Chapter 8:
Oscuridad eterna
Caín por fin había averiguado la razón exacta por la cual
Shido odiaba la naturaleza a la cual había sido condenado por
su culpa y entendió que había cometido muchos errores pero
¿será capaz de enmendarlos o por lo menos dejar de
cometerlos? El sabia lo mucho que deseaba a Shido de nuevo a
su lado pero .... esto era demasiado, Caín se había vuelto un
adicto a la muerte con tantos años de masacres y "libertad
plena" aunque no era libre del todo, con el paso del tiempo
se hizo dependiente al sufrimiento, se había convertido en un
sádico un cazador por instinto y lo había demostrado por la
manera en la que recupero a Riho cuando ella trato de
escapar, Caín tenia que tomar una decisión pero no sabia cual
elegir, a el le fascinaba matar, pero Shido era poco mas que
su obsesión, además no tenia mucho tiempo para pensarlo, y
mucho menos con el pequeñísimo detalle de que había
secuestrado a Riho y eso no es exactamente lo que se espera
para reconquistar a alguien, Caín había decidido pasar un
tiempo en china por lo menos mientras decidía que hacer ya
que el ambiente que se generaba en estos momentos en Japón no
era precisamente el mejor para pensar con claridad.
-si no tienes donde quedarte puedes hacerlo aquí –dijo
Tsugumi refiriéndose al confundido vampiro con el que se
encontraba
-eres muy amable, por que haces esto?
-como entodas las personas que conoce, Shido deja una huella
imborrable y comprendo a la perfección por lo que estas
pasando
-ah? – exclamo el vampiro sorprendido por lo que escuchaba –
g-gracias.
Esa noche, los dos vampiros decidieron salir al bosque en
búsqueda de alimento, Caín no estaba acostumbrado a beber
sangre de animales pero era todo lo que estaba permitido en
el lugar donde se encontraba. Horas después, en el bosque
encontraron un gran tigre que seria mas que perfecto para
satisfacer las necesidades de los dos, Caín decidió alejarse
y dejar que la vampiresa se encargara del trabajo "sucio",
pero mientras Tsugumi se encontraba luchando con la feroz
bestia, comete un error fatal, pierde la concentración por un
momento, el cual el animal aprovecho par herirla gravemente,
fue ahí cuando Caín salta del lugar en que se encuentra, saca
su arma hecha de la poderosa sangre de vampiro que corría por
sus venas y de un solo golpe acaba con la vida del animal.
-gracias-dice Tsugumi quien se hallaba tirada en el piso
bañada en su propia sangre-eso estuvo cerca
-es lo menos que puedo hacer por quien me ayudo a comprender
la naturaleza del verdadero amor- responde Caín mientras
cargaba a Tsugumi para llevarla junto con el tigre a la
cabaña, una vez ahí, ayudado por el poder regenerativo de los
vampiros, sana sus heridas.
Momentos mas tarde, entra Caín al cuarto de Tsugumi quien se
encontraba inconsciente descansando para reponerse por
completo de lo sucedido y le da un vaso con sangre del tigre.
-gracias de nuevo
-ya te sientes mejor??
-aparentemente...
de un momento a otro y sin razón aparente a excepción de su
naturaleza, los vampiros se transforman y comienzan a besarse
apasionadamente y a lastimarse mutuamente en busca de placer,
juguetean un rato y sin darse cuenta en que momento, sale el
amenazante sol signo de que ya era hora para descansar, se
acuestan los dos juntos en el ataúd de Tsugumi y esperan el
siguiente anochecer.
Oscuridad eterna
Caín por fin había averiguado la razón exacta por la cual
Shido odiaba la naturaleza a la cual había sido condenado por
su culpa y entendió que había cometido muchos errores pero
¿será capaz de enmendarlos o por lo menos dejar de
cometerlos? El sabia lo mucho que deseaba a Shido de nuevo a
su lado pero .... esto era demasiado, Caín se había vuelto un
adicto a la muerte con tantos años de masacres y "libertad
plena" aunque no era libre del todo, con el paso del tiempo
se hizo dependiente al sufrimiento, se había convertido en un
sádico un cazador por instinto y lo había demostrado por la
manera en la que recupero a Riho cuando ella trato de
escapar, Caín tenia que tomar una decisión pero no sabia cual
elegir, a el le fascinaba matar, pero Shido era poco mas que
su obsesión, además no tenia mucho tiempo para pensarlo, y
mucho menos con el pequeñísimo detalle de que había
secuestrado a Riho y eso no es exactamente lo que se espera
para reconquistar a alguien, Caín había decidido pasar un
tiempo en china por lo menos mientras decidía que hacer ya
que el ambiente que se generaba en estos momentos en Japón no
era precisamente el mejor para pensar con claridad.
-si no tienes donde quedarte puedes hacerlo aquí –dijo
Tsugumi refiriéndose al confundido vampiro con el que se
encontraba
-eres muy amable, por que haces esto?
-como entodas las personas que conoce, Shido deja una huella
imborrable y comprendo a la perfección por lo que estas
pasando
-ah? – exclamo el vampiro sorprendido por lo que escuchaba –
g-gracias.
Esa noche, los dos vampiros decidieron salir al bosque en
búsqueda de alimento, Caín no estaba acostumbrado a beber
sangre de animales pero era todo lo que estaba permitido en
el lugar donde se encontraba. Horas después, en el bosque
encontraron un gran tigre que seria mas que perfecto para
satisfacer las necesidades de los dos, Caín decidió alejarse
y dejar que la vampiresa se encargara del trabajo "sucio",
pero mientras Tsugumi se encontraba luchando con la feroz
bestia, comete un error fatal, pierde la concentración por un
momento, el cual el animal aprovecho par herirla gravemente,
fue ahí cuando Caín salta del lugar en que se encuentra, saca
su arma hecha de la poderosa sangre de vampiro que corría por
sus venas y de un solo golpe acaba con la vida del animal.
-gracias-dice Tsugumi quien se hallaba tirada en el piso
bañada en su propia sangre-eso estuvo cerca
-es lo menos que puedo hacer por quien me ayudo a comprender
la naturaleza del verdadero amor- responde Caín mientras
cargaba a Tsugumi para llevarla junto con el tigre a la
cabaña, una vez ahí, ayudado por el poder regenerativo de los
vampiros, sana sus heridas.
Momentos mas tarde, entra Caín al cuarto de Tsugumi quien se
encontraba inconsciente descansando para reponerse por
completo de lo sucedido y le da un vaso con sangre del tigre.
-gracias de nuevo
-ya te sientes mejor??
-aparentemente...
de un momento a otro y sin razón aparente a excepción de su
naturaleza, los vampiros se transforman y comienzan a besarse
apasionadamente y a lastimarse mutuamente en busca de placer,
juguetean un rato y sin darse cuenta en que momento, sale el
amenazante sol signo de que ya era hora para descansar, se
acuestan los dos juntos en el ataúd de Tsugumi y esperan el
siguiente anochecer.