Jamas seré como Harry Potter.

Capitulo2-El partido de quiditch

Los primeros rayos de sol atravesaban tímidamente la ventana de la habitación. Harry llevaba unos minutos despierto aunque seguía con los ojos cerrados. Oía voces a su alrededor, pudo identificar entre ellas la de Ron y la de Neville, que acababan de levantarse. Pasados unos segundos se levanto y se puso las gafas.
-Buenos días dijo Ron que en esos momentos estaba buscando el zapato que dejo perdido ayer por la noche. Harry tardó en contestar.
-Buenos días.
-Preparado para el partido de quiditch??preguntó Ron mientras se ataba los cordones.
-Claro, machacaremos a los de Slytherin dijo con el tono de voz más eufórico que pudo poner. Hermione les esperaba ansiosa en la sala común, cuando Ron llegó, esta le abrazó con fuerza, en esos momentos Harry se sentía fuera de lugar, aunque nunca diría nada.
-Vamos Harry dijo Hermione Teneis que desayunar bien, hoy es el gran día. Ron y Hermione salieron de la sala común, Harry seguía ahí, quieto, aferrandose con fuerza al mango de su Saeta de Fuego. Ron se asomó por el cuadro de la señora Gorda.
-Harry, ¿Vienes o que?
-Si claro dijo este volviendo a la realidad y atravesando fugazmente el cuadro. El Gran Comedor estaba lleno de alumnos, todos ellos luciendo con orgullo los colores de sus respectivas casas. Aunque había dos casas que sin duda alguna destacaban de entre la multitud, Griffindor y Slytherin.
-Bueno Potter ¿Preparado para una aplastante derrota?dijo una fria voz a sus espaldas. Harry ni siquiera se giro, sabía perfectamente quien era, pero esta vez iba a ser diferente, hoy no iba a actuar como Harry Potter, sin embargo las miradas de sus amigos no decian eso. En silencio le pedían que atacara a Draco con punzantes dardos en forma de palabras .Y por desgracia su orgullo pudo más que sus propositos, y acabó actuando de la manera que más odiaba
-Bueno, eso será únicamente si consigues coger la snitch y teniendo en cuenta tus escasas aptitudes para el quiditch sería todo un logro que consiguieras subirte a la escoba sin caerte, por mucho dinero que esta le haya costado a tu padre. Por que para tu desgracia el talento no se puede comprar.

Draco se quedó callado, frunciendo aún más ceño, Harry pudo ver la ira y la frustración reflejada en sus ojos grises..
-Vamonos les ordenó a Crabbe y a Goyle Ya veremos quien tiene y no tiene aptitudes cuando Slytherin haya ganado el partido.

-Has estado genial dijo Ron cuando Draco se hubo marchado.
-Es verdad corroboró Hermione Ha sido sublime, has conseguido herir su amor propio.
-Si dijo Ron con una sonrisa en los labios, le has demostrado quien es superior. Una sensación de felicidad recorrió el cuerpo de Harry, sin embargo tenía que demostrar que además de todo era modesto y así poder creerselo el de una vez por todas.
-No ha sido para tanto dijo Harry pecando de falsa modestia.

(Otra vez no, por que lo he vuelto ha hacer, ya estoy harto, por que no soy capaz de tragarme mi orgullo, por que tengo que ser tan, tan, tan...estuvo unos segundos buscando el adjetivo perfecto, hasta que por fín lo encontro por que tengo que ser tan Harry cuando se dio cuenta de lo que acababa de pensar se horrorizó aún más)

El desayuno transcurrió con normalidad, el seguía absorto en sus pensamientos, pensamientos que por cierto no interesaban a nadie, o por lo menos eso creía Harry. La comida iba desapareciendo rapidamente de los platos, menos del suyo, no tenía hambre, ni tanpoco tenía ganas de jugar ningún partido, aunque en tiempos atrás eso era uno de sus pocos alicientes, cada vez que se montaba en su escoba pensaba en Sirius y se sentía culpable, el quiditch había perdido aquella magia de antaño, volviéndose monótono y aburrido. Una estupida competición, estaba harto de competir, de tener que demostrar a todo el mundo que era maravilloso, de decir siempre lo que la gente quería escuchar, de no defraudar a nadie sin saber que por ello se estaba defraudando así mismo.

Harry se levantó sin apenas haber desayunado y se fue a la sala común de Griffindor, quería estar solo, olvidarse de todo y olvidarse de quien era. Allí se encontró con Ginny, sentada en un sillón, sola, mirando hipnóticamente las brillantes llamas de la chimenea, ni siquiera se percató de su presencia, parecía triste, una tristeza que ocultaba detrás de una falsa sonrisa.

Harry la miró detenidamente, aunque solo se llevaban un año, el le seguía viendo como la hermanita pequeña de Ron y cada vez que pensaba en ella aparecía una niña de 10 años despidiendo a sus hermanos desde el andén de la estación. Harry se sentó a su lado, Ginny levanto la cabeza y le miró con solemnidad
-¿No te preparás para el partido?le peguntó Ginny mientras acariciaba al gato de Hermione. Harry pensó unos instantes antes de contestar, miro su escoba, apoyada en una esquina, estaba igual que cuando se la regalaron. Luego miró a Ginny que seguía esperando una respuesta.
-No pienso jugar, esta vez no dijo Harry, por un instante Harry pensó que él no había sido capaz de decir eso, que alguien había puesto esas palabras en su boca.

Ginny lo miró, con sus grandes ojos azules; sonrió levemente.
-No se si a tus compañeros les va ha gustar tu decisión, sobretodo a Ron esto ultimo lo dijo muy bajo, aunque Harry lo escuchó a la perfección,
-Me da igual dijo tajantemente ya encontraran a alguien que me sustituya.
-Si eso es lo que quieres dijo Ginny apartando la mirada y volviendola a fijar en las llamas brillantes y rojas que bailaban alrededor de los troncos.
-¿Eso es todo lo que tienes que decirme?preguntó Harry con tono severo Ginny se sorprendió un poco ante la pregunta de Harry.
-¿Qué quieres que te diga?¿Que vayas a jugar ese partido?¿que no dejes a tus compañeros en la estacada?¿Que tu eres nuestra única esperanza de ganar la copa?le preguntó Ginny enfadada pues si eso es lo que quieres oir coge tu escoba y vete, atrapa la snitch y gana el partido y conviertete de nuevo en el heroe de Hogwarts.

Tenía razón, Ginny tenía razón, aquello era lo que Harry deseaba oir, necesitaba escucharlo para coger la escoba y así tener una escusa para seguir siendo Harry Potter.
-No, no quería escuchar eso mintio no voy a jugar ese partido y me da igual que perdamos la copa, me da igual todo.

Harry se levantó furioso y se dirigió hacia la Saeta, sin pensarlo siquiera la cogió y la lanzó con todas sus fuerzas contra la pared, aún así no se rompió. Ginny le miró perpleja, con una mano se apartó el cabello que empezaba a caerla por la cara.
-¿Qué pretendes conseguir?pregunto Ginny
-Nada.
-No te entiendo Harry, aunque la verdad es que nunca te he entendido dijo Ginny mientras recogía la escoba de Harry.
-Yo tanpoco me entiendo, por que quiero hacer una cosa y siempre acabo haciendo lo contrario, pienso una cosa y digo otra y siempre es así.
-¿Y que esperabas?¿es que no te das cuenta?.Desde que llegaste a Hogwarts siempre has sido el centro de atención, todo el mundo sabía más de ti que tu mismo, todo el mundo te había idealizado, te consideraban algo así como su salvador, todo el mundo es un poco hipócrita y tu, Harry Potter, no eres ninguna excepción. Si no quieres jugar ese partido yo no puedo obligarte y si te digo la verdad no tengo ni la mas mínima intención de hacerlo, tu eres el que elige, que te importa más, lo que tu quieres hacer o lo que los demás esperan que hagas. Solo decirte que aunque para ti sea solo un simple partido para Ron significa mucho más.

Ginny le tendió a Harry la escoba, este la miró con recelo, si Ginny hubiera insistido un poco más Harry no hubiera dudado en cogerla, pensó en Ron, si él no jugaba anularían el partido, fallaría a mucha gente...Ron se había preparado desde hace varios meses para este partido, había mejorado mucho. Harry sentía que era su deber jugar. Sin embargo había algo que le impedía coger la escoba que Ginny le ofrecia.

Ginny empezaba a impacientarse, su mirada era cada vez más severa .Aún así Harry segía inmóvil, le quedaba poco tiempo, por su cabeza corrían mil ideas todos opuestas. Lo haría por Ron, jugaría ese partido. Harry Potter cogió con decisión la escoba.
-Solo lo hago por Ron, que quede claro dijo seriamente.
-Que más da por quien lo hagas...dijo Ginny bajando la mirada con tal de que lo hagas. Ginny se dio la vuelta y subio las escaleras para dirigirse a los cuartos de las chicas. Cuando estaba a medio camino Harry la llamo.
-¡Ginny!¿no piensas ir al partido? Ginny se paró en seco y dio la vuelta sobre sus talones con cierta delicadeza.
-¿Acaso hay alguna razón por la que deba ir?
-Ron va a jugar ¿No quieres ir a verle? Ginny bajo aún más la cabeza, espero unos segundos y luego la volvió a levantar, sus ojos brillaban a consecuencia de unas lágrimas que a duras penas intentaba contener.
-Ni se daría cuenta de que estoy. Tras decir esto Ginny se fue a su habitación. Harry se dio cuenta de que apenas quedaba tiempo, salio corriendo de la sala común dispuesto a ganar aquél partido, aunque en esos momentos no estaba seguro si lo hacía por Ron o por el mismo, aunque como había dicho Ginny "Que más da por quien lo hagas con tal de que lo hagas". ¿Por qué tenía la impresión de que Ginny era capaz de leerle la mente y saber lo que el pensaba, incluso lo que quería antes de saberlo el mismo?. Fue en ese momento en el que se dio cuenta que Ginny ya no era una niña

NOTAS DE LA AUTORA- Se que este capitulo es un poco más largo que el anterior, pero es que una vez que me puse a escribir me costó parar. Espero que os haya gustado. -Blackshaka-Gracias por tu review, ya he leido tu fic y me ha gustado mucho, sigue así y continúalo pronto. -Ithae-Ya se que el anterior fic fue un poco corto, pero en este he intentado extenderme un poco más, por cierto, ¿Cómo se aceptan reviews anonimos?Te agradecería mucho una respuesta. Besos. -Uialwen-En este fic he intentado poner algunas reflexiones "profundas" espero k te hayan gustado. Besos a todos. Alana