Instintos
Cap. 1. El comienzo de todo. Problemas en el Clan.
Todo era tranquilidad, y un nuevo día comenzaba, hacía varias semanas que había terminado la temporada de nieves, la estación fría y el sol ya calentaba lo suficiente para deja de usar esas pieles gruesas y pesadas, pero que a pesar de ello eran de gran utilidad para no pasar ese frío glacial que hacía en invierno sobre la zona de Los Lagos. Los calientes rayos solares hacían que la vida resurgiese, ya se apreciaban los nuevos brotes tiernos de los árboles y las primeras flores primaverales.
Hacía tiempo que el clan disfrutaba de una paz duradera, las guerras por los territorios y las ansias de poder habían acabado y eso se notaba tanto en la vida cotidiana de los miembros de clan como en la tranquilidad que reinaba en el ambiente (a veces).
- Duuuuuuuoooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!, no para para, esta muy fría, deja de salpicar, jajajajaja – se reía un joven de larga trenza tan rubio como los rayos del sol y ojos azules como el cielo, su piel siendo bronceada tenia un tono bastante más claro que los demás muchachos, siendo delgado y de estatura mediana. - Venga no seáis así venir a bañaros el agua está bueniiiiisimaaa !!!!! - le decía el otro joven al rubio y a sus hermanas, este poseía una larga trenza castaña y ojos de un increíble color violeta un color poco usual, era un poco más alto y de cuerpo era más atlético y moreno que su hermano. - ¡Venga Duo coge a Quatre y mételo en el agua, a ver si así se le quita la pereza! – contesta una joven de larga trenza rubia más oscura que el hermano menor y ojos azules. - ¡ Yune, deja de animar a Duo que luego no hay quien lo pare!, Jajajajajaja – se quejo Quatre con una mueca de fastidio pero conteniendo la risa lo mejor que pudo. - Venga ya!! chicos dejar de jugar como niños, todos las mañanas es lo mismo, ¡ Duo deja a Quatre y Yune que padre nos está esperando hace rato! Duo me estas escuchando. – mientras iba regañando a sus hermanos no se dio cuenta que se había introducido en el lago y el agua ya le llegaba a las rodillas. - Quatre, Yune vamos que sino padre veras, Duo , ¿Duo? donde se ha metido, este muchacho siempre se escapa de todo pero cuando lo encu .....- antes de terminas de hablar no se dio cuenta que mientras estaba intentado poner orden entre sus hermanos Duo se había sumergido en el agua y nadaba hacia atrás de ella y sin que se diera cuenta y en el momento en que menos de los esperaba le agarro los tobillos tirando de ella para que cayera en el agua. - Duuuuuuooooooo, como te atreves como te coja te enteras de esta. – grito a todo pulmón la muchacha. - Deja de ser tan seria Hilde y diviértete, como sigas así no conseguirás nunca un marido que te soporte, jajajajajaja!!!!! - Pero Duo!, eso no es asunto tuyo, maldita sea, siempre estas de bromas y nada te lo tomas en serio – reclamaba la hermana mayor de trenza oscura casi violeta y precios ojos violetas. - No te enfades Hilde, mira estamos en tiempos de paz y no hay necesidad preocuparse por cosas si mucha importancia. - Pero no entiende, eres el heredero del clan y tienes que tomarte las cosas en serio Duo. - Lo sé, lo sé no es necesario que me lo recuerdes cada cinco minutos – le respondió borrándose la sonrisa que nunca perdía, por un momento. - Mira te hago caso por ésta vez pero con una condición. Ya que estamos todos mojados, divirtamos un rato todos juntos como cuando éramos pequeños. Que me dices, venga porfiiiiiii porfiiii. – le decía con cara de cachorrito degollado. - Deacuerdo pero un rato sino padre se enfadará y sabes como se pone – le dijo sonriendo, duo siempre hace lo mismo, era imposible negarle nada cuando ponía una sus caritas tan adorables. Se oía reír a los jóvenes dentro de un lago mientras uno de ellos salpicaba a los demás sin importar las quejas de su hermano y hermanas al ser salpicado por él.
La imagen podría clasificarse como irreal, ni los mismos dioses antiguos podrían haber imaginado que tanta belleza existiera y estuviera concentrada e un mismo lugar.
Unos jóvenes de edades comprendidas entre 19 a 23 años que portaban el atuendo típico de su clan: pies descalzos, con la típica piel de Yuak (parecida al búfalo) tapando la zona de las caderas abierta por los costados y atada a la cintura por un cordón de cuero negro que se apoyaba en el muslo. El pecho al descubierto, sus brazos y piernas cubiertas por una tela lo suficiente elásticas para poder doblar las extremidades cubriendo la zona de los antebrazos y piernas a modo de coderas y perneras siendo atadas por la mitad del muslo hasta los tobillos por el mismo tipo de cordón que el de la cintura. Otra característica distintiva que diferenciaba a los hombre y mujeres como miembros del clan de Los Lagos era su inconfundible cabellera trenzada que les llegaba hasta la cintura. El atuendo de las chicas era muy similar. Ellas no cubrían ni los brazos ni las piernas y a diferencia de los hombres ellas cubrían el pecho con la misma piel de las caderas de diferentes formas siendo las pieles de las caderas en poco más larga que en los hombres.
Para cualquiera, aquello sería una visión increíble. Cada uno de ellos podría competir con la misma Diosa de la Belleza, allí en medio del lago los cuatro muchachos, arrojándose agua, por encima y tirándose unos encima de otros, viendo correr las gotas perladas del agua sobre sus cuerpos bronceados bien formados sin exceso por los entrenamientos sometidos por el jefe del clan, ellas con sus figuras bien definidas, hermosas en todo su sentido de la palabra, más de un joven del clan habría deseado que cualquiera de ellas fuera su prometida, pero eso sería imposible solo el guerrero perfecto podría aspirar a ser el prometido de cualquiera de las hijas del jefe Nazca. Todo eran risas todo parecía tranquilo, por el momento. Nadie podría imaginar el cambio que daría sus vidas dentro de poco.
Al cabo de un par de horas, en el gran consejo.
- Hilde, no te dije que fueras a buscar a tus hermanos, llevo varias horas esperando, esto no puede seguir así....- reprendía el Jefe Nazca a la mayor de sus hijas. - No padre, no riñas a Hilde ella no tiene la culpa fui yo quien se retrasó y retrase a ellos, perdóname padre, lo siento mucho no volverá a ocurrir. – miró apenado a su padre sabiendo que había metido en problemas a su hermana por su culpa. - Duo hijo, esto no puede seguir así, esto tiene que cambiar y cambiará de ahora en adelante puedo asegurártelo, eres mi heredero y tienes que empezar a ser más responsable. En el fondo es culpa mía hijo, os he estado consintiendo todo vuestros caprichos, no he tenido mano dura con vosotros, en especial contigo Duo, desde que perdisteis Hilde y tú a vuestra madre cuando eras niños. Intente por todo los medios suplir la falta de vuestra madre, volviendo a contraer nuevas nupcias dándoos otra madre y hermanos para que no estuvieras solo.... Nunca he hecho ninguna distinción entre vosotros hijos, os amo a todo por igual, de igual modo que amo a vuestra madre Yuiren ... – el silencio perduró unos segundos, el Jefe Nazca sujetaba la mano de su esposa y le dirigía mirada llenas de cariño y preocupación, como queriendo buscar el apoyo y compresión de su compañera para seguir hablando - ... os cuento todo esto para que sepáis que me importáis mucho ... - Lo sabemos padre y te lo agradecemos – interrumpió a su padre – lo sé padre, he sido muy egoísta padre y lo lamento, se que no te he puesto las cosas muy fáciles y por mi conducta os he traído muchos problemas a todos, a ti padre a mi hermano y hermanas, a madre pero eso no se volverá a repetir, a partir de ahora pienso tomar mis responsabilidades como tu heredero. Siento haberte desilusionado padre pero a partir de hoy dejaré de comportarme como un niño y seré el hombre del cual te sentirás orgulloso. - Eso espero Duo. – dijo su padre con voz seria con un tinte de preocupación.
Todo era silencio en la sala del gran consejo, todos los consejeros del clan estaban reunido junto al jefe Nazca junta a su esposa e hijos. El porte de Jefe de Clan era de admirar, gran parte de la belleza que poseían sus hijos venía de él. El Jefe Nazca, hombre gallardo uno de los mejores guerreros del Clan por no decir el mejor, de gran estatura y complexión fornida, con musculatura desarrollada debido a los numerosos entrenamientos y batallas en las que ha participado. De piel bronceada por el sol, sus ojos son de un azul cielo clarísimo y su larga cabellera castaña trenzada hasta la cintura apoyada en su ancha espalda. De carácter serio y estricto signo de un jefe pero a su vez tierno y amoroso con su mujer e hijos. A pesar de estar permitida la poligamia en el Clan siempre se dedicó en exclusividad a una única esposa, en su primer momento, con Laria (madre de Hilde y Duo) que murió de forma inesperada, siendo un secreto el motivo de su muerte cuando sus hijos cumplían 3 años Hilde y 2 Duo y posteriormente con Yuiren al cabo de dos años.
Aquello no tenía buena pinta pensó Duo, aquí pasaba algo y no se había enterado, el que el consejo se hubiera reunido junto con la familia de del jefe de clan solo podría significas una cosa. Problemas. Pasaron varios minutos en un silencio incomodo, los consejeros se miraba unos a otros y la misma vez miraban al Jefe Nazca y este a su mujer Yuiren (madre de los hermanos de Duo y madrastra de este último) con preocupación, no sabían como tratar el tema que se daría en breve.
- Padre, ocurre algo. – pregunto preocupado Quatre a su padre, su instinto le decía que algo le preocupaba a su padre y a los demás, su don nunca le había fallado, tenía la facilidad de presentir o incluso sentir en carne propia los sentimientos de las personas que le rodean, sobretodo a las personas queridas de su entorno y esta vez no sería la excepción. - Mira, Quatre y esta va por todos vosotros hijos míos... - hizo una pausa para organizar sus ideas para explicar todo desde el principio. - ...hace tiempo que gozamos de paz y prosperidad, eso lo sabéis bien y no teníamos ningún problema con ningún clan vecino, hasta ahora, hace unos trece años, cuando erais pequeños, el clan Oz y nuestro clan tubo una serie de enfrentamientos y nos vimos obligados a luchar para poder defendernos. Fue una guerra injusta, tanto ellos como nosotros perdimos a muchos de nuestros mejores guerreros, fue una masacre para ambos clanes. Durante varios años El Jefe Peacecraf y yo, estuvimos enfrentados por la posesión de nuestras tierras, ya que la zona de Los Lagos es rica en caza y es una de las mejores zonas para el conreo por la abundancia de agua y fertilidad sus tierras, también existe un gran recelo por otros asuntos que no vienen al caso a hora. Con el transcurso del tiempo y viendo que no sacábamos nada en claro con la situación de la guerra y viendo las cuantiosas bajas que sufríamos, llegamos a un acuerdo, por el bien de todos firmaríamos un acuerdo. Se pactaría la paz, a cambio de una serie de condiciones. Se entregaría una vez al año una cuota de piezas de caza junto a una cantidad de cereales y hortalizas en épocas de escasez del Clan Oz a cambio del libre comercio de pieles, minerales u otros objetos del Clan Oz poseía, habría un comercio libre entre el Clan Oz y el Clan de Los Lagos, también se llegaría a la protección recíproca de nuestros clanes respecto a clanes enemigos. En un principio estuvimos de acuerdo con el trato principal pero una vez firmado dicho tratado el Jefe Peacecraf del Clan Oz exigió una condición que no se vio reflejado en el acuerdo original. Cuando llegase la mayoría de edad de nuestros herederos, nosotros como Jefe de nuestros clanes deberíamos comprometer en matrimonio, al menos a uno de nuestros herederos, siendo conveniente ser el primogénito quien debería realizar dicho compromiso aunque pudiera ser cualquiera de nuestros hijos y así asegurar la paz y el cumplimiento del pacto firmado de los dos clanes uniéndonos en hermandad. – concluyó Nazca. - Quuuuuueeeeeeeeee!!!!!!!!!!! Pero padre como pudiste hacer algo así – gritó Hilde viendo las caras de sorpresa de sus hermanos. – Esto es una locura, no puedes permitirlo.... Hilde cariño – interrumpió Yuiren a su hijastra – fue lo mejor que pudimos hacer en ese momento, todos corríamos peligro si seguíamos con el enfrentamiento, además nunca llegamos a pensar que el viejo Peacecraf sobreviviría a las heridas que sufrió en el transcurso de la guerra .... – hizo una pausa intentando controlar su llanto – hijos míos lo sentimos muchos.
Todos estaban en silencio, ninguno de los mayores quería reconocer que se habían equivocado, al acceder aquella extraña condición, aquella elección fue tomada en un momento de desesperación, una solución un tanto cobarde, pero fue la única posibilidad que hubo para poder salvar la vida de muchachos y de muchos de los miembros del clan. Aunque ellos no lo recordaban, Duo y Quatre fueron capturados en una emboscada varios días después de acordar el pacto original entre clanes, aquella noche uno de los guerreros de Oz se hizo pasar por un guerrero del clan y se llevó a los dos herederos varones de Jefe Nazca. La última condición fue obligada a aceptar por el bien de los chicos, el compromiso de los clanes y el pacto a cambio de la paz y la vida de sus dos hijos. Esto último, el secuestro de Duo y Quatre, se mantuvo en secreto nadie se enteró de lo sucedido, sería un secreto que se llevarían a la tumba, solo lo sabían los principales consejeros, la esposa de Jefe del clan y el mismo Nazca, y así seguiría, nadie debía enterarse ni siquiera los mismos implicados.
- Joven Duo, joven Quatre, señorita Hilde y Yune, no creímos que esto pasaría, la última condición del pacto solo sería vigente mientras vivieran los jefes de ambos clanes, pero no antes de la mayoría de edad de todos los herederos, ya que el pacto fue en secreto con el Jefe Peacecraf – intervino Salem uno de los consejeros del Jefe Nazca - - Pero Yune, que es la menor de nosotros paso la mayoría de edad el año pasado – respondió exaltado Duo, que había permanecido callado hasta el momento – y no sabíamos nada al respecto. - Durante todo este tiempo el clan Oz nunca tomo interés ni se preocupo por el compromiso, hasta llegamos a pensar que ya no les interesaba dicho pacto porque la fecha limite para el compromiso era la mayoría de edad de los herederos – intervino Yougi, otro de los consejeros. - No Yougi, el pacto, para mi desgracia era mientras viviéramos los Jefes de los clanes y no antes de la mayoría de edad de mis hijos o los del Jefe Peacecraf. – respondió apesadumbrado. - Me temo que no hay otro remedio, snif, snif... – intervino Yuiren derramando lágrimas de pena por sus ojos azules casi violetas como los de sus hijos... – haría cualquier cosa por impedir que uno de vosotros hijos tuvierais que comprometeros con alguien que no conocéis y que se os ha impuesto. - Padre, snif snif, se sabe quien es el heredero con quien deberá casarse uno de nosotros – preguntó Yune consternada. - Hace unos días se presento en nuestro clan la guerrera Noin, la consejera y responsable de la seguridad del Clan Oz para dar los detalles para la ceremonia de compromiso que se efectuaría en un futuro. Quien fue designado para ser consorte por parte del Clan Oz será Relena Peacecraf o el primogénito Millardo Peacecraf.
Continuará...
Hola soy chipitachan, nunca había escrito un fics, este es el primero, por eso espero que sean buenos conmigo y no tomen mucho en cuenta los fallos que haya podido cometer. Espero me cuenten que les pareció, espero críticas tanto buenas o malas. Un saludo hasta pronto.
Los personaje de Gundam Wing no me pertenecen, no obstante incluiré algún que otro personaje según valla transcurriendo en la trama de la historia .
Advertencias: Escenas: Cómicas, Angs., Lemon Yaoi., según capítulos. Época: La historia transcurre en la prehistoria, antes de cualquier época de civilización moderna.
chipitaeresmas.com
Cap. 1. El comienzo de todo. Problemas en el Clan.
Todo era tranquilidad, y un nuevo día comenzaba, hacía varias semanas que había terminado la temporada de nieves, la estación fría y el sol ya calentaba lo suficiente para deja de usar esas pieles gruesas y pesadas, pero que a pesar de ello eran de gran utilidad para no pasar ese frío glacial que hacía en invierno sobre la zona de Los Lagos. Los calientes rayos solares hacían que la vida resurgiese, ya se apreciaban los nuevos brotes tiernos de los árboles y las primeras flores primaverales.
Hacía tiempo que el clan disfrutaba de una paz duradera, las guerras por los territorios y las ansias de poder habían acabado y eso se notaba tanto en la vida cotidiana de los miembros de clan como en la tranquilidad que reinaba en el ambiente (a veces).
- Duuuuuuuoooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!, no para para, esta muy fría, deja de salpicar, jajajajaja – se reía un joven de larga trenza tan rubio como los rayos del sol y ojos azules como el cielo, su piel siendo bronceada tenia un tono bastante más claro que los demás muchachos, siendo delgado y de estatura mediana. - Venga no seáis así venir a bañaros el agua está bueniiiiisimaaa !!!!! - le decía el otro joven al rubio y a sus hermanas, este poseía una larga trenza castaña y ojos de un increíble color violeta un color poco usual, era un poco más alto y de cuerpo era más atlético y moreno que su hermano. - ¡Venga Duo coge a Quatre y mételo en el agua, a ver si así se le quita la pereza! – contesta una joven de larga trenza rubia más oscura que el hermano menor y ojos azules. - ¡ Yune, deja de animar a Duo que luego no hay quien lo pare!, Jajajajajaja – se quejo Quatre con una mueca de fastidio pero conteniendo la risa lo mejor que pudo. - Venga ya!! chicos dejar de jugar como niños, todos las mañanas es lo mismo, ¡ Duo deja a Quatre y Yune que padre nos está esperando hace rato! Duo me estas escuchando. – mientras iba regañando a sus hermanos no se dio cuenta que se había introducido en el lago y el agua ya le llegaba a las rodillas. - Quatre, Yune vamos que sino padre veras, Duo , ¿Duo? donde se ha metido, este muchacho siempre se escapa de todo pero cuando lo encu .....- antes de terminas de hablar no se dio cuenta que mientras estaba intentado poner orden entre sus hermanos Duo se había sumergido en el agua y nadaba hacia atrás de ella y sin que se diera cuenta y en el momento en que menos de los esperaba le agarro los tobillos tirando de ella para que cayera en el agua. - Duuuuuuooooooo, como te atreves como te coja te enteras de esta. – grito a todo pulmón la muchacha. - Deja de ser tan seria Hilde y diviértete, como sigas así no conseguirás nunca un marido que te soporte, jajajajajaja!!!!! - Pero Duo!, eso no es asunto tuyo, maldita sea, siempre estas de bromas y nada te lo tomas en serio – reclamaba la hermana mayor de trenza oscura casi violeta y precios ojos violetas. - No te enfades Hilde, mira estamos en tiempos de paz y no hay necesidad preocuparse por cosas si mucha importancia. - Pero no entiende, eres el heredero del clan y tienes que tomarte las cosas en serio Duo. - Lo sé, lo sé no es necesario que me lo recuerdes cada cinco minutos – le respondió borrándose la sonrisa que nunca perdía, por un momento. - Mira te hago caso por ésta vez pero con una condición. Ya que estamos todos mojados, divirtamos un rato todos juntos como cuando éramos pequeños. Que me dices, venga porfiiiiiii porfiiii. – le decía con cara de cachorrito degollado. - Deacuerdo pero un rato sino padre se enfadará y sabes como se pone – le dijo sonriendo, duo siempre hace lo mismo, era imposible negarle nada cuando ponía una sus caritas tan adorables. Se oía reír a los jóvenes dentro de un lago mientras uno de ellos salpicaba a los demás sin importar las quejas de su hermano y hermanas al ser salpicado por él.
La imagen podría clasificarse como irreal, ni los mismos dioses antiguos podrían haber imaginado que tanta belleza existiera y estuviera concentrada e un mismo lugar.
Unos jóvenes de edades comprendidas entre 19 a 23 años que portaban el atuendo típico de su clan: pies descalzos, con la típica piel de Yuak (parecida al búfalo) tapando la zona de las caderas abierta por los costados y atada a la cintura por un cordón de cuero negro que se apoyaba en el muslo. El pecho al descubierto, sus brazos y piernas cubiertas por una tela lo suficiente elásticas para poder doblar las extremidades cubriendo la zona de los antebrazos y piernas a modo de coderas y perneras siendo atadas por la mitad del muslo hasta los tobillos por el mismo tipo de cordón que el de la cintura. Otra característica distintiva que diferenciaba a los hombre y mujeres como miembros del clan de Los Lagos era su inconfundible cabellera trenzada que les llegaba hasta la cintura. El atuendo de las chicas era muy similar. Ellas no cubrían ni los brazos ni las piernas y a diferencia de los hombres ellas cubrían el pecho con la misma piel de las caderas de diferentes formas siendo las pieles de las caderas en poco más larga que en los hombres.
Para cualquiera, aquello sería una visión increíble. Cada uno de ellos podría competir con la misma Diosa de la Belleza, allí en medio del lago los cuatro muchachos, arrojándose agua, por encima y tirándose unos encima de otros, viendo correr las gotas perladas del agua sobre sus cuerpos bronceados bien formados sin exceso por los entrenamientos sometidos por el jefe del clan, ellas con sus figuras bien definidas, hermosas en todo su sentido de la palabra, más de un joven del clan habría deseado que cualquiera de ellas fuera su prometida, pero eso sería imposible solo el guerrero perfecto podría aspirar a ser el prometido de cualquiera de las hijas del jefe Nazca. Todo eran risas todo parecía tranquilo, por el momento. Nadie podría imaginar el cambio que daría sus vidas dentro de poco.
Al cabo de un par de horas, en el gran consejo.
- Hilde, no te dije que fueras a buscar a tus hermanos, llevo varias horas esperando, esto no puede seguir así....- reprendía el Jefe Nazca a la mayor de sus hijas. - No padre, no riñas a Hilde ella no tiene la culpa fui yo quien se retrasó y retrase a ellos, perdóname padre, lo siento mucho no volverá a ocurrir. – miró apenado a su padre sabiendo que había metido en problemas a su hermana por su culpa. - Duo hijo, esto no puede seguir así, esto tiene que cambiar y cambiará de ahora en adelante puedo asegurártelo, eres mi heredero y tienes que empezar a ser más responsable. En el fondo es culpa mía hijo, os he estado consintiendo todo vuestros caprichos, no he tenido mano dura con vosotros, en especial contigo Duo, desde que perdisteis Hilde y tú a vuestra madre cuando eras niños. Intente por todo los medios suplir la falta de vuestra madre, volviendo a contraer nuevas nupcias dándoos otra madre y hermanos para que no estuvieras solo.... Nunca he hecho ninguna distinción entre vosotros hijos, os amo a todo por igual, de igual modo que amo a vuestra madre Yuiren ... – el silencio perduró unos segundos, el Jefe Nazca sujetaba la mano de su esposa y le dirigía mirada llenas de cariño y preocupación, como queriendo buscar el apoyo y compresión de su compañera para seguir hablando - ... os cuento todo esto para que sepáis que me importáis mucho ... - Lo sabemos padre y te lo agradecemos – interrumpió a su padre – lo sé padre, he sido muy egoísta padre y lo lamento, se que no te he puesto las cosas muy fáciles y por mi conducta os he traído muchos problemas a todos, a ti padre a mi hermano y hermanas, a madre pero eso no se volverá a repetir, a partir de ahora pienso tomar mis responsabilidades como tu heredero. Siento haberte desilusionado padre pero a partir de hoy dejaré de comportarme como un niño y seré el hombre del cual te sentirás orgulloso. - Eso espero Duo. – dijo su padre con voz seria con un tinte de preocupación.
Todo era silencio en la sala del gran consejo, todos los consejeros del clan estaban reunido junto al jefe Nazca junta a su esposa e hijos. El porte de Jefe de Clan era de admirar, gran parte de la belleza que poseían sus hijos venía de él. El Jefe Nazca, hombre gallardo uno de los mejores guerreros del Clan por no decir el mejor, de gran estatura y complexión fornida, con musculatura desarrollada debido a los numerosos entrenamientos y batallas en las que ha participado. De piel bronceada por el sol, sus ojos son de un azul cielo clarísimo y su larga cabellera castaña trenzada hasta la cintura apoyada en su ancha espalda. De carácter serio y estricto signo de un jefe pero a su vez tierno y amoroso con su mujer e hijos. A pesar de estar permitida la poligamia en el Clan siempre se dedicó en exclusividad a una única esposa, en su primer momento, con Laria (madre de Hilde y Duo) que murió de forma inesperada, siendo un secreto el motivo de su muerte cuando sus hijos cumplían 3 años Hilde y 2 Duo y posteriormente con Yuiren al cabo de dos años.
Aquello no tenía buena pinta pensó Duo, aquí pasaba algo y no se había enterado, el que el consejo se hubiera reunido junto con la familia de del jefe de clan solo podría significas una cosa. Problemas. Pasaron varios minutos en un silencio incomodo, los consejeros se miraba unos a otros y la misma vez miraban al Jefe Nazca y este a su mujer Yuiren (madre de los hermanos de Duo y madrastra de este último) con preocupación, no sabían como tratar el tema que se daría en breve.
- Padre, ocurre algo. – pregunto preocupado Quatre a su padre, su instinto le decía que algo le preocupaba a su padre y a los demás, su don nunca le había fallado, tenía la facilidad de presentir o incluso sentir en carne propia los sentimientos de las personas que le rodean, sobretodo a las personas queridas de su entorno y esta vez no sería la excepción. - Mira, Quatre y esta va por todos vosotros hijos míos... - hizo una pausa para organizar sus ideas para explicar todo desde el principio. - ...hace tiempo que gozamos de paz y prosperidad, eso lo sabéis bien y no teníamos ningún problema con ningún clan vecino, hasta ahora, hace unos trece años, cuando erais pequeños, el clan Oz y nuestro clan tubo una serie de enfrentamientos y nos vimos obligados a luchar para poder defendernos. Fue una guerra injusta, tanto ellos como nosotros perdimos a muchos de nuestros mejores guerreros, fue una masacre para ambos clanes. Durante varios años El Jefe Peacecraf y yo, estuvimos enfrentados por la posesión de nuestras tierras, ya que la zona de Los Lagos es rica en caza y es una de las mejores zonas para el conreo por la abundancia de agua y fertilidad sus tierras, también existe un gran recelo por otros asuntos que no vienen al caso a hora. Con el transcurso del tiempo y viendo que no sacábamos nada en claro con la situación de la guerra y viendo las cuantiosas bajas que sufríamos, llegamos a un acuerdo, por el bien de todos firmaríamos un acuerdo. Se pactaría la paz, a cambio de una serie de condiciones. Se entregaría una vez al año una cuota de piezas de caza junto a una cantidad de cereales y hortalizas en épocas de escasez del Clan Oz a cambio del libre comercio de pieles, minerales u otros objetos del Clan Oz poseía, habría un comercio libre entre el Clan Oz y el Clan de Los Lagos, también se llegaría a la protección recíproca de nuestros clanes respecto a clanes enemigos. En un principio estuvimos de acuerdo con el trato principal pero una vez firmado dicho tratado el Jefe Peacecraf del Clan Oz exigió una condición que no se vio reflejado en el acuerdo original. Cuando llegase la mayoría de edad de nuestros herederos, nosotros como Jefe de nuestros clanes deberíamos comprometer en matrimonio, al menos a uno de nuestros herederos, siendo conveniente ser el primogénito quien debería realizar dicho compromiso aunque pudiera ser cualquiera de nuestros hijos y así asegurar la paz y el cumplimiento del pacto firmado de los dos clanes uniéndonos en hermandad. – concluyó Nazca. - Quuuuuueeeeeeeeee!!!!!!!!!!! Pero padre como pudiste hacer algo así – gritó Hilde viendo las caras de sorpresa de sus hermanos. – Esto es una locura, no puedes permitirlo.... Hilde cariño – interrumpió Yuiren a su hijastra – fue lo mejor que pudimos hacer en ese momento, todos corríamos peligro si seguíamos con el enfrentamiento, además nunca llegamos a pensar que el viejo Peacecraf sobreviviría a las heridas que sufrió en el transcurso de la guerra .... – hizo una pausa intentando controlar su llanto – hijos míos lo sentimos muchos.
Todos estaban en silencio, ninguno de los mayores quería reconocer que se habían equivocado, al acceder aquella extraña condición, aquella elección fue tomada en un momento de desesperación, una solución un tanto cobarde, pero fue la única posibilidad que hubo para poder salvar la vida de muchachos y de muchos de los miembros del clan. Aunque ellos no lo recordaban, Duo y Quatre fueron capturados en una emboscada varios días después de acordar el pacto original entre clanes, aquella noche uno de los guerreros de Oz se hizo pasar por un guerrero del clan y se llevó a los dos herederos varones de Jefe Nazca. La última condición fue obligada a aceptar por el bien de los chicos, el compromiso de los clanes y el pacto a cambio de la paz y la vida de sus dos hijos. Esto último, el secuestro de Duo y Quatre, se mantuvo en secreto nadie se enteró de lo sucedido, sería un secreto que se llevarían a la tumba, solo lo sabían los principales consejeros, la esposa de Jefe del clan y el mismo Nazca, y así seguiría, nadie debía enterarse ni siquiera los mismos implicados.
- Joven Duo, joven Quatre, señorita Hilde y Yune, no creímos que esto pasaría, la última condición del pacto solo sería vigente mientras vivieran los jefes de ambos clanes, pero no antes de la mayoría de edad de todos los herederos, ya que el pacto fue en secreto con el Jefe Peacecraf – intervino Salem uno de los consejeros del Jefe Nazca - - Pero Yune, que es la menor de nosotros paso la mayoría de edad el año pasado – respondió exaltado Duo, que había permanecido callado hasta el momento – y no sabíamos nada al respecto. - Durante todo este tiempo el clan Oz nunca tomo interés ni se preocupo por el compromiso, hasta llegamos a pensar que ya no les interesaba dicho pacto porque la fecha limite para el compromiso era la mayoría de edad de los herederos – intervino Yougi, otro de los consejeros. - No Yougi, el pacto, para mi desgracia era mientras viviéramos los Jefes de los clanes y no antes de la mayoría de edad de mis hijos o los del Jefe Peacecraf. – respondió apesadumbrado. - Me temo que no hay otro remedio, snif, snif... – intervino Yuiren derramando lágrimas de pena por sus ojos azules casi violetas como los de sus hijos... – haría cualquier cosa por impedir que uno de vosotros hijos tuvierais que comprometeros con alguien que no conocéis y que se os ha impuesto. - Padre, snif snif, se sabe quien es el heredero con quien deberá casarse uno de nosotros – preguntó Yune consternada. - Hace unos días se presento en nuestro clan la guerrera Noin, la consejera y responsable de la seguridad del Clan Oz para dar los detalles para la ceremonia de compromiso que se efectuaría en un futuro. Quien fue designado para ser consorte por parte del Clan Oz será Relena Peacecraf o el primogénito Millardo Peacecraf.
Continuará...
Hola soy chipitachan, nunca había escrito un fics, este es el primero, por eso espero que sean buenos conmigo y no tomen mucho en cuenta los fallos que haya podido cometer. Espero me cuenten que les pareció, espero críticas tanto buenas o malas. Un saludo hasta pronto.
Los personaje de Gundam Wing no me pertenecen, no obstante incluiré algún que otro personaje según valla transcurriendo en la trama de la historia .
Advertencias: Escenas: Cómicas, Angs., Lemon Yaoi., según capítulos. Época: La historia transcurre en la prehistoria, antes de cualquier época de civilización moderna.
chipitaeresmas.com
