Capitulo III

No todos son horribles. Al vivir los padres de Harry, éste no fué su caída y por lo tanto Voldemort seguía vivo, matando a gente, torturando a muggles, etc,... Él ya no tiene la cicatriz.

Pero Hermione estaba en el Hospital San Mungo de Enfermedades y Heridas Mágicas, puesto que Voldemort mató a sus padres y a ella la había torturado haciéndole levitar y enseñando las bragas, lo que la había puesto tan histérica y nerviosa que se volvió loca y están tratando de que vuelva al estado normal.

Bertha Jorkins no ha muerto, ni tampoco Cedric, el hijo de los Diggori; aunque sí Colagusano.

Los Weasley son aún más pobres, visten como elfos domésticos y están pidiendo en el Callejón Diagon.

Harry va a Hogwarts, aunque no sus dos mejores amigos, Ron y Hermione. Su mejor amigo era Neville, cuyos padres no habían sido torturados. Él vivía con ellos y sus abuelos se habían muerto.

Entre tanto Harry pensaba que prefería la otra vida, con Ron y Hermione. La otra vida se le presentaba ante sus ojos como si la hubiera vivido hacía siglos.

Él no quería aquella vida, aunque le gustaba estar con sus padres. En una hora de su nueva vida se había enterado de todo esto porque sus padres se lo habían dicho. No había tenido el suficiente tiempo para estar más arrepentido cuando...

-Harry, Harry, despierta, ¿me oyes?, ¡Tenemos que probar el nuevo giratiempo de Hermione.

Harry había terminado el trabajo la noche anterior y se había quedado dormido otra vez mientras pensaba si conseguirían...

-¡Harry! Es la hora de comer. Comamos  y vayamos a probar MI giratiempo.- dijo Hermione.

-Un momento.- les iba a contar los dos sueños para tratar de explicarles que no debían cambiar nada, pero no sabía si añadir lo de que se casaban. Sumido en su lucha interna les contó lo demás y al final decidió contarles lo otro. Ron y Hermione se sonrojaron muchísimo y Hermione dijo:

-Que cosas sueñas, harry.

-Sí, - dijo Ron- además, sólo ha sido un sueño... - pero pensaba para sí que ojalá sucediera de verdad, aunque, todavía, no había tenido el valor suficiente Para decirle a Hermione lo mucho que le gustaba, más desde que la vió en el baile de Navidad, el año pasado, tan guapa, tan encantadora, tan espléndida, pero con Krum. Se puso muy celoso. En realidad fueron sus celos los que hicieron que se diera cuenta de lo mucho  que le gustaba.

-¡Ron, Ron!- le sacó de su ensimismamiento Harry- ¿te has enterado de algo?

-No- admitió Ron.

-No vamos a modificar el pasado.- le informó Harry

-¿Por qué no?- desafió Ron.

-¿No has oído lo que he soñado? Además, Dumbledore dijo que podrían suceder cosas terribles si se cambiaba el pasado y mira tú lo que soñado...

-Bueno, vale- rectifico Ron- pero ¿podríamos viajar sin cambiar nada? Yo no he viajado nunca en un giratiempo y me gustaría...

-Vale- aceptaron Harry y Hermione

-Pero sin cambiar nada, NADA- recalcó Hermione.

-De acuerdo- dijo Ron.