En ese momento, en la habitación de Sakura, en uno de los cajones, sale el libro de las cartas. Kero observa detenidamente el evento. El libro queda flotando sobre el escritorio de la habitación. Del, sale la carta que Sakura creo hace muchos años. Esta brilla con un aura especial, un brillo que solo se ve en donde hay amor.
La escena continua en el salón, donde Sakura esta con los jóvenes recién llegados.
–Sakura. Primero creo que debo decirte... decirte que... – y se acerca a ella tratando de encontrar el perdón de ella. Sakura también se acerco a el, tratando de hallar en él, el cariño de ese amor antiguo. Pero cuando estaba a solo un paso de el, sintió un quiebre en su corazón, que la dejo horrorizada y temerosa de la situación. Tuvo miedo de escuchar algo que no quería escuchar, o de algo que realmente quería. Pero su alma se sintió turbada, y dio un giro que la dejo a espalda de el. No pudiendo aguantar la pena en su cuerpo, expulso todo su malestar.
–Como... como fuiste capaz... de desaparecer... como si no me importara– hablaba con un tono muy hiriente, y con todo su enojo y miedo en la garganta. –Podrías haber sido mas considerado, al por lo menos llamar, alguna carta o haber dicho algo, en donde estabas. Desapareciste y no dijiste nada. Por cuatro años, la angustia me destrozaba este corazón. No vez que hay personas que se preocupan por ti– y la darse vuelta, las lagrimas brotaban incesantemente, lo que una fue a parar en una de las mejillas del joven. Con los ojos fijos en los de el – Shaoran, no quiero verte nunca mas!!!... oíste, nunca mas... – y salió corriendo a su habitación.
El libro que había estado flotando, y la carta, que tenia ese brillo especial, se dejaron reposar en el escritorio, con la carta encima del Libro. Kero estupefacto, no podía creer lo que había visto. De improviso Sakura entro en la habitación, dejando la puerta cerrada de un golpe, y se echo sobre la cama. Abrazaba su almohada y lloraba sobre ella
–Sakura... Sakura, que te pasa. Sabes, yo... quería decirte que... –pero Kero penso que era mejor hablarle en otra ocasión de lo que había pasado.
En el salón, Tomoyo miraba a Shaoran, quien destrozado, no sabia que hacer. Iba a decir algo, pero Touya se acerco a Shaoran.
–Debería darte una paliza... mocoso.
El otro joven se acerco a Touya, colocándose enfrente de el.
–Espera, que vas a hacer. En realidad nuestra visita es más importante que lo que paso aquí. Por favor, escúchanos.
–Lo siento, largo de esta casa. Vamos afuera.
–Espera, necesitamos... – intento nuevamente el joven, pero Shaoran, con cabeza baja, dio media vuelta y camino en dirección a la puerta. –Shaoran, espera hombre, que es lo que haremos. No podemos irnos así.
–Vamos Erennor, Aquí no hay nada que hacer.
–Pero, que dices– replica Erennor a su compañero. Pero Touya insisti
–Ya, váyanse.
Yukito, quien no había participado en la discusión, se acerco a Tomoyo, y le indico que fuera a ver a Sakura. Luego se acerco a Touya.
–Touya, creo que tienen mas que decir. Por que mejor escuchamos lo que tienen que decir–tratando de calmarlo.
–Basta. Este mocoso es quien a echo sufrir a Sakura. No dejare que le siga haciendo daño– sentencio Touya. –Adiós.
Los muchachos salieron, bajo una tormenta, a la calle. Erennor no quería irse sin que le escucharan, así que espera en la puerta, hasta que se le ocurra algo.
–Lo puedo creer. Y aun no conseguimos hablarle de lo esencial– replico Erennor.
–Vamos, mañana será un nuevo día.
–Mañana, y si no hay mañana?
–Será lo que diga el destino.
–Pero eso depende de ella, y nosotros debemos defender nuestro destino.
–Es que... ella...
En la habitación de Sakura, Tomoyo consuela a la doliente joven. Sakura lloraba en el regazo de Tomoyo, mientras que esta dejaba que fuese su regazo, un refugio.
–Es que no puede llegar así... y sin embargo, me duele mas haberle dicho eso.
–Es por que realmente querías que volviera, ya que si no hubiese sido así, no te hubiera importado tanto.
En ese momento, la carta que se mantenía quieta encima del escritorio, comenzó a flotar, y el brillo ilumina toda la habitación, luego, traspaso el vidrio de la ventana, y salió volando hacia la calle.
–¿Que es lo que pasa?– dice Sakura al ver a su carta hacer eso. Mira el escritorio, y ve el libro. Kero se acerca a Sakura.
–La carta ya había hecho algo parecido hace unos minutos atrás.
– ¡¿Que?! Y como se te ocurre no decírmelo!!!
–Es que... como estabas.
Sakura le dio una mirada a Kero, que casi se lo come, y salió rápidamente de su habitación.
Erennor, quien no había conseguido que Shaoran se armara de valor, camino detrás del, aun a unos metros de la casa.
–Oye, tu no eres así. Parece que te afecto demasiado. Mas de lo que esperaba.
–No bromees!
–Esta bien, pero el destino se encargara de juntarlos. Tarde o temprano... parece que más temprano que tarde– dice esto, por que una carta Sakura pasa junto a el, pero en dirección a Shaoran. Este tomo la carta entre sus manos y la observo detenidamente. Erennor se acerco a el.
–Como que esta carta... no la creo Clow. ¿No es verdad?
–Esta carta la creo Sakura.
– ¿Y cual, se supone, de todas las cartas, es?
–No lo sé. Aun no tiene nombre.
–Así que es una autentica Carta Sakura?
–Así parece.
– ¿Y cuando fue creada?.
–Hace mas o menos 7 años. Cuando yo volví a Hong-kong.
–Mira lo que hace el amor. Pero, no me contaste nada de esta carta.
–Es verdad. Solo que nunca me preguntaste nada de las cartas, en particular.
–Y ahora vienes con sutilezas– y sonrío la mirar la carta, que tenia Shaoran en las manos
En esos momentos, sale Sakura a la calle, en la que caía una lluvia muy fuerte. Tomoyo le seguía, y Kero. Touya y Yukito, salieron a la puerta. Miro a todos lados, tratando de ver a través de la oscuridad y la lluvia. Giraba su cabeza hacia todos lados. Al fin, noto un par de siluetas que caminaban, alejándose. Inspiro profundamente y corrió hacia ellos.
Los muchachos notaron que venían detrás de ellos. Sakura, vio a Shaoran, y se detuvo. Quedaron a unos metros. Se miraban fijamente.
¿Por que tiene él la carta? pensaba Sakura.
¿Que significa que la carta este en sus manos?.
Sakura extendió su brazo hacia delante, en señal de que le devolvieran lo que es de ella. Shaoran mostró la carta, pero no se movió. Entonces, Sakura camina rápidamente hacia él, le arrebata la carta de sus manos, da media vuelta y comienza a caminar. Nadie se movía, todos expectantes de lo que pasaba, con excepción de Sakura. Cuando esta a unos buenos metros, la carta se zafa de sus manos y vuelve a las manos de Shaoran.
– ¡¿Que?!–replico Sakura. –Devuélvemela.
Nuevamente, Shaoran ofreció la carta, pero no se movió. Sakura, volvió a caminar hacia él, le quito la carta, y dio media vuelta. Pero antes de que diese un paso, la carta volvió a escaparse de las manos de Sakura y se dejo depositar en las manos de Shaoran.
–Deja de jugar. No me gusta lo que haces. Me coloca nerviosa.
Al pensar en lo que dijo, se sonroja, al igual que Shaoran. Pero se vuelve a Shaoran y le quita la carta, pero esta nuevamente hace lo mismo.
– ¿Por que?
Cuando intenta de quitarle la carta, Shaoran toma sus manos entre las suya, y una emoción salió del interior de Shaoran

–Sakura, yo te am................ Cuidado!!!


Primera nota del Autor:

Solo queria decir que este es una obra inspirada en los Personajes de Clamp, por lo tanto, yo me lavo las manos. Aunque se viene mejor... Anto... no re sonrojes please