Bueno agradecer a los que van a leer y decir que por lógica se darán cuenta que es la cancion de sin bandera escrita por leonel garcía. De antemano Gracias. No se si la letra que de la canción va a estar buena pero ¡¡HEY WHATEVER!! (-.- Mucho Westlife). Si sigo esta historia va a salir Hao, pero como se los explico... va a ser diferente, siempre el gemelo de yoh pero en su versión buena jejejeje... Todos los personajes tienen 19 [**...Por Ahora...**]
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"Que lloro"
En la casa Asakura no era un día cualquiera, sería el último que tendría la chica ainu en el lugar. Pues a la mañana que seguía tenía que irse a estudiar a una universidad de Inglaterra [**Mí sueño de toda la vida**], no quería dejar a sus amigos pero sus abuelos habían hecho todo lo posible por mandarla allá para tener una mejor vida y mejores oportunidades. El ambiente era un poco triste. Ana, aunque no lo aceptará, aquel carismatico carácter que tiene la chica le haría falta ya que Tamao había vuelto a donde los abuelos de Yoh, el cuál desde hace un tiempo ya tenía una relcaión más estable con su prometida, por no decir que se habían adelantado al matrimonio. Horohoro, por razones obvias, extrañaría a su hermana, además talvez con la partida de la chica regresaria a Hokkaido que es al lugar al que le pertenece. Len Tao, el chico felino con caracter frío, al parecer no le hacía mucha importancia a la partida de la chica o por lo menos eso demostraba auqnue no era la verdad, esa chiquilla, como el solía llamarle, le haría más falta de la que el creía pues desde que la conoció le parecio una linda joven y más aun que ya estaba más crecida, tenía que hacer algo, por lo menos decirle algo a la chica para que se diera cuenta de sus sentimientos. Podía pelear hasta morir pero en esas circunstancias su cerebro dejaba de funcionar al ver la gracia de la ainu. Las maletas de la peliazul ya estaba listas para mañana. Pilika no estaba 100% segura de su partida por la mañana siempre había querido hacer algo pero por su timidez le fue imposible, desde siempre había tenido raros sentimientos sobre Len, no lo sabía, pero a pesar de mostrarse frío y duro con los demás ella sabía que era una mascara y que la usaba porque tenía miedo de verse lastimado emocionalmente.
La noche se asentuó en la ciudad de Japón. Uno de los habitantes de la casa Asakura no podía dormir, se encontraba en el techo, era un lugar muy agradable para él pues podía pensar sin ser molestado por alguna persona. Len Tao, yacía viendo las estrellas del manto lunar, su mirada estaba como distante no sabía como reaccionar. Si Pilika se iba lo más probable era que ya no regresaría. No tendría oportunidad de probar sus labios ni de tenerla a su lado, pero ya no había vuelta de hoja, ya nada de lo que el hiciera podía hacer que la chica se quedará ahí.
Esta un poco helado acá arriba, no lo crees?-
eh...?- preguntó un poco confundido, al darse vuelta se encontró con la mujer que ocupaba sus pensamientos.
Que haces aquí...?- pregunto curiosa.
Pensando- respondió secamente
No quisiera irme... tengo una vida aquí... quizá deba quedarme, no lo crees?... sería más feliz a su lado-
Eso depende de como te sientas, no piensas que le debes esto a tus abuelos que han hecho todo lo que pudieron para cumplir este viaje- le dijo, después de unos segundos de su parlamento se pregunto a sí mismo "como diablos le dije eso"
Tienes Razón, pero por alguna razón, tengo miedo de irme Len, temo no verte de nuevo y que te olvides de mí- confesó
Que yo... te olvide...?- dudó el chico
Tú no lo sabes?, no te has dado cuenta?-
De que estás hablando?- repitió
Es mejor que me vaya a dormir para no levantarme desvelada- fuel lo último que le dijo bajando de nuevo a la casa
En el aeropuerto. Pilika ya se iba de la ciudad, era definitivo, debido a los estudios, más no sabía que con su partida dejaría un corazón roto. A su hermano Horohoro le haría falta al igual que los demás recidentes de la casa Asakura, como se decía en el inicio. Todos los personajes yacían deseándole un buen viaje. Aún no era la llamada de su vuelo así que la mayoría estaban conversando. De repente el único que hacía falta ya había llegado. Len Tao. Sus ojos dorados y cabello violeta se acercaban a paso lento hacía todos los demás, vestido para la ocasion, todo de negro. No podía faltar, no debía faltar. Pilika se alegró mucho de la llegada de uno de sus amigos, la verdad quería despedirse de el, estaba segura del porqué... pero aunque el no le correspondiera, así era... quería verlo...
Horo: Hablando del rey de china y este que se asoma
Yoh: Buena esa Horohoro!
Ana: Silencio!
Manta: Qué bien que viniste len...
Al parecer el chino hizo caso omiso a todo lo hablado, tenía una misión, un sólo objetivo que tenía propuesto cumplir esa mañana. Era ahora o nunca.
Pilika: Len... gracias por venir
Sólo he venido a entregarte esto y desearte un buen viaje- habló seriamente entregándole una carta y de la misma manera en la que llegó salió de la sala en la que estaba dejando a una ainu muy confundida. El sobre simplemente decía "pilika" así que la peliazul lo abrió y desdobló una pequeña fracción de página, las palabras que contenía eran las siguientes:
"...Quedate un momento así
No mires hacia mi, que no podré aguantar
Si claves tu mirada, que me hiere el cuerpo
Me ha pasado antes que no puedo hablar...
...Tal vez pienses que estoy loco
Y es verdad un poco, tengo que aceptar
Pero si no te explico lo que siento dentro
No vas a entender cuando me veas llorar...
...Nunca me sentí tán solo
Cómo cuándo ayer de pronto lo entendí mientras callaba
La vida me dijo a gritos
Que nunca te tuve y nunca te perdi, y me explicaba....
...Que el amor es una cosa
Que se da de pronto en forma natural, lleno de fuego
Si lo fuerzas se marchita
Sin tener principio llega a su final...
...Ahora tal vez lo puedas entender
Que si me tocas se quema mi piel
Ahora tal vez lo puedas entender
Y no te vuelvas si no quieres ver...
...Que lloro por ti
Que lloro sin ti
Que ya lo entendi, que no eres para mi
Y lloro...."
Inevitablemente un lágrima recorrió la mejilla de la ainu. Nadie había visto eso. Prácticamente el chino se le había declarado. No estaba segura muy segura de como reaccionar, si dependiera de ella, correría a abarzarlo y besarlo hasta morir. Ya no podía, no ahora. Era demasiado tarde. Inmediatamente salió corriendo de la sala de espera del aeropuerto y seguidamente encontro a los ojos dorados.
Len: No sabía que decirte... es más.... en estos momentos no estoy muy seguro de como actuar
Pilika: Len...
Len: Tenía que decirlo... tenía que sacarlo dentro de mi... debo decirte qué... Yo te Amo pilika... más de lo que te puedas imaginar
Pilika: Pero... ¿¿¡¡porqué esperaste tanto para decirmelo!!??
Len: No me pidas explicaciones que no puedo dar... simplemente pasó.... No estoy tratando de detenerte de tu viaje... sólo que no me quería quedar con esto en mi interior
Pilika: Yo... ¿porque?... ¡¡debiste decirmelo!!- gritó, acto seguido fue el de llorar
Len: No debes de llorar... y menos por mí... este no es un adios, pero tampoco un hasta luego.... talvez te vea dentro de poco talvez no... pero recuerdalo pilika yo te amo- fué lo último que se escucho de la boca del chino dorado.
La peliazul no tenía respuestas en su cabeza, amaba a Len pero ya no habría nada por hacer... Su viaje no podía posponerse. Estaba fría, congelada al recibir la noticia de parte del Tao, todo se pudo imaginar menos eso. La llamada de su vuelo se escuchaba, al chica celeste fue inmediatamente dándoles a todos un abrazo y abordó el avión. El despegue fue suave y triste para la chica ya que dejaba a todos sus amigos, pero talvez algún día regresaría para hablar con él. Talvez este viaje le sirviera para olvidarse del chico o por lo menos eso era lo que quería ¿si lo amaba, porque no había dado el primer paso? ¿porque no le había dicho antes?. Len Tao el chico dorado y frío veía desde un ventanal, alejado de los demás, como el amor de su vida se iba, como granos de arroz se le había escapado de las manos..
...Ahora talvez lo puedas entender...porque ya lo entendí, no eres para mí- se escucho de sus labios mientras una timida lágrima salía de esos ojos tan provocadores.
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Algo corto este capítulo, lo puedo continuar si gustan, dejenmelo saber en los reviews ¡¡Please!! o de igual manera sólo lo dejo en One-Shot... que opinan??
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"Que lloro"
En la casa Asakura no era un día cualquiera, sería el último que tendría la chica ainu en el lugar. Pues a la mañana que seguía tenía que irse a estudiar a una universidad de Inglaterra [**Mí sueño de toda la vida**], no quería dejar a sus amigos pero sus abuelos habían hecho todo lo posible por mandarla allá para tener una mejor vida y mejores oportunidades. El ambiente era un poco triste. Ana, aunque no lo aceptará, aquel carismatico carácter que tiene la chica le haría falta ya que Tamao había vuelto a donde los abuelos de Yoh, el cuál desde hace un tiempo ya tenía una relcaión más estable con su prometida, por no decir que se habían adelantado al matrimonio. Horohoro, por razones obvias, extrañaría a su hermana, además talvez con la partida de la chica regresaria a Hokkaido que es al lugar al que le pertenece. Len Tao, el chico felino con caracter frío, al parecer no le hacía mucha importancia a la partida de la chica o por lo menos eso demostraba auqnue no era la verdad, esa chiquilla, como el solía llamarle, le haría más falta de la que el creía pues desde que la conoció le parecio una linda joven y más aun que ya estaba más crecida, tenía que hacer algo, por lo menos decirle algo a la chica para que se diera cuenta de sus sentimientos. Podía pelear hasta morir pero en esas circunstancias su cerebro dejaba de funcionar al ver la gracia de la ainu. Las maletas de la peliazul ya estaba listas para mañana. Pilika no estaba 100% segura de su partida por la mañana siempre había querido hacer algo pero por su timidez le fue imposible, desde siempre había tenido raros sentimientos sobre Len, no lo sabía, pero a pesar de mostrarse frío y duro con los demás ella sabía que era una mascara y que la usaba porque tenía miedo de verse lastimado emocionalmente.
La noche se asentuó en la ciudad de Japón. Uno de los habitantes de la casa Asakura no podía dormir, se encontraba en el techo, era un lugar muy agradable para él pues podía pensar sin ser molestado por alguna persona. Len Tao, yacía viendo las estrellas del manto lunar, su mirada estaba como distante no sabía como reaccionar. Si Pilika se iba lo más probable era que ya no regresaría. No tendría oportunidad de probar sus labios ni de tenerla a su lado, pero ya no había vuelta de hoja, ya nada de lo que el hiciera podía hacer que la chica se quedará ahí.
Esta un poco helado acá arriba, no lo crees?-
eh...?- preguntó un poco confundido, al darse vuelta se encontró con la mujer que ocupaba sus pensamientos.
Que haces aquí...?- pregunto curiosa.
Pensando- respondió secamente
No quisiera irme... tengo una vida aquí... quizá deba quedarme, no lo crees?... sería más feliz a su lado-
Eso depende de como te sientas, no piensas que le debes esto a tus abuelos que han hecho todo lo que pudieron para cumplir este viaje- le dijo, después de unos segundos de su parlamento se pregunto a sí mismo "como diablos le dije eso"
Tienes Razón, pero por alguna razón, tengo miedo de irme Len, temo no verte de nuevo y que te olvides de mí- confesó
Que yo... te olvide...?- dudó el chico
Tú no lo sabes?, no te has dado cuenta?-
De que estás hablando?- repitió
Es mejor que me vaya a dormir para no levantarme desvelada- fuel lo último que le dijo bajando de nuevo a la casa
En el aeropuerto. Pilika ya se iba de la ciudad, era definitivo, debido a los estudios, más no sabía que con su partida dejaría un corazón roto. A su hermano Horohoro le haría falta al igual que los demás recidentes de la casa Asakura, como se decía en el inicio. Todos los personajes yacían deseándole un buen viaje. Aún no era la llamada de su vuelo así que la mayoría estaban conversando. De repente el único que hacía falta ya había llegado. Len Tao. Sus ojos dorados y cabello violeta se acercaban a paso lento hacía todos los demás, vestido para la ocasion, todo de negro. No podía faltar, no debía faltar. Pilika se alegró mucho de la llegada de uno de sus amigos, la verdad quería despedirse de el, estaba segura del porqué... pero aunque el no le correspondiera, así era... quería verlo...
Horo: Hablando del rey de china y este que se asoma
Yoh: Buena esa Horohoro!
Ana: Silencio!
Manta: Qué bien que viniste len...
Al parecer el chino hizo caso omiso a todo lo hablado, tenía una misión, un sólo objetivo que tenía propuesto cumplir esa mañana. Era ahora o nunca.
Pilika: Len... gracias por venir
Sólo he venido a entregarte esto y desearte un buen viaje- habló seriamente entregándole una carta y de la misma manera en la que llegó salió de la sala en la que estaba dejando a una ainu muy confundida. El sobre simplemente decía "pilika" así que la peliazul lo abrió y desdobló una pequeña fracción de página, las palabras que contenía eran las siguientes:
"...Quedate un momento así
No mires hacia mi, que no podré aguantar
Si claves tu mirada, que me hiere el cuerpo
Me ha pasado antes que no puedo hablar...
...Tal vez pienses que estoy loco
Y es verdad un poco, tengo que aceptar
Pero si no te explico lo que siento dentro
No vas a entender cuando me veas llorar...
...Nunca me sentí tán solo
Cómo cuándo ayer de pronto lo entendí mientras callaba
La vida me dijo a gritos
Que nunca te tuve y nunca te perdi, y me explicaba....
...Que el amor es una cosa
Que se da de pronto en forma natural, lleno de fuego
Si lo fuerzas se marchita
Sin tener principio llega a su final...
...Ahora tal vez lo puedas entender
Que si me tocas se quema mi piel
Ahora tal vez lo puedas entender
Y no te vuelvas si no quieres ver...
...Que lloro por ti
Que lloro sin ti
Que ya lo entendi, que no eres para mi
Y lloro...."
Inevitablemente un lágrima recorrió la mejilla de la ainu. Nadie había visto eso. Prácticamente el chino se le había declarado. No estaba segura muy segura de como reaccionar, si dependiera de ella, correría a abarzarlo y besarlo hasta morir. Ya no podía, no ahora. Era demasiado tarde. Inmediatamente salió corriendo de la sala de espera del aeropuerto y seguidamente encontro a los ojos dorados.
Len: No sabía que decirte... es más.... en estos momentos no estoy muy seguro de como actuar
Pilika: Len...
Len: Tenía que decirlo... tenía que sacarlo dentro de mi... debo decirte qué... Yo te Amo pilika... más de lo que te puedas imaginar
Pilika: Pero... ¿¿¡¡porqué esperaste tanto para decirmelo!!??
Len: No me pidas explicaciones que no puedo dar... simplemente pasó.... No estoy tratando de detenerte de tu viaje... sólo que no me quería quedar con esto en mi interior
Pilika: Yo... ¿porque?... ¡¡debiste decirmelo!!- gritó, acto seguido fue el de llorar
Len: No debes de llorar... y menos por mí... este no es un adios, pero tampoco un hasta luego.... talvez te vea dentro de poco talvez no... pero recuerdalo pilika yo te amo- fué lo último que se escucho de la boca del chino dorado.
La peliazul no tenía respuestas en su cabeza, amaba a Len pero ya no habría nada por hacer... Su viaje no podía posponerse. Estaba fría, congelada al recibir la noticia de parte del Tao, todo se pudo imaginar menos eso. La llamada de su vuelo se escuchaba, al chica celeste fue inmediatamente dándoles a todos un abrazo y abordó el avión. El despegue fue suave y triste para la chica ya que dejaba a todos sus amigos, pero talvez algún día regresaría para hablar con él. Talvez este viaje le sirviera para olvidarse del chico o por lo menos eso era lo que quería ¿si lo amaba, porque no había dado el primer paso? ¿porque no le había dicho antes?. Len Tao el chico dorado y frío veía desde un ventanal, alejado de los demás, como el amor de su vida se iba, como granos de arroz se le había escapado de las manos..
...Ahora talvez lo puedas entender...porque ya lo entendí, no eres para mí- se escucho de sus labios mientras una timida lágrima salía de esos ojos tan provocadores.
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Algo corto este capítulo, lo puedo continuar si gustan, dejenmelo saber en los reviews ¡¡Please!! o de igual manera sólo lo dejo en One-Shot... que opinan??