El ganador se lo lleva todo
por Karoru Metallium
VI
In the still of the night
********************
- ¿Te parece prudente haber invitado a todo el mundo a quedarse esta noche?
- Pero bueno, y qué. ¿Qué puede pasar? Será como en los viejos tiempos, cuando viajábamos en busca del pueblo de los apaches y acampábamos... fue genial ^_^
- Ya. Te estás imaginando algo idílico y a todos contando historias de fantasmas alrededor del fuego, ¿no? Estás enfermo.
- Qué negativo eres. Sólo estoy haciendo una pruebita...
- Así perdió el ojo el pirata... si no sales fregado tú, vas a fregar a alguien... o más bien a mí, ¡aún peor!
- Venga, Manta, deja de ser el ave de mal agüero...
- Yoh, no puedes meter a todo el mundo aquí. Va a pasar algo.
- Ya verás que no, todo saldrá bien.
- ¿Porqué me parece que estoy oyendo las trompetas del Juicio Final?
*******************************
- Bien, ¿y en dónde dormiré yo? - preguntó Pilika, muy mona con su pijama azul.
- En mi habitación - intervino Anna, que había mantenido su cara de póker toda la tarde a pesar del impacto que había provocado en ella la alegre invitación de Yoh - Tamao, tú puedes compartir la otra habitación con la... señorita Suisei - el levísimo tonito irónico, casi imperceptible, no escapó a la atención de dos de los oyentes.
Tamao, a quien tampoco le caía bien la pelirroja por razones más que obvias, estuvo a punto de protestar. Pero una gélida mirada de advertencia de Anna la hizo callar y abrazar con fuerza el osito de peluche, rosado como su pijama.
- ¿Y nosotros? - preguntó Horohoro, que se veía patoso en una bata demasiado pequeña para su tamaño, que dejaba gran parte de su torso al descubierto, así como sus fuertes piernas. Motivo más que suficiente para babear por parte del personal femenino... sólo que Pilika era su hermana, Tamao tenía vergüenza de mirarle, y Anna ni lo tomaba en cuenta. Suisei era la única que demostraba su apreciación con una mirada admirativa y una sonrisita que Anna calificaba mentalmente como lúbrica.
Antes de que Yoh pudiera decir algo, la rubia se adelantó, y Len hubiera jurado que vio un brillito diabólico en sus ojos oscuros.
- Manta puede quedarse con Yoh, y aquí tengo futones para ti, Len y Ryu. Dormirán muy cómodamente en la salita.
Len la miró con una sonrisita de admiración. Anna se libraba de compartir el cuarto con la pelirroja, se aseguraba de que Manta (que tenía el sueño MUY ligero) se quedara vigilando a Yoh e impidiera cualquier intento de invasión a la habitación, y de que Len y Horohoro estuvieran durmiendo en el mismo lugar. Ryu no contaba, porque cuando caía lo hacía como piedra.
Yoh, que observaba a ambos, no se perdió la sonrisa de Len ni el destello en los ojos de Anna, y frunció el ceño, algo que hacía muy a menudo últimamente (desde la conversación con Manta que le sembró ciertas ideas en la cabeza).
La velada transcurrió amigablemente, con Anna tratando de cumplir con sus deberes como anfitriona dejando, de paso, muy claro que ella lo era y NADIE más, sin segregar a la muy odiada y temida Suisei. Para su sorpresa, ésta resultó ser una buena oyente y una conversadora razonablemente inteligente, por lo que la pasaron agradablemente en general; si exceptuamos los ataques de bilis que le daban a la rubia cada vez que la pelirroja miraba hacia en grupo de los chicos y le sonreía a Yoh, con quien como por casualidad siempre cruzaba miradas: la de él, la misma simpática e indolente de siempre; la de ella, un poquito demasiado caldeada para el ambiente.
Esta zorra se está pasando...
Los hombres, por su parte, jugaron mano tras mano de cartas, se pusieron a pelear dos o tres veces y finalmente, cansados de discutir, se sumaron a las chicas y la conversación se hizo general. Un par de veces se turbó la paz (1: Pilika sugirió un drinking game, a lo que Anna se opuso con todas sus fuerzas, y 2: Horohoro trato de hacer que el póker fuera de prendas de vestir, a lo que Len se opuso con todas sus fuerzas xD).
- Pero, ¿qué demonios tienen estos hermanitos en el cuerpo? - protestó Len ante tanta idea potencialmente destructiva.
- ¡¡Oh, pero sería divertido jugar, señorito!! - terció Ryu, poniendo ojitos de corazón, a juego con su decadente pijama de seda roja - Sería más divertido si el adorable Lyserg estuviera aquí, claro, pero como no está... - se lamentó.
Gota general.
- ¿... y qué les parece si jugamos...? - empezó la vocecita tímida de Tamao, siendo interrumpida por la cortante de Anna.
- Verdad o Reto otra vez NO, Tamao. Lo prohíbo.
- Jejejejeje, pero Annita... - empezó Yoh, con su risita característica, pero ella le dirigió una mirada fulminante.
- Me niego. No permitiré que hagan el ridículo y me lo hagan hacer a mí como aquella vez.
- Sólo fueron unas copitas y unas bromitas inocentes, mujer - intervino Horohoro, riendo, y la rubia se puso cual tomate.
- ¿"Bromitas inocentes"? ¿Saben lo que sufrí? ¡Nunca había tomado alcohol! ¡Me sentí muy mal y tuve una resaca terrible! - el aura de Anna se puso roja y sus ojos oscuros lanzaron chispas de indignación.
- Vale, basta ya. No van a torturarla de nuevo, ¿o sí? - medió Len. Todos lo miraron sorprendidos, con excepción de Yoh y Manta, que fruncieron el ceño.
La conversación tomó otros derroteros, y pronto llegó la hora de acostarse a dormir. Todas y todos se dieron las buenas noches, pero era bien seguro que ninguno esperaba que fuese una noche tranquila...
**************************
Media hora después...
- Aaaannaaa...
- Mmmph... qué quieres, Pilika...
- No puedo dormiiiiiir...
- Cuenta ovejitas...
- No me saaaaleeeee - se quejó la chica en tono plañidero.
- Entonces cuenta hombres guapos sin ropa...
- ¡Anna!
- Lástima que no hay sedantes en la casa, lo siento...
- Habla conmigoooo... a la mejor conversando me llega el sueño. ¿Siiiiii?
Anna suspiró en la penumbra, armándose de paciencia. Pilika nunca crecería.
- Vale, de todos modos yo tampoco podía conciliar el sueño. ¿De qué quieres hablar?
- ¿Cómo fue tu primer beso?
Los ojos de la rubia se abrieron como platos en la oscuridad. Qué temas tiene esta niña y qué oportuna es, válgame el cielo.
- ¿Para qué preguntas? Tú lo viste. Yo no tengo un recuerdo claro.
- ¿Fue ÉSE? - Pilika guardó un silencio avergonzado por unos instantes. El asunto tenía una data mínima de dos años atrás, ella había sido la de la idea de beber mientras jugaban, y Anna, que no había probado alcohol antes, había terminado casi borracha; así que para el momento en el que Horohoro le impuso como reto besar a su prometido frente a todo el personal ("no vaya a ser que se mueran sin haberse dado uno siquiera", habían sido sus palabras textuales), estaba casi del otro lado.
- Sí. Y lo único que recuerdo es estar mareada y haber sentido vergüenza como nunca en mi vida - no es cierto. Me acuerdo de que sus labios eran muy suaves, y que su boca era muy caliente, y su lengua... ayyy, noooo, tiempo fuera, Anna, ¡tiempo fuera!.
- Pues se te veía bastante entusiasmada, y estuvieron bastante rato en ello...
- BASTA, Pilika.
- Ok, ok. ¿Y el segundo?
- ¿No hay otra cosa más importante que quieras preguntar? ¿Como si amanecerás muerta mañana? Puedo decírtelo con casi total certeza...
- ¡Anna! ¡Es sólo una pregunta! Y sabes que no se lo diré a nadie.
- No, no lo sé, pero da igual, no importa. No ha habido segundo.
- ¿¡QUÉEEE!?
- Veo que vas a despertar a toda la casa para que se entere - terció Anna, sarcástica.
- Mujer, pero vamos, si están comprometidos y todo el rollo... y después de que se dieron ese beso tan apasionado...
- Estaba borracha, Pilika...
- ... es que no me lo creo, ¡si estaban metiéndose mano y todo hasta que a Horo le dio envidia y los hizo separarse! No creo que estuvieras tan del otro lado, Anna...
- ¡¡¡¡PILIKA!!!! - el murmullo furioso de la rubia bastaba para helarle la sangre a cualquiera, y la pequeña ainu no era la excepción.
- Vale, vale, me callo. Pero es asombroso, de veras.
Anna se cubrió la cabeza con las sábanas. Que Pilika le hubiera recordado ese momento justo ahora... bueno, no era como si ella no lo recordase de vez en cuando. Bah, se acordaba casi todos los días, admitió, sonrojándose en la oscuridad. Cada vez que veía sus ojos recordaba su mirada aquella noche (vale, él tampoco estaba bueno y sano que dijeran, pero en todo caso había aguantado la bebida mejor que ella), de su sabor, de su abrazo, y una corriente de calor le recorría el cuerpo.
- ¿Anna?
- ...¿sí?
- Discúlpame. No debí preguntarte eso, y lamento que no tengas un buen recuerdo de tu primer beso gracias a mis ideas - parecía genuinamente arrepentida.
- Está bien. Pero me tienes que decir cómo fue el tuyo.
- No ha sido todavía ^.^. Pero me gustaría que fuera apasionado, y muy rico, y con un chico tan guapo como... - se detuvo, y dejó escapar una risita entre avergonzada y traviesa.
- Ajá. ¿Como quién?
- ... como Len ^w^. Es más, me gustaría que me lo diera él. ¡Es que me encanta! A pesar de no ser muy alto es tan sexy, tiene un cuerpo estupendo, y esos ojos tan divinos, y ese carácter tan arisco... me da de todo cuando me mira.
- ¿...Len? ¿Te gusta Len?... ¡Jajajajajajajajaja!
- Anna - (Pilika asustada X_x) - ¿te estás riendo? Nunca te había escuchado reír...
- ¡Jajajajaja! - la rubia rió hasta las lágrimas, y fue al cabo de unos minutos que logró calmarse.
- ¿Te estás riendo de mí? - preguntó Pilika, todavía en estado de shock y algo molesta.
- No, Pilika, no me hagas caso, es que me acordé de algo mío que no puedo decirte y de pronto me dio mucha risa. Lo siento - murmuró Anna, limpiándose las lágrimas. ¡¡¡Jajajaja, ésta detrás de Len y Len detrás de su hermanito, qué gracioso!!! La vida tiene sus consuelos mezquinos... -, venga, a dormir, seguro que ahora si te da sueño.
- Buenas noches, Anna.
- Buenas noches, Pilika. - Sí, duérmete, que yo por lo visto no voy a poder. Que no me entere yo de que la Suisei esa ronda los pasillos sin ser fantasma, ¡porque no me importará ensuciarme las manos para darle su merecido!.
***********************************
En la habitación contigua, Yoh y Manta se sobresaltaron en la penumbra al oír aquel encantador sonido inédito.
- ...¿Anna?
- ...¿RIENDO?
- ... te lo dije, te dije que iban a pasar cosas raras, tengo mieeeedooooo... - se quejó el cabezón, envolviéndose en las sábanas.
***************************
Mientras tanto, en la salita...
Ryu roncaba como una locomotora en un rincón. A un lado, Horohoro comenzaba a dormirse, tratando sin éxito de envolverse del todo con la sábana (muy pequeña para su gran humanidad), mientras un hilillo de saliva se escapaba de su boca entreabierta y caía sobre el futón. A muy poca distancia (digamos unos dos metros) Len Tao estaba echado boca arriba, incapaz de dormir.
Debido a ello, no pudo evitar oír la risa de Anna (extraña a los oídos de todos) y preguntarse qué estaba pasando para que la rubia hiciera semejante despliegue de humor; pero no iba a asomarse al cuarto de las chicas para averiguarlo.
En cambio, al ver que una sombra pasaba por la puerta de la sala y seguía pasillo abajo, en dirección de los baños pero también de la habitación donde estaban Yoh y Manta, se decidió a averiguar qué pasaba. El joven chino era solidario cien por ciento con la causa de Anna, y no iba a permitir que la pelirroja (si acaso era ella) circulase libremente por la casa en mitad de la noche. Y si era otra persona, igual tenía que saberlo.
- ¡Basón! - llamó a su espíritu acompañante.
- ¿Sí, amo Len?
- Ve a ver quién es. Y si es cierta zorra que ya sabes, dale un escarmiento. Mójala, hazla tropezar, asústala... lo que se te ocurra pero hazlo.
- Pero, amo Len...
- Muévete.
Con ríos de lágrimas corriéndole por las mejillas, chibi Basón salió de la salita mascullando algo que sonaba como "porqué a mí".
- Mmmmf... ¿qué pasa? - preguntó Horohoro, incorporándose, medio dormido y babeado.
- Nada, HOTOHOTO. Cállate y duérmete.
- ¿Y si te digo que no me da la gana, SEÑORITO? - se engalló el peliazul, levantándose, de pronto completamente despierto y limpiándose con muy poca elegancia la saliva de la barbilla - ¡¡Ya me has colmado la paciencia!!
- ¿Alguien como tú conoce la sutileza del significado de esa palabra? - ironizó Len.
- ... estoy harto de que no pronuncies bien mi nombre a propósito, de que me des órdenes, de que... espera, espera... ¿¿¿¿¡¡¡ESTÁS DICIENDO QUE SOY UN IGNORANTE!!!????
- Mi punto - señaló el joven, con una sonrisita burlona. Horohoro no soportó más y lo agarró por las solapas del pijama, levantándolo del futón casi sin esfuerzo.
- ¡¡¡¡AAARGHHHH!!!! ¡¡Esto se acabó!! ¡¡Koloro!!
- ¿Llamas a tu espíritu? O sea, que no puedes manejarme tú solo...
- ¿¿¡¡Que no!!?? ¡Si eres una lombriz! ¡¡TE VOY A HACER PAPILLA, CHINITO!!
Dicho lo cual, empezó la pelea, y golpes, patadas e insultos (estos últimos provenientes del ainu; Len, siendo más pequeño y ágil, se limitaba a parar y/o esquivar los golpes sin dejar de sonreír) empezaron a sonar en la penumbra. Ryu no se despertó a pesar del escándalo, pero de inmediato una sombra apareció en la puerta de la salita y las luces se encendieron, dejando encandilados a los "combatientes".
Cuando se les pasó el deslumbramiento, descubrieron a una muy despeinada Anna que en pijamas y bata los miraba desde la puerta con una sonrisa que daba miedo.
- Conque peleando y haciendo escándalo, ¿eh? Muy bonito, muy bonito. Y esa posición... muy sugestiva. ¿Qué es esto? ¿Un cortejo a lo cavernícola?
Horohoro se percató de que había caído encima de Len en una posición muy poco digna, y de que éste sonreía... ¿satisfecho? De inmediato se apartó, y entonces cayó en cuenta del posible significado de las palabras de la rubia.
- ¿C-cortejo? ¿Q-qué quieres decir? - sus mejillas comenzaron a tomar un curioso tinte púrpura.
Anna no pudo responderle, porque en ese instante un grito desgarrador de mujer, proveniente del pasillo, retumbó en toda la casa.
- ¡¡¡AAAAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYYYYYY!!! ¡¡AUXILIOOOOOOOOOOOOO!!
Próximo capítulo: De noche, todos los gatos son pardos...
N.A.: ... ¡y ahora es que queda noche, así que acomódense porque van a batear! xDDDD. Por cierto, cualquier sugerencia será bien recibida y debidamente ponderada... si no la quieren poner en la review, mirar en mi perfil y hallarán mi e-mail ^^.
A los reviewers:
Jan-chan: Graaaaciassss!! Y no te preocupes que va a haber de lo que quieres!!!
Rally: Qué bueno que te gustó!!! Pero lo de que se le caigan las tetas no te lo prometo xDDDD.
Hikaru: como vaya viniendo lo verás xD
Filia Mettallium: Thankyouverymuch. Y si pasas por el foro del Altar verás que se está discutiendo la situación económica de Yoh y todo xDDDDDD.
Suisei: Jejejeje, ya sabía yo que te ibas a sorprender... es que no podía ponerle a la mala un nombre tan plain como Sakura xDDDDDDDD.
Lourdes Ariki: No te preocupes que todo va como seda, no tendrás que liquidarme. Ah, y ya va saliendo lo que querías ^___^
Iron Maiden Jeanne: Jejeje, hay cuerda para un buen rato. Y por Hao no tengas cuidado... que en esta historia no va, pero en otra que ya tengo en mente sí ^__~
A everybody (tengo que volar ya): Gracias, me han dado mucho ánimo y ya las palabras salen solas, así que la próxima semana tendrán el 7 (que ya va por 3/4 xD) y el 8!!!! Eso sí, tener paciencia porque tengo mucho trabajo ^^.
