era mi intención suponer nada, pero… bueno, Sora me ha dicho cosas bastante raras últimamente, y las que te incluían a ti parecían, no sé… Especiales…
-¿especiales?
-supongo que era la influencia del alcohol… - murmuró el otro entre dientes, luego miró directo a su cara. – fue en una fiesta, la semana pasada, era tarde y había resultado una fiesta muy aburrida, hasta las bebidas parecían haberse acabado…
-Taichi…
-si, si. – se pasó la mano por el cabello. – el asunto es que no sé cómo, Sora me terminó contando de un sueño que tuvo, en que tú y ella hacían… cosas… - Taichi se sonrojó. Jou no lo pudo evitar y también quedó rojo. – fue… bastante detalllista con su historia, especificó demasiado, creo… algo sobre el tamaño de un helado coreano con sabor a nueces…
-te… ¿te refieres al "Oh, baby"?
-ah, sí, ese…
Jou tragó saliva, tratando de ignorar el halago.
-y después sobre el uso de tus manos… - Taichi se detuvo un momento, tratando de NO hacer una imagen mental en su cabeza. – mira, la escena parecía realista, y ella incluso me pidió que no te lo mencionara a ti porque te avergonzarías de que ella le dijera a otra persona esa clase de cosas… pensé, pensé que tal vez había pasado, ustedes dos han actuado muy raro ahora último, y…
-ok, ok. Entendí. – Jou se tomó un tiempo para volver a sus colores. – pero Sora sólo tuvo un sueño… erótico. Podría haber sido yo o cualquiera. No tiene tanta importancia.
El castaño apoyó su cuerpo en el mostrador.
-debes tener razón, es algo normal, ¿no?
-así es.
El gesto pensativo se mantuvo en la cara de Taichi. Luego suspiró y le sonrió al aún incómodo Jou.
-no tenía idea que a las chicas les gustaba relacionar esa clase de sabores con los chicos… ¡nunca más invitaré un helado ni a Sora ni a Mimi-chan!
El Kido rió.
-ya lo creo, no quiero que a falta de novio ellas den rienda suelta a esa imaginación…
-nueces… - comentó Taichi. – Sora es muy exquisita para sus gustos, jaja.
-aunque por lo general las chicas van por el chocolate…
Taichi alzó una ceja.
-¿y tú como sabes eso?
Jou se cruzó de brazos, sonriéndole como un sabelotodo a su acompañante.
-está científicamente comprobado. – afirmó, y luego agregó. – además, es el sabor favorito de U-chan ^^
El mayor de los Yagami volvió a echarse para adelante.
-es verdad, ya se me hacía extraño que hubiese algo entre Sora y tú cuando tienes a esa novia misteriosa en Nagoya… ¿cuándo la conoceremos, de todas formas?
-no lo sé… - Jou trató de ignorar el recuerdo de su pelea telefónica de hace semanas. – aunque creo que es lo válido, estoy un poco aburrido de los secretos aquí…
Taichi sabía a lo que se refería, pero simplemente se encogió de hombros.
-a veces es mejor no saber nada, hay cosas que si te enteras, es para peor…
Jou suspiró. Seguramente Hikari pensaba igual que él, por eso todos los demás callaron su relación con Koushirou… pero Taichi no sabía nada de eso… ¿a qué se refería entonces?
-oye, Yagami. Tu hermana te llama. – le avisó uno de sus compañeros de trabajo indicando el teléfono.
Los dos chicos cruzaron miradas. El moreno tomó el auricular rápidamente.
¿Aló, hermano?
-si, Hikari, ¿qué pasa?
estamos en el hospital…
-¿qué? ¿¿Qué pasó??
Nada grave, no te preocupes. Takeru-chan sufrió un accidente en el partido y lo tuvieron que traer acá. Koushirou-san, Mimi-chan y yo estamos esperando que lo atiendan. Te llamo para que sepas que llegaremos tarde a casa y para que le avises a Yamato-san, ¿está bien?
-ajá, sí. ¿Pero estás segura que está todo bien? ¿Takeru estará bien?
En serio nada grave. Seguramente lo vendarán o pondrán yeso, pero nada más. Dile eso a Yamato-san también, ¿sí?
-ok…
Ya, la llamada se cortará. Nos vemos a la noche. Baibai.
-bye…
Colgó.
-¿qué fue lo que pasó? – preguntó Jou, que escuchó solo media conversación.
-Takeru cayó en batalla…
-¿huh?
-en serio, Takeru, ¡qué forma tan tonta de quebrarte el pie! – lo retó Mimi, demasiado seria y preocupada. - ¡justo después de una jugada tan espectacular!
El chico se mantuvo en silencio. Se notaba que estaba avergonzado de su error… pero…
-no te enojes, Tachikawa-san. – pidió el capitán del equipo con una sonrisa. - ¡es una herida de guerra! ¡Todo fue válido! ¡Y su esfuerzo llevó al equipo a la victoria!
-¿de qué rayos hablas? – cuestionó la chica, impidiendo que Takeru se sintiera bien con el comentario. – jugó sólo cinco minutos y anotó sólo esos puntos para luego lesionarse. Más vale haber fallado y guardar oportunidades para el resto del partido.
-cierto, pero… - el capitán no dejaba de sonreír por el triunfo. – la herida de Takaishi-kun hizo que el equipo se esforzara más después, ¡teníamos que ganar el juego por él!
-lo que sea…
Mimi llevaba un buen rato discutiendo con ese tipo respecto al pie adolorido de su amigo. Incluso golpeó el mismo pie para asegurarse que Takeru entendiera que tenía que cuidar más sus movimientos para la próxima vez. Mira que distraerse de esa manera…
Estaba molesta por el susto que se había dado al verlo caer… y no levantarse. La escena de ella corriendo entre los espectadores y jugadores para ver que le pasaba aún estaba presente en su cabeza.
No le gustaba nada ese sentimiento de frustración que la inundaba…
Se pasó la mano por su pelirrojo cabello y suspiró, mirando como la puerta se habría y más compañeros del Takaishi venían a darle ánimos… o a levantarle los ánimos… en más de alguna manera… La chica no dudó en golpear a varios que intentaron hacerlo volar por los aires para celebrar la victoria.
¿¿Dónde rayos estaban Hikari y Koushirou?? ¡No podía aguantar mucho por su cuenta!
Koushirou miró curioso la expresión de Hikari cuando hablaba por teléfono con Taichi… se veía muy tranquila… era una excelente actriz…
Ella finalmente colgó, y por largo rato quedaron mirándose el uno al otro… no decían nada…
-no necesitabas acompañarme hasta aquí. – dijo finalmente ella, con voz fría.
-era mejor que quedarse aguantando las quejas de Mimi-san. – replicó él, también frío, aunque más bien, indiferente.
A Koushirou no se le daba muy bien la frialdad. Si estaba molesto por algo, no lo demostraba, sino que dejaba de mostrar interés por eso. Era una manera fácil de hacer enojar a cualquiera…
En especial a un Yagami.
El silencio volvió entre ellos, y ninguno se movió. Ese último mes había sido muy incómodo, porque simplemente no habían querido decir porqué estaban tan molestos, no habían hablado… nada.
Hasta hoy.
-¿por qué viniste al partido? Pensé que te quedarías en casa. – volvió a hablar ella.
-pensé que tú te quedarías en casa. – fue la respuesta.
-oh.
Silencio, por tercera vez.
Koushirou por dentro quería arreglar todo el asunto… pero… pero estaba un poco harto. Nunca había sido muy abierto, pero eso de estar escondiéndose a cada rato lo molestaba… no le gustaban los secretos.
Entendía que Hikari no quisiera decirle a Taichi y a nadie al principio, él tampoco quería, eran demasiadas inseguridades… pero eran novios ahora. Tenían una relación estable. ¿Por qué Hikari no lo aceptaba?
No era que quisiera decirle a todos, le daría vergüenza… pero que ella estuviese enojada cuando ellos ya se habían enterado… pensó que se había relajado el asunto luego que Sora y Yamato los vieron, y sabía que Hikari no podía sentirse diferente por Jou… entonces, ¿por qué seguía enojada?
Ese estúpido seguro en la puerta… él mismo fue quien lo rompió, cuando llegaron a la casa en Marzo. Su novia no sabía eso… no sabía lo que significaba para él…
***************
-¡Osamu! ¡¿Por qué demonios no has arreglado el seguro de la puerta todavía?!
-no lo voy a arreglar… nunca dije que lo haría…
-¡pero si tú lo rompiste!
-um, si, así es.
-entonces, arreglaló.
-no.
-¿por qué no?
-porque Yuri no tiene llave de mi cuarto…
-nuestro cuarto.
-eso, nuestro cuarto, y como aquí no hay donde hacer copias de llaves, para cuando él necesite algo o me esté buscando pueda llegar y entrar. No es como que nos vayan a robar aquí, Kou-chan…
-no me llames así.
-¿por qué estás tan enojado?
-¡porque el seguro no funciona!
-¿y…?
-y… y…
-¡estás rojo! ¿Gran cita con Hikari-chan?
-er… sí.
-ah, me hubieses dicho antes. Convenceré a Yuri, Will y Mina-chan que no vengan a interrumpir, no te preocupes.
-sería más feliz si colocaras un seguro, idiota.
-no, para nada. Además, todos golpeamos antes de entrar, no sé de qué te preocupas.
-claro, golpean antes de entrar, ¡pero no esperan una respuesta y entran igual! Incluso Mina-san, es bastante desesperante…
-ah, pero tú adoras vernos, Kou-chan… ¡para eso son los amigos!
***************
Las palabras del recuerdo devolvieron la nostalgia a Koushirou. Hikari, a su vez, parecía exasperada a su lado. Siempre había tenido poca paciencia al enojarse… por eso mismo no solía enojarse muy seguido, sabía que no resolvía nada con eso.
-¿por qué no arreglaste el seguro antes de las vacaciones? – demandó, luego de demasiado silencio.
-nunca dije que lo haría.
-¡claro que sí!
-no. – insistió él. – tú me dijiste que lo hiciera, pero yo no respondí.
-es igual, Koushirou. No podemos mantener nuestra relación en secreto ni hacer nada en el cuarto ¡si no se puede cerrar bien!
Koushirou no replicó. eso lo sabía… y aún así…
La chica a su lado soltó un bufido.
-es el colmo, pareciera que no te importara…
-si me importa.
-¿y entonces? – interrogó, más molesta que antes. – imagínate si Taichi…
-lo sé.
-¡y te da igual! – exclamó ella.
El Izumi frunció el ceño.
-no es eso Hikari… es… - se detuvo.
La Yagami se cruzó de brazos, esperando que prosiguiera.
-es… es tonto, lo sé… - Koushirou miró el suelo, con gesto avergonzado. - ¿recuerdas como siempre nos interrumpían hace tres años atrás? ¿Como siempre… llegaban en el peor momento…?
-¿cómo olvidarlo? – murmuró ella, sarcástica.
Y era verdad. Casi no tenían momentos a solas… Yuri y Mina trataban de mantenerse al margen, pero a Osamu y Will les encantaba inmiscuirse en sus conversaciones o sus citas… a no ser que les explicaran de antemano que era lo que iban a hacer, ahí los dejaban tranquilos… sólo después de saber todos los detalles. Era vergonzoso…
-Osamu siempre decía que la privacidad era para los extraños. Que los verdaderos amigos dejaban siempre su puerta abierta…
Hikari bajó la vista ahora. Al parecer, todo ese tiempo había olvidado esas palabras, las palabras de su amigo…
-¿es por eso?… - dijo ella, sin quitar la vista del suelo. - ¿por eso es que te arriesgas a que nos descubran?
El pelirrojo hizo la mueca de una sonrisa.
-sigo esperando… que él aparezca por mi puerta, Kari-chan. – reconoció. - Lo siento…
Ella negó con la cabeza, finalmente entendiendo su punto.
-yo… sé que no te gusta esconder cosas de los demás, a mí tampoco, pero Taichi…
-sé lo que quieres decir, Kari, pero Taichi-san no es nuestro único amigo. Podemos seguir escondiéndonos de él, pero yo no quiero colocar un seguro…
-está bien, entiendo. Y yo también lo siento.
Se sonrieron. Era mejor así… mucho mejor así.
La hermana de Taichi se acercó al Izumi. Él pensó que lo besaría en la mejilla, pero ella fue directo a sus labios…
-¡Kari, espera! Puede que Taichi no esté aquí, pero no tenemos que ser tan públicos…
-nadie aquí nos conoce, Kou-chan. – le cerró un ojo. - ¿qué más da?
Él la miró un momento más, y después cedió. Los extraños realmente no importaban, y ella estaba hermosa…
-qué más da…
Takeru se asombró de ver a Mimi volver tan rápido de su ida al baño. Se veía agitada. Hace un rato atrás ella misma había despedido a sus compañeros para que lo dejaran descansar, y ahora, parecía como si algo demasiado grande hubiese pasado…
-¿qué ocurre?
-¡no vas a creer lo que acabo de ver!
Él dudó.
-¿algún artista famoso?
-¡no, baka! ¡Hikari-chan y Koushirou-kun!
Él volvió a dudar. No entendía cuál era el problema… hasta que…
-¡estaban BE-SÁN-DO-SE! – gritó la Taichikawa, emocionada. - ¡lo juro! ¡Los acabo de ver! No sé de qué hablaban pero luego ella lo besó, y él la besó de vuelta, y después… ¡y enfrente de todos! ¡En serio!
-er… cálmate un poco, Mi-chan. – Takeru le indicó que se sentara. - ¿dices que los viste besándose, no?
-¡SÍ! Y se veían tan lindos, - Mimi parecía en las nubes de la felicidad. - Koushirou-kun parecía muy tierno con ella, quitándole un mechón de la cara con su mano, para luego acariciarle el rostro, ay…
-ok, ok. Entendí.
Ella lo miró un poco molesta.
-no pareces sorprendido.
El rubio tragó saliva.
-um, bueno…
-¿¿acaso sabías??
-si, pero…
-¡¿y por qué no me habías contado?! ¿¿Cuánto tiempo llevan con eso?? ¿¿Los demás saben?? ¿¿Son novios o qué?? ¿¿Por qué es que YO no sabía??
El hermano de Yamato se acomodó en su asiento.
-una pregunta a la vez, Mi-chan… - suspiró. – ah… Koushirou-san y Hikari-chan son… novios, por lo que sé. desde antes de salir de vacaciones… aunque llevan más tiempo juntos, solo que no lo llamaban "noviazgo"… como cuatro meses, creo… por ahí…
Mimi saltó de su asiento.
-¡¿qué?! ¿Tanto tiempo? ¿¿Pero cómo…?? No me di cuenta, no…
-nadie se dio cuenta al principio…
Ella frunció el entrecejo.
-¿cómo nadie? ¿Quién además de ti sabe? ¿Por qué no le dijeron a nadie más?
-er… saben… todos salvo Taichi-san…
-¿¿TODOS?? O sea, yo, la única idiota, y Taichi-san y nadie nos dijo y…
-¿quieres calmarte por favor? – pidió Takeru, ya más que exasperado. Entendía el enojo de Mimi, pero no lo dejaba hablar, y mucho menos, explicar. – yo también me sorprendí al verlos. No nos dijeron por su voluntad, Mi-chan. No tenían intenciones de decirnos. Primero los descubrí yo, y me pidieron que les guardara el secreto, luego Yamato y Sora-chan, y hace poco Jou-san…
-¿estuvimos juntos un mes de vacaciones y ni Yamato ni tú planeaban contarme?
-disculpa. Hikari-chan nos rogó que no le dijéramos a nadie… no por ti, exactamente, es sólo que no querían que Taichi-san se enterara…
Ella hizo un puchero.
-eso no quita que sienta que me dejaron fuera.
Takeru se encogió de hombros.
-si se besaron enfrente de todos sabiendo que tú estabas aquí, yo creo que por fin se dieron cuenta que es mejor tener una relación abierta. De seguro ya hablaron o hablarán con Taichi al respecto y pensaban decirte de todas formas.
-supongo… no voy a negar que hacen bonita pareja… - Mimi pareció olvidarse de su enojo y sonrió ampliamente. – con razón Hikari-chan actuaba tan extraño con Miyako-san, que curioso darse cuenta ahora…
La chica comentó algo más sobre los nuevos acontecimientos que había adquirido. Takeru escuchó con paciencia… Mimi seguía actuando como si nada hubiese pasado… ya lo había olvidado por completo… había olvidado lo que él le había dicho, sus sentimientos…
Tenía que olvidar él también, tenía que convencerse de eso… quería mantener su amistad con ella, pero sin ese dolor en el pecho…
Y sin el dolor en la pierna, también, porque la caída, aunque nunca lo diría en voz alta, fue causada por la distracción que ella le dio… necesitaba recuperarse rápido de todo, o hacer algo al respecto…
Continuará…
Notas:
Ari: uh… hablamos de todo un poco… pero yo quiero volver a la historia de Sora que relató Taichi… lo del sueño erótico… bueno, un sueño erótico es un sueño erótico y es normal tener uno. Especifico normal, porque, como tantos otros temas tabú, se cree que está mal que alguien piense así. No tanto para los hombres, al menos, pero sí para las mujeres. En mi país se cree, por ejemplo, que las mujeres no se masturban. Y las mujeres efectivamente no se masturban porque creen que es anormal hacerlo. Bueno, decidí que además de una clase de idioma y cultura, podía intentar enseñar algo de educación sexual (lo poco que sé, claro), porque la gente que sabe dice menos tonterías en sus conversaciones, y así, los programas de TV que tocan el tema de sexo no serían tan malos (aunque han mejorado, al menos los dos últimos que vi eran decentes, en uno incluso una actriz mencionó cómo un par de sus novios eran celosos del tamaño de su "juguete" jojo ^^).
Cris: ejem... sin comentarios *^_^*
Ari: ah, y lo del "Oh, baby"… bueno, no me sé el nombre real del helado (porque no sé coreano ¬¬), pero bueno, ese nombre se lo colocaron unas amigas, y le queda muy bien *^^* los que dicen que el helado es usado como remplazo del sexo (o a falta del mismo), creo que tienen razón, en especial porque este helado en especifico, además de su exquisito sabor a nueces, tiene, um… la forma exacta *^^*. Lástima que no lo vendan en el mercado coreano… lo echo de menos… sigh…
Cris: anda ¿en serio que existe este semejante helado XDDD?
Ari: ¡claro! Si lo vuelven a traer al mercado te avisaré para que vayas a comprar, lo venden cerca de la Casa Rosada ^^ (no, ninguna relación con la casa de gobierno de Argentina jaja, en esta casa venden artículos orientales, gracias).
Cris: ¡que bien! bueno… Ari-chan, el próximo capítulo va a ser muy especial ¿verdad? ^^
Ari: ¡así es! ¿El especial KARAOKE! *ah… Vanilla… drols~~~~*
Cris: ^^U ¡recuerden dejar review!
