Nota previa: Para entender de mejor forma esta historia es recomendable leer primero el one short de "Es una promesa". Arigatou
Promesas pasadas
Por Kary
Capitulo XII:
Sentimientos de sentimientos
- ¡¿Qué diablos haces tú aquí?!- exclamó sorprendida Misao, llamando la atención de una secretaría rubia que la vio y regreso a lo suyo.
Enishi la vio algo confundido ¿Qué hacía allí Misao? ¿Y por que se sorprendía tanto al verlo?
- Yo trabajo aquí niña- dijo él despreocupadamente desde su silla frente al escritorio negro
- Oh, ya recuerdo- Misao se encogió de hombros recordando que Enishi tenía bastante tiempo trabajando en el banco. Por un momento se había sorprendido al verlo allí, pero ya no tenía importancia, de todos modos a ella le importaba muy poco lo que hiciera o dejara de hacer Enishi- Solo que no pensé encontrarte nunca en esta oficina- dijo ella mirando a su alrededor, la oficina otra muy elegante- ¿Es tuya?
Enishi la miro secamente – No- respondió- Es de…
- La próxima reunión es dentro de una hora- dijo Kenshin suspirando cansadamente, al fin había acabado una de las tantas reuniones del día, y quería aprovechar el tiempo al máximo- quiero hacer una llamada antes de…-
- ¿Himura?- pregunto Misao al ver al pretendiente de su hermana mayor entrando en la misma oficina en la que estaba ella, incluso sorprendida de verlo en el mismo edificio
- ¿Misao?- pregunto Aoshi viendo que la muchacha parecía conocer a Kenshin
- ¡Aoshi-sama!- dijo alegremente Misao al verlo, luego vio al pelirrojo que parecía haberse quedado helado en su lugar- ¿Himura que diablos haces aquí?
- Se- sessha… sessha- tartamudeo Kenshin sin sentido y sin darse cuenta de sus palabras. Tanto Misao como Aoshi hicieron muecas inconscientemente a la extraña forma de nombrarse de Kenshin, pero ninguno de los dos dijo nada.
Kenshin sentía la voz agonizar en su garganta, y su cuerpo inmovilizado. Había pasado las últimas 48 horas escondiéndose detrás de plantas o debajo de escritorios cada vez que Misao pasaba cerca, había estado ideando la mejor forma de que Aoshi le diera algún encargo para que no hubiera oportunidad de que se encontraran ¡y ahora ella lo había descubierto de la forma más ridícula que pudiera existir!
Aunque aun podía inventar algo para que ella no se enterara de su seudónimo.
- Oi- dijo Enishi de repente- necesito las carpetas del caso Shimibuko, Battousai.
O tal vez no.
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- ¿De todos los carritos de supermercado tenias que escoger el que más rechinaba?- pregunto Megumi lacónicamente
- Lo hubieras escogido tú- dijo Sano encogiéndose de hombros, aunque verdaderamente el chirrido de las ruedas estaba comenzando a molestarlo.
El establecimiento estaba ubicado en una parte muy concurrida de la ciudad, era un enorme edificio de varios pisos, que incluía desde comida, hasta juguetes y electrodomésticos.
- Diablos podría estar ahora mismo durmiendo o mejor, jugando dados- dijo Sano y Megumi le dirigió una mirada ácida que él intento ignorar- Tendré que enseñarte a conducir, no quiero ser tu chofer para siempre ¿sabes?
A pesar de su tono fastidiado y desinteresado, Megumi sintió sus buenas intenciones tras esa fachada y para sorpresa de Sanosuke, le sonrió, no esa sonrisa sarcástica o burlona que ella solía usar, si no una verdadera y sincera una sonrisa calida. Y él se quedo helado mientras ella seguía caminando, con su sonrisa plantada en sus labios.
- ¿A dónde vamos primero?- pregunto Sano corriendo hasta ella y sonriendo tontamente, la puerta eléctrica se abrió dándoles paso
- Por allá- dijo Megumi empujando el carrito hacía uno de los corredores y Sanosuke la siguió. Había cereales, cientos de marcas y tipos para todos los gustos, Sano pareció emocionado y comenzó a ver cada una de las cajas, pero ella siguió caminando como si nada, en busca de otra cosa.
- ¡Oi mira esto! ¡Tienen maíz y malvavisco! ¡Y este tiene sorpresa dentro!- grito él extasiado agarrando diferentes cajas de colores- ¡Este tiene 30% más y gratis! ¡Y este es de tofu…¿Tofu? Wuacala- Sano hizo una mueca de asco y volteo a ver a Megumi que se alejaba - ¡Oye espera ¿Qué tal si llevas estos?!- dijo agitando una caja de cereal de miel con chocolate y malvavisco
Megumi volteo a verlo de soslayo y dijo tetricamente – Si los pagas tú y no te importa el destino de tu estómago estropeado ¿Por qué no?
Ella continuo caminando por el pasillo largo, Sano miro la caja inexpresivamente y la coloco en su lugar, bueno, se dijo, de todas formas no tenía dinero.
No había demasiada gente en el establecimiento, algunas mujeres jóvenes, algunas ancianas y definitivamente no muchos hombres, tal vez por eso las mismas le dirigían miradas entre picaras y curiosas a Sanosuke que aparentaba no darse cuenta de esto y hablaba animadamente con Megumi, aunque para cualquiera que viera, Sano hablaba solo por que Megumi parecía no prestarle el más mínimo de atención.
- Y ese día había dejado la maldita billetera en el dormitorio, así que no tenía como pagar las tres estúpidas botellas de sake que me había tomado…- comentaba él alegremente, Megumi se paro frente a los estantes de limpiadores desinfectantes y agarro uno de color rosa que se lo paso a Sanosuke- ¡mierda! Estuve llamando a Kenshin por horas… pero el muy idiota se había… quedado dormido y no escuchaba el maldito telé… teléfono- a esas alturas Sanosuke trataba de hacer malabares con los potes de desinfectantes que tenía en los brazos, Megumi le paso otros dos- ¡Mierda! ¡Kitsune! ¡¿Para que diablos quieres tantos malditos desinfectantes?!
- Para lavarte la boca- dijo ella secamente- maldición la tienes demasiado sucia
- ¡Tú también maldices!- grito Sanosuke señalándola molesto
- Sanosuke…
- ¡¿Qué?! ¡No digas que no maldices por que si lo haces! ¡Y lo haces muy seguido mierda!
- Cabeza de pollo tiraste todo al suelo- dijo ella secamente. Sano vio el desastre en el piso del corredor causado por los envases que se habían roto, varias personas se le habían quedado viendo irónicamente. El metió sus manos en los bolsillos y silbó desviando la mirada con aparente indiferencia mientras sus mejillas tomaban un color rojizo.
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El silencio gobernaba incómodamente en una de las oficinas más importantes del Banco Central de Tokio, las palabras aun flotaban en el aire luego de que Kenshin hubiera terminado de hablar. No había tenido otra opción. Luego de que Enishi lo llamara frente a Misao como Battousai había tenido que contarle la verdad a la muchacha. Enishi confundido sin entender por que diablos Kenshin lo había mirado como si estuviera a punto de tirarlo por la ventana, murmuro un 'luego me das los archivos… pasado mañana' y salió de la oficina. Aoshi se había sentado en una de las sillas a escuchar el relato de Kenshin con un ceño en el rostro, este les había contado como había conocido ha Kaoru, como había surgido el problema con ella y el préstamo, como se había enterado que la Kaoru de la floristería era la misma Kaoru con la que había salido, y todos los problemas que había tenido por no decirle la verdad en el momento. Misao había terminado totalmente incrédula, sin muchas palabras luego de oírlo.
- ¿Quieres decir que Kaoru no sabe nada de nada?- dijo ella débilmente, el pelirrojo asintió con la cabeza- ¿nada de las empresas? ¿Nada de tu otro nombre? ¿Nada de nada?- Kenshin volvió a asentir, y una chispa de rencor se prendió dentro de Misao pero se apago al instante luego de ver el rostro abatido de Himura.
- Desde un principio no debiste haber dejado que las cosas avanzaran tanto si no estabas hablando en serio - dijo Aoshi fríamente y con el ceño aun fruncido, sus ojos hielo estaban más fríos que nunca- Creo que Kamiya-san tiene derecho a saber la verdad
- ¡Claro que tiene que saberlo!- grito Misao parándose de la silla
- Hai, yo se lo diré de gozaru, demo… es que no he encontrado el momento apropiado para decírselo- dijo él miserablemente – Misao no le digas nada, yo seré quien se lo diga a Kaoru
-Himura- murmuro ella indecisa, era su deber decirle la verdad a su hermana, si no lo hacía era como traicionarla, pero también era un asunto que Kenshin debía arreglar solo- De acuerdo, no le diré nada por ahora, de todos modos no quiero hacerlo ni quiero estar cuando se lo digas- dijo ella lentamente y Kenshin hizo una mueca de dolor a la frase de "no quiero hacerlo ni quiero estar cuando se lo digas" eso le daba a entender que la reacción de Kaoru no sería muy civilizada- ¡pero si no se lo dices pronto lo haré yo!
Kenshin asintió tetrícamente, lamentándose por no haberse quedado en su casa hoy.
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Enishi abrió la puerta de la floristería tranquilamente, la campanilla sonó dos veces cuando la puerta cerró, él se quito los lentes negros que llevaba. Si Enishi había visto alguna vez la floristería hermosa, definitivamente en este momento superaba todas las ocasiones anteriores, ahora cada una de las flores tenían un brillo especial, distinto al de días anteriores, y el aroma mezclado de las diferentes flores formaba un perfume seductor que se impregnaba en la piel y llenaba hasta el último de los poros llevando a un estado de embriaguez a cualquiera. Y como muy pero muy pocas veces, se escuchaba el susurrar suave y liviano de una melodía poco conocida, era como un imán, dulce y perfecto que lo arrastraba sin permiso ni compasión. Kaoru. Ella estaba allí, contenta, cantando y cuidando con esmero las flores a su alrededor, incluso Enishi podía oler la alegría en el aire. Ella estaba tan contenta, y el no era el causante de su felicidad. El había dejado de serlo desde hacía mucho tiempo, y maldecía eso.
Siempre había cuidado a Kaoru como si fuera una copa de cristal, de algún modo desde el primer momento en que la conoció sintió un impulso de agradecerle por algo que no entendía y de cuidarla de todo daño posible sobre la tierra, de su amistad nació un romance juvenil, adolescente.
Pero él falló, él la había traicionado y la había lastimado, y Kaoru no perdonaba la traición. Sus esperanzas con ella acabaron tan rápido como habían comenzado y él solo pudo conservar su amistad, él había dejado de ser la persona que la hacía sonreír.
Y ahora ella estaba feliz, y no era por él, no era él el causante de su risa y su alegría, era otro que Enishi no conocía, alguien que se había adueñado de una forma increíblemente rápida del corazón de Kaoru, tan rápido que él no había podido hacer nada, era como un fantasma que aparecía solo cuando el no estaba cerca, ¡nunca lo había visto de frente! Solo sabía que era un hombre magnifico, según las Kamiya, era gentil y sincero, simplemente perfecto, malditamente perfecto.
- ¿Quién esta allí? Ah, eres tú Enishi- dijo Kaoru dándose cuenta de la presencia del joven
- Hola Kaoru- murmuro el suavemente, viéndola, ella estaba radiante, su ser irradiaba luz en todas las direcciones y estaba más bonita que nunca, sus rasgos resaltaban más y su cabello se veía más suave y sedoso de lo normal, pero sus ojos resplandecían más que nada.
- ¿Qué haces aquí, no deberías estar trabajando?- pregunto ella distraídamente
- Hai, demo salí temprano hoy- respondió Enishi acercándose mas a ella
- Que bien, onegai pásame la caja azul- le pidió ella apuntando hacía la caja que estaba en un estante bastante alto, Enishi la alcanzo fácilmente y se la dio
- Oye Kaoru ¿Qué haces?- pregunto sabiendo que Kaoru le respondería enfadada, dado que era obvio lo que hacía, pero ella hizo todo lo contrario
- Arreglo las cintas para los ramos- respondió ella tranquilamente y Enishi no pudo dejar de sorprenderse por su tono
- Kaoru, veo que las cosas han mejorado un poco- dijo el calurosamente
- Iie- respondió ella negando con la cabeza- aun no hemos recibido ninguna respuesta de los bancos pero esperamos con paciencia
- Siento mucho no haber podido hacer nada- dijo Enishi- Battousai no es alguien fácil de convencer
- No te preocupes- dijo Kaoru y su rostro se endureció- de todas formas no quiero nada que tenga que ver con ese sujeto. Ya saldremos adelante sin su ayuda
- Aunque siempre si podrías hablar con él, si se lo pides puede ser que…
- ¡Iie! ¡Primero muerta y comida por los gusanos que eso ¿entiendes?!- dijo Kaoru indignada- Pedirle ayuda nuevamente a ese sujeto será lo último que haga
- ¡Ikuse!*- grito Enishi alegre y luego le guiño un ojo- ¡Esa es la Kaoru que siempre triunfa! (*¡Excelente!)
Kaoru le dirigió una sonrisa calida
- Sabes- dijo Enishi distraídamente luego de un silencio- inauguraron un nuevo cine cerca del Centro Hikawa, al parecer es muy bueno, podríamos ir esta semana
- Enishi…- dijo Kaoru advirtiéndole, de verdad que Enishi podía ser insistente cuando quería algo, desde que había sabido que ella estaba saliendo con alguien más, se había vuelto algo… sobre protector, hablando en serio, se había puesto tan celoso que ambos no podían tener una conversación sin que el tema del 'otro' saliera.
- ¡Hey solo te estoy invitando como amigo! Somos amigos ¿sou? Además últimamente has estado aquí, ¿acaso ese sujeto ya se olvido de ti?
- ¡mou! Enishi, no, él no se ha olvidado de mi, solo que ambos tenemos cosas importantes que hacer- respondió cansada Kaoru
- ¿Mas importantes que tú? ¡Kaoru apenas lo conoces! ¡Si el prefiere su trabajo a ti es que no vale la pena!- Enishi dijo molesto y el sol reflejo su plateado cabello
- Enishi, hoy me siento bien, no comencemos a pelear de nuevo – dijo Kaoru agitando su cabeza, luego le sonrió- Y tal ves podemos ir al cine esta semana, como amigos claro.
Enishi asintió con la cabeza dócilmente, no podía hacer nada más.
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- ¿Aoshi-sama?- pregunto Misao viendo por el rabillo del ojo ha Aoshi que conducía, el se había ofrecido a llevarla hasta su casa al final de la tarde, y claro que Misao no se había negado.
- mm…- respondió él
- Aoshi-sama… ¿cree que hice bien al prometerle a Himura que no le diría nada a mi hermana?- pregunto ella suavemente, esa idea había rondado todo el día en su mente y se preguntaba sin cesar si podría ver a Kaoru a los ojos sabiendo que estaba ocultándole algo importante
- Fue tu elección- dijo el sin apartar la vista del camino- Aunque no esta bien que Kenshin este ocultándole cosas a Kamiya-san es su deber decírselo por el mismo
- Lo se, pero aun así- murmuro ella apretando la carpeta que llevaba en sus manos
- De todos modos no creo que Kenshin tarde mucho en decírselo, no es bueno mintiendo- Aoshi dijo en un tono tranquilizador
- Eso espero, de verdad no quiero tener que decírselo yo- dijo Misao medio sonriendo. La vista de su casa llego pronto, el semáforo se puso en rojo antes de que ellos pudieran pasar, por la vía de enfrente comenzaron a pasar los automóviles y uno de ellos comenzó a tocar la bocina alocadamente mientras esquivaba los demás automóviles, haciendo malas maniobras, es decir sin saber lo que hacía, pronto se comenzaron a escuchar gritos he insultos.
- ¿Ese no es el automóvil de Kaoru?- pregunto confundida Misao mas para si que para nadie cuando el automóvil azul claro paso literalmente volando frente a sus ojos, uno igual al de Kaoru.
El automóvil esquivaba a los demás que trataban de apartarse lo más rápido posible, dio una vuelta en si y los frenos rechinaron, el automóvil dio mas vueltas y vueltas para terminarse estrellando contra uno de los hidrantes amarillos de la acera, arruinando todo el frente del coche y haciendo que el agua saliera por todas partes. El silencio permaneció entre todos los presentes, algunas personas se asomaron por las ventanas, he incluso Kaoru y Enishi salieron de la tienda a causa del ruido.
La puerta del lado del copiloto se abrió brutalmente y la del lado del conductor sufrió el mismo destino.
- ¡Zorra estúpida! ¡Pudiste habernos matado!- grito Sanosuke al salir del automóvil
- ¡Eres un imbecil te dije que no sabía hacerlo! ¡¡Es tu culpa señor has lo mismo que yo!!- le grito Megumi enfadada
- ¡¡Eres una tarada, no puedes hacer algo tan fácil como eso y cuando lo intentas mira lo que pasa!!
- ¡¡Idiota tú fuiste el que insistió que lo hiciera!! ¡Esto es toda tu culpa!- grito ella
Todas las personas los vieron con rostros impávidos, Kaoru y Misao se llevaron una mano al rostro con la misma expresión de frustración, Enishi trato de no reír mucho.
- Sanosuke- murmuro Aoshi cerrando los ojos con un tono incrédulo y llevándose una mano a la cabeza.
Alejados de todo, Megumi y Sanosuke seguían con su pelea y sus insultos.
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Al final de la semana, Kaoru regreso con Kenshin de la casa de la hermana de este. Había estado tan nerviosa como si estuviera por presentar una prueba final en la universidad, había pasado horas viendo que era lo más apropiado de vestir, y que era lo mejor que debía decir. Kenshin dulce como siempre le había dicho que con cualquier cosa que se pusiera siempre se vería preciosa y que solo tenía que ser ella misma. Tomoe, la hermana de Kenshin había resultado ser la mujer más hermosa y perfecta que Kaoru hubiese visto nunca, sus rasgos eran refinados, sus modales eran pulcros y a pesar de su rostro frío era muy amable y simpática, Akira su esposo era un hombre atractivo y muy simpático, y su pequeña hija Okane había resultado ser una niña que además de parecer una muñeca era sumamente dulce. Kaoru sabía que conocería al padre de Kenshin, Seiyuro Hiko, cuando lo vio no pudo dejar de sorprenderse, a pesar de su edad adulta, era uno de los hombres más imponentes y atractivos que Kaoru hubiese visto en su vida. Su cabello negro era largo y estaba amarrado en una coleta, de espalda ancha y contextura grande era reflejada orgullosamente en su sonrisa arrogante, y de inmediato Kaoru supo que el era algo más que un rostro atractivo.
Había sido una cena agradable, la casa de Tomoe era muy grande y elegante tanto que Kaoru se había sentido por un momento fuera de lugar. Había tratado de no reírse mucho cuando Hiko hacía comentarios comprometedores sobre Kenshin y este se sonrojaba y murmuraba cosas, molesto.
Antes de salir acompañada de Kenshin, había escuchado cuando Seiyuro Hiko murmuraba algo sobre la perfección del destino, pero ella no le presto mayor atención.
El viaje devuelta a su casa había sido tranquilo y cómodo. La sala de su casa estaba oscura y silenciosa cuando ella y Kenshin entraron.
- ¿Quieres algo Kenshin?- pregunto ella dejando su bolso en el sofá
- Iie, arigatou koi*-(*amor) dijo Kenshin sonriendo sentándose en el sofá y haciendo una señal para que ella hiciera lo mismo. Kaoru se sentó sonrojada, al uso del nombre cariñoso.
- Sabes koi, estaba pensando- dijo Kenshin tosiendo ligeramente- Quedan tres semanas para el fin de estas vacaciones y… podríamos disfrutarlas
- ¿hu? ¿A que te refieres?- pregunto ella su sonrojo manteniéndose
- Bueno, podríamos ir a la playa- dijo él sonriendo y encogiéndose de hombros, esa sería la oportunidad perfecta para decirle la verdad, en un lugar tranquilo y alejado de todos, después de todo las miradas acusatorias de Misao estaban comenzando a volverlo loco- sería divertido
- ¿hu?- pero Kaoru no pudo decir nada más por que una vocecita le hablo al oído
- ¿Y no pensaran ir solos verdad?
- ¡Kyaaaa Megumi! No me asustes- grito Kaoru al ver a la mujer detrás de ella
- ¡Claro que no iran solos!- grito Sano saliendo de la cocina con un bizcocho en la mano- ¡¿Quién sabe que cosas pueden pasar si no tienen supervisión adulta?!
- ¡Oro!- murmuro Kenshin con los ojos desorbitados y con el rostro tan rojo como su cabello
- ¡¿Puede ir Aoshi-sama?!- pregunto Misao desde el piso superior y comenzando a bajar
- ¿ah?- dijo Kaoru roja y confundida. Después todos le preguntaban por que no quería estar en casa con Kenshin ¡no tenían privacidad!
- ¿A dónde vamos?- pregunto Yahiko entrando de la puerta trasera con Ayame y Suzume corriendo a sus espaldas y gritando '¡Vamos Vamos!'
- ¿Y cuando salimos?- pregunto Sano comiendo del bizcocho alegremente
- A ti nadie te ha invitado- dijo agriamente Megumi
- ¡Pues yo tampoco escuche '¿Megumi quieres ir?'!- le contesto Sano pero se atraganto con el bizcocho. Megumi se cruzo de brazos con indiferencia, mientras Yahico y Misao comenzaron a darle golpecitos en la espalda a Sanosuke que se estaba poniendo azul.
- ¿A dónde vamos Kenshin?- pregunto Kaoru con una mano en la cabeza frustrada
- ha… ha… Nagasaki- dijo él sonriendo débilmente- cerca de la vieja Shimabara.
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Notas de la autora:
Cuanto tiempo, lo siento mucho por tardarme tanto, pero es que estuve en exámenes y en Semana Santa salí de vacaciones, pero ya regrese ^^
Oh O_o todo el mundo pensó que era Kenshin a quien Misao había encontrado :P ja no aunque al final si lo encontró -_-' que perdida.
Y ahora van para Shimabara… :p ¿Qué pasara?
Gracias por sus reviews, me alegra que me apoyen y no traten de matarme tan feo por tardar en actualizar -___- maten a mis profesores por eso y díganme que les parece como queda!!
Jocky-misao: Pues al final si se encontró con Kenshin así que bueno como que si fui predecible, gracias por tu reviews y sigue con tu historia!
Rayen: Ojala te hayan gustado las escenas S/M de este capitulo, me divertí haciéndolas y tengo preparadas algunas más jijiji
Mer: Gracias por tus mensajes amiga, y bueno al final acertaste por que si se encontró con Kenshin ^^
Megumi014: Si a mi también me encanta la pareja de S/M es que trabajar con ellos es divertido, y si habrá más de ellos, sobretodo en los próximos capítulos, espero que me digas que tal te parece y gracias por ponerme como una de tus escritoras favoritas!!
Michire- Mein: Gracias por tu mensaje!! Que bien que te guste como queda y me lo digas
Sakura: Es para mi un honor que consideres mi historia buena, por que yo se que las historias de tiempo actual siempre son un poco más alejadas por que normalmente hay cambio de carácter, pero he tratado de hacer todo lo posible para que el cambio de carácter sea el mínimo, muchas gracias por tu apoyo!
Minako-chan: je! Que bien que te gusta, espero que este capitulo también te guste y no sea una decepción ¬_¬ ando medio bloqueada, gracias! Y continua con tu historia me encanta!!
Ale: Pues si pobre Kenshin a el le pasa de todo, y ahora que quería estar un rato solo con Kaoru para poder decirle la verdad ¡salen los demás! Que mala soy -_-'
Lourdes Ariki: u.u no me mates no hay mucho K/K en este capitulo pero pronto habrá más, por cierto el otro día me caí del MSN (cuando no ¬.¬) cuando hablaba contigo y después no se quiso volver a conectar ;_; sabes esta cosa me odia
Hitokiri Lady: Hola amiga!! Bueno espero que te haya gustado este capitulo aunque no hubo mucho K/K, pero por lo menos apareció Enishi ^-^ hay que ver que esta bueno el muchacho. Y si Kaoru lleva las riendas de la casa, después de todo es la que tiene el carácter para eso, como antes cuando llevaba el dojo sola, y pobre Megumi que golpe u.u ¡gracias y sigue con tus nuevas historias que son estupendas!
Aska- ishida: Pues aquí esta el capitulo espero que te guste y muchas gracias por tu mensaje
Demi-san: Amiga!! Jajajaja te pelaste no era Kenshin!! Aunque al final si fue ¬_¬ ahhh °_° ganaste.
Mika: thank you for your message. I am happy to the knowledge that people that speak other languages read my history, and don't worry my English it is not very good, I am better reading that writing. Thanks
Roxy: Ahy loca, eres lenta sabes? :P Que bien que te guste!!!
Luna: Muchas gracias. Si es verdad, en todas partes las cosas están mal, y hay mucha tristeza, por eso es bueno distraerse ya sea escribiendo o leyendo, me alegra saber que mi historia te distrae un poco ^^
Misao_4: ¡Gracias! Me hace feliz tu comentario ¿sabes? Espero que mi historia te siga gustando!!
Sumire-chan: Gracias por tus comentarios, ahora no he tenido mucho tiempo pero apenas pueda me pongo a leer tus historias que seguramente son muy buenas ¡suerte!
Muchas gracias a todos los quiero!!!!!!!!!!!!!!!
Y en el proximo capitulo:
- raya, espacio, raya, espacio, raya, espacio, raya, espacio… ya me maree-
- ¿Ya llegamos?
Kary
Ja ne
