segunda parte
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Mientras los cuatro adolescentes se dirigían al jardín dentro de la casa los dos adultos hablaban en el cuarto de baño. Ambos tenían que limpiarse la mugre que se habían traído como recuerdo de haber estado trabajando en el tejado.
- ¿Viste su cara? – comentaba un exultante Sirius Black – Creo que desde que lo conozco no lo había visto sonreír con tantas ganas. Cuando era un bebé no cuenta. Te dije que sería una buena idea, que valía la pena el riesgo de conjurar a las cucarachas en un barrio muggle.
- ¿Acaso he dicho yo lo contrario?. Solo te dije que era una temeridad, no se como Dumbledore al final le pareció gracioso y no quiso nuestras cabezas en un plato. – el animago sonrió de oreja a oreja con expresión triunfante - Deja de vanagloriarte tanto, tu gran idea nos ha tenido hasta las cejas de preparativos. Se que estás deseando que empecemos con este "campamento", pero yo solo puedo pensar en que me espera varias noches durmiendo en un tienda y dentro de un saco. ¿La cama es un gran invento, lo sabías?
- ¿Eso es algún tipo de insinuación Moony? – sonrío burlonamente a su amigo
- Aaaah, muérete un poco y sal de aquí que me voy a duchar – dijo aparentemente molesto, y añadió al ver abrir la boca a Sirius – y no, te esperas a ducharte después. Ahora ve a ver si tu ahijado necesita algo.
- ¿Vas a estar de este humor encantador todo el fin de semana? – lo digo por invitar también a Snape y así estáis a juego. – amenazó totalmente de farol, Sirius Black se arrancaría antes las uñas con una sonrisa.
- Sabes que en la semana de cuarto creciente siempre estoy mas intratable. Agradece que te dejo seguir adelante con esto y no me provoques o me terminaré arrepintiendo. Ah – añadió como ultima advertencia mientras su amigo salía del baño con cara de falsa resignación – y ni una tontería mas con los niños por aquí. Ahora céntrate en tu papel de padrino.
Remus Lupin no quiso escuchar respuesta alguna a su ultimátum y cerró la puerta dejando a Sirius Black fuera, protestando en el pasillo. Mientras bajaba la escalera planeaba su venganza y la manera de hacerle cambiar de opinión esa noche. Al llegar al jardín se encontró con las chicas sentadas en el césped riéndose viendo como Ron y Harry intentaban inútilmente poner las tiendas de campaña en pie.
Al no tener ninguno de los dos experiencia en el tema, mas que montar la tienda parecían ensayar algún extraño numero de malabarismo con cuerdas, varillas y la tela impermeable. Sirius tuvo que intervenir y guiarles haciendo memoria de cual era la forma correcta según su documentación. Claro que una cosa es verlo en una película y otra muy distinta llevarlo a la práctica. Con lo que, cuando media hora después, Remus bajó ya limpio y aseado los encontró aun con la tienda a medio montar.
Tras mandar a Sirius a la ducha, por el riesgo de intoxicar con su olor corporal a los muchachos, se hizo cargo de la situación. Haciendo primero lo que Hermione Granger llevaba un rato aconsejando, leer las instrucciones. Gracias a ellas y a lo que ya habían adelantado Sirius y los chicos finalmente estuvieron las tres tiendas listas. Casi justo a tiempo, pues comenzaba a atardecer y se acababan las horas de luz.
Al bajar Sirius, también limpio y aseado, secándose el largo cabello mojado torpemente con una toalla, le tocó encontrarse con Remus preparando la cena con las dos chicas revoloteando a su alrededor ayudándolo mientras los chicos los observaban tumbados en la hierba.
Por supuesto el decidió unirse al segundo grupo. Alegando como excusa que si había mas personas alrededor de la barbacoa estorbarían mas que ayudar. Hubiera dicho además que no era tarea de hombres pero se abstuvo por no correr el riesgo de que Hermione le sacara los ojos y que Moony la ayudará con uno o dos Cruciatus.
Esos fueron los primeros momentos que disfrutó de verdad de aquel campamento improvisado. Charlando con los muchachos, descansando al final de un día ajetreado rodeado de gente que apreciaba. Las chicas tenían varias trencitas en el pelo con flores engarzadas en ellas. Harry comento que así se parecían a algunas de las ilustraciones muggles que había de las hadas. Que solo le faltaban las alitas. Ron respondió con un inaudible 'aha' sin perderle ojo a la escena. A Sirius también estaba de acuerdo en que estaban muy guapas, pero en aquel momento le preocupaba mas llenar su estomago. Antes de que pudiera protestar, y empezar a meterles prisa, Hermione, Ginny y Remus se les acercaron con la comida lista.
- Comeríamos mucho mas cómodos dentro, ¿lo sabías?. Con mesa, sillas,...vamos lo que usa la gente civilizada.
Sentenció el licántropo después de repartir la comida en platos de plástico y coger sus propios cubiertos, del mismo material, de una bolsa que puso Ginny en el centro del circulo que habían formado todos en el suelo para comer.
- Metete en el papel Moony e intenta olvidarte de que ahí está la casa excepto para lo mas imprescindible.
- Si profesor Lupin. ¡Será muy divertido! – señaló Ginny Weasley mientras peleaba por comerse una salchicha sin quemarse. Remus se había resignado ya a corregirles cuando le decían profesor y pedirles que solo lo llamaran por su nombre.
- Además – añadió el hermano de la pelirroja – tenemos el resto del año para vivir de forma civilizada. Variar un poco está muy bien.
- ¿Ves? , todos los chicos están de acuerdo conmigo – sentenció Sirius triunfante pese a que ni Harry ni Hermione habían dicho nada.
El primero parecía disfrutar demasiado de pasar ese rato con ellos y prefería grabar cada segundo en su memoria antes que participar en su conversación. Por su parte Hermione estaba muy concentrada preparándose una hamburguesa con los ingredientes adecuados y en el orden correcto. Panecillo, lechuga, tomate, hamburguesa, queso, bacon,...
El cielo se fue llenando de estrellas al hacerse de noche. Remus había encendido las antorchas, repartidas por el jardín, que habían preparado esa misma mañana. La luz era débil pero muy cálida y lo suficiente para poder ver que tenían alrededor. Quitando la fachada de la parte de atrás de la casa, que estaba relativamente cerca, el resto del mundo que les rodeaba fue tragado por la oscuridad. Uno podía realmente imaginar que se hallaba lejos del mundo civilizado, solo en plena naturaleza. Los ruidos de los animales nocturnos, que empezaban a llegar a sus oídos desde el bosquecillo, ayudaban a crear la atmósfera.
Hacía rato que todos habían terminado de comer, pero aún no se levantaban ni recogían platos y cubiertos, disfrutaban charlando sobre que había hecho cada cual durante el tiempo que hacía que no se veían. Aunque nadie lo mencionó en voz alta, hubo una decisión unánime de no mencionar nada que tuviera relación con lo ocurrido en Junio. Todo lo relacionado con el resurgimiento de Lord Voldemort estaba vetado. Ya se enfrentarían a ello cuando volvieran al mundo real.
- Entonces – comentaba Ron entre risas – a Fred y George no se les ocurrió otra cosa que esconder sus petardos experimentales en la bañera para que mama no se los confiscará. Pero mi padre entró después y se preparó un baño mientras leía el Profeta y ni siquiera los vio. Puedes imaginarte lo que pasó cuando se mojaron.
- La casa entera casi se viene abajo – continuó su hermana entre risas también pues el narrador estaba incapacitado entre tanta carcajada – y a Papá le estuvieron saliendo chispas de colores de la cabeza durante una semana. Mamá prometió tenerles castigados todo el verano, pero al final solo les tuvo dos semanas trabajando todo el día arreglando la casa.
Todos se rieron un buen rato imaginándolo. Pero finalmente dejaron las anécdotas de cada uno y recogieron los restos de la cena. Los cuatros amigos temían que ya se acababa la diversión hasta el día siguiente, y que les iban a mandar a dormir a las tienda. En cambio Sirius les sorprendió anunciando que ahora tenían que encender la hoguera y que venía lo mejor de la velada.
- ¿Y que es lo que vamos a hacer Sirius? – preguntó Harry emocionado - ¿Qué hacíais vosotros en el campamento al que fuiste Hermione?
- Pues....- intento hacer memoria su amiga – recuerdo que por la noche la monitora tocaba la guitarra y cantábamos.
- ¿Cantar?, ¿a estas horas? – Ron puso cara de desconcierto y no parecía muy entusiasmado por la idea - ¿no haremos eso verdad?
- Ooh si, claro que si, luego os repartiré las letras de las canciones – el tono del padrino de Harry no admitía discusión en ese tema – Cantaremos y luego por supuesto .... ¡¡¡¡contareeemooos histoooooorias de mieeeeedooooooo!!! – terminó la frase adoptando el tono mas lúgubre del que fue capaz.
Remus Lupin se llevo la mano a la cara y sacudió la cabeza con cara de 'Tierra trágame'
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en el proximo capitulo la primera historia de "terror"
wil : no habia subido lo que seguia porque era muy poquito y queria escribir un poco mas ^^U. Pero la verdad queda en un buen punto y lo subo. Gracias por leer y dejar rev wapa ^0^
bunny: gracias a ti tambien ^____^ y sobre lo q preguntas si sera h/g o h/R..... acaso importa? :) Si te gusto la historia sigue leyendo y espero que disfrutandola, sobre si hay o no indicios de parejitas..... saca tus propias conclusiones :D
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Mientras los cuatro adolescentes se dirigían al jardín dentro de la casa los dos adultos hablaban en el cuarto de baño. Ambos tenían que limpiarse la mugre que se habían traído como recuerdo de haber estado trabajando en el tejado.
- ¿Viste su cara? – comentaba un exultante Sirius Black – Creo que desde que lo conozco no lo había visto sonreír con tantas ganas. Cuando era un bebé no cuenta. Te dije que sería una buena idea, que valía la pena el riesgo de conjurar a las cucarachas en un barrio muggle.
- ¿Acaso he dicho yo lo contrario?. Solo te dije que era una temeridad, no se como Dumbledore al final le pareció gracioso y no quiso nuestras cabezas en un plato. – el animago sonrió de oreja a oreja con expresión triunfante - Deja de vanagloriarte tanto, tu gran idea nos ha tenido hasta las cejas de preparativos. Se que estás deseando que empecemos con este "campamento", pero yo solo puedo pensar en que me espera varias noches durmiendo en un tienda y dentro de un saco. ¿La cama es un gran invento, lo sabías?
- ¿Eso es algún tipo de insinuación Moony? – sonrío burlonamente a su amigo
- Aaaah, muérete un poco y sal de aquí que me voy a duchar – dijo aparentemente molesto, y añadió al ver abrir la boca a Sirius – y no, te esperas a ducharte después. Ahora ve a ver si tu ahijado necesita algo.
- ¿Vas a estar de este humor encantador todo el fin de semana? – lo digo por invitar también a Snape y así estáis a juego. – amenazó totalmente de farol, Sirius Black se arrancaría antes las uñas con una sonrisa.
- Sabes que en la semana de cuarto creciente siempre estoy mas intratable. Agradece que te dejo seguir adelante con esto y no me provoques o me terminaré arrepintiendo. Ah – añadió como ultima advertencia mientras su amigo salía del baño con cara de falsa resignación – y ni una tontería mas con los niños por aquí. Ahora céntrate en tu papel de padrino.
Remus Lupin no quiso escuchar respuesta alguna a su ultimátum y cerró la puerta dejando a Sirius Black fuera, protestando en el pasillo. Mientras bajaba la escalera planeaba su venganza y la manera de hacerle cambiar de opinión esa noche. Al llegar al jardín se encontró con las chicas sentadas en el césped riéndose viendo como Ron y Harry intentaban inútilmente poner las tiendas de campaña en pie.
Al no tener ninguno de los dos experiencia en el tema, mas que montar la tienda parecían ensayar algún extraño numero de malabarismo con cuerdas, varillas y la tela impermeable. Sirius tuvo que intervenir y guiarles haciendo memoria de cual era la forma correcta según su documentación. Claro que una cosa es verlo en una película y otra muy distinta llevarlo a la práctica. Con lo que, cuando media hora después, Remus bajó ya limpio y aseado los encontró aun con la tienda a medio montar.
Tras mandar a Sirius a la ducha, por el riesgo de intoxicar con su olor corporal a los muchachos, se hizo cargo de la situación. Haciendo primero lo que Hermione Granger llevaba un rato aconsejando, leer las instrucciones. Gracias a ellas y a lo que ya habían adelantado Sirius y los chicos finalmente estuvieron las tres tiendas listas. Casi justo a tiempo, pues comenzaba a atardecer y se acababan las horas de luz.
Al bajar Sirius, también limpio y aseado, secándose el largo cabello mojado torpemente con una toalla, le tocó encontrarse con Remus preparando la cena con las dos chicas revoloteando a su alrededor ayudándolo mientras los chicos los observaban tumbados en la hierba.
Por supuesto el decidió unirse al segundo grupo. Alegando como excusa que si había mas personas alrededor de la barbacoa estorbarían mas que ayudar. Hubiera dicho además que no era tarea de hombres pero se abstuvo por no correr el riesgo de que Hermione le sacara los ojos y que Moony la ayudará con uno o dos Cruciatus.
Esos fueron los primeros momentos que disfrutó de verdad de aquel campamento improvisado. Charlando con los muchachos, descansando al final de un día ajetreado rodeado de gente que apreciaba. Las chicas tenían varias trencitas en el pelo con flores engarzadas en ellas. Harry comento que así se parecían a algunas de las ilustraciones muggles que había de las hadas. Que solo le faltaban las alitas. Ron respondió con un inaudible 'aha' sin perderle ojo a la escena. A Sirius también estaba de acuerdo en que estaban muy guapas, pero en aquel momento le preocupaba mas llenar su estomago. Antes de que pudiera protestar, y empezar a meterles prisa, Hermione, Ginny y Remus se les acercaron con la comida lista.
- Comeríamos mucho mas cómodos dentro, ¿lo sabías?. Con mesa, sillas,...vamos lo que usa la gente civilizada.
Sentenció el licántropo después de repartir la comida en platos de plástico y coger sus propios cubiertos, del mismo material, de una bolsa que puso Ginny en el centro del circulo que habían formado todos en el suelo para comer.
- Metete en el papel Moony e intenta olvidarte de que ahí está la casa excepto para lo mas imprescindible.
- Si profesor Lupin. ¡Será muy divertido! – señaló Ginny Weasley mientras peleaba por comerse una salchicha sin quemarse. Remus se había resignado ya a corregirles cuando le decían profesor y pedirles que solo lo llamaran por su nombre.
- Además – añadió el hermano de la pelirroja – tenemos el resto del año para vivir de forma civilizada. Variar un poco está muy bien.
- ¿Ves? , todos los chicos están de acuerdo conmigo – sentenció Sirius triunfante pese a que ni Harry ni Hermione habían dicho nada.
El primero parecía disfrutar demasiado de pasar ese rato con ellos y prefería grabar cada segundo en su memoria antes que participar en su conversación. Por su parte Hermione estaba muy concentrada preparándose una hamburguesa con los ingredientes adecuados y en el orden correcto. Panecillo, lechuga, tomate, hamburguesa, queso, bacon,...
El cielo se fue llenando de estrellas al hacerse de noche. Remus había encendido las antorchas, repartidas por el jardín, que habían preparado esa misma mañana. La luz era débil pero muy cálida y lo suficiente para poder ver que tenían alrededor. Quitando la fachada de la parte de atrás de la casa, que estaba relativamente cerca, el resto del mundo que les rodeaba fue tragado por la oscuridad. Uno podía realmente imaginar que se hallaba lejos del mundo civilizado, solo en plena naturaleza. Los ruidos de los animales nocturnos, que empezaban a llegar a sus oídos desde el bosquecillo, ayudaban a crear la atmósfera.
Hacía rato que todos habían terminado de comer, pero aún no se levantaban ni recogían platos y cubiertos, disfrutaban charlando sobre que había hecho cada cual durante el tiempo que hacía que no se veían. Aunque nadie lo mencionó en voz alta, hubo una decisión unánime de no mencionar nada que tuviera relación con lo ocurrido en Junio. Todo lo relacionado con el resurgimiento de Lord Voldemort estaba vetado. Ya se enfrentarían a ello cuando volvieran al mundo real.
- Entonces – comentaba Ron entre risas – a Fred y George no se les ocurrió otra cosa que esconder sus petardos experimentales en la bañera para que mama no se los confiscará. Pero mi padre entró después y se preparó un baño mientras leía el Profeta y ni siquiera los vio. Puedes imaginarte lo que pasó cuando se mojaron.
- La casa entera casi se viene abajo – continuó su hermana entre risas también pues el narrador estaba incapacitado entre tanta carcajada – y a Papá le estuvieron saliendo chispas de colores de la cabeza durante una semana. Mamá prometió tenerles castigados todo el verano, pero al final solo les tuvo dos semanas trabajando todo el día arreglando la casa.
Todos se rieron un buen rato imaginándolo. Pero finalmente dejaron las anécdotas de cada uno y recogieron los restos de la cena. Los cuatros amigos temían que ya se acababa la diversión hasta el día siguiente, y que les iban a mandar a dormir a las tienda. En cambio Sirius les sorprendió anunciando que ahora tenían que encender la hoguera y que venía lo mejor de la velada.
- ¿Y que es lo que vamos a hacer Sirius? – preguntó Harry emocionado - ¿Qué hacíais vosotros en el campamento al que fuiste Hermione?
- Pues....- intento hacer memoria su amiga – recuerdo que por la noche la monitora tocaba la guitarra y cantábamos.
- ¿Cantar?, ¿a estas horas? – Ron puso cara de desconcierto y no parecía muy entusiasmado por la idea - ¿no haremos eso verdad?
- Ooh si, claro que si, luego os repartiré las letras de las canciones – el tono del padrino de Harry no admitía discusión en ese tema – Cantaremos y luego por supuesto .... ¡¡¡¡contareeemooos histoooooorias de mieeeeedooooooo!!! – terminó la frase adoptando el tono mas lúgubre del que fue capaz.
Remus Lupin se llevo la mano a la cara y sacudió la cabeza con cara de 'Tierra trágame'
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en el proximo capitulo la primera historia de "terror"
wil : no habia subido lo que seguia porque era muy poquito y queria escribir un poco mas ^^U. Pero la verdad queda en un buen punto y lo subo. Gracias por leer y dejar rev wapa ^0^
bunny: gracias a ti tambien ^____^ y sobre lo q preguntas si sera h/g o h/R..... acaso importa? :) Si te gusto la historia sigue leyendo y espero que disfrutandola, sobre si hay o no indicios de parejitas..... saca tus propias conclusiones :D