Notas de la autora: ¡Hola a tod@s! :D Después de un tiempo de no haber escrito nada nuevo, aquí regreso con otra historia bastante loca. Soy fan desde hace tiempo de Janis Joplin y la música de los 60´s, y un día que escuchaba la canción de Summertime se me ocurrió este fanfic. No va a ser muy largo, pero espero que les resulte entretenido y les guste.

Todos los personajes son de J. K. Rowling, yo solo los tomo para enredarlos un poco. El genero de la historia es yaoi-slash (relación chico-chico) y la pareja es Harry/Draco, así que ya están advertidos. Si no te gusta este tipo de cuentos, puedes checar los excelentes fanfics en la clasificación G de esta misma página. Aquí hay para todos los gustos.

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Mil gracias ;)

*Lanthir*

Sobre Janis Joplin y el amor inesperado

Capitulo 5: Break another little bit of my heart

Harry corrió y corrió, sin rumbo fijo, sin un plan en la mente, sin saber que haría o que pasaría, no le importaba; lo único que repetía sin cesar, como si de un mantra se tratara, era que tenía que encontrar a Draco, tenía que hallarlo a como de lugar. El cosquilleo en su cuerpo seguía atormentándolo, aumentando por momentos cuando evocaba la imagen del rubio y sus ojos de acero.

Lo buscó por todos los pasillos de ese piso; después subió a la entrada del castillo y vio a su alrededor. Solo estaban Dean y Seamus, quienes se disponían a salir en ese momento.

-¡¿Han visto a Malfoy?!- les preguntó Harry, sudoroso e inclinándose un poco, tratando de recuperar el aliento.

-No, llevamos aquí media hora esperando a que Peeves dejara de atrancar la puerta y no lo hemos visto. ¿Qué pasa?- dijo Seamus. Harry no contestó y regresó corriendo a las mazmorras; si no había salido, aún debía de seguir allí. A lo lejos, escuchó el grito de apoyo de Dean: "¡Dale duro, Harry!"

-Y vaya que lo haré...- murmuró el chico enrojeciendo para si mismo. Dobló una esquina, y empezó a buscar de nuevo por los diversos salones, sin percatarse de que una sombra lo observaba tranquilamente desde un oscuro rincón, justo detrás de una enorme y herrumbrada armadura.

Si. Lo tenía justo donde quería. Draco vio a Harry regresar y un rato después salir de la mazmorra de Snape y dar una patada en el suelo, frustrado, en medio de la luz mortecina de las antorchas. Se pasó la mano por el cabello, dejando ver por un segundo su cicatriz, y suspirando se recargó en la pared, para después resbalar hasta quedar sentado en el suelo. Parecía muy decepcionado; apoyó la barbilla en las rodillas y de repente empezó a cantar en voz apenas audible "Piece of my Heart", otra de las canciones de Janis.

Maldición. Ahí estaba de nuevo; Draco sintió esa sensación de simpatía hacia el chico moreno, seguida de una punzada de remordimiento por no haber salido al encuentro de Harry y dejarlo que anduviera corriendo como loco por todas las mazmorras. Pero el orgullo y el plan trazado con anterioridad se impusieron, y respirando profundamente salió de su escondite, encaminándose hacia el Gryffindor sin hacer ruido. Era hora de poner en marcha su plan, de una vez por todas.

-Te gusta el sonido de tu propia voz, ¿Eh, Potter?- dijo Draco burlonamente, caminando junto a Harry como si nada. El moreno dio un respingo y se puso de pie, mientras Draco pasaba de largo rumbo a las escaleras.

-¡Espera!- exclamó Harry, tomando sorpresivamente del brazo a Malfoy; antes de que pudiera siquiera pensar, Harry lo acorraló entre la pared y su cuerpo, y le plantó un beso que hizo que la piel de Draco se estremeciera de placer.

Las manos de Harry se deslizaron hacia la espalda del rubio, estrechándolo contra si, hasta que se separó con cara de sorpresa por lo que acababa de hacer. Los ojos grises de Draco brillaron de deseo, pero en seguida se velaron y vio a Harry con reproche.

-Vaya, ¿así que ya te decidiste, o tengo que esperar una golpiza por acosarte?-

Harry enrojeció y bajó la vista, apenado.

-No, es que... es solo que yo... pues estoy confundido, ¿OK?-

Draco sonrió levemente. Su plan iba mejor de lo que esperaba. Casi sentía pena por el bueno de Potter.

-Sabes Harry- dijo con su mejor voz comprensiva (si, esa que solo usaba cuando la victima estaba a un paso de caer en sus garras) mientras le acariciaba la mejilla (Uh, que suave) –se que es difícil, pero si lo sientes es correcto. No te guardo rencor... solo estoy esperando a que me des una oportunidad-

Harry parpadeó, como si pensara que era demasiado bueno para ser verdad, algo dudoso de repente, pero Draco reaccionó y lo envolvió con sus brazos, pegando su esbelto cuerpo al del Gryffindor.

-Confía en mi...- susurró, posando sus labios sobre la apetitosa boquita del otro muchacho. Harry sintió sus piernas aflojarse y se vio correspondiendo al delicado pero candente beso. Sintió las manos de Draco entre su cabello, y le pareció que todos los vellos de su cuerpo se erizaban con gozo. Se dio cuenta de que su miembro comenzaba a despertar peligrosamente rápido.

-Espera... aquí no- dijo Draco de repente. Acto seguido, se separó de Harry y salió corriendo rumbo a las escaleras. El chico moreno se quedó pasmado, pero cuando Draco giró y le dedicó una esplendorosa y pícara sonrisa antes de seguir con su carrera, Harry se decidió y corrió tras él.

Subieron las escaleras y salieron al vestíbulo; Draco dejó de correr y caminó normalmente, con su elegancia característica hacia el aula que Firenze usaba para dar sus clases de Adivinación. Harry lo siguió, caminando algo separado de él y lanzando nerviosas miradas alrededor; afortunadamente no había nadie en ese momento. Todo estaba tranquilo y silencioso, y solo se veían a un grupo de estudiantes que tomaban un refrigerio en el Gran Comedor, junto al aula de adivinación precisamente.

Draco le lanzó un Alohomora a la puerta y escudriño el interior; después le hizo señas a Harry, y el Gryffindor entró disimuladamente. La puerta se cerró con un golpe seco.

El rubio no perdió ni un segundo y atrapó a Harry entre sus brazos, besándolo apasionadamente.

-¿No es... ahhh... peligroso que... que estemos aquí?- musitó Harry mientras el otro atacaba su cuello con labios expertos.

-No, mi precioso amigo... ¿acaso no es el lugar mas romántico del castillo?- susurró en el oído del Gryffindor. El chico asintió; el bosque nocturno que parecía ser real y la luz de la luna y las estrellas sobre su cabeza eran en verdad románticas. Pero Harry no tuvo tiempo de pensar; la delgada y ansiosa mano de Malfoy le bajó la cremallera y se introdujo dentro de su ropa interior, buscando su miembro.

Harry hizo una exclamación de sorpresa cuando los dedos de Draco se cerraron fuertemente sobre su dureza, masajeándola de arriba abajo.

-Ahhh... Oh Draco, Draco...- murmuró, besando los delgados y deliciosos labios del rubio, hundiendo sus dedos en el sedoso cabello platinado. Parecía que estaban luchando; una batalla de manos y besos, el uno contra el otro, chocando contra los árboles, hasta que tropezaron contra la pared misma, que presentaba una cubierta de musgo y enredaderas.

Harry sintió la verde caricia del musgo contra su espalda; si siquiera supo en que momento había perdido la túnica, el suéter y la camisa. Estaba de pie, apoyado contra la pared con los pantalones abajo, y las piernas apenas le sostenían mientras Draco lamía su pene y lo engullía con goloso placer. Cerró los ojos con fuerza, deseando que esa sensación nunca acabara, nunca. Sintió que Draco se separó un momento de él, pero una habilidosa mano tomó su lugar y no pudo dejar de gemir cada vez mas alto. El rubio se puso de pie, y lo besó con sus labios trémulos, para después abrazarlo con fuerza y murmurar algo por encima de su hombro. Harry se apretó contra él, sintiendo su corazón exultante de gozo y felicidad. Si... era lo que siempre había deseado, y por fin lo tenía, por fin...

De repente, el Slytherin se separó bruscamente de él y se empezó a reír a carcajadas. Harry abrió los ojos y vio los fríos iris de Draco mirándolo burlonamente, su rostro oscureciéndose en una mueca de desprecio. El muchacho moreno no comprendía lo que estaba pasando, y no se dio cuenta de que un rumor empezaba a escucharse, aumentando de volumen rápidamente, hasta que finalmente le llamó la atención. Eran voces y gritos y risas que provenían del Gran Comedor, amortiguadas por la pared en la que estaba apoyado. Parpadeó varias veces sin saber que ocurría, y escuchó que Draco murmuraba Auditivus mientras apuntaba disimuladamente a la pared. De inmediato, las voces se escucharon como si no hubiera ningún muro entre el aula de Adivinación y el Gran Comedor.

Harry se giró rápidamente y vio ante sus azorados ojos el muro, que ahora presentaba los inequívocos efectos del Encantamiento Desilucionador; la pared había adquirido los colores y texturas del Gran Comedor, volviéndose prácticamente transparente. Todos los alumnos que había en ese momento se encontraban levantándose de sus mesas y apretujándose frente a ellos, viéndolo a él desnudo frente a Draco, mientras este comenzaba a hacer grandes aspavientos. Rechazándolo.

-En tus sueños, Potter. Preferiría besar a Peeves que a ti, y por mucho que me ruegues y te presentes así frente a mi, nunca, pero nunca lograrás nada conmigo. ¿En que demonios estabas pensando? Por favor...-

Harry sintió que todo le daba vueltas. Trató de subirse los pantalones apresuradamente, sintiendo las miradas y escuchando los silbidos y risas de los estudiantes. De reojo vio que algunos se revolcaban de la risa, otros tenían cara de estar asqueados hasta extremos insospechados, y la gran mayoría tenían la boca abierta, pasmados ante semejante escena. Allí estaba el Niño que Vivió, el héroe que había acabado con Voldemort... rogándole a Draco Malfoy, su Némesis, por algo de "acción". Era simplemente inaudito.

Harry estaba a punto de desmayarse; con torpeza se colocó las pocas ropas que pudo hallar y salió corriendo del aula al borde de las lágrimas, con el corazón desbocado y la desilusión, la vergüenza y el odio corriendo conjuntas por sus venas, empujando a Malfoy en el camino, sin darse cuenta de que el fino rostro de este se tensaba en una mueca de repentino remordimiento...

¿Qué he hecho?

¡Hola a tod@s! :D ¿Qué tal? Lamento muchísimo la tardanza de este capitulo, pero he estado sobrecargada en el trabajo (estúpida remodelación) y no había tenido el tiempo de transcribir nada :P ¡Sorry! Se que esta cortito, pero no me digan que no tiene "sustancia", je, je. ¡Pobre Harry! Ya veremos que pasa con este par, solo faltan un par de caps para que esta historia concluya. De antemano mil gracias por leerla ^-^

Ahora la contestación a sus amables reviews:

-Amy90: OK, para que no me digas malvada, aquí esta en nuevo cap, je, je :) Aunque seguramente con lo que pasó me seguirás llamando malvada (si no es que algo peor! Ja, ja, ja). Gracias por el review! :D

-Paola: ¿Ya te bajaste las canciones de Janis? ¿Qué te parecieron? Espero que te hayan gustado, es un tipo de música muy diferente a lo que se acostumbra ahora (aunque su influencia sigue hasta la fecha :) Sobre la chica a la que Draco amo, en el siguiente cap se va a saber un poco de ella, no demasiado, pero si lo suficiente como para que el rubio recapacite sobre la mala jugada que le hizo a Harry en esta ocasión. Niño malo, muy malo! Je, je. Gracias por tus comentarios, que bueno que si pasó bien tu review al final de cuentas :)

-Maggie: Gracias por tu review, ahh!! Lo niños malos, difíciles de soportar, pero muy interesantes al mismo tiempo, je, je ;)

-Finn: Hey, de algo sirvió la mala leche que Severus siente por los Gryffindor, je, je :) Aunque al final de cuentas no le hizo un favor al pobre Harry :P Besos, nos vemos en el próximo cap.

-lox-melyanna-xol: OK, seguramente me estas maldiciendo por que otra vez les corté la inspiración, y ahora de forma bastante desagradable :P ¡Sorry! Pero no me pude resistir a ponerlo una vez que la idea me llegó a la cabeza. Draco juró que se iba a vengar, y considerando que el niño es un hijo de perra (pero recuerden que es el hijo de perra mas sexy, eso si ^-^) su venganza no iba a ser cualquier cosa, no... es un Malfoy, por todos los cielos. No se podría esperar menos de él (aunque a la mera hora se arrepienta, je, je). Tienes razón, yo también me hubiera enojado si Draco me hubiera hecho cositas sin despertarme, ¡así que chiste! Despierta que me haga lo que quiera, je, je ;) Muchas gracias por tu review, me reí mucho :) Nos vemos en el próximo cap.

-Gabriela: ¡Hola chica! Ya por aquí por fin actualizo :) Dejame ver si guardé la foto de TF con el pelo largo (es un fotomontaje, pero se ve muy bien). En cuanto la encuentre te la mando, ¡wow! Este niño esta para comérselo, en serio que si... aunque sea mas chico que yo, naaaa!!! No importa, yo le enseño, ja, ja, ja ;)

-Ayesha: ¡Hola amiga! :D Que gusto verte por estos lares, muchas gracias por leer este nuevo fanfic! :) Pues este par ya tuvieron su momento privado, pero de ahí a que haya acabado bien, bueno... ya lo leíste. El rubio no puede dejar de ser malo de la noche a la mañana, y se cobró muy caro el rechazo de Harry :P En fin, en el otro capitulo ya verán que sucede, por que aquí la situación quedó muy tensa... Mil gracias por tus reviews, yo ya me fui a slashfiction (siguiéndote, tengo que admitirlo, ja, ja, ja) y me estoy poniendo al corriente poco a poco con tus fics (sigo sin internet; la mas grande desesperación que he tenido últimamente). Nos vemos en el próximo capitulo!!

OK, gracias a toda por leer esto y recuerden que si les gusta o tienen cualquier duda o comentario, solo pulsen el botón morado de abajo y mándenme un review. También pueden hacerlo a lanthir_l@hotmail.com Nos vemos pronto, besos y buena suerte a todas!!

*Lanthir*

lanthir_l@hotmail.com

PD. Un poco tarde, pero les envió mi mas sentido pésame a las personas que sufrieron en España hace unos días. ¡Ya no mas violencia!