Tiempos...

By Misao ---------------------------------------------------------------------------- --------------------------------------------------------------------------- NOTA: Todos los personajes de este fanfic pertenecientes a la serie de Rurouni Kenshin son propiedad exclusiva de su autor Nobuhiro Watsuki, yo solo me limité a tomarlos prestados y cambiar algunas cositas para darle un giro diferente a la historia .

ADVERTENCIA: Este fan fic es del tipo Yaoi, lo que significa relaciones Chico-Chico y contiene escenas del tipo lemon (y solo lemon, porque a pedido de una amiga (Haima Yagami) ya no seré malvada ), no es apto para menores de edad y si no es de su agrado este tipo de lecturas, por favor no sigan. Y cabe aclarar que éste capitulo en particular está cargado de mucho lime y lemon, así que... ¡¡disfrútenlo!! (el lemon lo narraré en 3a persona, vale?)

- - Diálogos

-" "- Pensamientos

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(capítulo anterior...)

Aoshi deprimido busca a Sanosuke para desahogarse y al no encontrarlo se desespera y un sentimiento desconocido hasta el momento surge en él. Cuando finalmente se topa con Sano, ... ¡¡OH!!, ¡sorpresa!, se termina enterando que Sanosuke está enamorado de él, y la noticia lo confunde. Por otro lado Sanosuke intenta disculparse con Aoshi por su inapropiada confesión y el ex okashira Oniwabanshu no controla sus impulsos y termina besándolo. ¿Qué pasará luego de ese beso?

Capítulo III: Tiempos de descubrimientos y renovada felicidad.

"Lo más hermoso?...., tú"

No puedo creerlo... aún no me lo creo... ¡¡lo besé!!... no.... un momento... ¡¡¡aún lo estoy besando!!!, debo detenerme antes de que... ¡¡OH, NO!!... demaciado tarde, el incitador movimiento de sus labios al abrirse me invita a que pase mi lengua entre ellos y explore su boca..., ¡demónios!... no sé lo que estoy haciendo, solo se que me gusta y me gusta mucho..., ya es demaciado tarde para tratar de detenerme, la calidez y el exquisito sabor de su boca me obliga a quedarme así como estoy, sentado en el futón a un costado de él, con una mano sobre su mejilla izquierda y la otra al costado derecho de su cuerpo, mi tórax está casi pegado al de él... ¡¿qué... ¿qué es esto?... ¡¡sus manos!!... sus manos estan abriendo mi bata con movimientos extremadamente sensuales que me incitan a profundizar más el beso, ¡¡ésto es la gloria!!, nunca antes había sentido tanto calor nacer dentro de mi, siento como sus dedos rozan mis pezones y la sensación es tal, que un ligero estremecimiento me recorre la columna hasta llegar a mi miembro, que comienza a despertar bajo el efecto de sus caricias... esto no puede continuar, tengo que detenerme, ¡¿en qué terminará todo ésto si no lo hago?!

- .....Aoshi?.......

- .........................

-¿Por qué te separaste de mi?

No puedo continuar con ésto, por más que me encanten sus ojos y me fascinen sus labios no puedo permitirme nada con él... no por el "Qué dirán?", sino por Misao... mi pequeña Misao, aún no resuelvo qué es lo que siento por ella.... ¡¡AAHH!!, ¡¡¿qué demonios?!!... a quién engaño?... yo la quiero con toda mi alma pero... esto que Sanosuke me hace sentir no se compara con nada que halla experimentado antes...; y será mejor que me pare y me valla de aquí porque Sanosuke está tratando de besarme de nuevo, y el hecho de que estamos en mi habitación, los dos sobre mi futón no ayuda en mucho...; pero cuando me levanto, él lo hace también y se situa detrás de mi, agarrandome de la cintura y pegando mi espalda a su pecho, cosa que no me es útil ante mis intentos de escape, y cuando intento alejarme de nuevo siento que cierra sus brazos sobre mis caderas y comienza a besarme en el cuello... así nunca conseguiré escapar..., la forma en que explora mi cuello y cómo acaricia mi abdomen con sus hábiles manos me transporta a otra dimensión, y sin pensarlo inclino mi cabeza para darle más espacio a explorar y... le regalo un gemido...

- ..... aaaaahhhhhhhh.........

- (risita susurrada).... sabía que te gustaría...

Esa risita seductora y esas palabras salidas en un susurro de su boca en mi oido, rompieron el encanto del ambiente y me hicieron reaccionar alejandome, ahora sí, por completo de él. Me dí la vuelta y lo enfrenté, pero cuando abrí la boca para hablar, él me interrumpió y habló primero

- Está bien.... si no quieres continuar está bien, entiendo que yo no te guste...., pero si me vas a dejar con las ganas, al menos sé cortez y no me dejes con la duda, ¿por qué lo hiciste?, ¿por qué me besaste?

¡¡RAYOS!!... y él cómo demónios espera que le de una explicación convincente si ni siquiera yo sé qué es lo que me pasa?, ¡¡maldición!!, ésta maldíta confusión me está exasperando...

- Aoshi... contestame, por favor

Su voz al principio dura por el enojo, ahora es dulce de nuevo, como cuando me confesó que me quería... cuando lo pienso, me siento extraño, el saber que Sanosuke me quiere mucho me llena de un sentimiento que... es díficil de explicar, sobre todo ahora que mi ser está dividido en dos, una parte dedicada a Misao, y la otra a él...

- Sanosuke.... yo..... estoy..... estoy confundido....

-.............. está bien, te comprendo, ......... la primera vez que entré en conciencia de mis sentimientos hacia ti, también me confundí mucho, pero.... (risita melancólica) ¿sabes lo que me trajo la seguridad de que lo que siento por ti es realmente fuerte y verdadero?

- °°........no......

- Tus ojos. Aoshi, no sé si lo sabias pero tienes los ojos azul oceánico más increibles que jamás halla visto en mi vida, esos ojos me cautivaron desde el primer momento en que los vi, y poco a poco me fui enamorando de ellos, como de todo el resto de ti...

- °°..... gra.....gracias......

- Jejejeje..., ¿sabías que quedas terriblemente adorable con ese rubor en tus mejillas?

- uu.... básta ya....

- Está bien (risita, bien al más puro estilo Sanosuke) ya no te avergonzaré, pero prométeme una cosa, cuando aclares tus dudas, quiero ser el primero en entrearme, ¿de acuerdo?

-........sí........

Cuando iba a decirle algo más, suena la puerta de mi habitación y la voz de Omasu se escucha desde atrás de la misma

-¡¡¿Señor Aoshi?!!, el desayuno ya está servido, esperamos por usted

- Ya voy

Ésto es la cuarta cosa que más me llena de tranquilidad; las tres primeras son: Meditar en el templo, la sonrisa de Misao, y la companía de Sanosuke; y ésta, la cuarta, es sentarme a la orilla del río, relajarme y pensar.... pensar, en éstos días es la única cosa que aclara todas mis dudas, y mi máxima duda en estos momentos es ¿qué es lo que siento por Misao y por Sanosuke? Para entenderlo lo tengo que analizar por partes, primero que nada, empecemos por Misao: Ella es la cosa más valiosa que he tenido en mi vida, la adoro, la quiero mucho, pero... me resulta terriblemente difícil imaginármela como la mujer que sé que es, ella me lo ha repetido un sin número de veces, pero para mi ella sigue siendo esa niña adorable y revoltosa que era cuando entrenaba con nosotros años atrás, un enorme sentimiento de sobreprotección me embarga cada vez que veo que algún hombre intenta acercarse a ella en el Aoiya mientras hace su tarbajo como mesera; de seguro todos lo interpretan como celos, pero es todo menos eso, la sobreprotejo porque es mi deber como su tutor, porque la quiero... porque la amo, como un padre ama a su hija... ¡¡Eso es!!, Misao es para mi una hija, yo la amo como una hija... aunque... sé que esto le traerá una tristeza enorme a ella, pero es la verdad, y por más que quiera no podré hacer nada para cambiar éste sentimiento paternal, si en verdad ella me ama, sabrá sobrellevarlo... es cruel, pero cierto... En cuanto a Sanosuke... de tan solo pensar en él me sonrojo súbitamente, es extraño, las veces que he estado entre sus brazos una tranquilizante calidez me embarga y me hace sumamente feliz, me cuesta horrores admitirlo pero... soy feliz con la sola precencia de Sanosuke... y creo... que me gusta él..... vaya...... no lo puedo creer... ¡¡lo admití!!, ¡¡¡admití que me gusta un hombre!!!, ¡¡¡¡ QUE ME GUSTA SANOSUKE!!!!, Wow!!, ahora me siento mejor, porque el saber que él me quiere y que yo le quiero también me pone muy alegre, tengo ganas de entrar al Aoiya y gritarselo a todo el mundo pero... antes tengo que confesárselo a él, el dilema es... ¿cómo se lo digo si estas palabras no van más allá de mi mente?... estoy seguro que por más que quisiera decirlas ahora que estoy solo aquí a orillas de éste lago, no podría, simplemente no podría... Como mis instintos de ninja no me abandonan, me tenso y me pongo en alerta al escuchar unos ruidos detrás de mi, pero me paralizo al escuchar la voz de la persona que viene acercándoseme:

- Hola Aoshi, ¿cómo estas?

-....... Sa..... Sanosuke?.......

-Disculpa... ¿te asusté?

-................ No....................

Un intenso rubor aparece en mis mejillas al ver que Sanosuke se sienta a mi lado..., digamos que demaciado contra mi, y su camisa abierta y el viento ondeando su flequillo sobre sus increhibles ojos marrones no me ayuda mucho en mis vanos intentos de apartar mis ojos de él... y él lo nota, y me sonríe... ¡¡oh, dios!!... estoy perdido... sus sonrisas me anulan por completo, son tan preciosas, como él... pero luego de un rato, recuerdo su malestar de hoy en la mañana y le pregunto:

-¿ya te sientes mejor?

-¡¿Eh?!... ah... si, no te preocupes

Vuelve a sonreirme. Las pocas sonrisas que le he visto en su rostro son en su mayoría falsas o hasta incluso cínicas, pero ésta sonrisa que me brinda ahora no lo es en lo absoluto..., más bien es.... de ternura. No puedo sacarle los ojos de encima, no puedo dejar de mirarlo, y tampoco quiero dejar de hacerlo...

- Detente ya...

- ¿Eh?

Sanosuke me mira de frente y seriamente, pero yo no entiendo a que se refiere, yo no estoy haciendo nada, ¿qué es lo que le molesta?

- Detente Aoshi...

-Yo... no comprendo... qu... ?

- Si ahora mismo no paras de mirarme de esa forma en que lo haces y que me vuelve loco, juro que no me hare responsable de mis actos luego...

Sonrie de nuevo, pero esta vez es una sonrisa coqueta, cargada de seducción, y mi nerviosismo aumenta alarmantemente al verlo acercarse lentamente a mi con obvias intenciones de besarme, pero a escasos milímetros de mi boca, él desvía su rostro hacia mi oído, rosando mi mejilla con sus labios entreabiertos, y con la más seductora voz que le he escuchado hasta ahora me susurra:

- Si no hulles te atacaré ahora y aquí mismo...

Me petrifico, no me esperaba una afirmación de ese calibre, y al entrar en conciencia de la situación en la que me encuentro pienso que... que no lo haré, no huiré, simplemente porque no quiero hacerlo, además de que la cercanía de su cuerpo al mio me enloquece y porque yo no quiero que se aleje de mi, deseo estar siempre a su lado, pero ¿cómo se lo hago saber?

- Aoshi..... entiendes que me eres irresistible?...

Mientras espera que yo le responda, Sanosuke mordisquea el lóbulo de mi oreja y me lame detrás de la misma... si supiera todo lo que me gusta que haga eso... no quiero que se detenga... así que cierro los ojos y suspiro mientras me dedico a disfrutar de esa caricia, pero pareciera que él hace las cosas de gusto para torturarme, porque se detiene y me mira a los ojos

- Te lo advertí, luego no acepto reclamos...

No me dejó tiempo para responderle nada, porque en éste mismo instante Sanosuke se encuentra besándome. Sus besos son fantásticos, nunca había sentido nada igual; ahora me doy cuenta que una cosa es besarlo a él, y otra muy diferente es ser besado por él... definitivamente es diferente, porque es maravilloso... La maestría que tiene al besarme es prueba de que es un hombre experimentado, y esa idea me gusta, me estoy dando cuenta que me gusta ser el pasivo, y parece que a él le gusta tener las riendas del asunto... Sanosuke lleva su mano hasta mi mejilla derecha, la acaricia y luego dirije su mano a mi nuca, para profundizar más el beso. Es increhible lo que se siente, su lengua entra en contacto con la mía y ese choque genera una explosión dentro de mi que me obliga a tomarlo por el cuello de la camisa y jalarlo hacia mi, para así poder tener más contacto el uno con el otro; esas caricias suyas me dejan con ganas de más que un simple beso... Debido a la fuerza del empujón caigo de espaldas en el cesped, y Sanosuke cae encima mio, muy cerca el uno del otro. ¡Cielos!, ésto es lo más lejos que he llegado en toda mi vida..., y me encanta...

-... Aoshi?...

Él parece estar confundido, y le comprendo, lo más probable es que nunca se hubiera imaginado que yo pudiera tener ésta clase de reacciones ni que me tomara éste tipo de libertades, porque la verdad es que ni yo mismo me lo imaginaba, tal vez mi inesperada reacción no le agradó...

- Yo.... lo.... lo siento....

-No, no lo sientas. Me encantó, me encantó y

- Házlo Sanosuke

Sé qué ésto es apresurado. Quiero que vuelva a besarme, quiero sentirme entre sus brazos... quiero saber qué se siente estar con alguien, con él..., tal vez es demaciado temprano aún, pero yo... yo lo quiero, quiero ser feliz de una buena vez...

-¡¡¿Que qué?!!

-Que quiero que m

- ¡Ya entendí!, ¡ya entendí!.... pero... ¿estas seguro Aoshi?

Me siento nervioso, no sé que es lo que va a pasar, sólo sé y con toda la certeza del mundo que no me arrepiento de haberle pedido ésto a Sanosuke. Despues de todo, él me quiere y yo..... yo también le quiero .... y .... ¿qué más se necesita? Como es de tarde, un poco más del mediodia para ser más exacto, todos se encuentran descansando en sus respectivas habitaciones, en éste momento no recuerdo el porqué estan todos descansando en vez de ocupar su tiempo haciendo algo útil como es la costumbre en ésta casa, lo único que llena mi mente en éste momento es Sanosuke... Vamos corriendo los dos de la mano por los pasillos del Aoiya como dos niños pequeños escapando del castigo impuesto por alguna travesura, me siento como una tonta colegiala, pero no me importa, ahora mismo me estoy dando cuenta que por Sanosuke soy capaz hasta de dejar mi gran orgullo de lado, y eso se debe a que... posiblemente yo.... yo esté.... esté enamorado de él.... Llegamos al corredor donde están nuestras habitaciones, pero nos detenemos porque, al menos yo, no sé en cual de los cuartos entrar... aunque el mio es el que está más cerca y es la habitación más grande...

- Vuelvo a preguntartelo Aoshi, ¿estás seguro que quieres ésto?

- Si

- No sabes cuanto me alegro de escuchar eso

Y sin más da unos pasos hacia mi y me abraza por la cintura, pegando delicadamente su pecho al mio, de la misma manera en que posa su boca sobre la mía y cierra los ojos inclinando su cabeza a un costado, para pasar su lengua por mis labios, acción que me hace abrirlos y permitirle la libre entrada a la hábida lengua de Sanosuke a mi húmeda cavidad, siento cómo nuestras lenguas se unen y se acarician entre ellas, y el sabor de su boca me desconecta de todo a mi alrededor, dejandome escencia sola y únicamente para sentir, sentir sus manos en mi espalda dando masajes circulares, subiendo hasta la nuca y bajando hasta la cintura, sentir su sabor dentro de mi boca, embriagándome, sentir el calor nacer en mi y despertar mi hombría, sentir que con cada segundo compartido a su lado, lo voy amando más.... no sé cómo pasó, lo único que sé, es que yo, Aoshi Shinomori, estoy enamorado de Sanosuke Sagara Sanosuke está de espaldas a la puerta de mi habitación, y como yo estoy en frente a él, estiro mis brazos de modo en que puedo alcanzar la puerta y deslizarla un poco, lo suficiente como para que podamos entrar nosotros dos. Como Sanosuke no tiene intenciones de moverse por si solo, porque está muy ocupado.... ejem.... tratando de sacarme el gi, yo lo voy empujando a medida que avanzo hacia el interior de mi habitación, todo mientras nos besamos con vehemencia y nos acariciamos frenéticamente, casi con desesperación. Una vez dentro, como puedo cierro la puerta ahora quedando yo de espaldas a ella. Sanosuke para de besarme y me mira directo a los ojos para decirme:

- Te amo

Él acorrala mi cuerpo contra el suyo y la pared, quedando muy pegados el uno con el otro, me sostiene las manos, que hasta éste momento caian a los costados de mi cuerpo, entrelaza sus dedos finos y largos con los míos y levanta mis brazos de tal forma que mis manos quedan por sobre mi cabeza, y mientras se va acercando a mi boca para besarme otra vez me dice casi en un susurro:

- Te amo, y mucho

Y vuelve a besarme, realmente me encantan sus besos, me llenan de un sentimiento que es muy difícil de explicar, y es tan grande la alegría que tengo de estar así con él en éste momento, que el corazón me late tan rápido que con cada palpitar siento que se va a salir más rápido de mi pecho, y me encanta sentirme así, con Sanosuke soy feliz. De mi boca él pasa a besar mi cuello, dejando un rastro de saliva desde mis labios hasta mi yugular, que es donde es éste momento Sanosuke está besandome. Es una sensación enormemente placentera sentir cómo él besa y lame mi cuello, la piel que une mi cuello con mi hombro derecho, es tan bonito lo que siento que le regalo, una vez más, un gemido, pero ésta vez es más fuerte que el anterior y con doble intención... por primera vez en mi vida, pude reunir el valor suficiente como para intentar excitar a alguien, excitarlo a él... juro que en éste momento me siento con la capacidad suficiente como para seducir a cualquiera; éso es lo que quiero, seducir a Sanosuke... ¿será éste acaso el poder del amor?, ¿el amor puede transformar a las personas?... eso estoy a punto de averiguarlo Al parecer a Sanosuke le gustan mis gemidos, ya que al escucharlo, sentí claramente que algo un poco duro pegó en mi cadera, igual que ésta mañana lo sentí en la parte de atrás de mis piernas...

- Te amo Aoshi, te amo demaciado

- Yo también...

- ¡¡¿Qué?!!, ¿cómo dices?

- Que yo también.... te amo....

Vaya... después de todo... no fue tan difícil decírselo.... me siento mucho mejor, antes el nerviosismo me estaba matando, pero ahora estoy mucho más tranquilo. Puedo notar que el nervioso ahora es Sanosuke

- Eso significa que.... que tú y yo.... somos o.... podríamos ....ser....

- ¿Novios?, solo si me lo pides como es debido

Ésto es divertido, Sanosuke suelta mis manos, y tomando una de ellas se arrodilla ante mi, se aclara la garganta y con un gesto cómico en su bella cara dice:

- Acaso éste bello ángel que tengo aquí en frente, con los más increhibles ojos azul-oceánico - y me señala - ¿accedería a ser mi novio?

-...... ¡qué payaso eres!.... claro que si

Él vuelve a pararse y me abraza, un abrazo que, aunque fuerte, está lleno de cariño y amor, y yo se lo devuelvo, me aferro con ferbor a su espalda, lo quiero, lo quiero mucho, amo al hombre que está abrazandome, y por primera vez, no siento ningúna cosa rara al pensarlo, ni al decirlo

- Te amo Sanosuke

Aunque lo dije en un hilo de voz, él alcanzó a escucharme, y se separó un poquito de mi, lo suficiente solo para poder mirarme a los ojos. Su semblante es serio, aunque puedo distinguir un extraño brillo en sus preciosos ojos marrones

- Demuéstramelo

- ...........°°...........

- Vamos, no te pongas pudoroso ahora cariño, para algo vinimos aquí, ¿no?

- Es que.... es que yo nunca...

- Eso yo lo arreglo

(Inicio del lemon, narrado en 3a persona)

Sanosuke estaba shockeado todavía, demaciadas cosas bellas le habían pasado en un solo día. Pero amaba al hombre que tenía en frente aferrado a su camisa y se lo iba a demostrar... El luchador acercó lentamente su rostro al de Aoshi, que estaba más nervioso que otra cosa, la tensión de sus músculos era notoria, y era comprensible su estado de ánimo, después de todo... él era virgen.... De todas formas, el tierno beso que Sanosuke le dió lo libero de cualquier tensión existente en su cuerpo, dando lugar a una infinita sensación de ligereza, se sentía flotar, y de no ser por los brazos de Sanza que lo tenian firmemente agarrado, saldría volando. Aoshi llevó sus brazos hacia arriba pasandolos por el siempre expuesto pecho del luchador, acariciando el mismo, para envolver el cuello del más alto con ellos, acción que Sanosuke respondió ahondando más el beso, pasando su lengua cálida por los sonrosados labios del ex Okashira Oniwabanshu, internándose en la profundidad de su boca, probando y deleitándose con el sabor de la saliva de Aoshi. Y él gustoso respondió al beso. Sanosuke, sin terminar con el beso, alzó en vilo a su amor y lo llevó hasta el futón de éste, depositándolo en él con suma delicadeza, Aoshi ya no sentía nervios, la suavidad de los movimientos de su novio y sus besos lo transportaban a un universo paralelo donde nada más que ellos dos existía. Un nuevo beso llegó hasta los labios de Aoshi, pero éste beso era diferente, iba acompañado de dos importantes factores; el primero: la sensación extraña del cuerpo de Sanosuke encima del del suyo, y el segundo: la pasión con la que éste beso le fue dado. Era increhible lo que la cercanía del cuerpo de su amado producía en él, y fue tanta su exitación que una vez más apretó a Sanosuke contra sí en un abrazo más que posesivo, casi quitándole el aire de tanta fuerza. Éste gesto excitó aún más al luchador y se lo hizo saber a la persona debajo suyo con las palabras más tiernas que jamas salieron de su boca:

- Aoshi... eres lo más hermoso que me ha pasado en la vida..., te amo..., y estoy feliz de estar así contigo... y saber que tu me correspondes es lo máximo de felicidad que he sentido jamás.... te amo, ¡te amo! ¡¡te amo!! ¡¡¡TE AMO!!! jajajaja, ¡¡¡¡TE AMO!!!! JAJAJAJA

- Ssshhh jajaja.... calla....jajaja...ya, ssshhh...

-Aoshi.......... la sonrisa te queda tan bien.... deberias sonreir más seguido

Con la sonrisa aún impresa en sus labios, Aoshi esperó el beso que nunca llegó, porque Sanosuke fue directamente a besar su cuello. Era tal la sensación que le producía sentir los cálidos labios y la húmeda lengua de su novio en su cuello que la sonrisa se le intensificó y con el paso del tiempo se fue convietiendo en suaves gemidos, que fueron acrecentando más la pasión del luchador. Del cuello Sanosuke fue bajando, abriendo lentamente la ropa y besando la piel que cubría el esternón, le abrió suavemente el gi y de ahí se encaminó al pezón del pectoral derecho de Aoshi, sin despegar nunca los labios de esa piel que le resultaba inmensamente deliciosa y adictiva, el pecho del ex Okashira estaba surcado por infinitas cicatrices que no le restaban ni una pizca de atractivo, es más, le brindaban cierta aura de misterio, esa misma aura que había hecho que Sanosuke se enamorara profundamente de Aoshi. Las caricias de los labios fueron acompañadas por las ágiles manos de Sanosuke, con su mano derecha fue estimulando el pezon izquierdo de su aún no amante, apretandolo suavemente para luego acariciarlo con la punta de los dedos, mientras que con la boca hacía presa a su gemelo, dando pequeños golpecitos con la lengua y luego mordiendolo ligeramente, regalandole a Aoshi placenteras sensaciones que le hacían gemir, primero con suavidad, gemidos ahogados que se confundían con suspiros, hasta convertirse en quejidos que eran interpretados por su causante como una clara inviración a continuar. La boca de Aoshi fue capturada una vez más por los labios y la lengua sedienta de Sanosuke, mientras que sus manos se fueron hacia sus hombros, deslizando el gi por sus brazos y acariciandolos, con una infinita ternura; una vez que el gi estubo totalmente fuera del contacto con la piel de su dueño, Sanosuke le pidió con seductora voz:

- Por favor, haz lo mismo conmigo...

Aoshi muy tímidamente retiró la camisa siempre abierta del cuerpo de Sanosuke mientras éste no hacía otra cosa que mirarlo a los ojos y sonreirle, con una sonrisa de felicidad plena. Una vez que ambos torax estuvieron al descubierto, Sanosuke volvió a su antigua labor de torturar las tetillas de Aoshi, pero esta vez con más ferbor; Aoshi al sentir el cambio no pudo más que gemir y acariciar la cabeza de su novio con suavidad, enterrando sus dedos en los castaños cabellos de Sanosuke, acrecentando más la pasión del momento. En cierto instante el placer provocado en Aoshi por la boca y dedos de Sanosuke fue tanto que el ninja arqueó la espalda un poco y tiró ligeramente la cabeza hacia atrás, emitiendo un sonoro gemido, ésto encantó al luchador La mano que tenía libre, Sanosuke la usó para acariciar el estómago plano del hombre debajo de él, y al toparse con la barrera que la hakama de Aoshi le representaba, rápidamente desató el nudo que mantenía el pantalón sujeto a las caderas de su novio, y separándose un momento de su pecho, miró a Aoshi con picardía, regalándole una sonrisa, para luego bajar por su cuerpo hasta el lugar donde antes estaba el dichoso nudo, y con los dientes terminar de desarmarlo. Aoshi miraba sorprendido las acciones de su novio, que mientras hacía no dejaba de mirarlo a los ojos, el contacto entre marrón claro y azul oceánico nunca se rompió, hasta que Sanosuke desvió su rostro hacia la cadera de Aoshi para retirar la hakama y la ropa interior, y fué ahí que vió cuan exitado estaba el ninja... La ropa fuera... y ante Sanosuke, que estaba arrodillado a los pies del ex Okashira, el paisaje más hermoso que halla visto jamás. Aoshi desnudo era todo un dios, piernas largas y torneadas, muslos firmes, caderas estrechas, generosos atributos masculinos, cintura pequeña, abdominales definidos, marcados pectorales y anchos hombros... Aoshi era un ángel caido, que se convirtió en demonio solo para tentarlo a él, un simple mortal...

- Hermoso...

El adjetivo que el luchador le daba lo llenó de verguenza, nunca nadie le había dicho que era "hermoso". Sanosuke sonrió tiernamente ante el gracioso e intenso sonrojo presente en el rostro de Aoshi, con sus manos separó un poco las piernas de éste para acomodarse entre ellas y volvió a recostarse sobre su pronto a ser amante, acariciando con sus manos en el proceso el torso del ninja, empujando con sus caderas aún vestidas la notable erección de su novio, provocándole a él un pico de placer que lo obligó a soltar un ronco gemido, levantar un poco la espalda del suelo y tirar la cabeza hacia atrás nuevamente. Al volver a la posición inicial, ahora con Sanosuke nuevamente sobre él, Aoshi volvió a sentir sus labios en contacto con los del luchador, extasiándose con el magnífico toque, llenándose del sabor de su saliva al sentir una lengua intrusa colarse por sus labios para entrar a su boca. Al separarse Aoshi susurró jadeante:

- Sabes... es injusto...

- ¿Lo qué? - preguntó Sanosuke alarmado al no saber qué cosa incomodaba a su amor

- Tu... aún estás muy vestido...

Una pícara sonrisa afloró en los labios de Sano, le encantaba el Aoshi deshinibido, y separándose un poco del cuerpo debajo suyo dijo:

- Pues entonces hazlo, quítame la ropa si quieres...

Aoshi sin perder su tiempo rápidamente acató la "orden", y una vez ambos desnudos Sanosuke retornó a su antigua labor de proporcionarle placer a su Koi, pero ésta vez planeó ir más lejos. Se acercó a su rostro, a unos escasos milímetros de los labios del ninja y ahí esperó pacientemente alguna acción de Aoshi. Aoshi alterado por la quietud de su novio besó desesperadamente los labios de Sanosuke, y éste ahondó el contacto labial con mucha pasión, Luego comenzó a descender, besó la cremosa piel del cuello, los pezones, las costillas, hasta que llegó al estómago, donde se topó con un pequeño ombligo, donde introdujo su lengua ocasionando en su dueño un placer que lo hizo soltar otro sonoro gemido:

- Despertarás a medio Japón - dijo el peleador con burla, para luego reanudar su trabajo

- ... qué.... importa aaahhhh

Aoshi estaba al borde de perder el control, nunca imaginó poder sentír tanto placer junto, pero lo que él no sabía ni se imaginaba, era que aún faltaba lo mejor. Sanosuke prosiguió con su descenso, y al llegar a la entrepierna de su amado tomó ésta entre sus manos y comenzó a masajearla suavemente. Aoshi dejó de respirar por un momento al sentir tan placentera presión en su miembro, y al llevar aire a sus pulmones otra vez lo hizo solamente para lanzar un alto gemido mezclado con un jadeo y un grito ahogado de placer. Sanosuke al ver la reacción de su novio ante sus intimas caricias, quizo acrecentar más la pasión del ninja, llevándose el miembro erecto de éste a la boca, primero la punta, la cual apretó un poquito entre la lengua y el paladar, y luego lamió toda su longitud, excitándose él mismo con los gemidos y gritos de Aoshi. Se apartó un poco para ver la expresión en el rostro del ninja, maravillándose del paisaje, el ex Okashira se contorneaba sensualmente aferrándose del futón, el placer era demaciado para él.

- Te amo Aoshi...

Aoshi solo contestó con un imperceptible " yo también" y lloriqueó un poquito al no tener más esa deliciosa boca torturándolo. Sanosuke rió al ver el gracioso puchero de su novio, se veía tan deseable con los ojos entrecerrados, el cuerpo sudado y las mejillas rojas, volvió a meterse el sexo de éste a la boca, empezando así un rítmico movimirnto de arriba hacia abajo, provocando en Aoshi una oleada de placer enorme, era tanta la felicidad y tanto el placer que el ex Okashira se agarró fuertemente del futón y tiró de él con desespero mientras su novio se dedicaba a llevarlo a las puertas del cielo. Sanosuke sentía crecer e hincharse el sexo de Aoshi en su boca, supo que estaba próximo de llegar el climax, pero él no quería eso, no quería que acabara ya, por eso se apartó de donde estaba, y ante la mirada de reproche de Aoshi, el luchador solo atinó a sonreir y comenzó a subir besando cuanta piel encontrara a su paso.

-... no quiero que acabes ya... aún falta un poco...

El sensual susurro de Sanosuke hizo a Aoshi entender el porqué se había detenido, y a la vez hizo que se le erizaran todos los vellos y un gran estremecimiento le recorriera la columna. El luchador besó una vez más esos labios que tanto le gustaban, introdujo su lengua en esa boca que lo recibía con amor y cuando el aire se hizo necesario se separaron; y ahí fué cuando Aoshi se dió cuenta que tenía las piernas abiertas y flexionadas, y a Sanosuke acostado entre ellas. El castaño acercó dos de sus dedos de la mano izquierda a la boca de Aoshi quien lo miraba conundido, acarició suavemente los labios sonrosados y al ver una pequeña abertura entre ellos metió los dedos en esa boca tan dulce y apasionada. Aoshi no entendía todavía, hasta que Sanosuke le explico que era para lubricar. Al saber la razon de por qué su novio había metido dos de sus dedos en su boca, el ninja agarró la mano de éste y comenzó a lamer los dedos con esmero, a sabiendas de que también con ésas pequeñas caricias podía devolverle una milésima parte de todo el placer que Sano le había dado esa tarde. Y Sanosuke reanudo sus caricias en el cuerpo debajo de él, ésta vez fue distinto, comenzó desde abajo, mientras una de sus manos era sostenida por Aoshi quien se esmeraba sobremanera en untar sus dedos en saliva, la otra se centró en las piernas del ex okashira que se encontraban flexionadas, una a cada uno de sus costados. Acarició la que estaba a su derecha, comenzando desde la pantorrilla, subiendo por el muslo, dando pequeños masajes; acariciar esas piernas era hermoso, Aoshi a pesar de ser hombre y adulto era casi lampiño, sus piernas eran suaves al tacto, una verdadera delicia. A la mano le acompañó la boca del luchador, succionando y mordiendo el muslo; Sanosuke levantó un poco más la pierna de Aoshi para quedar así en una posición más cómoda, y continuó subiendo por ella, ésta vez por adentro, hasta llegar a la ingle, donde dió aldunas lamidas que hicieron a Aoshi gemir fuertemente. El castaño notó que sus dedos ya casi estaban lo suficientemente mojados, así que comenzó a trabajar en la zona que luego sería motivo de placer de ambos. Así que con la mano que le quedaba libre (la otra aún seguia en la boca de Aoshi) primero jugó un poquito con los testículos del ninja, haciendo que de la punta del miembro de éste se derramaran unas gotitas del líquido blanquecino, las cuales retiró con una rápida lamida, para luego buscar un poco más abajo en esa zona hasta encontrar la pequeña y apretada entrada de Aoshi. Sanosuke masajeó suavemente las nalgas de su novio para hacer disminuir la tensión y el nerviosismo que notó empezaban a invadir a Aoshi, él era virgen aún, lo sabía, y le encantaba. Sacó los dedos mojados de la boca de su novio y los cambió por sus labios, su lengua se adentró una vez más para distraer un poco la atención del ninja, y aprovechó que éste se concentró en pasar sus brazos por su cuello, para introducir un dedo en la deliciosa entrada. Aoshi al principio se tensó notablemente, pero luego se relajó y continuó concentrándose en el beso del que era presa, al tiempo que ese dedo comenzaba a moverse dentro de él, estimulándolo. Pronto los gemidos por parte de Aoshi se empezaron a oir, cada vez más fuertes, y aumentaron al tener dentro un dedo más. Sanosuke también se estaba excitando mucho con la vista que tenía en frente, Aoshi excitado y gimiendo de placer por él, y solo por él... Ese pensamiento lo llevó a meter un dedo más, estirando esa cueva virginal que desde ya la sentía caliente y los deseos de tomar a su novio se volvieron insoportables, así que cuando comprobó que Aoshi ya estaba listo, y mirándolo fijamente a los ojos, le preguntó:

- ... no aguanto más... ¿estás listo?...

- Si, hazlo de una vez... yo tampoco aguanto más...

Oir esas palabras dichas con esa sensualidad tan grande que Aoshi tenía guardada provocaron en Sanosuke que las ganas de hacerle el amor le fueran insoportables, así que sacando los dedos de dentro del ninja se lubrico su miembro palpitante con un poco del semen que se le había escapado de oir los excitantes gemidos de su novio, y pidiendo el permiso ya concedido con la mirada una vez más, se posicionó entre las piernas flexionadas de Aoshi, rozando solo la punta de su miembro erecto en la entrada caliente del ninja, haciendo que las ganas de ambos fueran insoportables ya, pero Sanosuke sabía que si hacía las cosas pensando solamente en su propio placer lastimaría al objeto de su afecto, y eso era lo que menos quería que pasara; así pues se acercó al rostro de Aoshi para besarlo y distraerlo, mientras con sumo cuidado introducía tan solo la punta de su sexo en ese aro que desde ya le provocaba un placer indescriptible. El ex Okashira frunció sus facciones en un notorio gesto de dolor, lo que hizo a Sanosuke parar en seco, lo había lastimado...

- Amor... ¿te duele mucho?, ¿quieres que me detenga?

- ... yo... te mataré si te detienes... continua, despacio por favor

Si lo único que conocias de Aoshi era ese porte orgulloso y arrogante que mostraba siempre, al verlo ahora lo desconocerías totalmente. Él estaba todo colorado, con el sonrojo más grande provocado por el calor del ambiente y el placer recibido, el cuerpo sudado y desnudo, el rostro con la expresión de placer más grande del mundo, era otro Aoshi, el verdadero, no el líder Oniwabanshu serio y frío, no el asesino psicópata sediento de venganza, sino el verdadero Aoshi Shinomori, un hombre con sentimientos y una tremenda necesidad de amar y ser amado, justo como en ese momento estaba sucediendo; Aoshi amaba a Sanosuke, y éste lo amaba a él. El castaño al ver que a su novio al parecer ya no le dolía tanto sentir su miembro en su virginal entrada, comenzó a adentrarse más, lentamente, y un gran estremecimiento los recorrió a ambos, signo de que su unión había comenzado. Cuando el espacio entre las nalgas de Aoshi y las caderas de Sanosuke fue nulo, éste se detuvo. Dejó que el ninja se sintiera cómodo con su invasión, amoldándose a su miembro, uniéndose más, y cuando el ex Okashira ya se sintió listo, en un sensual susurro, le hizo saber a su novio:

- Estoy listo

Sanosuke asintió, agarró las manos de Aoshi entrelazando los dedos con los suyos, y luego de un susurrado "te amo" al oido del ninja dio la primera envestida. Fue lenta, un poco dolorosa para el ninja, por lo cual el luchador se detuvo preocupado, jamás se lo perdonaría si en un arrebato de pasión lastimaba al hombre que amaba. Aoshi se quedó sin aire luego de esa primera embestida, abrió la boca para decir algo, pero ni una sola sílaba salió de ella, hasta que luego de unos largos minutos, finalmente declaró

- ... de nuevo...., hazlo de nuevo

Esas palabras calmaron a Sanosuke, él estaba asustado, temía el haberle hecho daño a Aoshi, pero si éste le pedía que continuara de esa forma tan sexy... no podía desilusionarlo... Así que comenzó a moverse, lenta y suavemente. Con cada nueva estocada gemidos iban saliendo de boca de ambos, hasta que Aoshi abrazó las caderas de su novio con sus piernas, aferrándose más de sus manos aún entrelazadas. Fue ahí que Sanosuke comenzó a aumentar la velocidad y la fuerza de sus movimientos, enterrandose más en el interior de su amante, provocando en ambos, un mar de sensaciones donde predominaban la pasión, la felicidad y el placer, que mezclados con los gemidos de ambos conformaban el amor presente en esa habitación. Aoshi nunca imaginó el poder sentir tanto placer junto, sentía a Sanosuke dentro de él golpenado fuerte en su interior, y la sensación era lo máximo, se sentía en el paraíso, no había preocupaciones, perjuicios, nada que lo atormentara, solo él y Sano, su novio, su amor. Un beso llegó , un beso diferente a pesar de todo. Estaba cargado de deseo, amor, pasión, entrega. Sanosuke introdujo su lengua en esa boca amada que una vez más le permitía el paso sin oponerse, llenándose con su sabor, memorizando cada recobeco anteriormente explorado. Aoshi respondió al beso con esmero, soltando las manos de su novio para pasar los brazos por el cuello de éste, atrayéndolo a su cuerpo, para hacer que el contacto piel con piel fuera un factor más que ayudara a hacer ese primer encuentro inolvidable. Cuando el ninja creyó que más placer no era posible, se sintió desfallecer al sentir que Sanosuke había comenzado a masturbar su miembro ya olvidado al mismo ritmo de sus propias embestidas, lanzó un gemido, casi grito que estaba seguro sería capaz de despertar a todo el Aoiya

- AAAAAHHHHHH, ¡¡SANO!! e... es.... aahhhhh, mmmmhhh

- aaaahhhhhh, ssiiiiiii..., Aoshi..... ya, casi....... AAANNNNNNNHHHHH

El clímax estaba cerca, ambos lo sentían. Su unión en ese momento era tal que eran capaces de sentir lo mismo que el otro, y tan así era que un momento antes de derramar sus semillas, Aoshi en el estómago de ambos y Sanosuke dentro de éste, los dos gritaron juntos y perfectamente sincronizados

- ¡¡¡¡¡AAAAHHHH!!!!! AOSHI TE AMOOOOOOHHHHH!

- mmmmmm!!! AAAAAAHHHHHHH!!! SANOSUKE!!!!!!!!

Sanosuke calló desvanecido sobre Aoshi, apoyando la mejilla izquierda en el pecho de éste, agitado, respirando con dificultad; al igual que a su novio, el esfuerzo lo había dejado agotado. Intentaba hablar, pero aún el aire en sus pulmones no era suficiente. El castaño continuaba dentro del ninja, que se sentía a gusto así, estando todavía unido a Sanosuke; esperaban que sus respiraciones se normalizaran, y en la espera, caricias habían empezado a circular por el cuerpo de ambos. Finalmente, Sanosuke se retiró del interior de Aoshi con suavidad y acostándose él de espaldasen el futón, acomodó a su amor sobre su amplio pecho, y una vez que consiguio respirar con normalidad, se animó a preguntar:

- ¿Y?, ¿te gustó?, ¿qué te pareció?

- Bien

Un gesto burlón apareció por primera vez en mucho tiempo en el rostro ahora sereno de Aoshi, estaba bromeando, y Sanosuke le siguió el juego

- ¡¡¿Bien!!?, ¿es todo lo que piensas decirme? ¿qué, acaso ya haz tenido a otros y no me lo haz dicho?

- ¡No seas payaso!... eres el primero...

- ... Y espero ser el último...

- Lo serás

Aoshi se irguió un poquito y alcanzó la boca de Sanosuke para besarla, un beso cansado, pero no por eso menos amoroso. Volvió a recostarse en el amplio pecho del luchador quien tapó a ambos con la manta del futón, y luego de algunos minutitos de charla tonta y sin mucho sentido, el sueño comenzó a picarle a ambos, cayendo juntos y abrazados en los brazos de morfeo.

Era un atardecer calmado, a pesar de que en esa casa mil y una cosas habían pasado en tan dolo dos días. Una persona sentada en el afeizar del Aoiya tomaba el té tranquilamente..., aunque dentro de él un mar de emociones no lo dejaban pensar con claridad. Había escuchado todo el alboroto que esos dos habían armado, ese Aoshi tan calladito que parecía... era muy escandaloso, Y Sanosuke... al parecer le daba muchos motivos para gritar... Una lágrima cayó de los ojos de Okina, secundada por otra. La primera era de felicidad, al fin Aoshi había encontrado el amor, la vida le daba una oportunidad de ser feliz al fin, y él la había tomado... pero la segunda lágrima derramada era de tristeza... pobre Misao... ella tal vez no estaría muy contenta con la desición de Aoshi de ser feliz junto a Sanosuke...

Fin del tercer capítulo

Notas de la autora: Konnichiwa!! sessha wa Misao, ahora también Srta. Misao Maxwell. ¿Cómo andan, tanto tiempo?........... eeeeeestooooooo........ chics........ ¿para qué tantos cuchillos? ¡¡LO SÉ!!, ¡¡LO SÉ!!... me demoré mucho tiempo... ¡¡¡Y LO SIENTO!!!, pero todo tiene una explicación. No creo que exista ni una sola persona que no halla tenido alguna vez algun problema con su computadora, y eso sumado a que mi compu es LA MIERDA MÁS GRANDE DEL MUNDO... se podría decir que el capítulo n° 3 de éste fic que yo ya casi lo tenía terminado se me borró, y lo tuve que escribir otra vez... Pero díganme ¿no valió la pena la espera?... ¿les gustó el capítulo?. No se pierdan el que viene, no sé cuando podré actualizar... ¡pero trataré de apurarme! Entiendan, estoy escribiendo otros cinco fics junto con éste, no es fácil tratar de actualizar regularmente seis fanfics... ¿no les parece? Por favor, les suplico que me manden sus comentarios o me dejen un review, como prefieran, no les cuesta nada ¡onegai! Ya de paso quería invitarles a leer mis otras historias, que en ffn.net podrán encontrar: De Dragon ball Z: "Por accidente" De Gundam Wing: "Chicos Bonitos" De Weiss Kreuz: "Detrás del telón" De Saint Seiya: "Los idilios de Cupido" También está en proceso otro fic de Rurouni llamado "Te lo prometo", que está especialmente dedicado a Nebre-chan, quien fue la primera chica que me escribió diciéndome que éste fic le gustaba, y decidí premiarla concediéndole un favor, y ella me pidió que le escribiera un fic, bueno Nebre querida, si éstas leyendo ésto, "Te lo prometo" ya está en proceso... Así que, ya ven, escribirme viene con beneficios, así que... ¿qué esperan? También hay por allí otras dos historias mias que no son yaoi, ambas de RK, "En busca de la gran verdad" y "7 de Julio", si las quieren leer... Espero publicar también mis fics Yaoi en 'Yaoi Kalos', y en 'Itzukiai ZonaYaoi', dos de las mejores páginas de fics que he visto, se las recomiendo

Ahora; Review contest

Kathy Sagara: No te gusta el Yaoi o no te gusta la pareja?. Si el problema es la pareja, no leas el lemon, es muy explícito. Gracias por tus comentarios, me alegro que te guste como va el fic. No te preocupes, lo continuaré, aquí tienes un nuevo capítulo, disfrútalo y no te pierdas el próximo, habrá lucha y un poco de sangre (qué esperas? un fic de RK sin acción.... no creo, no...)

Saben?, me siento importante contestando mi primer review, así que ¡¡VAMOS!!, REVIEWS!!, no les cuenta nada, ¡¡¡¡¡¡ONEGAI!!!!!!