-va muy arreglada señorita, ¿va a un casamiento? –le conversó el conductor.

Sora quedó pensativa y luego respondió:

-no, disculpe ¿puede doblar a la izquierda? Se me olvidó pasar por algo

-como quiera

Llegaron al lugar indicado y le pagó al taxista. Bajó del auto y se mojó al instante debido a la lluvia gruesa que caía.

Ni siquiera se dio el tiempo de esperar el ascensor, la emoción la dominaba por completo. Subió corriendo las escaleras hasta el cuarto piso. Con el pelo goteándole y su respiración agitada pulsó el timbre del departamento 48.

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-¡sí! ¡vamos Sora, no llegues!

-cálmate Mimi, no digas eso, mira cómo está Shiba.

-por mí él podría irse a la...

-¡Mimi! o

-Izzy, ¿prefieres tener una novia calva?

-¿ah? o-O

-juré que si Sora se casaba con Shiba yo me raparía

-ay Mimi... u.u igual no te dejaría por nada amor, siempre existe una buena peluca n-n

- ¬¬ qué insinúas?

-em... siento interrumpirlos. Mimi ¿no sabes qué le pasó a Sora que no viene? –se acercó Shiba

-pues ella está muy bien sin t... –pero fue interrumpida por Koushiro que la calló con la mirada

-la verdad es que con los nervios tuvo un mareo... pero no se demora

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-¿por qué no me lo contaste mamá? ¿por qué?

La señora Yagami tenía sus ojos rebosantes de lágrimas y con un nudo en la garganta le respondió:

-hijo... yo no quería preocuparte, quería que fueras feliz, eso es lo único que me alienta a seguir viviendo

-aún así debía saberlo –Tai se sentía impotente ante tal situación. Su madre tenía un cáncer y él no podía hacer nada.

Los siguientes tres meses pasaron con absoluta indiferencia. Tai decidió que viviría con su madre el resto de los 8 meses que el doctor le pronosticó de vida. Y ahora más que nunca quería estar lejos de Sora pues se enteró de que no se había casado con Shiba, pero estaba esperando un hijo de él por lo que siguieron con su noviazgo.

-¡qué sorpresa Matt!

-pues vine a ver a la mujer embarazada más linda

-gracias, entra

-traje este regalo para el pequeño, veo que ya se está haciendo notar- comentó al ver el vientre abultado de la pelirroja.

Matt se quedó conversando con Sora hasta que ella le preguntó por lo que esperaba.

-Matt... ¿qué has sabido de Tai?

-¡hasta que preguntaste! ¿qué fue lo último que supiste?

-después que ese día no lo encontré me enteré que su mamá tiene un cáncer –dijo bajando la cabeza al recordar lo vacía que se sintió el día del casamiento.

-él está muy mal, está deprimido y eso no le hace bien ni a él ni a su madre. Mañana iré a verlo, si quieres venir...

-¡claro!

-¿y aún sigues con Shiba?

-Matt, tú has sido un gran amigo en todo este tiempo y sabes que lo que más deseo en este mundo es tener a mi hijo, y que en ése momento esté la persona que yo amo. Esa persona es Tai y además nada me hace más feliz que pensar que este niño de apenas tres meses sea de él

-yo también he pensado eso y espero que sea cierto Sora, aunque no he querido decírselo a Tai porque no estamos seguros de eso

-iré mañana contigo y haré lo que debí haber hecho aquel día.

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-¡hola señora Yagami! Tanto tiempo sin verla y no ha cambiado nada –Yamato intentó ocultar su sorpresa ante el aspecto que tenía la mujer delante suyo. Parecía haber envejecido 10 años en esos 3 meses.

-muchas gracias Matt, pero sé que no es cierto –intentó sonreír.

-¿está Tai? Le traigo una sorpresa

-está en su antigua habitación, pasa

La cara de la señora Yagami se iluminó al ver entrar a Matt y detrás de él aparecer Sora con una mirada tímida ante el impactante cambio de ella.

Ambas se sonrieron sinceramente como adivinándose por la mirada que querían lo mejor para Tai y se abrazaron.

Mientras, Matt estaba con Tai:

-te traje un regalo para que subas ese ánimo hombre!

Su amigo subió la mirada interrogándolo.

-una pista: tiene que ver con cierta pelirroja

Sora estaba a punto de entrar cuando Tai dijo:

-si tiene que ver con Sora olvídalo, lo único que quiero es no volverla a ver nunca más en mi vida. Ella me olvidó, yo parezco no existir así que haré lo mismo con ella

La chica se quebró totalmente ante esas palabras, comenzó a llorar silenciosamente y se dispuso a correr, huir de ahí. "¿que no existo? Bien, pues eso es lo que har" pensó cuando se dio la vuelta para salir, pero no se iba a ir así, se lo diría a Tai a la cara. Entró y quedó viendo al sorprendido chico Yagami.

-bien, si no existes para mí responde por qué crees que estoy parada aquí preocupada por ti? Si es lo que piensas de mí me iré para que me olvides tranquilo, adiós Tai –dicho esto salió de la habitación.

-ahí se te va la última oportunidad Tai...

-claro que no –respondió levantándose rápidamente y fue corriendo tras la chica. Le tomó la mano firmemente apenas la alcanzó en las escaleras.

-espera Sora... espérame –le pidió un rostro apesadumbrado, con los ojos apagados sin brillo alguno. La mujer subió la vista de su mano hasta posarse en esos ojos castaños... esa mirada, era la misma de hace 10 años atrás cuando se encontraron fuera del local donde sería el concierto del mejor amigo de ambos. Esos ojos tan tristes...

Se llevó repentinamente una mano al vientre a raíz del dolor que le producía una punzada a causa de la corrida. Se fue intensificando hasta que la pelirroja cayó de rodillas en el suelo.

Tai la sostuvo lo mejor que pudo y luego la cargó en sus brazos hasta llevarla al departamento mientras Sora gemía apretando los ojos y la mano de Tai con la respiración entrecortada.

-resiste Sora, ya llegamos, respira hondo

-no... me duele... Tai... me duele...

-aguanta por tu hijo –le susurró al recostarla en el sofá- ¡mamá llama a una ambulancia!!! –gritó desesperado mientras él mismo iba al teléfono.

Entre tanto Matt estaba intentando tranquilizar a su amiga cuado de pronto se alarmó y llamó:

-Tai diles que es urgente ¡ahora!

La madre de Tai se percató de lo que había visto Ishida: una mancha de sangre en el lugar donde estaba Sora.

En siete larguísimos minutos llegó la ambulancia para llevarse a una casi inconsciente Takenouchi.

Tai estaba que rompía las puertas de vidrio difuminado que conducían a la sala de emergencias. A cada médico que salía del lugar se acercaba al instante a preguntar por Sora, pero nadie le traía noticias concretas, sólo unos vagos "la están tratando", "la están examinando" o "está en observación". Frases que le ponían los nervios de punta a ambos amigos.

Finalmente vieron salir a la doctora que atendió a la chica desde un comienzo. Rápidamente se acercaron rodeándola impacientes por saber del estado de Sora.

-ahora se encuentra en reposo

-¿y el bebé? ¿cómo está? –se apresuró Tai

-la señorita Takenouchi sufrió síntomas pre-abortivos debido a una agitación muy brusca

-¡todo es mi culpa! –se descargó Yagami golpeando la pared

-pero se encuentra bien, eso sí deberá cuidarse mucho durante el resto del embarazo

-¿podemos pasar a verla? –consultó Matt más calmado.

-pero una persona a la vez

-gracias doctora –Ishida se dirigió a Tai- ve tu primero

-bien –asintió mientras iba donde Sora. Una vez a su lado ella abrió los ojos y estiró sus brazos hacia él, buscando un abrazo consolador que fue correspondido.

-casi pierdo a mi hijo Tai... me asusté tanto... casi lo pierdo... –decía entre sollozos mientras intentaba reprimir su llanto.

-pero no fue así Sora –le contestó separándose un poco- quiero decirte que todo fue mi culpa, no debí haber dicho eso si no lo sentía de verdad... perdóname

-está bien... como dices, no fue así –sonrió levemente mientras volvía a hablar- yo... yo te amo Tai

-y yo no quiero dejar de amarte nunca Sora –le respondió susurrando antes de acercarse lentamente a besar los labios más dulces para él de todo el mundo. En medio de ese momento mágico Sora tomó la mano de Tai y la llevó hasta posarla en su vientre haciéndole sentir que esa pequeña vida era fruto sólo del amor de ambos, de nadie más.

Inesperadamente se abrió la puerta asomándose una cabeza rubia

-ops, vengo en un rato –dijo al ver la escena provocando que los dos tortolitos se separaran de inmediato.

-eh... no, entra Matt

-toma Sora, te traje esta flor que había en un macetero del pasillo

-ah... gracias Matt ˆ-ˆU

-y amigo –comenzó a hablar Tai- ¿aceptas ser el padrino de nuestro pequeño?

Sora lo quedó mirando sorprendida mientras Matt contestaba con una sonrisa:

-por supuesto, sólo si le ponen mi nombre

-Sora cierra la boca... no voy a dejar que ese tal Shiba cuide de él ¬¬ -le dijo tomándola del mentón.

Entonces sonrió y se levantó en la cama para abalanzarse sobre Tai dándole besos por todas partes.

-ejem... ¿y el nombre? ¬¬

-claro Matt... lo que digas –le contestó Tai atrapado en el abrazo de Sora, luego se dirigió a ella- y ud señorita va a quedarse en cama QUIETA

-si tío Tai –respondió obediente poniendo cara de niña inocente, pero sin duda la niña más feliz del mundo.

Por Akassia (o Darkdi)

Cosecha: perdon... v-v prometo nunca mas prometer q lo publicare luego.... pido disculpas por el retraso pero me pillaron todos los examenes de fin de trimestre... PERO AQUÍ ESTA!! (espero q se acuerden d esta historia =P)

Espero q les guste el final y todo y me lo hagan saber, como siempre, en un lindo y hermoso review.... no importa lo q diga....

El final no se si quedo forzado pero por lo mismo no tenia mucho tiempo pa escribir asi q lo deje hasta aquí y preferi no seguirlo pa explicar q paso con la mama de Tai.... eso se lo imaginan uds n-n ¬¬ pueden hacer q el espiritu santo la salve, q se muera ese mismo dia o como me hubiese gustado q viviera para el nacimiento d su niet

Agradezco los reviews de: Ayumi, yunieyrp, CoNy-B, Izumi-Kambara, TamyBlack, VeGaLoNe, Claudia porq gracias a uds este fic llego a su termino u-u (y todos aquellos q lleguen después tambien)

Aios a todos!! Y q les vaya bien el resto del dia!!

Grax por leer este fic hasta aquí =D