LAS VUELTAS DE LA VIDA
Los personajes que se utilizan en este fic no son de mi pertenencia, son la imaginación de Rumiko sensei, yo solo los pido prestados para usarlos en manera de entretención sin fines de lucro.
Por : "SAYO"
CAPITULO DIEZ "Sufrimientos siempre latentes, una conciencia que vence"
Kagome se había quedado dormida con un extraño sentimiento de amargura... quería ver a Inuyasha, pero sabía que esto podía dolerle. Sus sueños habían sido inquietos y había tenido un poco de fiebre a causa de las heridas. Sou había entrado a cuidarla, la veía tan inquieta, de seguro a causa del hanyou. Sango le había dicho que ésta ya sabía de la presencia de Inuyasha en el lugar. Observó algo enfadado a la joven "¿por qué no podía sacarlo de su mente?...¿por qué por más que luchaba no había podido sacarlo de su corazón?...acaso... ¿Kagome jamás dejaría de amarlo?", el simple pensamiento le enfurecía.
-¿estás bien?- preguntó preocupado al ver como la joven entreabría los ojos con lentitud. La joven lo vio con detenimiento y le sonrió cálidamente.
-Me encuentro mejor... perdón por hacerte preocupar- murmuró con la cabeza gacha. Sou la veía con ternura, pero con cierto dejo de desagrado y tristeza en sus azules ojos.
-¿por qué dejaste a Shippo?...¿por qué te arriesgaste?- preguntó con dolor en su tono de voz, algo entrecortado.
-Sentí la presencia de un fragmento... y ya ves, todo salió bien y ahora tenemos un fragmento más- habló convencida la joven, pero Sou le vio con un dejo de furia creciente.
-LOS FRAGMENTOS NO SON TU PROBLEMA!- espetó dejando salir su enfado. Kagome le veía sorprendida, incrédula, jamás le había visto así.
-Pero Sou... yo fui la causante de la ruptura de la perla- se excusó la joven.
-Lo haces por ese hanyou- dijo en tono despectivo. Kagome lo observó directamente a los ojos con enfado.
-No te refieras a Inuyasha de esa manera- espetó.
-Ya basta, no le defiendas..... ¡él ni siquiera está contigo cuando le necesitas!
Kagome bajó la mirada, algo dolida.
-Es verdad- murmuró- pero yo lo hago porque así lo deseo- terminó por decir, sintiendo como las lagrimas se agolpaban, luchando frenéticamente por salir.
-Él no lo merece... él no merece que le ames- susurró el joven, sintiéndose arrepentido de sus palabras.
-Eso... yo no lo controlo- murmuró la joven- no sabes como quisiera controlarlo.
-Yo te amo- dijo el muchacho mientras levantaba el rostro de la joven, para que lo mirase a los ojos. Ésta hizo una mueca de aceptación.
-Y yo quisiera amarte a ti... pero no puedo... ninguno de los dos controla nada... nadie puede controlar las emociones Sou, son los corazones los que dictan, no nosotros- murmuró la miko.
-MALDITO SEA ESE HANYOU- gritó el muchacho al tiempo que se separaba de la joven- ¿¡POR QUE NO VES QUE ËL NO TE AMA!?... él ama a Kikyou... por eso está con ella- dijo casi en un murmullo lo último al ver la reacción que había provocado al no medir sus palabras
Kagome bajó la mirada al tiempo que espesas lagrimas corrían por sus mejillas.
-Perdona Kagome...- dijo casi en un susurro.
-No importa... tienes razón, pero aún así, yo haré todo lo que pueda por él- murmuro la joven entre sollozos. Sou sólo asintió poniéndose de pie.
Kagome mantuvo su mirada gacha mientras el joven algo frustrado salía, entre entristecido y rabioso, sintiendo una ira descontrolada por Inuyasha... pero un dolor aún más fuerte, una impotencia de ver que Kagome jamás le amaría y más aún, saber que ésta sería capaz de dar hasta lo imposible por ese hanyou... que a su parecer no era merecedor ni de la más mínima lágrima de la joven miko.
-Perdóname, Sou- murmuró la joven, al tiempo que trataba de callar su llanto...- después de todo... tienes razón, el jamás me amara... el nunca lo hará... pero aún así lo daría todo por su felicidad- susurró al tiempo que cerraba con fuerza sus ojos, tratando de guardar cualquier dolor y ocultar cualquier pena, así como lo había estado haciendo desde que Inuyasha se había ido con Kikyou.
::::::::::::::::::
Mientras en las afueras se encontraba Kikyou, agachada, con el rostro sombrío... se sentía "insignificante". Ella decía ser la poseedora del corazón de Inuyasha además de su vida porque ambos habían muerto por el otro, pero... ¿eso se podía llamar sacrificio?... Habían sido víctimas del destino, un destino cruel gatillado por Naraku... el amor que ambos juraban proferir al otro se había roto con tanta facilidad, al más mínimo engaño. Y por otra parte estaba esa muchacha a la que había oído en secreto, mientras Sou le reclamaba su amor, y sin embargo, Kagome seguía defendiendo a aquel que la hería... y aunque estuviera herida por ese amor, ella seguía diciendo que daría todo por él... por eso, aquella que era su reencarnación había seguido la búsqueda de los fragmentos... por la felicidad de aquel al que ella egoístamente retenía con un juramento y un deber. Siendo que el hanyou por su parte también amaba a su reencarnación, de eso estaba segura... lo había notado en su mirada que, al principio al saber de ella había sido impaciente, casi como la de un niño pequeño que con añoranza espera obtener algo que siempre esperó. Y luego, cuando observo los dorados ojos del hanyou al momento de ver herida a Kagome, vislumbró en éstos el dolor y la culpa... la tristeza, la agonía... Inuyasha amaba a Kagome y ella no tenía derecho a seguir destruyendo esa relación que jamás había podido empezar... un amor que ella había interrumpido y tratado de cortar, sin lograr desaparecer las raíces... las raíces que parecían tener espinas hirientes que destrozaban sin piedad...
"Si Kagome hubiese estado en mi lugar hace 50 años... jamás hubiese caído en esa trampa"... "Ya no es justo que lo mantengas junto a ti"..."eso no es amor... es una obsesión"- su mente divagaba entre aquellos pensamientos, su conciencia al fin vencía... "No provoques algo de lo que después jamás podrás dejar de arrepentirte"... "déjalo libre, todos tienen derecho a ser feliz"
Kikyou bajó la mirada, concentrándose en el vacío... era cierto, ya era hora de dejar de lado ese deber que había impuesto. Después de todo, ella ya estaba muerta, quizás era hora de ver esa vida que le habían semi- devuelto como una segunda oportunidad... una oportunidad para sellar los errores... una segunda oportunidad para así dejar su conciencia en paz... dejar en libertad a Inuyasha, para amar de verdad, aunque quizás el destino le tenía deparado un corto plazo de felicidad.
::::::::::::::::::::::: Kagome se puso de pie con cuidado. Había estado durmiendo quizás cuanto tiempo, ahora ya se sentía bastante mejor, y era poco lo que sentía el dolor de sus heridas, sin embargo ese tiempo en que permaneció dormida jamás dejo de pensar, oía una y otra vez las palabras de Sou... quizás ya era hora de que simplemente dejará de imponerse el deber de reunir los fragmentos... quizás ya era hora de dejar que los sentimientos que tenía por Inuyasha le mandaran en todo... aunque no por eso dejaría de amarle, jamás dejaría de amarle.
Estaba frente a todos, sin embargo caminó hacia Sou, hasta quedar frente a él, dando la espalda al resto, quienes parecían estar preocupados por ella.
-Parece que tienen en su poder algunos fragmentos- murmuró la joven. Sou sólo asintió.
-Kouga los dejo... dijo que debía volver con su manada sin cobrar venganza- Sou hablaba con sinceridad y Kagome parecía estar tranquila, sin embargo, su inconsciente buscaba al hanyou, ¿hacía cuanto no le veía?.....se reprocho a sí misma aquellos pensamientos. No debía mirarlo... era justo él quien había quedado a su espalda...
-¿Te sientes bien?- preguntó Inuyasha, sin poderlo evitar... Necesitaba saber como se encontraba la joven... necesitaba oírla hablarle otra vez.
Pero la respuesta se hizo invisible... jamás existió... jamás fue emanada de los labios de la joven, se ahogó en su garganta, desapareció, se esfumó. Así como también ella lo hizo, con paso determinado continuó su camino sin voltear.
-Ya hace rato deseo caminar un poco- murmuró la joven. Sango entonces se puso de pie y partió tras de ella. Un leve suspiro escapó de los labios del hanyou al verla desaparecer... todo estaba perdido, parecía que la incomodaba... por lo menos se veía que ya estaba mejor y, aunque no deseaba dejarla y tenía miedo de que Naraku pudiera tratar de herirla otra vez, más temor le daba desmoronarse frente a todos si Kagome seguía sin querer hablarle... quizás hasta le odiaba, aunque había sentido lo contrario al verla herida días antes... quizás simplemente la había perdido... Una sonrisa lacónica y dolida se marcó en su rostro, al tiempo que observaba a Sou... éste parecía culparlo sólo con la mirada.
-Despídanme de ella- murmuró, al tiempo que daba la espalda al grupo, sin decir nada más.
Kikyou le siguió al instante, pero no para acompañarlo en aquella retirada, sino... para disuadirlo de que se quedara... la decisión estaba tomada, aquí los sucesos habían sido distintos, su reencarnación e Inuyasha estaban siendo cegados por sus propios corazones que en un desesperado intento de ocultar el dolor callaba cualquier expresión, ella había estado atenta... ahora ella era la que sabía lo que ambos ocultaban en sus corazones y, sobre todo, sabía que aquel sentimiento oculto por los dos, era totalmente recíproco... pero así también sabía el posible desenlace de la vida de su reencarnación, lo recordaba por que alguna vez lo leyó cuando se preparaba para ser una sacerdotisa, sin embargo le había pasado por alto al no sentirse en la situación, pero no así con Kagome...
-¡Inuyasha, detente!- gritó Kikyou, interponiéndose en el camino. Inuyasha tenía su mirada baja, como quien lo hubiese perdido todo en la batalla- Aún no es tiempo de partir... estoy segura que será mejor que estemos todos juntos o Naraku usará eso como vulnerabilidad en nuestra contra- terminó por decir la ex viva. Inuyasha la vio extrañado, pero asintió... Kikyou tenía razón... Podía dolerle mucho que Kagome hubiera cambiado su trato con él, pero más le dolería que algo malo le ocurriese, y ahora era el tiempo para estar unidos y protegerse los unos a los otros.
:::::::::::::::::::
-Vamos, amiga... desahógate- murmuró Sango viendo como Kagome dejaba escapar prolongados sollozos cargados de tristeza- ¿por qué no le contestaste nada?- preguntó la exterminadora cuando la joven ya estuvo más calmada.
-Tenía miedo... tenía miedo a que mi corazón terminara de romperse y que él lo notará en mis palabras... temí que al hablar, todo el dolor oculto saliera a la luz...- murmuró con suavidad la joven. Sango le miró con profunda ternura, le dolía ver a su amiga así... pero algo le decía que el hanyou no había quedado exento de dolor, un brillo fugaz que vio en la mirada del hanyou al no recibir respuesta alguna le hizo notar la tristeza... algo que parecía gritar "la he perdido".
De la nada salió Sou... al ver irse al hanyou se encamino en dirección a donde la joven había desaparecido. Con una mueca hizo saber a Sango que deseaba hablar con Kagome. Ésta, algo insegura, se puso de pie, frente al asombro de kagome, con una seña le aviso que Sou estaba ahí, por lo que Kagome comprendió a la perfección lo que ocurría.
-Gracias, Sango- murmuró antes de verla partir. Sango sólo asintió con una sonrisa llena de ternura.
Sou se sentó junto a Kagome, sin verla a los ojos, así como ella tampoco lo hacía, ambos miraban al espacio frente de ellos, manteniendo el silencio reinante, la brisa que agitaba sus cabellos que parecían tratar de acariciar las heridas y sanarlas.
"Sanar... quizás es hora de sanar"
-Se ha ido- murmuró el joven tratando de no observar el rostro de la joven. Ésta sólo entrecerró sus ojos.
-Ya veo... pues quizás ya es hora de que te haga caso... debo entregarle ésto- respondió la joven, abriendo su mano y dejando ver los fragmentos que había reunido- luego de eso creo que es hora de que nosotros hablemos-.
Sou la observó sorprendido, algo le decía que su última conversación había herido a Kagome, pero le había logrado hacer entrar en razón... algo le decía que la conversación que tendrían sería al fin agradable para él.
-Está bien... - murmuró con una suave sonrisa el joven- cuando le volvamos a ver se los entregarás... pero ahora quédate conmigo ¿si?- Imploró con una tierna sonrisa. Kagome sólo asintió quedándose en el lugar recostándose en el mullido pasto junto a él.
:::::::::::::::::::::::::::
-Sabes?... hoy descubrí algo- murmuró Kikyou, aun manteniendo algo de su frialdad característica. Inuyasha le veía algo confundido, habían permanecido en silencio y aquellas palabras le habían sacado de sus pensamientos y dejado algo extrañado.
-¿Tu la amas?- preguntó Kikyou a Inuyasha. Ahora si éste no podía salir de su sorpresa.
-Eso... eso no importa- murmuró el hanyou, sintiéndose acorralado al tiempo que bajaba su mirada para ocultar su verdadero sentir.
-Tu la amas- afirmó Kikyou
-¿Por qué dices eso?- preguntó Inuyasha apresurado, casi a la defensiva-... yo sólo puedo estar para ti- espetó el hanyou tratando de darle veracidad a sus palabras. Kikyou sólo negó, parecía estar sonriendo, pero ya no con esa sonrisa falsa e irónica, una sonrisa verdadera aunque algo triste.
-Vamos Inuyasha... he visto tu tristeza y sé que es por ella- murmuró la joven con la mirada baja- la última vez que te he pedido que me beses me quedó claro que ahora estar junto a mí se ha transformado en una obligación- terminó por decir Kikyou, levantando su mirada, viéndolo de manera penetrante, tratando así de imposibilitarle el esconder la verdad tras alguno de sus orgullosos gestos.
Inuyasha entonces fue el que bajó la mirada... descubierto, sin un escape ni salida, sabía bien que había sido desenmascarado acerca de su forzada estadía con quien decía amar... por lo menos veía que ésta parecía no sufrir con esto, pero aun así... no podía romper la promesa y dejar su deber, él debía protegerle.
-Kikyou... yo debo protegerte- murmuró el hanyou, la mujer sólo negó.
-Primero que nada... creo que ese es un deber que yo misma te he impuesto... y, de paso, has terminado por convencerte que es tu mayor labor en esta vida... pero las causas de tu deber no son verídicas, jamás dimos en realidad la vida el uno por el otro... yo no sacrifiqué mi vida por ti, ni tú por mí... ambos fuimos víctimas del destino al que nos conllevó la perla- explico la ex miko- en segundo lugar... creo que Kagome necesitará mucho más tu protección... creo que la mirada de Naraku está sobre ella- aclaró la mujer, emprendiendo su paso en dirección al campamento donde se hallaban los demás. Inuyasha permanecía inmóvil, sin aún digerir nada de lo que Kikyou le había hablado... sin embargo, una idea alentadora le recorría por cada rincón de su mente... Kikyou acababa de desligarle de aquella responsabilidad con ella, dejándole libre para proteger a quien en realidad amaba. "Y quizás... si aún hay esperanzas, aún esté en tu corazón, Kagome..."
FIN CAPITULO DIEZ
Hola, si deje mis mensajes para el final del fic... es que así quien este cansado (a) de mi solo lee el fic... o si hay alguien que ya esta cansado de mi y del fic..pues... ha de no estar leyendo nada de esto, jeje (que análisis no...creo que debo definitivamente despertarme un poco).
Ya llegue de mis vacaciones en las cuales lo he pasado de maravilla, les extrañe mucho como ya saben quienes me conocen y estoy muy feliz de poder verlos por msn o el foro. Espero que el fic no se este haciendo latero para quien le este leyendo, de ser así, me lo hacen saber.
Agradezco mucho a mi hermanita pequeña que estuvo en Bariloche y que llego como un día antes que yo me fuera, mi buena Yashi la cual aguantándome me revisa mis faltas ( que son muchas) en mi fic y además de ayudarme y agregar cosas me apoya, muchas gracias Yashi, también a mi okaa querida, kalita la cual es una gran persona y me anima para escribir... de paso recomiendo su fic OLOR A TI.........a y también de Yashi AUN AHORA. Un Beso también a Kim, y a Belén que esta de vacaciones n.n.
Ahora si me voy a lo que más me gusta, por que es mi motivación, además de darme ánimos y hacerme sentir que quizás mis intentos de fics no son tan malos, n.n.
Hathor3:- Gracias por opinar que mi fic esta bueno, espero no decepcionar, la verdad es que en este fic Kikyou tendrá un cambio fuerte... es lo que a mi me parecería mejor, pero... eso, espero que este capitulo sea de tu agrado nuevamente gracias por tu opinión, para mi vale muchísimo.
Tu amiga Sayis
Kala:- Mi okaa linda!, ahora yo estoy como tomate maduro, es que me da mucha alegría saber que te gusta mi fic y que además crees que he avanzado, eso me deja una sensación gratificante, aunque igual creo que nunca voy a llegar a niveles como los tuyos, los de Yashi y de muchos de los integrantes de la familia del foro... pero me contento con saber que mis fics están algo "pasables", por que la verdad el escribir me ha servido para relajarme y conocer personas bellísimas n.n......y ya sabes que me tendrás por tu casa O.O.....jeje.
Tu hija SaYis
Leidy :- pues si en eso coincidimos, espero que este capitulo te guste. Un beso
Sayo
Kim:- Hola pequeñita! Sabes algo, me mirarás extra raro pero... primero que anda, soy tomate viviente, vengo saliendo de mi estado de tomate con Kalita para encontrarme contigo..gracias!!!!!!!! T.T, sobre todo por decirme que expreso sentimientos... lo segundo es que...Kikyou no hará nada malo, díganme loca, pero creo que en este fic lo que busco es "reformarla", darle conciencia... así que espero te guste, jeje
Un Beso
Sayo
Kiraris:- Gracias por tu review, largo ero mejor, me encanta leer, jaja, que bueno que no salió de contexto la personalidad de Sesshomaru... por que en el otro fic..... ya nada, jeje U.U..... en cuanto a Kikyou, ella si tendrá cambios de personalidad, además..tus fics están buenos así como les escribes, si al final, cada fic es distinto, por que tiene el toque de su autor n.n ¿no?... jeje, me despido por ahora un beso y espero hoy leer todos tus fics, es que con las vacaciones quede súper atrasada U.U.
Un beso Sayis
Nandi:- n//n, muchas gracias nandi, que bueno que el fic te agrade y gracias por tus palabras.
Tsuki:-Muchas gracias por apoyo y comentarios, la verdad es que a poco la trama ya se va terminando y armando, por que creo el fic termina en capitulo trece..o catorce, pero yo creo que trece n.n. Un beso y espero este capitulo te guste.
Darki:- DARKI!!!!!!!!!! Ieeeeeeeee!!!! No me digas que...... uyyy ya, acabo de notarlo... pues llegue prácticamente a las 11:00 U.U... vaya que mala suerte, pero que felicidad ver un review tuyo, me haces muy feliz aunque eso de que.....lo que pusiste, jamás..... tu escribes precioso y yo nunca podría escribir como tu... lo mismo que digo de Kala y de muchas personas del foro que son talentos innatos..pero agradezco tus palabras, además que de que denuevo me sonroje, lo hice, jiji, te he extrañado demasiado, pero ya ves...... no te voy a responde el mail por aquí.... pero te digo que ese que dices enviarme antes de ayer... no me llego... u.U, son fallas de Hotmail....ojala te conectes denuevo (es que ahora que note tenía review tuyo abrí Hotmail y estoy leyendo tu correo jeje :P)...... que suerte de la Chizuru y Kala, me también querer verte T.T o leerte que sea .....me viste..ya mejor te mando un mail, jeje
Te quiere Sayis
Gracias a la pequeña paulina por su mail y review, te agradezco mucho el interés en mi fic, me hace sentir muy feliz n.n, y también a todos quienes me aguantan ya sea por msn o por el foro o.....hasta en mi casa XP.
Se despide por ahora
"Sayo"
Si pueden me dejan su opinión si?... se los agradecería mucho
Hasta pronto ( (espero O.O)
Los personajes que se utilizan en este fic no son de mi pertenencia, son la imaginación de Rumiko sensei, yo solo los pido prestados para usarlos en manera de entretención sin fines de lucro.
Por : "SAYO"
CAPITULO DIEZ "Sufrimientos siempre latentes, una conciencia que vence"
Kagome se había quedado dormida con un extraño sentimiento de amargura... quería ver a Inuyasha, pero sabía que esto podía dolerle. Sus sueños habían sido inquietos y había tenido un poco de fiebre a causa de las heridas. Sou había entrado a cuidarla, la veía tan inquieta, de seguro a causa del hanyou. Sango le había dicho que ésta ya sabía de la presencia de Inuyasha en el lugar. Observó algo enfadado a la joven "¿por qué no podía sacarlo de su mente?...¿por qué por más que luchaba no había podido sacarlo de su corazón?...acaso... ¿Kagome jamás dejaría de amarlo?", el simple pensamiento le enfurecía.
-¿estás bien?- preguntó preocupado al ver como la joven entreabría los ojos con lentitud. La joven lo vio con detenimiento y le sonrió cálidamente.
-Me encuentro mejor... perdón por hacerte preocupar- murmuró con la cabeza gacha. Sou la veía con ternura, pero con cierto dejo de desagrado y tristeza en sus azules ojos.
-¿por qué dejaste a Shippo?...¿por qué te arriesgaste?- preguntó con dolor en su tono de voz, algo entrecortado.
-Sentí la presencia de un fragmento... y ya ves, todo salió bien y ahora tenemos un fragmento más- habló convencida la joven, pero Sou le vio con un dejo de furia creciente.
-LOS FRAGMENTOS NO SON TU PROBLEMA!- espetó dejando salir su enfado. Kagome le veía sorprendida, incrédula, jamás le había visto así.
-Pero Sou... yo fui la causante de la ruptura de la perla- se excusó la joven.
-Lo haces por ese hanyou- dijo en tono despectivo. Kagome lo observó directamente a los ojos con enfado.
-No te refieras a Inuyasha de esa manera- espetó.
-Ya basta, no le defiendas..... ¡él ni siquiera está contigo cuando le necesitas!
Kagome bajó la mirada, algo dolida.
-Es verdad- murmuró- pero yo lo hago porque así lo deseo- terminó por decir, sintiendo como las lagrimas se agolpaban, luchando frenéticamente por salir.
-Él no lo merece... él no merece que le ames- susurró el joven, sintiéndose arrepentido de sus palabras.
-Eso... yo no lo controlo- murmuró la joven- no sabes como quisiera controlarlo.
-Yo te amo- dijo el muchacho mientras levantaba el rostro de la joven, para que lo mirase a los ojos. Ésta hizo una mueca de aceptación.
-Y yo quisiera amarte a ti... pero no puedo... ninguno de los dos controla nada... nadie puede controlar las emociones Sou, son los corazones los que dictan, no nosotros- murmuró la miko.
-MALDITO SEA ESE HANYOU- gritó el muchacho al tiempo que se separaba de la joven- ¿¡POR QUE NO VES QUE ËL NO TE AMA!?... él ama a Kikyou... por eso está con ella- dijo casi en un murmullo lo último al ver la reacción que había provocado al no medir sus palabras
Kagome bajó la mirada al tiempo que espesas lagrimas corrían por sus mejillas.
-Perdona Kagome...- dijo casi en un susurro.
-No importa... tienes razón, pero aún así, yo haré todo lo que pueda por él- murmuro la joven entre sollozos. Sou sólo asintió poniéndose de pie.
Kagome mantuvo su mirada gacha mientras el joven algo frustrado salía, entre entristecido y rabioso, sintiendo una ira descontrolada por Inuyasha... pero un dolor aún más fuerte, una impotencia de ver que Kagome jamás le amaría y más aún, saber que ésta sería capaz de dar hasta lo imposible por ese hanyou... que a su parecer no era merecedor ni de la más mínima lágrima de la joven miko.
-Perdóname, Sou- murmuró la joven, al tiempo que trataba de callar su llanto...- después de todo... tienes razón, el jamás me amara... el nunca lo hará... pero aún así lo daría todo por su felicidad- susurró al tiempo que cerraba con fuerza sus ojos, tratando de guardar cualquier dolor y ocultar cualquier pena, así como lo había estado haciendo desde que Inuyasha se había ido con Kikyou.
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Mientras en las afueras se encontraba Kikyou, agachada, con el rostro sombrío... se sentía "insignificante". Ella decía ser la poseedora del corazón de Inuyasha además de su vida porque ambos habían muerto por el otro, pero... ¿eso se podía llamar sacrificio?... Habían sido víctimas del destino, un destino cruel gatillado por Naraku... el amor que ambos juraban proferir al otro se había roto con tanta facilidad, al más mínimo engaño. Y por otra parte estaba esa muchacha a la que había oído en secreto, mientras Sou le reclamaba su amor, y sin embargo, Kagome seguía defendiendo a aquel que la hería... y aunque estuviera herida por ese amor, ella seguía diciendo que daría todo por él... por eso, aquella que era su reencarnación había seguido la búsqueda de los fragmentos... por la felicidad de aquel al que ella egoístamente retenía con un juramento y un deber. Siendo que el hanyou por su parte también amaba a su reencarnación, de eso estaba segura... lo había notado en su mirada que, al principio al saber de ella había sido impaciente, casi como la de un niño pequeño que con añoranza espera obtener algo que siempre esperó. Y luego, cuando observo los dorados ojos del hanyou al momento de ver herida a Kagome, vislumbró en éstos el dolor y la culpa... la tristeza, la agonía... Inuyasha amaba a Kagome y ella no tenía derecho a seguir destruyendo esa relación que jamás había podido empezar... un amor que ella había interrumpido y tratado de cortar, sin lograr desaparecer las raíces... las raíces que parecían tener espinas hirientes que destrozaban sin piedad...
"Si Kagome hubiese estado en mi lugar hace 50 años... jamás hubiese caído en esa trampa"... "Ya no es justo que lo mantengas junto a ti"..."eso no es amor... es una obsesión"- su mente divagaba entre aquellos pensamientos, su conciencia al fin vencía... "No provoques algo de lo que después jamás podrás dejar de arrepentirte"... "déjalo libre, todos tienen derecho a ser feliz"
Kikyou bajó la mirada, concentrándose en el vacío... era cierto, ya era hora de dejar de lado ese deber que había impuesto. Después de todo, ella ya estaba muerta, quizás era hora de ver esa vida que le habían semi- devuelto como una segunda oportunidad... una oportunidad para sellar los errores... una segunda oportunidad para así dejar su conciencia en paz... dejar en libertad a Inuyasha, para amar de verdad, aunque quizás el destino le tenía deparado un corto plazo de felicidad.
::::::::::::::::::::::: Kagome se puso de pie con cuidado. Había estado durmiendo quizás cuanto tiempo, ahora ya se sentía bastante mejor, y era poco lo que sentía el dolor de sus heridas, sin embargo ese tiempo en que permaneció dormida jamás dejo de pensar, oía una y otra vez las palabras de Sou... quizás ya era hora de que simplemente dejará de imponerse el deber de reunir los fragmentos... quizás ya era hora de dejar que los sentimientos que tenía por Inuyasha le mandaran en todo... aunque no por eso dejaría de amarle, jamás dejaría de amarle.
Estaba frente a todos, sin embargo caminó hacia Sou, hasta quedar frente a él, dando la espalda al resto, quienes parecían estar preocupados por ella.
-Parece que tienen en su poder algunos fragmentos- murmuró la joven. Sou sólo asintió.
-Kouga los dejo... dijo que debía volver con su manada sin cobrar venganza- Sou hablaba con sinceridad y Kagome parecía estar tranquila, sin embargo, su inconsciente buscaba al hanyou, ¿hacía cuanto no le veía?.....se reprocho a sí misma aquellos pensamientos. No debía mirarlo... era justo él quien había quedado a su espalda...
-¿Te sientes bien?- preguntó Inuyasha, sin poderlo evitar... Necesitaba saber como se encontraba la joven... necesitaba oírla hablarle otra vez.
Pero la respuesta se hizo invisible... jamás existió... jamás fue emanada de los labios de la joven, se ahogó en su garganta, desapareció, se esfumó. Así como también ella lo hizo, con paso determinado continuó su camino sin voltear.
-Ya hace rato deseo caminar un poco- murmuró la joven. Sango entonces se puso de pie y partió tras de ella. Un leve suspiro escapó de los labios del hanyou al verla desaparecer... todo estaba perdido, parecía que la incomodaba... por lo menos se veía que ya estaba mejor y, aunque no deseaba dejarla y tenía miedo de que Naraku pudiera tratar de herirla otra vez, más temor le daba desmoronarse frente a todos si Kagome seguía sin querer hablarle... quizás hasta le odiaba, aunque había sentido lo contrario al verla herida días antes... quizás simplemente la había perdido... Una sonrisa lacónica y dolida se marcó en su rostro, al tiempo que observaba a Sou... éste parecía culparlo sólo con la mirada.
-Despídanme de ella- murmuró, al tiempo que daba la espalda al grupo, sin decir nada más.
Kikyou le siguió al instante, pero no para acompañarlo en aquella retirada, sino... para disuadirlo de que se quedara... la decisión estaba tomada, aquí los sucesos habían sido distintos, su reencarnación e Inuyasha estaban siendo cegados por sus propios corazones que en un desesperado intento de ocultar el dolor callaba cualquier expresión, ella había estado atenta... ahora ella era la que sabía lo que ambos ocultaban en sus corazones y, sobre todo, sabía que aquel sentimiento oculto por los dos, era totalmente recíproco... pero así también sabía el posible desenlace de la vida de su reencarnación, lo recordaba por que alguna vez lo leyó cuando se preparaba para ser una sacerdotisa, sin embargo le había pasado por alto al no sentirse en la situación, pero no así con Kagome...
-¡Inuyasha, detente!- gritó Kikyou, interponiéndose en el camino. Inuyasha tenía su mirada baja, como quien lo hubiese perdido todo en la batalla- Aún no es tiempo de partir... estoy segura que será mejor que estemos todos juntos o Naraku usará eso como vulnerabilidad en nuestra contra- terminó por decir la ex viva. Inuyasha la vio extrañado, pero asintió... Kikyou tenía razón... Podía dolerle mucho que Kagome hubiera cambiado su trato con él, pero más le dolería que algo malo le ocurriese, y ahora era el tiempo para estar unidos y protegerse los unos a los otros.
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-Vamos, amiga... desahógate- murmuró Sango viendo como Kagome dejaba escapar prolongados sollozos cargados de tristeza- ¿por qué no le contestaste nada?- preguntó la exterminadora cuando la joven ya estuvo más calmada.
-Tenía miedo... tenía miedo a que mi corazón terminara de romperse y que él lo notará en mis palabras... temí que al hablar, todo el dolor oculto saliera a la luz...- murmuró con suavidad la joven. Sango le miró con profunda ternura, le dolía ver a su amiga así... pero algo le decía que el hanyou no había quedado exento de dolor, un brillo fugaz que vio en la mirada del hanyou al no recibir respuesta alguna le hizo notar la tristeza... algo que parecía gritar "la he perdido".
De la nada salió Sou... al ver irse al hanyou se encamino en dirección a donde la joven había desaparecido. Con una mueca hizo saber a Sango que deseaba hablar con Kagome. Ésta, algo insegura, se puso de pie, frente al asombro de kagome, con una seña le aviso que Sou estaba ahí, por lo que Kagome comprendió a la perfección lo que ocurría.
-Gracias, Sango- murmuró antes de verla partir. Sango sólo asintió con una sonrisa llena de ternura.
Sou se sentó junto a Kagome, sin verla a los ojos, así como ella tampoco lo hacía, ambos miraban al espacio frente de ellos, manteniendo el silencio reinante, la brisa que agitaba sus cabellos que parecían tratar de acariciar las heridas y sanarlas.
"Sanar... quizás es hora de sanar"
-Se ha ido- murmuró el joven tratando de no observar el rostro de la joven. Ésta sólo entrecerró sus ojos.
-Ya veo... pues quizás ya es hora de que te haga caso... debo entregarle ésto- respondió la joven, abriendo su mano y dejando ver los fragmentos que había reunido- luego de eso creo que es hora de que nosotros hablemos-.
Sou la observó sorprendido, algo le decía que su última conversación había herido a Kagome, pero le había logrado hacer entrar en razón... algo le decía que la conversación que tendrían sería al fin agradable para él.
-Está bien... - murmuró con una suave sonrisa el joven- cuando le volvamos a ver se los entregarás... pero ahora quédate conmigo ¿si?- Imploró con una tierna sonrisa. Kagome sólo asintió quedándose en el lugar recostándose en el mullido pasto junto a él.
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-Sabes?... hoy descubrí algo- murmuró Kikyou, aun manteniendo algo de su frialdad característica. Inuyasha le veía algo confundido, habían permanecido en silencio y aquellas palabras le habían sacado de sus pensamientos y dejado algo extrañado.
-¿Tu la amas?- preguntó Kikyou a Inuyasha. Ahora si éste no podía salir de su sorpresa.
-Eso... eso no importa- murmuró el hanyou, sintiéndose acorralado al tiempo que bajaba su mirada para ocultar su verdadero sentir.
-Tu la amas- afirmó Kikyou
-¿Por qué dices eso?- preguntó Inuyasha apresurado, casi a la defensiva-... yo sólo puedo estar para ti- espetó el hanyou tratando de darle veracidad a sus palabras. Kikyou sólo negó, parecía estar sonriendo, pero ya no con esa sonrisa falsa e irónica, una sonrisa verdadera aunque algo triste.
-Vamos Inuyasha... he visto tu tristeza y sé que es por ella- murmuró la joven con la mirada baja- la última vez que te he pedido que me beses me quedó claro que ahora estar junto a mí se ha transformado en una obligación- terminó por decir Kikyou, levantando su mirada, viéndolo de manera penetrante, tratando así de imposibilitarle el esconder la verdad tras alguno de sus orgullosos gestos.
Inuyasha entonces fue el que bajó la mirada... descubierto, sin un escape ni salida, sabía bien que había sido desenmascarado acerca de su forzada estadía con quien decía amar... por lo menos veía que ésta parecía no sufrir con esto, pero aun así... no podía romper la promesa y dejar su deber, él debía protegerle.
-Kikyou... yo debo protegerte- murmuró el hanyou, la mujer sólo negó.
-Primero que nada... creo que ese es un deber que yo misma te he impuesto... y, de paso, has terminado por convencerte que es tu mayor labor en esta vida... pero las causas de tu deber no son verídicas, jamás dimos en realidad la vida el uno por el otro... yo no sacrifiqué mi vida por ti, ni tú por mí... ambos fuimos víctimas del destino al que nos conllevó la perla- explico la ex miko- en segundo lugar... creo que Kagome necesitará mucho más tu protección... creo que la mirada de Naraku está sobre ella- aclaró la mujer, emprendiendo su paso en dirección al campamento donde se hallaban los demás. Inuyasha permanecía inmóvil, sin aún digerir nada de lo que Kikyou le había hablado... sin embargo, una idea alentadora le recorría por cada rincón de su mente... Kikyou acababa de desligarle de aquella responsabilidad con ella, dejándole libre para proteger a quien en realidad amaba. "Y quizás... si aún hay esperanzas, aún esté en tu corazón, Kagome..."
FIN CAPITULO DIEZ
Hola, si deje mis mensajes para el final del fic... es que así quien este cansado (a) de mi solo lee el fic... o si hay alguien que ya esta cansado de mi y del fic..pues... ha de no estar leyendo nada de esto, jeje (que análisis no...creo que debo definitivamente despertarme un poco).
Ya llegue de mis vacaciones en las cuales lo he pasado de maravilla, les extrañe mucho como ya saben quienes me conocen y estoy muy feliz de poder verlos por msn o el foro. Espero que el fic no se este haciendo latero para quien le este leyendo, de ser así, me lo hacen saber.
Agradezco mucho a mi hermanita pequeña que estuvo en Bariloche y que llego como un día antes que yo me fuera, mi buena Yashi la cual aguantándome me revisa mis faltas ( que son muchas) en mi fic y además de ayudarme y agregar cosas me apoya, muchas gracias Yashi, también a mi okaa querida, kalita la cual es una gran persona y me anima para escribir... de paso recomiendo su fic OLOR A TI.........a y también de Yashi AUN AHORA. Un Beso también a Kim, y a Belén que esta de vacaciones n.n.
Ahora si me voy a lo que más me gusta, por que es mi motivación, además de darme ánimos y hacerme sentir que quizás mis intentos de fics no son tan malos, n.n.
Hathor3:- Gracias por opinar que mi fic esta bueno, espero no decepcionar, la verdad es que en este fic Kikyou tendrá un cambio fuerte... es lo que a mi me parecería mejor, pero... eso, espero que este capitulo sea de tu agrado nuevamente gracias por tu opinión, para mi vale muchísimo.
Tu amiga Sayis
Kala:- Mi okaa linda!, ahora yo estoy como tomate maduro, es que me da mucha alegría saber que te gusta mi fic y que además crees que he avanzado, eso me deja una sensación gratificante, aunque igual creo que nunca voy a llegar a niveles como los tuyos, los de Yashi y de muchos de los integrantes de la familia del foro... pero me contento con saber que mis fics están algo "pasables", por que la verdad el escribir me ha servido para relajarme y conocer personas bellísimas n.n......y ya sabes que me tendrás por tu casa O.O.....jeje.
Tu hija SaYis
Leidy :- pues si en eso coincidimos, espero que este capitulo te guste. Un beso
Sayo
Kim:- Hola pequeñita! Sabes algo, me mirarás extra raro pero... primero que anda, soy tomate viviente, vengo saliendo de mi estado de tomate con Kalita para encontrarme contigo..gracias!!!!!!!! T.T, sobre todo por decirme que expreso sentimientos... lo segundo es que...Kikyou no hará nada malo, díganme loca, pero creo que en este fic lo que busco es "reformarla", darle conciencia... así que espero te guste, jeje
Un Beso
Sayo
Kiraris:- Gracias por tu review, largo ero mejor, me encanta leer, jaja, que bueno que no salió de contexto la personalidad de Sesshomaru... por que en el otro fic..... ya nada, jeje U.U..... en cuanto a Kikyou, ella si tendrá cambios de personalidad, además..tus fics están buenos así como les escribes, si al final, cada fic es distinto, por que tiene el toque de su autor n.n ¿no?... jeje, me despido por ahora un beso y espero hoy leer todos tus fics, es que con las vacaciones quede súper atrasada U.U.
Un beso Sayis
Nandi:- n//n, muchas gracias nandi, que bueno que el fic te agrade y gracias por tus palabras.
Tsuki:-Muchas gracias por apoyo y comentarios, la verdad es que a poco la trama ya se va terminando y armando, por que creo el fic termina en capitulo trece..o catorce, pero yo creo que trece n.n. Un beso y espero este capitulo te guste.
Darki:- DARKI!!!!!!!!!! Ieeeeeeeee!!!! No me digas que...... uyyy ya, acabo de notarlo... pues llegue prácticamente a las 11:00 U.U... vaya que mala suerte, pero que felicidad ver un review tuyo, me haces muy feliz aunque eso de que.....lo que pusiste, jamás..... tu escribes precioso y yo nunca podría escribir como tu... lo mismo que digo de Kala y de muchas personas del foro que son talentos innatos..pero agradezco tus palabras, además que de que denuevo me sonroje, lo hice, jiji, te he extrañado demasiado, pero ya ves...... no te voy a responde el mail por aquí.... pero te digo que ese que dices enviarme antes de ayer... no me llego... u.U, son fallas de Hotmail....ojala te conectes denuevo (es que ahora que note tenía review tuyo abrí Hotmail y estoy leyendo tu correo jeje :P)...... que suerte de la Chizuru y Kala, me también querer verte T.T o leerte que sea .....me viste..ya mejor te mando un mail, jeje
Te quiere Sayis
Gracias a la pequeña paulina por su mail y review, te agradezco mucho el interés en mi fic, me hace sentir muy feliz n.n, y también a todos quienes me aguantan ya sea por msn o por el foro o.....hasta en mi casa XP.
Se despide por ahora
"Sayo"
Si pueden me dejan su opinión si?... se los agradecería mucho
Hasta pronto ( (espero O.O)