Querida Hija

Capítulo 2

"Querida Hotaru..."

-o-

*Dentro de la casa...

Hotaru: Papi, estoy muy contenta de regresar a la casa! – decía con una sonrisa de oreja a oreja –

Sr. Tomoe: A mi también me alegra que estés de regreso hija, es mas, te tengo una gran sorpresa! – decía el Sr. Tomoe mientras cargaba a su hija entre sus brazos y empezaba a subir las escaleras de la casa, que llevaban al segundo piso –

Hotaru: Que es papá!? – decía fuerte y efusivamente la pequeña chica mientras se aferraba al cuello de su papá –

Sr. Tomoe: - con una gran sonrisa y los ojos cerrados – Pronto lo sabrás mi pequeña! No seas impaciente...

-o-

La casa de los Tomoe, una vez mas estaba llena de alegría, por algunos momentos parecía que la Keiko, la madre de Hotaru, había regresado y había vuelto a crear el vínculo amoroso en la familia.

Al llegar a la parte superior, Hotaru estaba más que emocionada por ver la sorpresa que su papá le había preparado, y que con tantas ansias deseaba ver. Tal vez sería algún juguete nuevo, un accesorio...no sabía, pero estaba segura que lo que fuese...le gustaría mucho.

---Hotaru...- decía el profesor Tomoe – el regalo que te tengo preparado, no es un juego de moda, ni alguna prenda de ropa elegante...mi regalo...que espero que te guste es un secreto...un secreto que tu mamá me dijo que te diera después de su muerte, pero...por todos los problemas que hubo, jamás me fue posible decirte...---

Hotaru sentía que su corazón latía a gran velocidad, el simple hecho de que su papá mencionara a su madre, le daba una mezcla entre tristeza y alegría. La madre de Hotaru había muerto cuando ella era muy pequeña, reduciendo las oportunidades de compartir muchos momentos...lo único que Hotaru recordaba de su madre era su propio pasatiempo, coleccionar lámparas, ya que ella misma se lo había inculcado.

*Flash back*

Keiko se encontraba en la sala abrazada con una muy pequeña Hotaru mientras veían una lámpara pequeña y exótica que el Sr. Tomoe había comprado en un bazar Hindú que había venido a exponer sus artes a la ciudad de Juuban.

---Mira Hotaru...- decía Keiko mientras que con su mano libre señalaba la lámpara que estaba postrada a unos centímetros de ella y Hotaru en una mesita de noche  - esa es una lámpara muy extraña, y siempre que me siento algo triste o sola, me pongo a verla, y siento como su cálida luz, me hace recordar que tengo a mi pequeña y dulce hija y a una pareja que me quiere...por eso, es que las colecciono, por que la compañía y luz que brinda una lámpara siempre nos hace recordar que no estamos solos en este mundo...---

Mientras su madre hablaba, Hotaru, con sus grandes ojos color púrpura, se quedaba viendo fijamente a la lámpara. Veía la cálida luz que ésta brindaba, y al sentirse tan cómoda y segura en los brazos de su madre, solo atinó a dar una pequeña risa, a voltear a ver con ternura hacia su madre y a quedarse dormida...Keiko, al ver que su hija también gustaba de las lámparas se sintió muy feliz, y para el próximo cumpleaños de Hotaru, ella le regalaría su primera lámpara, esa lámpara con la que empezó su colección. Solo que ella no sabía que jamás podría llegar a esa fecha.....

*Fin del Flash Back*

---Mamá...- pensó tristemente Hotaru en sus interiores –

---Hotaru...- decía el profesor Tomoe – te sientes bien hija??? ---

Al quedarse pensando en su madre, Hotaru no se dio cuenta de que su papá la había llevado a su cuarto, bajado de su espalda y que además la había puesto en su cama; él se preocupó un momento al verla ida, pero su preocupación desapareció a los pocos momentos que ella respondió a su llamado.

---Lo lamento papá...- decía Hotaru mientras esbozaba una sonrisa – es que me quedé pensando en lo que dijiste.---

---Mi pequeña...-  decía mientras empezaba a recorrer el cuarto – como sabrás...ésta fue la casa donde tu mamá vivió su infancia. Como regalo de bodas, sus padres...tus abuelos, nos la regalaron, ya que pensaron que necesitábamos un lugar apartado de la contaminación y bullicios de la gran ciudad, y que además, tú, estando tan pequeña, serías beneficiada con el aire puro de una casa de campo. Se hicieron grandes remodelaciones, y tu madre, mi querida Keiko, decidió que tu cuarto fuera el mismo que ella tuvo en su infancia. Mientras se construía, tu mamá, todas las noches venía aquí, admiraba el lugar, y se ponía a pensar como se vería ya terminado y tu en él.---

Hotaru sentía las lágrimas a flor de piel, durante mucho tiempo, estuvo cerca de su madre, aún cuando ella ya no estuviese, por lo que en un súbito recuerdo, Hotaru no resistió y empezó a sollozar para después soltar lágrimas de tristeza y alegría a la vez.

---Tu madre me dijo...- decía mientras se sentaba junto a Hotaru en la cama, y le brindaba un abrazo, postrando su cabeza sobre la de ella – que todas las noches al venir aquí, ella escribía en su diario, me dijo, que ese diario, lo tenía desde antes de que nosotros nos casáramos, y que lo seguía escribiendo, aún después de que yo obtuve la oportunidad de hacer mis laboratorios, y de tenerte a ti. Por lo que decidí buscarlo, pero – decía ahora algo decepcionado – no lo pude encontrar...creo que tu mamá lo escondió muy bien...quería que cuando tu llegaras, pudieras verlo, y conocer algo mas acerca de ella...para que supieras cuanto deseaba ella tenerte...---

---No te preocupes papá – decía Hotaru mientras limpiaba con su brazo derecho las lágrimas de su cara – el saber que este fue su cuarto, ha sido el mejor regalo que me pudiste dar, porque ahora se que no estoy tan sola, y que además, comparto algo, que ella desde tiempo atrás quiso que tuviera.---

La noche cobijó rápidamente la casa de campo de los Tomoe, Hotaru y su padre no se dieron cuenta, ya que se quedaron platicando de largo toda la tarde, así que después de alistarse, los dos bajaron y se hicieron una rica merienda, para después planear las actividades del día siguiente, y posteriormente darse una ducha y descansar...

Pequeña...- decía el profesor Tomoe – de seguro has de estar cansada por el viaje, y tantas emociones el día de hoy. Que te parece si te das una refrescante ducha, y después voy a tu cuarto y te arropo para que descanses.---

---Sí!!!

Hotaru subió efusivamente las escaleras, y después de una no muy larga y refrescante ducha, se encontraba lista para que su padre la arropara en la cama....

---Listo...- decía el profesor Tomoe mientras se agachaba para darle un beso de buenas noches a su pequeña bebé – descansa mi pequeña...mañana será un día muy divertido y hay que aprovecharlo al máximo!!! ^---^---

---Si papá!!! – contestaba Hotaru –

---Hasta mañana mi pequeña – decía mientras apagaba la luz de la alcoba y cerraba la puerta –

---Hasta mañana papá...- se despedía la adormilada Hotaru –

Hotaru, a pesar de que estaba algo cansada, decidió levantarse a acomodar su ropa en el gran clóset de cedro que tenía el cuarto, éste se encontraba incorporado a la pared, por lo que no sobresalía, y lo cual lo hacía aun un poco mas espacioso. Hotaru tomó su maleta y empezó a colocar sus cosas en los mismos lugares de siempre, al parecer, su papá le había agregado un poco mas de espacio al clóset, un espacio para su calzado. Al ver este espacio, Hotaru sacó sus sandalias, sus zapatillas formales, sus tennis y también sus pantuflas...los colocó ordenadamente, pero al momento de levantarse de su posición de agachada, se golpeo fuertemente con el cajón, y sin darse cuenta, una pequeña parte de la pared se desprendió, mostrando una pequeña puerta de metal ya corroído por el tiempo y la humedad.

El asombro de Hotaru, la hizo olvidar el dolor. Su curiosidad se acrecentó al recordar, que su padre le había comentado que su madre había guardado un diario, pero que a pesar de sus búsquedas no lo encontró. Hotaru se puso a pensar, y llegó a la conclusión, que a la hora de hacer el compartimiento del calzado cubrió la pared que contenía en su interior la pequeña puerta, y que ella, al darse tremendo golpe, hizo que las vibraciones rompieran la reciente construcción de su padre. Hotaru sentía un gran nerviosismo; estaba segura que en ese compartimiento se encontraba el diario que su madre estuvo escribiendo...y así...con su mano temblorosa...se acerco para abrir aquella puerta....

7 cm..."Podré recordarte mami" – decía con sus ojos llenos de lágrimas  -

4 cm..."Sabré mas de ti..." – ahora ya con lágrimas en su cara –

2cm....Su mano ya estaba en la pequeña saliente que abría la pequeña puerta....

Al hacerlo, una pequeña nube de polvo se hizo presente en el clóset de la pequeña, notablemente se veía que no había sido abierto en años...y después de pocos segundos...envuelto en una bolsa de plástico transparente...Hotaru vislumbró el diario de su madre...no se contuvo mas, lo saco del compartimiento y lo abrazó hacia si misma, dando rienda suelta a sus lágrimas ahora....

Después de unos minutos de una pequeña alegría cubierta en lágrimas, Hotaru regreso a su cama, tomó con sumo cuidado la bolsa y sacó de ésta el diario...se veía como nuevo...estaba intacto, por unos instantes Hotaru pudo jurar que olió el perfume de su madre proveniente del diario...

Hotaru se pasó toda la noche leyendo el diario...el tiempo se congeló para ella, y empezó su lectura. Vivió cada momento que su madre escribió ahí...desde su primer beso...hasta el día en que se enteró de que estaba esperándola a ella...y así...pasada la media noche Hotaru llegó a la hoja final del diario...

"A mi Querida Hotaru...

Mi pequeña...si estás leyendo esto, es porque ya no me encuentro contigo...pero eso no significa que no esté contigo en alma.

Hija...desde el momento en que el doctor me dijo que tendría una bebé, mis días se llenaron de dicha, y sentí que los cielos

me habían bendecido con un pequeño ángel.

Tu padre, mi querido Souichi, se encontraba tan contento como yo, y como de seguro te comentó, empezamos los arreglos de

la casa, por lo que cada noche, venía aquí, a éste cuarto a escribir lo que sucedía en mis días, en esos días que ya formabas

parte de mi ser...e imaginaba como se vería mi habitación, ahora tuya...ya decorada con todas las cosas que tu padre y yo

compramos.

Hotaru...me da mucha tristeza el no poder estar contigo compartiendo todas tus vivencias...se que tal vez te has de sentir

sola pero quiero que sepas que del lugar donde esté, te estaré cuidando siempre...mis brazos no estarán ahí para cuando

tengas tu primer beso...pero esta habitación te brindará la misma calidez de mis abrazos...y aunque no esté yo ahí para

tus tristezas...las plegarias de mi alma por ti...te brindaran confort y seguridad...para que siempre sepas que tu madre

te quiere...y se acongoja al saber que no podrá compartir todo con su querida hija....

Hasta siempre mi querida Hotaru...mi querida hija....Tu madre que te quiere....

Keiko Tomoe "

Hotaru terminó de leer la última hoja, y no se pudo contener...las lágrimas que ya se secaban por los sollozos de hace algunos minutos, volvieron a reaparecer cuando Hotaru, soltó toda esa tristeza y melancolía que guardaba en su ser desde hace mucho al no poder estar con su madre y no tenerla en los momentos que se sintió tan sola, y que su padre no pudo recurrir por su trabajo...

---Mamá...- decía Hotaru entre sollozos y una voz baja –

Así...entre el silencio de su tristeza y sus sollozos...lentamente...junto con la cálida luz de luna que entraba por la ventan Hotaru fue cerrando los ojos, mientras que con todas su fuerzas abrazaba el diario de su madre...asimilando que tal vez...la pudiera soñar...soñar con los momentos que nunca pudieron ser....

    :.::..::..fIN..::..::.:

Éste fic, la verdad es muy triste, y a la vez muy corto, pero creo que nos ayuda a conocer un poco mas a acerca de esta melancólica y triste guerrera...y comprender un poco mas su soledad y depresión...Los nombres de Keiko y Souichi Tomoe son los originales del Manga. Y como muchas veces dicen...Los personajes de Sailor Moon no me pertenecen...lo único en mi poderes la trama de la historia...=)

El diario de la Madre de Hotaru, no acaba ahí...todavía faltan 3 hojas....si desean saber el verdadero final de ésta historia díganmelo a través de sus reviews...ya que les prometo que el verdadero final es aún mas triste...pero necesario para conocer el trasfondo de ésta sailor...La Sailor de la Destrucción...

Un gran abrazo a Yavanna, Achan, selene y griverlion por su apoyo con este fic....Dedicado a ustedes amigos!!! ^---^

Atte.

Kero-chan