Gundam Wing: El proyecto Dragón
Un fan fic escrito por Hikaru Toriyama
Capítulo 2 - Los augurios de una nueva guerra
Noin entró a la sala de reuniones solo momentos después de que el señor Sheffield se fuera. Allí encontró a Relena mirando al vacío, muy ocupada pensando las palabras de sheffield como para admirar el paisaje de afuera.
-Señorita Relena -dijo Noin- ¿Se encuentra bien?
-Sí, Noin. Es solo que pensaba en las cosas que dijo el señor Sheffield -respondió Relena aún mirando la ventana.
-¿Ocurre algo malo, señorita Relena? -preguntó preocupada Noin, pues notaba a Relena demasiado preocupada(también). Al igual que Relena, tenía el presentimiento de que algo malo ocurriría y que tenía que ver con ese hombre.
-Me han dicho que la colonia L-8 ha estado recibiendo amenazas de guerra provenientes de alguna colonia que no han podido identificar aún. Creo que deberiamos aumentar la seguridad en todos los puntos.
-Pues si lo que dice el señor Sheffield es verdad, estoy de acuerdo con usted, pero creo que los mobile suits que quedan tanto en la tierra como en las colonias no deberían destruirse, sino que deberían conservarse y arreglarlos por si acaso -dijo Noin en un tono serio y algo preocupado. Tenía razones para creer que una nueva guerra se desataría, pero que los amenazados no eran precisamente los habitantes de la colonia L-8- si me lo permite señorita, creo que sería buena idea fabricar más mobile suits para defendernos.
-¿Crees que es lo correcto Noin? -preguntó Relena algo insegura y temerosa de lo que podría pasar- ¿Qué pasa si tomamos la desición equivocada?
-Puedo asegurarle que no es la desición equivocada -respondió Noin a la pregunta de Relena.
-Entonces quiero que te quedes a cargo de todo, Noin. Se que tu sabes mucho mejor que yo que hacer en estos casos. Yo, por mi parte, me dedicaré a preparar la celebración del primer aniversario de paz -tras decir estas palabras, Relena salió de la sala de reuniones y se dirijió a su pieza. Noin fue a la base que se encontraba en el subterraneo a ordenar que todos los mobiles suits fueran arreglados.
*****
Mientras que en su automovil, el señor Sheffield se comunicaba con un extraño personaje, por medio de su computadora portatil.
-La señorita Relena mordió el anzuelo, jefe -dijo Sheffield al hombre que se encontraba hablando con él- Ella cree firmemente que nosotros somos los amenazados por los dragones.
-Muy bien Sheffield -dijo el hombre que tenía una voz media tétrica- sigue haciendo correctamente tu trabajo y serás muy bien recompensado. -Esas fueron las únicas palabras que dijo antes de colgar. Una risa maquiavélica brotó de la boca de Sheffield al tiempo que cerraba la computadora.
*****
Dos semanas después...
-Knock knock knock -se oyó que llamaban a la puerta de la casa de Heero.
-¿Eh? -dijo Heero intrigado- ¿quién podrá ser? Nunca viene nadie a visitarme. -Heero se dirijió a la puerta y preguntó quien era antes de abrir. Como era un agente de seguridad, cualquier malvado querría matarlo.
-Vengo de parte de la señorita Relena Darlian -dijo una voz del otro lado de la puerta- estoy buscando al señor Heero Yui -Heero abrió la puerta bruscamente.
-¿Qué es lo que quiere? -preguntó fríamente Heero. El enviado de Relena le entregó un sobre blanco y un poco arrugado. Heero lo abrió y leyó lo que decía la invitación que le enviaba Relena.
-Le rogaría que me dijera ahora mismo si asistirá o no -dijo el enviado bastante serio y algo cansado.
-Aún no lo sé -respondió Heero sin mucho ánimo- Tengo que pensarlo, digale eso a Relena, pero que tampoco se haga muchas ilusiones. -Luego de esas palabras, Heero cerró la puerta en la cara del enviado de Relena y dejó la invitación sobre la mesita del living. Y de ahí no se movió.
Algo parecido había pasado con Trowa y con Wu fei en cuanto recibieron la invitación, pero aceptaron ir de mala gana. Duo y Quatre se mostraron muy animados de ir y aceptaron enseguida la invitación.
*****
Mientras que una colonia...
-Este país de la tierra es el más debil de todos -dijo un hombre al cual solo se le veía la silueta entre tanta oscuridad- Lo más probable es que aún les quede un poco de armamento, pero no lo suficiente como para derrotarlos a ustedes, es más, uno solo de ustedes podría tomar el control de ese país y someter a su población. -dijo aquel siniestro hombre mostrando un mapa mundi, que tenía marcado un país del norte de europa- y bien, ¿quién se ofrece?
-Yo iré y me adueñaré de ese país -dijo un joven que apareció de la nada. Con tanta oscuridad, solo se podía distinguir que era muy alto, de unos 17 años y vestía como si viniera de un lugar muy frío- le prometo que ese país será nuestro -el joven dio media vuelta y se fue por donde había llegado, perdiendose entre las sombras.
-¿Qué están esperando para irse de aquí? -dijo muy enojado el misterioso hombre y los dos jovenes que se encontraban en la habitación se fueron rápidamente.
-¿Quién demonios era ese? -preguntó uno de los jovenes con un acento francés. Era alto, de pelo negro, ojos café, vestía unos jeans y una polera blanca, sobre la cual llevaba una chaqueta de mezclilla. No tenía más de 16 años.
-No sé -dijo el otro joven de un aspecto mucho más debil que el otro, y también más bajo. De él no se podía distinguir mucho pues se cubría la cara y el pelo con una gorra negra, de esas de pescador y vestía unos jeans y una chaqueta negra de cuero- jamás lo había visto.
-No debe ser muy simpático -dijo el primer joven- además yo quería tomar esa como mi primera misión.
-Pués a mi no me interesa en absoluto apoderarme de países indefensos -dijo el otro joven sin prestarle mucha atención al otro.
-No seas ambicioso, deja los grandes para después, además, los pequeños sirven como entrenamiento -dijo el primer joven antes de entrar a otra habitación.
-Sí, como tú digas -dijo el segundo que entró a la habitación de enfrente. Cerró la puerta y se quitó la gorra que siempre andaba trayendo. El cabello trenzado, se deslizó por la espalda del joven, hasta más o menos un poco antes de llegar al codo. Por la oscuridad de la habitación, no se podía identificar de qué color era el cabello ni el rostro del muchacho- Por fin me deshice de él -dijo el joven- ya no lo soportaba -la voz del joven era ahora una voz femenina- solo espero que no me descubra...
*****
-¿Adonde irás Quatre? -preguntó una de las hermanas de Quatre al ver que este arreglaba sus cosas para viajar.
-Me iré mañana mismo a la tierra.
-Pero la fiesta es el próximo mes.
-Sí, lo sé. Pero deseo pasear por ahí unos días y de paso ver a mis amigos de la tropa Maganac -dijo Quatre como respuesta a su hermana- No te preocupes tanto estaré bien.
*****
En la colonia L-2, Duo no podía quitarse de la cabeza la invitación de Relena y no hallaba la hora de salir de sus clases y empacar para irse.
-¿Qué te tiene tan preocupado, Duo? -Preguntó Hilde, quien estaba en la misma clase de Duo.
-Es que ya me quiero ir -dijo Duo un poco aburrido de tanta clase.
-¿Adonde te irás Duo? -preguntó Hilde un poco triste, pensando que Duo se iría para no volver.
-Oh,es cierto -dijo Duo animandose un poco- No te he contado que Relena me invitó a su celebración por el primer aniversario de la paz mundial -continuó cada vez más animado.
-¿y vas a ir? -preguntó Hilde algo triste.
-¡Por supuesto! No perderé esta valiosa oportunidad para ver a mis amigos nuevamente... a todo esto, Relena me envió dos invitaciones, ¿Quieres ir?
-Por supuesto que sí, Duo. Me encantaría ir contigo.
-Entonces está arreglado, saldremos de aquí la próxima semana, para poder alcanzar a pasear un poco por el reino de Sanc.
*****
En la tierra...
-¿Qué descubrieron naves no identificadas transportando grandes cantidades de Gundamio? -dijo Noin muy preocupada y nerviosa- ¿y hacia adonde se dirijen?
-Creemos que se dirijen a la colonia L-8, teniente Noin -dijo un soldado del reino de Sanc, tan nervioso como su teniente.
-Quiero que se comuniquen inmediatamente con esas naves.
-Eso intentamos teniente -dijo otro soldado- pero ninguna responde.
-¿Qué estás diciendo?
-¡Una de las naves está enviando un mensaje, teniente Noin! -gritó de pronto un soldado que se también intentaba comunicarse con una de las naves.
-Dejame ver -dijo Noin desplazando al soldado de su puesto. La pantalla estaba borrosa, pero se podía distinguir una silueta. Una voz como de ultratumba surgió de repente.
-Cuidense de los dragones -dijo la silueta y la señal se cortó. Todos los que se hallaban en la base quedaron en silencio. Las palabras dichas por la silueta retumbaban en las cabezas de todos a cada momento. Y el presentimiento de una nueva guerra era aún mayor que antes.
Continuará...
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Notas de la autora: ¿y?¿cómo quedó? espero que les haya gustado y que sigan siguiendo la historia.No olviden enviar sus sugerencias y comentarios a jesusitax@hotmail.com
A todo esto se me olvidaba decir que algunas cosas relacionadas con la serie original las cambiaré porque no me concuerdan con el fic ¿okis? ^-^byeee!!
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Un fan fic escrito por Hikaru Toriyama
Capítulo 2 - Los augurios de una nueva guerra
Noin entró a la sala de reuniones solo momentos después de que el señor Sheffield se fuera. Allí encontró a Relena mirando al vacío, muy ocupada pensando las palabras de sheffield como para admirar el paisaje de afuera.
-Señorita Relena -dijo Noin- ¿Se encuentra bien?
-Sí, Noin. Es solo que pensaba en las cosas que dijo el señor Sheffield -respondió Relena aún mirando la ventana.
-¿Ocurre algo malo, señorita Relena? -preguntó preocupada Noin, pues notaba a Relena demasiado preocupada(también). Al igual que Relena, tenía el presentimiento de que algo malo ocurriría y que tenía que ver con ese hombre.
-Me han dicho que la colonia L-8 ha estado recibiendo amenazas de guerra provenientes de alguna colonia que no han podido identificar aún. Creo que deberiamos aumentar la seguridad en todos los puntos.
-Pues si lo que dice el señor Sheffield es verdad, estoy de acuerdo con usted, pero creo que los mobile suits que quedan tanto en la tierra como en las colonias no deberían destruirse, sino que deberían conservarse y arreglarlos por si acaso -dijo Noin en un tono serio y algo preocupado. Tenía razones para creer que una nueva guerra se desataría, pero que los amenazados no eran precisamente los habitantes de la colonia L-8- si me lo permite señorita, creo que sería buena idea fabricar más mobile suits para defendernos.
-¿Crees que es lo correcto Noin? -preguntó Relena algo insegura y temerosa de lo que podría pasar- ¿Qué pasa si tomamos la desición equivocada?
-Puedo asegurarle que no es la desición equivocada -respondió Noin a la pregunta de Relena.
-Entonces quiero que te quedes a cargo de todo, Noin. Se que tu sabes mucho mejor que yo que hacer en estos casos. Yo, por mi parte, me dedicaré a preparar la celebración del primer aniversario de paz -tras decir estas palabras, Relena salió de la sala de reuniones y se dirijió a su pieza. Noin fue a la base que se encontraba en el subterraneo a ordenar que todos los mobiles suits fueran arreglados.
*****
Mientras que en su automovil, el señor Sheffield se comunicaba con un extraño personaje, por medio de su computadora portatil.
-La señorita Relena mordió el anzuelo, jefe -dijo Sheffield al hombre que se encontraba hablando con él- Ella cree firmemente que nosotros somos los amenazados por los dragones.
-Muy bien Sheffield -dijo el hombre que tenía una voz media tétrica- sigue haciendo correctamente tu trabajo y serás muy bien recompensado. -Esas fueron las únicas palabras que dijo antes de colgar. Una risa maquiavélica brotó de la boca de Sheffield al tiempo que cerraba la computadora.
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Dos semanas después...
-Knock knock knock -se oyó que llamaban a la puerta de la casa de Heero.
-¿Eh? -dijo Heero intrigado- ¿quién podrá ser? Nunca viene nadie a visitarme. -Heero se dirijió a la puerta y preguntó quien era antes de abrir. Como era un agente de seguridad, cualquier malvado querría matarlo.
-Vengo de parte de la señorita Relena Darlian -dijo una voz del otro lado de la puerta- estoy buscando al señor Heero Yui -Heero abrió la puerta bruscamente.
-¿Qué es lo que quiere? -preguntó fríamente Heero. El enviado de Relena le entregó un sobre blanco y un poco arrugado. Heero lo abrió y leyó lo que decía la invitación que le enviaba Relena.
-Le rogaría que me dijera ahora mismo si asistirá o no -dijo el enviado bastante serio y algo cansado.
-Aún no lo sé -respondió Heero sin mucho ánimo- Tengo que pensarlo, digale eso a Relena, pero que tampoco se haga muchas ilusiones. -Luego de esas palabras, Heero cerró la puerta en la cara del enviado de Relena y dejó la invitación sobre la mesita del living. Y de ahí no se movió.
Algo parecido había pasado con Trowa y con Wu fei en cuanto recibieron la invitación, pero aceptaron ir de mala gana. Duo y Quatre se mostraron muy animados de ir y aceptaron enseguida la invitación.
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Mientras que una colonia...
-Este país de la tierra es el más debil de todos -dijo un hombre al cual solo se le veía la silueta entre tanta oscuridad- Lo más probable es que aún les quede un poco de armamento, pero no lo suficiente como para derrotarlos a ustedes, es más, uno solo de ustedes podría tomar el control de ese país y someter a su población. -dijo aquel siniestro hombre mostrando un mapa mundi, que tenía marcado un país del norte de europa- y bien, ¿quién se ofrece?
-Yo iré y me adueñaré de ese país -dijo un joven que apareció de la nada. Con tanta oscuridad, solo se podía distinguir que era muy alto, de unos 17 años y vestía como si viniera de un lugar muy frío- le prometo que ese país será nuestro -el joven dio media vuelta y se fue por donde había llegado, perdiendose entre las sombras.
-¿Qué están esperando para irse de aquí? -dijo muy enojado el misterioso hombre y los dos jovenes que se encontraban en la habitación se fueron rápidamente.
-¿Quién demonios era ese? -preguntó uno de los jovenes con un acento francés. Era alto, de pelo negro, ojos café, vestía unos jeans y una polera blanca, sobre la cual llevaba una chaqueta de mezclilla. No tenía más de 16 años.
-No sé -dijo el otro joven de un aspecto mucho más debil que el otro, y también más bajo. De él no se podía distinguir mucho pues se cubría la cara y el pelo con una gorra negra, de esas de pescador y vestía unos jeans y una chaqueta negra de cuero- jamás lo había visto.
-No debe ser muy simpático -dijo el primer joven- además yo quería tomar esa como mi primera misión.
-Pués a mi no me interesa en absoluto apoderarme de países indefensos -dijo el otro joven sin prestarle mucha atención al otro.
-No seas ambicioso, deja los grandes para después, además, los pequeños sirven como entrenamiento -dijo el primer joven antes de entrar a otra habitación.
-Sí, como tú digas -dijo el segundo que entró a la habitación de enfrente. Cerró la puerta y se quitó la gorra que siempre andaba trayendo. El cabello trenzado, se deslizó por la espalda del joven, hasta más o menos un poco antes de llegar al codo. Por la oscuridad de la habitación, no se podía identificar de qué color era el cabello ni el rostro del muchacho- Por fin me deshice de él -dijo el joven- ya no lo soportaba -la voz del joven era ahora una voz femenina- solo espero que no me descubra...
*****
-¿Adonde irás Quatre? -preguntó una de las hermanas de Quatre al ver que este arreglaba sus cosas para viajar.
-Me iré mañana mismo a la tierra.
-Pero la fiesta es el próximo mes.
-Sí, lo sé. Pero deseo pasear por ahí unos días y de paso ver a mis amigos de la tropa Maganac -dijo Quatre como respuesta a su hermana- No te preocupes tanto estaré bien.
*****
En la colonia L-2, Duo no podía quitarse de la cabeza la invitación de Relena y no hallaba la hora de salir de sus clases y empacar para irse.
-¿Qué te tiene tan preocupado, Duo? -Preguntó Hilde, quien estaba en la misma clase de Duo.
-Es que ya me quiero ir -dijo Duo un poco aburrido de tanta clase.
-¿Adonde te irás Duo? -preguntó Hilde un poco triste, pensando que Duo se iría para no volver.
-Oh,es cierto -dijo Duo animandose un poco- No te he contado que Relena me invitó a su celebración por el primer aniversario de la paz mundial -continuó cada vez más animado.
-¿y vas a ir? -preguntó Hilde algo triste.
-¡Por supuesto! No perderé esta valiosa oportunidad para ver a mis amigos nuevamente... a todo esto, Relena me envió dos invitaciones, ¿Quieres ir?
-Por supuesto que sí, Duo. Me encantaría ir contigo.
-Entonces está arreglado, saldremos de aquí la próxima semana, para poder alcanzar a pasear un poco por el reino de Sanc.
*****
En la tierra...
-¿Qué descubrieron naves no identificadas transportando grandes cantidades de Gundamio? -dijo Noin muy preocupada y nerviosa- ¿y hacia adonde se dirijen?
-Creemos que se dirijen a la colonia L-8, teniente Noin -dijo un soldado del reino de Sanc, tan nervioso como su teniente.
-Quiero que se comuniquen inmediatamente con esas naves.
-Eso intentamos teniente -dijo otro soldado- pero ninguna responde.
-¿Qué estás diciendo?
-¡Una de las naves está enviando un mensaje, teniente Noin! -gritó de pronto un soldado que se también intentaba comunicarse con una de las naves.
-Dejame ver -dijo Noin desplazando al soldado de su puesto. La pantalla estaba borrosa, pero se podía distinguir una silueta. Una voz como de ultratumba surgió de repente.
-Cuidense de los dragones -dijo la silueta y la señal se cortó. Todos los que se hallaban en la base quedaron en silencio. Las palabras dichas por la silueta retumbaban en las cabezas de todos a cada momento. Y el presentimiento de una nueva guerra era aún mayor que antes.
Continuará...
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Notas de la autora: ¿y?¿cómo quedó? espero que les haya gustado y que sigan siguiendo la historia.No olviden enviar sus sugerencias y comentarios a jesusitax@hotmail.com
A todo esto se me olvidaba decir que algunas cosas relacionadas con la serie original las cambiaré porque no me concuerdan con el fic ¿okis? ^-^byeee!!
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