DESAFÍO DARK MAN
Prólogo - Extraña rutina
Los cuatro jóvenes (Orphen, Magic, Ricoris y Creao), habían llegado a Tasarta, un pequeño pueblo situado en el Valle Éaram, después de tres días atravesando un precioso bosque. Habían oído comentarios sobre ataques de alguna clase de bestia alrededor de ese pueblecito y Orphen no había podido resistir la tentación de visitar el lugar, de forma que habían pasado ya un día en el pueblo (sin que ningún extraño monstruo apareciera) instalados en una pequeña pero bonita casa de madera que pagaban con la ayuda económica de Ricoris.
La casa dónde se hospedaban no tenía habitaciones separadas, sino que sólo diferenciaba la cocina y el baño. El resto, era un espacio con una cama, una mesita de noche de madera y un sillón reinclinable de aspecto confortable. Había un armario de madera y dos sofás granates, pero no había televisión. Y al lado de la cocina, también había una pequeña mesa redonda con cuatro sillas, todo de madera. Encima de la mesa colgaba una bonita lámpara de luz amarillenta. Era uno de los tres focos de luz artificial que iluminaban la casa. El segundo era una lámpara de pie que reposaba al lado de los sofás y el tercero era una pequeña lámpara encima de la mesita de noche. Realmente el aspecto era acogedor. Hubo peleas sobre quién dormía en la cama. Evidentemente fue Orphen quién la consiguió, dejando a las dos chicas y al joven aprendiz los sofás y el sillón respectivamente.
Y el segundo día amaneció claro. Creao fue la primera en levantarse. Decidió preparar un desayuno apetitoso para sus compañeros, e intentó no hacer demasiado ruido mientras lo hacía. Bollos y chocolate con leche, eligió. En cuánto lo hubo preparado corrió las cortinas, dejando entrar un cálido sol a través de una gran ventana. Ricoris y Magic se levantaron risueños, al contrario que el joven mago. Orphen maldeció a Creao por haberle despertado, y lo hizo en un moco poco agradable, cosa que a la chica no le sentó nada bien.
- ¡Yo me despierto cuando no tengo más sueño, no cuando a una inútil como tú le apetece!
- ¡Bien, como quieras! ¡Acabas de quedarte sin desayuno!
- Pero Creao, mi maestro necesita la energía que le aporta el desayuno... – Intervino tímidamente Magic.
- ¡Pues se lo preparas tú!
- Mmmm...¡Está riquísimo, Creao! – Apuntó Ricoris.
- ¡Oh! ¿Lo dices en serio, Ricoris? ¡No sé qué haría yo sin ti, siempre diciendo la verdad y tratándome cómo la estupendíssima cocinera que soy!
- ¡¿Pero qué demonios es ésto?! ¡Es incomible! ¿De verdad crees que me importa quedarme sin TÚ asqueroso desayuno? – Orphen había aprovechado para lanzarse encima de la comida, y como habitualmente sólo se le ocurrió criticar el trabajo de la chica.
- ¡¡¡Orphen!!! Eres un completo imbécil, ¿te lo había dicho nunca? – Creao y Orphen iniciaron una peligrosa discusión mientras que los dos más jóvenes habían tomado asiento en la mesa y comían con fervor lo que Creao había preparado.
- ¡Como si no lo hubieras hecho! Me importa un pimiento lo que una mocosa cómo tú opine sobre mi...
- ¡Pues entonces no te importará saber que te odio! ¡Nunca más volverás a comer nada que haya cocinado yo! ¡No quiero saber nada más de ti, me voy!
- Estúpida cría... ¡Toma, no necesitaré nunca algo que tú hayas cocinado, así que llévatelo contigo! – Orphen llegó a un tono realmente hiriente, y lanzó su plato con bollos y su tazón de chocolate a los pies de la chica, que después de un instante salió corriendo de la casa con lágrimas en los ojos.
- Pobre Creao... ¡Ella siempre lo hace con todo su amor hacia nosotros! – Anunció Ricoris antes de salir corriendo tras Creao.
- ¿Tu también crees que he sido demasiado duro, Magic? – Orphen sonó preocupado, sabia que perdía los nervios con facilidad y que Creao también era una chica con mucho temperamento, pero también sensible.
- Verá Maestro... realmente ha sido un poco brusco, sí...
- Ya. ¿Me harás algo para desayunar, verdad? Y luego recoges lo que se ha caído.
- Sí, Maestro.
Orphen, aunque trataba de no parecer preocupado, o almenos de no sentirse culpable, se asomó por la ventana para ver si todavía veía a la chica. "No creo que les pase nada... se saben cuidar solitas" se decía Orphen, aunque realmente se veía inquieto.No se preocupe Maestro, Creao reacciona así a menudo...
- Lo sé. ¡Eh! ¿Y mi desayuno? – Orphen se acercaba amenazadoramente a Magic, que corrió a la cocina obedeciendo a su instructor. Posteriormente volvió a asomarse a la ventana, con la mirada perdida, hasta que Magic hubo preparado los bollos.
- Realmente eran mejores los de Creao... – Dijo el hechicero mientras su discípulo recogía lo que él había roto minutos antes
- ¿En serio? Vea si puede aprovechar algo de entre estos restos, maestro... – Respondió el joven de pelo rubio acercando la pala con lo que había recogido a la mesa dónde comía Orphen.
- ¡Ni te atrevas! – Orphen cogió al chico por la camiseta subiéndolo hacia arriba hasta que los pies no le tocaban al suelo, y dejando caer nuevamente la basura al suelo.
Justo en ése momento, una enorme explosión tuvo lugar en el bosque. Orphen y Magic salieron apresuradamente de la casa, y vieron una enorme nuve violeta ascendiendo.
- ¡¡¡¡Creao!!!! – Una mezcla de sentimientos acapararon a Orphen, que salió corriendo seguido de su discípulo preso del pánico y de la angustia. "No puede ser que Creao esté allí, nunca me lo perdonaría". Llegaron al claro que había formado la explosión, pero no había ni rastro de las chicas. Magic se dio cuenta del nerviosismo de Orphen y decidió tomar la iniciativa:
- Separémonos, maestro. Las encontraremos antes.
- Está bien. Regresa al pueblo si no das con ellas.
Y así se separaron. Orphen estaba realmente preocupado, sobretodo por la niña rubia. "Dios...Que no te haya pasado nada, bonita. Dime dónde estas...". Tantos pensamientos le impedían pensar claramente un lugar por dónde buscar. Seguía instintivamente un camino. Magic, contrariamente, pensaba claramente. No le gustaba ver a Orphen preocupado, y era por eso que quería encontrar a las chicas. Al principio no creía que se hubieran metido en ningún problema, pero cuando oyó un grito de niña se alarmó.
FIN del 1er Capítulo!
¿Te ha gustado? ¿No? ¿Quieres que ponga YA el siguiente capítulo o consideras mi história tan horrible que quieres que la saque? Bueno... yo solo tengo una forma de saberlo: Dejad REVIEW porfavor! Si voy recibieno REVIEWS cada dia subiré un nuevo capitulo (tengo la história terminada, sí!) pero si no recibo ninguno pensaré que nadie lee mi historia, y por tanto esperaré que alguien la lea para actualizar... Lógico, verdad?
P.D Se me olvidaba decir que ni la serie ni los personajes ni (blablabla) son míos, pero éste fic sí!!! Nada , HASTA PRONTO! (espero! Jejeje)
