Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen... los angeles and company,
sip. Este y los siguientes caps van dedicados a mi loca Beta Renegada,
Kitiara!! Thanks por las ideas!! ^^

UN ANGEL PARA UN CABALLERO

Capitulo 6. ¡Vamos a limpiar!

¡No me gusta limpiar! – Kitiara solto la bayeta con la que estaba quitando el polvo a un mueble y miro a todos lados, comprobando que nadie la podia ver. - ¡Nesbiros! – con un pequeño estallido y una nube azul de humo, Nesbiros, el demonio sirviente de Astaroth, aparecio.

¿Llamaba, su maldeza? ¡¡Attchis!! – Kitiara arqueo una ceja.

¿Estas resfriado, Nes? – el demonio siguió estornudando, sin control.

No... attchis... no lo entiendo... attchis... esto solo me ocurre cuando hay angeles cerca... attchis... soy alergico a ellos... attchis...

Uhm... angeles... que extraño... Bueno, Nes... haz que la casa este limpia... antes de que te mueras de un ataque de alergia... - Nesbiros uso su poder, entre estornudos, y la casa aparecio limpia en unos segundos.

¿Me... attchis... me puedo marchar ya, su maldeza? ¡Attchis!

¡Ugh! ¡Si, vete! – entre estornudos, el demonio desaparecio, dejando a Kitiara sola, justo a tiempo, pues Milo habia vuelto ya a casa.

¡Vaya, Kiti! ¡Que eficiencia! Has dejado la casa limpia muy rapido. ¡Mejor! ¡Asi podremos usar el resto del tiempo para ver una peli! ¿Quieres? – la chica sonrio ampliamente.

¡Si! ¡Una de miedo! ^^

Mientras, en la casa de Acuario, otra aprendiz cumplia su castigo.
Vulpix, subida en un taburete, trataba de sacar el polvo de unos
libros de una estantería. A poca distancia, Kamus, fingia leer el
periodico sentado en su sillon preferido. David observaba la escena
disgustado. Desde que la chica habia llegado casi no habian
intercambiado palabra.

Oye, Kamus... si no haces tu algo, lo voy a hacer yo... avisado quedas...

¡Callate, David! – gruño por lo bajo el caballero.

¡En serio! ¡Dile algo! ¡Dile que esta guapa o hazle un piropo! ¿Asi como demonios la vas a conquistar?

¿No has tenido bastante escondiendome la ropa y dejandome solo esto? – David sonrio para si. Una hora antes de que la chica llegara, habia saqueado el armario de Kamus y le habia ocultado toda su ropa dejandole solo una camisa negra de seda y unos vaqueros negros que le quedaban muy ajustados. Tanto que al caballero le habia dado vergüenza aparecer asi delante de la chica. Pero los cumplidos que le habia lanzado la chica, consiguieron apaciguar un poco al caballero.

Encima que te ayudo... ¡vale! Si no haces nada tu solito, lo hare yo. – sin decir nada mas y antes de que Kamus pudiera decir algo en contra, David aparecio justo al lado de la chica y le dio un ligero empujon. Al estar ella de puntillas, perdio el equilibrio, cayendo justo en los brazos del caballero de Acuario. Ambos se miraron algo avergonzados.

¿Estas bien, petite? – Kamus sintio su rostro enrojecer aun mas, al tener a la aprendiz tan cerca. Con cuidado la dejo en el suelo.

Ah... si, si... estoy bien... gracias... - David observaba a los dos, divertido.

¡Yeah! ¡Se ha sonrojado! ¡Eso es que le gustas! ¡Vamos bien, chico! – Kamus estaba sintiendo otra vez esas ganas irrefrenables de estrangular a su angel.

Seria mejor que lo dejaras por hoy, petite... ¿quieres comer algo? – la chica lo miro de arriba abajo, consiguiendo que el caballero se volviera a sonrojar.

Si... ¡no estaria mal! – David vio como los dos se iban a la cocina, hablando.

¡Ey... esto va genial! ¡Hay que pasar al plan B!

CONTINUARA...