¡¡¡¡¡¡¡¡PERD"N POR NO ACTUALIZAR!!!!!!!!!!! ¡¡HE TENIDO TANTAS PRUEBAS Y TANTA TAREA QUE NI SIQUIERA HE PODIDO CONTINUARLO!!!!!!!! ¡¡¡¡¡PERD"NENME!!!!!!!!!

GRACIAS A SEXY KITTY CHA (MI MEJOR AMIGA!!!! ), Baku-CHAN Y ANA91!!!!!!!!!!

LAS QUIERO A TODAS!!!!!!!!!!

Seth gritó en dolor. Los latigazos que acababa de recibir no fueron muy lindos que digamos. Apretó sus dientes, y apretó hasta sangrar sus puños. Aún no aprendía la lección, pero no le quedaba otra opción más que aprenderla.

Atemu miraba desde una esquina, el sufrimiento de su primo. Pero le parecía indiferente. Nunca él tuvo que jugar con ese tipo de cosas. Intentar obtener el poder divino de un dios, es un suicidio. Sea o no, inexperto.

-¡¡Oh Bakura!! ¡¡Mira!! ¡¡Es precioso!!

-Hizo un buen trabajo.

-¡Muchas gracias, señor!-replicó el joyero, colocando una mano detrás de su nuca.

-Merece el doble del pago. Es muy difícil manejar la plata. Tome.-le tiró delante de sus narices dos bolsas llenas de monedas de oro.

-E-Era una sola bolsa...no dos...

-Lléveselo. Es usted muy bueno.

-Si necesita que le haga otro favor, sólo contácteme. Mi nombre es Tristán. Si, soy extranjero.-agregó al ver la cara del ladrón.

-Ya veo. Muy bien. Entonces, contaré con usted.

-Adiós.

-Bakura...

-¿Si?

Ambos llegaban a su guarida. Se recostaron en la cama, uno sobre otro. El dios hacía pequeños círculos en el pecho del ladrón, que suspiró felizmente.

-¿Podríamos?

-No lo sé...

-¿Por qué no?

-Porque.....No quiero...

-¡Malo!-dijo divertidamente el dios, haciéndole cosquillas al ladrón, que comenzó a  reírse a carcajadas.

-¿¡Ah si!? ¡Ahora verás!

Se tiró sobre él, pero en vez de vengarse con cosquillas, comenzó a besarlo profundamente. El más chico se adaptó al cuerpo que se encontraba sobre el suyo.

-Bakura, ¿Puedes hacerme tuyo? ¿Aquí, ahora?

-Si, ya me encuentro lo suficientemente seguro cómo para hacerte mío.

-Bakura...

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'Nuestros labios se encontraron,

Y en una suave batalla largaron,

Para  ver quién de los dos,

Dominaba más...'

Ryo le quitó suavemente el tapado rojo a Bakura, mientras este besaba y mordisqueaba su cuello lentamente. El joven dios gimió muy bajo, terminando de sacarle el tapado a su amante. El ladrón prosiguió a quitarle esa especie de capa azulada, que traía puesta, logrando su objetivo al darle pequeños mordiscos debajo de la oreja a Ryo.

Las ropas cayeron al suelo lentamente, y ambos amantes quedaron desnudos, sobre la cama, Bakura sobre Ryo, admirando cada detalle de este joven dios. Gimiendo ante la escena delante de él, Bakura murmuró ciertas cosas, que hicieron sonrojar al joven dios.

-¿Por qué te sonrojas?

-La manera en que me miras, y las cosas que me murmuras...¿Cómo no hacerlo?-ante esto, Bakura rió.

-Es cierto. Lo veo difícil no hacerlo.

El joven dios ríe suavemente, atrayendo el cuerpo de su compañero, para darse calor en esa noche de frío en el Egipto. Se besaron intensamente, jugando con sus manos, jugando con sus lenguas, buscando la dominancia entre ellas, pero le moreno le ganó a su acompañante.

Ambos gimen suavemente, frotando sus cuerpo entre si, murmurando el nombre del otro. Bakura comenzó a bajar lentamente, hasta sus pezones, donde los lamió, besó y mordió a cada uno, haciendo que el joven dios gritara y se arqueara en placer.

Volvió a los finos labios del dios, para separar con sus miembros inferiores, las piernas de Ryo, que suavemente las separó para que se pudiera colocar entre ellas. El dios abrazó fuertemente a su compañero, al sentir sus dedos penetra suave y delicadamente en su entrada. Clavó sus uñas en la espalda del ladrón, suspirando pesadamente.

-Ohhh...Bakura...-mordió su labio inferior, al sentir que rozaba un área especial, mandando oleadas de placer. (N/A: La verdad que dudo que los hombres tengan el Punto G que nosotras tenemos...)

Una vez que estuvo listo, colocó las piernas de Ryo alrededor de su cintura, para una mejor penetración, causando al joven dios, un fuerte sentimiento de placer. Abrió sus ojos como platos, para luego soltar un fuerte gemido.

-¿Te encuentras bien?-dijo Bakura preocupado.

-S-Si...-suspiró, al sentir que su ladrón se movía dentro de él.

El moreno tomó el miembro del dios con su mano, acariciándolo sutilmente, haciendo que Ryo temblara ante el toque que se le estaba haciendo. Lo tomó fuertemente, pero sin lastimarlo, y comenzó a entrar y salir, suavemente, acariciando al joven dios al mismo tiempo que sus movimientos.

Bakura aumentó su velocidad, hasta que Ryo le alcanzó, arqueándose sobre la cama, con su cuerpo, al igual que su compañero, lleno de sudor.

El placer tan intenso, hizo que el menor se liberara fuertemente sobre su torso y el de su acompañante, gritando su nombre. El moreno gritó igual, al liberarse dentro de este...

Ambos cuerpos se recostaron uno al lado del otro, Bakura sin salir de su amado, se acurrucó sobre este. Pronto recobraron sus alientos, y la luz de la luna los iluminó a ambos con su resplandor.

El moreno sonrió abiertamente.

-Estás feliz, ¿Verdad?-dijo, al ver el brillante color plata de la luna.

-Aja...-dijo rápidamente, asintiendo velozmente.

Besó a su compañero desesperadamente, cómo si nunca lo hubiera besado antes. Luego se separó, suspirando felizmente. Tomó las sabanas y cubriendo a su amado y su cuerpo, se hecho a los brazos de Bakura.

-¿Tendrás que irte?

-No puedo permanecer mucho tiempo en el mundo humano. Ra se pondría furioso...Pero no te dejaré...

-¿Hay alguna manera de que pueda ir contigo?

Ryo abrió sus ojos sorpresivamente, y cambió su expresión, a una de total malicia en sus ojos.

-Claro, hay una manera...