WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAZAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!! TOY DE VUELTA!!!!!!!!

evil navi: o.o De veras estás embobada con mi fic? Pues yo con el tuyo!!! Gracias!!

Zefie Chan: Quien quieras que seas, gracias!! MENTIRA PACHA!!! Aunque, es lindo tu nuevo nick, preferiría el anterior. GRACHIAS!! -

Ana91: Mi amiga!! Tanto tiempo!! Y tuviste que abrir la boca!!! Menos mal que puse en el bio que no abrieras la boca...¬¬ Te lo paso por hoy. Gracias!! -

Noriko Sakuma Goddess of Hell: Vaya Vaya!!! Al fin te tengo en mi lista de reviews!!!!! Y que riview más largo, mujer!! °° Un plushie!!! - Tienes un plushie mío!!!!! Y yo uno de vos!!!!! XD Y los hiciste a mano!!! Quiero uno!! Me lo haces? Gracias por el riview!!

Diosa Atena: NnnNNnnNNnNNooOOooOOooOO!!!!!! La transformación de Bakura no será a través de un lemmon!!! Lee el capi este, o no me acuerdo si era el que sigue, donde se enterarán cómo Bakura será parte de los dioses.

ALEJAMOTO: Gracias!!!! Y perdón si no he leído tus fics. No he tenido tiempo de hacerlo. -U

Pueden creer que me llegaron 4 riviews del capi 9 de fallen moon en un día?!?!?!?!?! OO

Estaba contentísima!!!!!!!!! XD!!!!!!

Ahora, con la historia!!!!

P.D.: El siguiente capi, el 11, es el último!!! T.T

-Según Jue...-comenzó Malik.-Lo vio usar un artículo del milenio, creo que fue la sortija. No me la quiso mostrar, ni a Horus tampoco. Seguramente la posea, pero piensa que no lo dejaremos ser una divinidad para quedarse con Jue.

-Hermano, tal vez si es Jue quién lo juzga, tal vez se sentirá más calmado.

-Lo sé. Pero sólo nosotros tres podemos juzgarlo, junto con Anubis y Osiris.-respondió el de cabellos rubios claros.

-¿Por qué no podría?-preguntó Rashid.

-Porque es un dios lunar. Y los dioses lunares no pueden juzgar. No me pregunten por qué, ya que no lo sé.

-Pero Touzoko se rehúsa.-dijo Isis.

-Pues, tendremos que convencerlo a través de Jue.

-Pues, ¿Por qué no dejamos que Jue vea el juicio?-dijo Horus, con su forma de halcón, colocándose sobre el hombro de su madre.-Así Touzoko aceptará.

-Es buena idea, hijo. Tal vez se sienta más seguro.-dijo la diosa.

-Tranquilízate Bakura.-dijo Ryo, abrazando a su compañero.-No te pasará nada.

-No confío en ellos. Lo lamento...

-No te preocupes. Todo saldrá bien. Me dijeron que puedo supervisarlo. Estaré allí contigo.

-¿Y si no paso la prueba? Si o sí tendrás que regresar algún día. Y no quiero. Estaré solo nuevamente. Y no quiero volver a estarlo.-dijo Bakura, abrazando fuertemente al dios.-¿Sabes? Tengo miedo...

-¿Miedo? ¿De qué?

-De que....No pase la prueba, y tenga que alejarte de mi.-hundió su rostro en su suave cabello plateado, inhalando su aroma.

--¡¡TÍO!!

-O-O

--¿¡Dónde está mi tío favorito?!

-QuenomeencuentreQuenomeencuentreQuenomeencuentre QuenomeencuentreQuenomeencuentreQuenomeencuentre QuenomeencuentreQuenomeencuentreQuenomeencuentre QuenomeencuentreQuenomeencuentreQuenomeencuentre QuenomeencuentreQuenomeencuentreQuenomeencuentre!!!!!!!-se decía a si mismo Malik, detrás del trono de Ra.

--¡¡Ahí estás!!-dijo el chico, haciendo que sus cabellos negros ondearan un poco.

-T-T ¿Qué desea mi querido y hermoso sobrino?

-Jijijijiji...

-Jono...

-Mi faraón, ¿Qué desea?-respondió el siervo.

-¿Cómo está la salud de Seth?-el rubio sonrió.

-Mi amo se encuentra mucho mejor. Aún tiene fiebre, pero ya no se siente tan cansado. Ha reposado mucho últimamente, para recuperar sus fuerzas, y seguir con su trabajo, como sacerdote de este palacio.

-Me alegra mucho saber eso.-dijo el faraón, acercándose a su cama, donde reposaba su primo durmiente.

Este despertó el repentino cambio de peso cerca de él, y miró con sus ojos entrecerrados al joven tri color que se encontraba frente a él. Sonrió débilmente, y los volvió a cerrar.

-Te ves mucho mejor hoy Seth.

-Lo sé. Alguien me ha estado cuidando perfectamente.-dijo, dirigiéndose al esclavo, que se sonrosó.

-No es nada mi amo. Yo lo cuidaré hasta que se recupere del todo.-contestó el rubio, colocando su cabeza en el regazo del sacerdote.

-Me alegro que ambos se lleven tan bien. Los dejaré a solas, para que estén más íntimamente.

El sacerdote y el esclavo se sonrojaron suavemente, cuando el faraón salió de la habitación con una sonrisa triunfante en su rostro.

-Pero tienes que ser paciente con ellos. ¿Entendido?

-Si, Horus.

-Y no quiero que mates a Seth en cuanto lo veas.

-Si, Horus. --

-- ¡Que bien que has entendido!

--

-Entonces, vayamos al palacio ahora mismo, para terminar de arreglar el problema de Seth y Jue. ¿De acuerdo? ¿Sin violencia?

-Sin violencia....

-- No puedo creer que me hagas caso. ¿Por qué será?

-Porque si no hago caso me harás comer arena otra vez.

-- ¡Exacto! ¡Que perceptivo tío!

-Mmmmmm.... Te odio...

-- ¡Y yo te quiero!

Seth se sentó en su cama, cuando el faraón y los demás sacerdotes entraron, con ambos dioses detrás de ellos. Jono se refugió en el abrazo de su amo, al ver a los intimidantes dioses. Todos se colocaron alrededor de la cama, y ambos dioses comenzaron a hablar.

-¿Listo Bakura?

-Algo...

-No te pongas nervioso. Yo estaré allí para observarte, y apoyarte.

-Nunca he hecho esto. Tal vez no la pase.

-Vamos, ya debemos irnos. Y si la pasarás.

Salieron de la guarida, y en la entrada de esta, se encontraba un carro con dos hermosos caballos, con sus crines de fuego, y sus pieles doradas, reflejando brillantemente el resplandor del fuego. Los caballos relincharon, con impaciencia para lanzarse a los cielos.

-Que hermosos animales...-susurró para si mismo el ladrón.

Ambos albinos subieron al carro, e inmediatamente, los animales remontaron vuelo, golpeando sus cascos en el inexistente suelo de aire...

"Luego, estaré caminando

Caminando en círculos

Observando, esperando

Por algo

Siéntenme, tócame, sáname

Ven y llévame a lo alto..."