CAPITULO 14: CINCO AÑOS MÁS...

Shaka sonrió al ver la escena de Milo y Penélope. Estaba feliz de que todo haya salido bien con ellos. Suspiró y volvió a su casa. Encontró a su esposa haciendo las maletas, y a Raji casi brincando de alegría.

-¡Bapú!- dijo el pequeño- ¡estoy tan feliz!-

-Me alegra de que así sea- dijo Shaka.

Shaka preparó sus cosas también, para volver a India. Arissa, la esposa de Shaka, miró a su esposo, interrogante. Sabía que algo le molestaba.

-Shaka, ¿qué sucede?-

-No lo sé, Arissa- dijo Shaka- al principio, no quería venir aquí, pero ahora...-

-No quieres volver- dijo Arissa. Shaka asintió.

-Pero no puedo obligara Raji a quedarse- dijo Shaka- él no quería venir aquí en primer lugar...-

Arissa se encogió de hombros.

-Yo me quedaré contigo a donde tú decidas ir- le dijo en voz baja, antes de retirarse a su habitación. Shaka la miró.

-¿Bapú?- Raji se acercó- ¿qué sucede?-

Shaka se volvió, sorprendido. No sabía que Raji estaba ahí.

-¿Qué sucede, Bapú?- volvió a preguntar Raji- ¿no quieres volver a casa?-

-No lo sé, Raji- dijo Shaka- como te dije, Grecia fue mi hogar por mucho tiempo, y es el lugar donde viven mis amigos. Pero por otro lado- continuó- Inda es donde he vivido desde hace quince años, y ese es tu hogar. Así como Mu se quedó por su hija, yo estoy dispuesto a volver a India contigo...-

-No, Bapú- dijo Raji- yo estoy dispuesto a quedarme contigo aquí en Grecia...-

-¿Qué dices?- dijo Shaka- ¿estás seguro?-

-Si Mataji quiere- agregó Raji. Shaka sonrió.

-Gracias...-

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-Helena se quedará también a entrenar, ¿cierto?- preguntó Shura. Milo solo cruzó los brazos, pero Penélope le respondió.

-Sí- dijo- pero Umi no quiso entrenarla, porque es la hija de su maestro. Parece que Arika la entrenará junto con su otro alumno-

-Y más le vale a ese niño Takato que...- dijo Milo, pero Penélope lo interrumpió con una mirada.

-Cálmate, Milo- dijo Penélope- no le pasará nada...-

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CINCO AÑOS DESPUÉS...

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-¡A trabajar!- dijo Umi, haciendo sonar el silbato- cincuenta vueltas al Santuario...-

Todos sus alumnos reclamaron.

-¡No es justo!- dijo Dafne- ya tenemos casi dieciocho años y seguimos entrenando como si fuéramos un equipo de fútbol...-

-Eso sería genial- dijo Iris- un equipo de fútbol...-

-Yo opino igual- dijo Jasón- ¿porqué no organizamos un juego después del entrenamiento?-

-Yo entro- dijo Iori, ya de trece años.

-Yo también- agregó Iris.

-¡Están locos!- exclamó Dafne- ¿fútbol? Que horror...-

-Amargada- murmuró Iori.

-Por desgracia, no ha cambiado nada...- dijo Iris.

Mientras, Takato y Helena entrenaban cerca, bajo la tutela de Arika. Rigel entrenaba a su hermano Héctor y a Karina, la hija de Kanon, también cerca de ahí.

Después de cinco horas de duro entrenamiento, los aprendices se fueron, y las dos chicas caballeros dorados se quedaron un rato en los jardines del Santuario, acompañadas por Shun y Rigel.

-Vaya, yo creía que nunca lo lograrían...- dijo Umi- y míralos: ya tres años...-

Arika se sonrojó.

-Ya no digas nada...- dijo- todo salió bien...-

-Claro que sí- dijo Umi con una sonrisa burlona.

-¡Mamá! ¡Papá!- exclamó un niño de dos años, y corrió hacia Arika y Rigel.

-Tan bien así...- agregó Umi.

Una sombra los cubrió y los sorprendió por un momento, pero se dieron cuenta de que se trataba de Silver.

-Hola, Silver- dijo Arika, contenta de que alguien pueda distraer a Umi.

-Hola a todos...- dijo Silver- mira que chibi tan lindo...-

-Mala idea- se dijo Arika. Rigel sonrió y abrazó a su esposa. Umi se echó a reír.

-Silver, ¿te quedas a cenar?- preguntó Umi.

-Solo vine a saludarlos- dijo Silver- aunque me quedaría con gusto...- agregó sonriendo. Umi frunció el entrecejo.

-Ya te lo he dicho- dijo abrazando a Shun- él es mío...-

-Sí, sí, calma- dijo Silver- ni que fuera a hacerle que...-

-Bueno, mantente alejada de mi Shun si no quieres que todos te den una paliza por ser espectro de Hades...-

-Con estas amenazas, mejor me voy- dijo Silver sarcásticamente- los veré luego... por cierto- agregó- mi señor les manda saludos...- y se alejó volando.

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-Me alegro que nos hayamos quedado, Mu-

-Yo también- respondió Mu, sonriendo a su esposa.

Ambos se asomaron al jardín. Myra, de diecinueve años, estaba con Kiki en el porche de la casa. El entrenamiento de Myra ya había terminado, y la chica podía teletransportarse y realizar los mismos ataques que Mu y Kiki.

-Todo te lo debo a ti- dijo Myra, con una sonrisa.

-No fue nada- dijo Kiki- me alegra que por fin lo lograras... Escucha- agregó- tengo algo muy importante que decirte...-

-¿Y eso es...?- preguntó Myra.

-Pues verás...- dijo Kiki algo inseguro- yo... quisiera...pues... preguntarte si...-

Myra lo miraba atentamente, y esto hizo que Kiki se pusiera mucho más nervioso. Myra sonrió y le dio un beso en la mejilla.

-¿Quierestucasartecmigo?- dijo Kiki, trabado y muy rápido.

-¿Perdón?-

-¿Quieres casarte conmigo?- dijo Kiki, quitándose la traba por completo. Myra se sonrojó visiblemente.

-¿Qué dices?-

-Pues...- dijo Kiki- sé que eres mucho más joven que yo, pero... yo me enamoré de ti desde que te vi por primera vez-

Myra sonrió.

-Yo también...-

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-Helena, ¿quisieras salir a cenar?- preguntó Jasón.

-Claro- dijo Helena, sonriendo.

Iris, Iori y Dafne estaban escuchando esta conversación. Héctor (el hermano menor de Rigel) y Karina (la hija de Kanon) también estaban con ellos.

-Ay, no- dijo Iris golpeándose la cabeza- ¿qué le picó a mi primo?-

-El amor...- suspiró Dafne.

-¡Que horror!- exclamó Iris- ¡y de esa... esa chica!-

-¿Estás celosa, Iris?- preguntó Iori.

-¿Celosa? ¿Yo? ¡Claro que no!- exclamó Iris. Iori y Dafne le lanzaron una mirada incrédula.

-¿Entonces porqué te pones así?- preguntó Karina.

-Porque no permito que una niña como ella se acerque a mi primo-

-Vamos, Iris- dijo Dafne- algún día tú también te vas a enamorar...-

-¿Yo? Ni soñarlo- dijo Iris- el día que me enamore, yo...-

Pero un chico de la edad de Iris y Karina llegó con ellos y la interrumpió. Era alto, de cabellos y ojos azules.

-Hola, Karina...- sonrió el chico.

-Tú...tú... ¿qué demonios haces aquí?- dijo Karina, asustada.

-Karina, ¿lo conoces?- preguntó Héctor.

-Claro que me conoce- dijo el recién llegado.

-Chicos...- dijo Karina- les presento a mi primo Alesio. Ha estado todos estos años en Italia, completando su entrenamiento...-

-¿Primo?- preguntó Iris.

-Sí- dijo Karina- es hijo de mi tío Saga...-

-Un gusto en conocerlos, chicos...- dijo Alesio- ¿y esta linda señorita quién es?-

-Hola...- dijo Iris, nerviosa- me llamo Iris...-

-Iris- dijo Alesio- ¿quieres salir conmigo?-

-Claro- dijo Iris, sonriendo, y se fue con Alesio.

-Mira quien habla...- dijo Dafne- 'el día que me enamore...'-

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-Mira eso, Penélope- dijo Milo- nuestra hija saliendo con ese tipo...-

-Es buen chico, Milo- dijo Penélope- Aioria era todo un caballero...-

-Acaso insinúas que yo no- dijo Milo frunciendo el entrecejo.

-Para nada- dijo Penélope- solo te hago notar que no creo que el hijo de Aioria pueda... aprovecharse de nuestra hija...-

-Pues más le vale...- dijo Milo.

-No seas así, Milo- dijo Camus, quien acababa de llegar con su esposa Sarina y su hijo Jan- creo que deberías temerte más a ti mismo que a Jasón...-

-Es cierto- dijo Sarina.

-¿Acaso parece que estoy celoso?- dijo Milo.

-No parece- dijo Penélope- lo estás...-

-Te estás portando exactamente como cuando Umi conoció a Shun...- dijo Camus.

FLASHBACK

Durante la batalla de las Doce Casas, Umi estaba en la casa de Escorpión, entrenando junto a su maestro Milo.

-Ya basta, Milo- dijo la chica de catorce años- ya he hecho la 'aguja escarlata al menos doscientas veces...-

-No son suficientes- dijo Milo- y además, llevo ya mucho tiempo enseñándote a hablarme con más respeto-

-Lo que digas, Milo-

Milo frunció el entrecejo, pero sintió el cosmo de dos caballeros de bronce acercándose. Ella también los sintió.

-Milo, ¿qué...?-

-Es todo por hoy- dijo Milo- ahora vete, que tengo algo que hacer...-

Umi se retiró a su habitación. Sin embargo, quería presenciar el poder de su maestro. Se escondió detrás de un pilar y observó atentamente como Seiya y Shiryu eran fácilmente vencidos por Milo. De pronto, alguien los interrumpió. Era Hyoga, llevando a Shun en brazos.

Umi de pronto sintió interés por el caballero que estaba inconsciente. Escuchó atentamente la historia de Hyoga, y lo siguió con la mirada cuando Seiya y Shiryu se lo llevaron.

Cuando Milo terminó su pelea con Hyoga, Umi salió de atrás de la columna y se acercó a su maestro.

-¿Quiénes eran ellos?-

-Los que van a salvar el mundo...- dijo Milo.

TERMINA FLASHBACK

-¿Y eso qué?- dijo Milo- no me porté celoso ni nada...-

-En ese momento no, pero después sí- dijo Camus- como cuando los atrapaste en...-

-De acuerdo, me rindo- interrumpió Milo- ya no seré así con Helena, ¿de acuerdo?-

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-Estúpidos...- murmuró Dafne enfadada.

-¿Qué te sucede?- le preguntó Afrodita a su hija.

-Nada- dijo Dafne- solo que todos tienen con quien salir esta noche... menos yo...-

-¿Menos tú?- dijo Afrodita.

-Sí...- dijo Dafne- pero por lo menos tú y mamá van a estar en casa...-

-Em...bueno- dijo Afrodita- tu madre y yo hicimos...planes para esta noche...-

-¿Qué?- gritó Dafne, furiosa. Sin decir más, salió de su casa.

-¿Qué pasó, Afrodita?- preguntó su esposa.

-Nada- dijo éste- Dafne se fue...-

Dafne salió de su casa y fue al centro, donde los aprendices y algunos caballeros dorados solían salir a cenar. Se torturó a sí misma viendo a Helena con Jasón, a Iris con Alesio (el hijo mayor de Saga), a Myra y a Kiki y a otros más. Se sentó en una silla y pidió una malteada. Tomó la pajilla y revolvió con ella la mateada de mal humor. Pero vio a alguien junto a ella: a Altaír, el hijo de Saori y Julián.

-¿Qué hay?- le preguntó Altaír.

-Nada nuevo- dijo Dafne.

-¿Te dejaron sola?- preguntó Altaír. Dafne asintió- a mí también...-

-¿Quién lo diría?- dijo Jasón a Helena- los dos niños consentidos...-

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Mientras tanto, los doce antiguos caballeros dorados se reunieron.

-Hoy se cumplen veinte años de la batalla contra Hades...- dijo Kanon.

-Ahora veo que tienen razón- dijo Shura.

-Claro- dijo Milo- no es lo mismo 'los tres mosqueteros' que 'veinte años después'...-

-Y esta vez sí fueron veinte años...- dijo Máscara Mortal.

-Pero todo ha salido bien- agregó Aldebarán.

-Nuestros hijos y aprendices han crecido...- dijo Shaka con una sonrisa.

-Y se han convertido en caballeros también- dijo Saga.

-Han aprendido a desarrollar sus poderes- agregó Mu.

-Es cierto- dijo Kanon.

-Además, se han hecho amigos entre ellos- dijo Aioros.

-Y novios- agregó Aioria.

-Todo ha salido bien- dijo Afrodita.

-Estoy seguro- dijo Camus- que nuestra historia se repetirá en ellos...-

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FIN