Grax a Bunny Saito, a Lizzie y a Yuuna Ushiha que me han dejado reviews ^-^
Les agradezco mucho. Me ayudan a seguir adelante y me ponen muy feliz n_o
Entonces, aquí está el tercer capítulo, disfrútenlo y felices vacaciones de
Semana Santa!!!! (Recuerden no comer carnes en viernes como yo casi hice
una vez U__U)
*-._.-*-._.-*-._.-*
What I need now is an honest answer, to make things better
You can see now my hands are tied, and I surrender
So I'll wait here for your final answer, your final answer
Capítulo 3: Rivalidad en un mundo loco.
Takao llevaba mucho tiempo en su habitación del hotel donde se. Pasó largo rato tumbado en la cama antes de que Ray y Max llegaran. Kai no estaba con ellos, por lo que supuso que había ido a perderse por ahí.
Ambos venían riéndose de algo que venía contando Ray. Cuando abrieron la puerta, Takao pudo ver a Max muerto de risa.
-No, espera, deja que termine... – le decía Ray igual de simple que el rubio-. Y luego... – soltó una risotada-. Se me quedó viendo con cara de "buen punto"... No vas a creer lo que hizo...
Max se tiró en la cama riendo, e ignorando olímpicamente a Takao. Ray se sentó en una silla y también rió.
-Takao...- dijo Max hablándole después de mil años y con la misma simpleza con la que llegó-, deja que Ray te cuente... te vas a morir de risa...
-¿Estuvieron juntos buen rato, verdad?- inquirió Takao.
Ray ya había dejado de reír por lo que él fue quien contestó.
-Un tiempecito, sí.
-¿Se la pasaron bien?- preguntó Takao en un tono de "gracias por avisar".
-Este... sí, pero, ¿estuviste solo? – Ray había captado el tono de Takao-. Digo, es que pensamos que te habías ido a pasear o algo... por eso nos quedamos en el restaurante. Ejem- se aclaró la garganta algo incómodo al recibir una mirada fría por parte de Takao-. Bueno... al menos ¿te la pasaste bien aquí?
-Sí, no sabes (N/A: nótese el sarcasmo)-. Lo más interesante fue oír a la gente pasar de un lado a otro como hormigas y conocer el número de mosaicos que tiene el piso.
-Lo... lo siento, nosotros no quisimos...
-Nunca me incluyen en sus planes, de todas maneras. Ya estoy acostumbrado.
-La verdad es que mañana pensábamos ir los tres, bueno, los cuatro si Kai se aparece, a unos jardines que hay por aquí, y quería que tú fueras también.
Takao se encogió de hombros. Le daba igual. Podrían ir a la Atlántida si les parecía, al fin y al cabo siempre iban a ser "Ray y Max",y eso era precisamente lo que le caía en la punta del hígado: que ese maldito oriental se estuviera robando la atención de quien Takao tanto quería.
Salió del cuarto cerrando la puerta tras él, dejando a la persona por quien sería capaz de todo con su (recién convertido) rival.
***
Kai lanzó a su Dranzer por enésima vez en el día. Seguía sin estar convencido de su movimiento; algo le faltaba, y la imperfección era de las cosas que mas odiaba en este mundo.
Como ese chico de playera amarilla y gorra que venía caminando distraídamente hacia él.
-Vaya, vaya. ¿A quién tenemos aquí? ¿Necesitas que alguien te cuide? ¿O ya aprendiste a callarte cuando debes?
-Déjame en paz, Kai.
-No te preocupes, algún día madurarás y sabrás lo que significa "aléjate de mi vida".
-No tienes que decírmelo. Eres lo suficientemente repulsivo como para que me digas lo que tengo que hacer.
Kai tomó a Takao por el cuello de su playera y lo acercó a su rostro. Una distancia bastante corta, si tomamos en cuenta que los mechones del pelo de Kai tocaron la frente de Takao.
-Pues entonces qué estas esperando. Lárgate
Soltó a Takao y lo dejó ir. Cuando éste se hubo alejado de donde estaba Kai, se frotó donde había estado el cabello de Kai.
"Estuve muy cerca de Kai", pensó Takao contrariado. "El mundo está loco"
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What I need now is an honest answer, to make things better
You can see now my hands are tied, and I surrender
So I'll wait here for your final answer, your final answer
Capítulo 3: Rivalidad en un mundo loco.
Takao llevaba mucho tiempo en su habitación del hotel donde se. Pasó largo rato tumbado en la cama antes de que Ray y Max llegaran. Kai no estaba con ellos, por lo que supuso que había ido a perderse por ahí.
Ambos venían riéndose de algo que venía contando Ray. Cuando abrieron la puerta, Takao pudo ver a Max muerto de risa.
-No, espera, deja que termine... – le decía Ray igual de simple que el rubio-. Y luego... – soltó una risotada-. Se me quedó viendo con cara de "buen punto"... No vas a creer lo que hizo...
Max se tiró en la cama riendo, e ignorando olímpicamente a Takao. Ray se sentó en una silla y también rió.
-Takao...- dijo Max hablándole después de mil años y con la misma simpleza con la que llegó-, deja que Ray te cuente... te vas a morir de risa...
-¿Estuvieron juntos buen rato, verdad?- inquirió Takao.
Ray ya había dejado de reír por lo que él fue quien contestó.
-Un tiempecito, sí.
-¿Se la pasaron bien?- preguntó Takao en un tono de "gracias por avisar".
-Este... sí, pero, ¿estuviste solo? – Ray había captado el tono de Takao-. Digo, es que pensamos que te habías ido a pasear o algo... por eso nos quedamos en el restaurante. Ejem- se aclaró la garganta algo incómodo al recibir una mirada fría por parte de Takao-. Bueno... al menos ¿te la pasaste bien aquí?
-Sí, no sabes (N/A: nótese el sarcasmo)-. Lo más interesante fue oír a la gente pasar de un lado a otro como hormigas y conocer el número de mosaicos que tiene el piso.
-Lo... lo siento, nosotros no quisimos...
-Nunca me incluyen en sus planes, de todas maneras. Ya estoy acostumbrado.
-La verdad es que mañana pensábamos ir los tres, bueno, los cuatro si Kai se aparece, a unos jardines que hay por aquí, y quería que tú fueras también.
Takao se encogió de hombros. Le daba igual. Podrían ir a la Atlántida si les parecía, al fin y al cabo siempre iban a ser "Ray y Max",y eso era precisamente lo que le caía en la punta del hígado: que ese maldito oriental se estuviera robando la atención de quien Takao tanto quería.
Salió del cuarto cerrando la puerta tras él, dejando a la persona por quien sería capaz de todo con su (recién convertido) rival.
***
Kai lanzó a su Dranzer por enésima vez en el día. Seguía sin estar convencido de su movimiento; algo le faltaba, y la imperfección era de las cosas que mas odiaba en este mundo.
Como ese chico de playera amarilla y gorra que venía caminando distraídamente hacia él.
-Vaya, vaya. ¿A quién tenemos aquí? ¿Necesitas que alguien te cuide? ¿O ya aprendiste a callarte cuando debes?
-Déjame en paz, Kai.
-No te preocupes, algún día madurarás y sabrás lo que significa "aléjate de mi vida".
-No tienes que decírmelo. Eres lo suficientemente repulsivo como para que me digas lo que tengo que hacer.
Kai tomó a Takao por el cuello de su playera y lo acercó a su rostro. Una distancia bastante corta, si tomamos en cuenta que los mechones del pelo de Kai tocaron la frente de Takao.
-Pues entonces qué estas esperando. Lárgate
Soltó a Takao y lo dejó ir. Cuando éste se hubo alejado de donde estaba Kai, se frotó donde había estado el cabello de Kai.
"Estuve muy cerca de Kai", pensó Takao contrariado. "El mundo está loco"