LA MALDAD Y LA SOLEDAD TIENEN UNA RAZON
EL RELATO DE MÁXIMO
Afrodita llego a donde MM se encontraba, era un lugar en las afueras del santuario, cerca de un bosque, ahí entre los limites y los frondosos árboles una cruz de buen tamaño con nombres marcados se encontraba, Máximo había puesto las rosas que eran de color blanco alrededor de al tumba a excepción de dos que estaban unidas, una era una rosa florecida y la otra un capullo, esas flores las puso en el centro, lo encontraron frente a la tumba hablando, como las personas suelen hacerlo a sabiendas o creyendo que sus seres amados los escuchaban.
- ... no espero los campos Eliseos, lo se bien, sin embargo no puedo soportar... se que no me creen, Alexander no lo hace, pero las vi, estuve su lado, y así es difícil no desear la muerte... cumplí mi deber hacia mi diosa, y recibí mi recompensa de encontrarlas, pero ahora me alejan de ustedes... Fides, no me abandones ahora, o me volveré loco al solo pensar que mire a Fiona, tan grande como debería de encontrarse en este mundo, sus rizos, sus ojos y su voz llamándome, dime que no lo soñé y que Fiona es así, que esta bien, y feliz... no soporto al idea de que esas imágenes sean producto de mi imaginación. Las amo... entiéndanlo, no tengo nada que me retenga a este mundo, no creo en la justicia, ya que si fuera así nadie las habría arrebatado de mi lado; se que todos dicen que soy el psicópata de los caballeros dorados y lo soy, nada en este mundo me importa, si lo único que he amado me fue arrebatado... Alexander-
dijo levantándose al sentir el cosmos de su amigo, pero voleo violentamente al sentir a Dokho y a Kanon- ¿Qué hacen ellos aquí? –dijo furioso
- presentar respetos a la familia de un compañero –dijo Kanon
- ja... ¿y los otros metiches para cuando?
- no vendrán, solo nosotros –contesto Kanon
- ¿Por qué?
- por que tuvimos situaciones similares a la tuya, y estamos más cerca de entender tu dolor- contesto Dokho- sabemos por lo que pasas aunque nuestras historias solo las conozcamos nosotros mismos
- bien... seria bueno saber las verdades de cada uno... Alexander quitate ese estupido maquillaje, sabes que odio vengas como afeminado cuando no lo eres
Afrodita se quito el maquillaje y se acerco a la tumba, el santo de Phycis se sujeto el cabello con un lazo, y sin maquillaje se veía sumamente apuesto, su mirada era seria y no se parecía en nada al afeminado andrógeno que todos conocían, en cambio MM se veía complacido del aspecto de su amigo, el cual hablo para las ocupantes de la tumba con una voz sumamente varonil, cosa que ni Kanon, ni Dokho a excepción de MM habían escuchado.
- Fides, necesito tu ayuda para controlar a esta cabeza de chorlito, o si no tendré que enterrarlo en esta tumba, dile que se controle y pronto llegara su momento, aunque con su actitud alguien lo aniquilara en el santuario, no sabes cuanto te necesito para que sea mas normal... jeje, espero no te moleste como tengo largo el cabello, me dijiste que era mas apuesto con cabello corto, y que dejara de ser tímido, pero no puedo... perdóname, dale besos a mi princesa por favor... las quiero y por ustedes sigo soportando al inútil de Máximo, y Fides espero que en el otro mundo me digas al fin que demonios el viste...
MM se acerco a sus compañeros, los miro calmado, su rostro era extraño ante ellos, no mostraba malicia o algo que indicara que era Mascara Mortal de la casa de cáncer. Los dos caballeros lo miraron de forma calmada.
- siempre me voy de parranda para calmarme en este día, pero Alexander no me deja en paz si vamos los tres tendría menos oportunidad, además deseo escuchar sus historias, vamos al pueblo a comprar algo de alcohol, ya lo necesito
- vamos –dijo Kanon
- Máximo ¿Cuándo entenderás? –MM se voltea a mirarlo- ya se, ya se, el alcohol no te ayuda a olvidar tan solo te calmara, en tanto no te pongas violento, esta bien.
La tarde callo y Afrodita los convenció de que al menos fueran a comer algo, después de eso se les hizo mas tarde ya que el santo de Phycis insistía en distraerlos, de momento los tres se encontraban serios, metidos en sus propios recuerdos, y hasta que empezó a notarse que la noche llegaría pronto Afrodita les permitió comprar las bebidas.
- ¿A dónde iremos? –dijo Afro
- yo tengo una idea –contesto Kanon
Así pronto se encontraron frente al mar, era una parte de la playa muy solitaria, pero muy hermosa, había una vista maravillosa del atardecer y Kanon tenia el rostro mas triste que nunca, Dokho hizo una fogata mientras el sol se ocultaba; miraron como el sol desapareció y todos se sentaron alrededor de la fogata, tomaron cada quien una botella (excepto Afrodita) y la abrieron y bebieron.
- ¡SALUD! –gritaron los tres mientras Alexander bebía de una botella de agua
- comienza MM –dijo Kanon
- bien... comenzare –toma del licor-... Afro ya les explico la situación con mi familia, a diferencia de todos en el santuario yo no era huérfano, pero para Shura tenia el poder para aspirar a la armadura de cáncer... mi madre murió cuando yo tenia siete años, un poco antes de venir a Grecia, desde los cinco estuve comprometido con Fides, y por decisión de mi abuelo, yo a su muerte seria directamente el líder de mi familia la cual es muy rica; aceptaron que marchara para convertirme en una persona fuerte, pero desde antes de eso, yo ya tenia que ganarme todo, no era un niño ricio normal, mi abuelo era estricto, quería que fuera de fuerte de carácter... pero pasaron los años y desarrolle una personalidad muy singular, disfrute la muerte como ninguno de ustedes lo haría, creo vine por mi estrella, sin embargo que sea un maniático como me dicen, no significa que no tenga sentimientos... Ella llego después de convertirme en el santo de la cuarta casa...
- ... una cosa –Kanon interrumpiéndolo- queremos detalles, todo como te enamoraste y al primera vez... bueno ya sabes... -Kanon tomo de la botella, Dokho y MM sonrieron
- ... como subió Fides las casas de Aries, Tauro y géminis es un misterio, pero ella llego en busca de ayuda y yo me negué, esa noche me fui a la casa de Phycis esperando ella se largara, pero cuando volví en la madrugada, ella se encontraba ahí, y el traidor de Alexander la acostó en mi cama y dormí esa noche en el piso... pero ella se levanto y me tapo con la manta de la cama; al día siguiente me preparo el desayuno, uno muy decente que no he comino en años –Kanon rió con amargura- pero fui un desgraciado y le dije que se largara, ella... salio corriendo pero Afro le detuvo antes de llegar a géminis y le platico todo a el –su mirada se llena de rabia- cuando renuncie a mi familia mi primo Andreas tomo mi lugar y al parecer también a mi prometida... ella se escapo por que el bastardo quiso abusar de ella, y yo era el único en el cual podría confiar de que no la devolvería a la casa, ni la juzgarla mal. Así me lo explico este –señalando a Afrodita- y le creí, así que la acepte en mi casa. Le dije que una corta temporada, mas pasaron los meses y yo me acostumbraba a su presencia, disfrutaba estar con ella, las platicas y ver que no era una mujer inútil como lo eran los demás miembros de la familia, Fides cocinaba, limpiaba, hacia de todo, cosa que en la casa de Italia solo sabían hacerlo mi madre y abuela... Fides fue criada por esta ultima, la única mujer después de mi madre a la que respete; Fides era encantadora, tierna, no se como describirla... cuando volvía de mis entrenamientos ella solía curarme las heridas, y yo me perdía en sus ojos tan bellos. Una vez no me contuve las ganas y tome su rostro para besarla, ella lo acepto correspondiéndome, pero yo no estaba preparado para eso, esperaba me rechazara, pero no lo hizo. Poco después me exigió que durmiera en la cama con ella o se bajaría a dormir conmigo, no le creí pero lo cumplió así que después de una discusión que ella gano compartí la cama... jamás me negué por pena o por ser caballero, lo hice por que la deseaba, era mas hermosa de lo que en esa época recordaba y al estar con ella no me detendría pero así paso; fue una noche de verano, hacia un calor insoportable, y ella se movió como loca, estaba por tirarla de la cama, pues ya bromeábamos y jugábamos, pero cuando me dispuse a empujarla ella se giro y mi mano quedo sobre su pecho –Kanon y Dokho rieron con malicia- me excite demasiado, era suave y en lugar de quitar mi mano sujete su seno con mas firmeza, ella se quedo viéndome a los ojos mientras yo abría su camisón, desabroche cada botón lentamente mientras me consumía por dentro, al abrir la estorbosa tela, su piel blanca relució bastante, sus pechos no eran pequeños y sus pezones eran bronceados, sin pedir permiso los hice míos mientras ella solo gimió, y yo mordisque sus pezones excitados, subí hasta encontrar sus labios que bese con violencia, pero ella me abrazo y revolvió mi cabello... ustedes me conocen, cada que vamos de parranda me quitan a las mujeres por ser tan agresivo, siempre fui así y cabe resaltar que perdí mi virginidad a los trece –Kanon y Dokho se miran incrédulos- pregúntenle a Afro... bueno, recuerdo que tenia mucho sin coger, así que prácticamente desgarre sus pantaletas y toque su intimidad, esa noche yo solo tenia puesto el pantalón del entrenamiento el cual baje, tome mi miembro y entre en ella sin mas reparos, en ese instante nada me importaba, o al menos eso creí hasta que sentí sus uñas enterradas en mi espalda la mire un momento, ella sufría, le arrebate la virginidad sin reparos, y por si no fuera suficiente ella trataba de soportar su dolor y satisfacerme, así que me arrepentí, e intente alejarme pero me retuvo y beso mis labios, por primer a vez me sentí una mierda, no pude hacer nada mas que ocultar mi rostro en su cuello, ella me acaricio al espalada, y susurro en mi oído que estaba bien que prosiguiera, tarde unos segundos y volví a hacerlo, después de ese momento la hice mía como a ninguna otra mujer, la amaba como la amo ahora, nada podrá cambiar eso... ella una vez me dijo que hay personas con la capacidad de amar a varias personas, de superar el pasado y seguir adelante con sus vidas, yo no soy de ese tipo de personas por que mi vida termino cuando ella se fue con mi pequeña.
- sabes no me canso de esa historia –dijo Alexander- pero me gusta mas cuando te dijo que estaba de encargo
- pues cuéntala –dijo Dokho bebiendo más
- esa es corta –dijo Afro- pero recuerdo que una mañana Máximo llego a mi casa, se tumbo en el suelo y yo me preocupe, me acerque a el y este parecía no responder, pero luego me dijo "voy a ser padre"... jajajajaja si hubieran visto su rostro quedarían burlándose un largo rato, estaba en shock total, no respondió en horas... pero lo peor fue cuando nueve meses después en el parto el valiente santo se desmayo, al ver como salía su niñita
- jajajajajajajajajajajajajajaja –todos se rieron y bebieron mas, ahora también Afrodita
- bien –dijo MM- ¿Quién sigue? ¿Qué tal tu Kanon?
- si Kanon, cuenta tu historia, a eso vinimos –dijo Dokho
- ya pues cuento mi historia –dijo Kanon- pero esperen a que tome valor
Así los cuatro tomaron un poco, de sus botellas, miraron el cielo lleno de estrellas, la noche había caído, y por primera vez los que jamás se habían llevado bien se comportaban como los mejores amigos.
- solo quiero saber una cosa ¿si Afro no es marica por que demonios de comporta como tal? –pregunta Kanon
- bueno, es que... -Afro no deseaba contestar
- yo te diré –dijo MM- cuando tenia quince el baboso este se enamoro de una mujer que pensaba que era marica, por su complexión, la tipa se vestía frente a el, y este se la... ya imaginan, el caso es que este sujeto es un mañoso, que el encanta enamorar a las mujeres diciendo que es gay, pero solo oculta su timidez
- jejeje, eso lo dijo Fides, si me viera me cortaría el cabello y me daría la paliza de mi vida
- ¿Qué no era una mujer tierna? –pregunto Dokho
- lo era, pero aunque era difícil hacerla enfadar, no te convenía mucho ya que descubres que el carácter de MM es de familia... por cierto Kanon, ya no le des vueltas y empieza tu relato...
- si, ya anda no tomes tanto valor –dijo MM
- suéltalo de una vez –siguió Dokho
- bien, comenzare, solo espero no llorar –dijo con pena
- si lo haces no decimos –lo consuela Afro- pero ya cuenta
- con detalles –termino MM
continuara...
EL RELATO DE MÁXIMO
Afrodita llego a donde MM se encontraba, era un lugar en las afueras del santuario, cerca de un bosque, ahí entre los limites y los frondosos árboles una cruz de buen tamaño con nombres marcados se encontraba, Máximo había puesto las rosas que eran de color blanco alrededor de al tumba a excepción de dos que estaban unidas, una era una rosa florecida y la otra un capullo, esas flores las puso en el centro, lo encontraron frente a la tumba hablando, como las personas suelen hacerlo a sabiendas o creyendo que sus seres amados los escuchaban.
- ... no espero los campos Eliseos, lo se bien, sin embargo no puedo soportar... se que no me creen, Alexander no lo hace, pero las vi, estuve su lado, y así es difícil no desear la muerte... cumplí mi deber hacia mi diosa, y recibí mi recompensa de encontrarlas, pero ahora me alejan de ustedes... Fides, no me abandones ahora, o me volveré loco al solo pensar que mire a Fiona, tan grande como debería de encontrarse en este mundo, sus rizos, sus ojos y su voz llamándome, dime que no lo soñé y que Fiona es así, que esta bien, y feliz... no soporto al idea de que esas imágenes sean producto de mi imaginación. Las amo... entiéndanlo, no tengo nada que me retenga a este mundo, no creo en la justicia, ya que si fuera así nadie las habría arrebatado de mi lado; se que todos dicen que soy el psicópata de los caballeros dorados y lo soy, nada en este mundo me importa, si lo único que he amado me fue arrebatado... Alexander-
dijo levantándose al sentir el cosmos de su amigo, pero voleo violentamente al sentir a Dokho y a Kanon- ¿Qué hacen ellos aquí? –dijo furioso
- presentar respetos a la familia de un compañero –dijo Kanon
- ja... ¿y los otros metiches para cuando?
- no vendrán, solo nosotros –contesto Kanon
- ¿Por qué?
- por que tuvimos situaciones similares a la tuya, y estamos más cerca de entender tu dolor- contesto Dokho- sabemos por lo que pasas aunque nuestras historias solo las conozcamos nosotros mismos
- bien... seria bueno saber las verdades de cada uno... Alexander quitate ese estupido maquillaje, sabes que odio vengas como afeminado cuando no lo eres
Afrodita se quito el maquillaje y se acerco a la tumba, el santo de Phycis se sujeto el cabello con un lazo, y sin maquillaje se veía sumamente apuesto, su mirada era seria y no se parecía en nada al afeminado andrógeno que todos conocían, en cambio MM se veía complacido del aspecto de su amigo, el cual hablo para las ocupantes de la tumba con una voz sumamente varonil, cosa que ni Kanon, ni Dokho a excepción de MM habían escuchado.
- Fides, necesito tu ayuda para controlar a esta cabeza de chorlito, o si no tendré que enterrarlo en esta tumba, dile que se controle y pronto llegara su momento, aunque con su actitud alguien lo aniquilara en el santuario, no sabes cuanto te necesito para que sea mas normal... jeje, espero no te moleste como tengo largo el cabello, me dijiste que era mas apuesto con cabello corto, y que dejara de ser tímido, pero no puedo... perdóname, dale besos a mi princesa por favor... las quiero y por ustedes sigo soportando al inútil de Máximo, y Fides espero que en el otro mundo me digas al fin que demonios el viste...
MM se acerco a sus compañeros, los miro calmado, su rostro era extraño ante ellos, no mostraba malicia o algo que indicara que era Mascara Mortal de la casa de cáncer. Los dos caballeros lo miraron de forma calmada.
- siempre me voy de parranda para calmarme en este día, pero Alexander no me deja en paz si vamos los tres tendría menos oportunidad, además deseo escuchar sus historias, vamos al pueblo a comprar algo de alcohol, ya lo necesito
- vamos –dijo Kanon
- Máximo ¿Cuándo entenderás? –MM se voltea a mirarlo- ya se, ya se, el alcohol no te ayuda a olvidar tan solo te calmara, en tanto no te pongas violento, esta bien.
La tarde callo y Afrodita los convenció de que al menos fueran a comer algo, después de eso se les hizo mas tarde ya que el santo de Phycis insistía en distraerlos, de momento los tres se encontraban serios, metidos en sus propios recuerdos, y hasta que empezó a notarse que la noche llegaría pronto Afrodita les permitió comprar las bebidas.
- ¿A dónde iremos? –dijo Afro
- yo tengo una idea –contesto Kanon
Así pronto se encontraron frente al mar, era una parte de la playa muy solitaria, pero muy hermosa, había una vista maravillosa del atardecer y Kanon tenia el rostro mas triste que nunca, Dokho hizo una fogata mientras el sol se ocultaba; miraron como el sol desapareció y todos se sentaron alrededor de la fogata, tomaron cada quien una botella (excepto Afrodita) y la abrieron y bebieron.
- ¡SALUD! –gritaron los tres mientras Alexander bebía de una botella de agua
- comienza MM –dijo Kanon
- bien... comenzare –toma del licor-... Afro ya les explico la situación con mi familia, a diferencia de todos en el santuario yo no era huérfano, pero para Shura tenia el poder para aspirar a la armadura de cáncer... mi madre murió cuando yo tenia siete años, un poco antes de venir a Grecia, desde los cinco estuve comprometido con Fides, y por decisión de mi abuelo, yo a su muerte seria directamente el líder de mi familia la cual es muy rica; aceptaron que marchara para convertirme en una persona fuerte, pero desde antes de eso, yo ya tenia que ganarme todo, no era un niño ricio normal, mi abuelo era estricto, quería que fuera de fuerte de carácter... pero pasaron los años y desarrolle una personalidad muy singular, disfrute la muerte como ninguno de ustedes lo haría, creo vine por mi estrella, sin embargo que sea un maniático como me dicen, no significa que no tenga sentimientos... Ella llego después de convertirme en el santo de la cuarta casa...
- ... una cosa –Kanon interrumpiéndolo- queremos detalles, todo como te enamoraste y al primera vez... bueno ya sabes... -Kanon tomo de la botella, Dokho y MM sonrieron
- ... como subió Fides las casas de Aries, Tauro y géminis es un misterio, pero ella llego en busca de ayuda y yo me negué, esa noche me fui a la casa de Phycis esperando ella se largara, pero cuando volví en la madrugada, ella se encontraba ahí, y el traidor de Alexander la acostó en mi cama y dormí esa noche en el piso... pero ella se levanto y me tapo con la manta de la cama; al día siguiente me preparo el desayuno, uno muy decente que no he comino en años –Kanon rió con amargura- pero fui un desgraciado y le dije que se largara, ella... salio corriendo pero Afro le detuvo antes de llegar a géminis y le platico todo a el –su mirada se llena de rabia- cuando renuncie a mi familia mi primo Andreas tomo mi lugar y al parecer también a mi prometida... ella se escapo por que el bastardo quiso abusar de ella, y yo era el único en el cual podría confiar de que no la devolvería a la casa, ni la juzgarla mal. Así me lo explico este –señalando a Afrodita- y le creí, así que la acepte en mi casa. Le dije que una corta temporada, mas pasaron los meses y yo me acostumbraba a su presencia, disfrutaba estar con ella, las platicas y ver que no era una mujer inútil como lo eran los demás miembros de la familia, Fides cocinaba, limpiaba, hacia de todo, cosa que en la casa de Italia solo sabían hacerlo mi madre y abuela... Fides fue criada por esta ultima, la única mujer después de mi madre a la que respete; Fides era encantadora, tierna, no se como describirla... cuando volvía de mis entrenamientos ella solía curarme las heridas, y yo me perdía en sus ojos tan bellos. Una vez no me contuve las ganas y tome su rostro para besarla, ella lo acepto correspondiéndome, pero yo no estaba preparado para eso, esperaba me rechazara, pero no lo hizo. Poco después me exigió que durmiera en la cama con ella o se bajaría a dormir conmigo, no le creí pero lo cumplió así que después de una discusión que ella gano compartí la cama... jamás me negué por pena o por ser caballero, lo hice por que la deseaba, era mas hermosa de lo que en esa época recordaba y al estar con ella no me detendría pero así paso; fue una noche de verano, hacia un calor insoportable, y ella se movió como loca, estaba por tirarla de la cama, pues ya bromeábamos y jugábamos, pero cuando me dispuse a empujarla ella se giro y mi mano quedo sobre su pecho –Kanon y Dokho rieron con malicia- me excite demasiado, era suave y en lugar de quitar mi mano sujete su seno con mas firmeza, ella se quedo viéndome a los ojos mientras yo abría su camisón, desabroche cada botón lentamente mientras me consumía por dentro, al abrir la estorbosa tela, su piel blanca relució bastante, sus pechos no eran pequeños y sus pezones eran bronceados, sin pedir permiso los hice míos mientras ella solo gimió, y yo mordisque sus pezones excitados, subí hasta encontrar sus labios que bese con violencia, pero ella me abrazo y revolvió mi cabello... ustedes me conocen, cada que vamos de parranda me quitan a las mujeres por ser tan agresivo, siempre fui así y cabe resaltar que perdí mi virginidad a los trece –Kanon y Dokho se miran incrédulos- pregúntenle a Afro... bueno, recuerdo que tenia mucho sin coger, así que prácticamente desgarre sus pantaletas y toque su intimidad, esa noche yo solo tenia puesto el pantalón del entrenamiento el cual baje, tome mi miembro y entre en ella sin mas reparos, en ese instante nada me importaba, o al menos eso creí hasta que sentí sus uñas enterradas en mi espalda la mire un momento, ella sufría, le arrebate la virginidad sin reparos, y por si no fuera suficiente ella trataba de soportar su dolor y satisfacerme, así que me arrepentí, e intente alejarme pero me retuvo y beso mis labios, por primer a vez me sentí una mierda, no pude hacer nada mas que ocultar mi rostro en su cuello, ella me acaricio al espalada, y susurro en mi oído que estaba bien que prosiguiera, tarde unos segundos y volví a hacerlo, después de ese momento la hice mía como a ninguna otra mujer, la amaba como la amo ahora, nada podrá cambiar eso... ella una vez me dijo que hay personas con la capacidad de amar a varias personas, de superar el pasado y seguir adelante con sus vidas, yo no soy de ese tipo de personas por que mi vida termino cuando ella se fue con mi pequeña.
- sabes no me canso de esa historia –dijo Alexander- pero me gusta mas cuando te dijo que estaba de encargo
- pues cuéntala –dijo Dokho bebiendo más
- esa es corta –dijo Afro- pero recuerdo que una mañana Máximo llego a mi casa, se tumbo en el suelo y yo me preocupe, me acerque a el y este parecía no responder, pero luego me dijo "voy a ser padre"... jajajajaja si hubieran visto su rostro quedarían burlándose un largo rato, estaba en shock total, no respondió en horas... pero lo peor fue cuando nueve meses después en el parto el valiente santo se desmayo, al ver como salía su niñita
- jajajajajajajajajajajajajajaja –todos se rieron y bebieron mas, ahora también Afrodita
- bien –dijo MM- ¿Quién sigue? ¿Qué tal tu Kanon?
- si Kanon, cuenta tu historia, a eso vinimos –dijo Dokho
- ya pues cuento mi historia –dijo Kanon- pero esperen a que tome valor
Así los cuatro tomaron un poco, de sus botellas, miraron el cielo lleno de estrellas, la noche había caído, y por primera vez los que jamás se habían llevado bien se comportaban como los mejores amigos.
- solo quiero saber una cosa ¿si Afro no es marica por que demonios de comporta como tal? –pregunta Kanon
- bueno, es que... -Afro no deseaba contestar
- yo te diré –dijo MM- cuando tenia quince el baboso este se enamoro de una mujer que pensaba que era marica, por su complexión, la tipa se vestía frente a el, y este se la... ya imaginan, el caso es que este sujeto es un mañoso, que el encanta enamorar a las mujeres diciendo que es gay, pero solo oculta su timidez
- jejeje, eso lo dijo Fides, si me viera me cortaría el cabello y me daría la paliza de mi vida
- ¿Qué no era una mujer tierna? –pregunto Dokho
- lo era, pero aunque era difícil hacerla enfadar, no te convenía mucho ya que descubres que el carácter de MM es de familia... por cierto Kanon, ya no le des vueltas y empieza tu relato...
- si, ya anda no tomes tanto valor –dijo MM
- suéltalo de una vez –siguió Dokho
- bien, comenzare, solo espero no llorar –dijo con pena
- si lo haces no decimos –lo consuela Afro- pero ya cuenta
- con detalles –termino MM
continuara...
