CAPÍTULO 13: Yo seguiré en pie cuando tú te hayas hundido
***
La sala Ruido era un hervidero aquellos días. Se estaba preparando el próximo concierto de Bad Luck, que acabaría con una actuación de Nittle Grasper como artistas invitados. Tohma había aprovechado la ocasión y la había transformado en una hábil maniobra para presentar a lo grande el último single de NG. Hacía ya días que no quedaba ni una sola entrada.
Con lo que nadie había contado, de todos modos, era con el grupo de teloneros. . .
Tras el enfrentamiento de Aizawa con Shuichi y Yuki, y después de que Tohma le echara de su empresa (A parte de obsequiarle con varias semanas soñando con coches que se abalanzaban sobre él), los miembros de ASK lo pasaron francamente mal. Ninguna discográfica se atrevía a cobijar bajo sus alas al grupo que había sido expulsado de manera tan extraña de NG Records, por muy populares que fueran, de manera que su nombre había caído casi en el olvido. Hasta que, finalmente, una pequeña discográfica que acababa de empezar decidió aprovechar la ocasión e intentar relanzarles, dado que el trabajo ya estaba medio hecho. ¿Cómo habían conseguido meterles a hacer de teloneros de los dos grupos más populares de todo Japón? Eso era algo que nadie se explicaba todavía.
Entre ASK y los otros dos grupos, se firmó una especie de acuerdo no escrito para no coincidir nunca en la sala para sus respectivos ensayos, pero una noche, al acabar de ensayar y cuando ya estaban todos en el camerino preparándose para marcharse, Shuichi tuvo que volver al escenario. Se había dejado la mochila (Qué desastre de niño. . .)
Saltando alegremente entre los cables, llegó hasta detrás de los amplificadores, donde había dejado su bolsa. Cual no sería su horror cuando, al levantar la cabeza, vio que entre las patas del escenario estaba Tachi Aizawa.
- Vaya, vaya, vaya. . . ¿Pero a quién tenemos aquí? Si es el maravilloso Shuichi Shindou. ¿Tu maromo (1) no ha venido contigo?
Shuichi, pese a su miedo, hizo acopio de todo su valor para enfrentarse a la perversa sonrisa de Aizawa. No pensaba permitirle hablar mal de su Yuki.
- Yuki no es mi maromo. Es. . .
- Oh, disculpa mi torpeza – Aizawa caminó hacia Shuichi, colocándose frente a él y tapando la única salida que quedaba entre él y los enormes altavoces - ¿Cómo deberíamos llamarle entonces? ¿Tu "pasaporte hacia la fama"? – Acorraló a Shu contra uno de los wafles, apoyando una mano justo al lado de su cara. Shuichi temblaba como una hoja. Todavía tenía muy presente el recuerdo de la paliza que recibió en su día de manos de aquel tipo – Tal vez yo también debería liarme con un escritor para ganar algo de publicidad. O tal vez con un actor ¿Tú que me aconsejas, pequeño Shindou? – Le pellizcó una mejilla, haciéndole mucho daño.
- Ah, Aizawa-san, que agradable sorpresa volver a vernos ^_^ – Como salido de la nada, Tohma apareció en el otro extremo del escenario - ¿Shindou-kun te está molestando?
- No. . . No, sólo estábamos. . . teniendo una charla. . . de vocalista a vocalista – Intimidado, apartó el brazo y se alejó un poco de Shuichi ¿Cómo lo hacía aquel hombre? ¿Tenía un radar, como los murciélagos?
- Bien, me alegro – Tohma ya estaba junto a ellos. Cogió a Shuichi por un brazo y, suavemente, tiró de él para sacarle de donde Aizawa le había arrinconado – Porque por nada del mundo querríamos interferir en los ensayos de alguien que ha accedido a tocar prácticamente gratis para colarse en nuestro concierto, ¿verdad Shuichi? ^_^
Tachi apretó los dientes.
Shu, instintivamente, se había colocado detrás de Tohma, agarrándose un poco a su americana y mirando a Aizawa por encima del hombro de su jefe. No contestó. Seguchi se giró un poco para mirarle. El chico seguía temblando, con una cara de absoluto terror. Qué criatura tan patética. ¿Qué podían haber visto en él? Le pasó un brazo por los hombros en un gesto protector, como si fuera hijo suyo, y le empujó hasta colocarle a su lado.
- Por favor, Shindou, muestra un poco de dignidad – Le susurró al oído.
- Em. . . No. . . no queremos – Shuichi no sabía si estaba más asustado de encontrarse otra vez frente a Aizawa, o de tener contacto físico directo con Seguchi.
- Por supuesto que no ^_^ Debes felicitar a tus agentes de mi parte, Aizawa- san. Su trabajo está siendo realmente bueno. Ahora, discúlpanos. Shindou- kun, nos vamos – Y dando media vuelta, arrastrando a Shu con él, empezó a caminar hacia el lado del escenario por el que había aparecido.
Aizawa seguía con los dientes y los puños apretados. Cómo le repugnaba aquel sujeto. . . aquel ser que no se sabía si era un hombre una mujer, ni lo que pasaba por su jodida cabeza, que parecía tener ojos en todas partes, que casi había hundido su carrera sólo por el hecho de que estaba encaprichado de aquel escritor busca-broncas. Aizawa miraba con auténtico asco los andares de modelo de pasarela de Tohma y al maldito Shuichi, al que continuaba rodeando con su brazo. Aquel individuo andrógino y repulsivo encima se permitía mofarse de él por haber tenido que aceptar aquel trato humillante para volver a actuar, cuando todo había sido culpa suya. . . Su escaso control sobre sí mismo y su falta de sentido común le impidieron contenerse más.
- ¿Es que Shindou-kun es tu nuevo amiguito? Veo que no te privas de nada ¿Ya no quieres tanto a Yuki Eiri? – No se podía meter más veneno en tan pocas palabras.
Shuichi y Tohma se pararon los dos en seco. Tohma miró a su izquierda. Vio la cara de Shuichi, que le miraba con los ojos abiertos al máximo y la boca entreabierta, pidiendo silenciosamente una explicación.
- Debemos perdonar las incongruencias de Aizawa-san, Shuichi – Giró la cabeza, para dirigir una mirada cargada de intención al hombre que se atrevía a enfrentarse a él – No es él el que habla, es la farlopa (2) que acaba de meterse.
Aizawa no pudo evitar que el miedo y la sorpresa se le reflejaran en la cara. Toda su actitud amenazadora se desvaneció. ¿Cómo lo había sabido? ¡¿Cómo?!
- Te queda un poquito aquí ^_^ - Añadió Tohma, señalándose la base de la nariz. Y dicho esto, se marchó con Shuichi.
***//~~~
Tap, tap, tap, tap.
Los tacones de la pequeña Noriko repiqueteaban en el suelo del aparcamiento de la sala Ruido mientras se dirigía hacia su coche, tarareando la canción que iban a tocar en el concierto.
- Parece mentira, pero. . . cada vez que te veo, me parece que estás más buena.
- ¿Hm? – Noriko miró a todas partes intentando localizar al dueño de la voz que había salido de la penumbra del parking.
- Mejoras con los años, como el buen vino, jejeje – Un brazo le rodeó la cintura.
Presa del pánico, intentó zafarse, pero otro brazo la sujetó. Su terror aumentó cuando vio que el que la sujetaba era un tipo moreno, con cara de no llevar buenas intenciones y unos ojos tan vidriosos, que incluso con la poca luz que había en el aparcamiento pudo ver que aquel individuo no era en absoluto consciente de sus actos.
- ¡Suéltame ahora mismo! ¿Quién eres tú? ¡Te he dicho que me suertes! – Noriko daba desesperados manotazos contra el pecho del hombre que la sujetaba.
- ¡¿Cómo que quien soy?! – Preguntó un Tachi Aizawa completamente colocado - ¡Todo el mundo sabe quien soy, pequeña zorra! – La empujó contra un coche – ¡Soy el mejor vocalista de todo Japón! ¡Mejor que Shindou, mejor que Sakuma! ¡¿Te has enterado ya, guarra?!
Noriko le hubiera dicho que sí, que por supuesto que sabía quien era, que era el mejor vocalista del mundo entero o lo que él hubiera querido con tal de que la soltara, pero no pudo decir nada porque una lengua se introdujo bruscamente hasta el fondo de su boca, provocándole una horrible sensación de asco y asfixia. Noriko se retorcía desesperadamente por salir de debajo de aquel cuerpo que la aplastaba contra el coche y por huir de aquellas manos que la magreaban (3). Las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas, provocadas por el asco y el terror al ver que no podía hacer nada por escapar, ni siquiera pedir ayuda.
BANG ¡¡CRAAAAAAAAASH!!
El cristal de la ventanilla del coche contra el que Aizawa había tirado a Noriko reventó con un estruendo que resonó en todo el aparcamiento. Lo siguiente que notó Tachi fueron unas manazas agarrándole por los hombros. Antes de que pudiera darse cuenta de lo que estaba pasando, el puño de K se estrelló contra su cara. Cayó al suelo pensando que la mandíbula se le iba a separar de la cara, e inmediatamente recibió un segundo puñetazo, un tercero, un cuarto. . .
- ¡K, DETÁNGASE!
K se quedó arrodillado en el suelo con el puño en alto, agarrando la camisa de Aizawa con la otra mano. Tohma, Shu, Ryuichi y K, que era el encargado de llevar a los dos cantantes a su casa, habían bajado al aparcamiento y se habían encontrado con la escena, por suerte, justo a tiempo.
Su jefe se acercó a él. Con un movimiento de la mano, le indicó que se apartara.
- Es suficiente – K obedeció.
Ryu-chan y Shuichi habían corrido a socorrer a Noriko, que ahora sollozaba entre los brazos de Ryuichi. Tachi tenía un aspecto lamentable, tirado en el suelo, jadeando y con la nariz sangrando. Tratando de enfocar la vista, turbia a causa de los puñetazos y el efecto de la segunda "ayudita" que se había metido por la nariz aquella noche, logró distinguir a Tohma de pie frente a él. Distinguió también que, por primera vez desde que le conocía, no estaba sonriendo.
- Dicen que el tiempo nos hace más sabios, Aizawa-san, pero en ti parece tener justo el efecto contrario. Tu estupidez parece aumentar cada día que pasa. Te felicito, acabas de cargarte la última oportunidad que se te ofrecía - Seguchi se agachó para ponerse a su altura – Disfruta mucho de este concierto, Aizawa-san. Disfrútalo intensamente porque te garantizo que será el último. Me encargaré de que sea el último que des en toda tu vida. Espero que tus compañeros de grupo encajen esto bien, porque ASK acaba de hundirse. Estás a-ca-ba-do, Aizawa-san - Tohma se puso en pie y le dio la espalda – K, acompañe a Shindou y a Ryuichi. Yo te llevaré a casa, Noriko. Enviaré a alguien a recoger tu coche. Vamos cariño, no llores más – La rodeó con su brazo, como poco antes había hecho con Shu.
- Te equivocas, Seguchi Tohma. . . - Todos se detuvieron y se giraron a mirar a Aizawa. El cantante seguía en el suelo, hecho un guiñapo, pero por alguna extraña razón, sonreía de una manera aterradoramente perversa – Yo aún seguiré en pie cuando TÚ te hayas hundido.
Era algo completamente ridículo que alguien como Aizawa se atreviera a desafiar a alguien como Seguchi. Era como si una hormiga hubiera amenazado a un elefante con pisarle y aplastarle el cráneo. Sin embargo, hubo algo en la cara desencajada y la mirada de psicópata del cantante que hizo que todos se lo tomaran un poco en serio. . . Todos menos Tohma.
- Bah, patético – Murmuró, y siguió andando hacia su coche con Noriko.
Cuando el dueño de la sala le llamó para comunicarle que había conseguido a ASK como teloneros, y encima casi gratis, Seguchi no vio ningún inconveniente en ello. En realidad, que Aizawa triunfara o no era algo que a él ya ni le iba ni le venía. Mientras no se acercara a Eiri, ni lesionara a sus músicos, que hiciera lo que quisiera. Incluso, pensó, aquello daría algo más de expectación al concierto. No encontró ninguna razón para oponerse. "Es evidente que me equivoqué. No debí subestimar la necedad de ese tipo. Bien, me ocuparé de que no vuelvas a levantar cabeza, Aizawa. Nunca más tendrás ocasión de causar problemas."
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
(1) En este caso, "maromo" podría adoptar la acepción de "tu chulo"
(2) Farlopa = Cocaína
(3) La sobaban, la tocaban por todas partes
Cada vez estoy más burra. ¿Qué acabará saliendo de esta, mi mente desequilibrada? Os podéis esperar cualquier barbaridad. ¡¡Tohmaaaaaaaaa!! ¡¡No hullas Tohma!!
Oooooooooooh Rikku, snif, yo también te adoro, snif, snif.
Bueno, como habéis podido ver, en este Shuichi sale un poco más. (Chiquitín ^^) Y conseguiré que Tohma os de lástima del todo, es mi reto ÑEJEJE.
FELICIDADES SADAME¡¡¡¡ Aunque sea con retraso ^_^ Me ha hecho mucha ilusión alegrarte un poco el día de tu cumpleaños.
Un saludo y hasta el próximo¡¡¡
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La sala Ruido era un hervidero aquellos días. Se estaba preparando el próximo concierto de Bad Luck, que acabaría con una actuación de Nittle Grasper como artistas invitados. Tohma había aprovechado la ocasión y la había transformado en una hábil maniobra para presentar a lo grande el último single de NG. Hacía ya días que no quedaba ni una sola entrada.
Con lo que nadie había contado, de todos modos, era con el grupo de teloneros. . .
Tras el enfrentamiento de Aizawa con Shuichi y Yuki, y después de que Tohma le echara de su empresa (A parte de obsequiarle con varias semanas soñando con coches que se abalanzaban sobre él), los miembros de ASK lo pasaron francamente mal. Ninguna discográfica se atrevía a cobijar bajo sus alas al grupo que había sido expulsado de manera tan extraña de NG Records, por muy populares que fueran, de manera que su nombre había caído casi en el olvido. Hasta que, finalmente, una pequeña discográfica que acababa de empezar decidió aprovechar la ocasión e intentar relanzarles, dado que el trabajo ya estaba medio hecho. ¿Cómo habían conseguido meterles a hacer de teloneros de los dos grupos más populares de todo Japón? Eso era algo que nadie se explicaba todavía.
Entre ASK y los otros dos grupos, se firmó una especie de acuerdo no escrito para no coincidir nunca en la sala para sus respectivos ensayos, pero una noche, al acabar de ensayar y cuando ya estaban todos en el camerino preparándose para marcharse, Shuichi tuvo que volver al escenario. Se había dejado la mochila (Qué desastre de niño. . .)
Saltando alegremente entre los cables, llegó hasta detrás de los amplificadores, donde había dejado su bolsa. Cual no sería su horror cuando, al levantar la cabeza, vio que entre las patas del escenario estaba Tachi Aizawa.
- Vaya, vaya, vaya. . . ¿Pero a quién tenemos aquí? Si es el maravilloso Shuichi Shindou. ¿Tu maromo (1) no ha venido contigo?
Shuichi, pese a su miedo, hizo acopio de todo su valor para enfrentarse a la perversa sonrisa de Aizawa. No pensaba permitirle hablar mal de su Yuki.
- Yuki no es mi maromo. Es. . .
- Oh, disculpa mi torpeza – Aizawa caminó hacia Shuichi, colocándose frente a él y tapando la única salida que quedaba entre él y los enormes altavoces - ¿Cómo deberíamos llamarle entonces? ¿Tu "pasaporte hacia la fama"? – Acorraló a Shu contra uno de los wafles, apoyando una mano justo al lado de su cara. Shuichi temblaba como una hoja. Todavía tenía muy presente el recuerdo de la paliza que recibió en su día de manos de aquel tipo – Tal vez yo también debería liarme con un escritor para ganar algo de publicidad. O tal vez con un actor ¿Tú que me aconsejas, pequeño Shindou? – Le pellizcó una mejilla, haciéndole mucho daño.
- Ah, Aizawa-san, que agradable sorpresa volver a vernos ^_^ – Como salido de la nada, Tohma apareció en el otro extremo del escenario - ¿Shindou-kun te está molestando?
- No. . . No, sólo estábamos. . . teniendo una charla. . . de vocalista a vocalista – Intimidado, apartó el brazo y se alejó un poco de Shuichi ¿Cómo lo hacía aquel hombre? ¿Tenía un radar, como los murciélagos?
- Bien, me alegro – Tohma ya estaba junto a ellos. Cogió a Shuichi por un brazo y, suavemente, tiró de él para sacarle de donde Aizawa le había arrinconado – Porque por nada del mundo querríamos interferir en los ensayos de alguien que ha accedido a tocar prácticamente gratis para colarse en nuestro concierto, ¿verdad Shuichi? ^_^
Tachi apretó los dientes.
Shu, instintivamente, se había colocado detrás de Tohma, agarrándose un poco a su americana y mirando a Aizawa por encima del hombro de su jefe. No contestó. Seguchi se giró un poco para mirarle. El chico seguía temblando, con una cara de absoluto terror. Qué criatura tan patética. ¿Qué podían haber visto en él? Le pasó un brazo por los hombros en un gesto protector, como si fuera hijo suyo, y le empujó hasta colocarle a su lado.
- Por favor, Shindou, muestra un poco de dignidad – Le susurró al oído.
- Em. . . No. . . no queremos – Shuichi no sabía si estaba más asustado de encontrarse otra vez frente a Aizawa, o de tener contacto físico directo con Seguchi.
- Por supuesto que no ^_^ Debes felicitar a tus agentes de mi parte, Aizawa- san. Su trabajo está siendo realmente bueno. Ahora, discúlpanos. Shindou- kun, nos vamos – Y dando media vuelta, arrastrando a Shu con él, empezó a caminar hacia el lado del escenario por el que había aparecido.
Aizawa seguía con los dientes y los puños apretados. Cómo le repugnaba aquel sujeto. . . aquel ser que no se sabía si era un hombre una mujer, ni lo que pasaba por su jodida cabeza, que parecía tener ojos en todas partes, que casi había hundido su carrera sólo por el hecho de que estaba encaprichado de aquel escritor busca-broncas. Aizawa miraba con auténtico asco los andares de modelo de pasarela de Tohma y al maldito Shuichi, al que continuaba rodeando con su brazo. Aquel individuo andrógino y repulsivo encima se permitía mofarse de él por haber tenido que aceptar aquel trato humillante para volver a actuar, cuando todo había sido culpa suya. . . Su escaso control sobre sí mismo y su falta de sentido común le impidieron contenerse más.
- ¿Es que Shindou-kun es tu nuevo amiguito? Veo que no te privas de nada ¿Ya no quieres tanto a Yuki Eiri? – No se podía meter más veneno en tan pocas palabras.
Shuichi y Tohma se pararon los dos en seco. Tohma miró a su izquierda. Vio la cara de Shuichi, que le miraba con los ojos abiertos al máximo y la boca entreabierta, pidiendo silenciosamente una explicación.
- Debemos perdonar las incongruencias de Aizawa-san, Shuichi – Giró la cabeza, para dirigir una mirada cargada de intención al hombre que se atrevía a enfrentarse a él – No es él el que habla, es la farlopa (2) que acaba de meterse.
Aizawa no pudo evitar que el miedo y la sorpresa se le reflejaran en la cara. Toda su actitud amenazadora se desvaneció. ¿Cómo lo había sabido? ¡¿Cómo?!
- Te queda un poquito aquí ^_^ - Añadió Tohma, señalándose la base de la nariz. Y dicho esto, se marchó con Shuichi.
***//~~~
Tap, tap, tap, tap.
Los tacones de la pequeña Noriko repiqueteaban en el suelo del aparcamiento de la sala Ruido mientras se dirigía hacia su coche, tarareando la canción que iban a tocar en el concierto.
- Parece mentira, pero. . . cada vez que te veo, me parece que estás más buena.
- ¿Hm? – Noriko miró a todas partes intentando localizar al dueño de la voz que había salido de la penumbra del parking.
- Mejoras con los años, como el buen vino, jejeje – Un brazo le rodeó la cintura.
Presa del pánico, intentó zafarse, pero otro brazo la sujetó. Su terror aumentó cuando vio que el que la sujetaba era un tipo moreno, con cara de no llevar buenas intenciones y unos ojos tan vidriosos, que incluso con la poca luz que había en el aparcamiento pudo ver que aquel individuo no era en absoluto consciente de sus actos.
- ¡Suéltame ahora mismo! ¿Quién eres tú? ¡Te he dicho que me suertes! – Noriko daba desesperados manotazos contra el pecho del hombre que la sujetaba.
- ¡¿Cómo que quien soy?! – Preguntó un Tachi Aizawa completamente colocado - ¡Todo el mundo sabe quien soy, pequeña zorra! – La empujó contra un coche – ¡Soy el mejor vocalista de todo Japón! ¡Mejor que Shindou, mejor que Sakuma! ¡¿Te has enterado ya, guarra?!
Noriko le hubiera dicho que sí, que por supuesto que sabía quien era, que era el mejor vocalista del mundo entero o lo que él hubiera querido con tal de que la soltara, pero no pudo decir nada porque una lengua se introdujo bruscamente hasta el fondo de su boca, provocándole una horrible sensación de asco y asfixia. Noriko se retorcía desesperadamente por salir de debajo de aquel cuerpo que la aplastaba contra el coche y por huir de aquellas manos que la magreaban (3). Las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas, provocadas por el asco y el terror al ver que no podía hacer nada por escapar, ni siquiera pedir ayuda.
BANG ¡¡CRAAAAAAAAASH!!
El cristal de la ventanilla del coche contra el que Aizawa había tirado a Noriko reventó con un estruendo que resonó en todo el aparcamiento. Lo siguiente que notó Tachi fueron unas manazas agarrándole por los hombros. Antes de que pudiera darse cuenta de lo que estaba pasando, el puño de K se estrelló contra su cara. Cayó al suelo pensando que la mandíbula se le iba a separar de la cara, e inmediatamente recibió un segundo puñetazo, un tercero, un cuarto. . .
- ¡K, DETÁNGASE!
K se quedó arrodillado en el suelo con el puño en alto, agarrando la camisa de Aizawa con la otra mano. Tohma, Shu, Ryuichi y K, que era el encargado de llevar a los dos cantantes a su casa, habían bajado al aparcamiento y se habían encontrado con la escena, por suerte, justo a tiempo.
Su jefe se acercó a él. Con un movimiento de la mano, le indicó que se apartara.
- Es suficiente – K obedeció.
Ryu-chan y Shuichi habían corrido a socorrer a Noriko, que ahora sollozaba entre los brazos de Ryuichi. Tachi tenía un aspecto lamentable, tirado en el suelo, jadeando y con la nariz sangrando. Tratando de enfocar la vista, turbia a causa de los puñetazos y el efecto de la segunda "ayudita" que se había metido por la nariz aquella noche, logró distinguir a Tohma de pie frente a él. Distinguió también que, por primera vez desde que le conocía, no estaba sonriendo.
- Dicen que el tiempo nos hace más sabios, Aizawa-san, pero en ti parece tener justo el efecto contrario. Tu estupidez parece aumentar cada día que pasa. Te felicito, acabas de cargarte la última oportunidad que se te ofrecía - Seguchi se agachó para ponerse a su altura – Disfruta mucho de este concierto, Aizawa-san. Disfrútalo intensamente porque te garantizo que será el último. Me encargaré de que sea el último que des en toda tu vida. Espero que tus compañeros de grupo encajen esto bien, porque ASK acaba de hundirse. Estás a-ca-ba-do, Aizawa-san - Tohma se puso en pie y le dio la espalda – K, acompañe a Shindou y a Ryuichi. Yo te llevaré a casa, Noriko. Enviaré a alguien a recoger tu coche. Vamos cariño, no llores más – La rodeó con su brazo, como poco antes había hecho con Shu.
- Te equivocas, Seguchi Tohma. . . - Todos se detuvieron y se giraron a mirar a Aizawa. El cantante seguía en el suelo, hecho un guiñapo, pero por alguna extraña razón, sonreía de una manera aterradoramente perversa – Yo aún seguiré en pie cuando TÚ te hayas hundido.
Era algo completamente ridículo que alguien como Aizawa se atreviera a desafiar a alguien como Seguchi. Era como si una hormiga hubiera amenazado a un elefante con pisarle y aplastarle el cráneo. Sin embargo, hubo algo en la cara desencajada y la mirada de psicópata del cantante que hizo que todos se lo tomaran un poco en serio. . . Todos menos Tohma.
- Bah, patético – Murmuró, y siguió andando hacia su coche con Noriko.
Cuando el dueño de la sala le llamó para comunicarle que había conseguido a ASK como teloneros, y encima casi gratis, Seguchi no vio ningún inconveniente en ello. En realidad, que Aizawa triunfara o no era algo que a él ya ni le iba ni le venía. Mientras no se acercara a Eiri, ni lesionara a sus músicos, que hiciera lo que quisiera. Incluso, pensó, aquello daría algo más de expectación al concierto. No encontró ninguna razón para oponerse. "Es evidente que me equivoqué. No debí subestimar la necedad de ese tipo. Bien, me ocuparé de que no vuelvas a levantar cabeza, Aizawa. Nunca más tendrás ocasión de causar problemas."
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
(1) En este caso, "maromo" podría adoptar la acepción de "tu chulo"
(2) Farlopa = Cocaína
(3) La sobaban, la tocaban por todas partes
Cada vez estoy más burra. ¿Qué acabará saliendo de esta, mi mente desequilibrada? Os podéis esperar cualquier barbaridad. ¡¡Tohmaaaaaaaaa!! ¡¡No hullas Tohma!!
Oooooooooooh Rikku, snif, yo también te adoro, snif, snif.
Bueno, como habéis podido ver, en este Shuichi sale un poco más. (Chiquitín ^^) Y conseguiré que Tohma os de lástima del todo, es mi reto ÑEJEJE.
FELICIDADES SADAME¡¡¡¡ Aunque sea con retraso ^_^ Me ha hecho mucha ilusión alegrarte un poco el día de tu cumpleaños.
Un saludo y hasta el próximo¡¡¡
