Capítulo 4

"first you cast your spell

one kiss and I fell

now only time will tell

if it's magic, magic, magic" –A Flock of Seagulls (Magic)

Al día siguiente, los tres amigos bajaron juntos hacia el Gran Comedor. Había un ambiente muy alegre por los corredores del castillo, ya que al día siguiente habría una visita a Hogsmeade, lo que, también en gran parte los hacia estar aún más nerviosos. Al llegar a la mesa de Gryffindor, Harry quedó, por coincidencia tal vez, en medio de los dos amigos. Del lado derecho estaba Hermione, y Ron a su lado izquierdo. Muchas veces se habían sentado así, pero nunca le había importado tanto como este día, se sentía un poco raro e incómodo estando al lado de Hermione después de lo que había pasado la noche anterior; y al parecer Hermione también parecía estar nerviosa, pensando en otras cosas mientras que Ron platicaba animadamente sobre los partidos de Quidditch de esa temporada, a Dean Thomas, Seamus Finnigan que lo escuchaban detenidamente y también a Harry y a Hermione, que a decir verdad no le ponían mucha atención.

"Creo que Hufflepuff ha mejorado… ¿tú qué piensas Harry?" decía Ron mirando a su amigo, pero Harry al escuchar su nombre, y al no saber por qué le hablaba a él, soltó el tenedor, que cayó ruidosamente al suelo, y miró a Ron, quien a su vez lo veía confundido.

"¿Yo qué?" dijo Harry después de haber levantando el tenedor del suelo, y mirando a Dean y Seamus que se reían a carcajadas de la expresión de Harry.

"Nada… ¿estas bien?" dijo Ron regresando su mirada al plato que se encontraba en frente de él, Harry abrió la boca pero no parecía coordinar las palabras, y quedó de nuevo en silencio, se disponía a contestar, cuando un grupo de lechuzas entraron en el Gran Comedor, distrayendo a los alumnos. Una lechuza grande y café que llevaba el habitual diario mágico a Hermione, llegó directo a la jarra de jugo, que al parecer a alguien se le había olvidado moverla como siempre, para dejar espacio a la llegada del correo. Ron se levantó rápidamente al igual que Parvati y Lavender para que sus túnicas no se mojaran, y pudieran levantar el desastre provocado por la lechuza que permanecía en su lugar, levantando su pata para que El Profeta fuera desatado de ella.

"¡Hermione! Despierta, necesitas pagar por El Profeta… Hermione…" dijo Ron recuperando su lugar. Hermione volteó su cabeza hacia él, pero su mirada indicaba que no había escuchado lo que había dicho.

"¿Por qué no moviste la jarra? Mira lo que ocasiona…" dijo Lavender, pero no continuó al ver que ella no le prestaba atención.

"¿Qué sucede? Están muy raros, ¿hay algo que… haya pasado y que no me haya enterado?" dijo Ron mirando a sus amigos, que se levantaron sin si quiera mirar a los demás de la mesa, que continuaban viéndolos con curiosidad. Salieron del Gran Comedor, dirigiéndose a su aula de Transformaciones, y Ron aún esperaba una respuesta.

Habían llegado temprano por lo que tuvieron que esperar fuera del aula.

"¿Y bien? ¿Qué esta pasando? Están muy raros…" Ron dijo desesperadamente al ver que ninguno de los dos lo miraba y tampoco hablaban.

Harry se sonrojó y decidió voltear hacia otro lado para que Ron no lo percibiera, tal vez Hermione le contestaría

La clase de Transfiguraciones transcurrió como siempre, aunque Ron no dejaba de mirar a Harry buscando una explicación, lo cual resultaba bastante incómodo para él, así que decidió que era mejor poner atención a la clase y tratar de ignorar a Ron. Su mirada se desviaba de vez en cuando para encontrar la de Hermione quien, a ratos, también lo miraba de reojo. Harry sonreía para sí mismo cada vez que esto pasaba.

Las siguientes tres clases fueron más o menos lo mismo, pero Hermione deseaba cada vez más estar a solas con Harry y por lo que veía en su mirada, él también. Una sonrisa escapó de sus labios cuando en clase de pociones los dos quisieron tomar el frasco de polvo de centinodia y sus manos hicieron contacto durante una fracción de segundo. Era inmaduro y tonto ponerse así por una cosa tan tonta, pero no pudieron evitarlo.

Finalmente la campana que indicaba el final de las primeras cuatro clases había sonado. Harry había temido ese momento toda la mañana. Deseaba posponer la explicación lo más posible. Pero para su sorpresa y la de Hermione Ron no insistió.

"Harry lo siento, tengo algo muy importante que hacer ahora, pero no creas que voy a olvidar que ustedes dos tienen algo que explicarme."

Hermione sintió que le quitaban un peso de encima a su conciencia al observar a Ron salir de la mazmorra de Snape casi corriendo.

"¿Qué le pasa? Ha estado molestando todo el día y ahora solo se va, así nada más." Dijo Harry mientras terminaba de guardar sus cosas.

"No es la primera vez que se va sin decir nada" Explicó Hermione y Harry se sorprendió de no hablo notado él mismo "Me pregunto a dónde irá"

"Creo que podemos investigar eso después, Hermione" Harry cambió el tema mientras salían juntos de la mazmorra y caminaban lado a lado por un pasillo hacia la biblioteca. "¿Qué vamos a decirle a Ron?"

"No se Harry." Hermione se detuvo hacia un lado del pasillo para no estorbar "Ni siquiera sé qué decirme a mí misma." Suspiró y su mirada se entristeció un poco "¿Es real? Dime si lo de anoche fue real o fue sólo un intento tuyo para hacerme sentir mejor."

"Es real" Los ojos esmeralda detrás de un par de cristales sostenían una mirada de seriedad y honestidad absoluta "Es algo que había deseado hacer desde hace tiempo... Se qué estuvo mal que aprovechara un momento e debilidad... pero" Harry puso su mano suavemente en el brazo de Hermione "Es sólo que... contigo entre mis brazos... no sé... tuve que hacerlo." Harry se sonrojó, pero no apartó sus ojos de los de Hermione. Nunca había hablado tan abiertamente de sus sentimientos. "Eh... mira... si te hice sentir incómoda..."

"No, Harry. No incómoda... nunca me había sentido tan... tranquila... segura... no sé, sólo... bien. Además yo también había pensado en eso antes, y.... me alegra que hayas sido tú quien me despertara de esa pesadilla." Hermione abrazó a Harry por la cintura. Quería tenerlo cerca y sentir su cuerpo entre sus brazos. Él se inclinó y la besó. Fue un beso rápido, pero significativo (el pasillo estaba vacío pero no sabían por cuanto tiempo)

Hermione sonreía, mucho más confiada que antes de hablar con Harry "Supongo que ahora debemos decirle a Ron que hay 'algo' entre nosotros." Harry asintió

"Se va a poner como loco... No puedo esperar para ver su cara" Ambos se rieron al imaginar a Ron con los ojos bien redondos y la boca abierta como idiota.

Siguieron su camino por el pasillo y después de haber caminado algunos pasos, Harry deslizó su mano entre la de Hermione entrelazando sus dedos. Se sentía muy natural hacerlo, en contraste con el pánico que había sentido cuando pensó en tomarle la mano a Cho. Era como si sus manos estuvieran hechas para encajar como dos piezas de un rompecabezas.

De pronto escucharon ruido y voces en uno de los salones de clases y se detuvieron frente a la puerta intercambiando miradas curiosas. Hermione soltó la mano de Harry para abrir la puerta y echar un vistazo al interior.

Harry emitió un sonido de sorpresa al encontrarse con la parte trasera de una cabeza con cabellera roja (indudablemente de Ron) que parecía estar extrayendo todo el aire que cabía en el cuerpo de una chica de cabello rubio y largo que estaba recargada contra la pared. Originalmente, querían encontrar a Ron para decirle su 'secreto' pero, al parecer, el también les había ocultado algo... y por más tiempo.

Hermione volteó a ver a Harry con los bien redondos y la boca abierta como idota. Esto casi provocó que soltara una carcajada pero se tuvo que aguantar. '¿Quién es?' Hermione dibujó las palabras con sus labios sin emitir sonido. Harry se encogió de hombros. No tenía ni idea.

"Hem hem" Hermione hizo su mejor imitación de Umbridge para tratar de llamar su atención y ver con quién se estaba besuqueando su amigo. La parejita se separó de inmediato con miedo de haber sido encontrados por algún profesor.

Harry y Hermione casi se caen de la impresión. La niña con la que Ron había estado intercambiando saliva era... ¡Luna Lovegood!